28.08.2017 Views

Vida Compendiada de Santa Teresa de Jesus

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

— 44 —<br />

Dios con <strong>Teresa</strong>, la hacía dudar si serían favores<br />

<strong>de</strong>l cielo ó engaños <strong>de</strong>l <strong>de</strong>monio. No podía<br />

la <strong>Santa</strong> compren<strong>de</strong>r cómo el Señor, tan<br />

<strong>de</strong> repente, la hacía tantos favores, y misericordiosamente<br />

había olvidado sus infi<strong>de</strong>lida<strong>de</strong>s.<br />

Con esta duda, consultó á un caballero<br />

santo <strong>de</strong> Avila, llamado D. Francisco <strong>de</strong> Salcedo,<br />

y al maestro Daza, y <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> haber<br />

conferenciado entre sí estos dos siervos <strong>de</strong><br />

Dios, convinieron en que el <strong>de</strong>monio tenía<br />

mucha parte en la oración <strong>de</strong> <strong>Teresa</strong>. Aunque<br />

la <strong>Santa</strong> conoció que no eran exactos en su<br />

juicio, sin embargo, al oírlos, no cesaba <strong>de</strong><br />

llorar, viendo que conformes aseguraban que<br />

estaba engañada. En este trance, acu<strong>de</strong> á Jesús,<br />

dícele que habiendo almas tan fieles, <strong>de</strong>bía<br />

reservar para ellas sus finezas, y no conce<strong>de</strong>rla<br />

á ella lo que no merecía. ¡ Oh, prodigios<br />

<strong>de</strong> la gracia! oye el Señor los gemidos <strong>de</strong><br />

<strong>Teresa</strong>, y para asegurarla y consolarla, le dice:<br />

«Sírveme tú á mí, y no te metas en eso».<br />

Fortificada la <strong>Santa</strong> con las palabras <strong>de</strong>l Señor,<br />

creía <strong>de</strong>ber seguir el parecer <strong>de</strong>l caballero<br />

santo, que fué escribir su vida y dársela á un<br />

padre jesuíta <strong>de</strong> Avila, el P. Juan Padranos.<br />

Este sabio y virtuoso director miró <strong>de</strong>tenidamente<br />

la vida, y oyéndola en el confesonario,<br />

le aseguró que su oración y su espíritu era <strong>de</strong>

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!