Tomo Tres Leyenda de Oro -Vidas de Los Martires-

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DÍA 25. DICIEMBRE, mirando al cielo, oyó una voz, que le dijo : Gregorio, ya estás coronado: ya oslas escrito en el número de mis santos y escogidos ; entra en mi reino, bendito del Sefior, preparada Uenes la silla do gloria y habitación eterna: y antes que acabase el ángel de pronunciar las referidas palabras, le corló el verdugo la cabeza sacrosanta, y voló su benditísima alma al ciclo con el mismo ángel que le hablaba y llamaba , á ocupar la silla para que le convidaba. Fue su martirio glorioso á 21 de diciembre (dia eq que le celebra la Iglesia ) por los afios del Sefior de 303, imperando los ya referidos Diocleciano y Maximiano. Quedó el santísimo cuerpo dividido de la sacrosanta cabe- M: y no contento el tirano con la suma de tormentos, que en 61 habia ejecutado cuando vivo , pesaroso de no haberle echado ánles de degollarle á las fieras, como estaban en el anQtealro, mandó Tircano que las soltasen. Hiciéronlo así: salieron rabiosísimas y feroces las fieras: partieron para el santo cuerpo ; pero apenas llegaron á 61, cuando mansas y humildes se le postraron , 6 inclinando sus cabeaas, le veneraron. Estaba toda laciudad mirando el espectáculo , y á grandes voces esclamó la turba : ; Verdaderamcnlo es grande el Dios de los cristianos 1 y creyeron infinitos en Jesucristo y se bautizaron. Al mismo tiempo el tirano Flacco fuó herido por un ángel : conque vomitando las entraflas , espiró rabiosamcnle. El sanio cuerpo quedó en medio del anfiteatro , y una señora cristiana, llamada Abundancia, se fuó á Tircano y le compró el santísimo -cuerpo por treinta y cinco doblones que pidió el tirano por c!, dándolos muy gozosa, y haciendo gracias á nuestro Señor , cantando himnos y salmos lo sepultó (envuelto en bálsamo, nardo y preciosos aromas) junto al puente de piedra y rio llamado Sanguinario, cerca de los muros de la ciudad ; cuyas reliquias tiene hoy en gran veneración la iglesia mayor de Colonia con los cuerpos de los santos tres reyes Magos, que vinieron al portal de Belén á adorar al recién nacido infante Jesús. Escribieron esta prodigiosa historia y marlirio de san Gregorio, Beda ; Usuardo ; Adon; Mombricio, tom. u; Surio, tom. vi; Pedro de INatalibus, vi Calhaíogo Sánelorum , lib. icap. 88 ; el Martirologio romano y Baronio en sus anotaciones, y en el lom. n de sus Anales, año 303, núm. 121, y afio 3^8, núm . lü. Por dar nueva vida á la vida la perdió el autor de ella. En la historia presente y marlirio del santísimo sacerdote Gregorio ( que por prodigioso puede servir de idea y libro de memoria para todos los demás) , se ve esta verdad. ¿ Cuántos géneros de muertes padeció? No hay duda, que laníos cuantos fueron los tormenlos, á quo le expuso el tirano. ¿ Luego murió muchas veces ? Si. ¿ Pues quién le daba tantas vidas ? La vida que vivia y por quien moria que era Cristo. A su vida sola el menor tormento era muerte : pero fortalecido del Autor de la vida , tuvo vida para lanías muertes , hasta que gozoso el mismo Dios , y glorioso en sus triunfos , le coronó en la última muerlo ' con la vida eterna, que poseo coa el mismo Jesucristo con quien por su intercesión vivamos lodos. Amen. * L\ CONMEMOIUOON CE CÜAttEMA SANTAS V(R6SNES MÁll- TitiES.—Cuando la persecución del emperador Decio en los años 231, murieron estas santas , martirizadas en la ciudad de Anlioquía. Los SANTOS LUCIANO, MIÍTROBIO, PAULO, CENOBIO, TEÓTI M0 Y DRUSO , MÁUTiRES.—Sufrieron por ía fé de Cristo , y TOMO RI, ganaron la palma del martirio en Trípoli, que lo fueren en Boma. £09 Gülesino dice SAN EUTIMIO ó LUTIMIO, MAUTUI.'—Viendo el valor y la constancia con que iban al martirio los efistíanos , abrazó con ardor una religión tan sublime , y en tiempo de la persecución de Diocleciano fué martirizado en Nicomedia. SAN DELFÍN, OBISPO T CONFESOR.—En liempo del emperador Teodosio fué un modelo por su vida ejemplar y por su práctica de las virtudes que conslituyen un buen prelado de la Iglesia. Murió en Burdeos en 403. LAS SANTAS TARSILIA Y EMILIANA, VÍRGEXES.—Tres lias tuvo Gregorio el Grande. Tarsilia, la mayor, Emiliana y Gordiana. La primera es nombrada en el Martirologio remano, y lanío ella como la segunda han sido muy veneradas por sus eminentes virtudes. SANTA IRMINA ó IRMIA, VÍKGEN.—Ilija del rey Dagobcrlo segundo, rey de Austrasia. El Martirologio romano la nombra en este mismo dia. Murió á fines del siglo Vil. DIA 23. LA NATIVIDAD DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO.—En el devotísimo y suavísimo misterio del nacimienlode Jesucrislo nuestro Bedentor, cuando salió de las entrañas purísimas de la Virgen María nuestra Señora, su Madre, lies cosas piincipalmente debemos considerar; la primera: ¿por que este Señor y Dios inmortal, habiendo determinado por su inmensa bondad vestirse de nuestra carne y aparentar con nuestra naturaleza, quiso nacer con una extremada pobreza, y con una humildad suma y trabajosa en el portal de Belén, y ser reclinado en un pesebre de bestias? La segunda cosa es considerar atentamente la historia evangélica y el modo con que osle Señor nació; y la torcera los ejemplos que en este su nacimiento nos dió, y Jas virtudes que mas resplandecen en él y nosotros debemos imitar. Las causas por que aquel sumo ¡nfinilo 15ien y Bey soberano de todo lo criado descendió del cielo á la tierra, y no tuvo asco de vestir de nuestra naturaleza, tratamos (

570 onsEiizaniichto (5c en santo nombre, jimia nuestra «íilklad. La gloria del Señor sin duda so manificsía mas en esta hmnüdad, pobreza y desabrigo con que mició, que si hubiera nacido con grande aparato y resplandor de corte, y abundancia y regalo de las cosas para el sagrado parto necesarias, quo se bailan en los palacios de príncipes y royes; porque la majestad soberana de nuestro Dios no se ba de medir con medida tan corta, ni aquella inmensidad infinita regularse con la regla de hombres: No son (dice el Señor) mis pensamientos como los vueílros, ni mis caminos como los vuestros; antes están mas levantados y distantes los unos de los otros, que lo está el ciclo de la tierra. Había Dios de conquistar al mundo y sujetarle ásu obediencia: queria hacer guerra á aquel tirano que se habla encastillado en él, y senládose en el trono real y quitado el cetro ó imperio al verdadero Señor: y para vencer y-derribara este soberbio gigante, no quiso pelear con las armas doradas de Saúl (que son las grandezas, dignidades y vanidades del siglo), sino con la desnudez, con la pobreza, con el trabajo y abatimiento, como otro David con la honda y piedra, rendirle áíus piés y cortarle la cabeza ; porque tanto es mayor y mas gloriosa la victoria que se alcanza de un enemigo, cuanto ias armas con que se alcanza son mas flacas. Lo que parece que es poder en los grandes reyes y monarcas del mundo, si bien se mira, es flaqueza y falla de-.poder; porqués! quieren cercar una ciudad ó conquistar un reino, tienen necesidad de gran número de soldados de á pié y de á caballo, de arlilleria, de carruaje, de municiones, de man!c:)ímienlos y otros pcrlrecbos de guerra, y de un infinito tesoro para poderla sustentar: poro con toda esta potencia, cuando la tienen, les cae defuera; y sin ella no pueden castigar álos rebeldes c inquietos, ni conservar en paz la república, ni hacer justicia, ni sordo veras royes: mas JesDctis'o es tan poderoso, que para sojuzgar al mundo y rendir á todas las potestades del infierno, y hacer todo lo que es servido en el cielo y en la tierra, no tiene necesidad de nadie; porque por sí solo es sníicientísimo, y nif o tierno, llorando y temblando de frió, empanado y recostado en un pesebre de bestias, envía los ángeles para que den música del ciclo: trae de Oriente á los reyes magos ¡ aknnbra é inflama á los pastores; y en la suma pobreza se muestra rico, en la flaqueza fuerte, y en la niñez Dios rterno. Esta razón apuntad concilio efosino por oslas palabras: aledas las cosas (dice) escogió pobr es y viles, todas bajas, y al parecer do muchos osearas: para que se entendiese que la divinidad habia convertido y trasformado al mundo. Foresto escogió la madre pobre y mas pobre la patria: y como mendigo no quiso tener dinero; y el pesebre nos puede ser do esto buen testigo.» La otra causa es una utilidad; porque viniendo Dios á lo que venia, de esta manera bahía de venir. Venia para ganar al hombre y curarle del amor propio, que es la dolencia mas universal y mas arraigada, que nos quedó por Ü pecado: el cual amor propio es el veneno y cuchillo del amor de Dios, del cual mal amor nacen tres hijos, que son otros tres males amores; conviene á saber, amor desordenado de honra, de hacienda y de deleites sensuales: y de estos tros ramos que nacen de este pestilencial tronco, nace toda la fruta de muerte y loda la corrupción de nuestra vida; porque como los hombres ponen la boma, nó en la virtud (que sola merece sor honrada), sino en la vani- LA LEYENDA DE ORO. DU 23. dad y juicio ciego del mundo, para alcanzarla so despeñan en un abismo de makladca y pecados, y dejan las cosas necesarias para el bien do sus almas, cuando les parece que son contrarias á la que ellos tienen por honra. Tues ¿qué diré de la codicia y de la sed insaciable del dinero? de la cual dice el Apóstol, que es la raiz de todos los males, y que muchos por ella apostataron de la fó. ¿Qué del deseo desordenado de deleites, que es otra sementera de innumerables males? Porque los hombres mundanos, no haciendo caso délos verdaderos deleites Jo la buena conciencia, que como dice el Sabio, es perpetuo banquete, sueltan la rienda á los deleites do la carne, al comer y beber, al dormir y vestir: se entregan á los gustos sensuales y bestiales, y á todo género de pasatiempos, quo la carne inficionada por el pecado apetece; y en olios se entretienen dedia y de noche y se regalan: que oslo es lo que dijo el evangelista san Juan, que todo lo quo hay en el mundo es concupiscencia de la carne, ó codicia de los ojos, ó soberbia de la vida. Pues estando nosotros oprimidos de tan crueles tiranos y presos con cadenas tan fuertes, que atormentados de verdugos sin piedad como estos, que perturban la paz de nuestras almas, y nos impiden el cuidado de nuestra salvación, y muchas veces nos hacen tener por Dios la honra, el dinero y el vientre; ¿qué habla de hacer aquel médico soberano, que venia del cielo para curar una dolencia tan universal de lodo el género humano y nacida de nuestra misma carne y deí amor propio, que es ol hijo primogénito del pecado y la fuente de donde ella nace? Cierto, que habia de hacer lo que hacen los sabios médicos, que es inquirir y descubrir las causas de la enfermedad, y aplicar los remedios contrarios para der salud al enfermo: y por esto nuestro médico celestial nos enseñó y predicó la humildad contra la soberbia : la pobreza de espíritu contra la codicia; y la aspereza y penitencia contra el desordenado deleite y regalo. Y ¡torque los ejemplos son mas eficaces que los consejos, y las obras mas que las palabras, este médico sapientísimo y maestro divino comenzó luego en su primera entrada en el mundo á enseñarnos con su ejemplo lo que en toda su vida y muerte nos habia de predicar: y en el establo donde nació puso una cátedra de celestial sabiduría y contraria á la vana filosofía de ta carne; [¡ara quo viendo una humildad tan profunda y una pobreza tan extremada, y un desabrigo y desamparo tan extraordinario, entendiésemos nuestra enfermedad : y viendo que mies- Iro médico toma la medicina amarga (nó porque él tuviese de ella necesidad, sino porque los enfermos ta lomamasen), nos animásemos nosotros á tomarla sin asco y horror. Pues si para esto venia; ¿de qné otra manera habia do venir? ¿ílabia de venir con fausto y pompa, viniendo á curar nuestra soberbia? ¿Ilabia de venir lleno de riquezas, viniendo á desterrar la codicia desordenada do ellas? Ilabia do venir lleno de regalos y delicias, viniendo á condenar la demasía de ellas? Porque si un contrario se cura con otro contrario, el médico de estos males ¿cómo habia de venir, sino con medicina de virtudes contrarias á ellos? ¿Cómo habia'de persuadir que lo que nos ensoñó era lo mejor, si para sí tomaba lo contrario? ¿Cómo habia de acabar con los hombres que so vistiesen de este hábito del hombro nuevo, si él venia vos-

DÍA 25.<br />

DICIEMBRE,<br />

mirando al cielo, oyó una voz, que le dijo : Gregorio, ya<br />

estás coronado: ya oslas escrito en el número <strong>de</strong> mis<br />

santos y escogidos ; entra en mi reino, bendito <strong>de</strong>l Sefior,<br />

preparada Uenes la silla do gloria y habitación eterna: y<br />

antes que acabase el ángel <strong>de</strong> pronunciar las referidas<br />

palabras, le corló el verdugo la cabeza sacrosanta, y voló<br />

su benditísima alma al ciclo con el mismo ángel que le<br />

hablaba y llamaba , á ocupar la silla para que le convidaba.<br />

Fue su martirio glorioso á 21 <strong>de</strong> diciembre (dia eq<br />

que le celebra la Iglesia ) por los afios <strong>de</strong>l Sefior <strong>de</strong> 303,<br />

imperando los ya referidos Diocleciano y Maximiano.<br />

Quedó el santísimo cuerpo dividido <strong>de</strong> la sacrosanta cabe-<br />

M: y no contento el tirano con la suma <strong>de</strong> tormentos, que<br />

en 61 habia ejecutado cuando vivo , pesaroso <strong>de</strong> no haberle<br />

echado ánles <strong>de</strong> <strong>de</strong>gollarle á las fieras, como<br />

estaban en el anQtealro, mandó Tircano que las soltasen.<br />

Hiciéronlo así: salieron rabiosísimas y feroces las<br />

fieras: partieron para el santo cuerpo ; pero apenas llegaron<br />

á 61, cuando mansas y humil<strong>de</strong>s se le postraron , 6<br />

inclinando sus cabeaas, le veneraron. Estaba toda laciudad<br />

mirando el espectáculo , y á gran<strong>de</strong>s voces esclamó la<br />

turba : ; Verda<strong>de</strong>ramcnlo es gran<strong>de</strong> el Dios <strong>de</strong> los cristianos<br />

1 y creyeron infinitos en Jesucristo y se bautizaron.<br />

Al mismo tiempo el tirano Flacco fuó herido por un<br />

ángel : conque vomitando las entraflas , espiró rabiosamcnle.<br />

El sanio cuerpo quedó en medio <strong>de</strong>l anfiteatro , y<br />

una señora cristiana, llamada Abundancia, se fuó á Tircano<br />

y le compró el santísimo -cuerpo por treinta y cinco<br />

doblones que pidió el tirano por c!, dándolos muy gozosa,<br />

y haciendo gracias á nuestro Señor , cantando himnos y<br />

salmos lo sepultó (envuelto en bálsamo, nardo y preciosos<br />

aromas) junto al puente <strong>de</strong> piedra y rio llamado Sanguinario,<br />

cerca <strong>de</strong> los muros <strong>de</strong> la ciudad ; cuyas reliquias tiene<br />

hoy en gran veneración la iglesia mayor <strong>de</strong> Colonia<br />

con los cuerpos <strong>de</strong> los santos tres reyes Magos, que vinieron<br />

al portal <strong>de</strong> Belén á adorar al recién nacido infante<br />

Jesús. Escribieron esta prodigiosa historia y marlirio <strong>de</strong><br />

san Gregorio, Beda ; Usuardo ; Adon; Mombricio, tom. u;<br />

Surio, tom. vi; Pedro <strong>de</strong> INatalibus, vi Calhaíogo Sánelorum<br />

, lib. icap. 88 ; el Martirologio romano y Baronio<br />

en sus anotaciones, y en el lom. n <strong>de</strong> sus Anales, año 303,<br />

núm. 121, y afio 3^8, núm . lü.<br />

Por dar nueva vida á la vida la perdió el autor <strong>de</strong> ella.<br />

En la historia presente y marlirio <strong>de</strong>l santísimo sacerdote<br />

Gregorio ( que por prodigioso pue<strong>de</strong> servir <strong>de</strong> i<strong>de</strong>a y libro<br />

<strong>de</strong> memoria para todos los <strong>de</strong>más) , se ve esta verdad.<br />

¿ Cuántos géneros <strong>de</strong> muertes pa<strong>de</strong>ció? No hay duda, que<br />

laníos cuantos fueron los tormenlos, á quo le expuso el tirano.<br />

¿ Luego murió muchas veces ? Si. ¿ Pues quién le<br />

daba tantas vidas ? La vida que vivia y por quien moria<br />

que era Cristo. A su vida sola el menor tormento era<br />

muerte : pero fortalecido <strong>de</strong>l Autor <strong>de</strong> la vida , tuvo vida<br />

para lanías muertes , hasta que gozoso el mismo Dios , y<br />

glorioso en sus triunfos , le coronó en la última muerlo<br />

' con la vida eterna, que poseo coa el mismo Jesucristo<br />

con quien por su intercesión vivamos lodos. Amen.<br />

* L\ CONMEMOIUOON CE CÜAttEMA SANTAS V(R6SNES MÁll-<br />

TitiES.—Cuando la persecución <strong>de</strong>l emperador Decio en<br />

los años 231, murieron estas santas , martirizadas en la<br />

ciudad <strong>de</strong> Anlioquía.<br />

<strong>Los</strong> SANTOS LUCIANO, MIÍTROBIO, PAULO, CENOBIO, TEÓTI<br />

M0 Y DRUSO , MÁUTiRES.—Sufrieron por ía fé <strong>de</strong> Cristo , y<br />

TOMO RI,<br />

ganaron la palma <strong>de</strong>l martirio en Trípoli,<br />

que lo fueren en Boma.<br />

£09<br />

Gülesino dice<br />

SAN EUTIMIO ó LUTIMIO, MAUTUI.'—Viendo el valor y la<br />

constancia con que iban al martirio los efistíanos , abrazó<br />

con ardor una religión tan sublime , y en tiempo <strong>de</strong><br />

la persecución <strong>de</strong> Diocleciano fué martirizado en Nicomedia.<br />

SAN DELFÍN, OBISPO T CONFESOR.—En liempo <strong>de</strong>l emperador<br />

Teodosio fué un mo<strong>de</strong>lo por su vida ejemplar y por<br />

su práctica <strong>de</strong> las virtu<strong>de</strong>s que conslituyen un buen prelado<br />

<strong>de</strong> la Iglesia. Murió en Bur<strong>de</strong>os en 403.<br />

LAS SANTAS TARSILIA Y EMILIANA, VÍRGEXES.—<strong>Tres</strong> lias<br />

tuvo Gregorio el Gran<strong>de</strong>. Tarsilia, la mayor, Emiliana y<br />

Gordiana. La primera es nombrada en el Martirologio remano,<br />

y lanío ella como la segunda han sido muy veneradas<br />

por sus eminentes virtu<strong>de</strong>s.<br />

SANTA IRMINA ó IRMIA, VÍKGEN.—Ilija <strong>de</strong>l rey Dagobcrlo<br />

segundo, rey <strong>de</strong> Austrasia. El Martirologio romano la<br />

nombra en este mismo dia. Murió á fines <strong>de</strong>l siglo Vil.<br />

DIA 23.<br />

LA NATIVIDAD DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO.—En el <strong>de</strong>votísimo<br />

y suavísimo misterio <strong>de</strong>l nacimienlo<strong>de</strong> Jesucrislo<br />

nuestro Be<strong>de</strong>ntor, cuando salió <strong>de</strong> las entrañas purísimas<br />

<strong>de</strong> la Virgen María nuestra Señora, su Madre, lies cosas<br />

piincipalmente <strong>de</strong>bemos consi<strong>de</strong>rar; la primera: ¿por que<br />

este Señor y Dios inmortal, habiendo <strong>de</strong>terminado por su<br />

inmensa bondad vestirse <strong>de</strong> nuestra carne y aparentar con<br />

nuestra naturaleza, quiso nacer con una extremada pobreza,<br />

y con una humildad suma y trabajosa en el portal<br />

<strong>de</strong> Belén, y ser reclinado en un pesebre <strong>de</strong> bestias?<br />

La segunda cosa es consi<strong>de</strong>rar atentamente la historia<br />

evangélica y el modo con que osle Señor nació; y la torcera<br />

los ejemplos que en este su nacimiento nos dió, y Jas<br />

virtu<strong>de</strong>s que mas resplan<strong>de</strong>cen en él y nosotros <strong>de</strong>bemos<br />

imitar.<br />

Las causas por que aquel sumo ¡nfinilo 15ien y Bey soberano<br />

<strong>de</strong> todo lo criado <strong>de</strong>scendió <strong>de</strong>l cielo á la tierra, y<br />

no tuvo asco <strong>de</strong> vestir <strong>de</strong> nuestra naturaleza, tratamos (

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