Santidad, Gloria y Prodigios de Santa Teresa de Jesus Tomo I

FELTPE ir. (254) pro r
«ser Priora , vi en la silla Príoral comenzando la Salive
á donde esiá puesta nuestra Señora, baxar con gran
3>inultitud de ángeles á la Madre de Dios y ponerse
«allí. Parecíame encima de las coronas de las sillas,
üy sobre los antepechos ver muchos angeles , aunque
9tno con forma corporal, que era visión intelectual.
«Estuve así toda la Salve y dixome : bien acertaste á
«ponerme aquí: yo estaré presente á las alabanzas que
«hicieren á mi hijo, y se las presentare." Dichoso descuido
de la observancia anterior que mereció' tal restauradora.
Dichoso convento y comunidad de la Encarnación
que habiendo logrado la suerte feliz de una
Priora, como Santa Teresa, vid en sí tal transformación
, y logro por ella tan grandes bienes. El Pontífice
San Pió V. que sabia bien lo que era esta ilustre
Virgen , y la tenia en el concepto eminente, que
ella se merecia , la favoreció desde Roma en quanto
ella quiso, y hubiera tenido ej^ mayor placer de que
puesta en aquella capital del mundo, hubiese estendido
su zelo por toda la cristiandad. Deseo tratarla de
cerca y ya que no pudo en vida , luego que murio',
al estar su alma de marcha al cielo, vino desde
Roma á Avila por este tiempo á visitar á Santa
Teresa, á tratarla y asegurarle de parte de Dios su protección
(a). Ya en este tiempo encontramos á Santa Teresa
favorecida tan frecuentemente de Dios con ilustraciones
y gracias soberanas, que la incomprensible
distancia que hay de esto á lo que pasa por nosotros
, nos hace ver mas, nuestra pequeñez y pobreza, y
alabar la infinita misericordia de Dios que con tanta
abundancia se comunico á la gran Teresa. Hasta de
aquí los ángeles, los Santos, María santísima , nuestro
Señor Jesucristo la habían servido , obsequiado y fa-
^vorecido,: ahora la Santísima Trinidad por sí anisma
quiso honrarla. Son cosas estas elevadísimas, y nadie
mejor que ella puede descifrarlas. j»Despues de esto
(a)
Consta del proceso de la Bea.-ificíiciou de la Sinta.