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Oviedo 103
Oviedo
Es obligado señalar que en 1984 se creó en la ciudad,
la Fundación Príncipe de Asturias, que entrega los afamados
Premios Príncipe de Asturias.
El casco antiguo de la ciudad y sus alrededores, están
prácticamente peatonalizados y por eso, se hace muy
agradable su visita. Aquí nos encontramos importantes
palacios, teatros, centros administrativos todo tipo de
comercios y lugares dedicados a la restauración.
Quizá el punto verde más importante en el centro de la
ciudad sea el denominado Campo de San Francisco, y
en uno de sus costados nos encontramos con la Plaza
de la Escandalera, lugar ideal para iniciar cualquier vista
de la ciudad, sin importar mucho la dirección a tomar.
De su visita he sacado la conclusión de que la ciudad
hay que conocerla desde dos puntos de vista, el primero
por sus monumentos, edificios y calles, el segundo
por su aspecto culinario, que cómo en todo el norte de
España se pueden degustar comidas exquisitas.
Si nos ceñimos al primer aspecto, es fácil quedarse
sorprendido con el edificio de la Presidencia del
Principado de Asturias en el inicio de la Calle Fruela, el
Ayuntamiento en la Plaza de la Constitución, la Santa
Iglesia Catedral de San Salvador el la Plaza de Alfonso
II El Casto, el Teatro Campoamor en la calle Pelayo,
era el lugar que ocupaba el antiguo convento de Santa
Clara, convertido en teatro en 1.892, etc.
Merece una especial mención la fuente denominada
“Foncalada”, con su diseño original, una de las primeras
fuentes de agua potable de la ciudad, mandada construir
por Alfonso III. Y también, el hotel más famoso de
la ciudad, llamado de La Reconquista.
Habría que emplear mucho espacio para describir
toda la ciudad con su historia.
El segundo aspecto y no menos importante, es el culinario.
Es increíble ver como la gente hace la degustación
de la “sidrina”, es como una religión, su forma
de escanciarla, saborearla en su justa temperatura y
acompañarlas con todo de tipo de aperitivos y comi-
Revista de cultura y viajes / Marzo 2017 / www.icruceros.eu