29.11.2016 Views

Excodra XXXIII: La soledad

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

en la ciudad del silencio,<br />

en la ciudad de la luz.<br />

Ahí,<br />

en ese esclavo punto,<br />

el delito que nunca cometo me persigue,<br />

pues yo soy el asesino,<br />

yo la víctima,<br />

yo la condena,<br />

yo tantas en el mismo instante<br />

y ella ocupando mis huellas,<br />

haciéndome creer que todo se limita al saber caminar.<br />

Pero no.<br />

No es sólo contemplar y no ver.<br />

¿Así la vida?<br />

¿En su falsa calma latente?<br />

¿Así? No...<br />

Ahora,<br />

en la hora del grito de las bestias,<br />

cuando mi garganta en sequía espera que la tormenta caiga,<br />

que el agua roja caiga,<br />

que el agua helada caiga,<br />

que el agua que nos sepultará caiga,<br />

ahora,<br />

es cuando mejor la reconozco,<br />

en su yo más frenético.<br />

¡Miradla, es ella!<br />

Cayendo lenta,<br />

cayendo ingrávida,<br />

cayendo sumisa,<br />

cayendo como sólo ella sabe caer sin saciar apenas mi sed.<br />

Ella.<br />

Maldita ella que<br />

frente a mil arcos del triunfo,<br />

yo tropiezo,<br />

<strong>Excodra</strong> <strong>XXXIII</strong> 30 <strong>La</strong> <strong>soledad</strong>

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!