Obras de La Gloriosa Santa Teresa de Jesus Tomo II
13*8 MORADAS perdido el seso, mas no sale de una cosa que se le puso en la imaginación , ni hay quien le saque della. Harto groseras comparaciones son estas para tan preciosa causa, mas no alcanza otras mi ingenio , porque ello es ansi, que este gozo la tiene tan olvidada de sí, y de todas las cosas , que no advierte, ni acierta á hablar , siho en lo que procede de su gozo, que son alabanzas de Dios. Ayudemos á esta alma. Hijas mias , todas, epara qué queremos tener mas seso? ¿Qué nos puede dar mayor conrento? Y ayúdennos todas las criaturas por todos los siglos de los siglos. Amen. Amen. Amen. CAPITULO VIL TRATA DE LA MANERA QUE ES LA PÉWA que sienten de Sus pecados las almas á quien Dios hace las mercedes dichas. Dice quan gran yerro es nú exercitarse , por muy espirituales que sean , en traer presente la Humanidad de nuestro Señor , y Salvador Jesu-Christo y y su Sacratísima Pasión y y vida , y á su gloriosa Madre , y Santos: Es de mucho provecho, 1 [¡(jg^^^^Arecerosha, Hermanas, que á estas almas á quien el Señor se comunica tan particularmente (en especial no podrán pensar esto, las que no hubieren llegado á estas mercedes \ porque si lo han gozado , y es de Dios, verán loque yo diré) que estarán ya tan seguras de que le han de gozar para siempre, que no ternán que temer , ni que llorar sus pecados: y será muy gran engaño^ porque el dolor de los pecados crece mas, mientras mas reci-
SEXTAS. 139 cibimos de nuestro Dios: y tengo yo para mí, que hasta que estemos a donde ninguna cosa puede dar pena, que esta np se quitará. Verdad es, que unas veces aprieta mas que otras: y también es de diferente manera, porque no se acuerda de la pena que ha de tener por ellos, sino de cómo fue tan ingrata á quien tanto debe, y á quien tanto merece ser servido ; porque en estas grandeza» que le comunica, entiende mucho mas las de Dios. Espantase cómo fue tan atrevida: llora su poco respeto , parecele una cosa tan desatinada su desatino, que no acaba de lastimar jamás, quando se acuerda por las cosas tan baxas, que dexaba una tan gran Magestad. Mucho mas se acuerda desto , que de las mercedes que recibe, siendo tan grandes como las dichas , y las que están por decir, parece que las lleva un rio caudaloso , y las trae á sus tiempos. Esto de los pecados está como un cieno, que siempre parece se avivan en la memoria, y es 'harto gran Cruz. 2 Yo sé de una persona, que dexado de querer morirse por ver á Dios, lo deseaba, por no sentir tan ordinariamente pena de quan desagradecida habia sido á quien ranto debió siempre, y habia de deber: y ansi no le parecia podían llegar maldades de ninguno á las suyas-, porque entendia, que no le habria , á^quien tanto hubiese sufrido Dios, y tantas mercedes hubiese hecho. En lo que toca á miedo del infierno, ninguno tienen: de si han de perder á Dios, á veces aprieta mucho, mas es pocas veces. Todo su temor es, no las dexe Dios de su mano para ofenderle, y se vean en estado tan miserable, como se vieron algún tiempo , que de pena, ni gloria suya propia, no tienen cuidado: y si desean no estar mucho en Purgatorio, es mas por no estar ausen- S i tes
- Page 100 and 101: 88 MORADAS CAPITULO IV. PROSIGUE EN
- Page 102 and 103: 9o MORADAS 3 Por eso almas Christia
- Page 104 and 105: 9z MORADAS trar, ni desierto tan ap
- Page 106 and 107: 9+ MORADAS MORADAS SEXTAS. HAT EN E
- Page 108 and 109: MORADAS monias: y hasc de notar (qu
- Page 110 and 111: 5?8 MORADAS go, porque descomponen
- Page 112 and 113: IOO MORADAS combaten con un apretam
- Page 114 and 115: lot MORADAS no le hallo , sino para
- Page 116 and 117: 104 MORADAS de que está presente,
- Page 118 and 119: io.6 MORADAS 7 ¿Podrá ser que rep
- Page 120 and 121: io8 MORADAS tan en lo exterior, que
- Page 122 and 123: no MORADAS de temor 5 y con una pal
- Page 124 and 125: ni KÍORADAS nlvc. En fin, como es
- Page 126 and 127: ii^ MORADAS conversación, aunque h
- Page 128 and 129: II^ MORADAS vertir, y poner el pens
- Page 130 and 131: II8 MORADAS seo, que abrasada toda
- Page 132 and 133: i io MORADAS tan limlcado poder com
- Page 134 and 135: nz MORADAS ñor, como lo hacia la E
- Page 136 and 137: ii4 MORADAS grande el corrimiento y
- Page 138 and 139: n i MORADAS á entender al alma 3 q
- Page 140 and 141: 12.8' MORADAS seis que soy yo , me
- Page 142 and 143: i3o MORADAS trabajoso, sabiendo a d
- Page 144 and 145: ji MORADAS poca pena , ¿no es quan
- Page 146 and 147: 134 MORADAS seos de ver á nuestro
- Page 148 and 149: i3¿ MORADAS sequedad. El sabe mejo
- Page 152 and 153: 140 MORADAS tes de Dios, lo que all
- Page 154 and 155: 141 MORADAS templacion perfeta, que
- Page 156 and 157: 144 MORADAS pensar en la merced que
- Page 158 and 159: 1^6 MORADAS que nunca puede hacer l
- Page 160 and 161: 148 MORADAS de hacer esta merced, n
- Page 162 and 163: 150 MORADAS de las que quedan dicha
- Page 164 and 165: ISÍ MORADAS alguna vez se le atrev
- Page 166 and 167: i£0 MORADAS quando son de nuestro
- Page 168 and 169: JS6 MORADAS nos! cQue será aquel d
- Page 170 and 171: IJS MORADAS tanto en lo Interior de
- Page 172 and 173: i6o MORADAS quiero cansar, ni cansa
- Page 174 and 175: i¿i MORADAS se les acuerda que han
- Page 176 and 177: i¿4- MORADAS bamos de entender est
- Page 178 and 179: i66 MORADAS no que alabar al Seíio
- Page 180 and 181: tlSt MORADAS hace crecer k pena en
- Page 182 and 183: lyo MORADAS 6 Purcs icbñsicleremos
- Page 184 and 185: i7t M Ó RAÍ) AS y hartar su alma,
- Page 186 and 187: *74- MORAD AS la tiene, sino que co
- Page 188 and 189: tjó MORADAS é Que podemos conside
- Page 190 and 191: 178 MORADAS enteramente , digo tan
- Page 192 and 193: i8o MORADAS bien, y no esté Ignora
- Page 194 and 195: i8i MORADAS en dos velas, ó el pá
- Page 196 and 197: 184 MORADAS gestad. No solo ruego p
- Page 198 and 199: i8(f MORADAS cuerpo, rnas si la cab
SEXTAS. 139<br />
cibimos <strong>de</strong> nuestro Dios: y tengo yo para mí, que hasta que<br />
estemos a don<strong>de</strong> ninguna cosa pue<strong>de</strong> dar pena, que esta np<br />
se quitará. Verdad es, que unas veces aprieta mas que otras:<br />
y también es <strong>de</strong> diferente manera, porque no se acuerda <strong>de</strong><br />
la pena que ha <strong>de</strong> tener por ellos, sino <strong>de</strong> cómo fue tan ingrata<br />
á quien tanto <strong>de</strong>be, y á quien tanto merece ser servido<br />
; porque en estas gran<strong>de</strong>za» que le comunica, entien<strong>de</strong><br />
mucho mas las <strong>de</strong> Dios. Espantase cómo fue tan atrevida:<br />
llora su poco respeto , parecele una cosa tan <strong>de</strong>satinada su<br />
<strong>de</strong>satino, que no acaba <strong>de</strong> lastimar jamás, quando se acuerda<br />
por las cosas tan baxas, que <strong>de</strong>xaba una tan gran Magestad.<br />
Mucho mas se acuerda <strong>de</strong>sto , que <strong>de</strong> las merce<strong>de</strong>s que<br />
recibe, siendo tan gran<strong>de</strong>s como las dichas , y las que están<br />
por <strong>de</strong>cir, parece que las lleva un rio caudaloso , y las trae<br />
á sus tiempos. Esto <strong>de</strong> los pecados está como un cieno, que<br />
siempre parece se avivan en la memoria, y es 'harto gran<br />
Cruz.<br />
2 Yo sé <strong>de</strong> una persona, que <strong>de</strong>xado <strong>de</strong> querer morirse<br />
por ver á Dios, lo <strong>de</strong>seaba, por no sentir tan ordinariamente<br />
pena <strong>de</strong> quan <strong>de</strong>sagra<strong>de</strong>cida habia sido á quien ranto<br />
<strong>de</strong>bió siempre, y habia <strong>de</strong> <strong>de</strong>ber: y ansi no le parecia podían<br />
llegar malda<strong>de</strong>s <strong>de</strong> ninguno á las suyas-, porque entendia,<br />
que no le habria , á^quien tanto hubiese sufrido Dios,<br />
y tantas merce<strong>de</strong>s hubiese hecho. En lo que toca á miedo<br />
<strong>de</strong>l infierno, ninguno tienen: <strong>de</strong> si han <strong>de</strong> per<strong>de</strong>r á Dios, á<br />
veces aprieta mucho, mas es pocas veces. Todo su temor es,<br />
no las <strong>de</strong>xe Dios <strong>de</strong> su mano para ofen<strong>de</strong>rle, y se vean en<br />
estado tan miserable, como se vieron algún tiempo , que <strong>de</strong><br />
pena, ni gloria suya propia, no tienen cuidado: y si <strong>de</strong>sean<br />
no estar mucho en Purgatorio, es mas por no estar ausen-<br />
S i<br />
tes