Fugas8

FUGAS
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08 STOMPING HUE
16 VIVIENDO EN UN MONDO BIZARRO
22 EUREKA
30 CONTRASTES PARALELOS
36 06 WANDERER
CUT PASTE
48 14 INTERMEDIO
CON SABOR A TRIPLETA
52 22 CULT EMANUEL AWAKENING TORRES
62 26 MAÑANAS NOWHERE GIRL DE VERANO
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GABRIEL RUBIÑÁN EDITOR Y CREADOR
XAVIER MALDONADO EDITOR
COMPENDIOFUGAS.COM
FB & IG: COMPENDIO FUGAS

“Tránsito”.
Curiosamente ese fue nuestro pie forzado. Al abrir la revista digital, se darán
cuenta de que no es nuestra edición más larga. Incluso, los planes para superar la
edición anterior, en cuanto a extensión, no se cumplieron. He ahí una de varias lecciones
que aprendimos. En el camino, las metas cambian.
Encontrarán entre las páginas un editorial de calzado (porque nada dice
“tránsito” como hablar de zapatos), un editorial explícitamente titulado “Entremedio”,
una entrevista a Emanuel Torres, un artista en mudanza de un espacio a otro, y
un editorial titulado Nowhere Girl, con una mirada más juguetona sobre el desplazamiento.
Tienen en sus dispositivos digitales una edición que casi no se dá, una
edición más corta pero no con menos corazón. Posiblemente esta sea la lección
más importante de todas. Perseverar. Quizás es un incentivo para todos los que
somos parte de este compendio, un respiro antes de atacar de nuevo, de crear, de
cuestionar y de imaginar. Para volver a transitar.
A todos, nos vemos en la próxima,
GABRIEL RUBIÑÁN
EDITOR Y CREADOR
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FOTOGRAFÍA GABRIEL RUBIÑÁN
cut paste
AND
STYLING FRANCHESKA NATALIA & XAVIER MALDONADO
ZAPATOS Y ACCESORIOS OLIVIA BOUTIQUE
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AQUAZZURA7

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3.1 PHILLIP LIM

SOPHIA WEBSTER9

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3.1 PHILLIP LIM11

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SOPHIA WEBSTER

AQUAZZURA
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FOTOGRAFÍA GABRIEL RUBIÑÁN
ASIST. XAVIER MALDONADO
MODELO CHRISTIAN TRINIDAD
MODA JOSÉ RAÚL

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DE LOBOS,
TRAZOS
Y AUTORRETRATOS
POR: GABRIEL RUBIÑÁN
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Nos encontramos en Arrope una tarde
cualquiera, taza en mano. De frente, Emanuel
Torres, flaco, alto y elocuente. Casi no hay que
preguntarle mucho, él habla por si solo. Nos
sentamos en la esquina del cuarto de estudios,
en donde tres muchachas llevan una conversación
intensa y a viva voz. Acá intentamos
hablar nosotros. Pronto, el bullicio es lo de menos
y el recuento ameno de las aventuras de
este artista plástico graduado de la Universidad
de Puerto Rico toma completa presencia.
Enfocado en la música y la escritura, y
en un intento de combinar pasiones, se propuso
estudiar teatro. Allá la idea idónea se encontró
con el primer obstáculo: el sentirse vacío. Para
apaciguarlo, combinó con estudios en filosofía,
por aquello de inyectarle contenido a su trabajo.
Un libro de arte latinoamericano le propuso la
duda, entre pincel y superficie, de lo fructífero
que sería pintar formalmente. Se lanzó a encontrar
la respuesta. Ese año lo dedicó enteramente a pintar
y todavía le queda la incógnita de cómo rayos
logró culminar el bachillerato. “El abanico de posibilidades
del arte es bien difícil de aprender en la academia.
Sí, puedes pulirlo, pero esencialmente lo que
estás buscando dentro de ti, ese revoltillo de cosas
que tienes adentro, de la única manera en que lo
vas a entender es haciendo, y viviendo.” Allá se fue
a vivirlo y, por ende, aquí empieza su historia.
2009: primera exposición. Ahí arranca la experimentación
formal y la pintura oficialmente se
instaura como agente catalítico para sus ideas. De
este punto en adelante, no podría escapar. Allá, en
el recién inaugurado Centro Cultural Miguel Meléndez
Muñoz de Cayey, expuso “La Barriga de Calandrino”,
una mezcla de pinturas, instalaciones y
video arte con la mira puesta en el peligroso tránsito
marítimo y la arriesgada búsqueda del porvenir

de balseros, yoleros y otros soñadores acuáticos.
La exposición, trabajada conjunto a la Universidad
de Puerto Rico, Recinto de Cayey, tuvo su
momento de sorpresa: la financiación por parte
del Instituto de Cultura de Puerto Rico. “Ahí fue
que entendí que algo estaba haciendo bien”, me
cuenta. “La respuesta generó un dialogo interesante
que no había podido lograr con el teatro o
la escritura. Con el arte plástico, la imagen es inmediata
y la reacción es inmediata también.”
El trabajar con materiales de fácil acceso
no debe ser un cuento extraño para cualquier artista,
de cualquier medio, que lleva en un bolsillo
las ganas y en el otro las limitaciones económicas
de los tiempos. Para Emanuel, la historia no
es para nada distinta.
La primera exposición
contó con pinturas sobre
camisetas, para luego
crear sobre cartón,
periódico y material encontrado.
“La dieta diaria
era café, para quitar
el hambre, y atún. Así
me sobraba para comprar
materiales.” Y para
el jangueo, debo añadir,
por aquello de ser completamente honestos.
2010: “Las Gloriosas Fantasías Revolucionarias”.
Ya con un cuerpo de trabajo mayor,
se lanza a su segunda expo, una más cargada
de críticas y pinceladas. De inspiración: la “Ley
7”, la huelga de la Universidad de Puerto Rico y el
cuestionamiento de las estructuras gobernantes.
El resultado: una critica directa a las generaciones
pasadas, de izquierda y derecha y su mundo
utópico de la revolución. “Pensé, “esta gente
tiene una imagen infantil de la revolución y de
los personajes revolucionarios.” Pues creé estos
personajes como grandes dioses, con ropajes al
estilo de la Revolución Francesa y otras batallas
históricas. Pero, en vez de tener espadas, tenían
machetitos. Es la historia de Excalibur, pero con
un machete en la piedra.” La pincelada continuó
su discurso, coqueteando con las maneras infantiles
de colorear y trazar. Su pincel danzando
con la realidad al son de lo onírico. “Era una
cuestión épica y fantasiosa. Todos sabemos que
la democracia no se hace en la urnas, no se hace
citando a grandes próceres, es una práctica cotidiana.”
Esa mirada a la cotidianidad como elemento
concreto de la cultura se mantiene en
su maletín de trabajo, tanto como herramienta,
como de inspiración. Con ambos pies ya metidos
en el “mundo de las artes plásticas” y salpicado
“...ESE REVOLTILLO DE
COSAS QUE TIENES ADENTRO,
DE LA ÚNICA MANERA EN QUE
LO VAS A ENTENDER ES
HACIENDO, Y VIVIENDO.”
de sus “sinsabores y amarguras extrañas”, la
marea sigue cambiando. Comienzan a venderse
sus obras y continúan las exposiciones. Sigue
creando. “Para mi, la división del proceso de creación
y de vivencia cotidiana no están separadas.
Estoy dibujando todo el tiempo, generando ideas
todo el tiempo. Es un acto de rebeldía, considero,
el mantenerme dentro de un marco de estructuras
más clásicas de creación como la pintura,
que es bidimensional, cuando ahora se trabajan
mucho las instalaciones y lo interactivo físicamente.”
Pero ese acto de rebeldía sigue acompañado
por una mirada humilde e interesada en
las reacciones orgánicas y sinceras. “Gente que
no tiene preparación en las artes me ha dado las
lecturas más interesantes de las obras.”
En su colección “La Cabeza Descuidada”,
expuesta en la Galería 209 del Departamento de
Bellas Artes de la UPRRP y curada por el fallecido
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Angel Darío Carrero, trabajó el monotipo (grabados únicos)
y la identidad. Sobre una plancha de plexiglass, trabajó sobre
su reflejo. “Usé la cabeza como elemento ejemplificador,
porque en el misticismo y en la antigüedad, se utilizaba la
cabeza como resumen del cuerpo entero. Por ejemplo, las
orejas como el brazo, la boca como el estómago y los ojos
como el alma.” Sobre el descuido cotidiano de la cabeza,
generó piezas acompañadas de frases aleatorias que escuchaba
en el vaivén diario del taller de trabajo, a lo que se
refiere como poesía de lo cotidiano. “Era una colaboración
directa y complementaria hacia lo cotidiano, y no una mirada
elitista hacia la poesía que se genera desde la persona
más culta hasta la persona menos “culta”.” La Cabeza terminó
viajando a California, gracias al curador boricua Raúl
Vásquez Concepción, pero dejando a su creador en casa por
no tener para el pasaje. Pero no sería la única ocasión para
un viaje solitario y representativo. Unos grabados en punta
seca llegaron hasta Japón, acompañados por otras piezas
de grabadores boricuas seleccionadas como parte de una
convocatoria del Yokosuka Peace Art Exhibition. Entre ellas,
unas piezas de su mentor, el mundialmente reconocido
y premiado Martín García, a quien considera fundamental
en su vida y preparación.
Se detiene la conversación a lo que toma otro sorbo
de café. Ya está frío. Se nos han pasado los minutos entre
viaje y viaje y no nos hemos dado cuenta. Eso pasa con
las buenas historias, aunque esta está en pleno transcurso.
Las tres chicas han bajado la voz para escuchar también.
Acaparamos el saloncito de estudios, sin necesariamente
quererlo.
Emanuel pasa a dar clases de arte en
CREARTE, organización sin fines de lucro, con la población
de la Laguna San José. “En Puerto Rico, en mi
experiencia, el arte es una burbuja elitista. Si se acerca
al mundo, “al bajo mundo” y a las comunidades
marginadas, lo hace desde la perspectiva de “te voy a
ayudar” o desde una mirada antropológica fría, desde
afuera. Algo que no comparto. Mi acercamiento es
dejarme influenciar por completo y mezclarlo con mi
poesía.” De las conversaciones de los estudiantes de
su clase, mayormente desertores escolares, surge
la idea de “El Noveno Círculo”, dejándose influenciar
por las hipérboles del hablar coloquial y la novela de
Dante. Manos grandes, personajes agigantados y exagerados
cubrieron las paredes de El Cuadrado Gris,
espacio de arte en Barrio Obrero, con una exposición
curada por Ana Astor Blanco, este año. El Noveno Círculo
mantiene el “trademark” de la pincelada espontánea:
un acercamiento a la manera infantil de pintar,
por decirlo de algún modo, llena de espontaneidad,
sin perder lo figurativo y lo impresionista. Pero si bien
me confiesa, esa mirada colorida y caricaturesca
proviene de algo tan común como los “muñequitos”
de la tv con los cuales creció (y crecimos). Emanu-
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el también añade otra firma distintiva a sus piezas: un
pequeño (y hasta juguetón) lobo, cuál me explica, “simboliza
lo animal del humano, la naturaleza interior y cruda
de todo.”
Su bagaje de inspiración y de contenido no tiene
límites. Desde Nietzsche y su destrucción de las estructuras
tradicionales, la poesía latinoamericana de Cesar
Vallejo, la del puertorriqueño Yván Silén, la trova puertorriqueña,
Eduardo Galeano, el “arte bruto” de Jean Dubuffet,
Iene Dumas, Rafael Trelles, Franchesco Clemente, el
arte de las caveras y todo lo que se le ponga delante o
encuentre tras horas de búsqueda infinita en la web.
“Mi obra es una subjetiva, no trato de hacer
crítica social. Si surge, es porque está en mi persona.
Hay una falta de subjetividad en lo que se hace. Todo
el mundo está haciendo las cosas para complacer al
otro. ¿por qué nunca queremos hablar de uno? Tienes
que exponerte, a mayor cabalidad, para ser mejor tú,
más genuino. Hagamos lo más que podamos para ser
lo más subjetivos, pero dialogando. Llegar a unos acuerdos
intermedios para subsistir. Mi obra trata de eso,
de ser subjetiva para que crees tu universo paralelo.”
Para el momento de la entrevista, Emanuel estaba
en procesos de mudanza hacia Milán, conjunto a
su novia y artista Alexandra Santos. Entre ajetreo y ajetreo,
pudimos hacer esta entrevista a tiempo. Ya a este
punto ha cruzado el charco, como los balseros de “La
Barriga de Calandrino”, encontrando otra tierra para
crear. Viajó con una idea clara y específica en mente:
un diálogo entre su obra y la del fallecido pintor puertorriqueño
radicado en Italia, Richard Pagán, el primer
puertorriqueño en recibir el Premio Jackson Pollock
en 1987 y de quien se organizó una exposición retrospectiva
en el Museo de Arte Contemporáneo de
Puerto Rico en el 2012. Allí recibió un obsequio que
mantiene cerquita del pecho: un cuaderno del fenecido
artista repleto de sus dibujos y bocetos. “Es lo que
Richard hubiera hecho”, le comentó la hermana del
artista al entregárselo. Me lo repite con brillo en sus
ojos, como si se tratara de un objeto místico ahora en
su posesión. Su idea es visitar el antiguo espacio del
artista en Italia y completar, de cierto modo, su obra,
para traerla de vuelta a Puerto Rico en un dialogo entre
dos puertorriqueños, en un mismo espacio pero
con dos visiones distintas.
Culmino este escrito recordando específicamente
una cita suya: “Si haces obra con sinceridad
te va a costar más trabajo. Ser honesto con lo que
haces es un reto.” Bueno, eso y que “tienes que ser un
presentao’ pa’ llegar lejos.” Esperemos a ver que nos
trae de vuelta desde el otro lado, con sus lobos, sus
colores y sus autorretratos.
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NOWHERE GIRL
FOTOGRAFÍA
Y STYLING STEPH SEGARRA
MUA TATTIANA TORRES
MODELO BEATRIZ FAISCA
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SAD SONGS TEE STAY HOME CLUB
ADIDAS 90’S SHORTS OUNA’S CLOSET
28 ZAPATOS FOREVER 21

RINGER TOP FOREVER 21
FALDA SHOP INU INU
MEDIAS Y ZAPATOS AMERICAN APPAREL
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MICKEY MOUSE TEE Y ZAPATOS FOREVER 21
TRAJE VINTAGE VERSACE
MEDIAS AMERICAN APPAREL

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TRAJE LAZY OAF
MEDIAS AMERICAN APPAREL
36ZAPATOS FOREVER 21

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