Manual - CEI

La migración afecta y compromete a todos y todas.
La Iglesia peruana se caracteriza por la solidaridad, en ella, la figura de sacerdotes,
religiosos, religiosas y agentes de pastorales, se ha destacado en el protagonismo y la
asistencia a los migrantes y su familia.
La respuesta de la Iglesia a los migrantes, en un primer momento, es de carácter
asistencial
2). Educativo
La promoción humana, la creación y gestión de escuelas y de otras Instituciones de
enseñanza educativa, siempre fueron herramientas importantes para la asistencia y
promoción de los migrantes y su familia. La Iglesia desempeña un relevante papel
emprendedor al servicio de las nuevas comunidades que se van formando alrededor
de las ciudades. Las misiones de religiosos/as y laicos/as, dieron la nueva identidad, a
través de capillas y más tarde, parroquias, a los peregrinos que se asentaban alrededor
de las ciudades.
La Iglesia juega un papel importante en la enseñanza, la educación y la cultura
3). Comunidad
En materia de migración, la Iglesia Católica siempre ha ofrecido espacio a los migrantes
para expresarse en todos los sentidos (espiritual, social, cultural, laboral, etc.).
Muchas de las asociaciones de migrantes han nacido dentro del seno eclesial. Estas
asociaciones tienen un papel reivindicativo frente a las instancias civiles y religiosas
que les permite una mejor inculturación y protagonismo dentro de la sociedad.
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El amor a la comunidad, que enseña la Iglesia, ha tenido una presencia notable y
un papel activo en la promoción y desarrollo de las asociaciones en la migración
4). Reacciones
Dos situaciones hacen que la Iglesia se haga dinámica y misionera: la primera, es
positiva, la esperanza, la creatividad y el coraje de las personas migrantes. La segunda,
es negativa, el rechazo xenofóbico hacia los migrantes, que los pone en una situación
de inseguridad y vulneración de sus derechos; la desintegración familiar y la pérdida
de identidad cultural. Ante esta situación, la Iglesia, asume su rol profético de incidir
ante los organismos y la misma sociedad; exhortando a “globalizar la solidaridad con
los pobres”.
La Iglesia misionera en los países de migración participa de la esperanza y a la vez
de la inseguridad y la falta de perspectivas que viven los migrantes
5). Reconocimiento de derechos y estabilidad
La Iglesia reconoce y valora el aporte (religioso, cultural, económico, social, etc.)
que hacen los migrantes, así como el desarrollo que promueve la misma migración