You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
m<br />
una verdad tan visible; y que no pudicndo concebir que<br />
aquel á quien vcian como verda<strong>de</strong>ro bombre, pudiese al<br />
misino tiempo ser verda<strong>de</strong>ro Dios, no consiilerasen todavía<br />
á Jesucrislo mas que como un hombre maravilloso y<br />
eslraordinario, y esto es lo que les hacia alabar á Dios<br />
porque habia dado á los hombres, <strong>de</strong>cian, un po<strong>de</strong>r semojanle.<br />
Jesucristo perdonaba los pecados y hacia milagros,<br />
no solo como hombre, sino como Dios en virtud <strong>de</strong>l<br />
po<strong>de</strong>r que la naturaleza divina comunicaba á la humanidad<br />
con la cual estaba unida suslancialraente, y con la que<br />
no hacia mas que una sola persona que era la persona <strong>de</strong>l<br />
Verbo. I'or consiguiente el Dijo <strong>de</strong>l hombre obraba estas<br />
maravillas en su propio nombre y por su propia virtud ; á<br />
diferencia <strong>de</strong> los <strong>de</strong>más hombres que no las obran sino en<br />
nombre <strong>de</strong> Jesucristo y en virtud <strong>de</strong> un po<strong>de</strong>r estraño.<br />
La oración <strong>de</strong> la misa <strong>de</strong> este día es como sigue<br />
birigal<br />
corda nnslra,<br />
quwsumus, Domine , lúa:<br />
tnísmiíionis operalio :<br />
qttia tibi sine le placeré<br />
uonpossumus. l'er Dominum...<br />
DOMINGO DECIMOCTAVO<br />
Os suplicamos. Señor, que<br />
mováis y conduzcáis nuestros<br />
corazones mediante la divina<br />
operación <strong>de</strong> vuestra gracia;<br />
porque sin vos no po<strong>de</strong>mos<br />
agradaros. I'or nuestro Señor<br />
Jesucristo, ele.<br />
La Epislola está tomada <strong>de</strong> la primera <strong>de</strong> san Pablo á los<br />
Corintios, cap. 4.<br />
Fratrcs : Gralias ago<br />
Deo meo semper pro vobis<br />
i« gralia Dei, (¡um dala<br />
esl vabis in Chrislo Jesu :<br />
f¡md in ómnibus diviles<br />
farti es lis in illo, in omni<br />
verbo, elin omni scienlia.<br />
Sicul teslimonium Christi<br />
coniirmalam esl in vobis :<br />
ita ul nihil vobis dcsit in<br />
ulla gralia cxpeclaníibus<br />
rcvelalionem Domini nostri<br />
Jem Christi , ^u» el<br />
confirmabit vos usque in /i-<br />
«m sme crimm', in die<br />
ndveiHm Domini noslri<br />
Jesu Christi.<br />
Hermanos mios: Yo no ceso<br />
<strong>de</strong> dar gracias á mi Dios por<br />
vosotros, por la gracia que os<br />
ha hecho por Jesucristo, pues<br />
por él habéis sido enriquecidos<br />
con lodo género <strong>de</strong> bienes,<br />
con todos los dones <strong>de</strong> la palabra<br />
y <strong>de</strong> la ciencia, por don<strong>de</strong><br />
lo que se ha annnciado <strong>de</strong><br />
Jesucristo se ha verificado en<br />
vosotros. De tal modo que con<br />
respecto á los bienes <strong>de</strong> gracia<br />
<strong>de</strong> nada carezcáis, mientras<br />
que esperáis que aparezca Jesucristo<br />
nuestro Señor , el<br />
cual os confirmará hasla el<br />
fin, para que no seáis acusados<br />
<strong>de</strong> crimen en el dia en que<br />
vendrá Jesucrislo nuestro Señor.<br />
Fué escrita esta Epístola <strong>de</strong>s<strong>de</strong> Efeso, algún tiempo<br />
ántes que san Pablo partiese para ir á Macedonia, hacia<br />
el año líC <strong>de</strong> Jesucristo. Diví<strong>de</strong>se en dos parles: en la<br />
pi inici a les da el Apóstol una viva corrección, con motivo<br />
<strong>de</strong> sus divisiones y <strong>de</strong> un incesto cometido entre ellos;<br />
en el resto <strong>de</strong> la caria respon<strong>de</strong> á diferentes cuestiones<br />
que los corintios le habían propuesto.<br />
DEFLEXIONES.<br />
«Ilübeis sido enriquecidos con lodo género <strong>de</strong> bienes.»<br />
San Pablo para hacer agradable la caridad y la viva corrección<br />
que habia dado á los corintios, comienza su carta<br />
recordándoles lodos los dones sobrenaturales, y todas las<br />
gracias singulares <strong>de</strong> que Dios les habia colmado abundantemente,<br />
y con que les Labia enriquecido <strong>de</strong>sdo el prin-<br />
cipio <strong>de</strong> su conversión. Nada en efecto <strong>de</strong>be hacer mas<br />
impresión, ni mover mas á los que <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> haberse<br />
converlido verda<strong>de</strong>ramente, y <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> haber guslado<br />
las dulzuras que se hallan en el servicio <strong>de</strong> Dios, <strong>de</strong>jan<br />
<strong>de</strong> ser quienes fueron, y olvidando las gracias <strong>de</strong> predilección<br />
que han recibido, y los insignes beneficios <strong>de</strong>que<br />
han sido colmados, vuelven á sumergirse en el <strong>de</strong>sór<strong>de</strong>n;<br />
nada, repito, es mas á propósito para cubrir <strong>de</strong> confusión<br />
á estas almas ingratas é infieles que la memoria <strong>de</strong><br />
estos mismos beneficios.<br />
Cuesta trabajo compren<strong>de</strong>r cómo un gran <strong>de</strong>sarreglo <strong>de</strong><br />
coslumbres pueda suce<strong>de</strong>r á una piedad ejemplar, y que<br />
<strong>de</strong>spués <strong>de</strong> haber sido <strong>de</strong>voto <strong>de</strong> buena fé, venga á pararse<br />
en libertino <strong>de</strong> profesión ; cómo esas Incestan vivas,<br />
Um claras, que hacen ver la virtud con un brillo tan hermoso,<br />
puedan eslinguirse lan absolutamente, sin que se<br />
sienta á lo ménos que se ha quedado uno ciego; cómo<br />
pueda per<strong>de</strong>rse el gusto á la piedad hasta el eslremo <strong>de</strong><br />
mirarla con horror, sin que el alma advierta que está enferma<br />
; y cómo <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> haber servido á Dios muchos<br />
años con fervor y con edificación, pueda uno retirarse <strong>de</strong><br />
su servicio sin sentimiento y sin inquietud. Todo esto parecería<br />
imposible, si ejemplos frecuentes no probasen <strong>de</strong>masiado<br />
lodos los dias que no lo es. La corrupción <strong>de</strong>l<br />
corazón pasa muy pronto hasta el espíritu: déjase <strong>de</strong><br />
pensar bien luego que se <strong>de</strong>ja <strong>de</strong> vivir bien. Cuando llega<br />
á per<strong>de</strong>rse el gusto á las gran<strong>de</strong>s verda<strong>de</strong>s <strong>de</strong> la religión,<br />
muy pronto se las pier<strong>de</strong> también <strong>de</strong> vista ; nunca es pequefio<br />
el estravío, cuando <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> haber conocido el<br />
buen camino se aleja <strong>de</strong> él por disgusto, i (Jué diferencia<br />
<strong>de</strong> costumbres, <strong>de</strong> senlimientos y <strong>de</strong> conducta, buen Dios,<br />
entre una persona verda<strong>de</strong>ramente piadosa, y la misma<br />
cuando vive en el <strong>de</strong>sarreglo ! Dulce, humil<strong>de</strong>, atenta,<br />
oficiosa, caritativa, poique lodo esto es cuando es sinceramente<br />
virtuosa. ¡ Que sabiduría , qué pru<strong>de</strong>ncia, qué<br />
probidad en toda su conducta! Aquella señora penetrada<br />
délas gran<strong>de</strong>s verda<strong>de</strong>s <strong>de</strong> la religión, no encontraba<br />
alegría verda<strong>de</strong>ra sino en los ejercicios <strong>de</strong> una sólida piedad,<br />
y vivia en el mundu sin seguir sus máximas. La regularidad<br />
<strong>de</strong> sus costumbres, su mo<strong>de</strong>stia, su aplicación<br />
á sus <strong>de</strong>beres, su afabilidad, daban un nuevo lustre á todas<br />
sus bellas cualida<strong>de</strong>s. La envidia respetaba su virtud,<br />
se la proponía en el mundo como mo<strong>de</strong>lo <strong>de</strong> una señora<br />
cristiana. Aquella persona religiosa al salir <strong>de</strong> su noviciado<br />
se hacia admirar <strong>de</strong> los mas auliguos por su exacta<br />
puntualidad, por su tierna <strong>de</strong>voción, por su fervor, por<br />
su mortificación, por su mo<strong>de</strong>stia. ¿Quién hubiera dicho<br />
que una virtud tan sólida <strong>de</strong>bería per<strong>de</strong>rse algún dia?<br />
Pero por haber <strong>de</strong>scuidado el reparar una viga, dice el<br />
Santo, repasar el tejado, cerrar una brecha, lodo el edificio<br />
se ha hundido ; una pequeña hendidura en el navio<br />
le conduce á un triste naufragio: aquel oro lan puro ha<br />
perdido lodo su precio, perdiendo su esplendor ; aquella<br />
virtud tan pura, tan brillante, se ha oscurecido. Aquellos<br />
vasos <strong>de</strong> elección y <strong>de</strong> gloria han tenido la suerte <strong>de</strong> los<br />
vasos <strong>de</strong> barro, que á la primera caída se hacen pedazos.<br />
Salomón pervertido, y un apóstol convertido en apóstata,<br />
prueban <strong>de</strong>masiado, que cuando se ha guslado <strong>de</strong> Dios,<br />
cuando uno ha sido verda<strong>de</strong>ramente <strong>de</strong>voto y ha <strong>de</strong>jado<br />
<strong>de</strong> serlo, no se hace nunca malo á medias. Diríase que la<br />
fe, el buen sentido, la educación, la razón misma se pier<strong>de</strong>n<br />
con la <strong>de</strong>voción. Aquel jóven lan sabio, tan racional,