La investigación en gestión del riesgo de desastres

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| número 27 | octubre de 2016 El ejercicio del derecho a la comunicación como herramienta de gestión de riesgo Carlos Alberto Peláez Garzón 1 La Ley 1523 de 2012 implicó un cambio en la forma como se atienden las emergencias en Colombia. La normativa buscó pasar de una cultura reactiva a un modelo de gestión donde se incorpore al ciudadano en la responsabilidad de prevenir la ocurrencia de eventos adversos. Para que este nuevo paradigma tenga éxito es necesario modificar la forma en que fluye la información al interior del sistema, dejando de lado el manejo —más que exclusivo, casi excluyente— que se tenía sobre las amenazas que se ciernen sobre el territorio y buscando una construcción en doble vía donde se impartan políticas desde la cumbre, pero se conozca el territorio desde la base. La comunicación como un derecho El derecho humano a la comunicación ha sido reconocido en diversas formas y por múltiples instrumentos internacionales como la Declaración de los Derechos del Hombre y el Ciudadano (1789), la Declaración Universal de los Derechos Humanos (1948) y el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (1966), entre otros. De igual forma, el derecho a la comunicación tiene un ámbito de aplicación y un significado más amplio que el derecho a la información, como lo plantea claramente Alfonso Gumucio Dagron al manifestar que «articula y engloba al conjunto de los otros derechos relativos, como son el acceso a la información, la libertad de opinión, la libertad de expresión, la libertad de difusión (...)» (Dagron, 2012). En el ámbito de la gestión del riesgo este derecho adquiere especial relevancia, ya que brinda a las comunidades herramientas para exigir de las autoridades una oportuna información frente a las posibles 1 Comunicador social – periodista, técnico auxiliar de enfermería; miembro del grupo USAR de la Defensa Civil Colombiana. amenazas a las que se ven expuestas o sobre los comportamientos esperados, en caso de materializarse un evento adverso. Como todo derecho implica un deber es menester corresponder a esa información recibida con acciones que permitan mitigar el riesgo. Este cometido puede lograrse a través de estrategias de organización comunitaria enfocadas al conocimiento del entorno y a la adopción de conductas proactivas frente a la reducción de sus vulnerabilidades, bien sea directamente o gestionando proyectos de intervención por parte de las autoridades competentes. Por lo anterior, toma especial relevancia lo contenido en el artículo 2 de la Ley 1523 de 2012, el cual establece que «por su parte, los habitantes del territorio nacional, corresponsables de la gestión del riesgo, actuarán con precaución, solidaridad, autoprotección, tanto en lo personal como en lo de sus bienes, y acatarán lo dispuesto por las autoridades» (Congreso de la República, 2012). No obstante, podemos afirmar que una falencia que presenta la mencionada ley es el concepto sobre la información, evidenciado en el artículo 3, numeral 15, en el que se define el principio de oportuna información, el cual estipula que «(…) para todos los efectos de esta ley, es obligación de las autoridades del Sistema Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres, mantener debidamente informadas a todas las personas naturales y jurídicas sobre: Posibilidades de riesgo, gestión de desastres, acciones de rehabilitación y construcción así como también sobre las donaciones recibidas, las donaciones administradas y las donaciones entregadas» (Congreso de la República, 2012). Como es posible observar, en definitiva la responsabilidad de informar como un acto unidireccional parte de las autoridades sin buscar respuesta por parte del ciudadano. Por otra parte, dejando de lado los medios de comunicación tradicionales como radio, prensa y televisión, encontramos que el panorama es desalentador. Cortesía de Carlos Alberto Peláez Garzón Carlos Alberto Peláez Garzón es miembro del grupo USAR de la Defensa Civil Colombiana. La brecha digital Las nuevas tecnologías de la comunicación y el avance de las redes sociales son una realidad que ha venido generando cambios en la sociedad. Así, de 17% de hogares conectados a internet en 2010 se pasó a un 44% en junio de 2014, de acuerdo con las proyecciones del Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones de Colombia (Mintic). Ilustración 1. Hogares conectados a internet (Mintic, 2016) La cifra anterior contrasta con el reporte de la industria de la Comisión de Regulación de Comunicaciones (crc) que indica que hay alrededor de un millón setecientas mil conexiones en estrato dos y un millón cuatrocientas en estrato tres (crc, 2015). Esto, frente a 48 millones de habitantes, es una situación cuya circunstancia conlleva a la reflexión, más aún, cuando el estrato uno solo alcanza 443 000 conexiones, sin entrar en detalles sobre el acceso de la población rural o las zonas del país donde difícil- » 53

| número 27 | octubre <strong>de</strong> 2016<br />

El ejercicio <strong><strong>de</strong>l</strong> <strong>de</strong>recho a la comunicación<br />

como herrami<strong>en</strong>ta <strong>de</strong> <strong>gestión</strong> <strong>de</strong> <strong>riesgo</strong><br />

Carlos Alberto Peláez Garzón 1<br />

<strong>La</strong> Ley 1523 <strong>de</strong> 2012 implicó un cambio <strong>en</strong><br />

la forma como se ati<strong>en</strong>d<strong>en</strong> las emerg<strong>en</strong>cias<br />

<strong>en</strong> Colombia. <strong>La</strong> normativa buscó<br />

pasar <strong>de</strong> una cultura reactiva a un mo<strong><strong>de</strong>l</strong>o<br />

<strong>de</strong> <strong>gestión</strong> don<strong>de</strong> se incorpore al ciudadano<br />

<strong>en</strong> la responsabilidad <strong>de</strong> prev<strong>en</strong>ir<br />

la ocurr<strong>en</strong>cia <strong>de</strong> ev<strong>en</strong>tos adversos.<br />

Para que este nuevo paradigma t<strong>en</strong>ga<br />

éxito es necesario modificar la forma<br />

<strong>en</strong> que fluye la información al interior<br />

<strong><strong>de</strong>l</strong> sistema, <strong>de</strong>jando <strong>de</strong> lado el manejo<br />

—más que exclusivo, casi excluy<strong>en</strong>te—<br />

que se t<strong>en</strong>ía sobre las am<strong>en</strong>azas que se<br />

ciern<strong>en</strong> sobre el territorio y buscando<br />

una construcción <strong>en</strong> doble vía don<strong>de</strong> se<br />

impartan políticas <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la cumbre, pero<br />

se conozca el territorio <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la base.<br />

<strong>La</strong> comunicación como un<br />

<strong>de</strong>recho<br />

El <strong>de</strong>recho humano a la comunicación ha<br />

sido reconocido <strong>en</strong> diversas formas y por<br />

múltiples instrum<strong>en</strong>tos internacionales<br />

como la Declaración <strong>de</strong> los Derechos <strong><strong>de</strong>l</strong><br />

Hombre y el Ciudadano (1789), la Declaración<br />

Universal <strong>de</strong> los Derechos Humanos<br />

(1948) y el Pacto Internacional <strong>de</strong> Derechos<br />

Civiles y Políticos (1966), <strong>en</strong>tre otros.<br />

De igual forma, el <strong>de</strong>recho a la comunicación<br />

ti<strong>en</strong>e un ámbito <strong>de</strong> aplicación y<br />

un significado más amplio que el <strong>de</strong>recho<br />

a la información, como lo plantea claram<strong>en</strong>te<br />

Alfonso Gumucio Dagron al manifestar<br />

que «articula y <strong>en</strong>globa al conjunto<br />

<strong>de</strong> los otros <strong>de</strong>rechos relativos, como son<br />

el acceso a la información, la libertad <strong>de</strong><br />

opinión, la libertad <strong>de</strong> expresión, la libertad<br />

<strong>de</strong> difusión (...)» (Dagron, 2012).<br />

En el ámbito <strong>de</strong> la <strong>gestión</strong> <strong><strong>de</strong>l</strong> <strong>riesgo</strong><br />

este <strong>de</strong>recho adquiere especial relevancia,<br />

ya que brinda a las comunida<strong>de</strong>s herrami<strong>en</strong>tas<br />

para exigir <strong>de</strong> las autorida<strong>de</strong>s una<br />

oportuna información fr<strong>en</strong>te a las posibles<br />

1 Comunicador social – periodista, técnico auxiliar <strong>de</strong> <strong>en</strong>fermería;<br />

miembro <strong><strong>de</strong>l</strong> grupo USAR <strong>de</strong> la Def<strong>en</strong>sa Civil Colombiana.<br />

am<strong>en</strong>azas a las que se v<strong>en</strong> expuestas o sobre<br />

los comportami<strong>en</strong>tos esperados, <strong>en</strong><br />

caso <strong>de</strong> materializarse un ev<strong>en</strong>to adverso.<br />

Como todo <strong>de</strong>recho implica un <strong>de</strong>ber<br />

es m<strong>en</strong>ester correspon<strong>de</strong>r a esa información<br />

recibida con acciones que permitan<br />

mitigar el <strong>riesgo</strong>. Este cometido pue<strong>de</strong> lograrse<br />

a través <strong>de</strong> estrategias <strong>de</strong> organización<br />

comunitaria <strong>en</strong>focadas al conocimi<strong>en</strong>to<br />

<strong><strong>de</strong>l</strong> <strong>en</strong>torno y a la adopción <strong>de</strong> conductas<br />

proactivas fr<strong>en</strong>te a la reducción <strong>de</strong> sus vulnerabilida<strong>de</strong>s,<br />

bi<strong>en</strong> sea directam<strong>en</strong>te o gestionando<br />

proyectos <strong>de</strong> interv<strong>en</strong>ción por<br />

parte <strong>de</strong> las autorida<strong>de</strong>s compet<strong>en</strong>tes.<br />

Por lo anterior, toma especial relevancia<br />

lo cont<strong>en</strong>ido <strong>en</strong> el artículo 2 <strong>de</strong><br />

la Ley 1523 <strong>de</strong> 2012, el cual establece que<br />

«por su parte, los habitantes <strong><strong>de</strong>l</strong> territorio<br />

nacional, corresponsables <strong>de</strong> la <strong>gestión</strong><br />

<strong><strong>de</strong>l</strong> <strong>riesgo</strong>, actuarán con precaución,<br />

solidaridad, autoprotección, tanto <strong>en</strong> lo<br />

personal como <strong>en</strong> lo <strong>de</strong> sus bi<strong>en</strong>es, y acatarán<br />

lo dispuesto por las autorida<strong>de</strong>s»<br />

(Congreso <strong>de</strong> la República, 2012).<br />

No obstante, po<strong>de</strong>mos afirmar que<br />

una fal<strong>en</strong>cia que pres<strong>en</strong>ta la m<strong>en</strong>cionada<br />

ley es el concepto sobre la información,<br />

evid<strong>en</strong>ciado <strong>en</strong> el artículo 3, numeral 15,<br />

<strong>en</strong> el que se <strong>de</strong>fine el principio <strong>de</strong> oportuna<br />

información, el cual estipula que «(…)<br />

para todos los efectos <strong>de</strong> esta ley, es obligación<br />

<strong>de</strong> las autorida<strong>de</strong>s <strong><strong>de</strong>l</strong> Sistema<br />

Nacional <strong>de</strong> Gestión <strong><strong>de</strong>l</strong> Riesgo <strong>de</strong> Desastres,<br />

mant<strong>en</strong>er <strong>de</strong>bidam<strong>en</strong>te informadas<br />

a todas las personas naturales y jurídicas<br />

sobre: Posibilida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> <strong>riesgo</strong>, <strong>gestión</strong> <strong>de</strong><br />

<strong>de</strong>sastres, acciones <strong>de</strong> rehabilitación y<br />

construcción así como también sobre las<br />

donaciones recibidas, las donaciones administradas<br />

y las donaciones <strong>en</strong>tregadas»<br />

(Congreso <strong>de</strong> la República, 2012). Como<br />

es posible observar, <strong>en</strong> <strong>de</strong>finitiva la responsabilidad<br />

<strong>de</strong> informar como un acto<br />

unidireccional parte <strong>de</strong> las autorida<strong>de</strong>s sin<br />

buscar respuesta por parte <strong><strong>de</strong>l</strong> ciudadano.<br />

Por otra parte, <strong>de</strong>jando <strong>de</strong> lado los<br />

medios <strong>de</strong> comunicación tradicionales<br />

como radio, pr<strong>en</strong>sa y televisión, <strong>en</strong>contramos<br />

que el panorama es <strong>de</strong>sal<strong>en</strong>tador.<br />

Cortesía <strong>de</strong> Carlos Alberto Peláez Garzón<br />

Carlos Alberto Peláez Garzón es miembro <strong><strong>de</strong>l</strong> grupo<br />

USAR <strong>de</strong> la Def<strong>en</strong>sa Civil Colombiana.<br />

<strong>La</strong> brecha digital<br />

<strong>La</strong>s nuevas tecnologías <strong>de</strong> la comunicación<br />

y el avance <strong>de</strong> las re<strong>de</strong>s sociales son<br />

una realidad que ha v<strong>en</strong>ido g<strong>en</strong>erando<br />

cambios <strong>en</strong> la sociedad. Así, <strong>de</strong> 17% <strong>de</strong><br />

hogares conectados a internet <strong>en</strong> 2010 se<br />

pasó a un 44% <strong>en</strong> junio <strong>de</strong> 2014, <strong>de</strong> acuerdo<br />

con las proyecciones <strong><strong>de</strong>l</strong> Ministerio <strong>de</strong><br />

Tecnologías <strong>de</strong> la Información y las Comunicaciones<br />

<strong>de</strong> Colombia (Mintic).<br />

Ilustración 1. Hogares conectados<br />

a internet (Mintic, 2016)<br />

<strong>La</strong> cifra anterior contrasta con el reporte<br />

<strong>de</strong> la industria <strong>de</strong> la Comisión <strong>de</strong><br />

Regulación <strong>de</strong> Comunicaciones (crc)<br />

que indica que hay alre<strong>de</strong>dor <strong>de</strong> un millón<br />

seteci<strong>en</strong>tas mil conexiones <strong>en</strong> estrato<br />

dos y un millón cuatroci<strong>en</strong>tas <strong>en</strong><br />

estrato tres (crc, 2015). Esto, fr<strong>en</strong>te a 48<br />

millones <strong>de</strong> habitantes, es una situación<br />

cuya circunstancia conlleva a la reflexión,<br />

más aún, cuando el estrato uno solo alcanza<br />

443 000 conexiones, sin <strong>en</strong>trar <strong>en</strong><br />

<strong>de</strong>talles sobre el acceso <strong>de</strong> la población<br />

rural o las zonas <strong><strong>de</strong>l</strong> país don<strong>de</strong> difícil-<br />

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