Tomo Tres Leyenda de Oro -Vidas de Los Martires-

4, SETIEMBRE.
afios , siendo discípulo y maestro ,dQs vasos do eU-ccion
para la causa de Dios , dos hoslias agradables y santas,
fueron sacrificados por los gentiles y volaron al cielo coronados
con la auréola del marlirio.
Los SANTOS ZENON YCABITON, MÁTIRES.—Parece que fueron
de Grecia , y según el Martirologio , presos por ser
cristianos, negándose á ofrecer adoración á los dioses paganos
, Zenoufué metido en una caldera de plomo derretido
y á Garitón lo echaron en un horno encendido , consiguiendo
así los dos la palma del martirio.
SAN AUSANO, OBISPO Y CONFESOII.— Nació de nobilísima
familia en Milán , de cuya ciudad fué nombrado después
obispo por el papa Juan 111. Uabia pasado su juventud en
el estudio y la oración , de modo, que cuando fué elevado
al episcopado , desde luego empezó á dar muestras de
su sabiduría y sólida piedad , en la reforma do los abusos
, en el arreglo espiritual y temporal de su diócesis y
en el zelo que desplegó en favor de las verdades de la fé
que eran conbalidas por los herejes. En la irrupción de los
bárbaros del norte, prestó á sus ovejas beneücios incalculables,
y últimamente murió en paz, el dia 3 de setiembre
del afio 568.
SANTA FEBES , DIACONISA.—Fué de Corinto y abrazó la
religión cristiana pór la predicación de san Pablo, de quien
fué digna discípula. El apóstol, en su carta á los romanos,
cap. 16 , les dice estas palabras : « O.s encomiendo
á Febes , nuestra hermana , que está en el servicio de la
Iglesia de Cenchrea : que la recibáis en el Seíior como deben
los santos , y la ayudéis en tcxlo lo que os hubiere menester;
porque ella ha asistido á muchos, y á mí en particular.
» Los bolandistas son de opinión que murió en Corinto
por los últimos anos del siglo I.
SAN AIGÜI.FO , T OTROS MONGES , MÁBTIRES.— El primero
rra abad y los otros religiosos del monasterio de Lcrins.
Vivia aquella santa comunidad en la observancia mas perfecta
de la vida monástica : pero como en las reuniones
mas escogidas permite Dios que haya siempre algún malvado
para prueba y purificación de los buenos, hubo
^mbien en aquella casa dos monges perversos, que no
queriendo conformarse con las prácticas de disciplina y ri-
^0r que el santo abad habia establecido , se conjuraron
t0n'ra él y los que le obedecian , y armaron un complot
Para perderlos. Efectivamente, Aigulfo y sus fieles discí-
|ÍU 08 fueron víctimas de su piedad , muriendo degollados.
Pues de habérseles arrancado la lengua y los ojos, en
e^g^0 Cie 1038 dc trein,a » 61 dia 3 de setiembre del ano
mo i a ma.llos de ^os revoltosos. La Iglesia los venera copl0(jeniart'rcs
, para dar á todos sus hijos el ilustre ejem-
^ quenosolo se alcanza la palma del martirio, murienrado0r
^rden do ^os liranos i s*no í110 también son honel
m •C,0n eS*e P1'00'080 dictado todos los que , conociendo
Sacr'fi ^ Va'01 ^e SUS ^S30*01168 cristianas , se dejan
3 V lcar ántes que hacer traiciona su conciencia, ni faltar
nslnguna de esas obligaciones.
AN REMACLO , OBISPO DE MASTRICU , CONFESOR.—Flot'O-
«amediadosdelsigloVH.SanEloyle nombrg primer
«fau del monasterio que fundó en Solignach. En 650 fué
^loobspo, yeneeimuriócongranolorde santidad.
m MACNIS:O , OBISPO DE IRLANDA.—Fue d primer obispo
eldnT;' en Irta;,dalSan 01«a« su maestroTy murió
3 do setiembre de 513; otros dic.n que en 506.
TOMO tir.
DIA i
SANTA ROSA DE VITERBO, VÍRGEN.—Al tiempo que el emperador
Federico II , cruelmente tirano , y enemigo del
vicario de Cristo y de toda la Iglesia , con pretexto de
paz y reconciliación con el sumo pontífice Gregorio IX , á
cuya falsa voz dió crédito fácilmente la insigne ciudad do
Viterbo, por lo mucho que lo deseaba , viendo tan oprimida
la silla apostólica , pues nunca se ha visto mas que
en aquel tiempo , ni mas abatidos los pobres cristianos,
con la soberbia y dominio de pérfidos herejes , siendo
sola esta ciudad la que habia quedado á devoción del pontífice
; dió libcralmente entrada al tirano, por ser paso
para Roma , de donde dista unas cuarenta millas, que son
trece leguas , con cuyo permiso tuvo ocasión el cruel
emperador dc apoderarse de la ciudad y dominarla, llenándola
de herejes é insultos, tanto , que movió al pontífice
á que publicase la santa cruzada contra el dicho emperador
, y excomulgarlo y maldecirlo, como á sacr ilego
y rebelde á la santa Iglesia católica. A este tiempo, pues,
que era el año de 1240 , cuando la primavera apunta sus
fragantes rosas , nació (debajo del palacio del tirano Federico
, y junto al convento de Santa María de las Rosas)
de Juana y Catalina , pobres poro nobles casados í milagrosamente
, porque fueron estériles ántes y después) la
bendita santa Rosa, para ser freno al impío Federico y sus
secuaces herejes, ejemplo á la vida religiosa , imiiadora
de la vida déla mas divina rosa, Cristo Jesús, y admiración
á los cielos, enriqueciéndolos con las fragrancias de fus
olorosas y admirables virtudes. Los prodigios y maravillas
que sucedieron en el nacimiento de esta santa fuerongrandes,
dando anuncios de su virtud y santidad ; pero en
la confusión de tantas desdichas como experimentaba Viterbo
con la entrada del cruel tirano Federico ; loda la
alencion estaba dedicada al yugo que los oprimia : y así
no se observaron.
No se ha podido averiguar el dia propio do su nacimiento;
pero sí , que en breve fué conducida á la iglesia, para
que con el agua del sagrado bautismo bórrasela culpa
heredada de sus padres , y comenzase á mosírar la justificación
que la ilustraba, de que dió maravillosos indicios
desde su tierna infancia, despreciando al mundo, viviendo
pobremente , y macerando sus delicadas carnes con
ayunos, abstinencias y mortificaciones, por el amor entrañable
que tenia á su esposo Jesús , á quien procuraba
imitar , teniendo por dechado su paciencia y humildad , en
que se ejercitó tanto, que jamás le cansó tedio alguno el poco
cuidado quetenian en alimentarla; pues descuidándose
su madre los dias enterosde aplicarla al pecho , era Rosa
una piedra inmóvil, hallándola siempre de la suerte que
la habia dejado , sin dar señales de su hambre , ni hacer
ruido alguno , con una santa quietud mirando continuamente
al cielo , como centro de todas sus esperanzas. Las
primeras palabras que se le oyeron pronunciar, fueron el
dulcísimo y santísimo nombro de Jesús y do María santísima
, sin pecado concebida ; y después continuamente los
nombraba , como quien los tenia dentro de su amante corazón.
Luego que pudo dar los primeros pasos , todo era
hincarse de rodillas delaníe de las imágenes sagradas de
Jesús y María santísima , que tenían sus padres en casa,
como devotos , humildes y buenos cristianos ; y como
o