revista21

104 Oviedo
das. Nunca escribir con “ñ”, para ser fieles al idioma.
No cabe duda que las especialidades más afamadas
son el pote, el cachopo, los quesos, el arroz con leche,
etc., pero por encima de todos ellos sobresale la fabada
asturiana, una cosa que debe probarse sin duda.
El lugar ideal para degustar todo, es el denominado
el Bulevar de la Sidra, la Gascona.
Saliendo de la ciudad y a muy pocos kilómetros, nos
encontramos con el ya mencionado Monte Naranco,
es una colina de más de 600 metros de altitud y que
permite tener a los pies toda la ciudad de Oviedo, por
lo que se disfruta de una vistas impresionantes en
días claros, además dispone de un espacio de más de
30.000 metros cuadrados de espacios verdes. Es un lugar
ideal para dar paseos, hacer senderismo y abstraerte
de ruidos de las ciudades, entrañable paraje para los
habitantes de la ciudad.
Aunque se puede ascender hasta la cima en coche,
muchos lo hacen andando y por eso es fácil cruzarte
con personas que bien pertrechadas para la caminata
recorren todo el camino a pie.
Elegida la forma de hacer el recorrido y durante el
transcurso de la ascensión, nos encontramos con dos
joyas de la época prerrománica, ambas declaradas
Patrimonio de la Humanidad en 1.985.
Revista de cultura y viajes / Marzo 2017 / www.icruceros.eu