30.08.2016 Views

America en la Profecia por Elena White [Version Moderna]

Los orígenes peculiares de Estados Unidos y su hegemonía en los asuntos mundiales se quedan indiscutibles. Como superpotencia nacida de Europa, la historia se ha resplandecido por todas partes. Pronosticada desde la antigüedad, una miríada de las represiones, las revoluciones y las reformas le inspiró al primer grupo de peregrinos a establecerse en una nueva tierra prometida de la libertad. Este libro permite al lector a comprender el destino único de América y el papel dominante, mientras asediada por maquinaciones políticas y espirituales. Claramente, esta lectura revelará las manipulaciones, los movimientos y las intervenciones que han moldeado a América, presagiando su cooperación para socavar los mismos valores, más queridos anteriormente. Al mismo tiempo, disemina rayos de esperanza y confianza a medida que se estalla un giro de acontecimientos.

Los orígenes peculiares de Estados Unidos y su hegemonía en los asuntos mundiales se quedan indiscutibles. Como superpotencia nacida de Europa, la historia se ha resplandecido por todas partes. Pronosticada desde la antigüedad, una miríada de las represiones, las revoluciones y las reformas le inspiró al primer grupo de peregrinos a establecerse en una nueva tierra prometida de la libertad. Este libro permite al lector a comprender el destino único de América y el papel dominante, mientras asediada por maquinaciones políticas y espirituales. Claramente, esta lectura revelará las manipulaciones, los movimientos y las intervenciones que han moldeado a América, presagiando su cooperación para socavar los mismos valores, más queridos anteriormente. Al mismo tiempo, disemina rayos de esperanza y confianza a medida que se estalla un giro de acontecimientos.

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

El espíritu de conformidad con el mundo está invadi<strong>en</strong>do <strong>la</strong>s iglesias <strong>por</strong> toda <strong>la</strong> cristiandad.<br />

Robert Atkins, <strong>en</strong> un sermón predicado <strong>en</strong> Londres, pinta un cuadro sombrío del decaimi<strong>en</strong>to espiritual<br />

que predomina <strong>en</strong> Ing<strong>la</strong>terra: “Los hombres verdaderam<strong>en</strong>te justos están desapareci<strong>en</strong>do de <strong>la</strong> tierra,<br />

sin que a nadie se le im<strong>por</strong>te algo. Los que hoy profesan religiosidad, <strong>en</strong> todas <strong>la</strong>s iglesias, aman al<br />

mundo, se conforman con él, gustan de <strong>la</strong>s comodidades terr<strong>en</strong>ales y aspiran a los honores. Están<br />

l<strong>la</strong>mados a sufrir con Cristo, pero retroced<strong>en</strong> ante el simple oprobio [...]. ¡Apostasía, apostasía,<br />

apostasía! es lo que está grabado <strong>en</strong> el frontis mismo de cada iglesia; y si lo supies<strong>en</strong> o sinties<strong>en</strong>, habría<br />

esperanza; pero ¡ay! lo que se oye decir, es: Rico soy, y estoy ll<strong>en</strong>o de bi<strong>en</strong>es, y nada me falta” (Second<br />

Adv<strong>en</strong>t Library, folleto no 39).<br />

El gran pecado de que se acusa a Babilonia es que ha hecho que “todas <strong>la</strong>s naciones beban del<br />

vino de <strong>la</strong> ira de su fornicación”. Esta copa embriagadora que ofrece al mundo repres<strong>en</strong>ta <strong>la</strong>s falsas<br />

doctrinas que ha aceptado como resultado de su unión ilícita con los magnates de <strong>la</strong> tierra. La amistad<br />

con el mundo corrompe su fe, y a su vez Babilonia ejerce influ<strong>en</strong>cia corruptora sobre el mundo<br />

<strong>en</strong>señando doctrinas que están <strong>en</strong> pugna con <strong>la</strong>s dec<strong>la</strong>raciones más c<strong>la</strong>ras de <strong>la</strong> Sagrada Escritura.<br />

Roma le negó <strong>la</strong> Biblia al pueblo y exigió que <strong>en</strong> su lugar todos aceptas<strong>en</strong> sus propias<br />

<strong>en</strong>señanzas. La obra de <strong>la</strong> Reforma consistió <strong>en</strong> devolver a los hombres <strong>la</strong> Pa<strong>la</strong>bra de Dios; pero ¿ no<br />

se ve acaso que <strong>en</strong> <strong>la</strong>s iglesias de hoy lo que se <strong>en</strong>seña a los hombres es a fundar su fe <strong>en</strong> el credo y <strong>en</strong><br />

<strong>la</strong>s doctrinas de su iglesia antes que <strong>en</strong> <strong>la</strong>s Sagradas Escrituras? Hab<strong>la</strong>ndo de <strong>la</strong>s iglesias protestantes,<br />

Carlos Beecher dice: “Retroced<strong>en</strong> ante cualquier pa<strong>la</strong>bra severa que se diga contra sus credos con <strong>la</strong><br />

misma s<strong>en</strong>sibilidad con que los santos padres se habrían estremecido ante una pa<strong>la</strong>bra dura pronunciada<br />

contra <strong>la</strong> v<strong>en</strong>eración creci<strong>en</strong>te que estaban fom<strong>en</strong>tando <strong>por</strong> los santos y los mártires [...]. Las<br />

d<strong>en</strong>ominaciones evangélicas protestantes se han atado mutuam<strong>en</strong>te <strong>la</strong>s manos, de tal modo que nadie<br />

puede hacerse predicador <strong>en</strong>tre el<strong>la</strong>s sin haber aceptado primero <strong>la</strong> autoridad de algún libro aparte de<br />

<strong>la</strong> Biblia [...]. No hay nada de imaginario <strong>en</strong> <strong>la</strong> aseveración de que el poder del credo está ahora<br />

empezando a proscribir <strong>la</strong> Biblia tan ciertam<strong>en</strong>te como lo hizo Roma, aunque de un modo más sutil”<br />

(sermón sobre <strong>la</strong> Biblia como credo sufici<strong>en</strong>te, predicado <strong>en</strong> Fort Wayne, Indiana, el 22 de febrero de<br />

1846).<br />

337

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!