Desarrollo social inclusivo: una nueva generación de políticas para superar la pobreza y reducir la desigualdad en América Latina y el Caribe

América Latina y el Caribe logró en el último decenio notables avances en materia de desarrollo social. Sin embargo, aún hay un largo camino por recorrer. Persisten, como desafíos ineludibles, la definitiva superación de la pobreza y la sustancial reducción de la desigualdad que, además de ser un imperativo ético, constituyen una condición imprescindible para avanzar en el desarrollo sostenible, en sintonía con la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, recién aprobada por la Asamblea General de las Naciones Unidas. Pese al actual escenario económico mundial, más complejo e incierto que el de los años anteriores y que, al menos en el corto plazo, será menos favorable para la región, es fundamental asegurar los avances en materia de desarrollo social alcanzados en el último decenio y no postergar las asignaturas pendientes en ámbitos en que el progreso ha sido insuficiente. América Latina y el Caribe logró en el último decenio notables avances en materia de desarrollo social. Sin embargo, aún hay un largo camino por recorrer. Persisten, como desafíos ineludibles, la definitiva superación de la pobreza y la sustancial reducción de la desigualdad que, además de ser un imperativo ético, constituyen una condición imprescindible para avanzar en el desarrollo sostenible, en sintonía con la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, recién aprobada por la Asamblea General de las Naciones Unidas. Pese al actual escenario económico mundial, más complejo e incierto que el de los años anteriores y que, al menos en el corto plazo, será menos favorable para la región, es fundamental asegurar los avances en materia de desarrollo social alcanzados en el último decenio y no postergar las asignaturas pendientes en ámbitos en que el progreso ha sido insuficiente.

ECLAC.PUBLICATIONS
from ECLAC.PUBLICATIONS More from this publisher
11.01.2016 Views

Desarrollo social inclusivo: una nueva generación de políticas para superar la pobreza... no implica proveer servicios uniformes para una población heterogénea, sino adaptar dichos servicios para cubrir brechas diferenciadas y asegurar a todos el goce de los derechos. De esta manera, la orientación universalista no está reñida con la focalización, sino que la segunda está al servicio de la primera, sobre la base del reconocimiento de las diferentes condiciones en que se encuentran las personas (por edad, sexo, raza y etnia, nivel socioeconómico o situación laboral, entre otras). Para avanzar hacia la igualdad, el uso de los recursos públicos debe ser eficiente. El principio de eficiencia en la utilización de los recursos públicos destinados a la política social resulta intrínseco a la igualdad, en la medida en que permite potenciar los principios de universalidad y solidaridad sin contraponerlos. No debe entenderse exclusivamente en términos de efectos macro y microeconómicos, sino, en última instancia, como la capacidad para maximizar con recursos escasos los objetivos sociales definidos (CEPAL, 2000 y 2006). Además, las reformas dirigidas a fortalecer los sistemas de protección social también deben regular las opciones de mercado, con normas que velen por adecuadas combinaciones público-privadas, a fin de lograr los objetivos deseados (CEPAL, 2007b, pág. 137). Más allá de los indispensables programas de carácter focalizado, la superación de la pobreza está íntimamente asociada con la superación de las exclusiones y la convergencia de las prestaciones respecto de la amplia gama de las políticas sociales que abarcan, entre otros, a los sistemas de protección social. Como el mercado de trabajo no ha mostrado una suficiente capacidad incluyente, en términos de creación de empleo de calidad ni de cobertura contributiva, no puede ser el único mecanismo para proteger a la mayoría de la población frente a riesgos relacionados, por ejemplo, con las fluctuaciones de ingresos, la salud y el envejecimiento. Por eso la protección social no debe quedar restringida a los mecanismos que ofrece el mundo laboral: el gran desafío es replantearla en el marco de una solidaridad integral donde se combinen mecanismos contributivos y no contributivos (CEPAL, 2006; Cecchini y Martínez, 2011). A su vez, para ampliar la cobertura y la calidad de la protección social es indispensable actuar en los ámbitos de la estructura productiva y del mercado laboral. De no corregirse —al menos parcialmente— las grandes disparidades que existen y se reproducen en esos ámbitos, es difícil que las políticas sociales puedan contribuir a generar un modelo social más inclusivo. Para avanzar, deben plantearse relaciones virtuosas con dinámicas del mercado laboral capaces de ampliar las oportunidades de trabajo decente, ya que el desarrollo histórico de la protección social está vinculado con la legislación laboral, las regulaciones de las condiciones de trabajo y de los despidos, los convenios colectivos, las políticas de capacitación y educación, y las capacidades de supervisión del cumplimiento de las normativas (CEPAL, 2010a). Tras la ampliación de la cobertura de pensiones y salud de la población que ha acontecido en la región en el período reciente, analizada en el capítulo I, subyacen varias causas: la mayor formalización del trabajo en el marco del descenso de las tasas de desempleo y las mejoras sustantivas de la calidad del empleo, la flexibilización de criterios de elegibilidad para la cobertura contributiva y el fortalecimiento de la función de contraloría y regulación del Estado. A su vez, en aras de subsanar las exclusiones de los regímenes contributivos tradicionales, de ampliar coberturas y, en algunos casos, de disminuir la segmentación, se han fortalecido pilares solidarios de la protección social, se han subsidiado regímenes contributivos y se han generado programas focalizados. Por ejemplo, se ha ampliado la cobertura de pensiones no contributivas y de transferencias y servicios a la población en situación de pobreza y, en ciertos casos, a la población vulnerable 4 . B. Avanzar hacia el fortalecimiento y la expansión de las políticas de superación de la pobreza Desde un enfoque integral y de derechos, tanto para garantizar los avances experimentados en el período reciente, como para retomar y profundizar la senda de la reducción de la pobreza y la desigualdad, es indispensable actuar en áreas que, al ser interdependientes, requieren gran coordinación entre los distintos entes a cargo de las políticas, así como acuerdos y pactos entre diferentes actores políticos y sociales, con un horizonte estratégico (véase la 4 Aunque algunas son universales, como la Renta Dignidad en Bolivia (Estado Plurinacional de) y el programa de pensiones en México, D.F., las pensiones no contributivas existentes en la región son principalmente focalizadas. Capítulo IV 125

Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) sección H). La región tiene el enorme desafío de responder al ambicioso Objetivo 1 de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible: poner fin a la pobreza en todas sus formas y en todo el mundo. Como se analizó en el capítulo II, las transferencias de ingresos para la superación de la pobreza —principalmente destinadas a familias con hijos— actualmente constituyen una pieza importante de los sistemas de protección social en la mayoría de los países de América Latina y el Caribe. Se trata de programas de protección social de carácter no contributivo, ya que las familias destinatarias, independientemente de su participación en el mercado de trabajo formal o de su capacidad para realizar contribuciones, reciben transferencias monetarias financiadas por el Estado, a las que se accede sobre todo por criterios de necesidad (Filgueira, 2014). En el capítulo II se plantea que en la región estos planes asumen principalmente la forma de programas de transferencias monetarias condicionadas, aunque abarcan también transferencias no condicionadas y asignaciones familiares. Esos programas han logrado notables efectos, pero, de cara al futuro, se vislumbran varios desafíos para lograr resultados más significativos y sostenibles en la superación de la pobreza y la reducción de la desigualdad. En particular, es clave concebirlos como parte de una política integrada de protección social, seguir ampliando la cobertura y el monto de las transferencias y articularlas con políticas de inclusión laboral y productiva, una oferta universal y de calidad de servicios de salud y educación, y políticas de cuidado y mejorías en la infraestructura rural y urbana (electricidad, agua potable y saneamiento, vivienda y transporte). El fortalecimiento y ampliación de los programas de transferencias de ingresos es un objetivo importante en la región, que debería incluir los siguientes elementos: i) extensión de la cobertura, incorporando el principio de búsqueda activa para llegar a toda la población en situación de pobreza; ii) ampliación de los montos de las transferencias para que sean al menos suficientes para garantizar la superación de la extrema pobreza de todos los integrantes del hogar; iii) articulación con políticas que busquen la universalización de la protección social y creación de sinergias con las políticas sectoriales de carácter universal para impugnar las causas de la pobreza, en especial con las de salud, nutrición y educación, así como con las políticas de cuidado, lo cual, en numerosas ocasiones, implica mejorar la calidad y equidad del acceso a esos servicios (Sojo, 2007); iv) asociación con programas de inclusión laboral y productiva para fomentar el acceso al trabajo decente mediante el incremento de las capacidades y oportunidades de inserción en el mercado formal de trabajo y de generación autónoma de ingresos de las familias en condición de pobreza, tanto en las zonas rurales como urbanas; v) incorporación de la dimensión de género, en particular en el diseño de las condicionalidades, y de políticas pertinentes para los jóvenes y las poblaciones indígenas y afrodescendientes; vi) articulación con políticas relacionadas a la extensión de cobertura y mejorías en la infraestructura rural y urbana (electricidad, agua potable y saneamiento, vivienda y transporte); vii) promoción de un vínculo con el medio ambiente y el territorio, abogando por el fortalecimiento de los mecanismos de protección de la población con relación a los desastres y la búsqueda de respuestas a las desigualdades territoriales. 1. Ampliación del monto y la cobertura de las prestaciones La ampliación de la cobertura poblacional de los programas de transferencia de ingresos no puede estar basada solamente en las demandas expresadas por las personas que viven en condición de pobreza. Por lo general, las que primero reciben los beneficios son las personas y las familias que cuentan con más información sobre las prestaciones, y no las más necesitadas. Por ello es necesario que desde el Estado se busque acercar la oferta pública a las familias mediante mecanismos de búsqueda activa que ya se han puesto en práctica en algunos países de la región: como Chile, con el programa Puente y Chile Solidario, y más recientemente el Brasil, que hizo de este mecanismo uno de los ejes prioritarios del plan Brasil sem Miséria. En relación con el aumento del monto de las transferencias, hay que considerar que la población que vive en condiciones de pobreza o indigencia cuenta con ingresos autónomos, que son insuficientes para superar esa condición 5 . Por lo tanto, además de comparar los montos de las transferencias con las líneas de pobreza e indigencia, Capítulo IV 5 Como se presenen el capítulo I, un cálculo hecho por la CEPAL para 17 países con datos alrededor de 2013 indica que, en promedio, los ingresos laborales representan el 74% del ingreso total de los hogares en situación de pobreza y el 64% del ingreso total de los hogares en situación de indigencia. 126

<strong>Desarrollo</strong> <strong>social</strong> <strong>inclusivo</strong>: <strong>una</strong> <strong>nueva</strong> <strong>g<strong>en</strong>eración</strong> <strong>de</strong> <strong>políticas</strong> <strong>para</strong> <strong>superar</strong> <strong>la</strong> <strong>pobreza</strong>...<br />

no implica proveer servicios uniformes <strong>para</strong> <strong>una</strong> pob<strong>la</strong>ción heterogénea, sino adaptar dichos servicios <strong>para</strong> cubrir<br />

brechas difer<strong>en</strong>ciadas y asegurar a todos <strong>el</strong> goce <strong>de</strong> los <strong>de</strong>rechos. De esta manera, <strong>la</strong> ori<strong>en</strong>tación universalista no<br />

está reñida con <strong>la</strong> focalización, sino que <strong>la</strong> segunda está al servicio <strong>de</strong> <strong>la</strong> primera, sobre <strong>la</strong> base <strong>de</strong>l reconocimi<strong>en</strong>to<br />

<strong>de</strong> <strong>la</strong>s difer<strong>en</strong>tes condiciones <strong>en</strong> que se <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tran <strong>la</strong>s personas (por edad, sexo, raza y etnia, niv<strong>el</strong> socioeconómico<br />

o situación <strong>la</strong>boral, <strong>en</strong>tre otras).<br />

Para avanzar hacia <strong>la</strong> igualdad, <strong>el</strong> uso <strong>de</strong> los recursos públicos <strong>de</strong>be ser efici<strong>en</strong>te. El principio <strong>de</strong> efici<strong>en</strong>cia <strong>en</strong><br />

<strong>la</strong> utilización <strong>de</strong> los recursos públicos <strong>de</strong>stinados a <strong>la</strong> política <strong>social</strong> resulta intrínseco a <strong>la</strong> igualdad, <strong>en</strong> <strong>la</strong> medida<br />

<strong>en</strong> que permite pot<strong>en</strong>ciar los principios <strong>de</strong> universalidad y solidaridad sin contraponerlos. No <strong>de</strong>be <strong>en</strong>t<strong>en</strong><strong>de</strong>rse<br />

exclusivam<strong>en</strong>te <strong>en</strong> términos <strong>de</strong> efectos macro y microeconómicos, sino, <strong>en</strong> última instancia, como <strong>la</strong> capacidad <strong>para</strong><br />

maximizar con recursos escasos los objetivos <strong>social</strong>es <strong>de</strong>finidos (CEPAL, 2000 y 2006). A<strong>de</strong>más, <strong>la</strong>s reformas dirigidas<br />

a fortalecer los sistemas <strong>de</strong> protección <strong>social</strong> también <strong>de</strong>b<strong>en</strong> regu<strong>la</strong>r <strong>la</strong>s opciones <strong>de</strong> mercado, con normas que v<strong>el</strong><strong>en</strong><br />

por a<strong>de</strong>cuadas combinaciones público-privadas, a fin <strong>de</strong> lograr los objetivos <strong>de</strong>seados (CEPAL, 2007b, pág. 137).<br />

Más allá <strong>de</strong> los indisp<strong>en</strong>sables programas <strong>de</strong> carácter focalizado, <strong>la</strong> superación <strong>de</strong> <strong>la</strong> <strong>pobreza</strong> está íntimam<strong>en</strong>te<br />

asociada con <strong>la</strong> superación <strong>de</strong> <strong>la</strong>s exclusiones y <strong>la</strong> converg<strong>en</strong>cia <strong>de</strong> <strong>la</strong>s prestaciones respecto <strong>de</strong> <strong>la</strong> amplia gama <strong>de</strong><br />

<strong>la</strong>s <strong>políticas</strong> <strong>social</strong>es que abarcan, <strong>en</strong>tre otros, a los sistemas <strong>de</strong> protección <strong>social</strong>. Como <strong>el</strong> mercado <strong>de</strong> trabajo no<br />

ha mostrado <strong>una</strong> sufici<strong>en</strong>te capacidad incluy<strong>en</strong>te, <strong>en</strong> términos <strong>de</strong> creación <strong>de</strong> empleo <strong>de</strong> calidad ni <strong>de</strong> cobertura<br />

contributiva, no pue<strong>de</strong> ser <strong>el</strong> único mecanismo <strong>para</strong> proteger a <strong>la</strong> mayoría <strong>de</strong> <strong>la</strong> pob<strong>la</strong>ción fr<strong>en</strong>te a riesgos re<strong>la</strong>cionados,<br />

por ejemplo, con <strong>la</strong>s fluctuaciones <strong>de</strong> ingresos, <strong>la</strong> salud y <strong>el</strong> <strong>en</strong>vejecimi<strong>en</strong>to. Por eso <strong>la</strong> protección <strong>social</strong> no <strong>de</strong>be<br />

quedar restringida a los mecanismos que ofrece <strong>el</strong> mundo <strong>la</strong>boral: <strong>el</strong> gran <strong>de</strong>safío es rep<strong>la</strong>ntear<strong>la</strong> <strong>en</strong> <strong>el</strong> marco <strong>de</strong><br />

<strong>una</strong> solidaridad integral don<strong>de</strong> se combin<strong>en</strong> mecanismos contributivos y no contributivos (CEPAL, 2006; Cecchini y<br />

Martínez, 2011). A su vez, <strong>para</strong> ampliar <strong>la</strong> cobertura y <strong>la</strong> calidad <strong>de</strong> <strong>la</strong> protección <strong>social</strong> es indisp<strong>en</strong>sable actuar <strong>en</strong> los<br />

ámbitos <strong>de</strong> <strong>la</strong> estructura productiva y <strong>de</strong>l mercado <strong>la</strong>boral. De no corregirse —al m<strong>en</strong>os parcialm<strong>en</strong>te— <strong>la</strong>s gran<strong>de</strong>s<br />

disparida<strong>de</strong>s que exist<strong>en</strong> y se reproduc<strong>en</strong> <strong>en</strong> esos ámbitos, es difícil que <strong>la</strong>s <strong>políticas</strong> <strong>social</strong>es puedan contribuir<br />

a g<strong>en</strong>erar un mo<strong>de</strong>lo <strong>social</strong> más <strong>inclusivo</strong>. Para avanzar, <strong>de</strong>b<strong>en</strong> p<strong>la</strong>ntearse re<strong>la</strong>ciones virtuosas con dinámicas <strong>de</strong>l<br />

mercado <strong>la</strong>boral capaces <strong>de</strong> ampliar <strong>la</strong>s oportunida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> trabajo <strong>de</strong>c<strong>en</strong>te, ya que <strong>el</strong> <strong>de</strong>sarrollo histórico <strong>de</strong> <strong>la</strong><br />

protección <strong>social</strong> está vincu<strong>la</strong>do con <strong>la</strong> legis<strong>la</strong>ción <strong>la</strong>boral, <strong>la</strong>s regu<strong>la</strong>ciones <strong>de</strong> <strong>la</strong>s condiciones <strong>de</strong> trabajo y <strong>de</strong> los<br />

<strong>de</strong>spidos, los conv<strong>en</strong>ios colectivos, <strong>la</strong>s <strong>políticas</strong> <strong>de</strong> capacitación y educación, y <strong>la</strong>s capacida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> supervisión <strong>de</strong>l<br />

cumplimi<strong>en</strong>to <strong>de</strong> <strong>la</strong>s normativas (CEPAL, 2010a).<br />

Tras <strong>la</strong> ampliación <strong>de</strong> <strong>la</strong> cobertura <strong>de</strong> p<strong>en</strong>siones y salud <strong>de</strong> <strong>la</strong> pob<strong>la</strong>ción que ha acontecido <strong>en</strong> <strong>la</strong> región <strong>en</strong> <strong>el</strong><br />

período reci<strong>en</strong>te, analizada <strong>en</strong> <strong>el</strong> capítulo I, subyac<strong>en</strong> varias causas: <strong>la</strong> mayor formalización <strong>de</strong>l trabajo <strong>en</strong> <strong>el</strong> marco<br />

<strong>de</strong>l <strong>de</strong>sc<strong>en</strong>so <strong>de</strong> <strong>la</strong>s tasas <strong>de</strong> <strong>de</strong>sempleo y <strong>la</strong>s mejoras sustantivas <strong>de</strong> <strong>la</strong> calidad <strong>de</strong>l empleo, <strong>la</strong> flexibilización <strong>de</strong><br />

criterios <strong>de</strong> <strong>el</strong>egibilidad <strong>para</strong> <strong>la</strong> cobertura contributiva y <strong>el</strong> fortalecimi<strong>en</strong>to <strong>de</strong> <strong>la</strong> función <strong>de</strong> contraloría y regu<strong>la</strong>ción<br />

<strong>de</strong>l Estado. A su vez, <strong>en</strong> aras <strong>de</strong> subsanar <strong>la</strong>s exclusiones <strong>de</strong> los regím<strong>en</strong>es contributivos tradicionales, <strong>de</strong> ampliar<br />

coberturas y, <strong>en</strong> algunos casos, <strong>de</strong> disminuir <strong>la</strong> segm<strong>en</strong>tación, se han fortalecido pi<strong>la</strong>res solidarios <strong>de</strong> <strong>la</strong> protección<br />

<strong>social</strong>, se han subsidiado regím<strong>en</strong>es contributivos y se han g<strong>en</strong>erado programas focalizados. Por ejemplo, se ha<br />

ampliado <strong>la</strong> cobertura <strong>de</strong> p<strong>en</strong>siones no contributivas y <strong>de</strong> transfer<strong>en</strong>cias y servicios a <strong>la</strong> pob<strong>la</strong>ción <strong>en</strong> situación <strong>de</strong><br />

<strong>pobreza</strong> y, <strong>en</strong> ciertos casos, a <strong>la</strong> pob<strong>la</strong>ción vulnerable 4 .<br />

B. Avanzar hacia <strong>el</strong> fortalecimi<strong>en</strong>to y <strong>la</strong> expansión<br />

<strong>de</strong> <strong>la</strong>s <strong>políticas</strong> <strong>de</strong> superación <strong>de</strong> <strong>la</strong> <strong>pobreza</strong><br />

Des<strong>de</strong> un <strong>en</strong>foque integral y <strong>de</strong> <strong>de</strong>rechos, tanto <strong>para</strong> garantizar los avances experim<strong>en</strong>tados <strong>en</strong> <strong>el</strong> período reci<strong>en</strong>te,<br />

como <strong>para</strong> retomar y profundizar <strong>la</strong> s<strong>en</strong>da <strong>de</strong> <strong>la</strong> reducción <strong>de</strong> <strong>la</strong> <strong>pobreza</strong> y <strong>la</strong> <strong>de</strong>sigualdad, es indisp<strong>en</strong>sable actuar<br />

<strong>en</strong> áreas que, al ser inter<strong>de</strong>p<strong>en</strong>di<strong>en</strong>tes, requier<strong>en</strong> gran coordinación <strong>en</strong>tre los distintos <strong>en</strong>tes a cargo <strong>de</strong> <strong>la</strong>s <strong>políticas</strong>,<br />

así como acuerdos y pactos <strong>en</strong>tre difer<strong>en</strong>tes actores políticos y <strong>social</strong>es, con un horizonte estratégico (véase <strong>la</strong><br />

4<br />

Aunque alg<strong>una</strong>s son universales, como <strong>la</strong> R<strong>en</strong>ta Dignidad <strong>en</strong> Bolivia (Estado Plurinacional <strong>de</strong>) y <strong>el</strong> programa <strong>de</strong> p<strong>en</strong>siones <strong>en</strong> México,<br />

D.F., <strong>la</strong>s p<strong>en</strong>siones no contributivas exist<strong>en</strong>tes <strong>en</strong> <strong>la</strong> región son principalm<strong>en</strong>te focalizadas.<br />

Capítulo IV<br />

125

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!