WEB Manual de Vida BARI

PLAN DE VIDA INCHIDJI CHIBIDONDOMAIN KI BACSHUABA SABA ASHIQUE AGBARIABA
cumpliendo con lo mandado, por lo que fue castigado, convirtiéndolo en un marrano que siempre iba a estar
revolcándose. Bisou fue castigado porque su pereza afectaba a toda la comunidad, de ahí aprendemos dos
principios fundamentales para nosotros: la solidaridad y el compromiso.
Nuestros ancestros participan en la etapa de siembra de Mashu (yuca), Brogba (plátano), Shanshi
(ahuyama), Bachiña (patilla), Badchicba (caña), Cocua (aguacate), Nancadu (piña), Awa (ñame), Be (batata)
y Sooso (Ocumo) los cuales serían las fuentes de alimentación de nuestra generación Barí. Dejando claro que
todo lo que el Barí necesita para alimentarse lo obtenía por su propia mano y era todo aquello lo que Ishta nos
brindaba, aunque el Barí es por naturaleza solidario por lo que también revisa que en la comunidad no le falte
alimentación a nadie, incluyendo enfermos, huérfanos, ancianos y viudas.
La economía de la abundancia en el Barí: tener la destreza, agilidad y fortaleza para recolectar, cazar y
pescar lo necesario, para permanecer en familia sabiendo que la base principal es Ishta, la que nos brinda
variedades de alimentos que nosotros sólo obtenemos lo que necesitamos para sustentar a nuestras familias
y así racionar estos alimentos para que nunca desaparezcan, entre los que podemos mencionar los que
aparecen en la Tabla No. 15.
Como se puede ver, nuestra base económica para el sustento es de una amplia variedad, esto genera que
nuestros ancestros no necesitan de dinero ni hacer trueques para el sustento de la familia, todo lo brindaba
nuestro Ishta (territorio), y es porque Sabaseba desde los inicios siempre se preocupó por la alimentación del
Barí. Pero hoy con los cambios de la economía occidental y la invasión a nuestros territorios ha tenido por
consecuencia que la base alimentaria del Barí se vea afectada hasta el punto en que debemos tener dinero
para poder comer, aunque la mayoría de las especies de las cuales nos alimentamos tradicionalmente aún
existen, en algunos casos ha disminuido evidentemente su cantidad, en otros casos han desaparecido en
algunas zonas, esto nos hizo reexionar y decidir disminuir nuestra fuente tradicional de alimentación con el
n de proteger y permitir que subsistan; en los últimos años con el aumento de la colonización y la llegada de
los cultivos de coca sentimos que todo el territorio está en un riesgo inminente, del cual todos, no solo
nosotros los Barí, debemos actuar para generar una política de saneamiento territorial que permita la
recuperación de la ora y la fauna, por eso desde el principio de este libro hemos exigido la declaración del
Catatumbo como el pulmón ambiental del oriente colombiano.
Es así que nos hemos visto obligados a adquirir nuevas formas de alimentación no tradicionales, que en la
mayoría de los casos no son adecuadas y están provocando una mal nutrición y nos están volviendo débiles y
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