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Noticias de Israel
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POLÍTICA DE ASUNTOS EXTERIORES
El halcón que se volvió pragmático
El ministro de defensa Liberman, que antes estaba a favor de la ocupación de la Franja
de Gaza, quiere hacer construir allí un puerto y un aeropuerto si los del Hamás prometen
renunciar a la acumulación de armas. No asombra que el Hamás lo rechazara.
“Lo que se ve desde aquí, no se ve desde
allí.” Con esta frase conocida, en su tiempo, el ex
primer ministro, Ariel Sharon, intentó explicar
su cambio dramático de defensor de los asentamientos
en Judea y Samaria, a aquel líder israelí
que puso en práctica la total retirada israelí
de la Franja de Gaza. Avigdor Liberman, del Partido
Israel Beitenu, tiene fama de ser un halcón
político. Desde hace algún tiempo, este hombre
intransigente actúa en asuntos de política de
paz y seguridad, como ministro de defensa del
Estado de Israel, y en este puesto da prueba de
que hay mucho de cierto en la antigua declaración
de Sharon.
Solo unos pocos días antes del sorpresivo
nombramiento de Liberman como ministro de
defensa, cuando su partido aún se encontraba
en el banco de la oposición, afirmó que en una
posición de mayor influencia, él en el correr de
48 horas se encargaría de la liquidación del líder
del Hamás, Ismail Haniyya. Desde su nombramiento
como ministro de defensa, una posición
más que influyente, ya han transcurrido considerablemente
más de 48 horas. Dichas horas
transcurrieron sin que sucediera algo en esa dirección.
Más que eso: no solamente que Haniyya
no fue eliminado, sino que indirectamente recibió
del ministro de defensa de Israel un ofrecimiento
bastante atractivo: la rehabilitación de la
Franja de Gaza, con la condición de que el Hamás
deje de armarse y de construir túneles.
Este ofrecimiento, el Ministro de defensa
Liberman lo formuló en el contexto de una entrevista
fuera de serie para el diario palestino
de renombre Al-Quds. El mismo se encuentra
en una total contradicción con sus declaraciones
anteriores, ya que una y otra vez había manifestado
su opinión de que la única manera
de poner fin al bombardeo de Israel desde la
Franja de Gaza consistía en una nueva y completa
ocupación de la región. En la entrevista
con Al-Quds ahora, sin embargo, explicó que Israel
no tenía ningún tipo de interés en una
ocupación de la Franja de Gaza. “Si el Hamás
deja de cavar túneles, de amontonar armas y
de lanzar misiles, entonces nosotros levantaremos
el bloqueo de la Franja de Gaza y seremos
los primeros en ayudar en la rehabilitación de
la región, juntamente con la construcción de
un puerto marítimo, un aeropuerto y una zona
industrial”, dijo Liberman. Seguidamente, expuso
que los del Hamás en los últimos años habían
invertido 500 millones de dólares en la infraestructura
militar de la Franja de Gaza, pero
casi no se habían preocupado de la reconstrucción
de las viviendas destruidas en la guerra de
2014. No obstante, también advirtió que la
próxima guerra, en caso de estallar, será la última
guerra del Hamás, ya que en la misma la
organización sería “totalmente destruida”.
La construcción de puertos para viajes por
mar y por tierra, al igual que de una zona industrial
y de una infraestructura en el área de
agua, aguas servidas y electricidad, podrían
convertir a la Franja de Gaza en un nuevo
Hongkong o Singapur del Cercano Oriente, no
obstante el Hamás, como no podía ser de otra
manera, rechazó este ofrecimiento. “A nosotros
nos corresponde el derecho, por razones de autodefensa,
de salvaguardar nuestra capacidad
militar”, explicó el portavoz del Hamás, Hazem
Qassim, en este contexto. Otro funcionario del
Hamás de alto rango, el ex ministro del interior
de la Franja de Gaza, Fathi Hammad, también
declaró: “Todos los ministros de defensa de Israel
hasta la fecha han proferido amenazas
contra nosotros.Todos ellos están muertos”, dijo,
y agregó:“No tenemos miedo”.
En la entrevista, Liberman también se refirió
a las relaciones con la Autonomía Palestina (AP).
Él enfatizó su apoyo a una solución de dos estados
para los dos pueblos, y reprochó al Presidente
de la AP, Mahmoud Abbas, ser el responsable
del fracaso de las negociaciones.“Abbas no tiene
interés alguno en una conciliación… Solamente
le interesa su herencia personal al igual que la de
sus familiares”, dijo. Liberman, sin embargo, considera
que una solución es posible. “El camino
hacia la misma es largo y complicado”, y exige la
creación de confianza, tanto del lado israelí como
también del lado palestino. La AP, por su lado,
atacó a Liberman por sus declaraciones denominadas
como “deslegitimación del presidente Abbas”.
Se reprochó a Liberman el querer dividir al
pueblo palestino.“Liberman nuevamente intenta
esconder su “política de palo y zanahoria” entre
mentiras, pero el pueblo palestino no se deja engañar
por él”, dijeron al respecto desde Ramallah.
La dirección de la AP, además, atacó a la redacción
del diario Al-Quds, por haber realizado y publicado
una entrevista de ese tipo y con eso haber
querido que se creara en un tipo de “normalización”.
Esto, de todos modos, deja claro: el
intercambio de golpes verbales de ambos lados
no disminuye.
ZL