Tomo Tres Leyenda de Oro -Vidas de Los Martires-

DÍA 14.
inudios moros: con que se dobililaron los contrarios,
y últimamente fueron vencidos del lodo, como acabamos
de decir : y afirma el arzobispo don Rodrigo , que con
quedar muertos laníos moros , no se veia en el campo
rastro de sangre ; para signilicar, á lo que parece, que
esta victoria no se debió á las armas españolas , sino á
esfuerzo mas soberano. Celébrase esla victoria en los
reinos de España á los 16 de julio, cou nombre del triunfo
de la Cruz, por baberse alcanzado por virtud de la sania
cruz, y porque a su vista cayeron muertos muebos moros
, y pudiera celebrarse también con nombre del latrocinio
de María, por haberse alcanzado por su intercesión,
y haber muerto con su vista sola tanta muchedumbre de
infieles. Cuentan muchos autores esta victoria ; y entre
ellos Spinelo dice , que desde este tiempo se empezó á
guardar en España el sábado , por ser dia dedicado á
nuestra Señora, la abstinencia de carne que hoy se
usa, comiendo de grosura ; y cita á Valerio, español.
San Fernardo, 111 de Castilla, que sujetó;» toda España
y echó de ella á los moros, y los hizo tributarios , y trayendo
las armas en la mano treinta y cinco años , consiguió
lanías victorias comodió batallas, y siempre fué vencedor,
nunca vencido; ¿quién nosabeque lasalcanzótodaspor
el patrocinio de María santísima, la cual se alistaba siempre
en sus ejércitos si puede decirse así? porque el devotísimo
rey llevaba consigo á todas sus conquistas imágenes de
nuestra Señora que marchaban al paso de los reales, y una
de ellas fijaba en el arzón de la silla de su caballo, cuando
entraba á pelear, para que su vista infundiese alieniosen
su corazón y pavor en el de los contrarios, y fuese María
como nn astro favorable ó mimen propicio de sus batallas
que influyese en su ejército las victorias. Por eso cuando
ganó á Sevilla, que fué la última de sus conquistas, hizo el
santo rey que entrase triunfando María santísima en aquella
ciudad en su imágende los Reyes para rendir los triunfos
á aquella de quien reconocía las viclorias. Lo mismo
cuentaNicelas del emperador Juan Comneno, que habiendo
conseguido muchas viclorias con el favor de María santísima,
volviendo á Constanlinopla hizo fabricar un carro
triunfal de piala adornado de piedras preciosas, obra admirable
en quecompetian el arle y la riqueza, é hizo poner
en él una imagen de nuestra Señora para que entrase en
la ciudad con triunfo : confesando el emperador deber todas
sus viclorias á María santísima comoá invencible compañera
y señora de su imperio. De Manuel Comneno, emperador,
cuenta también Nicetas, que habiendo alcanzado
una insigne victoria porMaría santísima, dispuso un triunfo
con grande pompa y aparato, en que precedían muchos
cautivos, y después se seguía un carro triunfal con una
imagen de la Virgen María que liabia cautivado á todos: á
los enemigos del imperio con las armas, y al emperador
con el beneficio de la victoria. Del emperador Zimisa refiere
semejante ejemplo Zonaras; y Nicéforo Gregoras del
emperador Miguel Paleólogo. Pero volviendo á nuestra
España, las celebérrimas y continuas victorias de Jaime
el Conquistador, rey de Aragón, justamente las atribuyen
todos al patrocinio de María santísima, y muy en particular
la vicloria que alcanzó de los moros junto á Valencia
don Rernardo Guillen; porque siendo mucho mavor el número
de los moros que el de los cristianos, este valeroso
capitán confiado en el patrocinio de Ma^ santísima acometió
animosamente á los enemigos esperando (pie los'pocos
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podrían vencer á los muchos: y dice Rernardino Gómez en
la vida de! rey don Jaime, que invocando los cristianos el
nombredeMai ía, al puntoempezaron á huirlos sarracenos y
eu aquel lugar se fabricó un templo á la Virgen en memoria
de tan insigne victoria alcanzada con su favor y ayuda.
Fueron los dos reyes Fernando y Jaime devotísimos de María
santísima: Jaime la consagró casi dos mil templos; y
Fernando muchos mas: con esto no es maravilla que conquistasen
ciudades, sino reinos, y que no sintiesen nunca
contraria la fortuna; porque tenían en su favor á María
santisima que fijó su rueda (ya que hablamoscon términos
humanos'1, para que desmintiendo lo mudable, favoreciese
constantemente á estos dos príncipes llénanos, y fuese
símbolo de perpetua felicidad para ellos la rueda que en
la fortuna es para todos jeroglífico de la mudanza.
Paso de corrida por otras victorias que eran dignas de
mayor ponderación. Alfonso XI, rey de Castilla, con el favor
de María alcanzó aquella insigne victoria del Salado
cerca de Tarifa, en que mató doscientos mil moros, y cautivó
una grande multitud con muerte de solos veinte cristianos.
Alfonso I, rey de Porlugal, fué tan devoto de María
santísima, que pusoá sí y ásu reino y sucesores debajo del
patrocinio de sania María de Claraval, donde eraá la sazón
abad san Bernardo, y quiso que pagasen perpetuamente
á su iglesia ( ierla cantidad á manera de tributo y
vasallaje; y por lan insigne piedad mereció queMaríasantísima
le diese insignes victorias de los mahometanos. Semejante
fué la devoción de Alfonso V de Portugal para
con María, el cual pasó á Africa y quitó á los moros á Arcilla,
habiendo prometido á María sanlisima un caballo de
plata con un rey de la misma materia; y ganada felizmente
la ciudad cumplió su voto y edificó un templo á la Conquistadora
do esla fortaleza. ¿Qué diré de don Juan el II,
rey de Castilla, que visitando el templo de Guadalupe, y
ofreciendo oraciones y dones ásu altar, reprimió y venció
á los sarracenos, ganándoles muchos lugares? ¿Qué de
Ramiro el II, rey de León, que invocando el favor de María
santísima contra un ejército de doscientos mil moros, le
envió la Reina del cielo dos soldados que según unos fueron
ángeles y según otros Santiago y san Emiliano, con
cuyo socorro alcanzó una milagrosísima victoria matando
ochetUa mil moros, y cautivando á su rey? ¿Qué de Sancho
I, rey de Portugal, que ganó délos moros junto á Sevilla
aquella célebre batalla, cuando el Belis, rojo con la
sangre mahomelana, corrió por mucho espacio publicando
la vicloriaque atribuye Belinghan á María santísima? ¿Qué
de Fernando I, rey "de Aragón, singularísimo devoto de
María santísima, con cuyo favor alcanzó grandes victorias;
porque cuando él salía á campana, la reina doña Leonor,
su mujer, iba muy de mañana descalza acompañada de dos
criadas solamente á visitar una iglesia de Nuestra Señora?
¿Qué de Fernando el Católico, que conquistó el reino de
Granada, con que acabó de desterrar á Mahoma de España,
y traía siempre consigo una imágen de nuestra Señora
en sus ejércitos, la cual después de ganada la ciudad do
Málaga, entregóá los frailes mínimos do san Francisco do
Paula, con nombre de la Virgen de la Vicloria; dando á
entender que todas las \ictoi as y triunfos que había alcanzado,
los debía á María Santísima? Finalmente en esta
cuenta pueden entrar casi todos los reyes de España desde
Pelayo hasta Fernando el Católico; porque como si tuvieran
por horóscopo de su nacimiento y estrella de sus
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