AguaTinta N°22
Inmigración y Exilio - Marzo de 2017
Inmigración y Exilio - Marzo de 2017
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t Familias españolas rumbo al exilio, fotografiadas por la revista<br />
francesa VU.<br />
permitió recuperar ciudades en el sudoeste de Francia. En<br />
un principio, esta solidaridad miliciana fue muy bien vista<br />
por las autoridades, por considerar que servía al país. Pero<br />
como los republicanos eran tratados de “rojos” y vistos<br />
con mucho recelo por ser guerrilleros revolucionarios, al<br />
finalizar la guerra, el 7 de septiembre de 1950, se llevó a<br />
cabo una operación llamada “Bolero-paprika” por parte de<br />
la policía francesa en la que fueron detenidos y relegados<br />
117 comunistas republicanos por considerarlos como<br />
peligrosos subversivos. Asimismo, 12.000 republicanos<br />
pasaron de campos de refugiados a campos nazis, ya<br />
fuese de trabajo forzado o de exterminio. Varios de ellos<br />
murieron por luchar contra el fascismo en suelo francés. Al<br />
respecto, Luis Bonet apunta: “Muy mal ejemplo para todos<br />
los obreros del mundo asistir al cambio de un régimen<br />
capitalista por una República Socialista. Entonces, por<br />
todas esas razones nos han condenado a la arena eterna,<br />
donde nuestros guardianes no son cerberos (2) , sino<br />
militares senegaleses igual de terribles y brutales (...). Y<br />
ahora que hemos purgado nuestra pena en el infierno de<br />
Saint Cyprien he aquí que quieren enviarnos al purgatorio<br />
de Barcarès” (3) .<br />
Toulouse, capital del exilio republicano<br />
Finalizada la Segunda Guerra Mundial y tras la<br />
recuperación de la soberanía del país galo, se cierran<br />
los campos de concentración de refugiados como el de<br />
Rivesaltes -actualmente un sitio de memoria abierto<br />
al público- que, a la vez, habían servido a la ocupación<br />
nazi. Paralelamente, comienza la reconstrucción de las<br />
ciudades y pueblos devastados por la conflagración, para<br />
la que muchos refugiados son solicitados como mano de<br />
obra gratuita.<br />
Si bien muchos habían partido a París pues les daba la<br />
doble posibilidad de trabajar y ejercer una militancia activa,<br />
contribuyendo a la causa de la resistencia desde el exilio,<br />
la mayoría optó por el sudoeste de Francia. Según indica<br />
Florence Guilhem, a comienzos de los 50 “los españoles<br />
residían principalmente en 13 departamentos del Sud<br />
Oeste de Francia en la Gironda, Landes, Bajos Pirineos,<br />
Altos Pirineos, Alta Garona, Ariège, Aude, Lot, Lot y Garona,<br />
Tarn, Tarn y Garona, Gers y en el Aveyron constituyen más<br />
de la mitad de la población extranjera: 159.020 españoles<br />
son censados sobre 292.024 extranjeros; es decir son el 54<br />
por ciento del total de los extranjeros en este territorio” (4) .<br />
Tal vez por su importancia como ciudad y, como se ha<br />
dicho, por su cercanía con España, destaca su presencia en<br />
la capital de la región, Toulouse. Allí se llevaron también<br />
a cabo numerosas asambleas de los partidos de izquierda<br />
(Socialista y Comunista) así como de los anarquistas de<br />
la CNT (Sindicato Anarquista de los Republicanos, en su<br />
mayoría catalanes) con el objetivo intacto de derrocar al<br />
dictador Franco, a través de acciones militares como el<br />
fracasado ataque guerrillero en el Valle de Arán, la primera<br />
de ellas en octubre de 1944. O acordando estrategias<br />
políticas, entre ellas, la denuncia ante las instancias<br />
internacionales (ONU, Unesco), que buscaban aislar a la<br />
España franquista.<br />
En Toulouse es posible ver aún la impronta de estos<br />
españoles. Por ejemplo, el actual Hospital Joseph Ducuing,<br />
creado en 1944, con el nombre de Hospital de Varsovie por<br />
los guerrilleros comunistas españoles, a objeto de atender<br />
tanto a los heridos de la resistencia antinazi como a<br />
quienes escaparon de la muerte en la invasión del Valle de<br />
Arán, conserva una placa que recuerda a sus fundadores.<br />
“A pesar de la derrota y las desilusiones que conlleva<br />
la operación del Valle de Arán, el proyecto del retorno<br />
queda bien instalado en el universo de los refugiados pues<br />
es constitutivo de su identidad: es deseando el regreso<br />
que se es y se sigue siendo un español republicano en<br />
exilio. Por eso es necesario continuar el combate contra<br />
el régimen franquista, incluso en tierras del exilio. Es con<br />
ese espíritu que se reorganiza la acción”, dice Florence<br />
Guilhem en otro de sus libros sobre el tema (5) .<br />
Como la dictadura no mostraba visos de cesar,<br />
continuaron llegando a Francia refugiados políticos y<br />
económicos, provenientes de una España arruinada. Esta<br />
vez la acogida fue distinta, puesto que no existían más los<br />
campos de refugiados y los mismos españoles que estaban<br />
ya asentados en Francia les recibieron solidariamente.<br />
Les unía el mismo anhelo de volver algún día a su querida<br />
(2) Gentilicio español para Cerbère.<br />
(3) Bonet, Luis. Op. cit., págs. 92-93.<br />
(4) Guilhem, Florence. L’obsession du retour: Les refugies espagnols 1939 -1975. Presse Universitaires du Mirail, Toulouse, 2005.<br />
(5) Guilhem, Florence. L’exile espagnol dans le sud-oest de la France: de la obsession du retour à l’intégration (1936- 1975). Thése<br />
d’Histoire, IEP de París, 2001.<br />
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