Vida de Santa Teresa de Jesus -compuesta con fragmentos de la vida escrita por ella misma-
— 71 — CAPITULO V ENTRA TERESA EN RELIGION.—CAE ENFERMA OTRA VEZ. — SUS GRANDES PADECIMIENTOS. — SU ENCENDIDO AMOR POR DIOS Y DESEOS DE SUFRIR. Cuando hubo Teresa regresado á casa de su padre, se sintió con más vivos deseos de dejar el siglo y consagrarse enteramente y sin reserva ^ Señor; pero, como no habla recodado su salud, comenzó h temer que no la bastarían las fuerzas para cargar con los trabajos y las austeridades del estado religioso. En medio do sus quebrantos sólo una cosa la daba artguo ánimo, y era el gusto
— 72 — que hallaba en leer buenos libros. Especialmente- las epístolas de san Jerónimo la infundieron tanto valor, que tomó la resolución de declarar á su padre la intención que tenía de abrazar el estado religioso, lo que era para ella un punto de la mayor trascendencia. Pues, como dice la Santa en su Vida (cap. m): « Me de- » terminé á decirlo á mi padre, que » casi era como tomar el hábito; por- » que era tan honroso, que me parece » no tornara atrás por ninguna ma- » ñera, habiéndolo dicho una vez. » Conque para ella declararse y quedar comprometida era igual. Pero tanto la quería su padre, que no así debia consentir en separarse de ella, y « lo que mas se pudo acabar con » él fué, que después de sus días
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Especialmente- <strong>la</strong>s epísto<strong>la</strong>s <strong>de</strong> san<br />
Jerónimo <strong>la</strong> infundieron tanto valor,<br />
que tomó <strong>la</strong> resolución <strong>de</strong> <strong>de</strong>c<strong>la</strong>rar á<br />
su padre <strong>la</strong> intención que tenía <strong>de</strong><br />
abrazar el estado religioso, lo que<br />
era para el<strong>la</strong> un punto <strong>de</strong> <strong>la</strong> mayor<br />
trascen<strong>de</strong>ncia. Pues, como dice <strong>la</strong><br />
<strong>Santa</strong> en su <strong>Vida</strong> (cap. m): « Me <strong>de</strong>-<br />
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» casi era como tomar el hábito; <strong>por</strong>-<br />
» que era tan honroso, que me parece<br />
» no tornara atrás <strong>por</strong> ninguna ma-<br />
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Conque para el<strong>la</strong> <strong>de</strong>c<strong>la</strong>rarse y quedar<br />
comprometida era igual. Pero tanto<br />
<strong>la</strong> quería su padre, que no así<br />
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y « lo que mas se pudo acabar <strong>con</strong><br />
» él fué, que <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> sus días