Excodra XXXIII: La soledad

El escritor que escribe desde el lenguaje rechaza el realismo documental,
descarta los usos del testimonio y se aleja de los protocolos afines
a la novela histórica. Para hacer memoria con la ficción, para cartografiar
el terreno tortuoso de la identidad derruida, prefiere las alegorías
fracturadas, las imágenes poéticas, las discontinuidades abruptas,
los climas oníricos. Por eso las novelas que conforman La balada del
desterrado están provistas de un espesor simbólico que aglutina múltiples
capas de sentido que expanden las significaciones literales (ya desde
los títulos mismos) y nos exigen a leer, siempre, algo (de) más.
Así, en De cómo llegó la nieve, la “nieve” es la angustia provocada
por el terror que va invadiendo la vida cotidiana de los personajes y se
apodera, poco a poco e inexorablemente, de sus cuerpos, de sus recuerdos,
de sus sueños, de sus palabras. En Los días de la eternidad, la “eternidad”
es el tiempo estático, la pura sincronía del destierro con su carga
infinita de culpas y alucinaciones, de miedos y delirios que impide la
sucesión y anula cualquier posibilidad de cambio. En Más allá de los
días, el “más allá” recupera un sentido escatológico y remite a las narrativas
míticas, religiosas y literarias que especulan y metaforizan lo que
viene después de la muerte, la vida de ultratumba.
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Más allá de los días, la novela con que culmina la trilogía, puede
leerse en contigüidad con De cómo llegó la nieve. Como en aquélla, el
personaje principal es Manuel T., el poeta. Este personaje vio la luz en
“El despido”, un cuento de El día en que el pueblo reventó de angustia 7 ;
entonces era un sindicalista joven que se incorporaba al ejército popular
liderado el Comandante Ordóñez y se convertía en el protagonista
clave de la segunda parte del libro. La gesta revolucionaria fracasa, el
poeta depone las armas y abandona su patria. Al igual que la literatura
de Tello, Manuel T. debe afrontar el destierro; buscará la palabra sustantiva
y hará de la memoria un modo de resistencia contra la fuerza
7 El libro se edita por primera vez en 1973 (Talleres Gráficos Macció Hnos., Río Cuarto). Está dividido en
dos partes: “Alienación” y “Angustia”. Sus cuentos se reproducen, corregidos, en El interior de la noche
(Tusquets, Barcelona, 1989). El mal de Q. Cuentos reunidos 1968 – 2009 (Candaya, Barcelona, 2009) los
incluye también. En 2014, UniRío Editora y Cartografías reeditan El día en que el pueblo reventó de
angustia con un par de estudios previos y un apéndice documental.
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