10.03.2017 Views

Kresley Cole - Serie Immortals After Dark 07 - El Beso del Rey Demonio

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

KRESLEY COLE<br />

<strong>El</strong> <strong>Beso</strong> <strong>del</strong> <strong>Rey</strong> <strong>Demonio</strong><br />

6° de la <strong>Serie</strong> <strong>Immortals</strong> <strong>After</strong> <strong>Dark</strong><br />

CAPÍTULLO 17<br />

—¿Omort sigue catatónico?—le preguntó Lanthe por telepatía mientras esquivaba la flecha<br />

extraviada de un centauro.<br />

Sabine descargó su larga espada en el cuello de un vampiro desde atrás, haciéndole un corte<br />

limpio.<br />

—No, catatónico no. Sólo cada vez más loco. —Con sus botas d puntera metálica dio un<br />

puntapié para apartar la cabeza cortada <strong>del</strong> vampiro. —<strong>El</strong> ojos vidriosos, sudoroso Omort, reclama<br />

sacrificios.<br />

Hacía unas pocas horas, Sabine había ido de nuevo a la torre de Omort, un lugar que odiaba,<br />

para implorarle que diezmara el ejército que iba a atacarlos. Se lo encontró sentado en su cama,<br />

recibiendo los mimos de Hettiah, que todavía se estaba curando de sus heridas, y exigiendo otro<br />

sacrificio.<br />

—¡Alguien joven! —gritó el brujo.<br />

—No podemos ganar sin Omort—dijo Lanthe. —Terminarán por encontrarnos. Sólo tienen que<br />

seguir la estela de cuerpos sin cabeza que vamos dejando atrás.<br />

Lo de ser invisible tenía sus ventajas.<br />

—Tienes razón.<br />

Los zombis eran luchadores bastante decentes, pero no pensaban. En cambio, los libitine que<br />

merodeaban por el cielo nocturno, y eran excelentes asesinos, jugaban con sus víctimas.<br />

Los centauros llevaban flechas envenenadas, pero estaban en desventaja ante los vampiros,<br />

con su capacidad de teletransportarse, porque eran blancos y muy grandes; varios vampiros<br />

podían lanzarse sobre la espalda de un centauro, hasta tirarlo al suelo desangrándolo desde el<br />

principio.<br />

Unos pocos vampiros de Lothaire estaban cavando una zanja. Sabine espió a éste desde el<br />

campo de batalla, y vio cómo atacaba a otros de su especie, descuartizándolos con una salvaje<br />

sonrisa en la cara; era la primera vez que lo veía sonreír. Llevaba el cabello trenzado y parecía una<br />

fiera, con las trenzas todas ensangrentadas.<br />

Sabine ladeó la cabeza. Era tan alto como el demonio, pero no tan musculoso. «¿Por qué estoy<br />

pensando en el demonio ahora?»<br />

Dio una estocada hacia a<strong>del</strong>ante atravesando a un vampiro. Una vez se deshizo de él, vio cómo<br />

Lanthe acababa con una de esas sanguijuelas, atravesándola con la espada.<br />

Normalmente, la joven era una persona pensativa y considerada, pero en combate era<br />

imparable. Más de una docena de veces Sabine había querido gritar: «¡Esa es mi hermana!».<br />

—¡Sabine!—gritó Lanthe de golpe. —¿Cómo es que los vampiros nos están mirando?<br />

Miró a su alrededor. Eran... ¿visibles? Movió rápidamente la mano para conjurar otra ilusión,<br />

pero fue en vano.<br />

Sólo había una persona que pudiese contrarrestar su poder de esa manera.<br />

—Hettiah. —Las había hecho visibles. —¿Puedes crear un portal? —le preguntó Sabine a su<br />

hermana mientras ambas se colocaban espalda contra espalda, haciendo girar las espadas<br />

levantadas, en busca de una salida.<br />

Escaneado por CHARO – Corregido por Mara Adilén Página 94

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!