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PLAN DE VIDA INCHIDJI CHIBIDONDOMAIN KI BACSHUABA SABA ASHIQUE AGBARIABA
correctamente y hacer de esto un proceso continuo, permanente, articulado y coordinado que permita pasar
de generación en generación a los nuevos líderes, que nuestro pueblo ancestral, defendió con gallardía.
Se trata de lograr durante este capítulo y en la implementación de este Plan (objetivo prioritario) una reexión que
debe nacer de nosotros mismos como indígenas y que debe desencadenarse en actuaciones propositivas,
constructivas, mancomunadas, acordadas que nos permitan el fortalecimiento como pueblo indígena, la defensa
activa de nuestros derechos ancestrales y constitucionales, la búsqueda del desarrollo de todos los aspectos que
hemos identicado como necesarios para un buen vivir desde nuestra cosmovisión y percepción cultural.
A nivel nacional se puede armar que lo primero es esbozar la importancia de los Planes de Vida y es la
Constitución Política de Colombia de 1991 que en su Artículo séptimo reconoce la diversidad étnica y cultural
de la nación colombiana; en su artículo 286 establece que los territorios indígenas son entidades
territoriales; así mismo el Artículo 330 se reere al gobierno indígena y la tarea de diseñar las políticas,
planes y programas de desarrollo económico y social dentro de sus territorios, en armonía con el Plan
Nacional de Desarrollo y la inversión de los recursos; los Artículos 339 y 344 establecen los principios
relacionados con la elaboración y articulación de los planes de desarrollo nacional y territoriales y podemos
decir que a nivel constitucional, este es su fundamento legal, sin embargo, existe normatividad que se
desarrolla o desprende de la misma, la toma en consideración, o se apoya para legislar, regular y
materializar la misma como la Ley 21 de 1991, la cual a su vez se articula con el Convenio 169 de la OIT, ya
desde un escenario global, que en su Artículo séptimo numeral primero, establece que los Pueblos Indígenas
tienen el derecho de decidir sus propias prioridades en el proceso de desarrollo a denir; el numeral
segundo, se reere al derecho a la participación y cooperación de los Pueblos Indígenas en los planes de
desarrollo para el mejoramiento de sus condiciones de vida.
Internacionalmente, la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas de
2007 en los artículos 3, 20 y 32 reiteran las formas de desarrollo propio de los Pueblos Indígenas en el
ejercicio del derecho a la libre determinación como pueblos; así mismo la Ley 152 de 1994, Orgánica del Plan
de Desarrollo, que en el Artículo 31 establece que "las autoridades de las entidades territoriales indígenas
denirán los alcances y los procedimientos de elaboración, aprobación, ejecución, evaluación y seguimiento
de los planes, de acuerdo con sus usos y costumbres, atendiendo los principios generales de esta Ley y haciendo
compatibles los tiempos de presentación y la articulación con los procesos presupuestales, de tal manera que se
logre la coordinación de la planeación con las autoridades de las demás entidades territoriales y con la nación",
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