Edición Marzo 2017

cumplir con aquello que les apasiona.
Unos tocarán un instrumento, puede ser en la banda
del colegio o fuera de allá; otros estarán en algún
equipo deportivo (fútbol, béisbol, básquetbol, y ahora
fútbol americano, o el popular “flag football”) con
lo cual habrán prácticas a la que asistir y que decir
de las fiestas que surgen durante todo el año.
Ahora bien, cómo se organiza para que todos
puedan cumplir con sus agendas, algunas familias,
para no decir mamás o papás, se organizan con
otras para hacer el famoso “carpool” donde una
mamá por semana se encarga de llevar o traer a
varios compañeros. Y así se van haciendo más
fácil lo traslados.
Algunos tienen la dicha de tener a esa abuela jubilada
que le encanta estar activa y que dice… yo los
busco y los traigo. O la tía jubilada o la jovencita
que está aún en la universidad o que está de vacaciones,
y las amigas. Otros tienen la suerte de tener
una súper nana que hasta maneja y hace las veces
de chofer. ¡Que dicha!
Y los actos? Qué decir de las actividades donde
los niños y jóvenes son los artistas principales.
Ensayos, rutinas, bailes, vestuario, escenografía
y de nuevo … “mamaaaa puedes traerme papel
escarchado color cereza pálido y una pizza que no
hemos comido”
Un maravilloso desenfreno en el que tenemos que
apoyarlos en todo momento para que puedan descubrir
su verdadera pasión, ya que todas estas actividades
curriculares o no, llevan a formar carácter,
les da responsabilidades que cumplir, organizando
su tiempo y sobretodo forman lazos de amistad.
Al final este cuento se repite año tras año, hasta
que los herederos levanten el vuelo hacia otras latitudes,
pero mientras dure el “caos” es importante
hacerse de un sistema de apoyo que pueda “resolver”
en el momento que mamá o papá no pueda por
sus compromisos laborales.
Bienvenidos a un nuevo año escolar lleno de retos,
actividades y el más maravilloso de los enredos que
con un poco de organización, pasa de ser un caos a
una de las experiencias más enriquecedoras de todo
ser humano.
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