Santidad, Gloria y Prodigios de Santa Teresa de Jesus Tomo I

TBtlfE TT. (270) GREGOUrÓ Xm,
«de alma dichosa , de donde te ha venido esto? ¿De
«donde tan inestimable gloria que merezcas ser espo-
»;sa de aquel á quien desean mirar los Angeles? ¿De
adonde ei que sea tu esposo aquel mismo, cuya her-
«mosura el sol y la luna admiran , y á cuya insi-
«nuacion se muda, se estremece el universo? &c. ¿kc."
Con igual sorpresa reconocia este favor Santa Inés
quando decia (3): «Estoy desposada con aquel á quien
«sirven los Angeles : cuya hermosura el sol y la lu-
»na admiran : á quien amándolo soy casta : tocán-
«dolo soy pura ; y sirviéndolo soy Virgen." Pero si
es grande esta merced, que hizo Dios á Santa Teresa
uniendo su espíritu con el suyo en este matrimonio
espiritual , son sumamente interesantes sus conseqüencias.
Estas pueden considerarse , unas de parte
de Dios , y otras de parte de Teresa , pero todas
fovorables á ella. Por parte de Dios serán , según
San Lorenzo Justiniano (b): »>Visitarla con mas
»#freqüencia , hablarla con mas familiaridad, abrazarla
«mas dulcemente , y rara vez ausentarse de ella. Si
«alguna vez se le esconde, no io hace como ofendí-
«do , sino encendido en amor; pues quanto mas tarada
, con la misma dilación se inflama con mas ve-
"hemencia , la llama m is fi eqüentemente , la provo-
«ca con mas ardor, y le dice: levántate amiga mia,
«hermosa mia, y ven : paloma mia, que habitas en
«los agugeros de la piedra , en la caverna de la pa-
«red : muéstrame tu semblante: suene tu voz en mis
«oidos , pues tu voz es dulce, y tu rostro hormoso.
«El amor fervoroso no sufre dilaciones y desconoce
«tardanzas con el deseo encendido de gozar de quien
«ama." Si todo esto anuncia á Teresa poder disfrutar
copiosamente las ternuras del amor divino, otra
prenda mas satisfactoria pone el colmo á su felicidad,
y es, amparada el Señor, protegerla y guardarla de
(a)
(b)
EÍI su oficio Eclesiast.
Líb, de casto connub. anima, ad fin.