Obras de La Gloriosa Santa Teresa de Jesus Tomo I
TERESA DE JESUS. 19 cado, aunque fuese venial> que le dexase de confesar: mas sin duda me parece, que lo iba harto mi salvación , si entonces me muriera, por ser los Confesores tan poco letrados por una parte, y por otra, y por muchas ser yo tan ruin. Es verdad, cierto, que me parece estoy con tan gran espanto llegando aquí, y viendo como parece me resucitó el Señor , que estoy casi temblando entre mí. Pareceme fuera bien, ó ánima mia, que miraras del peligro que el Señor te habia librado , y ya que por amor no le dexabas de ofender , lo dexaras por temor, que pudiera otras mil veces matarte en estado mas peligroso. Creo, no añado muchas en decir otras mil, aunque me riña quien me mandó moderase el contar mis pecados, y harto hermoseados van. Por amor de Dios le pido y de mis culpas no quite nada, pues se vé mas aquí la magnificencia de Dios, y lo que sufre á una alma. Sea bendito para siempre: plegué á su Magestad, que antes me consuma, que le dexeyo mas de querer. CAPITULO VL TRATA DE LO MUCHO JQUE DEBIO AL SEÑOR, en darle conformidad, con tan grandes trabajos \ y cómo tomé por medianero, y abogado al glorioso San Josephy y lo mucho que le aprovechó. Uedé destos quatro dias de parasismo de manera , que solo el Señor puede saber los incomportables tormentos que sentía en mí. La lengua hecha pedazos de mordida í la garganta de no haber pasado nada; y de la gran flaquezaque me ahogaba, que aun el
3 o VIDA DE LA SANTA MADRE el agua no podía pasar. Toda me parecía estaba descoyuntada , con grandísimo desatino en la cabeza. Toda encogida hecha un ovillo > porque en esto paró el tormento de aquellos dias ^ sin poderme menear, ni brazo^ ni pie, ni mano, ni cabeza , mas que si estuviera muerta , si no me meneaban/, solo un dedo me parece podia menear de la mano derecha. Pues llegar a mí, no habia cómo*, porque todo estaba tan lastimado > que no lo podía sufrir. En una sábana y una de un cabo , y otra de otro, me meneaban: esto fue hasta Pasqua florida. Solo tenia, que si no llegaban a mí, los dolores me cesaban muchas veces; y a cuentQ de descansar un poco , me contaba por buena , que traía temor, me habia de faltar la paciencia : y ansi quedé muy contenta de verme sin tan agudos , y contínos dolores, aunque á los recios frios de quartanas dobles , con que quedé recísimas, los tenia incomportables ^ el hastío muy grande. Di luego tan gran priesa de irme al Monasterio, que me hice llevar ansi. A la que esperaban muerta, recibieron con alma-, mas el cuerpo peor que muerto , para dar pena verle. El extremo de flaqueza no se puede decir, que solos los huesos tenia : ya digo, que estar ansi me duró mas de ocho meses: el estar tullida , aunque iba mejorando , casi tres anos. Quando comencé á andar á gatas, alababa á Dios. Todos los pasé con gran conformidad \ y si no fue estos principios, con gran alegría , porque todo se me hacia no nada, comparado con los dolores , y tormentos del principio: estaba muy conforme con la voluntad de Dios , aunque me dexase ansi siempre. Pareceme era toda mi ansia de sanar, por estar á solas en Oración, como venia mostrada, por-
- Page 21 and 22: moríase, en que nadie entendiese c
- Page 23 and 24: cía á sus Superiores en cosas dif
- Page 25 and 26: pírítu , y conocerlas , y como ta
- Page 27 and 28: Pe muy viva , y la Esperanza tan cl
- Page 29 and 30: dó con tanta flaqueza de cabeza ,
- Page 31 and 32: Que vuelta en nuestra lengua Españ
- Page 33 and 34: INDICE DE LOS C APÍTULOS DE ESTE P
- Page 35 and 36: que el Señor pone al alma que est
- Page 37 and 38: ausentase de este lugar , dice la c
- Page 39 and 40: CAP. XIII. Prosigue en la mertifica
- Page 41: ni os en estas palabras: Et ne nos
- Page 44 and 45: Pag. r LA DE LA SANTA VIDA MADRE jl
- Page 46 and 47: TERESA DE JESUS. 3 te años. Ayudá
- Page 48 and 49: TERESA DE JESUS. ; y mucKas lágrim
- Page 50 and 51: TERESA DE JESUS. 7 . vanidades que
- Page 52 and 53: TERESA DE JESUS. 9 sonas virtuosas
- Page 54 and 55: TERESA DE JESUS. n panía de buenos
- Page 56 and 57: TERESA DE JESUS. 13 na 3 que resid
- Page 58 and 59: TERESA DE JESUS. i j CAPITULO IV. D
- Page 60 and 61: TERESA DE JESUS. 17 quebrárseme el
- Page 62 and 63: TERESA DE JESUS. i? 3 Comenzóme su
- Page 64 and 65: tftRESA DE JESUS. i t desvaratada e
- Page 66 and 67: TERESA DE JESUS. 23 que comía: mur
- Page 68 and 69: TERESA DE JESUS. peligroso estado c
- Page 70 and 71: TERESA DE JESUS. 27; plexíon: á l
- Page 74 and 75: TERESA DE JESUS. 31 porque en la En
- Page 76 and 77: TERESA DE JESUS.^ 3 3 mas servirle)
- Page 78 and 79: TERESA DE JESUS. 3 5 como se puede
- Page 80 and 81: TERESA DE JESUS. 37 CAPITULO VIL TR
- Page 82 and 83: TERESA DE JESUS. 35> que eran buena
- Page 84 and 85: TERESA DE JESUS, 4^ 3 Pues comenzan
- Page 86 and 87: TERESA DE JESUS. 45 6 Estando yo ma
- Page 88 and 89: TERESA DE JESUS. Ví bajos el Seíi
- Page 90 and 91: : TERESA DE JESUS. 47 fesor, qué e
- Page 92 and 93: TERESA DE JESUS. 49 poco, según el
- Page 94 and 95: TERESA DE JESUS. JI y ruin que todo
- Page 96 and 97: TERESA DE JESUS. ||t raba, que las
- Page 98 and 99: TERESA DE JESUS. "5 $ que os ha ofe
- Page 100 and 101: | TERESA- DE JESUS. 57 solo digo ^
- Page 102 and 103: «O*» K33» ^li» ^IO»«Oft^«0
- Page 104 and 105: TERESA DE JESUS. 61 estar muy ganad
- Page 106 and 107: TERESA DE JESUS. ^3 oír mis clamor
- Page 108 and 109: TERESA DE JESUS. fuera de sí. Ama
- Page 110 and 111: TERESA DE JESUS. ^7 bienes, nos dar
- Page 112 and 113: TERESA DE JESUS. é9 verdad digo ,
- Page 114 and 115: TERESA DE JESUS. 71 CAPITULO XI. DI
- Page 116 and 117: TERESA DE JESUS. 73 áí gracia, y
- Page 118 and 119: TERESA DE JESUS. 7í el Señor sin
- Page 120 and 121: TERESA DE JESUS. 77 ni dexe jamás
TERESA DE JESUS. 19<br />
cado, aunque fuese venial> que le <strong>de</strong>xase <strong>de</strong> confesar: mas<br />
sin duda me parece, que lo iba harto mi salvación , si entonces<br />
me muriera, por ser los Confesores tan poco letrados<br />
por una parte, y por otra, y por muchas ser yo tan<br />
ruin. Es verdad, cierto, que me parece estoy con tan gran<br />
espanto llegando aquí, y viendo como parece me resucitó<br />
el Señor , que estoy casi temblando entre mí. Pareceme<br />
fuera bien, ó ánima mia, que miraras <strong>de</strong>l peligro que el<br />
Señor te habia librado , y ya que por amor no le <strong>de</strong>xabas<br />
<strong>de</strong> ofen<strong>de</strong>r , lo <strong>de</strong>xaras por temor, que pudiera otras mil<br />
veces matarte en estado mas peligroso. Creo, no añado muchas<br />
en <strong>de</strong>cir otras mil, aunque me riña quien me mandó<br />
mo<strong>de</strong>rase el contar mis pecados, y harto hermoseados van.<br />
Por amor <strong>de</strong> Dios le pido y <strong>de</strong> mis culpas no quite nada,<br />
pues se vé mas aquí la magnificencia <strong>de</strong> Dios, y lo que sufre<br />
á una alma. Sea bendito para siempre: plegué á su Magestad,<br />
que antes me consuma, que le <strong>de</strong>xeyo mas <strong>de</strong> querer.<br />
CAPITULO VL<br />
TRATA DE LO MUCHO JQUE DEBIO AL SEÑOR,<br />
en darle conformidad, con tan gran<strong>de</strong>s trabajos \ y cómo tomé<br />
por medianero, y abogado al glorioso San Josephy<br />
y lo mucho que le aprovechó.<br />
Uedé <strong>de</strong>stos quatro dias <strong>de</strong> parasismo <strong>de</strong><br />
manera , que solo el Señor pue<strong>de</strong> saber<br />
los incomportables tormentos que sentía<br />
en mí. <strong>La</strong> lengua hecha pedazos <strong>de</strong><br />
mordida í la garganta <strong>de</strong> no haber pasado<br />
nada; y <strong>de</strong> la gran flaquezaque me ahogaba, que aun<br />
el