30.08.2016 Views

America en la Profecia por Elena White [Version Moderna]

Los orígenes peculiares de Estados Unidos y su hegemonía en los asuntos mundiales se quedan indiscutibles. Como superpotencia nacida de Europa, la historia se ha resplandecido por todas partes. Pronosticada desde la antigüedad, una miríada de las represiones, las revoluciones y las reformas le inspiró al primer grupo de peregrinos a establecerse en una nueva tierra prometida de la libertad. Este libro permite al lector a comprender el destino único de América y el papel dominante, mientras asediada por maquinaciones políticas y espirituales. Claramente, esta lectura revelará las manipulaciones, los movimientos y las intervenciones que han moldeado a América, presagiando su cooperación para socavar los mismos valores, más queridos anteriormente. Al mismo tiempo, disemina rayos de esperanza y confianza a medida que se estalla un giro de acontecimientos.

Los orígenes peculiares de Estados Unidos y su hegemonía en los asuntos mundiales se quedan indiscutibles. Como superpotencia nacida de Europa, la historia se ha resplandecido por todas partes. Pronosticada desde la antigüedad, una miríada de las represiones, las revoluciones y las reformas le inspiró al primer grupo de peregrinos a establecerse en una nueva tierra prometida de la libertad. Este libro permite al lector a comprender el destino único de América y el papel dominante, mientras asediada por maquinaciones políticas y espirituales. Claramente, esta lectura revelará las manipulaciones, los movimientos y las intervenciones que han moldeado a América, presagiando su cooperación para socavar los mismos valores, más queridos anteriormente. Al mismo tiempo, disemina rayos de esperanza y confianza a medida que se estalla un giro de acontecimientos.

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

oca que no podía ser barrida <strong>por</strong> <strong>la</strong>s o<strong>la</strong>s de <strong>la</strong> contrariedad. “Cabecearon todas, y se durmieron”; una<br />

c<strong>la</strong>se de cristianos se sumió <strong>en</strong> <strong>la</strong> indifer<strong>en</strong>cia y abandonó su fe, <strong>la</strong> otra siguió esperando paci<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te<br />

hasta que se le diese mayor luz. Sin embargo, <strong>en</strong> <strong>la</strong> noche de <strong>la</strong> prueba esta segunda categoría pareció<br />

perder, hasta cierto punto, su ardor y devoción. Los tibios y superficiales no podían seguir apoyándose<br />

<strong>en</strong> <strong>la</strong> fe de sus hermanos. Cada cual debía sost<strong>en</strong>erse <strong>por</strong> sí mismo o caer.<br />

Por aquel <strong>en</strong>tonces, despuntó el fanatismo. Algunos que habían profesado creer férvidam<strong>en</strong>te<br />

<strong>en</strong> el m<strong>en</strong>saje rechazaron <strong>la</strong> Pa<strong>la</strong>bra de Dios como guía infalible, y pret<strong>en</strong>di<strong>en</strong>do ser dirigidos <strong>por</strong> el<br />

Espíritu, se abandonaron a sus propios s<strong>en</strong>timi<strong>en</strong>tos, impresiones e imaginación. Había qui<strong>en</strong>es<br />

manifestaban un ardor ciego y fanático, y c<strong>en</strong>suraban a todos los que no querían aprobar su conducta.<br />

Sus ideas y sus actos inspirados <strong>por</strong> el fanatismo no <strong>en</strong>contraban simpatía <strong>en</strong>tre <strong>la</strong> gran mayoría de los<br />

adv<strong>en</strong>tistas; no obstante sirvieron para atraer oprobio sobre <strong>la</strong> causa de <strong>la</strong> verdad.<br />

Satanás estaba tratando de oponerse <strong>por</strong> este medio a <strong>la</strong> obra de Dios y destruir<strong>la</strong>. El<br />

movimi<strong>en</strong>to adv<strong>en</strong>tista había conmovido grandem<strong>en</strong>te a <strong>la</strong> g<strong>en</strong>te, se habían convertido miles de<br />

pecadores, y hubo hombres sinceros que se dedicaron a proc<strong>la</strong>mar <strong>la</strong> verdad, hasta <strong>en</strong> el tiempo de <strong>la</strong><br />

tardanza. El príncipe del mal estaba perdi<strong>en</strong>do sus súbditos, y para echar oprobio sobre <strong>la</strong> causa de<br />

Dios, trató de <strong>en</strong>gañar a algunos de los que profesaban <strong>la</strong> fe, y de trocarlos <strong>en</strong> extremistas. Luego sus<br />

ag<strong>en</strong>tes estaban listos para aprovechar cualquier error, cualquier falta, cualquier acto indecoroso, y<br />

pres<strong>en</strong>tarlo al pueblo <strong>en</strong> <strong>la</strong> forma más exagerada, a fin de hacer odiosos a los adv<strong>en</strong>tistas y <strong>la</strong> fe que<br />

profesaban. Así, cuanto mayor era el número de los que lograra incluir <strong>en</strong>tre los que profesaban creer<br />

<strong>en</strong> el segundo adv<strong>en</strong>imi<strong>en</strong>to mi<strong>en</strong>tras su poder dirigía sus corazones, tanto más fácil le sería seña<strong>la</strong>rlos<br />

a <strong>la</strong> at<strong>en</strong>ción del mundo como repres<strong>en</strong>tantes de todo el cuerpo de crey<strong>en</strong>tes.<br />

Satanás es “el acusador de nuestros hermanos”, y es su espíritu el que inspira a los hombres a<br />

acechar los errores y defectos del pueblo de Dios, y a darles publicidad, mi<strong>en</strong>tras que no se hace<br />

m<strong>en</strong>ción alguna de <strong>la</strong>s bu<strong>en</strong>as acciones de este mismo pueblo. Siempre está activo cuando Dios obra<br />

para salvar <strong>la</strong>s almas. Cuando los hijos de Dios acud<strong>en</strong> a pres<strong>en</strong>tarse ante el Señor, Satanás vi<strong>en</strong>e<br />

también <strong>en</strong>tre ellos. En cada despertami<strong>en</strong>to religioso está listo para introducir a aquellos cuyos<br />

corazones no están santificados y cuyos espíritus no están bi<strong>en</strong> equilibrados. Cuando estos han<br />

343

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!