Revista Nana #05
Epidural, una ventaja frente a muchos inconvenientes. Cesárea ¿Sí o no?. El síndrome del tercer día. Grupos de apoyo a la lactancia en las Islas Canarias. Colecho a demanda. Prohibido no disfrutar del verano. Porteo, mucho más que una manera de transportar al bebé. Pasar todo un verano en pareja y no morir en el intento. Recomendaciones y sugerencias de lectura.
Epidural, una ventaja frente a muchos inconvenientes. Cesárea ¿Sí o no?. El síndrome del tercer día. Grupos de apoyo a la lactancia en las Islas Canarias. Colecho a demanda. Prohibido no disfrutar del verano. Porteo, mucho más que una manera de transportar al bebé. Pasar todo un verano en pareja y no morir en el intento. Recomendaciones y sugerencias de lectura.
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
... Me abrumó la idea de pensar que<br />
dependía de mí para todo y me sentí débil,<br />
incapaz de soportar las noches en vela y<br />
de entender lo que mi bebé quería comunicarme<br />
en determinados momentos<br />
con su llanto. Apenas le sentía moverse,<br />
le ofrecía el pecho, que agarraba gustosamente…<br />
no era un bebé llorón pero yo sí<br />
lo era… era una madre llorona y desagradecida,<br />
que aun teniendo un bebé bueno y<br />
precioso era incapaz de sentir felicidad y<br />
solo me sentía una mujer débil y, de rebote,<br />
culpable”<br />
Esta historia podría ser real, de hecho, 8 de<br />
cada 10 mujeres sienten lo que llamamos<br />
tristeza posparto o síndrome del tercer día,<br />
en inglés Maternity blues o la tristeza de la<br />
maternidad.<br />
Se habla largo y tendido de los cambios<br />
que se suceden durante los meses de embarazo,<br />
sin embargo, se habla mucho menos<br />
de lo que ocurre al volver a casa tras el<br />
nacimiento del propio hijo, creyendo que<br />
la vuelta a la “normalidad” física y mental<br />
será , o deseando que sea instantánea,<br />
cuando en realidad, cuerpo y mente necesitan<br />
un tiempo indeterminado (que dependerá<br />
de cada mujer) para adaptarse a<br />
la nueva etapa.<br />
Si bien es cierto que hormonas como la<br />
prolactina y la oxitocina predisponen al<br />
comportamiento maternal y las endorfinas<br />
favorecen ese vínculo con el bebé que<br />
le garantiza la supervivencia, tan bien lo<br />
es que, no importa el embarazo o el parto<br />
que hayas tenido, lo maravillosa y comprometida<br />
que seas, cualquier mamá puede<br />
sentir esa montaña rusa emocional”que<br />
supone el puerperio o posparto. Todos los<br />
cambios que se han sucedido en tu cuerpo<br />
y en tu vida en los últimos meses culminan<br />
con el crecimiento de la familia, dentro de<br />
la cual, cada miembro debe buscar su sitio,<br />
adaptándose los unos a los otros y a la<br />
nueva situación.<br />
Quizás estos sentimientos tengan un origen<br />
físico, hormonal, mental, pero es seguro<br />
que están potenciados por los retos<br />
o expectativas que nos imponemos como<br />
madres y como mujeres. Es habitual que<br />
aparezca alrededor del tercer día del posparto<br />
y puede durar hasta 2-3 semanas.<br />
De hecho, si pensamos en la posible incomodidad<br />
por los puntos si los hubiera, las<br />
ganas de volver a tu casa/tu nido si has<br />
dado a luz en un hospital, las expectativas<br />
del parto cumplidas o no, la separación física<br />
del bebé que supone el fin del embarazo,<br />
el cansancio acumulado tras el parto<br />
y falta de sueño de los primeros días, la<br />
preocupación por si serás una buena madre,<br />
las dudas (muchas veces infundadas e<br />
infundidas, aunque comprensibles) sobre<br />
si tu leche le está alimentando bien, la autoexigencia<br />
de volver a las actividades de<br />
la vida diaria con prontitud, los cánones de<br />
belleza puerperal que se estilan en los medios<br />
de comunicación… la verdad es que,<br />
lo raro sería estar dando saltos de alegría…<br />
Cada mujer puede tener alguno de estos<br />
sentimientos en mayor o menor medida,<br />
todos o quizás ninguno… cada persona es<br />
distinta e incluso, en la misma mujer, cada<br />
embarazo, parto y puerperio pueden ser<br />
completamente diferentes:<br />
- Irritabilidad<br />
- Llanto<br />
- Dificultad para dormir<br />
- Ansiedad<br />
- Labilidad emocional<br />
- Dificultad para concentrarse<br />
- Impaciencia<br />
- Inapetencia<br />
Estos síntomas van desapareciendo a medida<br />
que te adaptas a la nueva situación<br />
y dicha desaparición se ve favorecida por<br />
el descanso, el alimentarse correctamente,<br />
el sentirse arropada por tus seres queridos<br />
o gozar de un apoyo profesional adecuado<br />
que sepa reconocer por lo que estás<br />
pasando y diferenciarlo de la depresión<br />
posparto que es un trastorno severo, mucho<br />
menos frecuente, que no desaparece<br />
espontáneamente, se alarga durante más<br />
tiempo y suele impedir continuar con el día<br />
a día de la madre. A diferencia de la triste-<br />
Salud<br />
<strong>Revista</strong> <strong>Nana</strong> •<br />
13