04.05.2017 Views

Revista Nana #01

La nana, una emoción cantada. Sobre el parto en casa. La importancia del movimiento en el parto. La mamá de una mama. Mamací. El papá de dos meses. La aventura del movimiento. Rabietas. Recomendaciones.

La nana, una emoción cantada. Sobre el parto en casa. La importancia del movimiento en el parto. La mamá de una mama. Mamací. El papá de dos meses. La aventura del movimiento. Rabietas. Recomendaciones.

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

padre estaba en la cocina y desde el dormitorio<br />

escuché como se las negaba y<br />

el niño comenzaba a rabiar. Tuve que ir<br />

para decirle que el niño ya había cenado y<br />

que no pasaba nada si quería unas galletas,<br />

aparte de que conociendo al niño sabía<br />

que lo que quería no era comer galletas,<br />

sino llevarse a dormir el paquete en<br />

el que vienen envueltas sin llegar a abrirlas<br />

(todas las noches se lleva algo a dormir,<br />

ya sea un muñeco, una tapa o esta<br />

vez esto). Es decir, lo que quería era irse<br />

a dormir. Le dio el paquete, el niño vino<br />

a la cama contento y se quedó dormido<br />

con el paquete intacto en la mano. Pero<br />

si no cambias el enfoque por el del niño,<br />

si no eres capaz de llegar a comprender<br />

por qué actúa de ese modo, qué es lo que<br />

quiere realmente, adaptándote tanto a lo<br />

que el niño entiende por la fase evolutiva<br />

en la que se encuentre como a lo que<br />

conoces de tu propio hijo… no vas a comprender<br />

nada, porque el enfoque seguirá<br />

siendo adulto y con atribuciones falsas.<br />

- A veces simplemente están cansados<br />

porque no han dormido bien, porque están<br />

enfermos, o porque llevan un día muy<br />

movido. En esos momentos es fácil que<br />

tengan rabietas, y es cuando más necesitan<br />

que estemos ahí y que sepamos que<br />

esto puede ocurrir. ¡Cuando nosotros tenemos<br />

un mal día o estamos enfermos<br />

o cansados también tenemos rabietas!<br />

De hecho estamos irascibles, nos enfadamos<br />

por cosas que no vienen a cuento.<br />

Imaginémonos por un momento que<br />

entonces nos ignoran, nos responden con<br />

rabia o nos reprimen, ¿qué sentiríamos?<br />

Ahora traslademos ese sentimiento a un<br />

niño que nos idolatra, para el que somos<br />

la base de seguridad y referencia emocional,<br />

al que el impacto emocional llega directamente<br />

por esa ausencia de protección<br />

cortical. Efectivamente, les afecta<br />

muchísimo más que a nosotros, les marca.<br />

- Nos tomamos al pie de la letra lo que<br />

dicen los niños y lo dramatizamos. Un<br />

niño puede decirle a su madre que quiere<br />

que se muera porque está muy enfadado.<br />

Nosotros podemos reaccionar de dos<br />

maneras: exagerando y culpabilizando al<br />

niño o del modo sano, que sería diciéndoles<br />

que vemos lo enfadados que están.<br />

- Muchas veces nosotros creamos la rabieta.<br />

Un ejemplo es el que he puesto antes<br />

de mi marido y las galletas. Otro ejemplo<br />

común es obligarles a hacer cosas sin<br />

tener en cuenta cómo es el mundo infantil<br />

en el que viven todo mediante la imaginación,<br />

el juego y la experiencia. En<br />

este caso el niño no integra, no saca más<br />

aprendizaje que el sometimiento (eso sí,<br />

luego paradójicamente pedimos adultos<br />

independientes y con iniciativa). Si un niño<br />

no quiere vestirse, podemos dejar que elija<br />

su ropa, o darle vida a la ropa jugando,<br />

o apelar a su imaginación diciendo que<br />

es una armadura de caballero o escamas<br />

de un dragón, o simplemente si hace frío<br />

dejar pasar unos minutos para que sea el<br />

mismo niño el que vea que necesita ir vestido<br />

y aprenda verdaderamente sobre el<br />

motivo de ello.<br />

- Se parte de una premisa falsa, la necesidad<br />

de frustrar a los niños desde pequeños<br />

para enfrentarles a la realidad (Teoría<br />

de la frustración de Freud). Un niño no<br />

aprende correctamente mediante la frustración<br />

de sus instintos o emociones.<br />

Aprende mediante el placer, la imitación,<br />

y como hemos dicho antes mediante el<br />

juego, la imaginación y la experiencia propia<br />

(no impuesta). Precisamente si lo que<br />

queremos es que puedan hacer frente a la<br />

vida debemos proporcionarle un entorno<br />

donde desarrollarse en base a todo esto<br />

para que se forme una persona fuerte, que<br />

sabe lo que siente y sabe gestionarlo, que<br />

es capaz de ponerse en el lugar de los demás,<br />

que es capaz de afrontar situaciones<br />

difíciles sin derrumbarse porque cuando<br />

necesitó que su base se formase tuvo esa<br />

seguridad y esa calidez. Frustrándole estamos<br />

enseñándole todo lo contrario y así<br />

le va al mundo, lleno de personas enfermas<br />

que no saben ni lo que sienten, depri-<br />

Crianza<br />

25

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!