Santidad, Gloria y Prodigios de Santa Teresa de Jesus Tomo I
tELIPE n. (171) PIO IV. CAPITULO SEPTIMO. EXEMPLO ADMIRABLE DE VIRTUDES monásticas con que Santa Teresa ilustra los principios de su reforma. Años de Cristo, Edad de la Santa. 1562. 47. -Los fundadores de las Órdenes Religiosas todos han sido eminentes en santidad : se hicieron modelos de virtud á sus familias , y abocaron todos sus esfuerzos en aquellas quaÜdades que formaban eí distintivo de su instituto. Miraban como mas dificultoso restaurar lo perdido , y reducir ánimos relajados á la reforma , que empezar observancias rigurosas , y asentar cimientos aun los mas penosos. No fueron muy grandes las contradicciones para fundar , pero lo han sido mayores incomparablemente para establecer reformas , y solo á fuerza de un gran fondo y caudal de valor, sufrimiento , constancia y demás virtudes en grado superior, acompañadas también de una gracia extraordinaria , ha sido posible rehacer los fervores primitivos de las Ordenes. Sí edifican los principios del Carmelo, de Maraya , de Casino, de Granr- Mont , de la Cartuja , de Paula y la Porciilncula, en que sus fundadores Élías, Basilio, Benito , Esiévan, Bruno y los dos Franciscos , proporcionaron ai mundo en sus Ordenes respectivas ios varios modos de servir á Dios, ir al cielo y ser virtuosos, según la diversidad de inclinaciones y vocación :• pero asombran los rigores de Cluny , del Cister , de Pedroso y de la Trapa , en las n formas de sus cuerpos principales, y nada es demasiado en este lance , pues aun para las mismas reformas son un exrmplo fatal las mitigaciones pasadas. Los caudillos de estas rtfoimas se lun adelantado con unos santos excesos á sus coad-
FELIPE II. O?2) VT0 Iv» juturcs , y estos á los que los han subseguido. En esta situación se hallaba Teresa y sus religiosas de Avi- Ja; y siendo su empeño disponerlas á la unión con Dios por Ja oración y amor divino, empezó por el desprendimiento de todo lo caduco , contentándose con solo aquello pobre y sencillo , pero poco y desagradable , sin lo que no puede pasarse estrechamente ia vida. Puesta en medio de ellas les hizo á este nri la exórtacion siguiente (a) : «No penséis, her- " manas mias, que por no andar á contentar á los del «mundo, os ha de faltar de comer. Yo os aseguro. "Jamas por artificios humanos pretendáis substenta- »ros, que moriréis de hambre y con razón. Los ojos «en vuestro esposo , él os ha de substentar. Conten- »»to él , aunque no quieran os darán de comer los «menos vuestros devotos, como lo habéis visto por «experiencia. Si haciendo vosotras esto muriereis de «hambre, bienaventuradas las monjas de S.José. Esto «no se os olvide, por amor del Señor pues dexais 9>h renta, dexad el cuidado de la comida , sino to- «do va perdido : y dexad ese cuidado á quien los «puede mover á todos, que es el Señor de las rentas y «los renteros. Por su mandamiento venirlos aquí: verda- «deras son sus palabras, no pueden faltar, antes fal- «taran los cielos y la tierra : no le faltemos nosotras, «que no haya mieao que falte ; y sí alguna vez os fal- «tare, será para mayor bien, como faltaban las vidas »á los santos , quando los mataban por el Señor, y «era para aumentar la gloria por el martirio. Buen «trueco seria acabar presto con todo , y gozar de la «artura perdurable. Mirad , hermanas, que va mucho í>en esto muerta yo , que para eso os lo dexo es- «crifo, que mientras yo viviere , yo os lo acordar j>ré, que por experiencia veo la gran ganancia: quan- «do menos hay, mas descuidada estoy... Y crean mis «hijas, que para vuestro bien me ha dado el Señor Camino de Perf. ca^
- Page 135 and 136: FELIPE IT. (I20) riO TY. Dios ha fi
- Page 137 and 138: FELIPE TT. i1*}) ?r® IV* formaban
- Page 139 and 140: FELIPE II. CI24) 710 1V' por el mis
- Page 141 and 142: FELIPE ir. (n6) pro IT. co y fin de
- Page 143 and 144: FELIPE II. O ^8) PíO IV. vigilias
- Page 145 and 146: TELIPÉ IT. (r30) ÍÍO IV. fin de
- Page 147 and 148: FELIPE II. C1^2) ÍIO IT, APENDICE.
- Page 149 and 150: FELIPE IT. 034) IV. Bure , y acredi
- Page 151 and 152: FELIPE IT. OJÓ) PÍO IV. «vuestra
- Page 153 and 154: FEJLIPB IT. 0¿fr) PÍO IV. tos de
- Page 155 and 156: FELIPE II. (l40) PI0 IV, como no fu
- Page 157 and 158: FELIPE ÍI. (M2) "P10 Iv' las contr
- Page 159 and 160: FELIPE II. (I44) 1,10 sucedido , ig
- Page 161 and 162: FELIPE II. i146) PI0 1Vwbidme dos p
- Page 163 and 164: FELIPE ir. O4*0 rro IV' «enrienda
- Page 165 and 166: FELTPE rr. (r50) 1510IV* continua p
- Page 167 and 168: FELIPE IT. (lS¿) I>10 IV. cd segui
- Page 169 and 170: FELIPE II. ('54) píf> 1Vintemos no
- Page 171 and 172: J TlPE II. O 5 6) PIO IV. agradable
- Page 173 and 174: F£L!PE II. (lS%) PJ0 íaculrades p
- Page 175 and 176: jELTPE n. (160) PIO IV. cer, obscur
- Page 177 and 178: PELYPE IT. (162) PÍO TV. «había
- Page 179 and 180: FELIPE IT. (164) PIO IV. del Correg
- Page 181 and 182: FELiPE IT. (1(5(5) Pío iy. CAPITUL
- Page 183 and 184: FELIPE II. O&O P'O IV. duce á este
- Page 185: FELIPE IT. (í/o) ÍÍO TV» dre ,
- Page 189 and 190: FELIPE n. ('74) *lo «Casas eran es
- Page 191 and 192: FELIPE n. (r7^) rro iv. las crudeza
- Page 193 and 194: FELIPE IT. 078) PÍO IV. trocar sus
- Page 195 and 196: FELIPE TI. O^o) PIO IV. mcliras (qu
- Page 197 and 198: FÍLIPE rr. (182) no rv. fin para q
- Page 199 and 200: FELIPE II. 0^4) PI0 IV. «se dexar
- Page 201 and 202: FEITÍE n. (i85) pro m s>que entend
- Page 203 and 204: FELIPE ir. (188) no ir. la Corte fu
- Page 205 and 206: FELIPE IT. Cr90) PI0 rvsada de sus
- Page 207 and 208: FEtlFS TT. C^2) rro IV. que se obli
- Page 209 and 210: F£LTPE TT, (r94) Pl0 ÍVdido paso
- Page 211 and 212: FELIPE ir. 090 rr0 IVbresaltada con
- Page 213 and 214: FELIPE ii. 098) PÍO iy. na, honrad
- Page 215 and 216: FELIPE íí. (20o) PÍO IV. tre ell
- Page 217 and 218: FEtTPE IT. (202) PIO TV. misericord
- Page 219 and 220: FÍL1PE TI. (204) PÍO IV. rodillas
- Page 221 and 222: PEITPE n. (206) PTO ir. biicarlo (a
- Page 223 and 224: FELIPE IT. (208) TIO IV, de los rro
- Page 225 and 226: FELIPE II. {ZXo) PI0 lv- »de nuest
- Page 227 and 228: FELIPE ir. {1(1^) rio iv. CAPITULO
- Page 229 and 230: FFXlPH IT. f i*14) P:0 1V' bia en l
- Page 231 and 232: FIÍLIPE ir. (2rQ PÍO ir. labras h
- Page 233 and 234: FELIPE TI, C21^) IV« abrir escuela
- Page 235 and 236: FELIPE II. (220) PIO IV. joria se p
tELIPE n. (171) PIO IV.<br />
CAPITULO<br />
SEPTIMO.<br />
EXEMPLO ADMIRABLE DE VIRTUDES<br />
monásticas con que <strong>Santa</strong> <strong>Teresa</strong> ilustra los principios<br />
<strong>de</strong> su reforma.<br />
Años <strong>de</strong> Cristo,<br />
Edad <strong>de</strong> la <strong>Santa</strong>.<br />
1562. 47.<br />
-Los fundadores <strong>de</strong> las Ór<strong>de</strong>nes Religiosas todos han<br />
sido eminentes en santidad : se hicieron mo<strong>de</strong>los <strong>de</strong><br />
virtud á sus familias , y abocaron todos sus esfuerzos<br />
en aquellas quaÜda<strong>de</strong>s que formaban eí distintivo<br />
<strong>de</strong> su instituto. Miraban como mas dificultoso restaurar<br />
lo perdido , y reducir ánimos relajados á la<br />
reforma , que empezar observancias rigurosas , y asentar<br />
cimientos aun los mas penosos. No fueron muy<br />
gran<strong>de</strong>s las contradicciones para fundar , pero lo han<br />
sido mayores incomparablemente para establecer reformas<br />
, y solo á fuerza <strong>de</strong> un gran fondo y caudal<br />
<strong>de</strong> valor, sufrimiento , constancia y <strong>de</strong>más virtu<strong>de</strong>s<br />
en grado superior, acompañadas también <strong>de</strong> una gracia<br />
extraordinaria , ha sido posible rehacer los fervores<br />
primitivos <strong>de</strong> las Or<strong>de</strong>nes. Sí edifican los principios<br />
<strong>de</strong>l Carmelo, <strong>de</strong> Maraya , <strong>de</strong> Casino, <strong>de</strong> Granr-<br />
Mont , <strong>de</strong> la Cartuja , <strong>de</strong> Paula y la Porciilncula, en<br />
que sus fundadores Élías, Basilio, Benito , Esiévan,<br />
Bruno y los dos Franciscos , proporcionaron ai mundo<br />
en sus Or<strong>de</strong>nes respectivas ios varios modos <strong>de</strong> servir<br />
á Dios, ir al cielo y ser virtuosos, según la diversidad<br />
<strong>de</strong> inclinaciones y vocación :• pero asombran<br />
los rigores <strong>de</strong> Cluny , <strong>de</strong>l Cister , <strong>de</strong> Pedroso y <strong>de</strong><br />
la Trapa , en las n formas <strong>de</strong> sus cuerpos principales,<br />
y nada es <strong>de</strong>masiado en este lance , pues aun para<br />
las mismas reformas son un exrmplo fatal las mitigaciones<br />
pasadas. Los caudillos <strong>de</strong> estas rtfoimas se<br />
lun a<strong>de</strong>lantado con unos santos excesos á sus coad-