Tomo Tres Leyenda de Oro -Vidas de Los Martires-

ni A 13.
á daríc mus á D¡ÜS , conociendo que lodas las riquezas y
bienes de la lien a son caducos y frágiles, que se alcanzan
con mucho Jrabajo, se poseen con temor, se pierden
con dolor y que no pueden liarlar la sed de la codicia humana
; delerminó buscar aquel tesoro que siempre dura,
y repartiendo de su hacienda á los pobres , comprar el
cielo. Hacia limosna á los pobres con tanta liberalidad y
afecto, que no aguardaba á que se la pidiesen, sino que
61 los prevenia y los buscaba para dársela. Consolaba á
los afligidos , amonestaba á los que erraban , enseñaba á
los ignorantes, perdonaba á sus enemigos, daba buen
consejo á los que se le pedian; en suma era refugio, alivio
y amparo de lodos los necesitados y menesterosos:
fué eslo de manera, que á una voz era tenido y llamado
padre de los pobres. Como la mujer de nuestro
Ilomobotio vió á su marido tan maniiolo con los
pobres, temiendo que al mejor tiempo se menoscabaria
y le faltarla su hacienda, comenzó á rogarle no
la disipase: al principio con blandas y amorosas palabras
y ruegos; y después (viendo que lodo eslo no
bastaba) con quejas , injurias y modos pesadosé indignos
de una mujer pai a con su marido. Pero como estaba fundado
sobre la roca y nó sobre la arena , no se movia por
los voces de la mujer, que á guisa de aire y lluvia le combalian
, antes la ensenaba que no se menoscaba la hacienda
que por manos de los pobres se da á logro á Jesucristo
, ej cual en esla vida la paga dando ciento por uno,
y en la olí a la gloria scmpilerna. Y para que se entendiese
que no eran palabras las que Ilomobono decia, sino verdad
de Dios, le aconleció una vez en tiempo de una gran
carestía , que volviendo de la iglesia á su casa , le siguie-
»on muchos pobres, y 61, estando su mujer ausente, con
maravillosa alegría les reparlió la mayor parle de una
cesta de pan que le habla traido; y á la noche á la hora
decena, se hallaron en el arca tantos panes cuantos eran
los que él había dado, pero mucho mas blancos y mas
sabrosos : de lo cual la mujer quedó espantada; y el santo
le mandó que no lo dijese. Otra vez, yendo á una heredad
suya (que solo habia guardado para sustentarse á sí
va los pobres con los frutos de ella), y llevando vino
para los labradores, encontró muchos pobres en el camino
que le pidieron de beber, y él se les dió de buena gana,
quedando vacíos los frascos que llevaba. No quiso volver
para henchirlos de vino á su casa , temiendo la mala condición
de su mujer por no desabrirse con ella; y por olra
parle, queriendo proveer á la gente que tenia en el campo
de bebida, llenó el sanio varón de agua los frascos y echóes
su bembemn. líebieron de ellos los labradores, y halaron
que era excelentísimo vino, y preguntaron á Homobono
dónde hab.a hallado aquel vino tan escogido; y él,
creyendo que hacían burla de él, bebió de un frasco y
hallo que era verdad y qile e, agna se ^ MWiiáo
en vmo, c h.zo gracias á nuestro Sefior, y calló y disimuló
y procuró encubnrlo por huir la vanagloria ; mas Dios ío
manifestó por un hombre que le vió echar el agua y después
probó que era vino.
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Fué asimismo muy devoto y muy dado á la oración en
la cual no solo gastaba buena parte del dia, sino también
las noches. Iba siempre á maitines, y era tan infalible el
ir cada noche á la iglesia de San Gil para oirlos que el
cura, que se llamaba Oberlo, en locándola campana iba
luego á abrir la puerta de la iglesia para que Domobono
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entrase; pero no pocas voces le aconteció ver al santo
orando dentro de su iglesia sin haber él abierto la puerta;
porque hallándola el santo cerrada , cuando venia ántes
de tiempo , Dios se la abria milagrosamente, Con estos
milagros y con su santísima vida convirtió á muchos y
muy pertinaces herejes á la sania fé católica i á los cuales
algunos varones doctos y religiosos con sus grandes letras
y argumentos no habian podido reducir. Finalmenle, el
afío del Sefior de 1197 , se fué como solia, á la noche á
mallines sano y bueno: y después de acabados, se puso
en oración de rodillas delante de una cruz, y estuvo cu
ella hasta la hora de misa ; y al tiempo que el sacerdote
decia la gloria, extendió sus brazos en forma de cruz, y
allí sin enfermedad ni ruido alguno , dió su bcndilo espíritu
al Sefior á los 13 de noviembre. Halláronle muerto de
esta manera; y luego por loda la ciudad voló la fama
que san Homobono era muerto; y concurrió innumerable
multitud de gente para verle , y locar y reverenciar
sus preciosas reliquias. Enleiráronle en la
misma iglesia de San Gil con muchas lágrimas, ternura
y sentimiento; y Dios nuestro Sefior hizo por él
muchos milagros, dando piés á los cojos, vista á los ciegos,
lengua á los mudos, oido á los sordos y salud á los enfermos
de varias dolencias, y otros milagros que se pueden
ver en su vida : por los cuales, y por sus grandes virtudes
y conocida santidad, el papa Inocencio 111 le canonizó
y puso en el catálogo de los sanios, á los 22 de diciembre
del año 1193, y en el primero de su pontificado. Después,
el año de 13ij6 se abrió su sepulcro; y al año siguiente
de 13;n, á los 23 de junio, se trasladó su sagrado cuerpo
á la iglesia mayor, y se colocó honorilicamenle en un arca
de mármol, donde está ; y la ciudad de Cremona recibe
por su intercesión muchos y grandes beneficios del Señor.
Su vida escribió la Iglesia de Cremona, y la bula de su
canonización Iráela Fr. Lorenzo Surio en el sexto tomo.
Hace mención de él el Martirologio romano, y el cardenal
üaronio en sus anotaciones á los 13 de noviembre, y Pedro
de Nalalibus, libro x, cap. 36 ; y Gerónimo Vida, obispo
de Alva, escribió en verso un himno en su alabanza.
* Los SANTOS VALENTÍN, SOLUTOB Y VÍCTOR, MÁUTIRI-S.—
Cuando imperaba Diocieciano, sufrieron el martirio estos
santos en la ciudad de Uavena, acabando sus vidas siendo
degollados, después de haber tolerado varios tormentes.
SAN MITRIO, MÁRTIR.—San Gregorio de Tours, dice Godescard,
que hace honrosa mención de San Mitrio, remite
el lector á la historia de su vida; pero esla obra no ha llegado
á nuestro conocimiento. Parece que este santo sufrió
marlirio en tiempo de Diocieciano, en Aix de la Provenza.
Añádese que padeció varios tormentos, lodos muy crueles;
pero que ninguno de ellos fué capaz de vencer su constancia,
y que los sufrió hasta con alegría. San Milrio es el pa -
tron principal de Aix, donde se celebra su Gesta en esle
dia. Ll mismo san Gregorio añade, que Dios glorificó su
sepulcro por medio de muchos milagros.
Los SAxNios ANTONINO, ZEBINAS, Y GERMÁN, MÁRTIRES, T
SANTA ENNATA, VÍRGEN Y MÁRTIR.—Por los edictos del bárbaro
Maximiano, se encendió en Cesárea de Palestina una
persecución do las mas espantosas que ha visto la Iglesia.
En lo mas fuerte de la persecución, el presbítero Antonino
y sus dos compañeros, Zebinas y Germán, se presentaron
al gobernador Firmiliano, y lé confesaron generosamcnle