Vida de Santa Teresa de Jesus -compuesta con fragmentos de la vida escrita por ella misma-
— m — diese; y un dia estaba hecho pedazos de trabajar, y ya tarde, que no se podia tener, y iba á descansar sentándose un poco, y topóle el perlado, y díjole que tomase el azadón y fuese á cavar ala huerta: él calló, aunque bien afligido el natural, que no se pocha valer, tomó su azadón, y yendo á entrar en la huerta... se le apareció Nuestro Señor con la cruz á cuestas, tan cansado y fatigado, que le dió bien a entender, que no era nada el que él tenia en aquella comparación. Yo creo, que como el demonio ve que no hay, camino que mas presto lleve á la suma perfección que el de la obediencia, pone tantos disgustos y dificultades, debajo de color de bien, 12
— 178 — » y esto se note bien, y verán claro » que digo verdad. En lo que está » la suma perfección, claro está que » no es en regalos interiores, ni en » grandes arrobamientos ni en vi- » siones, ni en espíritu de profecía, » sino en estar nuestra voluntad tan » conforme con la de Dios, que ninguna cosa entendamos que quiere » que no la queramos con toda » nuestra voluntad, y tan alegre- » mente tomemos lo amargo como » lo sabroso, entendiendo que lo » quiere su Majestad. » Y, para dar mayor peso á sus exhortaciones, añadía el ejemplo á lo que aconsejaba con la palabra ó la pluma. Asi sucedió, entre otras cosas, que, después de haber compuesto un rico Comentario sobre El
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» que digo verdad. En lo que está<br />
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» sino en estar nuestra voluntad tan<br />
» <strong>con</strong>forme <strong>con</strong> <strong>la</strong> <strong>de</strong> Dios, que ninguna<br />
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» que no <strong>la</strong> queramos <strong>con</strong> toda<br />
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» mente tomemos lo amargo como<br />
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» quiere su Majestad. »<br />
Y, para dar mayor peso á sus<br />
exhortaciones, añadía el ejemplo á lo<br />
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pluma. Asi sucedió, entre otras cosas,<br />
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un rico Comentario sobre El