Revista Nana #16
Masaje perineal durante el embarazo. Prematuros. Asociaciones de madres y padres de prematuros. APREMATE y APRELA. Acompañando emociones. Pantallas e infancia: De qué manera afectan a su desarrollo. Conciliación familiar y laboral. Permisos de Maternidad y Lactancia. Grupos de apoyo a la lactancia materna en las Islas Canarias. Cuidados de la piel Cuando empieza el buen tiempo. El estreñimiento: Un mal compañero de viaje para grandes y pequeños. Recomendaciones y Sugerencias de lectura.
Masaje perineal durante el embarazo.
Prematuros. Asociaciones de madres y padres de prematuros. APREMATE y APRELA.
Acompañando emociones.
Pantallas e infancia: De qué manera afectan a su desarrollo.
Conciliación familiar y laboral. Permisos de Maternidad y Lactancia.
Grupos de apoyo a la lactancia materna en las Islas Canarias.
Cuidados de la piel Cuando empieza el buen tiempo.
El estreñimiento: Un mal compañero de viaje para grandes y pequeños.
Recomendaciones y Sugerencias de lectura.
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Parto<br />
Ganas de luchar<br />
¡Felicidades, vas a ser mamá! ¡Estás embarazada!<br />
Estas dos frases ya nos indican<br />
que nuestra vida va a cambiar. Y cuando<br />
llega el día, lo que esperas escuchar es<br />
¡Felicidades, es un niñ@ precioso! Yo no<br />
escuche nada, nadie decía nada, pero escuché<br />
a mi hijo llorar.<br />
Mi bebé nació con 29 semanas y 5 días, el<br />
1 de diciembre del 2001. Nadie te prepara<br />
para ser madre, y menos para ser madre de<br />
un niño prematuro. Las primeras horas fueron<br />
duras, había que esperar. Doce horas<br />
después de su nacimiento, me dicen que el<br />
niño tiene ganas de luchar, de vivir. La primera<br />
vez que lo vi, tan pequeñito, estaba<br />
en U.C.I. de Neonatos. La enfermera giró la<br />
incubadora para que lo viera, apenas cinco<br />
minutos. Cabía en la palma de su mano, ¿y<br />
ese pizco quiere luchar?<br />
Pasaba horas en una sala de lactancia que<br />
había en Neonatos intentando, con el sacaleches,<br />
dejar las cantidades de leche que<br />
me indicaban. Era imposible, perdí la leche<br />
a los pocos días, aunque seguí intentándolo<br />
en casa, nunca lo logré.<br />
Me pasaba todo el día en la U.C.I. de<br />
Neonatos, aunque no pudiera entrar.<br />
Sentía que mi hijo sabía que yo estaba ahí<br />
fuera. Todo lo que hacía era esperar a que<br />
llegasen los 20 minutos de la mañana y los<br />
20 de la tarde que me correspondían, para<br />
verlo. El 9 de diciembre, 9 días después de<br />
su nacimiento, pude cogerlo por primera<br />
vez. Fueron los dos minutos más intensos<br />
y maravillosos de mi vida. Fue todo tan rápido.<br />
Yo estaba entrando a verlo, con mi<br />
bata, mis manos lavadas, mis calzas... y de<br />
repente algo pasó en su incubadora y tuvieron<br />
que sacarlo. El enfermero que lo tenía<br />
en brazos, inesperadamente, me lo dió<br />
Asociación de<br />
Padres y Madres de<br />
Prematuros de Tenerife<br />
630 99 28 85<br />
info@apremate.org<br />
¿saben qué hice? Olerlo... olía a bebé.<br />
Pasó un tiempo en el hospital donde fue<br />
atendido maravillosamente, con un cariño,<br />
un amor del que estaré eternamente agradecida.<br />
Y llegó el día de llevarlo a casa.<br />
Ilusionada y agotada afrontaba una nueva<br />
etapa. Mi hijo venía a casa, pero me llevaba<br />
a un niño que, al alta, pesaba 1900 gr.<br />
y necesitaba muchos cuidados. Recuerdo<br />
vestirlo y la ropa, que era muy pequeñita,<br />
le quedaba muy grande, aun así estaba<br />
guapísimo. Fueron unos días fantásticos.<br />
Venía una enfermera a casa días alternos.<br />
Hasta que una mañana todo cambió, apenas<br />
respiraba, estaba cianótico. Los minutos<br />
hasta llegar al materno fueron eternos.<br />
Poco después mi niño estaba en U.C.I., otra<br />
vez. Y ahí estaba yo, nuevamente, sentada<br />
frente a la U.C.I., pero ya no era neonato.<br />
Cuando el médico habló conmigo, no podía<br />
creer lo que me contaba. Yo solo me<br />
agarraba a aquella frase que me habían dicho<br />
cuando nació ¡tu niño tiene ganas de<br />
luchar! Tuvieron que preparar una minicuna<br />
dentro de la cuna por lo pequeño que<br />
era. Le pusieron su nombre con pegatinas<br />
de personajes infantiles, me lo cuidaban<br />
muy bien y yo estaba tranquila, pero no me<br />
podía ir. Salió para adelante, me lo llevé a<br />
casa y continuamos con los cuidados que<br />
me indicaron.<br />
Cierto es, que es un niño algo más enfermizo<br />
que los demás, que todos estos años no<br />
han sido fáciles para la familia, pero tengo<br />
un hijo de 15 años a quien amo; más alto<br />
que sus padres, con una talla 44 de zapato.<br />
Hace tiro con arco, está terminando 4º año<br />
de la E.S.O., decidido a estudiar medicina y<br />
con muchas ganas de vivir.•<br />
Natalia<br />
Mamá de un niño estupendo (y prematuro)<br />
Asociación de<br />
Prematuros de Las Palmas<br />
648 89 65 65<br />
aprela.org@gmail.com<br />
10 • <strong>Revista</strong> <strong>Nana</strong>