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48G<br />
lo : gcicnles quod Chrislus<br />
resurgcns exmorluis,jim<br />
non morilur, mors illi ultra<br />
non dominabitur.<br />
Qaod enim morlms esl<br />
percato , mortuus est se~<br />
md : quod aulem vivit, virit<br />
Deo. lia el vos exislimate.'vosmorluos<br />
quiiem<br />
csse peccato, vivcntes «Mkm<br />
Deo, in Chrislo Jcsit<br />
Domino noslro.<br />
lo, tnmbien oreemos que viviremos<br />
con 61: sabiendo que<br />
Jesucristo que ha resucilado,<br />
no muere ya, y que la muerte<br />
no tendrá ya mas po<strong>de</strong>r sobre<br />
él. Porque aunque ha<br />
muerto por el pecado, ha<br />
muerto solo una vez,<br />
DOMINGO SEXTO<br />
mas<br />
cuando vivu ya , no vive sino<br />
para Dios; así también vosotros<br />
haced cuenta que estáis<br />
muertos para el pecado, pero<br />
que vivís para Dios en Jesucristo<br />
nuestro Señor.<br />
Sarv Pablo en este capitulo compren<strong>de</strong> en pocas palabras<br />
una lección interesante sobre el baulismo, la cuales<br />
un compendio instructivo <strong>de</strong> toda la moral cristiana. Esta<br />
sola Epístola <strong>de</strong> la misa <strong>de</strong> osle dia, bien meditada, pue<strong>de</strong><br />
síü-vir do asunto <strong>de</strong> meditación para todos los dias <strong>de</strong>l<br />
aíio.<br />
REFLEXIONES.<br />
((Porque aunque ha muerto por el pecado, ha muerlo<br />
solo una vez; mas cuando vive ya, no vive sino para Dios.»<br />
JAsncrisío es el divino mo<strong>de</strong>lo que todos <strong>de</strong>bemos copiar.-<br />
Las copias pue<strong>de</strong>n ser á la verdad masó ménos perfectas,<br />
pero todas <strong>de</strong>ben ser semejantes: la salvac ion, la pre<strong>de</strong>stinación<br />
gira sobre esta semejanza: «los ha pre<strong>de</strong>stinado<br />
también, para que sean confurmes á la imagen <strong>de</strong> su Hijo,<br />
(llum^ 8> Esloes, para que expresen en sí mismos la<br />
imagen <strong>de</strong> Jesucristo por su paciencia en las aflicciones,<br />
por la perseverancia en la inocencia, y por la práctica <strong>de</strong><br />
todas las <strong>de</strong>más virtu<strong>de</strong>s <strong>de</strong>que el Salvador les ha dado el<br />
mo<strong>de</strong>lo; á ün <strong>de</strong> que Jesucristo, que es el Hijo único por<br />
naturaleza, tenga muchos hermanos por adopción, á los<br />
cuales comunique el <strong>de</strong>recho <strong>de</strong> entrar en la herencia <strong>de</strong><br />
los hijos. Ahora bien, uno <strong>de</strong> los rasgos mas marcados <strong>de</strong><br />
osle divino mo<strong>de</strong>lo es, que habiendo muerto una sola vez<br />
por nuestros pecados, vive por siempre para Dios. Nosotros<br />
hemos muerto a! pecado por el bautismo, el cual no<br />
se reitera; no <strong>de</strong>bemos pues morir ya por el pecado: hemos<br />
resucitado á la vida <strong>de</strong> la gracia por la vu lud <strong>de</strong> este<br />
sacramento; no <strong>de</strong>bemos ya per<strong>de</strong>rla por la recaída en<br />
el pecado. La pérdida <strong>de</strong> la inocencia bautismal borra toda<br />
esta semejanza preciosa con el divino mo<strong>de</strong>lo. ¡Buen Diosl<br />
¡qué pocos retratos se encuentran en el dia <strong>de</strong> hoy éntrelos<br />
ci istianos que se os parezcan! Hay muchas copias, pero<br />
pocas que sean semejantes; el pecado borra los principales<br />
trazos. ¿Se ballau en eldia muchos queconsei ven hasta<br />
la muerte su inocencia bautismal? ¿Está nueslra resurrección<br />
tan seguía contra la muerte, como la <strong>de</strong> Jesucristo?<br />
Parece, por el contrario, que en estos tiempos el<br />
pecado previene en los niños al uso <strong>de</strong> la razón. Deben,<br />
sin duda, esta prematura malicia á los malos ejemplos<br />
quejes dan los domésticos y los padres. En otros iiempos<br />
había al parecer una edad privilegiada; mas hoy pue<strong>de</strong><br />
<strong>de</strong>cirse que el pecado es <strong>de</strong> todas las eda<strong>de</strong>s. No se espera<br />
á que la razón se <strong>de</strong>senvuelva; previénenla las pasiones,<br />
las cuales restablecen muy pronto al <strong>de</strong>monio en todos<br />
sus antiguos <strong>de</strong>rechos: tales el fiuto <strong>de</strong> una mala<br />
educación y <strong>de</strong> los malos ejemplos. Pero en esta corrupción<br />
general <strong>de</strong> las costumbres, en esle triste naufragio<br />
<strong>de</strong> la primera inocencia, ¿(pié remedio queda, qué recurso<br />
hay? El único recurso es la penitencia; asi es; pero sefHfl<br />
san Ambrosio, ¿no es en la actualidad la verda<strong>de</strong>ra penitencia<br />
tan rara como la inocencia baulismal?La penilenna<br />
sola pue<strong>de</strong> repararlos rasgos borrados por el pecado. Pero<br />
¿<strong>de</strong> qué edad es fruto la penitencia? Muérese á la gracia<br />
todos los dias; con frecuencia aun muchas veces ai dia,<br />
por un montón <strong>de</strong> recaídas, y la resurrección espiritual<br />
<strong>de</strong>l alma se difiere hasta la muerte. ¿Y es esto á lo que<br />
nos exhorta el santo Apóstol? ¿En cuántos se encuentra lleno<br />
<strong>de</strong> vida en la hora dé la muerte el hombre viejo <strong>de</strong>struido<br />
en el bautismo? ¿Vívese hoy en el mundo pai'a Dios?<br />
¿Ilállanse muchos ñeles que no vivan mas que para Dios?<br />
¿y <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> esto se estraíla que sea tan pequeño el número<br />
<strong>de</strong> los elegidos?<br />
El Evangelio <strong>de</strong> la misa <strong>de</strong> este dia está lomado <strong>de</strong>l <strong>de</strong><br />
san Manos, cap. 8.<br />
In illo íempore : Cum<br />
turba multa esseteum Jesu,<br />
«ec haherent quod<br />
manduenrent, convoc.atis<br />
discipulis, ait illis : Misereor<br />
super turbam, quia<br />
eccejam triduo snstinent<br />
me, nec habent quod manducenl<br />
: et si dimisero eos<br />
jejmos in domum suam,<br />
dfficienl in via : quídam<br />
enim ex eis <strong>de</strong> lonye venerunt.<br />
Et respon<strong>de</strong>runl ei<br />
disripuli sui : lin<strong>de</strong> illos<br />
quis polerit hic saturare<br />
panibus in soütudine? Et<br />
inlerrogañl eos : Qaol panes<br />
hubetis? Qui dixerunt:<br />
Septcm. El prw.cepil turba:<br />
discumbere super terram.<br />
El accipiens sepiera panes,<br />
gratias agens, fregil, el<br />
dabat discipulis suis , ul<br />
apponerent : el apposusmnl<br />
turhae. Et habebant<br />
pisciculos paucos: el ipsos<br />
benedixil, el jussil apponi.<br />
El manducaverunt, et<br />
Sfííttraíi s«ní, et svslnlerunt<br />
quod superaverat <strong>de</strong><br />
fragmenlis, seplem spor~<br />
tas. Erant aulem qui<br />
manducaverant , quasi<br />
qualuor millia : et dimisit<br />
eos.<br />
En aquel tiempo: Como se<br />
hallase con Jesús una gran<br />
muchedumbre que no tenia<br />
nada que comer, llamó á sus<br />
discípulos y les dijo : Me compa<strong>de</strong>zco<br />
do esa multitud, porque<br />
hace tres dias que no me<br />
<strong>de</strong>jan y nada tienen que comer,<br />
y si les <strong>de</strong>spido á sus casas<br />
en ayunas, les fallaiv.n las<br />
fuerzas en el camino , porque<br />
algunos han venido <strong>de</strong> lejos.<br />
Respondiéronle sus discípulos:<br />
En un lugar <strong>de</strong>sierto como es<br />
esle, ¿<strong>de</strong> dón<strong>de</strong> podremos hacer<br />
pan para satisfacerlos? Y en<br />
seguida les preguntó: ¿Cuántos<br />
panes tenéis? Siele, le dijeron.<br />
Oido esto, or<strong>de</strong>nó que<br />
aquella mullitud se sentase<br />
en tierra. Inmediatamente tomó<br />
los siele panes, y dando<br />
gracias los partió y los dió á<br />
sus discípulos para que los sirviesen<br />
á las tropas, y así lo<br />
hicieron. Tenían también unos<br />
pocos peces, los cuales bendijo<br />
y mandó que se les sirviesen.<br />
Toda la multitudcomíó<br />
y quedó satisfecha, y <strong>de</strong> los<br />
pedazos que quedaron se llenaron<br />
siete espuertas. Y el número<br />
<strong>de</strong> los que habían comido,<br />
era <strong>de</strong> cerca <strong>de</strong> cuatro mil<br />
personas; y los <strong>de</strong>spidió.<br />
MEDITACION.<br />
Del cuidado que Dios liene con los que se <strong>de</strong>dican á su servicio<br />
y le siguen.<br />
PINTO PRIMKKO.— Consi<strong>de</strong>ra que no pue<strong>de</strong> uno ser dichoso<br />
en la tierra, sino en el servicio <strong>de</strong> Dios. ¿Qué tenemos<br />
que temer OMI BB Señor semejante? Él ama tiernamente<br />
á todos sus siervos; ¿qué pue<strong>de</strong> fallar bajo la pi o-