Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
DIA 19.<br />
y li.m sida respeíados en tanto grado, que los mismos<br />
bárbaros que saquearon y <strong>de</strong>struyeron la ciudad <strong>de</strong> Roma,<br />
no se atrevieron á tocar cosa <strong>de</strong> ellos, ni hacer daño á persona<br />
que á ellos se acogiese, por tenerlos por lugares <strong>de</strong><br />
refugio, privilegiados é inviolables, como mas largamente<br />
lo dijimos en la vida <strong>de</strong> san Pedro, á los 29 dias <strong>de</strong>l mes<br />
<strong>de</strong> junio. Otros templos edificó el emperador Constantino,<br />
que referimos en la fiesta <strong>de</strong> la Edificación <strong>de</strong> la basílica ó<br />
iglesia <strong>de</strong>l Salvador, que es á los 9 <strong>de</strong> este mes <strong>de</strong> noviembre.<br />
El Martirologio romano hace mención <strong>de</strong> la<br />
Dedicación <strong>de</strong> la iglesia <strong>de</strong> San Pedro y San Pablo, y el<br />
car<strong>de</strong>nal Baronio en sus anotaciones, y en el ni tomo <strong>de</strong><br />
sus Anales, trata docta y copiosamente <strong>de</strong> ella.<br />
* SAN ROMÁN, MÁRTIR.—Yivia este santo en un pueblo<br />
<strong>de</strong> la jurisdicción <strong>de</strong> Cesárea en Palestina, <strong>de</strong> cuya Iglesia<br />
era diácono. Apenas se encendió el fuego <strong>de</strong> la persecución<br />
contra los cristianos, cuando Román se separó <strong>de</strong> su<br />
resi<strong>de</strong>ncia á fin <strong>de</strong> exhortar á los cristianos que combatieran<br />
valerosamente contra los enemigos <strong>de</strong> la religión.<br />
Hizo también un viaje á Anlioquía, con el fin <strong>de</strong> animar á<br />
los cristianos que se hallaban expuestos á las mas duras<br />
pruebas. Llegó á la córte <strong>de</strong>l juez Asclepía<strong>de</strong>s, y sabedor<br />
<strong>de</strong> que algunos cristianos que estaban en la cárcel vacilaban<br />
en la fe, los exhortó á la constancia, haciéndoles presente<br />
las <strong>de</strong>licias <strong>de</strong> la gloria y las penas eternas <strong>de</strong>l infierno.<br />
Sabedor el juez <strong>de</strong> su conduela, lo hizo pren<strong>de</strong>r,<br />
Uiego azotar y <strong>de</strong>scarnar todo el cuerpo, con<strong>de</strong>nándolo á<br />
ser quemado vivo. En aquella sazón llegó el emperador<br />
Diocleciano á Antioquía, y consi<strong>de</strong>rando que este era poco<br />
suplicio, mandó le fuese cortada la lengua hasta la raiz.<br />
Dios í-in embargo permitió no perdiera por esto el santo<br />
« uso <strong>de</strong> la palabra, continuando sus exhortaciones, y<br />
dando gracias al Todopo<strong>de</strong>roso. Fué conducido otra vez á<br />
la cárcel <strong>de</strong> or<strong>de</strong>n <strong>de</strong>l emperador Diocleciano, y fué pues-<br />
!o en el cepo con grillos, esposas y pesadísimas argollas,<br />
permaneciendo así mucho tiempo, basta que por último<br />
fué <strong>de</strong>gollado <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> la misma cárcel, el dia 17 <strong>de</strong> noviembre<br />
<strong>de</strong>l afio 303.<br />
SAN BAHULAS, MÁRTIR.—Era un niño cristiano <strong>de</strong> Antioquía,<br />
que presenció el martirio <strong>de</strong>l santo anterior. Habiéndole<br />
preguntado san Román <strong>de</strong>lante <strong>de</strong> los verdugos, sí<br />
era mejor adorar un solo Dios ó muchos dioses, respondió<br />
que solo se <strong>de</strong>bia dar culto al Dios que adoraban los cristianos,<br />
por cuyo motivo en seguida allí mismo le azotaron,<br />
y luego le <strong>de</strong>gollaron. Su madre, que se hallaba presente,<br />
no cesó <strong>de</strong> animarle, y haciéndole superior á los senlimientos<br />
<strong>de</strong> la naturaleza, vió cortarse la cabeza con tranqmbdad<br />
y hasta con alegría. Su martirio acaeció el mismo<br />
día n <strong>de</strong> noviembre <strong>de</strong>l aflo 303. En el antiguo Breviario<br />
<strong>de</strong> Toledo, se hace memoria <strong>de</strong> este santo, bajo el<br />
nombre <strong>de</strong> san Teódulo. -<br />
SAN ESIQU.0, MÁRT.a.-Tambien sufrió el martirio en<br />
Anhoquía, casi al mismo tiempo que san Román. Era soldado<br />
legionario e:n dicha ciudad, y habiendo oido publicar<br />
un edicto, por el que se mandaba que lodos los que no<br />
adorasen a los ídolos <strong>de</strong>jasen el cíngolo militar, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> luego<br />
lo <strong>de</strong>jó, confesando en alta voz el nombre <strong>de</strong>'josueristo<br />
Por cuya acción le ataron una gran piedra á la mano <strong>de</strong>recha<br />
y le precipitaron en el rio <strong>Oro</strong>ntes. don<strong>de</strong> consumió<br />
su glorioso martirio, el año 303.<br />
SAN ORÍGÜLO Y sus COMPAÑEROS MÁRTIRES.—Fueron sacriücados<br />
al furor délos vándalos en Africa, durante el si-<br />
NOVIEMBRE. 405<br />
glo V, por no querer servir <strong>de</strong> instrumento á las supersticiones<br />
<strong>de</strong> lo» bárbaros.<br />
SAN ODÓN, ABAD Y CONFESOR.—San Odón nació en Tours<br />
el aíío <strong>de</strong> 879, y fué hijo <strong>de</strong> un tal Abbon, sefior <strong>de</strong> la<br />
primera nobleza. Pasó sus primeros años en la compañía<br />
<strong>de</strong> Foulco, con<strong>de</strong> <strong>de</strong> Anjou, y <strong>de</strong> Guillermo, duque do<br />
Aquitania. Des<strong>de</strong> su infancia mostró el siervo <strong>de</strong> Dios gran<strong>de</strong><br />
afición á la oración y al recogimiento; y á la edad <strong>de</strong><br />
diez y nueve años recibió la tonsura clerical y fué nombrado<br />
canónigo <strong>de</strong> Tours. Des<strong>de</strong> entonces renunció al estudio<br />
<strong>de</strong> los autores profanos, y se <strong>de</strong>dicó enteramente<br />
al <strong>de</strong> tas santas Escrituras. Fué á París á estudiar la sagrada<br />
teología, encerrándose á su vuelta á Tours en una<br />
pequeña celda, don<strong>de</strong> se entregó á la meditación y á la<br />
penitencia; aprendiendo en ella, que todo era vanidad en<br />
el mundo, y que solo se <strong>de</strong>bia buscar ya en la tierra el<br />
reino <strong>de</strong> Dios. Renunció, pues, su canongía y tomó el hábito<br />
en 909, en el monasterio <strong>de</strong> Baume en la diócesis <strong>de</strong><br />
Besanzon. Después <strong>de</strong> algunos años se trasladó á ta abadía<br />
<strong>de</strong> Cluni, cuyo gobierno se le confió. La regularidad<br />
que en este monasterio se observaba y la santidad <strong>de</strong> los<br />
que le habitaban, se conformaban perfectamente con el<br />
espíritu <strong>de</strong>l nuevo abad, que solo aspiraba á que él y sus<br />
hermanos pudiesen llegar al último grado <strong>de</strong> la vida perfecta.<br />
Bajo este concepto planteó en su monasterio la primitiva<br />
regla <strong>de</strong> san Benito, cuya reforma fué adoptada<br />
<strong>de</strong>s<strong>de</strong> luego por otra porción <strong>de</strong> monasterios, y lodos se<br />
pusieron bajo la jurisdicción <strong>de</strong>l <strong>de</strong> Cluni. Así se formó<br />
aquella célebre congregación que tantos beneficios ha hecho<br />
á la religión y á las letras, y cuya importancia en la<br />
civilización <strong>de</strong> la Europa han reconocido hasta ios sabios<br />
<strong>de</strong>! si^lo XIX. <strong>Los</strong> papas y muchos príncipes tuvieron gran<br />
confianza en tas virtu<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l santo abad <strong>de</strong>Cluni y le encargaron<br />
muchas comisiones importantes, las cuates <strong>de</strong>sempeñó<br />
siempre con feliz suceso. Como toda su vida habia<br />
profesado particular <strong>de</strong>voción á san Martin, quiso acabar<br />
sus dias en Tours, y efectivamente el Señor coronó sus<br />
<strong>de</strong>seos; pues hallándose gravemente enfermo y presintiendo<br />
su último fin, se hizo llevar á esta última ciudad,<br />
y murió en ella el dia 18 <strong>de</strong> noviembre <strong>de</strong>l año 942.<br />
SAN MÁXIMO, OBISPO Y CONFRSOR.—Floreció siendo obispo<br />
<strong>de</strong> Maguncia en tiempo <strong>de</strong>! emperador Constancio. Sufrió<br />
muchísimas persecuciones <strong>de</strong> parte <strong>de</strong> tos arrianos, y fué<br />
siempre ilustre en sostener los <strong>de</strong>rechos <strong>de</strong> la Iglesia católica.<br />
El año 3iG presidió a! concilio <strong>de</strong> Sardis, y murió<br />
esclarecido confesor <strong>de</strong> Jesucristo el año 353, según el<br />
car<strong>de</strong>nal Baronio.<br />
SANTO TOMÁS, MONGE.—NO sabemos la época en que<br />
vivió, <strong>de</strong> modo que su fiesta se celebraba con gran solemnidad<br />
en Anlioquía, cuyos habitantes guardaban la antigua<br />
tradición <strong>de</strong> que una vez fueron librados <strong>de</strong> los estragos<br />
<strong>de</strong> la peste por las oraciones <strong>de</strong>l santo.<br />
DIA 19,<br />
SAN PONCIANO, PAPA Y MÁRTIR . —Por la muerte <strong>de</strong> san Urbano,<br />
papa y mártir, fué puesto en la silla <strong>de</strong> san Pedro san<br />
Ponciano, natural <strong>de</strong> Roma, hijo <strong>de</strong> Calfurnio, varón santo<br />
y muy digno <strong>de</strong> aquella santa silla. Gobernó algunos años<br />
pacíficamente con gran<strong>de</strong> aprobación <strong>de</strong> lodo el clero y<br />
pueblo romano; porque á la sazón imperaba Alejandro Severo,<br />
hijo <strong>de</strong>Mamca, el cual fué justo principe y no ene-