Mujeres por la Igualdad

Partido Unidad Popular

La historia del voto femenino en México
Por: Enriqueta Tuñon Pablos
Investigadora del Colegio de la Frontera Sur (ECOSUR)
Paridad de género en México. Anverso y reverso
Por: Blanca Olivia Peña Molina.
Investigadora de Estudios de Género y Poder Político de la
Sociedad Mexicana de Estudios Electorales (SOMEE)
Rutas de las mujeres en situación de migración a
ambos lados del Atlántico
Por: Erika Lilí Díaz Cruz
La mujer negra: Buscando su empoderamiento
Por: Israel Reyes Larrea
Las mujeres más influyentes del verso
latinoamericano
Por: María de los Ángeles Espinoza Ramos
A Malintzin
Por Guadalupe Ángela Ramírez.
El género en los Estatutos del PUP
Por: Veremundo Jiménez Jiménez
Testimonio sobre Equidad de Género de la mujeres
indígenas en la Mixteca oaxaqueña
Por: Narcedalia Hernández Martínez
La lucha por la Equidad de Género en la vida
política de San Miguel Tlacamama, Oax.
Por: Rosalba Domínguez Santiago
Presidenta Municipal Electa de
San Miguel Tlacamama, Oax.
Galería Fotográfica 44
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índice
Partido Unidad Popular

Lic. Uriel Díaz Caballero
Presidente del Partido Unidad Popular
Lic. Santiago García Sandoval
Secretario General
Lic. María de Lourdes García Caballero
Secretaría de la Mujer
C. Hugo García Osorio
Secretría de la Defensa y del Desarrollo de
las Culturas
C.D. Victoria Sánchez Sánchez
Secretaría de Comunicación Social, Prensa y
Propaganda
Foto de portada:
Haydée Morales
Fotografías:
Haydée Morales
Israel Reyes Larrea
Se imprimieron 2000 ejemplares, en papel
couche de 135 grs. en portada, e interiores
en papel cultural de 70 grs. en los talleres
gráficos de Inteligencia Creativa del Valle
S.A. de C.V.
Con agrado les presentamos el primer
número de la revista “Mujeres por
la igualdad”, que tiene como objetivo
mantenernos en comunicación con las
compañeras y compañeros del Partido
Unidad Popular (PUP) y con organizaciones
cercanas para dar a conocer lo que se viene
trabajando en torno a la Equidad de Género
y Ciudadanía en los últimos años.
La revista “Mujeres por la igualdad” es un
espacio de análisis, que abre la puerta a la
evaluación que nos permite redimensionar
las ideas preconcebida y cuestionar los
aprendizajes obtenidos en las escuelas, la
familia o las comunidades, ponerlo en tela
de juicio y construir una capacidad crítica
y toma de decisiones propia. Ello genera
empoderamiento entre las compañeras
y los compañeros, la adquisición de
conocimiento para el diálogo, porque así
lo han aprendido al interior del Partido,
pero también para la exigibilidad, porque
se incluya un componente de incidencia, de
cabildeo, de contacto con las y los servidores
públicos y de interlocución.
El PUP es un partido que promueve la
igualdad entre mujeres y hombres, así
como políticas con enfoque de género,
el fortalecimiento de liderazgo y la
participación de las mujeres en todos los
ámbitos de la vida partidaria.
directorio
editorial
Partido 1 Unidad Popular

La historia del voto
femenino en México
ENRIQUETA TUÑON PABLOS
El 17 de octubre de 1953 apareció en el Diario Oficial un decreto en
el que se anunciaba que las mujeres tendrían derecho a votar y ser
votadas para puestos de elección popular. Esto fue el resultado de
un largo proceso que había comenzado muchos años atrás y que aquí
explico. Durante la Revolución mexicana, la incorporación de las
mujeres fue importante, no sólo como acompañantes de los hombres
y realizando sus tareas tradicionales (lavar, cocinar y cuidar a sus
hijos, entre otras), sino que también tuvieron actividades militares.
Se dedicaron a difundir ideas revolucionarias, fueron espías,
correos y enfermeras, consiguieron ayuda para la población civil
y colaboraron en la redacción de proyectos y planes. Realmente
fue una contribución activa e importante. Tradicionalmente se ha
dicho que las que participaron, lo hicieron para ayudar a sus hijos
y esposos, que su lucha fue callada y desinteresada, pero es muy
probable que ellas hayan sentido que su situación mejoraría en
el momento que las cosas cambiaran en el país. A fines de 1916,
Hermila Galindo, secretaria particular de Venustiano Carranza,
envió al constituyente un escrito en el que solicitó los derechos
políticos para las mujeres argumentando lo siguiente:
“Es de estricta justicia que la mujer tenga el voto en las elecciones de
las autoridades, porque si ella tiene obligaciones con el grupo social,
razonable es, que no carezca de derechos. Las leyes se aplican por
igual a hombres y mujeres: la mujer paga contribuciones, la mujer,
especialmente la independiente, ayuda a los gastos de la comunidad,
obedece las disposiciones gubernativas y, por si acaso delinque,
sufre las mismas penas que el hombre culpado. Así pues, para las
Partido Unidad Popular
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obligaciones, la ley la considera igual que al
hombre, solamente al tratarse de prerrogativas,
la desconoce y no le concede ninguna de las que
goza el varón”.
Eran argumentos coherentes con el liberalismo
político del constitucionalismo que, en las
Adiciones al Plan de Guadalupe de 1914, se
había comprometido a: “asegurar a todos los
habitantes del país la efectividad y el pleno
goce de sus derechos y la igualdad ante la ley”.
Sin embargo, al redactarse la Constitución de
1917 nos encontramos con que, al discutirse
la petición, se decidió -sin mucha discusiónnegar
a las mujeres los derechos políticos
argumentando:
“[…] en el estado en que se encuentra nuestra
sociedad […] las mujeres no sienten la necesidad
de participar en los asuntos públicos, como lo
demuestra la falta de todo movimiento colectivo
en este sentido”.
Y a pesar de que había habido una incorporación
masiva de las mujeres a la lucha armada, al
redactar la Constitución declaraban:
“El hecho de que algunas mujeres
excepcionales tengan las condiciones para
ejercer satisfactoriamente los derechos políticos
no funda la conclusión de que éstos deban
concederse a la mujer como clase. La dificultad
de hacer la selección autoriza la negativa”.
En estos argumentos vemos que los legisladores
encadenaron los intereses de las mujeres al
hogar y a la familia, y también afirmaron que a
ellas no les interesaba tener derechos políticos
al decir que había: “falta de todo movimiento
colectivo en ese sentido”.
Sin embargo, nos podemos percatar que era a
ellos –a los congresistas varones–, a quienes
no les interesaba que las mujeres obtuvieran el
derecho a votar ya que temían que se rompiera
la “unidad familiar”, un argumento que 35
años después esgrimieron algunos diputados
que también estaban en contra de la medida.
Temían que con “el avance de la civilización”,
las mujeres se interesaran por asuntos ajenos
a sus hogares y sus familias y los abandonaran,
por eso había que mantenerlas fuera del juego
democrático. Los constituyentes hicieron un
diagnóstico de la situación de las mexicanas y
las dejaron entregadas a su propia suerte. Por
un lado, les negaron el derecho al sufragio, y
por otro, no hubo una propuesta consistente
para sacarlas fuera del círculo restringido del
hogar y educarlas políticamente. Esta postura
generará un déficit histórico respecto a la
educación cívica de las mujeres y se reflejará
en el futuro comportamiento electoral y en su
pasividad en el ámbito político.
En cuanto a la afirmación de que sólo a las
mujeres “excepcionales” en algún momento
se les podría otorgar este derecho, es
interesante hacer notar que en este sentido,
los constituyentes emplearon argumentos
diferentes cuando discutieron los derechos
políticos de los hombres y los de las mujeres.
En el momento en que se decidió que los
hombres analfabetas tuvieran derecho al voto,
el argumento fue que “razones de política
impiden que la doctrina pueda llevarse a
cabo”: puesto que el sufragio universal fue
lema de la Revolución, los constitucionalistas
no podían arriesgarse a que sus enemigos los
acusaran de faltar a uno de los principios del
movimiento revolucionario. Sin embargo, para
el caso de las mujeres, no se tomaron en cuenta
las “razones de política” antes señaladas.
De esta forma, la negación del sufragio
femenino basada en la supuesta incapacidad
de las mujeres para el ejercicio ciudadano, fue
una argumentación parcial que no consideró
que parte de la población masculina tampoco
tenía una educación cívica suficiente como para
ejercer la ciudadanía con plena conciencia.
Así, el Artículo 34 de la Constitución quedó
Partido 3 Unidad Popular

duró poco, sólo el tiempo que estuvieron en el
poder los gobernantes que las postularon.
PRIMEROS PASOS
redactado de la siguiente forma:
“Son ciudadanos de la República todos los
que, teniendo la calidad de mexicanos, reúnan
además los siguientes requisitos:
I. Haber cumplido 18 años siendo casados y 21
si no lo son y
II. Tener un modo honesto de vivir”.
El 23 de enero de 1917, el artículo se redactó
en masculino; las mujeres fueron omitidas,
es decir, no fueron tomadas en cuenta en la
redacción. Tres días después, el día 26, en
la sesión del Congreso constituyente, Félix
Palavicini advertía del peligro que implicaba
esta omisión:
“El dictamen dice que tienen voto todos los
ciudadanos, está el nombre genérico; esta
misma redacción tenía la adición que existe
en la Constitución del 57 y que se conserva
hoy, y yo deseo que aclare la Comisión en qué
condiciones quedan las mujeres y si no estamos
en peligro de que se organicen para votar y ser
votadas”.
Y tenía razón, porque justamente de esto se
valió Hermila Galindo para postularse como
candidata a diputada en 1918, y a pesar de que
se dijo que había obtenido la mayoría de los
votos, el Colegio Electoral no se lo reconoció.
Ella sabía que eso sucedería, pero era la manera
de desafiar, en los hechos, a la ley, y además
mostrar a la opinión pública lo injusta que era
esa situación para las mujeres. Después de la
promulgación de la Constitución, durante los
años veinte hubo algunos intentos de otorgar
a las mujeres el derecho al sufragio. En este
sentido, entre 1923 y 1925 en Yucatán, San
Luis Potosí y Chiapas se concedió la igualdad
política para las mujeres para votar y ser
votadas, lo que hizo que varias se convirtieran
en diputadas. Sin embargo, esta experiencia
Partido Unidad Popular
Yucatán fue el primer estado que reconoció
el sufragio femenino, tanto en el ámbito
municipal como estatal, durante el gobierno
de Felipe Carrillo Puerto (1922-1924). Así, en
1923, hubo tres mujeres electas para diputadas
al congreso estatal: Elvia Carrillo Puerto
-hermana del gobernador-, Raquel Dzib y
Beatríz Peniche de Ponce; además Rosa Torre
fue electa para regidora en el ayuntamiento de
Mérida. Sin embargo, cuando el gobernador
murió asesinado en 1924, las cuatro tuvieron
que dejar sus puestos. En San Luis Potosí, las
mujeres obtuvieron el derecho a participar
en las elecciones municipales en 1924 y en
las estatales en 1925. Sin embargo, durante
el gobierno de Rafael Nieto la ley había sido
derogada (1926). En Chiapas, se reconoció el
derecho a votar a las mujeres en 1925.
Para finales de la década –en 1929–, con la
fundación del Partido Nacional Revolucionario
(PNR), se redactó su Declaración de Principios
y en su primer punto decía: “… ayudará y
estimulará paulatinamente el acceso de la
mujer mexicana a las actividades de la vida
cívica…”. De esta manera, las mujeres podían
suponer que en un futuro podría haber un
cambio en la posición gubernamental en
relación a su participación en la vida cívica
del país. Ese cambio no se dio sino hasta la
segunda mitad de los años treinta, durante el
gobierno de Lázaro Cárdenas, cuando el tema
volvió a tomarse en cuenta.
IMPULSO DE 50 MIL MUJERES
El cardenismo implantó un proyecto político
nacional cuyo interés era relacionarse de
manera peculiar con los sectores sociales,
permitiéndole enfrentar los problemas básicos
que tenía el país con un margen importante de
éxito.
Este proyecto nacional contempló la creciente
intervención del Estado en la vida económica y
social, la recuperación de los recursos básicos
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que tenía el país que estaban en manos
de los extranjeros, la reforma agraria y la
organización amplia de los trabajadores. Para
desarrollar este proyecto, era necesario lograr
un amplio consenso y compromiso popular,
de ahí que se diera capital importancia a
las acciones de los trabajadores, guiadas y
conducidas por el gobierno.
En este contexto se formó el Frente Único Pro
Derechos de la Mujer (FUPDM) constituido
formalmente en 1935 y que llegó a contar
con 50 mil mujeres afiliadas. Hubo mujeres
de diferentes profesiones y tendencias:
intelectuales, profesionistas -maestras
sobre todo-, obreras, mujeres pertenecientes
a diversos sindicatos y partidos políticos,
veteranas de la Revolución, “feministas de
izquierda y de derecha, simples liberales,
católicas y del sector femenino del PNR,
callistas y cardenistas”.
Esta diversidad conseguida por el Frente se
debió a que si bien su demanda principal era
alcanzar el derecho al voto, en su programa
había otros puntos que hacía que se acercaran
mujeres de las más diversas tendencias. Al
respecto nos dice Adelina Zendejas:
“El programa de lucha era muy concreto y
tan amplio que importaba a todas: ¿quién iba
a estar en contra de la lucha por abaratar la
vida, contra la instalación de servicios médicoasistenciales
que le dieran atención a la
maternidad, contra el principio a trabajo igual
salario igual? […] Esto importaba a todas:
católicas, protestantes, comunistas”.
Desde una perspectiva histórica actual, la
opinión de Adelina Zendejas es cuestionable
porque las reivindicaciones que ella señala
son de carácter netamente clasistas y algunas
dirigidas exclusivamente a las mujeres
trabajadoras, que en esos años no eran la
mayoría de la población femenil. Por eso lo
más importante para las mujeres de distintas
clases sociales, reunidas en el Frente, fue el
voto, ya que las otras demandas no lograron
conciliarlas. Así, a partir de 1937 el FUPDM
se mantuvo estructurado fundamentalmente
en torno a una sola demanda: el derecho al
sufragio.
En 1937 Cárdenas afirmó que: “En México el
hombre y la mujer adolecen paralelamente
de la misma deficiencia de preparación, de
educación y de cultura, sólo que aquel se ha
reservado para sí derechos que no se justifican”.
Ante esta declaración las mujeres organizadas
nombraron a Soledad Orozco (miembro del
PNR) como candidata a diputada por León,
Guanajuato y a Refugio García (integrante
del FUPDM) por Uruapan, Michoacán. Esto
causó revuelo ya que se declaró que para que
ellas pudieran participar en las elecciones, era
necesario reformar primero la Constitución.
Las mujeres del Frente se movilizaron:
organizaron mítines, manifestaciones,
conferencias, llegaron a amenazar con quemar
el palacio nacional y también iniciaron
una huelga de hambre frente a la casa del
presidente Cárdenas. Ante esta presión, en
agosto de 1937, él prometió enviar al Congreso
una iniciativa de ley para reformar el artículo
34 constitucional.
LA APROBACIÓN
El 1º de septiembre en su Informe al Congreso,
el mandatario defendió su propuesta
argumentando que las mujeres no sólo habían
alcanzado ya una igualdad en los aspectos
civil, económico y educativo con respecto a los
varones, sino que, justamente gracias a esta
situación de igualdad, las ideas revolucionarias
se habían arraigado tanto en la conciencia de
los ciudadanos, que no existía el peligro de que
las fuerzas conservadoras del país, ejercieran
una influencia peligrosa en las mujeres.
Por otro lado, defendía la supuesta ignorancia
femenina para decidir sobre las luchas
Partido 5 Unidad Popular

democráticas, criticando a los hombres que
se olvidaban de su propia ignorancia cuando
llegaba el momento de juzgar la de la mujer.
La iniciativa pretendió que el artículo
estableciera: “Son ciudadanos de la República
todos los hombres y las mujeres que, teniendo
la calidad de mexicanos, reúnan además los
siguientes requisitos:
I. Haber cumplido 18 años siendo casados y 21
si no lo son y
II. Tener un modo honesto de vivir”.17
En los considerandos que envió Lázaro
Cárdenas junto con la iniciativa, repitió
los conceptos que expuso ante el Congreso,
manejando básicamente la idea de que el
voto debía otorgarse a las mujeres para que
éstas ocuparan un plano de igualdad con los
hombres, lugar que se habían ganado por su
participación en las actividades del país.
La iniciativa se turnó a la Cámara de Diputados
y se aprobó de inmediato por unanimidad.
En el dictamen que los legisladores enviaron
a las Comisiones de Gobernación y Puntos
Constitucionales apoyando la medida,
afirmaban que en todo régimen democrático
los individuos son iguales ante la ley, y dado
que se había aceptado que la mujer era igual
al hombre tanto mental como moralmente, era
por lo tanto necesario reconocer esta igualdad
desde el punto de vista social y político, esto es,
otorgándoles los derechos de ciudadanía.
Agregaban que, si bien la mayoría de las
mujeres mexicanas ya eran aliadas del México
revolucionario y por lo tanto no podrían ser
un instrumento de las fuerzas conservadoras,
habría que reconocer que entre aquellas
mujeres que se habían quedado al margen del
movimiento social e ideológico de la Revolución,
sí podrían infiltrarse las ideas conservadoras,
lo que podía convertirse en un peligro a futuro.
Sin embargo, a pesar de esta duda, los
diputados enviaron el dictamen aprobatorio
de la iniciativa presidencial a los senadores
quienes también la aprobaron, y para
diciembre del mismo año de 1937 se envió a
las Legislaturas de los estados donde se aceptó
en septiembre de 1938. El trámite estaba por
terminar, faltaba solamente la declaratoria
correspondiente y la publicación en el Diario
Oficial.
Cárdenas empezó a recibir felicitaciones
de grupos nacionales e internacionales; las
mexicanas empezaron a dar por un hecho su
calidad de ciudadanas, estaban encantadas y
se convirtieron en propagandistas del proyecto
político de Cárdenas y en sus aliadas.
Al parecer, todo estaba listo, en cualquier
momento se publicaría el decreto en el Diario
Oficial, pero el trámite no prosperó, se pospuso
durante todo el periodo. Soledad Orozco
recuerda:
“Tenían miedo que si nos daban el voto a las
mujeres, íbamos a votar por Monseñor Luis
María Martínez que era el obispo de la época
[…] los hombres decían: vienen las mujeres y
nos van a hacer a un lado, ya con la fuerza
política de ellas pues nos van a pegar muy duro
y ya no vamos a poder hacer de las nuestras”.
Por una parte, se temió que se repitiera la
experiencia española de 1933 cuando las
mujeres votaron por primera vez y le dieron
el triunfo al grupo conservador. Por otra, al
cancelarse la posibilidad de continuidad de la
política cardenista encarnada por Francisco
J. Múgica, al ser elegido como candidato por
el PRM para el próximo periodo presidencial
Manuel Ávila Camacho, el trámite para otorgar
a las mujeres el derecho al voto se detuvo.
Presumiblemente, en esos momentos no le
convenía al partido oficial que las mujeres
votaran en las siguientes elecciones porque
supusieron que ellas, tradicionalmente
Partido Unidad Popular
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católicas e influidas por la Iglesia, apoyarían
al candidato del Partido Revolucionario de
Unificación Nacional (PRUN), el general Juan
Andrew Almazán, opositor de Ávila Camacho.
La misma Adelina Zendejas afirmaba: “(…) se
temió que las fuerzas contrarrevolucionarias
manejaran el voto femenino”.
Tenía razón, pues había un déficit histórico
difícil de subsanar. Las fuerzas progresistas
no habían hecho un trabajo intenso con las
mujeres, en cambio la derecha demostró esta
preocupación que se reflejó en el gran número
de amas de casa que apoyaron a Almazán.
En junio de 1940, la Comisión Electoral del
PRUN publicaba en el periódico Excélsior un
desplegado que demuestra este trabajo:
“Mujer mexicana: el gobierno te ha negado
derechos políticos porque la imposición sabe que
tu no venderías por ningún precio el porvenir de
tus hijos […] porque los diputados comprenden
muy bien que tu intuición infalible te convierte
en enemiga implacable del comunismo que
prostituye tu hogar. Tu revancha consistirá en
hacer valer tus derechos de mexicana, de mujer,
de madre, de esposa, de amante, de hermana,
por conducto de los hombres que amas y
sobre los que puedes influir. No olvides que
tu patriotismo consiste en salvar la dignidad
de los ciudadanos de tu familia, haciendo que
voten por Almazán […]”
TIEMPOS POLÍTICOS Y ADVERSIDAD
Amalia Solórzano de Cárdenas opina que
seguramente el general –como lo llama– tuvo
varios motivos para detener el trámite. Ella
comenta que era una época en la que hubo
muchísimos acontecimientos en poco tiempo:
la expropiación petrolera, la proximidad de
la segunda guerra mundial, la creación del
Partido Acción Nacional (PAN); puede ser
que todas, en conjunto, le hicieran aplazar
la decisión de otorgar el derecho al voto a las
mujeres. En los primeros meses de 1938, el
gobierno de Cárdenas llevó a cabo dos de las
medidas más importantes del sexenio, que le
permitieron profundizar su política de masas
y darle funcionamiento al modelo político y
económico diseñado para la nación. Estas
medidas fueron la expropiación petrolera y la
transformación del PNR en PRM (Partido de la
Revolución Mexicana).
Cárdenas propuso que las mujeres se afiliaran
a ese instituto político, lo que les hizo pensar
Partido 7 Unidad Popular

que una vez incorporadas al partido oficial
les otorgarían, finalmente, el voto. Pero las
mujeres que se integraron a este proyecto
fueron controladas mediante su ingreso a cada
uno de los sectores como miembros del grupo.
Además, se impuso como dirigentes sectoriales
a mujeres que no contaban con el apoyo del
conjunto: en el sector campesino nombraron a
Josefina Vicens, en el obrero a Estela Martín,
en el militar a Lucina Villareal y en el popular
a Estela Jiménez Esponda. A partir de este
momento cada sector se ocupó exclusivamente
de su grupo, a diferencia de aquellas épocas
en que las dirigentes femeniles de la CTM,
la CROM, de la CGT, peleaban por todas las
mujeres. Así fue como el PRM, retomó el control
de la organización femenil, debilitándose
automáticamente el Frente Único Pro Derechos
de la Mujer en un momento, además, en que el
PCM vivía una crisis de disidencia y de pugnas
internas. El gobierno, como lo hizo con otros
grupos, dividió al movimiento femenil y lo
incorporó a la política partidista con el fin de
institucionalizar su acción.
De esta manera, al final del periodo
cardenista, las mujeres organizadas se
quedaron sin el derecho al voto, sin fuerza y
sin una organización propia que levantara sus
demandas específicas, porque al integrarse al
PRM sus peticiones quedaron postergadas,
porque las mujeres se alistaron como miembros
de un grupo y no como género subordinado.
Durante los años siguientes, algunas
mujeres publicaron artículos valientes en
los que mostraban su decepción, pero la más
persistente en la lucha en pro del sufragio
femenino fue Esther Chapa, quien cada año
-y durante 22 años- al empezar las sesiones
del Congreso enviaba una carta solicitando el
derecho al voto para las mujeres. Tenemos una
fechada el 14 de julio de 1944 que dice:
“El Comité Coordinador Femenino para la
defensa de la Patria se dirige a esa H. Comisión
permanente una vez más con toda anticipación
a la apertura de las sesiones ordinarias de
ese H. Congreso a fin de solicitar se incluya
en la Orden del Día del próximo periodo la
declaratoria de ley de la Modificación del
Artículo 34 Constitucional en los términos
en que fue aprobada por la H. Cámara de
Diputados, por la H. Cámara de Senadores,
y por las legislaturas locales de los estados
de Aguascalientes, Campeche, Guanajuato,
Jalisco, Morelos, Nayarit, Nuevo León, Oaxaca,
Chihuahua, Querétaro, Sinaloa, Tabasco,
Tamaulipas, Tlaxcala, Veracruz, Zacatecas y
Michoacán.
Tomando en cuenta que Chiapas y Puebla han
concedido el voto a la mujer desde los años de
1925 y 1936 por todo lo cual consideramos se
ha cumplido con los requisitos que marca el
Artículo 135 de la Constitución de la República,
para modificar o adicionar la Carta Magna
y que solamente falta que el Congreso de la
Unión cumpla con dicho Artículo 135 haciendo
la Declaratoria que tantas veces nos hemos
referido para que la mujer mexicana como
ciudadana que es, goce de todos sus derechos
políticos”.A pesar del descalabro sufrido en el
periodo cardenista, las mujeres del PRM se
sumaron a la designación de Ávila Camacho
aceptando el papel que éste les asignaba dentro
del hogar, aunque sin abandonar su petición
de derechos políticos para todas las mujeres.
A partir de los años cuarenta, el movimiento
de lucha por obtener derechos políticos, en
lugar de consolidar su fuerza con las bases y
de reforzar la movilización social, se apoyó en
las autoridades, principalmente en la fígura
del presidente de la República, a la espera de
que éstas hicieran suya la demanda del voto.
Por otro lado, también en los años cuarenta,
algunos organismos internacionales
comenzaron a trabajar para que las mujeres
americanas alcanzaran el derecho al sufragio
en un ambiente en que se perfilaba la libertad
de los países y de los hombres, incluidas las
mujeres.
Para mediados de 1945, el candidato para
el próximo periodo presidencial era Miguel
Alemán. Durante su campaña, fue muy claro
el cambio de las mujeres en la forma de pedir
el derecho al voto: el 27 de julio de ese año
organizaron un mitin en la Arena México en
apoyo al candidato y en él le solicitaron el
Partido Unidad Popular
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derecho al voto.
Miguel Alemán ofreció otorgárselos en el
ámbito municipal ya que él decía que quería
construir un México moderno en el que era
preciso igualar a los hombres y mujeres ya
que el modelo de modernidad así lo exigía. En
su retórica insistía en que las mujeres tienen
“características propiamente femeninas”
que no se perderían al otorgárseles derechos
cívicos sino que, por el contrario, enaltecerían
los ámbitos políticos.
En este aspecto les pedía, como una especie
de garantía para asegurar la reproducción
de la familia, que no dejaran de ser en el
hogar “… la madre incomparable, la esposa
abnegada y hacendosa, la hermana leal y la
hija recatada…”. Además quedaba claro en
su discurso que otorgar el voto municipal a
las mujeres no ponía en riesgo su papel en el
hogar porque se entendía que administrar el
municipio era como organizar una casa más
grande. Ya en el poder, Miguel Alemán cumplió
su promesa y envió al Congreso la iniciativa
para modificar la fracción I del artículo 115.
LOS PANISTAS Y EL MIEDO
Comenzó el trámite y la iniciativa se envió a los
legisladores; la discusión fue rica porque dos
de ellos, del Partido Acción Nacional (PAN),
generaron controversia. Aquiles Elorduy fue el
primero que tomó la palabra y dijo:
“(…) el hogar mexicano (…) es el hogar selecto,
perfecto, en donde la ternura llena la casa y los
corazones de los habitantes gracias a la mujer
mexicana que ha sido y sigue siendo todavía
un modelo de abnegación, de moralidad, de
mansedumbre, de resignación (…) Ciertas
costumbres venidas de fuera están alejando a
las madres mexicanas un tanto cuanto de sus
hijos, de su casa y de su esposo.
“Las señoras muy modernas juegan más que
los hombres y no sólo a la brisca o al tute,
sino al poker, despilfarran, aun a espaldas
de los señores maridos, buenas fortunas en el
frontón (…) Fuman que da miedo (…) los jefes
mexicanos de familia tenemos en el hogar un
sitio en donde no tenemos defectos. Para la
mujer mexicana, su marido, si es feo, es guapo;
si es gordo, es flaco; si es tonto, es inteligente;
si es ignorante, es un sabio (…) porque quiere
enaltecer, a los ojos de ella misma y de su
familia, al jefe de la casa.
“Si vamos perdiendo los hombres –y aquí
está la parte egoísta– las pocas fuentes de
superioridad, por lo menos aparente que
tenemos en el hogar, vamos a empezar a hacer
cosas que no son dignas de nosotros. Ya no hay
méritos mayores en el jefe de familia, como no
sea que gane el dinero para sostener la casa y,
en muchas ocasiones, lo ganan ellas a la par
que los maridos.
“De manera que, si en la política, que es casi lo
único que nos queda, porque en la enseñanza
también son hábiles y superiores; si vamos
perdiendo la única cosa casi aparatosa, que es
la política, las cuestiones externas de la casa
para que nos admiren un poco; si vamos a ser
iguales hasta en la calle, en las asambleas,
en las Cámaras, en la Corte Suprema, en los
tribunales, en los anfiteatros, etcétera, etcétera,
pues, entonces, que nos dejen a nosotros, que
nos permitan bordar, coser, moler y demás
(…)”.El discurso provocó “murmullos, siseos y
desorden en las galerías” que estaban repletas
de mujeres, ya que fue realmente provocador.
Aun cuando en el discurso oficial y en los
medios políticos se planteó la necesidad de
modernizar el país, aterró la idea de la mujer
moderna, autónoma y con preocupaciones e
intereses propios. La consigna era que el país
se modernizara pero que las mujeres siguieran
en sus papeles tradicionales de madre, esposa
y ama de casa y que además contemplaran y
admiraran al jefe del hogar.
A pesar de que las intervenciones que siguieron
fueron a favor de la iniciativa, en casi todas
las ocasiones los diputados oradores hicieron
mención a algún aspecto nombrado por
Elorduy, siempre para criticarlo y, en general,
en esos discursos se observa, nítidamente,
que el derecho a sufragio municipal era una
primera prueba del comportamiento electoral
de las mujeres.
El mismo Alemán aclaraba que se trataba de
Partido 9 Unidad Popular

un puesto más administrativo que político,
es decir, no era una función con carácter
ideológico, sino más bien concreta y local,
por lo tanto entrañaba menos riesgo que
el otorgar de una vez los derechos políticos
plenos. Reiteradamente los dirigentes y las
autoridades apelaban a los altos valores
morales de las mujeres, que las alejaban,
supuestamente, de la corrupción.
UN DÍA COMO HOY
El 17 de febrero de 1947 se publicó en el
Diario Oficial la reforma al artículo 115 de la
Constitución y de esta manera Miguel Alemán
se presentó con una imagen de modernidad,
con una imagen democrática porque con esta
medida, se fortalecía el sistema federal y
además se les daba un lugar a las mujeres en
la vida política del país. Por otro lado, México
entraba al grupo de las naciones avanzadas
y democráticas en donde las mujeres ya eran
ciudadanas. Sin embargo, se mostró tímido
al no otorgar el voto en el ámbito federal.
El primer paso estaba dado y las mujeres
comenzaron a participar activamente en la
vida política de los municipios y en general
en todos los aspectos de la vida pública. Una
de ellas, Amalia Castillo Ledón, comenzó a
destacar mucho no sólo al interior del país sino
también en el extranjero: primero se convirtió
en vicepresidenta y después en presidenta
de la Comisión Interamericana de Mujeres,
organismo que, entre otras cosas, luchaba
por obtener el voto de las mujeres de América
Latina.
la que le solicitaron la igualdad de derechos
políticos para las mujeres. Fue una reunión
enorme realizada en el parque deportivo 18 de
Marzo, a la que asistieron, según las fuentes,
más de veinte mil mujeres priístas. Nos da
la impresión que el partido les organizó esa
reunión porque al gobierno le interesaba que
ellas le solicitaran el derecho a votar y ser
votadas para cargos de elección popular.
Por otro lado, por esos mismos meses (primer
semestre de 1952) la señora Castillo Ledón vino
a México para: “… trabajar en la unificación de
las mujeres del país, que me ha encomendado
tanto el presidente Alemán, como el señor Ruiz
Cortines”. Entre enero y marzo de 1952, la
señora Castillo Ledón sostuvo una entrevista
con el entonces candidato a la presidencia en la
que él le pidió que le entregara un documento
firmado por miles de mujeres en donde
solicitaran el derecho a voto, afirmándole que
él quería otorgarlo pero necesitaba que fueran
ellas las que se lo pidieran.
Sin embargo, no hay que perder de vista que
aunque se habían abierto algunos espacios
y las mujeres se habían integrado a ellos, el
hecho de que un número reducido de mexicanas
accedieran a tales instancias, no significaba
que no siguieran subordinadas como género
y con muy pocas posibilidades de integrarse
masivamente a la vida pública, como lo revelan
los datos del censo de esa época. Cuando
Adolfo Ruiz Cortines fue elegido candidato por
el PRI para el próximo periodo presidencial,
las mujeres priístas –encabezadas por
Margarita García Flores, dirigente femenil
del partido—, organizaron una asamblea en
Partido Unidad Popular
10

Para realizar esta tarea doña Amalia creó la
Alianza de Mujeres de México bajo la protección
de Ruiz Cortines y del aún presidente Miguel
Alemán; esto era fundamental y es seguro que
por eso tuvo el éxito que no tuvieron los otros
organismos creados años antes con la misma
finalidad. La Alianza logró su objetivo y le
entregó al candidato el documento solicitado
con quinientas mil firmas.
En aquella asamblea organizada por las
mujeres priístas en abril de 1952, Adolfo Ruiz
Cortines marcó su posición con respecto a
las mujeres. Consideró que debían participar
en política no por un sentido de justicia,
sino porque desde su hogar ayudarían a los
hombres, resolverían con abnegación, trabajo,
fuerza espiritual y moral, problemáticas tales
como la educación y la asistencia social.
Así participarían en las campañas de
alfabetización, contra la carestía de la vida, por
el incremento de la producción y la resolución
de problemas como habitación, alimentación,
vestido, medicinas, es decir, todo lo que
solucionaban cotidianamente las madres, las
esposas y las amas de casa mexicanas.
Obviamente, aquellas mujeres que no cumplían
con los papeles tradicionales, quedarían fuera
de las actividades políticas que el partido
oficial les había reservado. Las mujeres sólo
eran importantes porque alentaban a sus
compañeros en el vivir diario y por su papel
materno.
Su importancia radicaba, entonces, en ser
madres y esposas abnegadas y morales,
cualidades que eran, para Ruiz Cortines,
las “femeninas” por excelencia; para él era
invisible la participación de las mujeres en
las luchas obreras y campesinas. Jamás se
refería, por ejemplo, a la participación femenil
durante el cardenismo. El ámbito político era
de los varones, ellas sólo ayudarían. Él estaba
dispuesto a otorgarles el voto, reforzando
los valores más tradicionales respecto a
ellas porque se trataba de que las mujeres
participaran en la vida nacional pero mediante
una “política femenina”, encauzada por el
partido oficial. Sin embargo es importante
mencionar que los contendientes de Ruiz
Cortines también plantearon la posibilidad de
otorgar el derecho al sufragio para las mujeres,
aunque había algunas diferencias de enfoque.
El 1º de diciembre de 1952, al tomar posesión
de la presidencia, Adolfo Ruiz Cortines declaró:
“… ya promuevo ante Vuestra Soberanía las
reformas legales pertinentes para que la mujer
disfrute de los mismos derechos políticos que el
hombre.”
Con la concesión del derecho al voto, daba
respuesta de alguna manera a la inconformidad
de las mujeres y, al mismo tiempo, no afectaba
al sistema, pues ellas seguirían bajo el
control político e ideológico del partido oficial,
además las dejaría circunscritas a actividades
pertenecientes al ámbito doméstico.
Otorgar el sufragio a las mujeres, le permitía
ganar popularidad no sólo entre las mujeres,
sino entre el pueblo en general, ya que había
prometido solucionar los asuntos no resueltos
en regímenes anteriores, y éste era uno de
ellos.
Por otro lado, esto distraería de alguna
manera la atención del pueblo sobre el
encarecimiento del costo de la vida registrado
en esos momentos, y mantendría la estabilidad
del país, resquebrajada después del violento
sometimiento de los partidarios de Miguel
Henríquez Guzmán.
La medida también contribuiría a crear la
imagen progresista que se proponía otorgar a
su régimen, dar la sensación de que se iniciaba
una nueva era para México. Obtendría así,
una victoria política.
A su vez, era importante entrar al concierto
de las naciones modernas donde las mujeres
tenían ya los derechos políticos. Obviamente,
la presión internacional había influido para
que el nuevo presidente se decidiera a dar el
derecho al voto a las mujeres.
Pero lo fundamental fue que, con el
reconocimiento de los derechos políticos a
las mujeres, se atrajo a un mayor número de
votantes y, de esta manera, el gobierno creó
11 Partido Unidad Popular

una plataforma de apoyo para la consolidación del sistema y la legitimación de su poder. Las
mujeres, agradecidas, podían convertirse en incondicionales del régimen, lo cual era importante
porque en las elecciones de 1952, la oposición había alcanzado un porcentaje alto en las votaciones:
el PRI necesitaba fortalecerse.
Con las mujeres ciudadanas, el PRI efectivamente aumentó el número de sus afiliados. Para
1954, de los 3.5 millones de militantes, el 35 por ciento eran mujeres. En este sentido es
importante mencionar que, en las elecciones de 1929 a 1952 los votos masculinos fueron de
75.36 por ciento. En las elecciones de 1952 el candidato oficial obtuvo el 74.32 por ciento de la
votación, y en 1958, Adolfo López Mateos obtuvo el 90.56 por ciento del total de los votos. Las
cifras lo comprueban, al sistema político mexicano le redituó conceder el voto a las mujeres para
consolidarse plenamente. Las mujeres entraron legalmente a formar parte de la vida pública con
una conducta pasiva frente a la política de México. Se les dio el voto en un contexto en donde no
había libertades democráticas, con lo cual se liquidó toda posibilidad de un ejercicio democrático
dentro del juego político. En un contexto en el que no había voces disidentes que cuestionaran la
función de las mujeres como esencialmente familiar y privada, éstas obtuvieron el voto.
Enriqueta Tuñon Pablos. Destacada feminista mexicana. Socióloga. Investigadora del Colegio de la
frontera Sur (ECOSUR). Autora de numerosos libros y artículos de género sobre educación, sexualidad,
medio ambiente, trabajo y migración. Entre sus trabajos sobre la lucha de las mujeres en México destacan:
La experiencia del movimiento de mujeres en la transición democrática en México (1992), Avatares de la
lucha feminista en México durante los años 80 (1990), La lucha de las mujeres en los años treintas en
México (1988) y el libro Mujeres que se organizan: El Frente Único Pro Derechos de la mujer 1935-1938,
UNAM, Ed. Porrúa, 1992. El presente artículo se publicó en Dimensión Antropológica, Volumen No. 25
periodo año 2002.
Partido Unidad Popular
12

Paridad de género en
México. Anverso y reverso
BLANCA OLIVIA PEÑA
En el marco de la reciente reforma político-electoral que inició
con cambios sustantivos a la Constitución Política de los Estados
Unidos Mexicanos (CPEUM)[1] y culminó con la aprobación de la
Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales (LGIPE)
y la Ley General de Partidos Políticos (LGPP)[2], México se suma
a un total de seis países en América Latina[3] que han adoptado el
principio de paridad de género en candidaturas a cargos de elección
popular. Si bien cada país prevé distintos criterios según el tipo de
norma adoptado, ámbito y cargos de aplicación (nacional y/o gobiernos
subnacionales) y existencia o no de sanciones por incumplimiento,
constituye un hecho histórico digno de reconocimiento en el avance
de los derechos políticos de las mujeres mexicanas. Pero ¿qué fue
exactamente lo que se ganó y qué criterios quedaron en agenda
pendiente?
Por lo que atañe a la Ley General de Instituciones y Procedimientos
Electorales, las reglas para regular el principio de paridad en
candidaturas quedaron de la siguiente forma.
13 Partido Unidad Popular

Cuadro 1: Reglas aplicación paridad en la LGIPP
Fuente: Secretaría de Gobernación. Diario Oficial de la Federación.
En el caso de la nueva Ley General de Partidos Políticos destacan los siguientes criterios:
Cuadro 2: Reglas aplicación paridad en LGPP
Fuente: Secretaría de Gobernación. Diario Oficial de la Federación.
Partido Unidad Popular
14

Obligaciones
Promover valores cívicos, cultura democrática en niños, niñas y adolescentes, así como la
participación efectiva de hombres y mujeres en integración de órganos internos y candidaturas.
Determinar criterios y hacerlos públicos para garantizar paridad de género en ambas cámaras,
congresos locales y ALDF. Inadmisión de criterios que discriminen asignación de candidaturas
en distritos perdedores para un solo género. Garantizar la paridad de género de candidaturas
(Artículos 3, 25, 37).
Derechos militancia
La ley señala que los partidos políticos deberán establecer los derechos de su militancia, entre
los que se incluirán, al menos, tres casos:
a) Participación personal y directa o por medio de delegados en las asambleas, consejos,
convenciones o equivalentes para la toma de decisiones internas;
b) Postulación como candidato a cargos de elección popular dentro de los procesos internos de
selección (internas primarias), para lo cual deberán cumplir con los requisitos que se establezcan
en disposiciones aplicables y en los estatutos de cada partido:
c) Postulación como dirigente del partido o cualquier otro empleo o comisión al interior de acuerdo
a los requisitos establecidos en los estatutos. (Artículo 40)
Financiamiento capacitación mujeres
Incremento del 2 al 3 por cierto de financiamiento ordinario del partido para la capacitación,
promoción y desarrollo del liderazgo político de las mujeres. Así mismo se precisan los rubros en
los que deberán aplicarse los recursos destinados a estas actividades. (Artículo 51 y 73)
15 Partido Unidad Popular

Gastos de campaña
Como requisito a cumplir la Ley consigna que los gastos que realice el partido, las coaliciones
y los candidatos deberán sujetarse a criterios de legalidad, honestidad, eficiencia, economía,
racionalidad, austeridad, transparencia, control, rendición de cuentas y equidad de género
(Articulo 63)
Hasta aquí se puede afirmar que la Leyes aprobadas prevén un conjunto de criterios y reglas
para garantizar el principio de igualdad entre hombres y mujeres en candidaturas a cargos
internos del partido como de elección popular. Sin embargo, y contra todo pronóstico, se aprecian
también omisiones importantes como las siguientes:
Paridad en candidaturas a cargos edilicios (listas ayuntamientos).
Paridad en los órganos de dirección y cuerpo decisorio de los partidos políticos.
Paridad en los órganos electorales (consejos), tanto administrativos como jurisdiccionales, del
INE y de los Organismos Públicos Electorales Locales.
Asimismo es destacable que la LGPP no incluyó definiciones explícitas sobre los métodos selección
de precandidaturas, solo consigna el derecho de la militancia a postularse cumpliendo con las
disposiciones que cada partido político estipule en sus propios estatutos internos,[4] quedando
como prerrogativa de los partidos definirlos libremente (Freidenberg 2014: 3)[5].
La pregunta obligada es ¿qué método(s) de selección de candidaturas aplicarán los partidos para
asegurar 50/50 por ciento hombres y mujeres?
Si se parte de la premisa según la cual, el paso de aspirante a candidata es el que presenta la
disminución más dramática en el número de mujeres con posibilidades de continuar en una
contienda electoral, la omisión de reglas claras puede presentar algunos reveses de naturaleza
jurídica como en el pasado reciente[6]. Sin una definición clara, precisa, explícita y con carácter
de obligatoriedad, es altamente probable que los partidos cumplan con la paridad de género
incrementando el poder de las directivas nacionales (voto directo/internas cerradas) en detrimento
de la participación de la militancia (voto abierto/consulta ciudadana).
La evidencia en el ámbito internacional y nacional (OEA 2003) parece comprobar que mientras
más abierto y democrático es el método de selección, no solo es más costoso, sino que termina
perjudicando más a las mujeres. En concordancia con lo anterior, si la elección de candidaturas
recae en la voluntad discrecional de un grupo de personas el costo del proceso será menor, y en
este supuesto representa un mecanismo más efectivo para garantizar paridad entre mujeres y
hombres, particularmente si se trata de un sistema mixto de representación proporcional con
listas cerradas y no abiertas.
Será entonces un mecanismo ‘menos democrático’ (Marván y Márquez 2013: 93), siempre y cuando
se reconozca que el principio de igualdad y no discriminación es un mandato constitucional que
no admite pacto en contrario. La norma debe ser interpretada favoreciendo en todo tiempo a las
personas otorgando la protección más amplia, cumpliendo con la obligación que tiene el Estado
y sus instituciones políticas de promover, respetar, garantizar y proteger los derechos humanos
conforme los principios de universalidad, interdependencia, indivisibilidad y progresividad
contenidos en la Carta Magna[7].
Partido Unidad Popular
16

Referencias bibliográficas:
Freidenberg, Flavia. 2014. Semilla de la discordia. Revista Voz y Voto 1.
OEA. 2003. ¿Es el financiamiento un obstáculo para la participación política de la mujer?, Foro Interamericano sobre
Participación Política de la OEA, Informe Final, Unidad para la Promoción de la Democracia, Comisión Interamericana
de las Mujeres e Internacional IDEA, 16 de diciembre, s/l.
Marván Laborde, María y Márquez Labastida, Libia. 2013. Democracia interna de los partidos vs cuotas de género
¿dilema sin solución?. En Retos a 60 años de la aprobación del voto de la mujer en México. México: IFE (65-115).
Citas:
[1] TEPJF; Decreto de la reforma constitucional del 10 de febrero de 2014; http://portales.te.gob.mx/
consultareforma2014/node/429.
[2] Ambas leyes fueron publicadas en la Gaceta Parlamentaria de la Cámara de Diputados el día 15 de mayo de 2014.
También se modificaron cuatro normas vigentes: la General de Delitos Electorales, General del Sistema de Medios de
Impugnación en Materia Electoral, la Orgánica del Poder Judicial de la Federación y la Federal de Responsabilidades
Administrativas de los Servidores Públicos; http://gaceta.diputados.gob.mx/.
[3] IDEA Internacional, Global Database of Quotas for Women http://www.quotaproject.org/
[4] INE; Documentos básicos de los partidos políticos; http://www.ine.mx/portal/site/ifev2/Informacion_de_los_
Partidos_Politicos/
[5] Vale la pena destacar que México, hasta antes de la reciente reforma político-electoral, era uno de los pocos países
en América Latina que no contaba con una ley de partidos políticos; los derechos y obligaciones se encontraban en
el Libro Segundo, Artículo 211.2 del Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales (COFIPE). Las
disposiciones en materia de métodos o procedimientos para selección de candidaturas o ‘elecciones internas o primarias’
se sujetaban al contenido de los estatutos de los partidos. La norma contemplaba la exigencia de que al menos treinta
días antes del inicio formal del proceso electoral federal, cada partido debería determinar el procedimiento de selección
de candidaturas y comunicarlo al Consejo General del Instituto Federal Electoral (CG-IFE), indicando el mecanismo
a utilizar, fecha de convocatoria, plazos, órganos responsables de su conducción y vigilancia, aspectos que la ley no
incluía. TEPJF; Consulta Reforma Electoral 2014, Centro de Capacitación Judicial Electoral; http://portales.te.gob.
mx/consultareforma2014/
17 Partido Unidad Popular

Rutas de las mujeres en situación de
migración a ambos lados del Atlántico
ERIKA LILÍ DÍAZ CRUZ
Síntesis. Este artículo representa los avances del trabajo de
investigación sobre las migraciones de las mujeres latinoamericanas,
negras e indígenas que realizan en sus propios países de manera
interna, hacia otras naciones en América y Europa. En este
documento se visibiliza los estragos que ha ocasionado a nivel
mundial, las formas extractivistas aniquiladoras que legitiman
los organismos mundiales de comercio y de la banca, dando por
resultado la pobreza, la devastación de los territorios y por tanto de
que ahora, más mujeres que hombres, decidan trasladarse a otros
territorios, en donde las formas de violencia y discriminación hacia
ellas no terminarán, por el contrario, serán catalogadas como seres
de segunda, ya que la negativa de reconocerles legalmente como
ciudadanas con derechos, implica que tengan que sobrevivir bajo
esquemas de trata humana o nuevas formas de esclavitud sexual,
laboral, mendicidad entre otras.
Palabras clave. Mujeres. Economía. Ciudadanía. Patriarcado.
Derechos humanos. Territorio. Neoliberalismo. Globalización.
Rutas de esperanza y violencia.
La feminización de las migraciones es provocada por un sistema
económico de origen neoliberal, basado en la estructura patriarcal
del ejercicio del poder. Los tomadores de decisiones en el ámbito
internacional siguen siendo hombres, y no con ello quiero generar
espectros culpabilizadores hacia ellos, sino más bien, que cabe hacer
visible que mientras las dominaciones sean desde una perspectiva
patriarcal, racista y definida por un modelo masculinizado;
invariablemente las mujeres seremos las primeras afectadas de
Partido Unidad Popular
18

manera negativa. Al desconocerse u obviarse
las características de la discriminación por
cuestiones de sexo y género y la violencia que
ello conlleva, resulta que recaerán los efectos
negativos de la economía, con mayor peso en las
mujeres, las que no reciben una remuneración
económica por el trabajo en el hogar, así como
la crianza, educación, los trabajos de cuidado
hacia toda la familia en especial a hijos e hijas
de manera unilateral. Las que a pesar de
realizar un trabajo de igual valor al que hace
un hombre, siguen sin ganar la misma cantidad
de dinero, las que realizan las actividades para
el mantenimiento de la familia, la comunidad
y en general la sociedad sin reconocimiento
ni valorización correspondiente. Las mujeres
que deciden dejar sus países o territorios
de origen para adentrarse en la ruta de una
supuesta mejora en su vida, su liberalización,
independencia y autonomía, conceptos que
conocidos en otros términos les llevan a
imaginar que sus vidas en el territorio de
destino, pueden resarcirse y buscan obtener
mejoras desde lo económico, como bien lo han
aprendido de este sistema. Una vez tomada la
decisión, empiezan a recorrer diferentes rutas,
en lo social, familiar, económico e inclusive
político, que les criminaliza la gran mayoría de
las veces y les pone una barrera poco referida,
la no consideración como ciudadanas, como
personas y por tanto la denegación flagrante y
permisiva del Estado contra sus derechos como
humanas.
Mujeres que han vivido la experiencia de la
migración, han compartido sus experiencias
de vida y sus historias antes y después de
su llegada a este territorio; existen no solo
coincidencias en los motivos y realidades de
sus países y territorios de origen, inclusive
la comida y la forma de preparación de los
alimentos es muy similar.
Sus expectativas fijadas al llegar aquí, han
sido variadas desde el inicio, su situación
migratoria irregular, (a sabiendas desde su
partida), pero que no logran dimensionar en
toda su magnitud hasta que se encuentran
en este territorio; si vienen solas o vienen a
reunirse con sus parejas o demás familiares,
las historias de violencia que pensaban habían
dejado atrás, llegan a revelarse, aunque
19 Partido Unidad Popular

con otras formas, pero siguen presentes. La
explotación que de ellas hacen en sus empleos,
generalmente como cuidadoras y de limpieza,
o en situación de trata sexual, laboral,
servidumbre o mendicidad.
Las instituciones gubernamentales que
atienden a esta población, hacen referencia
a esta misma situación, revelan lo que las
propias mujeres opinan y reconocen; por tanto
esa familiaridad con la problemática, les
coloca un velo donde perciben esta situación
como “natural” o “normal”, naturalizando la
problemática. Por tanto, no hay mecanismos
oficiales encaminados a dar un trato de
“ciudadana” a aquellas mujeres que llegan a
este territorio. Existen muy pocas acciones
encaminadas a ayudar a estas mujeres,
sobre todo en lo que respecta a la violencia de
género contra mujeres en el ámbito familiar,
realizadas principalmente por organizaciones
no gubernamentales y acciones de sectores
de la sociedad civil, personas que realizan
actos humanitarios con ellas; sin embargo, no
ocurre lo mismo en el ámbito laboral, judicial,
administrativo o social en general, donde la
discriminación múltiple se hace presente,
donde se sigue prejuzgando a las personas
de acuerdo a su estatus social, económico,
cultural, lingüístico, religioso, condición de
discapacidad, diversidad sexual y sobre todo al
racismo.
Debido a que las instituciones gubernamentales
nacionales e internacionales, no han logrado
disminuir la violencia sistémica de género
vivida, sobrevivida por las mujeres, son ellas
mismas quienes en un enorme esfuerzo de
sobrevivencia logran coincidir en su capacidad
para resistir y construir en ocasiones redes
de apoyo. Puede ser que al llegar al territorio
de destino, cuenten con el apoyo de alguna
pariente o amiga, pero en definitiva, las
mujeres al entenderse en un ambiente hostil,
tienden a conformar relaciones con mujeres de
sus mismos países, en las iglesias, en los sitios
donde desempeñan sus actividades laborales,
con organizaciones civiles o inclusive a
conformarlas. Precisamente en el trabajo de
investigación del que forma parte este artículo,
realizo aproximaciones en cuanto a las
coincidencias de la condición y posición de las
mujeres en situación de migración entre países
de tránsito y destino en Europa y América. De
entrada, no es raro conocer que unas ayuden
a otras en cuanto a situaciones de violencia
familiar principalmente, las ayudan y les dan
ánimo para salir de ese problema, en Europa
se confía más en la policía que en México o
Estados Unidos, al parecer quienes han hecho
uso del servicio no han tenido queja y la propia
policía ha dicho tener sensibilidad hacia las
problemáticas particulares que circundan a las
mujeres en situación administrativa irregular.
Silvia Monteros utilizando la base teórica de
Ema López denomina a esto la capacidad de
agencia de las mujeres migrantes y la define
como:
La capacidad de hacer, actuar, realizar de
las personas, pero no es una característica
intrínseca de estas, no se trata de una propiedad
individual, sino que es una posibilidad
compartida: la agencia se realiza allí donde
hay una posibilidad… es la capacidad de
generar conexiones entre procesos, personas o
entidades que pueden ser muy heterogéneas. Se
trata de la realización de la acción en la medida
de las posibilidades, en un tiempo y un espacio
determinado, de acuerdo a lo que se puede hacer
y hasta dónde se puede llegar en medio de una
estructura social compleja y complicada que
produce la exclusión social, que vulnerabiliza
a esas mismas personas. La agencia es poder,
pero un poder ejercido en medio de situaciones
estructurales muy constrictivas. Tener en
cuenta la agencia es tener en cuenta la palabra,
el cómo los sujetos explican el porqué del lugar
vulnerable en el que están y el cómo creen ellos
y ellas que podría estar mejor. (AA. VV. 2008:
246)
Las mujeres y su desafío a las jerarquías
patriarcales.
Los resultados de algunas entrevistas a
personal de la policía, operadores de justicia
y organizaciones civiles, así como los propios
testimonios de las mujeres migrantes,
reflejaron que la situación de las mujeres es
evidentemente desventajosa, las diferentes
Partido Unidad Popular
20

formas en que se modifique el derecho,
mientras sea bajo el parámetro occidentalizado
y patriarcal, difícilmente podrá tenerse un
instrumento social que garantice la vida digna;
Judith Butler en el libro género en disputa
refiere que:
No basta con investigar de qué forma las
mujeres pueden estar representadas de manera
más precisa en el lenguaje y la política. La
crítica feminista también debería comprender
que las mismas estructuras de poder mediante
las cuales se pretende la emancipación crean y
limitan la categoría de , sujeto
del feminismo. (2007:48)
Aplicando dicha reflexión al parámetro de
las mujeres indígenas, resulta todavía más
observable, ya que muchas veces ellas, tienen
que apropiar cosmovisiones que no son propias
y que son interpretadas a veces por imitación
más que por reflexión o autenticación. Por
mucho que se haya trabajado en hacer visible
esta situación, la mayoría de países cuyos
territorios son de tránsito o destino de estas
mujeres, no se ha logrado sacar a la luz los
verdaderos motivos que hacen funcionar la
maquinaria de la trata humana las cuales
llegan a ser la sexual principalmente,
servidumbre y de mendicidad. En dichas redes
participan abiertamente sectores políticos y
empresariales que contribuyen a sostener su
condición de “ilegalidad” o “criminalidad” esto
les permite la discreción de la operación de
innumerables formas de lucrar a través de los
cuerpos de las mujeres. La mayoría de naciones
enfocadas a regularizar las migraciones,
ha creado un cuerpo legislativo sumamente
hostil, enalteciendo la en el que se promueve la
inhumanidad, muchas de estas leyes castigan
a quienes ayuden o auxilien a personas en
situación migratoria irregular, muchas veces
mal llamados ilegales o indocumentados.
Algunos ejemplos son las legislaciones de
México, Estados Unidos, España y últimamente
las naciones que conforman la Unión Europea.
El incremento desproporcionado de las
sanciones administrativas y penales no
podrán lograr los cambios que millones de
mujeres buscan, el respeto a su dignidad como
humana, al vivir libre de toda forma o tipo
de violencia manifestada por su pertenencia
al sexo y género. El derecho de movilidad y
la búsqueda de un proyecto de vida digna, no
puede verse limitado por leyes inhumanas, por
leyes e instituciones que degradan la dignidad
de las personas y las hacen catalogarlas
por seres humanos de primera o segunda,
categorías que por el simple significado de la
palabra no pueden ser. Los diversos avances
en materia de derechos humanos de personas
migrantes, refugiadas, apátridas o forzadas
al desplazamiento masivo, ha quedado en
un hoyo negro que nadie quiere enfrentar,
ya que ello implicaría responsabilizar a
gobiernos, naciones y empresas de forzar las
migraciones. En un apartado específico de esta
investigación, se abundará sobre esta parte.
Sin embargo, basta colocar en conocimiento
que gran número de especialistas en el tema,
han abordado la enorme complicidad entre
las empresas trasnacionales, los bancos y
los gobiernos coludidos, para provocar la
movilización masiva de personas que huyen
de la violencia, la pobreza, el desalojo de sus
tierras, el desplazamiento originado por el
21 Partido Unidad Popular

despojo de sus tierras, territorios y recursos
energéticos, en definitiva estos corporativos
originan la violencia para que la gente tenga
que salir de los espacios que ellos quieren o
para que haya tanto miedo y terror que deseen
no actuar para defenderse y opten por aceptar
lo que se les impone, en resumen, aprovechan
el uso político y económico del miedo y el terror
de las personas. Silvia Federici lo refiere como
el intento de subordinar todas y cada una de las
formas de vida y de conocimiento a la lógica del
mercado y quitar todo medio de subsistencia
a las personas trabajadoras para que queden
inhabilitadas a resistir una explotación más
intensa.
Los corporativos responsables de las
migraciones forzadas que ya he referido,
invierten dinero para camuflar sus verdaderos
intereses, de ahí que gran parte de las
legislaciones que criminalizan por una parte a
las mujeres, por la otra crean delitos en los que
se sanciona la violencia contra ellas, creando
un entramado incomprensible y cíclico que no
representa ninguna solución, por el contrario,
ha generado más violencia hacia las mismas
mujeres, cito al respecto:
Los problemas de las mujeres no pueden
resolverse por el simple recurso al derecho
penal, quizás una forma de aproximarnos a él
estribe en reconocer que éste cumple una función
simbólica y preocuparnos de los mensajes que
éste emite (Larrauri, 1994:101)
Es inconcebible que el poder jerarquizante de
la sociedad, el instrumento más violento de
discriminación, la herramienta que apuntala
todas las discriminaciones, pueda convertirse
en un instrumento de lucha contra la
discriminación. Zaffaroni (pág. 29)
Grandes lecciones han dejado la implementación
de sistemas de Estado Penal, workfare,
neoliberales y actualmente narco-estados, cuya
existencia ha sido diseñada para subordinar a
las personas a modelos extractivistas de toda
forma de vida y de valores materiales, tangibles
e intangibles a favor de consorcios, empresas y
crimen organizado, afectando directamente a
las mujeres migrantes o no.
Partido Unidad Popular
Las migrantes ciudadanas del mundo.
En los ámbitos sociales y políticos, saldrán a
relucir las prestaciones que reciben las mujeres
migrantes en naciones que se llaman a sí
mismas Estados Sociales, el enorgullecimiento
del servicio médico dado sin ningún tipo
de exclusión como lo comentaron algunas
entrevistadas, así como servicios educativos
un poco lejos de su alcance económico, pero
sí virtualmente posible. Donde prevalece
el discurso de que cualquier servicio para
personas europeas o norteamericanas lo es
también para inmigrantes sean regulares o
no; evidentemente en la realidad no es así,
Humphrey Marshall, refiere sobre estos
derechos que confieren capacidad legal para
luchar por las cosas que una persona desearía
poseer, pero que no garantiza la posesión de
ninguna de ellas, un derecho de propiedad no es
un derecho a poseer propiedad sino un derecho
de adquirirla si puede y a protegerla si la tiene,
ejemplo es el derecho de adquirir que solo el
rico puede hacerlo, el pobre no (ciudadanía y
clase social, 1997:316); las realidades de las
mujeres latinoamericanas indígenas o no, en
22

situación irregular viven cotidianamente este
derecho a medias; continua el mismo autor,
que esto no se debe a una falta de derechos
civiles, sino a una falta de derechos sociales,
por ejemplo la libertad de palabra, alguien que
debido a la falta de educación tendrá poco que
merezca la pena decir. (Ciudadanía y clase
social, 1997: 316), como ocurre con las mujeres
inmigrantes, ¿quién puede creer de verdad
su derecho a denunciar y a ser escuchada?, el
mismo destino tienen los derechos reconocidos
formalmente en la instrumentos legales locales,
regionales e internacionales relacionados con
la igualdad y la protección integral contra la
violencia hacia la mujer por razones de género;
es decir, aparentemente todas las personas son
iguales, pero para poder ejercer ese derecho las
mujeres deben estar en igualdad de condición
ciudadana ya que ese simple hecho impedirá
que las mujeres accedan a su protección. En
Norte América va a ocurrir lo mismo, llegando
inclusive a proveer de alimentos y subvenciones
para la alimentación de las hijas e hijos y ese
dinero será entregado exclusivamente a las
madres. Estas prácticas puestas en un peldaño
de avance, implica un riesgo para muchas
mujeres migrantes, ya que un porcentaje
importante de ellas, vive la violencia en el
ámbito familiar y muchas veces el dinero es
extraído por medio de la violencia por parte de
su pareja, sean los padres de sus hijos o no. Por
tanto estos programas son paliativos y suelen
re-victimizar a las mujeres, sujetándolas
a los modos de control establecidos por el
mercado. Otorgan dinero pero no derechos,
reconocen que tienen necesidades básicas de
alimentación que atender, sin embargo no les
reconocen el derecho a emplearse en trabajos
dignos, a ser protegidas por los mecanismos de
protección establecidos por sus leyes, así les
niegan la posibilidad de expresar su potencial
humano y la construcción de una vida digna.
La ciudadanía es un término que deja muchas
dudas, es a la vez un estatus jerárquico y por
otro lado es la posibilidad de establecerse
como una persona titular de derechos en un
determinado territorio, la ciudadanía es lo que
hará tener en cuenta a algunas personas como
titulares de derechos o como personas a las que
se les hace un favor otorgándoles dinero para
que sobrevivan o a cambio de darles alimentos
por tenerles en situación de trata o nuevas
formas de esclavitud.
Otro de los resultados en esta investigación
fue el que las mujeres latinoamericanas en
situación administrativa irregular, han optado
por el matrimonio con hombres de los territorios
de paso o de destino para la obtención de la
residencia, ahora bien, puede ser que sea
desde una perspectiva amorosa sentimental o
el que ella o él lo realicen con fines utilitarios
o que finalmente los hombres lo hagan solo
por ayudarlas a que obtengan un permiso de
trabajo y en consecuencia de residencia. Es
muy común que derivado de esta relación donde
el poder lo ejerce el hombre, y este hombre a
su vez está arropado bajo el techo del sistema
patriarcal que es el estado, sus instituciones y
sus leyes, surja violencia contra dichas mujeres
y se reproduzca la forma de explotación o trata
humana. Por tanto no hay mucha diferencia
entre las formas de opresión generadas
por el estado que por las generadas en sus
nuevas relaciones familiares, ambas formas
de sometimiento y subordinación impiden el
ejercicio de libertades fundamentales.
La violencia se presenta en diversas formas,
en sus lugares de trabajo, en sus hogares, en
la calle e incluso en las instituciones; en todos
casos de violencia tanto dentro como fuera de
lo familiar, la mayoría de mujeres prefieren
callar antes que pararse en una oficina de
gobierno para exigir un derecho que ellas creen
que no les corresponde por ser inmigrantes
irregulares y que los propios estados así lo
contempla en algunas de sus leyes.
El problema según las autoridades
entrevistadas no es tanto los aspectos
jurídicos, específicamente en materia penal,
sino más bien el verdadero cambio, recae en los
recursos sociales, las propuestas deben surgir
desde lo social, aunque siempre hay cosas
mejorables desde la ley, pero en la práctica
es la que te da las directrices para saber
cuándo hay que modificar la ley, en entrevista
con autoridades afirmaban: los recursos
económicos encaminados a lo social son los que
se quedan cortos ante las necesidades reales de
la población, siempre se trata de enmascarar
con que la justicia o el derecho penal lo puede
23 Partido Unidad Popular

absorber todo, defender, proteger y eso es
incierto porque el derecho penal lo que hace
es castigar un hecho ya dado, un hecho que
ya se ha cometido; el derecho penal no puede
prevenir situaciones, solo se pueden prevenir
situaciones de riesgo con una cobertura social
amplia y detectando cuáles son los factores que
influyen para que esa victimización ocurra y
tratando de anularlos pero eso solo se puede
hacer desde lo social, desde la prevención,
no con el sistema judicial. Las extranjeras
hacen un itinerario por todas las ong´s que se
dedican a extranjeras, en todas es lo mismo,
escucharlas, apoyo emocional, seguimiento
y asesoramiento pero nadie puede darles de
comer.
Contrario un poco al temor fundado de
esta población de mujeres la policía en la
realización de sus actividades ha resuelto
tomar una actitud más humanista al respecto,
la policía reconoce el grado de vulneración
en el que se encuentran estas mujeres y por
lo general es una policía en la que se puede
confiar, es decir el modelo jurídico posiciona la
ley de manera inhumana y quienes se encargan
de ejecutarla, cumplirla y hacerla cumplir,
enfocan una perspectiva más bien humanista
y ello hace poner en cuestión la razón de
ser del Sistema; por un lado, porque sus
normas son disfuncionales y por otro lado, el
cumplimiento irrestricto de las mismas puede
ocasionar una crisis deshumanizante hacia la
población en general no sólo a las autoridades,
en el que les interese su propio interés y no
el de quien puede necesitarlo. Evidentemente
entrando en el plano de lo moral y de lo ético,
existen policías principalmente hombres cuyo
comportamiento además de inhumano es
ilegal, como puede observarse en el caso de
la policía migratoria mexicana, el Instituto
Nacional de Migración, los elementos del
ejército en los países como México, Estados
Unidos y Canadá, también han tenido casos
lamentables en cuanto al trato con las mujeres
migrantes. Cabe mencionar incluso que los
elementos de los Cascos Azules de la ONU,
también han cometido violaciones sexuales
con mujeres en situación de desplazamiento
forzados en estados en guerra.
Perspectiva intercultural
Este análisis nos lleva a transformar el concepto
de ciudadanía que conocemos o que nos han
dado a conocer y que es con el que las mujeres
desde la salida de sus países tienen marcado,
que su trato no será igual, que se encontrará
ante adversidades por ser migrante.
Algo que en citadas ocasiones he comentado es
la contrariedad a la que se enfrentan quienes
en su práctica profesional como operadores de
justicia, hacen uso de su experiencia y bases
Partido Unidad Popular
24

morales, éticas personales, con las que en un
contexto de concientización, ayudan a estas
mujeres, inclusive dejan de observar ciertos
ordenamientos jurídicos o extraoficialmente
buscan los mecanismos para aminorar la
violencia a la que se encuentran expuestas.
La visión intercultural propuesta, está
enfocada a que, en el ámbito de la diversidad
cultural, identitaria, lingüística, social,
económica e inclusive política, con la que
llegan las mujeres latinoamericanas e
indígenas, trae consigo toda esta información
consciente o inconscientemente; de ahí que, si
en lugar de verlas como personas vulnerables
se le cambie la perspectiva de verlas como lo
que son, mujeres sobrevivientes de otras o
similares formas de violencia en sus territorios
de origen y que han batallado con enormes
dificultades, el llegar a este nuevo territorio,
para ellas lleno de nuevas esperanzas y
mejores condiciones de vida. Ramón Soriano,
propone una serie de procesos previos para
conformar condiciones en la estructuración de
una realidad intercultural. Afirma al respecto
que la igualdad de las culturas es un ideal. La
realidad es la jerarquía y la desconfianza entre
las culturas. Al respecto refiere que:
La perspectiva intercultural remite a una
coexistencia de las culturas en un plano de
igualdad, es decir que tienen el mismo valor
en el intercambio cultural y participan en esa
misma condición de tolerancia y solidaridad,
buscando puntos comunes de creencias y
comportamientos. (Soriano, 2004: 85, 91, 92).
Por tanto, si entendemos que la estratificación
de la ciudadanía parte de las instituciones
corporativistas, bancarias, empresariales y
del estado, y que éstas tienen la necesidad
de subordinar todas las formas de vida a los
mercados, por tanto de negar la posibilidad de
crear nuevas formas de convivencia humana, se
hace necesaria la discriminación, la violencia,
el racismo y el terror para controlar a la masa
humana, especialmente a las mujeres.
Para abundar en lo anterior, Butler afirma que
la singularidad no es la individualidad: si el
individuo puede entenderse como parte de un
todo, homogéneo e intercambiable, lo propio
de lo singular es que se trata de una unidad
heterogénea, que no se relaciona con los
demás en la totalidad, sino en la pluralidad.
Salvaguardar nuestra propia singularidad,
manifestarse como alguien mediante la palabra
y la acción, no es amenazar sino, al contrario,
fundar la comunidad. (2006:203)
La interculturalidad, busca el trato de igual
a igual, si bien como afirma Butler, no desde
la colectivo, sino desde la individualidad en
lo plural; esto significa echar abajo el citado
pánico moral, que a nivel gubernamental y
social se está volviendo implacable; ambos
Soriano y Butler, reconocen las dificultades
de emprender la igualdad en una sociedad
jerarquizada y dominada por un solo modelo
sistema Estado patriarcal y corporativista
que está impidiendo de diversas formas la
integración fluida y transparente de las
diferentes culturas. Abordando el tema que
ocupa este trabajo, si bien no resultará fácil
para la sociedad ni para sus autoridades
empezar a ver a las personas migrantes tengan
la situación administrativa que tengan, como
sus iguales, convergiendo de diversas formas,
habrá aspectos culturales rechazables como
el machismo que en todas las sociedades se
manifiesta en distintos grados y formas, pero la
amenaza es global, así mismo hay aspectos de
prácticas tradicionales y folklóricas que a todas
las culturas gusta, los impedimentos reales
aterrizan en aspectos políticos y económicos.
Silvia Federici afirma que las mujeres con sus
luchas son quienes han sido las principales
impulsoras de un uso no capitalista de los
recursos naturales (tierras, aguas bosques) y
de la agricultura orientada a la subsistencia.
(Federici, 2013:23). Las mujeres que transitan
por diversos territorios mantienen en definitiva
estas prácticas, son quienes siembran el
campo, en donde muchas veces son explotadas,
pero también comparten los aprendizajes, son
capaces de establecer formas de convivencia
y sobrevivencia no capitalista. Son quienes
reproducen la fuerza de trabajo humana y en
ellas recae la enorme responsabilidad de hacer
que esa fuerza de trabajo sea real, es decir son
sus hijos e hijas a quienes deben criar, educar,
25 Partido Unidad Popular

sostener, alimentar, cuidar y muchas veces
amar. Como bien lo refiere Federici, es
una guerra contra las mujeres, la cual se
vuelve especialmente peor en las mujeres
migrantes, apátridas, latinoamericanas,
negras e indígenas.
Trasterritorialización e interseccionalidad
de la violencia de género
Para poder entrar a una transformación de eso
que llamamos ciudadanía, es imprescindible
abatir la violencia interseccional, hacer trabajo
en este doloroso tema requiere primero de
voluntad, en todos los sentidos y espacios, desde
la individual, social, política y especialmente
económica. Más importante aún, es reconocer
que la situación de las mujeres a nivel mundial
y en especial de las migrantes, sus vidas no
van a mejorar si antes no se considera que las
problemáticas emanan de los corporativismos
mundiales, del sistema patriarcal y neoliberal
que somete a toda forma de vida.
La cero tolerancia a la diferencia, así como la
ausencia de diálogo entre iguales y la ausencia
de solidaridad, generan diversas vicisitudes
que engloban la condición de las mujeres
latinoamericanas en situación administrativa
irregular, traduciéndose en sufrir
discriminación múltiple, por ser mujeres, por
Partido Unidad Popular
ser latinoamericanas, por su “color de piel”, por
su origen étnico, por su cultura, discapacidad,
orientación sexual, idioma, etcétera. No es
posible concebir una plenitud de vida o de por
lo menos estar en condiciones de llevar a cabo
su proyecto de vida digno. En relación a esto
Rey Martínez asevera que:
“nunca abordaremos completamente
el problema de la discriminación… si
continuamos enfocando a las categorías
abstractas y generalizaciones en vez de a sus
efectos específicos… la mayoría de las veces,
la desventaja deriva de la manera en que la
sociedad trata a los individuos en particular
más que de cualquier característica inherente a
estos mismo individuos”, la determinación de lo
que constituye una [inmigración] debe basarse,
sobre todo, en si la persona ha experimentado
«barreras sociales» y no tanto en sus condiciones
o limitaciones físicas (2008:233 y 234)
Cabe señalar algunos puntos que Martínez
considera importantes resultados dados desde
el análisis de la discriminación múltiple:
a.- Permite conocer la complejidad de cómo la
gente experimenta la discriminación.
b.- Pone el foco sobre la respuesta que la
sociedad ofrece al individuo como resultado
de la confluencia de diversos factores y no
26

equiere que las personas se etiqueten en
rígidos compartimentos o categorías.
c.- Se enfrenta al hecho de que la discriminación
muta y tiende a ser cada vez menos abierta,
más sutil, sistémica, ambiental e institucional.
d.- Posibilita la consideración de otros factores
como el desempleo o subempleo, la pobreza o la
falta de vivienda.
Es importante clarificar que los procesos de
interculturalidad o de convivencia horizontal
en condiciones de igualdad, respetando la
diversidad, no serán posibles hasta que
como refiere Federici, se haga visible que
es necesario deslegitimar las agencias y
programas que sostienen la expansión
global del capitalismo: Fondo Monetario
Internacional, Banco Mundial, Organización
Mundial del Comercio (Federici, 2013: 24). Así
como todas las políticas que de ellas emanan
para controlar los mercados en las diferentes
regiones del mundo. Es desde esos ámbitos en
donde se diseñan las formas de discriminación
múltiple y violencia interseccional que vulnera
notablemente las vidas de las mujeres en
situación de migración.
La perspectiva intercultural va de la mano con
la erradicación de la discriminación múltiple,
en la población existen discriminación por
ser mujer, pobre, inmigrante, “irregular”,
latinoamericana, de piel oscura, lejos
del prototipo de belleza occidentalizada
y mediatizada, pocas con discapacidad y
lesbianas. Hay mucho trabajo realizado desde
la perspectiva feministas a nivel general, en el
que han estado trabajando la erradicación de
algunos de estos tipos de discriminación que
van muy de la mano con los que sufren algunas
autóctonas; sin embargo esas particularidades
de las mujeres de esta investigación hace que
estos sectores feministas, desconozcan sus
especificidades, que trascienden las culturas
obviamente e incluye las del lenguaje, la visión
etnocéntrica, androcéntrica y colonialista,
son determinantes también para que se
interseccione la violencia.
Redefinición de la ciudadanía
La concepción liberal de ciudadanía que
hasta la fecha sigue prevaleciendo, y que a
través de la historia ha sido una concepción
etnocéntrica, androcéntrica, clasista, racista
y jerárquica, nos deja de manifiesto el por
qué ésta se convierte en un estatus de vida a
nivel social y jurídico, aunque muchas veces se
le haya atribuido un tono de interés social y
hasta universal. Es evidente que ese atributo
de la persona sea una manera de clasificar
a quienes valen en el sistema neoliberal y
patriarcal, esto es, las personas más afectadas
es a quienes no cumplen con el requisito de
valor establecido en las leyes que la reconocen.
Las mujeres en situación de migración son
las más afectadas, ya que al serles negado el
reconocimiento de ciudadanas en los territorios
de tránsito y destino, implica necesariamente
a su descendencia, esto las orilla a tener que
aceptar condiciones de esclavitud en las que
por supuesto se coloca necesariamente la
esclavitud sexual. Esto nos lleva a la fórmula
de que entre más tipos de discriminaciones
sufra una mujer, menor será el disfrute del
derecho civil a la ciudadanía. Marcela Lagarde
hace referencia a que:
La ciudadanía de las mujeres es incompleta
y no abarca a millones de ellas. Contiene dos
dimensiones: la personal de cada mujer y la de
género en tanto categoría social. La mayor o
menor mutilación de la ciudadanía femenina
se corresponde también con el acceso a la
educación y el manejo de habilidades sociales
27 Partido Unidad Popular

necesarias para ejercer la ciudadanía. Entre la
mayoría de las mujeres excluidas por género y
por sus otras condiciones de identidad, prevalece
la desorganización y la falta de participación,
lo cual conduce a su manipulación y a que
sus derechos sean conculcados sin siquiera
conocerlos. (1996:204-205)
Evidentemente la ciudadanía no se centra
únicamente en las bases de la participación
política, el derecho al voto o cuestiones afines,
sino que trasciende a la formalidad y realidad
de la titularidad de los derechos fundamentales
recogidos en las Constituciones de cada país,
sea flexible o rígida, la Constitución tiene que
contemplar que las bases sociales son quienes
definen el tipo de orden jurídico político y no
a la inversa, de ahí su importancia. Ahora
bien, las mujeres inmigrantes por cuestiones
de identidad (sea por cuestiones religiosas,
culturales, económicas, políticas, etc.) carecen
de más de la mitad de esa representatividad
y por ende cualquier tipo de política pública,
de atención social, de legislación, económica
o educativa, irá carente de la opinión e
interacción de quienes directamente pueden
verse implicadas. Butler afirma que en el
mundo actual, ciudadanía e identidad no
tienen por qué asimilarse, pues el Estado
no está compuesto por una sola nación. El
reconocimiento de la pluralidad es decisivo
como fundamento de la democracia, la
Constitución y las instancias representativas
que garantizan esta pluralidad son sus
guardianas, no su liquidación (2006:247).
Los feminismos han aportado y seguirán
aportando tanto teórica como conceptualmente,
herramientas para analizar las diversas
formas, modos y tipos de violencia que
sufrimos, así como los contextos en los que
se desarrolla y proponer desde las voces de
las propias mujeres; las migrantes tienen
mucho que decir y opinar con respecto a sus
particulares situaciones. Las mujeres que se
encuentran en una circunstancia y contexto
de violencia por razones de sexo y género,
necesitan para la erradicación de esta violencia
un entorno seguro y personas en los ámbitos
institucionales a su lado que les crean y que
las escuchen y acompañen en este duro trabajo
de desenmascarar la violencia y sus efectos
(García y Carrasco, 2003:51).
Conviene ir construyendo nuevas formas y
estructuras de derecho y principalmente de
un orden comunitario donde el feminismo
dará aportaciones además de las dadas a los
Estados Liberales y Sociales. Ya lo comenta
Balaguer, que:
La adecuación del derecho a la mujer, no se
solventa con una extensión de los conceptos
jurídicos a un colectivo hasta hace poco
marginado. La consecución de la igualdad real
exige cambios profundos en el ordenamiento
jurídico […] el intento de formular una teoría
feminista del derecho (2005:53).
La cuestión es que los cambios profundos
estarán supeditados a los corporativos
extractivistas en forma de empresas,
organismos internacionales y a los estados,
dentro de éstos a las concepciones de quienes
consensan las leyes, donde la presencia de la
mujer no llega a la paridad para la toma de esas
decisiones, y no quiero decir con ello que sea
garantía de que escrupulosamente las mujeres
velarán por los derechos de las otras mujeres,
en la práctica a veces sucede al contrario, sin
embargo lo que sí es evidente es que, en un
Estado donde hay una limitada representación
de mujeres en la toma de decisiones, resulta
cuestionable la capacidad del mismo Estado
para mantener y crear cambios sustanciales al
orden establecido.
Cabe recordar que la vida de las mujeres
en situación de migración voluntaria o
forzada, su vida está delineada por fronteras,
territoriales, legales y humanas que les limitan
discriminatoriamente y generan violencia de
género multiseccional. Lograr la utopía de
una ciudadanía universal, donde la igualdad
fundante sea diversa, donde los condicionantes
de territorialidad y de nacionalidades no
signifique el ser ni de primera, ni de segunda,
donde sea lo que Julia Kristeva ha llamado
o ciudadanía
universal, o ciudadanía comunitaria.
Cuestionarnos hasta cuándo mantener el
régimen de orden social que tenemos y enfocarlo
a una forma comunitaria para cambiarlo.
Partido Unidad Popular
28

La mujer negra
Buscando su empoderamiento
ISRAEL REYES LARREA
29 Partido Unidad Popular
Hasta hace unos 10, 15 años, hablar del empoderamiento de la
Mujer Negra, de la Mujer Indígena, en nuestra sociedad costeña era
prácticamente imposible, en virtud de que la cultura de la región
está fundamentada, así como en el resto del país, en la figura de un
machismo exacerbante que pone a la mujer, muy por abajo ya no de
ocupar espacios públicos, sino en el mismo papel de la familia.
Seguramente muchos de nosotros hemos escuchado mucho habar
acerca de un tema que día a día cobra mayor vigencia y que es
el empoderamiento de la mujer, pues es un tema que diversas
organizaciones están empujando con la finalidad de crear conciencia
y que las mujeres asuman un rol protagónico en la sociedad, pues en
las comunidades negras de igual forma, las mujeres cada vez más y
con mayor intensidad, están participando en la toma de decisiones
en su hogar y en la comunidad.
Las mujeres, con ese conocimiento, producto de sus participaciones
en foros, reuniones, encuentros, talleres, están empezando a
romper estereotipos, se están decidiendo a romper con tabúes y
esquema y se están atreviendo a tener un roll más importante
en la toma de decisiones. Los varones, son los que ocupan los
puestos administrativos, son los que figuran como autoridades, son
generalmente los que presiden organizaciones, pero en tiempos
recientes hemos observado como la mujer también ha tomado una
mayor participación, ejemplo de ello son Lucila Mariche de Charco
Redondo, Tututepec y Yuridia Mariel Domínguez, de San Francisco,
El Maguey, Llano Grande. Ambas han llegado a ser Autoridades
Municipales en sus respectivos pueblos y supieron con inteligencia

y poder de mando, dirigir los destinos de
comunidades en donde toda la vida habían
sido gobernados por varones.
De igual forma, podemos observar que han
surgido organizaciones sociales presididas
por mujeres, cuya temática es el trabajo en
comunidades negras, ya sea en el impulso
por lograr el reconocimiento constitucional
del Pueblo Negro o bien haciendo labor y
participando en los proyectos productivos
del gobierno federales. Casos concretos
podemos mencionar a Yadira Torres Díaz,
quien a partir de este 2016, coordina la Red
por el Reconocimiento Constitucional del
Pueblo Negro, que agrupa a una decena de
organizaciones, como activista y líder de su
organización: Mujeres de Sol, ha impulsado
platicas y talleres sobre los derechos de la
mujer, así como la conmemoración del 8 de
marzo, Día Internacional de la Mujer, en José
María Morelos, Huaz-. Sede de la organización.
En ese mismo tenor, podeos mencionar el
liderazgo de Rosy Castro, quien preside
AMCO AC. (Asociación de Mujeres de la Costa
de Oaxaca), quien tiene un trabajo en el área
de Santa María Huatulco, a Yolanda Camacho
(de la Red de Mujeres de la Costa Oaxaqueña/
REMCO) en Pinotepa Nacional, a Beatriz
Amaro (integrante del Consejo Académico de la
Escuela Itinerante de Formacion Permanente
para Mujeres AfromexIcanas), en la Ciudad
de Oaxaca, a Angustia Torres Díaz (de
AFRICAA AC/ Alianza para el Fortalecimiento
de las Regiones Indígenas y Comunidades
Afromexicanas) en José María Morelos, a Hilda
Guillén (de Alianza Cívica) en la zona baja de
Cerro de la Esperanza y Pinotepa Nacional,
a Tania Ruiz (de AMORR AC) en Pinotepa
Nacional, entre otras muchas mujeres que se
han atrevido a buscar su empoderamiento y
con su ejemplo, están motivando y enseñando
a otras mujeres a luchar y hacer valer sus
derechos.
Partido Unidad Popular
30

Las mujeres mas influyentes
del verso latinoamericano
MARÍA DE LOS ÁNGELES ESPINOZA RAMOS
El arte de las palabras, principalmente en el mundo de la poesía,
es un género literario que ha perdido su vigencia, pero que aún
sobrevive ante los bestsellers, novelas y otras formas de expresión. Es
por esto, que cada 21 de marzo, la UNESCO celebra el “Día Mundial
de la Poesía” como una forma de apoyar la diversidad lingüística a
través de la expresión poética y dar la oportunidad a las lenguas
amenazadas de ser un vehículo de comunicación artística en sus
comunidades respectivas.
Sin embargo, son pocos los exponentes de ese arte que se conocen
a nivel popular. Pablo Neruda, Rubén Darío, Jorge Luis Borges
son los escritores más comunes que nombran los latinoamericanos
en esta disciplina, dejando de lado a las mujeres que también han
hecho una labor destacada, en el cual su obra sigue dejando huella
y está más vigente que nunca.
Como una forma de conmemorar este día, te invitamos a conocer
algunas de las poetisas destacadas de este rincón del planeta, las
cuales resaltan no sólo por sus galardones, sino también por su
mensaje y punto de vista sobre los ámbitos más diversos:
31 Partido Unidad Popular
GABRIELA MISTRAL (1889-1957)
Ha sido la única latinoamericana que ha ganado un Premio Nobel
de Literatura, en una época donde la voz de las mujeres no era
usualmente escuchada por lo círculos intelectuales de principios de
siglo XX.
La poetisa chilena que nació en un pequeño pueblo llamado Vicuña

y que logró el reconocimiento en todo el
mundo, se destacó por una obra centrada en
el humanismo, en la que son protagonistas las
mujeres y su vida cotidiana, principalmente
madres y maestras.
Su crítica social hacia la situación de las
trabajadoras y sus versos dedicados a los
niños, la hicieron merecedora de este galardón
que le fue entregado en 1945.
ALFONSINA STORNI (1892 - 1938)
Fue una destacada poetisa y periodista
feminista argentina que defendió el derecho
al voto femenino y fue una de las primeras
mujeres en criticar los estereotipos de género a
principios del siglo XX. Sus poemas y notas de
prensa fueron una reivindicación de la libertad
femenina.
Vivió en permanente conflicto con su sexo y las
limitaciones sociales que sufría. Finalmente,
se suicidó tras luchar contra la depresión y el
cáncer de mama.
Su poema “Tú me quieres blanca” se
considera heredero de otra gran composición
feminista: “Hombres necios” de Sor Juana Inés
de la Cruz.
Tú me quieres alba,
me quieres de espumas,
me quieres de nácar.
Que sea azucena
Sobre todas, casta.
De perfume tenue.
Corola cerrada .
Ni un rayo de luna
filtrado me haya.
Ni una margarita
se diga mi hermana.
Tú me quieres nívea,
tú me quieres blanca,
tú me quieres alba.
Tú que hubiste todas
las copas a mano,
de frutos y mieles
los labios morados.
Tú que en el banquete
cubierto de pámpanos
dejaste las carnes
festejando a Baco.
Tú que en los jardines
negros del Engaño
vestido de rojo
corriste al Estrago.
Tú que el esqueleto
conservas intacto
no sé todavía
por cuáles milagros,
me pretendes blanca
(Dios te lo perdone),
me pretendes casta
(Dios te lo perdone),
¡me pretendes alba!
Huye hacia los bosques,
vete a la montaña;
límpiate la boca;
vive en las cabañas;
toca con las manos
la tierra mojada;
alimenta el cuerpo
con raíz amarga;
bebe de las rocas;
duerme sobre escarcha;
renueva tejidos
con salitre y agua:
Habla con los pájaros
y lévate al alba.
Y cuando las carnes
te sean tornadas,
y cuando hayas puesto
en ellas el alma
que por las alcobas
se quedó enredada,
entonces, buen hombre,
preténdeme blanca,
preténdeme nívea,
preténdeme casta.
JUANA DE IBARBOUROU (1892 - 1979)
La poetisa uruguaya - conocida también
como “Juana de América” - es considerada
una de las voces más personales de la lírica
hispanoamericana de principios del siglo XX.
Partido Unidad Popular
32

Su temática tendía a la exaltación sentimental
de la entrega amorosa, la maternidad, la belleza
física, la naturaleza y también el erotismo
femenino, quien además retrató con sarcasmo
e ironía el rol de la mujer en la sociedad de
aquel entonces.
Ibarbourou ocupó la presidencia de la Sociedad
Uruguaya de Escritores en 1950. Cinco años
más tarde su obra fue premiada en el Instituto
de Cultura Hispánica de Madrid, y en 1959 el
gobierno uruguayo le concedió el Gran Premio
Nacional de Literatura, otorgado por primera
vez aquel año.
ROSARIO CASTELLANOS (1925-1974)
Poeta, defensora de los derechos de la mujer
y embajadora de la cultura mexicana en el
mundo. Así fue la trayectoria de Castellanos
que se refería al feminismo, su inadaptación al
mundo de los hombres y sus malas experiencias
con el psicoanálisis.
Además, en su obra habla sobre los
tranquilizantes y la sumisión a que se vio
obligada desde la infancia por el hecho de ser
mujer. Es considerada una de las escritoras
más importantes mexicanas del siglo XX.
tardía, cuando fue madre.
Antes de la maternidad, su obra “era asexual”,
que es lo que ella ansiaba ser: una persona sin
un sexo definido. Desde entonces reivindicó
una “dimensión propia para la mujer” al
margen del hombre.
A los treinta y tres años, publicó a insistencia
del escritor mexicano Octavio Paz su primer
poemario “Ese puerto existe”, con prólogo
del mismo Paz. En esta obra hay poemas de
influencia surrealista que la escritora suprimió
en ediciones posteriores.
Octavio Paz la definió en el prólogo como “un
poeta que no se complace en sus hallazgos ni
se embriaga con su canto. Con el instinto del
verdadero poeta, sabe callarse a tiempo. Su
poesía no explica ni razona. Tampoco es una
confidencia. Es un signo, un conjuro frente,
contra y hacia el mundo, una piedra negra
tatuada por el fuego y la sal, el amor, el tiempo
y la soledad. Y también una exploración de la
propia conciencia”.
ALAÍDE FOPPA (1914- DESAPARECIDA
EN 1980)
Alaíde fue una luchadora de las mujeres.
Feminista, profesora y fundadora de la
revista FEM, es todo un símbolo de la fuerza
de las mujeres latinoamericanas que deseaban
alcanzar la libertad.
De esta manera, su obra estuvo marcada
por sus versos antipatriarcales y la sentida
muerte de su hijo - quien falleció en el Ejército
Guerrillero de los Pobres - y marido.
Fue detenida y desaparecida en 1980 tras
ser secuestrada por el Servicio Secreto de
Guatemala.
BLANCA VARELA (1926- 2009)
La poetisa limeña es una de las escritoras
más importantes del continente. Comenzó a
conocer el concepto del feminismo de forma
33 Partido Unidad Popular

A Malintzin
GUADALUPE ÁNGELES RAMÍREZ
¿A quién toco?
¿Con quién hablo?
Tengo los ojos cubiertos,
no me pertenezco,
soy de otros,
me cambiaron por cacao,
lo huelo,
por piedras preciosas,
las oigo.
Escucho nuevos sonidos
que se vuelven dibujos
en mi mente.
De mi madre sólo conozco
el desamor.
Me destapan los ojos
y estoy ahora,
con mis trece años,
en otro paisaje.
Un señor me habla,
me señala en maya,
repito con la cabeza
limpio repitiendo,
lloro repitiendo.
Esta lengua contiene
el desamor de la distancia.
No me pertenezco,
soy de otros,
no me cambian por cacao,
no lo oigo,
no lo huelo,
me destapan los ojos,
es un hombre blanco
de barba de elote,
me habla,
me señala en castellano,
repito con la cabeza,
limpio repitiendo
lloro repitiendo
me desnudo repitiendo.
Esta lengua es desamor
de distancia.
Tengo tres lenguas
enredadas como serpientes
en mi boca.
Me preguntan,
dibujo mi infancia
con palabras,
pinto un verde
que hubiera
anhelado tener bajo mis pies
todo el tiempo,
dibujo con tierra
la mano de una madre
que hubiera querido sostener
de niña en el monte,
dibujo un hermano,
su risa ausente.
Saboreo la comida
en el recuerdo,
saboreo náhuatl.
Me han hecho narradora,
me dicen doña Marina,
y cuento todo lo visto
antes de que me vendan
antes de que me venden.
Huelo el cacao.
Me han hecho hijos
a quienes toco
todo el tiempo
como si fuera ciega.
Saco del canuto de una pluma
polvo de oro
lo froto, lo pongo
en mi rostro.
Me han dado un espejo
como pago.
Saco la lengua.
(Poema publicado en Cartografía II. 2012. México: Editorial Almadía)
Partido Unidad Popular
34

La mujer en el ejercicio de sus
derechos políticos-electorales
VEREMUNDO JIMÉNEZ JIMÉNEZ
35 Partido Unidad Popular
La lucha de la mujer para poder participar al igual que lo hacen
los hombres en la vida política y por lo consiguiente en la toma de
decisiones en aquellos asuntos de relevancia para su comunidad; no
ha sido una tarea nada fácil, porque muchos sectores de la sociedad
se oponen a que una mujer los gobierne e inclusive en muchos lugares
son las mismas mujeres las que truncan las aspiraciones de sus
compañeras mujeres, la tarea no es nada fácil ya que vivimos en una
sociedad en donde las costumbres se encuentran muy arraigadas en
varios municipios de nuestro estado, en donde las mujeres no tienen
derecho a ser votadas y ejercer un cargo de representacion popular
y por lo consiguiente, son pisoteados sus derechos a la educacion,
salud, trabajo y a la participacion politica; este es uno de los
derechos mas violentados ya que su comunidad no les permite tener
una participacion directa en la toma de decisiones, y esa decision
la tiene el padre de familia o los hijos varones; esto es debido al
arraigo de las enseñanzas culturales históricas acerca del roll que
debe de jugar una mujer en la sociedad, ya que muchas veces ve con
naturalidad esta situación y no ve con claridad que esta frente a una
violación grave de un derecho, por lo que este estado de marginación
y olvido para la mujer se ha venido transmitiendo de generación en
generación dejándole la tarea de los trabajos domésticos, negadoles
el derecho a la participación política.
Por lo que es urgente que tanto la sociedad como el gobierno
implementen acciones para cambiar éste estado de cosas, y que
desde el mismo seno familiar se brinde la educación necesaria y se
terminen con este tipo de costumbres y tabues que mucho daño han
causado, y así la mujer pueda alcanzar la plena igualdad, como en

ante la ley. Esta protegerá la organización y el
desarrollo de la familia”.
El derecho que debe de tener todo ciudadado
o ciudadana por el solo hecho de ser, con
independencia de su origen étnico, color,
nacionalidad, religión, sexo, condición social,
estado civil, opinión política o cualquier otra
condición; son resultados de su naturaleza
humana, de modo que son necesarios para
llevar a cabo una vida digna, en el pleno
respeto de los derechos inherentes a la persona
constituye un elemento fundamental y de rango
constitucional y que es resultado de una larga
lucha en diferentes partes del planeta y en el
pueblo mexicano no es la excepción y quedo
plasmado en el artículo 35 de la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos, y
que a la letra dice:
muchas partes del mundo ya se ha logrado; por
lo que se hace necesario que la mujer conozca
sus derechos políticos electorales establecidos
en la Constitucion Federal y Local, en los
ordenamientos electores y los propios estatutos
de nuestro Partido Unidad Popular, para que
los haga valer y pueda defender sus derechos.
La igualdad entre el género masculino y
femenino es un principio de rango constitucional
que establece la igualdad que debe de haber
entre hombres y mujeres sin distingo de algún
tipo, ya que esto se debe de traducir en la
práctica en algo real como el poder acceder a los
servicios de salud, de educación, a un trabajo
digno,poder participar a puestos de elección
popular, por lo que falta un largo camino por
recorrer para hacer realidad el reconocimiento
pleno de este derecho tal como lo estipula el
artículo 4º de la Constitución Política de los
Estados Unidos Mexicanos que a la letra dice:
Artículo 4. “El varón y la mujer son iguales
Artículo 35. Son derechos del ciudadano:
I. Votar en las elecciones populares;
II. Poder ser votado para todos los cargos
de elección popular, teniendo las calidades
que establezca la ley. el derecho de solicitar
el registro de candidatos ante la autoridad
electoral corresponde a los partidos políticos
así como a los ciudadanos que soliciten su
registro de manera independiente y cumplan
con los requisitos, condiciones y términos que
determine la legislación;
VI. Poder ser nombrado para cualquier empleo
o comisión del servicio público, teniendo las
calidades que establezca la ley;
VIII. Votar en las consultas populares sobre
temas de trascendencia nacional,
La Ley General de Partidos Políticos que fue
publicada el día 23 de mayo del año 2014 en
el Diario Oficial de la Federación, recopila los
derechos políticos electorales de los ciudadanos
y ciudadanas dentro de los partidos políticos.
Artículo 2. Son derechos político-electorales de
los ciudadanos mexicanos, con relación a los
partidos políticos, los siguientes:
a) Asociarse o reunirse pacíficamente para
tomar parte en los asuntos políticos del país;
b) Afiliarse libre e individualmente a los
partidos políticos, y
c) Votar y ser votado para todos los cargos
Partido Unidad Popular
36

de elección popular dentro de los procesos
internos de selección de candidatos y elección
de dirigentes, teniendo las calidades que
establezca la ley y los estatutos de cada partido
político.
Artículo 40. 1. Los partidos políticos podrán
establecer en sus estatutos las categorías
de sus militantes conforme a su nivel de
participación y responsabilidades. asimismo,
deberán establecer sus derechos entre los que
se incluirán, al menos, los siguientes:
a) Participar personalmente y de manera
directa o por medio de delegados en asambleas,
consejos, convenciones o equivalentes, en
las que se adopten decisiones relacionadas
con la aprobación de los documentos básicos
del partido político y sus modificaciones, la
elección de dirigentes y candidatos a puestos
de elección popular, la fusión, coalición,
formación de frentes y disolución del partido
político;
b) Postularse dentro de los procesos internos
de selección de candidatos a cargos de
representación popular, cumpliendo con
los requisitos que se establezcan en las
disposiciones aplicables y en los estatutos de
cada partido político;
c) Postularse dentro de los procesos de selección
de dirigentes, así como para ser nombrado en
cualquier otro empleo o comisión al interior del
partido político, cumpliendo con los requisitos
establecidos por sus estatutos;
d) Pedir y recibir información pública sobre
cualquier asunto del partido político, en
los términos de las leyes en materia de
transparencia, independientemente de que
tengan o no interés jurídico directo en el asunto
respecto del cual solicitan la información;
e) Solicitar la rendición de cuentas a sus
dirigentes, a través de los informes que, con
base en la normatividad interna, se encuentren
obligados a presentar durante su gestión;
f) Exigir el cumplimiento de los documentos
básicos del partido político;
g) Recibir capacitación y formación política e
información para el ejercicio de sus derechos
políticos y electorales;
h) Tener acceso a la jurisdicción interna
del partido político y, en su caso, a recibir
orientación jurídica en el ejercicio y goce de
sus derechos como militante cuando sean
violentados al interior del partido político;
i) Impugnar ante el tribunal o los tribunales
electorales locales las resoluciones y decisiones
de los órganos internos que afecten sus
derechos político-electorales, y
j) Refrendar, en su caso, o renunciar a su
condición de militante.
Así como la legislación federal la constitucion
local establece prerrogativas para los
ciudadanos y ciudadanas del estado de Oaxaca;
mismos que a la letra dice:
Artículo 8 2. El voto o sufragio activo constituye
una prerrogativa y una obligación personal e
intransferible de los ciudadanos, expresado
en elecciones auténticas, transparentes y
periódicas para todos los cargos de elección
popular, así como para los mecanismos de
participación ciudadana. sin perjuicio de lo
que al efecto establezcan las disposiciones
penales, se sancionará todo acto que directa
o indirectamente genere presión o coacción en
los electores, en la intención o preferencia de
su voto.
3. El sufragio pasivo, es la prerrogativa que
tiene el ciudadano, de poder ser votado para
todos los cargos de elección popular en igualdad
de oportunidades entre hombres y mujeres,
cumplidos los requisitos previstos por la
constitución y este código, encontrándose fuera
de las causas de inelegibilidad expresadas en
la misma.
Artículo 10
Son prerrogativas de los ciudadanos
oaxaqueños:
I. Votar y participar en las elecciones, así como
37 Partido Unidad Popular

en los procesos de participación ciudadana, de
acuerdo con lo dispuesto por la constitución
federal, la estatal y este código;
II. Estar inscrito en el padrón electoral y en la
lista nominal, así como obtener la credencial
para votar con fotografía, en los términos que
establece la ley;
III. Constituir partidos políticos locales y
afiliarse a ellos de manera libre, individual,
voluntaria y pacífica, conforme a las
prevenciones del presente código;
IV. Participar como observadores en todas
las etapas de los procesos electorales, en los
términos de este código y demás disposiciones
aplicables;
V. Ser votados para todos los cargos de elección
popular en el estado, y desempeñar los cargos
para los que hayan sido electos o designados;
VI. Solicitar de conformidad con este código, la
información pública al instituto, al tribunal y
a los partidos políticos; y
VII. Los demás que establezcan las leyes.
Desde el nacimiento el partido (PUP) en
noviembre del 2003, siempre se ha preocupado
por garantizar la participación de la mujer
en las diferentes esferas de representación y
de toma de decisiones, dándole el espacio y la
oportunidad a las mujeres para que ejerzan
su inalienable derecho a votar y ser votada,
para que poco a poco se involucren en la toma
de decisiones de sus comunidades, ya que
son capaces de desempeñar cargos públicos
en los diferentes niveles de gobierno, desde
la selección de candidatos y candidatas a
puestos de elección popular a respetado la
paridad y equidad de género; pero como lo
hemos manifestado anteriormente la tarea
no es nada fácil y día a día las mujeres libran
batallas encontra de sus propias familias y
comunidades, ya que aun prevalece la cultura
de la descriminación y que entorpecen el
fortalecimiento de los liderazgos para la
participación política de las mujeres, por eso el
partido unidad popular se ha preocupado en la
divulgación de los derechos político-electorales
que tienen las mujeres por lo que da a conocer
el marco conceptual y legal dentro el mismo
partido que son sus estatutos :
De los derechos y obligaciones de los militantes
del partido de los derechos de los militantes
del Partido:
Artículo 12.- Son derechos de los militantes del
partido:
I. Conocer, cumplir y hacer cumplir la
declaración de principios, el programa de
acción, los presentes estatutos y las líneas de
acción del partido;
II. Hacer llegar a las instancias competentes
del partido, las inconformidades, quejas y
denuncias contra los miembros y órganos del
mismo partido;
III. Presentar iniciativas y proyectos que
conduzcan al mejoramiento del partido y
cumplimiento de sus fines;
IV. Expresar libremente sus ideas, tanto
dentro del partido, como en la vida social; pero
las divergencias de los militantes del partido
se ventilarán con democracia y sabiduría al
interior de éste, cuidando que no afecten los
objetivos o lineamientos políticos del partido;
V. Recibir capacitación política y formación
ideológica;
VI. Recibir la credencial que lo acredite como
militante del partido y figurar en el padrón de
afiliados;
VII. Participar en los procesos electorales
internos del partido, convocados por el comité
ejecutivo estatal; así como en los procesos
electorales constitucionales estatales y
municipales;
VIII. Votar y ser votada o votado para ocupar
los cargos o comisiones del partido;
IX. Ser postulados o postuladas como candidatos
o candidatas para los distintos cargos de
elección popular, en el municipio, distrito o en
el estado, siempre y cuando cumplan con los
requisitos de elegibilidad, establecidos en la
Partido Unidad Popular
38

constitución política del estado libre y soberano
de Oaxaca, en el Código de Instituciones
Políticas y Procedimientos Electorales de
Oaxaca y los presentes estatutos;
X. Refrendar, o en su caso renunciar a su
condición de militante;
XI. Pedir y recibir información pública sobre
cualquier asunto del partido en los términos
de las leyes en materia de transparencia,
independientemente de que tengan o no interés
jurídico directo en el asunto respecto del cual
solicitan información;
XII. Solicitar la rendición de cuentas a los
dirigentes del partido, a través de los informes
que, con base a la normatividad interna y estos
estatutos, se encuentren obligados a presentar
durante su gestión;
XIII. Tener acceso a la jurisdicción interna
del partido, y en su caso, recibir orientación
jurídica en el ejercicio y goce de sus derechos
como militante cuando sean violentados al
interior del partido;
xiv. Impugnar ante los tribunales electorales
locales y federales competentes, las resoluciones
y decisiones de los órganos internos del partido
que afecten sus derechos políticos electorales;
y xv. Los demás que establezcan los presentes
estatutos.
generar ingresos que mejoren su economía;
V. Dar a conocer a las mujeres sus derechos
y obligaciones político-electorales, respetando
los usos y costumbres de sus comunidades;
VI. Promover becas y apoyos para que las
mujeres puedan continuar con sus estudios
y sean parte productiva coadyuvante en el
sustento familiar;
VII. Sensibilizar a la sociedad en general
sobre la no discriminación en perjuicio de las
mujeres, enfocando acciones que protejan sus
derechos humanos, laborales y reproductivos,
atendiendo los problemas que comúnmente
se presentan, tales como el acoso sexual,
el acoso laboral, la negativa a contratar a
mujeres embarazadas, y otras formas de
afectación psicológica; además orientar a las
mujeres a defender sus derechos y brindarles
asesoramiento jurídico cuando sean objeto de
procesos judiciales o de violación a sus derechos
humanos;
VIII. Las demás que le encomiende el
presidente del comité ejecutivo estatal, y los
presentes estatutos.
De la Secretaría de las Mujeres:
Artículo 27.- La Secretaría de las Mujeres tiene
como finalidad impulsar la atención de los
rezagos y problemática a que se enfrentan las
mujeres en el estado mediante la integración
de propuestas que modifiquen el marco jurídico
estatal contemplando el respeto a sus derechos
económicos, sociales, humanos, políticos y a su
participación en la construcción del desarrollo
del estado. Tendrá las siguientes funciones:
I. Promover la protección a favor de las mujeres;
II. Impulsar la actividad política de su género,
en defensa de sus derechos humanos y
constitucionales.
III. Brindar y/o gestionar orientación
médica, psicológica y legal, para ayudar a las
mujeres que han sufrido maltrato o violencia
intrafamiliar; y a los familiares de víctimas de
feminicidio;
IV. Realizar cursos, capacitaciones y enseñanza
de artes y oficios a las mujeres, para que
puedan poner en práctica lo aprendido, y así
39 Partido Unidad Popular

Testimonio sobre equidad de género de las
mujeres indígenas en la Mixteca Oaxaqueña
NARCEDALIA HERNÁNDEZ MARTÍNEZ
Mi nombre no importa, pero traigo sangre de
los mixtecos en mis venas. Actualmente en
las comunidades originarias sobre sale mucho
el machismo, pues los hombres piensan
que una mujer sirve solo para tener hijos,
y no alcanzar algún puesto político, en mi
municipio los autoridades piensan que somos
solo su diversión, mas sin embargo muchas
compañeras han abierto los ojos, con la llegada
de la Asamblea de los Pueblos Indígenas y el
Partido Unidad Popular (API-PUP).
Pero las costumbres que de alguna manera nos
tiene adormiladas y con tal de no llegar algún
cargo empiezan con sus envidias y chismes, y
no se dan cuenta que es una piedra que no nos
permite avanzar en el desarrollo de nuestro
municipio y ver por la colectividad y no
solamente por unos cuantos, siento que como
mujer nos falta avanzar mucho en la cuestión
de la equidad de género, para que realmente
alcancemos una verdadera igualdad, porque
actualmente solo es una falacia de papel, pero
el paradigma de la equidad no ha llegado
realmente a mi pueblo.
Yuu neei t ntuu vesi kuini kaai nasha ndeku t
ñadtii t ñuu ndauu.
Vakai nasha nani, diko ñuuii ntñi t ñuu ndau,
vinta chi ncha ñuu ndau, chi ñatu yau ñeyiu dtt
nuu ncha gotee , chi kaagodee sa nandtiigoyu
diko ni sha kundeku deegoyu, diko vasha goyu
kuuyu t chiu chi ñatu nandtiigoyu, dika ñuuii
ncha te ku chiugachi sani ini gode sa ncha
ñeyiu dtt ga chi diko sa dadtktgo de kuu yuu,
diko vai ncha ntaa dtin tua duka sani ini goyu,
nduu ni sha gote danee ñaa sha ñatu duka
kuushi t te undua ndau ntaa dee.
Diko ncha sha sani soo nde kani chi ndekuni
diko vayo t kuini kada nakua kushi, te
kuendani sha vasha t ñadtii koa t vee chiu
te kuita ghode kaagode kuendagoyu. diko
ñatu ndeegode sa t yuu ku ncha kuentuga ña
tu dañashi kundekugoyu kuenta ncha goyu
kinigoyu sha ñadtuu duka kushi te kada chiu
goyu sha kushi ne i ñuu ñadtuni ñeyiu ku ini
goyu. yuu kui t ñadti te ndei sha ni lua vata
kinigandhi sa t ni ku tee ndt ñadti, chi diko
ni un tutu nde diko vata dakuagode kuenda
kinigoyu. shini ndt sha duka ndee nuu tutu
diko ñatu shinindhi nasa kadandt shia nuu
ñuui chi vata kadandt shaa gasi duka.
Partido Unidad Popular
40

La lucha por la equidad de género en la
vida política de San Miguel Tlacamama, Oax.
ROSALBA DOMÍNGUEZ SANTIAGO
41 Partido Unidad Popular
Agradezco a las y los ciudadanos del municipio de San Miguel
Tlacamama, Oax., que con su voto favorecieron la democracia y con
esto nos dan la oportunidad de estar en la administración de los
bienes de nuestro municipio San Miguel Tlacamama. En estos dos
años tendré la oportunidad de servirles y serán ustedes testigos
de mi compromiso y entrega con San Miguel Tlacamama, tierra de
gente honesta y emprendedora.
Las elecciones del pasado 5 de junio cuando se renovó la gubernatura,
42 diputadas y diputados, 153 alcaldes que se rigen por las vías
de los partidos políticos, las y los oaxaqueños votaron y dieron el
triunfo a 18 mujeres electas como diputadas locales y 40 presidentas
municipales, de las cuales, yo soy la primer mujer que compite y
gana la elección municipal, y seré la primer mujer que gobierne
en San Miguel Tlacamama y la primer mujer que será Presidenta
Municipal en las filas del Partido Unidad Popular a nivel estatal
.
Para el registro de candidaturas por el principio de representación
proporcional, los partidos políticos y coaliciones debieron integrar
fórmulas completas con candidaturas de un mismo sexo, siguiendo
el criterio de alternancia de género de manera descendente, de tal
forma que se garantice la paridad de género en la integración hasta
agotar cada lista; una de las determinaciones estipula que, al sumar
a todas y todos los concejales que correspondan a los municipios en
que hayan postulado, en caso de ser un número par, deberá haber
igual número de hombres y mujeres. Pero es lamentable que algunos
partidos hayan pisoteado la ley, pues registraron a un candidato
y en la boleta electoral apareció otra persona y en la constancia

de mayoría en un momento aparece uno y
posteriormente es otra persona, o lo peor que
en algunos municipio se registró a una mujer,
y ya, los acuerdos dicen que no gobernara la
mujer y que en muchos casos las mujeres han
sido causa de amenazas o chantajes.
Culminadas las elecciones y la cadena
impugnativa, viene la integración de los
cabildos. De acuerdo a la Ley Electoral, debe
de darse una integración vertical y horizontal.
No solo al interior de los cabildos, también la
estructura administrativa.
Mujer Presidenta Municipal Constitucional
En el caso de las elecciones de las autoridades
de los municipios que integran el distrito XXII
con cabecera en Pinotepa Nacional, que se
rigen por el sistema de partidos políticos, las
y los oaxaqueños eligieron a 5 mujeres que son
las siguientes: Por el Partido Unidad Popular,
PUP, en San Miguel Tlacamama, triunfó,
Rosalba Domínguez Santiago; por la Coalición
PAN-PRD, en San Pedro Atoyac, Irma Aguilar
Partido Unidad Popular
Raymundo; Por la Coalición PRI-PVEM, San
José Estancia Grande, Carmela Parral Santos;
San Juan Bautista Lo de Soto, Samantha
Caballero Melo; Mártires de Tacubaya, Alba
Mier Castellanos.
¿A quiénes el machismo nos quitará?
Tengo el honor de ser la primera mujer en
ganar las elecciones para Presidente Municipal
Constitucional en San Miguel Tlacamama,
uno de mis compromisos es poner muy en
alto a las mujeres, con el ejemplo cotidiano de
trabajo y esfuerzo que ha de abrir más puertas
a profesionistas, amas de casa y servidoras
públicas.
Es inaceptable que muchos de los habitantes
de San Miguel Tlacamama, no tengan acceso
a servicios básicos dignos como es la salud,
o la atención a las fuentes principales de
ingresos de las familias, como es el desarrollo
agropecuario, invertiremos nuestro esfuerzo
en todo el municipio pero sobre todo en
aquellas comunidades, barrios y familias más
42

marginadas.
Me sostendré en el cumplimiento de mi palabra
trabajando siempre por el bien de nuestro
Municipio.
La cabecera Municipal es San Miguel
Tlacamama, las localidades de mayor
importancia son El Terrero, El Zapote, La
Cañada del Márquez y la Nueva Esperanza,
su actividad principal es la agricultura y la
ganadería. El 28, 29 y 30 de septiembre, es
la feria anual de la población, en la cual se
celebra la eucaristía; así mismo, hay juegos
pirotécnicos, calenda, torneos de fútbol y
basquetbol, jaripeos, exposición ganadera y
bailes por la noche, en honor al santo patrón
de esta población San Miguel Arcángel.
A los ciudadan@s, les pedimos que vigilen
nuestro comportamiento como servidores
públicos, pensemos en las generaciones
venideras, lo merecen ellos y lo merecemos
nosotros, les aseguro, que entre todos podemos
convertir lo imposible en posible.
C.P. Rosalba Domínguez Santiago
Presidenta Municipal Electa de San Miguel
Tlacamama, Oax.
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