Rock To Rock Magazine N°1

Entrevista a Benjamín Lechugai
¿Crees que es posible para un
músico gestionar una visión
de negocio y, a la vez, reflejar
toda la pasión musical que
posee para así poder liderar y
producir un producto exportable?
Benjamin
Lechuga
Benjamín es un músico que con mucho esfuerzo y perseverancia
en pocos años de trabajo se ha abierto un
brillante camino dentro de la escena musical chilena,
siendo no solo reconocido en el país, sino que además
internacionalmente. Su carrera ha estado lleno de
aciertos tanto a nivel de gestión como también musicalmente.
Conversamos un poco con Benjamín para
que nos de su mirada sobre exportación del producto
musical.
Benjamín, a grandes rasgos,
¿Cuáles crees que son las
grandes deficiencias de las
producciones nacionales para
generar un material exportable?
Creo que hoy muchas bandas
ya están logrando un producto
sumamente profesional tanto
composicionalmente como en sonido,
totalmente exportable, pero
creo que donde más nos caemos
como país es en 2 aspectos. Primero,
creo que el proceso creativo
aquí está muy enfocado en sonar
como otras bandas, sobre todo
internacionales. El concepto de
identidad musical no se logra del
todo y creo que eso es primordial
si quieres salir adelante con
tu proyecto. Iron Maiden ya hay
uno y por muy buenos que sean
tus temas, si suenas igual o muy
parecido a otra banda, el público
lo nota y pierde el interés. El
otro punto sería en el proceso de
difusión y promoción de nuestro
material. Muchos nos preocupamos
de sacar un buen material,
pero luego nos vemos en la
situación de “qué hacemos con el
disco ahora que ya lo lanzamos”
y ahí tenemos mucho que aprender...
yo sigo aprendiendo y aún
no se como se hace.
¿Qué es para ti la diferencia
entre sacar un disco y sacar
un disco exportable?
Yo creo que tiene que ver con la
pregunta anterior. Una producción
no es exportable hasta que
uno aprende a promocionarla. A
veces hay bandas no tan importantes
que son muy movidas y
que logran sacar el material a
puro empuje. Por otro lado hay
bandas buenísimas cuyos discos
nunca salen de sus casas. Si uno
no hace el esfuerzo, nadie lo hará
por uno.
Creo que esa es la única manera
de salir adelante. Por un lado,
que la pasión se refleje en sinceridad
y en un producto único,
que nadie más pueda entregar. El
arte es un reflejo de la personalidad
y emocionalidad del artista, y
si todos somos humanos distintos
y especiales, nuestro arte
también debe serlo. Y por otro
lado, soy un creyente de que uno
como músico tiene que aprender
a vender su arte y no hacer arte
pensando en vender. Son conceptos
tremendamente distintos.
Sabemos que tienes una carrera
internacional en ascenso,
¿Qué aprendizajes has obtenido
dentro tus vivencias sobre
el trabajo de producción de un
disco en Europa versus lo que
ocurre aquí en Chile?
Todos los discos que he grabado
los he producido en Chile, pero
claro, me ha tocado vivir y tocar
en Europa y la diferencia no es
tanta. Ser músico es difícil en
todo el mundo, ahora coincide
que en el metal especialmente,
Europa es una cuna y es un lugar
perfecto para desarrollarse,
sobretodo por sus cualidades
geográficas. Allá arriendas una
van y te puedes ir de gira por
muchísimos países. Aquí para ir a
los países vecinos es un infierno.
Con Argentina nos separa la cordillera,
y para llegar a la capital
peruana son casi 2,500Kms.
Además Chile es tremendamente
centralizado. Chile es muy poco
favorable geográficamente como
para irse de gira.
Benjamin es guitarrista de Delta,
galardonado el 2005 por la
Ibanez Project, y el 2011 en el
Steve Vai Scholarship.
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