Tomo Tres Leyenda de Oro -Vidas de Los Martires-

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DIA 2Í. OCTUBRE. 277 Ha gran pena qac cada instante parecía caerse: rogó al sanio quo se saliese de la cueva mientras la derribaban, teniendo por cierto que al caer hundiria la cueva y malaria al santo glorioso; pero él dijo, que de ningún modo saldría do su cueva; que ellos hiciesen lo que fuesen servidos. Al fin comenzaron,su obra: y cuando mas instrumentos le habían puesto para que no cayese por aquella parle, se les fué de repente de las manos, y cayó aquel corpulento peñasco por donde todos juzgaron haría diez mil pedazos al santo y su cueva; pero el Señor lo ordede otra suerte, enviando un ángel que lo llevase en el aire, hasta salvar la cueva y habitación de su siervo i con que cayó después en tierra, sin causar el menor daño ni susto al glorioso santo; que aun no quiso su divina Majestad 1c divirtiese el ruido ó susto, de la oración y contemplación en que estaba. Quedaron todos maravillados del prodigio, y dieron á Dios iníinitas gracias, y Maicio mas quo todos. Púsose una cadena á un pió al instante que se fué á vivir á aquel monte, para no poder salir de su cueva en todos los días de su vida, n¡ moverse mas que el corlo espacio de la cadena, que era corta y tenia el remate clavado en el peñasco. Tuvo noticia el glorioso padre san Benito do Marcío, y de la prisión en que se habia puesto tan estrecha y trabajosa, y envióle á decir por un discípulo suyo estas palabras solas: Sí eres siervo de Dios, no le prenda ni le ale la cadena de hierro, sino la cadena de Cristo. iCosa rara! Apenas oyó estas palabras, cuando se quitó la cadena del pié; pero quedó tan preso sin ella, que jamás se apartó, ni pur un instante, de! mismo lugar cn que le podía tener preso y atado la cadena; porque la obediencia le aprisionó con Cristo, suave y divina cadena. A la fama de su gran santidad se siguió, no solo el concurso ya referido de gente que se venia á valer do sus oraciones, sino también el tener muchos discípulos, que, á imitación suya, se quedaban á vivirjen aquel desierto, cerca de la cueva del bendito Marcío. Estos tenían un pozo, de donde sacaban el agua que habían menester; pero cada día se rompía la soga con que ataban el cubo ó herrada con que la sacaban. Teníase el glorioso sanio la cadena en que á los principios se ató, como dijimos, en la cueva : pidiéronsela, y él la dio al instante: atáronla á un pedazo de la soga de esparto con que sacaban el agua; was (¡ó virtud divina!) al instante que la soga locó aquella cadena que había tenido atado y preso el bendito pié de Marcío, se bízo tan fuerte, como sí fuese también de hierro como la cadena, sin que jamás se rompiese ni tuviesen mas cuidado deque se les rompería. Al fin, lleno de días Y nulagros, descansó en el Señor, entregándole su bendita alma (para que la coronase en su gloria) á los 24 de octubre [dia en que la Iglesia celebra su fiesta) por los años del Señor de íifiO. Escribieron su vida el dicho san Grte* gono Magno en el lugar citado; san Gregorio Turonense, Be slonaconfes., cap. w • pedl,0 de Nala]ibllS) in Calha_ lo& mm., hb. ix, cap. 102; ei Martirologio romano, y Baromoensus anotaciones. Dante los dichos padres dos nombres a nuestro glonoso santo : uno es Marcío, y otro Maitm; pero lo común es llamarle Marcío: y as lo llama el Marfrologio romano. También hace mención de él WenmDevmSülusl.ordm.S.Bencdicii,lib ,„ cap ¿ * SAN BERNARDO GÍLVÓ, OBISPO Y cojíFEsoa.—En el arzobispadodo Tarragona, parroquia do Villaseca y en una casa de campo llamada Mas Calvó, nació Bernardo. Descubrióse en él desde niño grande afición á las letras, y también grandes deseos de servir á Dios; por manera que antes de prepararse al estudio se disponía por medio de la oración, llegando de este modo á tal grado de conocimiento en las ciencias que era la admiración de la universidad de Lérida, en la que hizo sus esludios. Luego de concluida su carrera, trató de retirarse del mundo entrando en la religión del Císler, en el monasterio de Santas Cruces. En vano trataron sus parientes de retraerle de su resolución, pues venciendo lodos sus engaños y seducciones hizo sus votos con toda la solemnidad que usa la Iglesia. Desde entonces no trató de olra cosa que de ser fiel á los votos que habia emitido, y de dedicarse con mas ardor al estudio para ser útii á la Iglesia y al estado. Dedicóse al ministerio de la divina palabra, siendo mucho el fruto que recogió de sus sermones. Nombrado abad del propio monasterio, gobernó con prudencia y celo á sus subditos, y cuando el pueblo y clero do la diócesis de A'ich le nombró su obispo, so consagró enteramente al bien espiritual y temporal de sus feligreses. La predicación de la divina palabra, la conmiseración para con los pobres, las visitas álos enfermos, eran sus principales obligaciones, siendo el padre délas viudas y do los huérfanos y el consuelo de los atribulados. Visitaba las parroquias de su diócesis cada dos anos, procurando atajar los escándalos, eslirpar los vicios y poner freno á las pasiones. Pero á pesar de sus muchas ocupaciones tocante á la diócesis, no olvidaba las penitencias y mortificaciones, que por cierto eran rigurosas y continuas. Después de arregladas las cosas de su obispado, pensó en otras mas grandiosas empresas. Por aquellos tiempos ios moros tenían oprimido el reino de Yalencía, y Bernardo llevado del celo por la religión, y de conmiseración en favor de sus hermanos, so juntó con algunos caballeros y se dirigieron á aquel reino, libertando muchos lugares y castillos de la tiranía de los infieles, en cuya empresa le asistió Dios muy claramente. Vuelto á su obispado pasó al monasterio de San Cugat del Valles, ó bien al de la cartuja del Monte-Alegre para entregarse á la penitencia, mas conociendo que la voluntad de Dios era que estuviese en su diócesis para dirigir su rebaño, volvió á ella continuando con nuevo fervor el cuidado de su amada grey como solícilo pastor. Así paso su vida el glorioso Bernardo, hasta que habiéndolo sobrecogido una enfermedad, y conociendo se acercaba el fin do su vida,scpreparó para morir dignamente, acabando sus días en la misma ciudad de Vich el dia 26 de octubre del ano 1243. SANMARTUUAN.—En Bañólas, población del principado de Cataluña, provincia de Gerona, y partido judicial de la misma ciudad, se venera al ilustre san Martirían, patrón del pueblo, y su fiesta se celebra en este dia. SAN BAFAEL,ABC.ÍNGEL.—En el año nueve de Oseas,rey de Israel, y elseis de Exequias, rey de Judá, er328í{ de la creación del mundo, Salmanazar, rey de Asiría, tomó á Samaría y arruinó el reino de Israel y de las diez tribus. Uno de los cautivos que llevó aquel príncipe á Nínive, fué Tobías, hijo de Tobíeí y nieto de Ananiel, de la tribu y ciudad de Neftalí, que estaba en la alta Galilea. Con el fué también cautiva su mujer y un hijo pequeño que tenían. Era Tobías hombre de gran piedad, el espejo de virtud para su pueblo; y Scnaquerib lo trató muy bien ai

278 LA LEYENDA DE ORO. principio; poro luego empezó á mirarle con rencor porque se ocupaba en enlerrar los muertos, á quien queria él que no se diese sepultura. A los cincuenta y seis años de su edad perdió Tobías la visla, y cuando él daba gracias á Dios por esta calamidad, sus deudos le insultaban dicién* dolé que no le habia valido la piedad y misericordia para no quedar ciego: les contestaba como varón de Dios, que los bijos de los santos nada tienen que esperar en el mundo; pues su esperanza está en aquella otra vida que guarda Dios para los que aquí le son fieles. Mientras que Tobías pasaba sus trabajos con paciencia y rogaba á Dios que recibiese en paz su espíritu si así era su voluntad ; habia muy lejos de allí, en la ciudad de Ecbatana, en la Media, una linda jóven llamada Sara, hija de Raguel, la cual hacia también oración á Dios por una causa semejante á la de Tobías. Afligíase éste por la ceguera y por las calumnias de la virtud con que era insultado : Sara por la pérdida de siete esposos seguidos, á quienes el diablo Asmodeo le habia muerto en la noche primera de las bodas. La oración de entrambos fué oida de Dios de otro modo que ellos pensaban , y para aliviar sus males destinó el Señor al arcángel san Rafael, cuyo nombre significa «medicina de Dios. » Tobías, creyendo que oiria Dios su oración sacándole en paz de este mundo, llamó á su hijo Tobías, que entonces tenia veinte años, y después de haberle dado una instrucción, que deberían poner lodos los padres en manos de sus hijos , le dijo que se fuése á cobrar una cantidad de dinero que ledebia Gabelo, vecino de Rages, ciudad de la Media, líl hijo, por obedecer á su padre , tomó el documento de acreedor y salió á buscar quien le acompañase en aquella jornada , y desde luego se le presentó un gallardo mancebo, ceñido y en ademan de caminar, al cual saludó Tobías y le preguntó si sabia el camino que conducía á la Media. Díjole que sí y que muchas veces habia andado todos aquellos caminos y aposentado en casa de Gabelo, vecino de Rages, ciudad que está en la serranía de Ecbalana , y le ofreció acompañarle. Llevóle Tobías á su padre, quien dió gracias á Dios por este encuentro , y dijo al mancebo que le pagaría bien su diligencia. Preguntóle, además, de qué familia era y de qué tribu : á lo cual respondió el ángel : ¿Ruscas la familia del jornalero para que acompañe á tu hijo, ó al mismo jornalero? mas, para sacarle de toda zozobra has de saber que yo soy Azarías , hijo del grande Ananías. Y Tobías le contestó : De noble casa eres; pero m le enojes conmigo porque haya querido saber tu linaje. Quiso Dios que Tobías se parase en el sonido material de aquellos nombres y no pasase á averiguar la figura que estaba envuelta en su significación, con la cual se denotaba el oficio y la naturaleza del ángel; porque Azarías significa «socorro de Dios,» y Ananías «nube del Señor,» en lo cual dió á entender que venia de parte de Dios á socorrerle en aquella necesidad. Partió, pues , el arcángel con el jóven Tobías , prometiendo á su padre que le acompañaría á la ida y á la vuelta, y se lo volvería sin desgracia alguna. Descansó en su promesa el anciano padre; y á su mujer, que lloraba polla ausencia del hijo, la consoló diciendo ! No llores, mujer : sano irá y volverá nuestro hijo, y tus ojos le verán. Yo creo que el ángel bueno de Dios le acompaña y dispone todas las cosas que le pertenecen , de suerte que vuelva á nosotros gozoso. m tv. ta primera noche de su viaje, habiendo salido Tobías á lavarse los piés en el rio Tigris, fué acometido por un gran pez, qué paracia le iba á tragar,y espantado el jóven , ex^ clamó gritando : Señor, que me embiste. El ángel entor.*- ees le mandó que lo sacase á Ift ribera , le abriese US entrañas, y le arrancase el coraron, la hiél y el hígado, qué seria medicina para varias dolencias. Rizólo así Tobías, y lo demás, después de haber comido parte, lo salaron para lo restante del viaje. Llegados á Rages, dijo el ángel al jóven, que en aquella ciudad vivía un pariente suyo, llamado Raguel, que tenia una hija única nombrada Sara , y le persuadió que la pidiese por esposa ásu padre, prescribiéndole los medios con que se habia de guardar del demonio que habia dado muerto á sus primeros maridos. Salió este negocio como el arcángel habia dicho , porque Tobías siguió su consejo con toda éittfOtUiMtí y Rafael, por la virtud invisible y omnipotente de Dios, tomó al demonio y le quitó el poder que hasta entonces habia tenido en la casa de Raguel , ó por mejor decir, en los maridos que se habian hecho indignos de tener por esposa á Sara. Cobraron luego el dinero de Gabelo, y Tobías, acompañado de su esposa,, volvió á la casa de su padre, sano y gozoso, y lleno de riquezas que no esperaba , y además con la hiél del pez, untando lo ojos del anciano Tobías, lereslíluyó la vista al cabo de media hora. El padre y el hijo no sabiendo con qué pagarle estos beneíicios, le ofrecieron la mitad de sus bienes , y cntor.-. ees fué cuando Rafael descubrió el misterio de su aparición , y Ies dijo : Rendecid al Dios del cielo y glorificadlo di lante de todos los vivientes, porque ha hecho en vesotres - gala de su misericordia. Rueño es tener ocultos los secretos del rey ; pero el manifestar y publicar las obras de Dios es cosa sobremanera honrosa. Yale mas la oración acompañada del ayuno y de la limosna , que todos los tesoros y todo el oro que se pueda amontonar ; porque la limosna libra de la muerte, y purifica al hombre desús pecados , y le facilita el hallazgo de la misericordia y de la vida eterna. Los que cometen pecado y maldad, son enemigos de sus almas. Voy pues á descubriros la verdad, ni os tendi ó por mas tiempo escondido este secreto. Cuando hacías oración á Dios llorando , y enterrabas los muertosi y para esto te levantabas de la mesa, y de dia tenias ocultos los cadáveres en tu casa y de noche les dabas sepullura, ofrecí yo tu oración al Señor. Y porque agradabas á Dios fué necesario que la tentación te probase. Ahora, pues me ha enviado el Señor para que te diese la salud, y líbrase del demonio á Sara, la esposa de tu hijo. Porque yo soy el ángel Rafael, uno de los siete que estamos siempre delante del Señor. Al oír estas palabras del arcángel , atemorizados el padre y el hijo, ya por la novedad del caso, ó ya por la opinión recibida entre los judíos de qu« cualquiera que viese un ángel luego moriría, temblando cayeron contra el suelo. Pero el ángel les dijo entonces : La paz sea con vosotros, no temáis : cuando yo estaba con vosotros, estaba porque lo queria Dios así; bendecidle, pues, y cantad sus glorias. Parecíaos que con vosotros comía y bebia ; pero yo me mantengo de un manjar invisible y de una bebida que tampoco la pueden ver los hom ­ bres. Tiempo es ya de que vuelva al que me envió: vosotros bendecid á Dios y publicad todas sus maravillas. Dicho esto, Rafael desapareció, y lodos los de la familia d«

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Ha gran pena qac cada instante parecía caerse: rogó al<br />

sanio quo se saliese <strong>de</strong> la cueva mientras la <strong>de</strong>rribaban,<br />

teniendo por cierto que al caer hundiria la cueva y malaria<br />

al santo glorioso; pero él dijo, que <strong>de</strong> ningún modo<br />

saldría do su cueva; que ellos hiciesen lo que fuesen servidos.<br />

Al fin comenzaron,su obra: y cuando mas instrumentos<br />

le habían puesto para que no cayese por aquella<br />

parle, se les fué <strong>de</strong> repente <strong>de</strong> las manos, y cayó aquel<br />

corpulento peñasco por don<strong>de</strong> todos juzgaron haría diez<br />

mil pedazos al santo y su cueva; pero el Señor lo or<strong>de</strong>nó<br />

<strong>de</strong> otra suerte, enviando un ángel que lo llevase en el aire,<br />

hasta salvar la cueva y habitación <strong>de</strong> su siervo i con<br />

que cayó <strong>de</strong>spués en tierra, sin causar el menor daño ni<br />

susto al glorioso santo; que aun no quiso su divina Majestad<br />

1c divirtiese el ruido ó susto, <strong>de</strong> la oración y contemplación<br />

en que estaba. Quedaron todos maravillados <strong>de</strong>l<br />

prodigio, y dieron á Dios iníinitas gracias, y Maicio mas<br />

quo todos.<br />

Púsose una ca<strong>de</strong>na á un pió al instante que se fué á vivir<br />

á aquel monte, para no po<strong>de</strong>r salir <strong>de</strong> su cueva en todos<br />

los días <strong>de</strong> su vida, n¡ moverse mas que el corlo espacio<br />

<strong>de</strong> la ca<strong>de</strong>na, que era corta y tenia el remate clavado<br />

en el peñasco. Tuvo noticia el glorioso padre san<br />

Benito do Marcío, y <strong>de</strong> la prisión en que se habia puesto<br />

tan estrecha y trabajosa, y envióle á <strong>de</strong>cir por un discípulo<br />

suyo estas palabras solas: Sí eres siervo <strong>de</strong> Dios, no<br />

le prenda ni le ale la ca<strong>de</strong>na <strong>de</strong> hierro, sino la ca<strong>de</strong>na <strong>de</strong><br />

Cristo. iCosa rara! Apenas oyó estas palabras, cuando se<br />

quitó la ca<strong>de</strong>na <strong>de</strong>l pié; pero quedó tan preso sin ella,<br />

que jamás se apartó, ni pur un instante, <strong>de</strong>! mismo lugar<br />

cn que le podía tener preso y atado la ca<strong>de</strong>na; porque la<br />

obediencia le aprisionó con Cristo, suave y divina ca<strong>de</strong>na.<br />

A la fama <strong>de</strong> su gran santidad se siguió, no solo el concurso<br />

ya referido <strong>de</strong> gente que se venia á valer do sus<br />

oraciones, sino también el tener muchos discípulos, que,<br />

á imitación suya, se quedaban á vivirjen aquel <strong>de</strong>sierto,<br />

cerca <strong>de</strong> la cueva <strong>de</strong>l bendito Marcío. Estos tenían un pozo,<br />

<strong>de</strong> don<strong>de</strong> sacaban el agua que habían menester; pero<br />

cada día se rompía la soga con que ataban el cubo ó herrada<br />

con que la sacaban. Teníase el glorioso sanio la ca<strong>de</strong>na<br />

en que á los principios se ató, como dijimos, en la<br />

cueva : pidiéronsela, y él la dio al instante: atáronla á un<br />

pedazo <strong>de</strong> la soga <strong>de</strong> esparto con que sacaban el agua;<br />

was (¡ó virtud divina!) al instante que la soga locó aquella<br />

ca<strong>de</strong>na que había tenido atado y preso el bendito pié <strong>de</strong><br />

Marcío, se bízo tan fuerte, como sí fuese también <strong>de</strong> hierro<br />

como la ca<strong>de</strong>na, sin que jamás se rompiese ni tuviesen<br />

mas cuidado <strong>de</strong>que se les rompería. Al fin, lleno <strong>de</strong> días<br />

Y nulagros, <strong>de</strong>scansó en el Señor, entregándole su bendita<br />

alma (para que la coronase en su gloria) á los 24 <strong>de</strong> octubre<br />

[dia en que la Iglesia celebra su fiesta) por los años<br />

<strong>de</strong>l Señor <strong>de</strong> íifiO. Escribieron su vida el dicho san Grte*<br />

gono Magno en el lugar citado; san Gregorio Turonense,<br />

Be slonaconfes., cap. w • pedl,0 <strong>de</strong> Nala]ibllS) in Calha_<br />

lo& mm., hb. ix, cap. 102; ei Martirologio romano, y<br />

Baromoensus anotaciones. Dante los dichos padres dos<br />

nombres a nuestro glonoso santo : uno es Marcío, y otro<br />

Maitm; pero lo común es llamarle Marcío: y as lo llama<br />

el Marfrologio romano. También hace mención <strong>de</strong> él<br />

WenmDevmSülusl.ordm.S.Bencdicii,lib ,„ cap ¿<br />

* SAN BERNARDO GÍLVÓ, OBISPO Y cojíFEsoa.—En el arzobispadodo<br />

Tarragona, parroquia do Villaseca y en una<br />

casa <strong>de</strong> campo llamada Mas Calvó, nació Bernardo. Descubrióse<br />

en él <strong>de</strong>s<strong>de</strong> niño gran<strong>de</strong> afición á las letras, y<br />

también gran<strong>de</strong>s <strong>de</strong>seos <strong>de</strong> servir á Dios; por manera que<br />

antes <strong>de</strong> prepararse al estudio se disponía por medio <strong>de</strong> la<br />

oración, llegando <strong>de</strong> este modo á tal grado <strong>de</strong> conocimiento<br />

en las ciencias que era la admiración <strong>de</strong> la universidad<br />

<strong>de</strong> Lérida, en la que hizo sus esludios. Luego <strong>de</strong><br />

concluida su carrera, trató <strong>de</strong> retirarse <strong>de</strong>l mundo entrando<br />

en la religión <strong>de</strong>l Císler, en el monasterio <strong>de</strong> Santas<br />

Cruces. En vano trataron sus parientes <strong>de</strong> retraerle <strong>de</strong> su<br />

resolución, pues venciendo lodos sus engaños y seducciones<br />

hizo sus votos con toda la solemnidad que usa la Iglesia.<br />

Des<strong>de</strong> entonces no trató <strong>de</strong> olra cosa que <strong>de</strong> ser fiel á<br />

los votos que habia emitido, y <strong>de</strong> <strong>de</strong>dicarse con mas ardor<br />

al estudio para ser útii á la Iglesia y al estado. Dedicóse<br />

al ministerio <strong>de</strong> la divina palabra, siendo mucho el<br />

fruto que recogió <strong>de</strong> sus sermones. Nombrado abad <strong>de</strong>l<br />

propio monasterio, gobernó con pru<strong>de</strong>ncia y celo á sus<br />

subditos, y cuando el pueblo y clero do la diócesis <strong>de</strong> A'ich<br />

le nombró su obispo, so consagró enteramente al bien espiritual<br />

y temporal <strong>de</strong> sus feligreses. La predicación <strong>de</strong> la<br />

divina palabra, la conmiseración para con los pobres, las<br />

visitas álos enfermos, eran sus principales obligaciones,<br />

siendo el padre délas viudas y do los huérfanos y el consuelo<br />

<strong>de</strong> los atribulados. Visitaba las parroquias <strong>de</strong> su diócesis<br />

cada dos anos, procurando atajar los escándalos, eslirpar<br />

los vicios y poner freno á las pasiones. Pero á pesar<br />

<strong>de</strong> sus muchas ocupaciones tocante á la diócesis, no olvidaba<br />

las penitencias y mortificaciones, que por cierto<br />

eran rigurosas y continuas. Después <strong>de</strong> arregladas las cosas<br />

<strong>de</strong> su obispado, pensó en otras mas grandiosas empresas.<br />

Por aquellos tiempos ios moros tenían oprimido el<br />

reino <strong>de</strong> Yalencía, y Bernardo llevado <strong>de</strong>l celo por la religión,<br />

y <strong>de</strong> conmiseración en favor <strong>de</strong> sus hermanos, so<br />

juntó con algunos caballeros y se dirigieron á aquel reino,<br />

libertando muchos lugares y castillos <strong>de</strong> la tiranía <strong>de</strong> los<br />

infieles, en cuya empresa le asistió Dios muy claramente.<br />

Vuelto á su obispado pasó al monasterio <strong>de</strong> San Cugat <strong>de</strong>l<br />

Valles, ó bien al <strong>de</strong> la cartuja <strong>de</strong>l Monte-Alegre para entregarse<br />

á la penitencia, mas conociendo que la voluntad<br />

<strong>de</strong> Dios era que estuviese en su diócesis para dirigir su<br />

rebaño, volvió á ella continuando con nuevo fervor el cuidado<br />

<strong>de</strong> su amada grey como solícilo pastor. Así paso su<br />

vida el glorioso Bernardo, hasta que habiéndolo sobrecogido<br />

una enfermedad, y conociendo se acercaba el fin do<br />

su vida,scpreparó para morir dignamente, acabando sus<br />

días en la misma ciudad <strong>de</strong> Vich el dia 26 <strong>de</strong> octubre <strong>de</strong>l<br />

ano 1243.<br />

SANMARTUUAN.—En Bañólas, población <strong>de</strong>l principado<br />

<strong>de</strong> Cataluña, provincia <strong>de</strong> Gerona, y partido judicial <strong>de</strong> la<br />

misma ciudad, se venera al ilustre san Martirían, patrón<br />

<strong>de</strong>l pueblo, y su fiesta se celebra en este dia.<br />

SAN BAFAEL,ABC.ÍNGEL.—En el año nueve <strong>de</strong> Oseas,rey<br />

<strong>de</strong> Israel, y elseis <strong>de</strong> Exequias, rey <strong>de</strong> Judá, er328í{ <strong>de</strong><br />

la creación <strong>de</strong>l mundo, Salmanazar, rey <strong>de</strong> Asiría, tomó<br />

á Samaría y arruinó el reino <strong>de</strong> Israel y <strong>de</strong> las diez tribus.<br />

Uno <strong>de</strong> los cautivos que llevó aquel príncipe á Nínive, fué<br />

Tobías, hijo <strong>de</strong> Tobíeí y nieto <strong>de</strong> Ananiel, <strong>de</strong> la tribu y<br />

ciudad <strong>de</strong> Neftalí, que estaba en la alta Galilea. Con el<br />

fué también cautiva su mujer y un hijo pequeño que tenían.<br />

Era Tobías hombre <strong>de</strong> gran piedad, el espejo <strong>de</strong><br />

virtud para su pueblo; y Scnaquerib lo trató muy bien ai

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