LA IGLESIA ADVENTISTA Y EL SERVICIO MILITAR
Evidencias inspiradas e históricas sobre el tema del servicio militar en la modalidad de no combatiente.
Evidencias inspiradas e históricas sobre el tema del servicio militar en la modalidad de no combatiente.
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<strong>LA</strong> <strong>IGLESIA</strong> <strong>ADVENTISTA</strong> Y <strong>EL</strong> <strong>SERVICIO</strong> <strong>MILITAR</strong><br />
“Y oí una gran voz en el cielo, que decía: Ahora ha venido la salvación, el poder y el reino de nuestro Dios<br />
y la autoridad de su Cristo, porque el acusador de nuestros hermanos, el que los acusa delante de nuestro<br />
Dios día y noche, ha sido arrojado”. Apocalipsis 12:10.<br />
Esta cita bíblica inspirada cataloga a Satanás como “el acusador de nuestros hermanos” y enfatiza esta<br />
característica por cuanto vuelve a declarar que este Ángel caído es quien “los acusa delante de nuestro<br />
Dios”, por lo tanto si este rasgo distintivo es enfatizado por dos ocasiones en una misma cita bíblica, es<br />
porque debemos prestarle una atención realmente especial.<br />
La expresión “nuestros hermanos”, es una referencia a todos aquellos que forman parte de la Iglesia<br />
verdadera, y esto nos permite entender que una de las estrategias que utiliza Satanás consiste en acusar<br />
a la Iglesia Militante “día y noche” para desprestigiarla y así evitar que los verdaderos hijos de Dios sean<br />
guiados a la comunión de dicha organización religiosa.<br />
De todas las estrategias que Satanás utiliza para hacer la guerra a la Iglesia Militante, la acusación y la<br />
transmisión de “falsos Informes”, es una de las más eficaces, por cuanto “algunos serán prendidos en<br />
esta trampa” y lo más grave es que quienes crean estos falsos “rumores”, “a su vez los repetirán y<br />
debido a esta sutil estrategia “se formará un vínculo que los ligue con el gran engañador”, y el resultado<br />
final de esta táctica satánica es que “muchas almas serán inclinadas en la dirección errónea”, pues así<br />
está escrito:<br />
1
“Satanás espera envolver al pueblo remanente de Dios en la ruina general que está por<br />
sobrevenir a la tierra. A medida que la venida de Cristo se acerque, será más resuelto y decidido<br />
en sus esfuerzos para vencerlo. Se levantarán hombres y mujeres, profesando tener alguna nueva<br />
luz o alguna nueva revelación que tenderá a conmover la fe en los antiguos hitos. Sus doctrinas<br />
no soportarán la prueba de la Palabra de Dios, pero habrá almas que serán engañadas. Harán<br />
circular falsos informes, y algunos serán prendidos en esta trampa. Creerán estos rumores, y a<br />
su vez los repetirán, y así se formará un vínculo que los ligue con el gran engañador. Ese<br />
espíritu no se manifestará siempre desafiando abiertamente los mensajes que Dios envía; pero un<br />
decidido descreimiento se expresa de muchas maneras. Cada declaración falsa alimenta y<br />
fortalece ese descreimiento, y por este medio muchas almas serán inclinadas en la dirección<br />
errónea”.<br />
Una de las acusaciones más comunes, es aquella que afirma que la Iglesia Adventista acepta la<br />
participación en la guerra, y quienes realizan esta acusación, basan su afirmación en varias premisas<br />
erróneas que enumero a continuación:<br />
<br />
<br />
<br />
Que el servicio militar en la modalidad de no combatiente es una negación de la fe.<br />
Que esta modalidad de reclutamiento fue adoptada por la Iglesia Adventista recién en el año de<br />
1914.<br />
Que cuando ocurrió la primera guerra mundial, el 98% de los adventistas de Europa apoyaron o<br />
participaron en dicha guerra.<br />
Todas estas premisas erróneas pueden ser debidamente aclaradas, tanto con evidencias inspiradas como<br />
con evidencias históricas.<br />
<strong>LA</strong> VERDAD SOBRE <strong>EL</strong> <strong>SERVICIO</strong> <strong>MILITAR</strong><br />
Cuando hablamos del Servicio Militar, debemos aclarar que por lo general existen dos modalidades<br />
principales:<br />
<br />
El Servicio Militar combatiente, el mismo que consiste en enrolarse al ejército y estar dispuesto a<br />
portar armas y a combatir en una guerra real.<br />
<br />
El Servicio Militar no combatiente, que consiste en enrolarse al ejército, pero que no implica ni<br />
portar armas, ni combatir en la guerra, es decir esta modalidad libera a la persona de la<br />
obligación de participar en combate y se le asigna servicios no combatientes, como trabajo en<br />
hospitales y otras funciones que no requieran el uso de armas en combate. A quienes adoptan<br />
este tipo de servicio militar se les denomina “objetores de conciencia”.<br />
Con relación al Servicio Militar combatiente, no existe discusión y no cabe ninguna duda de que esta<br />
forma de servicio no es recomendable, por cuanto al participar y combatir en una guerra existe la<br />
posibilidad real de violar la Ley de Dios. Con relación al hecho de enrolarse el ejército para portar armas<br />
y participar en combate, el Espíritu de Profecía declara lo siguiente:<br />
2
“Se me mostró que el pueblo de Dios, que es su tesoro peculiar, no puede comprometerse EN<br />
ESTA GUERRA desconcertante porque SE OPONE A TODOS LOS PRINCIPIOS DE SU FE. EN <strong>EL</strong><br />
EJÉRCITO NO PODRÍAN OBEDECER <strong>LA</strong> VERDAD Y AL MISMO TIEMPO OBEDECER LOS<br />
REQUERIMIENTOS OFICIALES. Se produciría continuamente una violación de la conciencia. Los<br />
hombres mundanos están gobernados por principios mundanos. No pueden apreciar principios de<br />
otra índole. La política mundana y la opinión pública abarcan el principio de acción que lo<br />
gobierna y lo induce a practicar el bien en forma convencional”. Testimonios para la Iglesia,<br />
Tomo 1, página 322.<br />
<strong>EL</strong> <strong>SERVICIO</strong> <strong>MILITAR</strong> NO COMBATIENTE NO CONSTITUYE UNA NEGACIÓN DE <strong>LA</strong> FE<br />
El Servicio Militar no combatiente, consiste en enrolarse al ejército, pero esta modalidad no implica ni<br />
portar armas, ni combatir en la guerra, es decir libera a la persona de la obligación de participar en<br />
combate y se le asigna servicios no combatientes, como trabajo en hospitales y otras funciones que no<br />
requieran el uso de armas en combate. A quienes adoptan este tipo de servicio militar se les denomina<br />
“objetores de conciencia”.<br />
Como esta modalidad de reclutamiento, sí permite la observancia del sábado y exime de la obligación de<br />
combatir en la guerra, el Espíritu de Profecía claramente la aprueba y más bien rechaza la actitud de<br />
quienes se oponen a esta forma de enrolamiento. Y esto lo podemos evidenciar, porque la misma Sierva<br />
del Señor declara que no es correcto ni prudente tomar una posición “DECIDIDAMENTE EN CONTRA DE<br />
<strong>LA</strong> OBEDIENCIA A <strong>LA</strong> CONSCRIPCIÓN”, por cuanto quienes toman esta posición “NO COMPRENDEN <strong>EL</strong><br />
TEMA D<strong>EL</strong> QUE ESTÁN HAB<strong>LA</strong>NDO”, y también declara de que dicha posición es una evidencia de<br />
“PRESUNCIÓN FANÁTICA”, pues ASÍ ESTÁ ESCRITO:<br />
“Algunos han estado a la expectativa, listos para criticar y quejarse ante cualquier sugerencia que<br />
se haga. Pero pocos han tenido sabiduría en estos tiempos difíciles para pensar sin prejuicio y<br />
decir claramente lo que se debía hacer. VI QUE LOS QUE HABÍAN ESTADO DISPUESTOS A<br />
HAB<strong>LA</strong>R EN FORMA TAN DECIDIDA OPONIÉNDOSE A OBEDECER A <strong>LA</strong> CONSCRIPCIÓN, NO<br />
COMPRENDEN <strong>EL</strong> TEMA D<strong>EL</strong> QUE ESTÁN HAB<strong>LA</strong>NDO. Si en realidad LOS RECLUTARAN PARA <strong>EL</strong><br />
EJÉRCITO, Y SI <strong>EL</strong>LOS REHUSARAN OBEDECER, y fueran amenazados con encarcelamiento,<br />
tortura o muerte, entonces se acobardarían y descubrirían que no se habían preparado para tal<br />
emergencia. No podrían soportar la prueba de su fe. LO QUE PENSABAN QUE ERA FE, ERA TAN<br />
SÓLO PRESUNCIÓN FANÁTICA”. Testimonios para la Iglesia Tomo 1, página 319, 378, (1863).<br />
Esta cita no expresa únicamente el punto de vista personal de la mensajera del Señor, al contrario, el<br />
hecho de que en esta cita, se mencione la palabra “VI”, demuestra que esta cita es una clara y directa<br />
revelación inspirada y por lo tanto presenta la verdadera posición y el pensamiento de Dios sobre el<br />
tema del servicio militar no combatiente.<br />
Tal y como lo demuestra la evidencia presentada, no es correcto ni inspirado tomar una posición de<br />
rechazo al servicio militar no combatiente. Es más, en la Review and Herald se declaró que cuando los<br />
miembros de iglesia, tienen la posibilidad de ser asignado a funciones no combatientes, pero a pesar de<br />
ello, deciden tomar una posición de total resistencia hacia el enrolamiento, en realidad están “YENDO<br />
3
DEMASIADO LEJOS” por cuanto esta posición podría provocar una posibilidad de muerte, que al ser<br />
innecesaria, se constituiría en “UN SUICIDIO”, pues así está escrito:<br />
“Pensamos que si alguien se propusiera RESISTIR HASTA QUE, en la administración de <strong>LA</strong> LEY<br />
<strong>MILITAR</strong>, FUERA FUSI<strong>LA</strong>DO, ESTARÍA YENDO DEMASIADO LEJOS AL TOMAR SOBRE SÍ <strong>LA</strong><br />
RESPONSABILIDAD DE UN SUICIDIO”. The Review and Herald, 12 de agosto de 1862.<br />
Por lo tanto no se puede considerar o catalogar como mártires a quienes teniendo la posibilidad de ser<br />
asignados a funciones no combatientes, prefieren innecesariamente morir, por cuanto quienes cometen<br />
este error, en realidad están cometiendo “UN SUICIDIO”.<br />
El Espíritu de Profecía constantemente reitera que aquellos que consideran que “NO PUEDEN<br />
COMPROMETERSE A CONCIENCIA EN [<strong>LA</strong>] GUERRA”, “SON LOS QUE TIENEN MENOS QUE DECIR”, y<br />
también declara que ellos “NO HARÍAN A<strong>LA</strong>RDES” sobre su posición de rechazo a toda forma de<br />
reclutamiento; lo cual nos demuestra que HACER A<strong>LA</strong>RDE SOBRE esta posición y juzgar a otros porque no<br />
aceptan esta posición, no es una posición inspirada, pues así está escrito:<br />
“Los que están mejor preparados para sacrificar aun la vida, si fuere necesario, antes que<br />
colocarse en una situación en la que no pudieran obedecer a Dios, SON LOS QUE TIENEN MENOS<br />
QUE DECIR. ESTOS NO HARÍAN A<strong>LA</strong>RDES. Sentirían profundamente y meditarían mucho, y sus<br />
fervientes oraciones ascenderían al cielo en busca de SABIDURÍA para obrar y gracia para<br />
soportar. LOS QUE PIENSAN QUE EN <strong>EL</strong> TEMOR DE DIOS NO PUEDEN COMPROMETERSE A<br />
CONCIENCIA EN ESTA GUERRA, MANIFESTARÍAN MUCHA CALMA, y cuando se les preguntara<br />
declararían simplemente lo que están obligados a decir a fin de satisfacer al que interroga, y<br />
luego darían a entender que no simpatizan con la rebelión”. Testimonios para la Iglesia Tomo 1,<br />
página 319, 378, (1863).<br />
Para confirmar el hecho de que Dios siempre manifestó aprobación al servicio militar en la modalidad de<br />
no combatiente; 23 años después, es decir en el año de 1886; la misma Sierva del Señor nuevamente<br />
declaró que “<strong>EL</strong> SEÑOR *LE+ HA MOSTRADO” que este tipo de “RECLUTAMIENTO” es un RECURSO<br />
CORRECTO que el pueblo de Dios puede utilizar, y que dicho recurso en ningún sentido constituye “UNA<br />
NEGACIÓN DE NUESTRA FE”, pues ASÍ ESTÁ ESCRITO:<br />
“Ud. pregunta acerca de la conducta que debería seguirse para asegurar el derecho que tiene<br />
nuestro pueblo de adorar de acuerdo con los dictados de su propia conciencia. DURANTE UN<br />
TIEMPO HE ESTADO MUY PREOCUPADA POR SABER SI ESTO CONSTITUIRÍA UNA NEGACIÓN DE<br />
NUESTRA FE y una evidencia de que nuestra confianza no estaba plenamente asentada en Dios.<br />
Pero he recordado muchas cosas que <strong>EL</strong> SEÑOR ME HA MOSTRADO en el pasado concernientes a<br />
asuntos de un carácter similar, tales como el RECLUTAMIENTO Y OTRAS COSAS. PUEDO HAB<strong>LA</strong>R<br />
EN <strong>EL</strong> TEMOR DE DIOS Y DECIR QUE ES CORRECTO QUE UTILICEMOS TODOS LOS RECURSOS QUE<br />
PODAMOS PARA APARTAR <strong>LA</strong> PRESIÓN QUE SE ESTÁ EJERCIENDO SOBRE NUESTRO PUEBLO. —<br />
Carta 55, 1886. Mensajes Selectos, Tomo 2, página 386.<br />
4
Y en la última parte de esta cita, la Sierva del Señor declara “EN <strong>EL</strong> TEMOR DE DIOS”, que “ES CORRECTO<br />
QUE UTILICEMOS TODOS LOS RECURSOS QUE PODAMOS PARA APARTAR <strong>LA</strong> PRESIÓN QUE SE ESTÁ<br />
EJERCIENDO SOBRE NUESTRO PUEBLO” y de esta manera, la cita deja en claro que el “RECLUTAMIENTO”<br />
es un RECURSO CORRECTO porque no constituye en ningún sentido “UNA NEGACIÓN DE <strong>LA</strong> FE”.<br />
En el Espíritu de Profecía no solo encontramos evidencias inspiradas que demuestran que el servicio<br />
militar NO COMBATIENTE es claramente permitido EN TIEMPOS DE GUERRA; también encontramos<br />
evidencias de que el servicio militar no combatiente es permitido AÚN EN TIEMPOS DE PAZ, es decir, aun<br />
cuando no está ocurriendo una guerra real, tal y como lo demuestran la siguiente cita inspirada:<br />
“Acabamos de despedir a tres de nuestros hombres responsables que trabajaban en la oficina,<br />
QUIENES RECIBIERON ORDEN D<strong>EL</strong> GOBIERNO DE INGRESAR DURANTE TRES SEMANAS EN <strong>EL</strong><br />
<strong>SERVICIO</strong> <strong>MILITAR</strong>. En la casa editora pasábamos por una importantísima etapa en nuestro<br />
trabajo, pero los requerimientos del gobierno no se acomodan a nuestras conveniencias. EXIGEN<br />
QUE LOS JÓVENES A QUIENES HAN ACEPTADO COMO SOLDADOS NO DESCUIDEN LOS EJERCICIOS<br />
NI <strong>LA</strong> PREPARACIÓN ESENCIAL PARA LOS SOLDADOS. NOS ALEGRÓ VER QUE ESOS HOMBRES CON<br />
SUS UNIFORMES <strong>MILITAR</strong>ES HABÍAN RECIBIDO CONDECORACIONES POR SU FID<strong>EL</strong>IDAD EN SU<br />
TRABAJO. Eran jóvenes dignos de confianza”. “NO FUERON POR <strong>EL</strong>ECCIÓN PROPIA, sino porque<br />
las leyes de su nación así lo requerían. LOS ANIMAMOS A SER FI<strong>EL</strong>ES SOLDADOS DE CRISTO.<br />
Nuestras oraciones acompañarán a esos jóvenes, para que los ángeles de Dios vayan con ellos y<br />
los protejan de toda tentación”. Mensajes Selectos, Tomo 2, página 386; 2 de septiembre de<br />
1886.<br />
Según lo describe esta cita, en el año de 1886, tres miembros de la Iglesia Adventista ingresaron al<br />
“<strong>SERVICIO</strong> <strong>MILITAR</strong>”, en donde iban a recibir entrenamiento militar, por cuanto el propósito de dicho<br />
servicio era que “NO DESCUIDEN LOS EJERCICIOS NI <strong>LA</strong> PREPARACIÓN ESENCIAL PARA LOS SOLDADOS”.<br />
Sin embargo esta situación no fue considerado por la Iglesia como una violación a los principios de fe,<br />
por cuanto la Sierva del Señor declaró que “NOS ALEGRÓ VER QUE ESOS HOMBRES CON SUS UNIFORMES<br />
<strong>MILITAR</strong>ES HABÍAN RECIBIDO CONDECORACIONES POR SU FID<strong>EL</strong>IDAD EN SU TRABAJO” y así reconoció<br />
que en dicha situación sí se puede ser fiel, por cuanto ella los animó “A SER FI<strong>EL</strong>ES SOLDADOS DE<br />
CRISTO”.<br />
<strong>LA</strong> POSICIÓN DE “NO COMBATIENTES” FUE ADOPTADA POR <strong>LA</strong> <strong>IGLESIA</strong> <strong>ADVENTISTA</strong> EN 1864<br />
Un dato histórico clave sobre este tema, y que no es mencionado por quienes se oponen al<br />
reclutamiento en la modalidad de no combatiente, es el hecho de que en julio de 1864, fue revocada la<br />
cláusula que permitía canjear el reclutamiento con el pago de 300 dólares, y a partir de dicha fecha, el<br />
gobierno norteamericano estableció que únicamente aquellas organizaciones que legalmente hayan sido<br />
reconocidas con el estatus de NO COMBATIENTES, podrían seguir canjeando el reclutamiento por el pago<br />
de los 300 dólares, pues así lo demuestra la siguiente cita histórica:<br />
5
“PERO <strong>LA</strong> LEY FUE ENMENDADA <strong>EL</strong> 4 DE JULIO DE 1864; SE REVOCÓ <strong>LA</strong> PROVISIÓN QUE<br />
PERMITÍA CANJEAR <strong>EL</strong> RECLUTAMIENTO POR $300… ESTO SIGNIFICABA QUE <strong>LA</strong> PROVISIÓN D<strong>EL</strong><br />
CANJE DE $300 AHORA SE APLICABA SÓLO A AQU<strong>EL</strong>LOS QUE ESTABAN OFICIALMENTE<br />
RECONOCIDOS COMO NO COMBATIENTES. Hasta ese momento los adventistas, aunque<br />
firmemente convencidos de esa creencia, no habían declarado públicamente este hecho, ni su<br />
posición estaba reconocida oficialmente. <strong>LA</strong> <strong>IGLESIA</strong> TENÍA QUE ACTUAR RÁPIDAMENTE PARA<br />
OBTENER ESTATUS OFICIAL DE NO COMBATIENTE. Los dirigentes de la iglesia, trabajando a<br />
través de los canales apropiados, dieron pasos inmediatos para lograr esto. El primer paso fue<br />
obtener el respaldo del gobernador de Michigan, Austin Blair. Por lo tanto, el 3 de agosto de 1864<br />
tres hombres del comité de la Asociación General le llevaron una comunicación…”. Elena de<br />
White, Mujer de Visión, página 94.<br />
Un aspecto crucial de esta denominada posición de NO COMBATIENTE, es que en dicha posición se<br />
incluía “<strong>LA</strong> POSIBILIDAD DE SER ASIGNADOS A <strong>SERVICIO</strong>S NO COMBATIENTES”, es decir a servicios en<br />
hospitales y otras funciones que no implicaban ni portar armas ni participar en combate. Y si la Iglesia<br />
Adventista en 1864, no solo que aceptó, sino que también tomó las medidas legales para ser reconocidos<br />
con esta posición, es porque este hecho demuestra que la Iglesia Adventista de aquel entonces,<br />
comprendía claramente que el hecho de ser enrolado al ejército para cumplir con funciones no<br />
combatientes, NO CONSTITUYE EN NINGÚN SENTIDO UNA FORMA DE VIO<strong>LA</strong>CIÓN A LOS PRINCIPIOS<br />
BÍBLICOS.<br />
Por tal motivo, la Iglesia Adventista tomó todas las medidas legales para obtener el estatus oficial de NO<br />
COMBATIENTE, lo cual tuvo “ÉXITO” y esto permitió que aquellos jóvenes adventistas que fueron<br />
enrolados al ejército “SE LES ASIGNE TRABAJO DE HOSPITAL U OTRO <strong>SERVICIO</strong> COMO NO<br />
COMBATIENTES”, como efectivamente sucedió con varios adventistas, pues así lo demuestra esta cita:<br />
“En julio de 1864, la ley de conscripción nacional fue enmendada PARA REVOCAR <strong>LA</strong> CLÁUSU<strong>LA</strong><br />
QUE PERMITÍA <strong>LA</strong> EXENCIÓN A CAMBIO DE UN PAGO DE 300 DÓ<strong>LA</strong>RES. INMEDIATAMENTE SE<br />
DIERON LOS PASOS NECESARIOS para obtener en favor de los jóvenes adventistas del séptimo día<br />
los privilegios concedidos a los miembros de denominaciones religiosas que por motivos de<br />
conciencia se oponían a portar armas, ES DECIR, <strong>LA</strong> POSIBILIDAD DE SER ASIGNADOS A <strong>SERVICIO</strong>S<br />
NO COMBATIENTES EN HOSPITALES O EN <strong>EL</strong> CUIDADO DE LOS ESC<strong>LA</strong>VOS LIBERTADOS. Antes que<br />
se tuviera que afrontar una crisis seria, ESOS ESFUERZOS TUVIERON ÉXITO. EN UNOS POCOS<br />
CASOS, ALGUNOS JÓVENES <strong>ADVENTISTA</strong>S FUERON ENRO<strong>LA</strong>DOS EN <strong>EL</strong> EJÉRCITO Y SE LES ASIGNÓ<br />
TRABAJO DE HOSPITAL U OTRO <strong>SERVICIO</strong> COMO NO COMBATIENTES. CUALQUIERA QUE FUERA<br />
SU ASIGNACIÓN, SE ESFORZARON POR HACER BRIL<strong>LA</strong>R SU LUZ”. Testimonios para la Iglesia Tomo<br />
1, página 622.<br />
Tal y como lo describe esta cita “ALGUNOS JÓVENES <strong>ADVENTISTA</strong>S FUERON ENRO<strong>LA</strong>DOS EN <strong>EL</strong> EJÉRCITO<br />
Y SE LES ASIGNÓ TRABAJO DE HOSPITAL U OTRO <strong>SERVICIO</strong> COMO NO COMBATIENTES” y sin embargo<br />
este enrolamiento al ejército como no combatiente, NO FUE CONSIDERADO UNA APOSTASÍA NI UNA<br />
NEGACIÓN DE <strong>LA</strong> FE, al contrario, el texto termina diciendo de que dichos jóvenes “SE ESFORZARON POR<br />
6
HACER BRIL<strong>LA</strong>R SU LUZ”, por lo tanto, es evidente de que esta modalidad de enrolamiento, está<br />
claramente permitido por la inspiración y no constituye una violación a los principios bíblicos.<br />
<strong>LA</strong> DEC<strong>LA</strong>RACIÓN DE PRINCIPIOS<br />
La misma declaración de principios elaborada por el Comité Ejecutivo de la Asociación General, el 2 de<br />
agosto de 1864 y que fue entregada al Gobernador de Michigan, Austin Blair el 3 de agosto de 1864,<br />
demuestra que la Iglesia no estaba en contra de servir en hospitales o en cualquier otra función no<br />
combatiente, y esto lo podemos evidenciar, cuando leemos dicha declaración y comprobamos que no se<br />
hace una mención directa al servicio en hospitales y similares.<br />
De lo que sí estaban en contra era del servicio militar que incluía el portar armas y participar en<br />
combate, y esto es evidente porque en dicha declaración se especifica por 4 veces que la Iglesia<br />
está en contra de la “la portación de armas” y así lo demuestra el énfasis realizado en dicha<br />
declaración de principios que copio a continuación:<br />
Nosotros los infrascritos, el Comité Ejecutivo de la Asociación General de los Adventistas<br />
del Séptimo Día, rogamos respetuosamente autorización para presentar a su<br />
consideración las siguientes declaraciones:<br />
La denominación de cristianos que se llaman a sí mismos Adventistas del Séptimo Día,<br />
tomando la Biblia como su regla de fe y práctica, unánimemente sostienen que sus<br />
enseñanzas son contrarias al espíritu y práctica de la guerra; por lo tanto, siempre se han<br />
opuesto por razones de conciencia a la portación de armas. Si existe alguna parte de la<br />
Biblia que nosotros como pueblo podamos señalar como nuestro credo más que<br />
cualquier otra, es la ley de los Diez Mandamientos, la cual consideramos como la<br />
suprema ley, y de la cual cada precepto tomamos en su significado más claro y literal. El<br />
cuarto de estos mandamientos exige el cese de trabajo en el séptimo día de la semana, el<br />
sexto prohíbe quitar la vida, ninguno de los cuales, según nuestro punto de vista, se<br />
podría observar haciendo el servicio militar [combatiente]. Nuestra práctica ha sido<br />
consecuente de manera uniforme con estos principios. Por lo tanto, nuestro pueblo no se<br />
ha sentido en libertad para alistarse en el servicio. En ninguna de nuestras publicaciones<br />
de la iglesia hemos defendido o animado la práctica de portar armas; y cuando hemos<br />
sido sorteados para el servicio militar [combatiente], en lugar de violar nuestros<br />
principios, hemos preferido pagar y ayudarnos unos a otros en el pago de los 300 dólares,<br />
dinero de exención. Y mientras esa provisión permaneció de aplicación universal, no<br />
consideramos necesario hacer una expresión pública de nuestros sentimientos sobre este<br />
particular.<br />
Diremos además que los Adventistas del Séptimo Día somos rígidamente antiesclavistas,<br />
leales al gobierno, y en armonía con ello estamos en contra de la rebelión.<br />
Pero no habiendo tenido una larga existencia como un pueblo diferente, y considerando<br />
que nuestra organización se ha completado apenas recientemente, nuestros<br />
7
sentimientos no son todavía extensamente conocidos. El cambio en la ley hace necesario<br />
que asumamos una posición más pública en la cuestión. Por esta razón depositamos<br />
ahora ante Su Excelencia los sentimientos de los Adventistas del Séptimo Día, como un<br />
cuerpo, en relación con la portación de armas, confiando que usted no vacilará en<br />
respaldar nuestro pedido de que como pueblo, nos colocamos bajo el alcance de la última<br />
ley del Congreso concerniente a aquellos que se oponen por razones de conciencia a la<br />
portación de armas, y tienen derecho a los beneficios de dichas leyes.<br />
John Byington<br />
J. N. Loughborough<br />
George W. Amadon<br />
Battle Creek, Mich, Agosto 2, 1864.<br />
Fuentes: - Seventh-day Adventists in Time of War, página 58.<br />
- Curso de Reforma y Reavivamiento, página 25.<br />
- Elena de White, Mujer de Visión, página 95.<br />
Imagen de la Declaración de Principios original<br />
Tal y como lo demuestra esta declaración de principios, en ninguna parte de este documento se afirma<br />
de que la Iglesia Adventista estaba en contra del servicio en hospitales u otras funciones no<br />
combatientes, únicamente se declara que se opone al servicio militar cuando éste incluye la portación de<br />
armas y la participación en combate.<br />
8
Incluso la misma respuesta que entregó el Gobernador de Michigan a esta declaración de principios,<br />
demuestra que no se estaba en oposición al servicio en hospitales u otras funciones no combatientes, de<br />
lo único que se oponían nuestros pioneros era al hecho de “portar armas, o a participar en la<br />
guerra”, pues así lo demuestra dicha respuesta que copio a continuación:<br />
Estoy satisfecho de que la declaración antedicha de principios y prácticas de los<br />
Adventistas del Séptimo Día es correcta, y que ellos tienen derecho a todas las<br />
inmunidades garantizadas por la ley A AQU<strong>EL</strong>LOS QUE SE OPONEN POR<br />
RAZONES DE CONCIENCIA A PORTAR ARMAS, O A PARTICIPAR EN <strong>LA</strong><br />
GUERRA.<br />
Austin Blair<br />
Gobernador de Michigan<br />
Fechado, 3 de agosto, 1864<br />
Fuentes: - Seventh-day Adventists and Civil Government, página 10.<br />
- Curso de Reforma y Reavivamiento, página 25.<br />
- Elena de White, Mujer de Visión, página 95.<br />
Otro aspecto también determinante se encuentra al final de esta misma declaración de principios, por<br />
cuanto el Comité Ejecutivo de la Asociación General textualmente declaró lo siguiente:<br />
“… Nos colocamos bajo el alcance de la última ley del Congreso concerniente a aquellos<br />
que se oponen por razones de conciencia a la portación de armas, y tienen derecho a los<br />
beneficios de dichas leyes.”<br />
¿Y qué significaba literalmente el hecho de colocarse bajo el alcance de esta última ley? Significaba<br />
aceptar no solo la posibilidad de pagar los 300 dólares para ser eximido, también significaba aceptar la<br />
posibilidad de cumplir con funciones no combatientes, como servir en hospitales y cuidar a los libertos,<br />
así lo demuestra la siguiente cita de la Review and Herald del 13 de septiembre de 1864 y que también<br />
es citado en el Curso de Reforma y Reavivamiento en la página 25:<br />
“Los miembros de denominaciones religiosas que han salido sorteados para el servicio militar, y<br />
que establezcan ante la Junta de Conscripción el hecho de que por razones de conciencia se<br />
oponen al porte de armas, y que sus reglas y principios de fe así se los prohíben, y cuya conducta<br />
haya sido consecuente con su profesión, serán asignados a cumplir sus deberes en los<br />
hospitales, o a cuidar los libertos, o serán exceptuados pagando 300 dólares a tales personas<br />
que la Secretaría de Guerra designe.” -Review and Herald, 13 de septiembre de 1864.<br />
Si nuestros pioneros hubieran considera al servicio militar no combatiente, como incompatible a nuestra<br />
fe, entonces ellos nunca hubieran aceptado colocarse bajo el alcance de una ley que establecía<br />
claramente que el servicio en hospitales y el cuidado de los libertos era una posibilidad legal y real para<br />
quienes asumían el estatus de NO COMBATIENTES.<br />
9
<strong>LA</strong> VERDAD SOBRE <strong>EL</strong> PAGO DE LOS 300 DÓ<strong>LA</strong>RES<br />
Otro aspecto determinante y que no es mencionado por quienes rechazan el Servicio Militar NO<br />
COMBATIENTE, es el hecho de que el pago de los 300 dólares que servía para ser eximido del<br />
Reclutamiento, debía ser entregado a quien “<strong>LA</strong> SECRETARÍA DE GUERRA DESIGNARA”, PARA SER<br />
APLICADO EN BENEFICIO DE LOS SOLDADOS ENFERMOS Y HERIDOS”. Es decir, este dinero era destinado<br />
para la atención de soldados enfermos y heridos que se iban presentando como consecuencia de la<br />
guerra.<br />
Y aquellos que eran reclutados bajo la modalidad de no combatientes, cumplían con el mismo propósito<br />
que tenía el pago de los 300 dólares, por cuanto ellos eran asignados a funciones no combatientes como<br />
el servicio en hospitales, en donde prioritariamente se atendía a “LOS SOLDADOS ENFERMOS Y<br />
HERIDOS”. Es decir, tanto la opción del pago de los 300 dólares, como también la opción de ser asignado<br />
al servicio en hospitales, tenían el mismo objetivo de atender a los soldados enfermos y heridos que la<br />
guerra iba generando.<br />
Si en realidad se cometiera una negación de la fe cuando se acepta el ser designado a funciones no<br />
combatientes, como el servir en hospitales, entonces de la misma manera, el haber pagado los 300<br />
dólares también se constituiría en una negación de la fe, por cuanto ambas opciones tenían el mismo<br />
objetivo de ser aplicadas “EN BENEFICIO DE LOS SOLDADOS ENFERMOS Y HERIDOS”, pues así lo declara<br />
la misma Acta del Congreso que promulgó dicha ley, tal y como lo demuestra la siguiente cita:<br />
Por lo tanto si no se puede considerar UNA NEGACIÓN DE <strong>LA</strong> FE, el haber pagado 300 dólares para ser<br />
utilizados en “EN BENEFICIO DE LOS SOLDADOS ENFERMOS Y HERIDOS”, entonces tampoco podemos<br />
catalogar como una negación de la fe, el hecho de ser asignado a servir en hospitales, por cuanto esta<br />
asignación también cumplía con el mismo propósito de atender a “LOS SOLDADOS ENFERMOS Y<br />
HERIDOS”.<br />
10
Desde 1864, la posición oficial de la Iglesia Adventista ha sido la de NO COMBATIENTES, esta posición no<br />
fue cambiada ni alterada en 1914, al contrario, dicha posición fue ratificada en 1972, tal y como lo<br />
demuestra la siguiente cita de la Revista Adventista:<br />
<strong>LA</strong> POSTURA OFICIAL DE <strong>LA</strong> <strong>IGLESIA</strong> FUE REAFIRMADA en la década de 1950, y una vez más según<br />
voto tomado en el Concilio Anual de la Asociación General en 1972. En parte, ese voto expresa:<br />
«El cristianismo auténtico se manifiesta en una buena ciudadanía y en lealtad al gobierno civil. El<br />
estallido de la guerra entre los seres humanos de ninguna manera altera la lealtad y<br />
responsabilidad cristianas supremas hacia Dios, ni modifica la obligación de practicar sus<br />
creencias y poner a Dios en primer lugar. Esta sociedad con Dios por medio de Jesucristo, quien<br />
vino a este mundo no a destruir las vidas de los hombres sino para salvarlos, LLEVA A LOS<br />
<strong>ADVENTISTA</strong>S A DEFENDER <strong>LA</strong> POSTURA DE NO COMBATIENTES». Revista Adventista, Septiembre<br />
2014, página 23.<br />
A pesar de los prejuicios levantados en contra de la Iglesia Adventista por su posición oficial de NO<br />
COMBATIENTES, dicha posición no constituye ninguna negación de la fe, al contrario, esta posición<br />
también se ha constituido en una dura prueba de fe para la Iglesia, y precisamente durante la primera<br />
guerra mundial, específicamente en 1916, varios jóvenes adventistas fueron perseguidos y llegaron a ser<br />
mártires por mantenerse fieles a la posición de NO COMBATIENTES, así lo demuestran las siguientes<br />
citas:<br />
“Imagínese a usted mismo con 16 años de edad en 1914. Usted es uno de los 2.500 Adventistas<br />
del Séptimo Día en el Reino Unido. POR 1916 SE HABRÁ CONVERTIDO EN UNO DE LOS 130<br />
JÓVENES <strong>ADVENTISTA</strong>S RECLUTADOS EN <strong>EL</strong> EJÉRCITO. COMO OBJETOR DE CONCIENCIA, UNA<br />
PERSONA INCOMPRENDIDA DURANTE <strong>LA</strong> PRIMERA GUERRA MUNDIAL, PODRÁ PASAR <strong>EL</strong> RESTO<br />
DE <strong>LA</strong> GUERRA EN PRISIÓN, SENTENCIADO A TRABAJOS FORZADOS EN <strong>LA</strong>S PRISIONES DE<br />
DARTMOOR, KNUTSFORD O WAKEFI<strong>EL</strong>D. La observancia del sábado será un problema. También<br />
lo serán las blasfemias y los valores morales en general. SU <strong>EL</strong>ECCIÓN DE GUARDAR <strong>EL</strong> SÁBADO<br />
probablemente acabará en una paliza, o en trabajos degradantes tales como limpiar las letrinas<br />
sin ningún tipo de material”.<br />
“16 jóvenes del área de Stanborough Park lo pasaron incluso peor aún. En un documental que<br />
será publicado por el Centro Adventista Multimedia en el Reino Unido, SE CUENTA <strong>LA</strong> HISTORIA<br />
DE SU RECLUTAMIENTO EN <strong>LA</strong> 3ª COMPAÑÍA DE CUERPOS NO COMBATIENTES en Bedford<br />
Barracks el 23 de Mayo de 1916, SU RECHAZO A PORTAR ARMAS EN <strong>EL</strong> BARCO rumbo a Francia,<br />
y su juicio marcial posterior así como el terrible trato recibido en la prisión militar Nº 3 en Le<br />
Harve. DOS DE <strong>EL</strong>LOS MURIERON A CAUSA DE SUS HERIDAS” Revista Adventista, Septiembre<br />
2014, página 15, columna 2, párrafo 2 y 3.<br />
Otro ejemplo más actual es el caso del hermano adventista Joel David Klimkewicz, quien fue condenado<br />
a 7 meses de prisión precisamente por tomar la posición de NO COMBATIENTE, tal y como lo podemos<br />
confirmar en la siguiente página web oficial de la Iglesia Adventista:<br />
http://news.adventist.org/es/todas-las-noticias/noticias/go/2004-12-15/estados-unidosadventistas-no-combatiente-condenado-a-prision-por-el-cuerpo-de-marines-de-eeuu/<br />
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¿Por qué razón no se excluye a los miembros que deciden adoptar el Servicio Militar con porte de<br />
armas?<br />
Porque NO EXISTE EVIDENCIA INSPIRADA que estipule que se debe excluir a quienes toman esta decisión<br />
incorrecta. La Biblia únicamente aprueba y requiere la aplicación de la disciplina eclesiástica, solo<br />
después de que se haya comprobado la existencia de una directa y evidente violación de la Ley de Dios.<br />
Es decir, un miembro de Iglesia que decidió ser combatiente, solo podrá ser destraternizado si se<br />
comprueba que cometió ya sea asesinato o violación del sábado; si no se puede demostrar que se dio tal<br />
cosa, entonces la Biblia no aprueba la exclusión en este caso.<br />
En relación con aquellos miembros de Iglesia que “NO ESTÁN CONVERTIDOS” y que “YERRAN” al tomar<br />
una posición incorrecta como el de portar armas, el Espíritu de Profecía declara categóricamente que<br />
“NINGUNA RESOLUCIÓN ESPASMÓDICA, C<strong>EL</strong>OSA Y APRESURADA HA DE SER TOMADA POR LOS<br />
MIEMBROS DE <strong>LA</strong> <strong>IGLESIA</strong> PARA SEPARAR DE <strong>LA</strong> MISMA A LOS QUE <strong>EL</strong>LOS CONSIDERAN DEFECTUOSOS<br />
DE CARÁCTER, y la cita también declara que “<strong>LA</strong> CIZAÑA APARECERÁ EN MEDIO D<strong>EL</strong> TRIGO”, pero<br />
finalmente recomienda dejarla por cuanto “HARÍA MÁS DAÑO ARRANCAR<strong>LA</strong>”, pues así está escrito:<br />
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“<strong>LA</strong> <strong>IGLESIA</strong> DE CRISTO EN <strong>LA</strong> TIERRA SERÁ IMPERFECTA, PERO DIOS NO DESTRUYE A SU<br />
<strong>IGLESIA</strong> A CAUSA DE SU IMPERFECCIÓN. Ha habido y habrá personas llenas de celo no conforme<br />
a ciencia, que querrán purificar la iglesia y desarraigar la cizaña de en medio del trigo. PERO<br />
CRISTO NOS HA DADO LUZ ESPECIAL SOBRE <strong>LA</strong> MANERA DE TRATAR A LOS QUE YERRAN Y A<br />
AQU<strong>EL</strong>LOS QUE EN <strong>LA</strong> <strong>IGLESIA</strong> NO ESTÁN CONVERTIDOS. NINGUNA RESOLUCIÓN<br />
ESPASMÓDICA, C<strong>EL</strong>OSA Y APRESURADA HA DE SER TOMADA POR LOS MIEMBROS DE <strong>LA</strong><br />
<strong>IGLESIA</strong> PARA SEPARAR DE <strong>LA</strong> MISMA A LOS QUE <strong>EL</strong>LOS CONSIDERAN DEFECTUOSOS DE<br />
CARÁCTER. <strong>LA</strong> CIZAÑA APARECERÁ EN MEDIO D<strong>EL</strong> TRIGO; PERO HARÍA MÁS DAÑO<br />
ARRANCAR<strong>LA</strong> que dejarla. Mientras el Señor trae a la iglesia a aquellos que están<br />
verdaderamente convertidos, Satanás al mismo tiempo, trae a ella a personas que no están<br />
convertidas. Mientras Cristo siembra la buena simiente, Satanás siembra la cizaña. Hay dos<br />
influencias opositoras que se ejercen continuamente sobre los miembros de la iglesia. Una<br />
influencia trabaja para la purificación de la iglesia, y la otra para la corrupción del pueblo de<br />
Dios.”. Testimonios para los Ministros, página 46.<br />
Las directrices que da esta esta cita inspirada son claras, no hemos de excluir inmediatamente a quienes<br />
yerran y tampoco a quienes no están verdaderamente convertidos, al contrario, el Espíritu de Profecía<br />
señala que es preferible ERRAR “POR <strong>EL</strong> <strong>LA</strong>DO DE <strong>LA</strong> MISERICORDIA Y NO POR <strong>EL</strong> <strong>LA</strong>DO DE <strong>LA</strong><br />
CONDENACIÓN Y <strong>EL</strong> TRATO DURO”, pues así está escrito:<br />
"Oh, cuánto anhelo que Cristo venga, cuánto anhelo que arregle todas las cosas. Ahora me estoy<br />
convenciendo de HABER COMETIDO UN ERROR AL ESPECIFICAR ALGUNOS MALES QUE EXISTEN<br />
EN MIS HERMANOS. MUCHOS ESTÁN CONSTITUIDOS DE TAL MANERA QUE TOMARÁN ESTOS<br />
ERRORES Y TRATARÁN TAN SEVERAMENTE A QUIEN LOS COMETIÓ, QUE NO TENDRÁ VALOR NI<br />
ESPERANZA DE CORREGIRSE, Y <strong>EL</strong> MAL TRATO DE <strong>LA</strong> PERSONA ARRUINARÁ UN ALMA. Ellos,<br />
sabiendo las cosas que yo sé, tratan al que yerra de una manera muy diferente a como yo lo<br />
haría. De aquí en adelante debo ser más precavida. No encomendaré a mis hermanos la relación<br />
con las almas, si Dios me perdona el asunto en que he errado. Suplico a todos que miren mucho<br />
más allá de mí, más allá de las opiniones de hombres finitos y dados a errar, y miren a Jesús.<br />
Luche con Dios, hable mucho menos con diferentes personas y ore más... Me gustaría que<br />
tuviéramos mucho más del Espíritu de Cristo y muchísimo menos de las opiniones humanas. SI<br />
ERRAMOS, QUE SEA POR <strong>EL</strong> <strong>LA</strong>DO DE <strong>LA</strong> MISERICORDIA Y NO POR <strong>EL</strong> <strong>LA</strong>DO DE <strong>LA</strong><br />
CONDENACIÓN Y <strong>EL</strong> TRATO DURO" (Carta 16-1887; Manuscript Realeases No. 449, páginas 28-<br />
30).<br />
UN MENSAJE DE SEGURIDAD Y CONFIANZA<br />
Tal y como ya se lo ha expuesto, la afirmación de que la Iglesia Adventista acepta o fomenta la guerra, es<br />
una acusación que se basa únicamente en premisas falsas y como Dios sabía que su Iglesia iba a recibir<br />
esta clase de acusaciones, él envía un mensaje de seguridad y confianza a los adventistas de todo el<br />
mundo, para que estén seguros de que la Iglesia Adventista continuará siendo el único y último pueblo<br />
de Dios HASTA <strong>EL</strong> FIN D<strong>EL</strong> TIEMPO, pues así está escrito:<br />
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"Se me ha instruido que diga A LOS <strong>ADVENTISTA</strong>S DE TODO <strong>EL</strong> MUNDO que Dios nos ha llamado<br />
como UN PUEBLO QUE HA DE CONSTITUIR UN TESORO ESPECIAL PARA ÉL. ÉL HA DISPUESTO QUE<br />
SU <strong>IGLESIA</strong> EN <strong>LA</strong> TIERRA PERMANEZCA PERFECTAMENTE UNIDA en el Espíritu y el consejo del<br />
Señor de los ejércitos HASTA <strong>EL</strong> FIN D<strong>EL</strong> TIEMPO". Mensajes selectos, tomo 2, pág. 458, Eventos<br />
de los últimos días pág. 56, (1908).<br />
“No hay necesidad de dudar ni de temer que la obra no tenga éxito. DIOS ENCABEZA <strong>LA</strong> OBRA Y<br />
ÉL PONDRÁ EN ORDEN TODAS <strong>LA</strong>S COSAS. Si hay que realizar ajustes en la plana directiva de la<br />
obra, DIOS SE OCUPARÁ DE ESO Y ENDEREZARÁ TODO LO QUE ESTÉ TORCIDO. TENGAMOS FE EN<br />
QUE DIOS CONDUCIRÁ CON SEGURIDAD HASTA <strong>EL</strong> PUERTO <strong>EL</strong> NOBLE BARCO QUE LLEVA AL<br />
PUEBLO DE DIOS. - Mensajes Selectos, Tomo 2, página 449 (1892).<br />
Autor: Pablo Muñoz, Ecuador, 2016.<br />
Cuenta de Facebook: www.facebook.com/pablo.munoz.12914<br />
Correo electrónico: patriciomunoz2010@hotmail.com<br />
Saludos cordiales.<br />
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