Santidad, Gloria y Prodigios de Santa Teresa de Jesus Tomo I
TELiPE 11. C1^/) Pl0 1Vdemasiado tímlcló á la contradicción , le retardaba la licencia para volver á su monasterio. »Padre mire wque resistimos al Espíritu Santo." El prelado coinprchendiendo todo el entusiasmo de esta expresión ocupado de un santo respeto , y gozoso de contribuir á la obra de Dios , le concede no coló quanto pide , si que también pueda llevarse quantas monjas de la Encarnación quieran seguirla. Se le agregan Doña Isabel de la Peña , Doña María de Ocampo , Ana Meneses y Ana de S. Juan , y con ellas se restituye (1562) al seno de sus hijas (a) desoladas hasta (47) emdnces por la ausencia de til madre. Entra como en triunfo en su Iglesia con las que la seguían , para presentarle al Señor aquellos primeros trofeos de la buena fama , y exempios de su convento ya fundado. El recibimiento que su Magestad le hizo allí es semejante al de un monarca agradecido á su general que vuelve victorioso de la guerra.' «Estando índice ella) (b) haciendo oración en la Iglesia anotes que entrase en el monasterio , estando casi en «arrobamiento , vi á Cristo que cun grande amor me «pareció me recibía y ponía una corona , y agrade- «ciéndome lo que había hecho por su madre (c).'* Entra en la clausura: un íntimo gozo enlaza en abrazos amorosos á la madre con sus hijas acreditadas de tales por su fidelidad en la tormenta pasada. Ella con un placer generoso recibe en su pecho las* lágrimas que la alegría las hace derramar con su presencia; y con estas plantas robustas junta Jas que de nuevo con- (a) Se hizo esta traslación á fines de Diciembre del mismo año de 15^2. (b) Sil vid. c. S^n- 13. (c) Todo lo biifiio que hace la criatura, es de Dios y por Dios: por la vida qne> dá, par el conocimiento con q'ie ilustra, por el auxilio con que mueve, por la gracia con que coopera , por el amor que infunde, por la recompensa con que anima, por Sunnto perfecciona el libre alvedrio, y contribuye al bien obrar de la criatura. Pero es Dios tein bueno, que sin expresar esto, agradece y publica en este lance las emfresas y fatigas f'e Tere.sa, sin embargo de haber sido todo efecto de su bondad j *oder infinito , sobre tu mentó personal que aquí acredita el Seííor. z ~
FELIPE II. O&O P'O IV. duce á este Jardín de Dios. Su satisfacción bien presto se halla completa con la visión siguiente. «Otra «vez estando todas en el coro en oración después de wcompletas , vi á nuestra Señora con grandísima glo- «ria, con un manto blanco. Y debaxo de él pare- «cía ampararnos á todas. Entendí quan alto grado de «gloría daría el Señor á las de esta casa (a).1' Siendo ya nueve religiosas bastantes para formar comunidad , establecer empleos , organizar gobierno y asentar la observancia regular , dio' principio á todo esto la Santa con un heroísmo de humildad. A una hace priora , supriora á otra , y repartidos an los demás oficios , nada reservo para sí , tomo e! puesto mas baxo , determinada á obedecer y servir á todas. Bien quisieran estas rendirse á sus disposiciones sin desagradarle en cosa alguna. Pero sorprthendidas de un abatimiento tan brillante, y conociendo ser todas niñas á su lado, recurrieron al Obispo y Provincial, á que la obligasen á ser Prelada, como correspondía á una consumada maestra de espíritu y de gobierno. Teresa hubo de condescender con el orden superior y deseo de fus hijas. Empezó pues con el año 63 su descalsez y su gobierno , y renunciada toda la mitigación antigua , se puso por exemplar á toda su descendencia. Un espectáculo de ttmto recogimiento , austeridad y pobreza , como el que Teresa presento á la ciudad de Avila , rnuy presto produxo efectos no esperados. »>Comenzando (b) a hacer el ofi- MCÍO, era mucha la devoción que el pueblo comen- »>zd á tener con esta casa. Tomáronse mas monjas, y «comenzó el Señor á mover á los que mas nos barbián perseguido , para que mucho nos favoreciesen í»é hiciesen limosna. Y así aprobaban lo que tanto hajjbian reprobado , y poco á poco se dexaron de piey- "to. Y decían que ya entendían ser obra de Dios, (a) Su vid. c. 36. (b) Su vid. c. 36, n. 14.
- Page 131 and 132: FELIPE II. PIO IV. CAPITULO • DEC
- Page 133 and 134: FELIPE IT. Cri^) rT0 Iv' »cion : m
- Page 135 and 136: FELIPE IT. (I20) riO TY. Dios ha fi
- Page 137 and 138: FELIPE TT. i1*}) ?r® IV* formaban
- Page 139 and 140: FELIPE II. CI24) 710 1V' por el mis
- Page 141 and 142: FELIPE ir. (n6) pro IT. co y fin de
- Page 143 and 144: FELIPE II. O ^8) PíO IV. vigilias
- Page 145 and 146: TELIPÉ IT. (r30) ÍÍO IV. fin de
- Page 147 and 148: FELIPE II. C1^2) ÍIO IT, APENDICE.
- Page 149 and 150: FELIPE IT. 034) IV. Bure , y acredi
- Page 151 and 152: FELIPE IT. OJÓ) PÍO IV. «vuestra
- Page 153 and 154: FEJLIPB IT. 0¿fr) PÍO IV. tos de
- Page 155 and 156: FELIPE II. (l40) PI0 IV, como no fu
- Page 157 and 158: FELIPE ÍI. (M2) "P10 Iv' las contr
- Page 159 and 160: FELIPE II. (I44) 1,10 sucedido , ig
- Page 161 and 162: FELIPE II. i146) PI0 1Vwbidme dos p
- Page 163 and 164: FELIPE ir. O4*0 rro IV' «enrienda
- Page 165 and 166: FELTPE rr. (r50) 1510IV* continua p
- Page 167 and 168: FELIPE IT. (lS¿) I>10 IV. cd segui
- Page 169 and 170: FELIPE II. ('54) píf> 1Vintemos no
- Page 171 and 172: J TlPE II. O 5 6) PIO IV. agradable
- Page 173 and 174: F£L!PE II. (lS%) PJ0 íaculrades p
- Page 175 and 176: jELTPE n. (160) PIO IV. cer, obscur
- Page 177 and 178: PELYPE IT. (162) PÍO TV. «había
- Page 179 and 180: FELIPE IT. (164) PIO IV. del Correg
- Page 181: FELiPE IT. (1(5(5) Pío iy. CAPITUL
- Page 185 and 186: FELIPE IT. (í/o) ÍÍO TV» dre ,
- Page 187 and 188: FELIPE II. O?2) VT0 Iv» juturcs ,
- Page 189 and 190: FELIPE n. ('74) *lo «Casas eran es
- Page 191 and 192: FELIPE n. (r7^) rro iv. las crudeza
- Page 193 and 194: FELIPE IT. 078) PÍO IV. trocar sus
- Page 195 and 196: FELIPE TI. O^o) PIO IV. mcliras (qu
- Page 197 and 198: FÍLIPE rr. (182) no rv. fin para q
- Page 199 and 200: FELIPE II. 0^4) PI0 IV. «se dexar
- Page 201 and 202: FEITÍE n. (i85) pro m s>que entend
- Page 203 and 204: FELIPE ir. (188) no ir. la Corte fu
- Page 205 and 206: FELIPE IT. Cr90) PI0 rvsada de sus
- Page 207 and 208: FEtlFS TT. C^2) rro IV. que se obli
- Page 209 and 210: F£LTPE TT, (r94) Pl0 ÍVdido paso
- Page 211 and 212: FELIPE ir. 090 rr0 IVbresaltada con
- Page 213 and 214: FELIPE ii. 098) PÍO iy. na, honrad
- Page 215 and 216: FELIPE íí. (20o) PÍO IV. tre ell
- Page 217 and 218: FEtTPE IT. (202) PIO TV. misericord
- Page 219 and 220: FÍL1PE TI. (204) PÍO IV. rodillas
- Page 221 and 222: PEITPE n. (206) PTO ir. biicarlo (a
- Page 223 and 224: FELIPE IT. (208) TIO IV, de los rro
- Page 225 and 226: FELIPE II. {ZXo) PI0 lv- »de nuest
- Page 227 and 228: FELIPE ir. {1(1^) rio iv. CAPITULO
- Page 229 and 230: FFXlPH IT. f i*14) P:0 1V' bia en l
- Page 231 and 232: FIÍLIPE ir. (2rQ PÍO ir. labras h
TELiPE 11. C1^/) Pl0 1V<strong>de</strong>masiado<br />
tímlcló á la contradicción , le retardaba la<br />
licencia para volver á su monasterio. »Padre mire<br />
wque resistimos al Espíritu Santo." El prelado coinprchendiendo<br />
todo el entusiasmo <strong>de</strong> esta expresión<br />
ocupado <strong>de</strong> un santo respeto , y gozoso <strong>de</strong> contribuir<br />
á la obra <strong>de</strong> Dios , le conce<strong>de</strong> no coló quanto<br />
pi<strong>de</strong> , si que también pueda llevarse quantas monjas<br />
<strong>de</strong> la Encarnación quieran seguirla. Se le agregan Doña<br />
Isabel <strong>de</strong> la Peña , Doña María <strong>de</strong> Ocampo , Ana<br />
Meneses y Ana <strong>de</strong> S. Juan , y con ellas se restituye<br />
(1562) al seno <strong>de</strong> sus hijas (a) <strong>de</strong>soladas hasta (47)<br />
emdnces por la ausencia <strong>de</strong> til madre. Entra como<br />
en triunfo en su Iglesia con las que la seguían , para<br />
presentarle al Señor aquellos primeros trofeos <strong>de</strong><br />
la buena fama , y exempios <strong>de</strong> su convento ya fundado.<br />
El recibimiento que su Magestad le hizo allí<br />
es semejante al <strong>de</strong> un monarca agra<strong>de</strong>cido á su general<br />
que vuelve victorioso <strong>de</strong> la guerra.' «Estando<br />
índice ella) (b) haciendo oración en la Iglesia anotes<br />
que entrase en el monasterio , estando casi en<br />
«arrobamiento , vi á Cristo que cun gran<strong>de</strong> amor me<br />
«pareció me recibía y ponía una corona , y agra<strong>de</strong>-<br />
«ciéndome lo que había hecho por su madre (c).'*<br />
Entra en la clausura: un íntimo gozo enlaza en abrazos<br />
amorosos á la madre con sus hijas acreditadas <strong>de</strong><br />
tales por su fi<strong>de</strong>lidad en la tormenta pasada. Ella con<br />
un placer generoso recibe en su pecho las* lágrimas<br />
que la alegría las hace <strong>de</strong>rramar con su presencia;<br />
y con estas plantas robustas junta Jas que <strong>de</strong> nuevo con-<br />
(a) Se hizo esta traslación á fines <strong>de</strong> Diciembre <strong>de</strong>l mismo año <strong>de</strong> 15^2.<br />
(b) Sil vid. c. S^n- 13.<br />
(c) Todo lo biifiio que hace la criatura, es <strong>de</strong> Dios y por Dios: por la vida qne><br />
dá, par el conocimiento con q'ie ilustra, por el auxilio con que mueve, por la gracia<br />
con que coopera , por el amor que infun<strong>de</strong>, por la recompensa con que anima, por<br />
Sunnto perfecciona el libre alvedrio, y contribuye al bien obrar <strong>de</strong> la criatura. Pero<br />
es Dios tein bueno, que sin expresar esto, agra<strong>de</strong>ce y publica en este lance las emfresas<br />
y fatigas f'e Tere.sa, sin embargo <strong>de</strong> haber sido todo efecto <strong>de</strong> su bondad j<br />
*o<strong>de</strong>r infinito , sobre tu mentó personal que aquí acredita el Seííor.<br />
z ~