31.07.2015 Views

Huellas culturales rusas y de Europa del Este en Cuba - Temas

Huellas culturales rusas y de Europa del Este en Cuba - Temas

Huellas culturales rusas y de Europa del Este en Cuba - Temas

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

son reveladores <strong>de</strong> las huellas <strong>de</strong> la cultura rusa <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong>, es investigador <strong>de</strong>lInstituto <strong>de</strong> Antropología, y activista <strong>de</strong> la Cátedra Haydée Santamaría <strong>de</strong> laAsociación Hermanos Saíz. Junto con Polina Martinez Shvietsova, es co-autor<strong>de</strong> dos artículos <strong>de</strong> investigación sobre la diáspora post-soviética <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong>, quesaldrán publicados próximam<strong>en</strong>te por Cahiers <strong>de</strong>s Amériques Latines (Francia) ypor la editorial Palgrave (Estados Unidos). Finalm<strong>en</strong>te, nos acompaña JoséMiguel Sánchez, nombre que a muchos no les <strong>de</strong>be <strong>de</strong>cir nada, pero sí Yoss, suseudónimo literario. A<strong>de</strong>más <strong>de</strong> un <strong>de</strong>stacado narrador, un cultivador <strong>de</strong>l género<strong>de</strong> la ci<strong>en</strong>cia ficción —autor <strong>de</strong> libros como Los pecios y los náufragos, Crónicas <strong>de</strong>lmañana <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong>, Se alquila un planeta—, escribió el único <strong>en</strong>sayo que hemospodido publicar <strong>en</strong> <strong>Temas</strong> <strong>de</strong>dicado a las huellas <strong>de</strong> la cultura rusa <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong>, «Loque <strong>de</strong>jaron los rusos». Yoss ha estado p<strong>en</strong>sando sobre este tema, y <strong>en</strong> bu<strong>en</strong>amedida este artículo suyo fue el que nos hizo notar la aus<strong>en</strong>cia <strong>de</strong> una reflexiónsobre esta problemática.En la percepción cubana hay una difer<strong>en</strong>ciación <strong>en</strong>tre rusos, checos, búlgaros,polacos, alemanes <strong>de</strong>l <strong>Este</strong>, etc., pero <strong>en</strong> el intercambio cultural, todos formanparte <strong>de</strong> una franja que más allá <strong>de</strong> las gran<strong>de</strong>s difer<strong>en</strong>cias exist<strong>en</strong>tes <strong>en</strong>tre ellos,forman parte <strong>de</strong> una interacción que solam<strong>en</strong>te se int<strong>en</strong>sificó <strong>en</strong>tre 1959 y1991, por razones obvias. El propósito <strong>de</strong> este panel es ver cuáles <strong>de</strong> esashuellas <strong>culturales</strong> permanec<strong>en</strong> hoy. No se trata <strong>de</strong> analizar las relaciones <strong>en</strong>tre<strong>Cuba</strong> y la Unión Soviética o <strong>en</strong>tre <strong>Cuba</strong> y los países <strong>de</strong> <strong>Europa</strong> <strong>de</strong>l <strong>Este</strong>,porque para eso necesitaríamos más <strong>de</strong> un panel, y no queremos abordar untema <strong>de</strong> esa complejidad <strong>en</strong> una sesión <strong>de</strong>dicada a un aspecto <strong>de</strong> esas relaciones:las huellas <strong>culturales</strong> <strong>de</strong> esos países <strong>en</strong> el nuestro; lo que actualm<strong>en</strong>te queda <strong>de</strong>esos intercambios.En este s<strong>en</strong>tido versa la primera pregunta: ¿qué evi<strong>de</strong>ncias hay <strong>de</strong> las huellas<strong>culturales</strong> <strong>rusas</strong> —y <strong>en</strong> g<strong>en</strong>eral <strong>de</strong> los <strong>de</strong>más países que formaban la Unión <strong>de</strong>Repúblicas Socialistas Soviéticas—, y <strong>de</strong> los países <strong>de</strong> <strong>Europa</strong> <strong>de</strong>l <strong>Este</strong> queeran parte <strong>de</strong>l bloque socialista?ZOIA BARASH: Por supuesto, las huellas <strong>rusas</strong> exist<strong>en</strong>, y a veces hasta se percib<strong>en</strong>no solam<strong>en</strong>te <strong>en</strong> forma <strong>de</strong> nostalgia por la carne rusa o la lavadora Aurika.Fuera <strong>de</strong> todos los vestigios culinarios o <strong>de</strong> los Ladas —que todavía andanpor las calles <strong>de</strong> La Habana—, yo quisiera hablar <strong>de</strong> lo que me es más cercano,el cine. Me parece que una <strong>de</strong> las huellas, por lo m<strong>en</strong>os <strong>en</strong> la memoria colectivacubana, es el cine soviético. Los más viejos seguro se acordarán <strong>de</strong> las semanas<strong>de</strong> cine soviético que se hacían todos los años <strong>en</strong>tre octubre y noviembre, y seexhibía lo mejor <strong>de</strong> la producción soviética <strong>de</strong> aquellos años. Esas semanastuvieron mucho éxito; <strong>de</strong>sgraciadam<strong>en</strong>te se acabaron <strong>en</strong> el 89, como tambiénotras cosas. Mucha g<strong>en</strong>te, y no solo los viejos, están ansiando ver el bu<strong>en</strong> cinesoviético; y los mayores todavía me hablan <strong>de</strong> las películas <strong>de</strong>l <strong>de</strong>shielo, comoEl 41, Cielo <strong>de</strong>spejado, La balada <strong>de</strong>l soldado, El fascismo corri<strong>en</strong>te, <strong>en</strong>tre otras; tambiénse acuerdan mucho <strong>de</strong> Seriozha, <strong>de</strong> La guerra y la paz, Siberiada, y por supuesto,a los jóv<strong>en</strong>es les gusta mucho Tarkovski. Yo todavía no pu<strong>de</strong> investigar elporqué, pero me acuerdo que <strong>en</strong> una retrospectiva <strong>de</strong> este director a principios51


anécdota: hace poco estuve <strong>en</strong> un país <strong>de</strong> <strong>Europa</strong>, y <strong>en</strong> vísperas <strong>de</strong>l 9 <strong>de</strong> mayole digo a una vecina irlan<strong>de</strong>sa: «<strong>Este</strong> es un día sagrado para nosotros los rusos,que fuimos los que ganamos la guerra». Ella, que es maestra <strong>de</strong> historia, concara <strong>de</strong> asombro ante mi aseveración me replica que los norteamericanos fueronlos que ganaron la guerra; sin embargo, <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong>, asociamos automáticam<strong>en</strong>tela Segunda guerra mundial con la imag<strong>en</strong> <strong>de</strong>l soldado soviético y con todas lascosas que sucedieron <strong>en</strong> la URSS <strong>en</strong> ese período; y, para mí, no hay nada quetrasci<strong>en</strong>da más a la muerte que esa gesta <strong>de</strong>l pueblo soviético, que también es<strong>de</strong> las <strong>de</strong>más pot<strong>en</strong>cias aliadas (<strong>Cuba</strong> incluida, por cierto), pero que <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong>visiblem<strong>en</strong>te siempre se ha asociado —y espero que se siga haci<strong>en</strong>do— conlos soviéticos, y si ti<strong>en</strong><strong>en</strong> dudas vean la segunda parte <strong>de</strong> Vampiros <strong>en</strong> La Habana,cuando sale el cartelito que dice «Ein Volk, ein Reich, ein Führer», y avanza contraese cartel un tanque con una estrella roja. Me alegra mucho ver la estrella rojaprotagonizando un performance antitotalitario. En cambio, el tanque que liberael campo <strong>de</strong> conc<strong>en</strong>tración <strong>en</strong> la famosa película italiana La vida es bella, esnorteamericano y ti<strong>en</strong>e una estrella blanca, o sea, <strong>de</strong>l color equivocado (porquelos campos <strong>de</strong> la muerte, incluido Oswiecim / Auschwitz, estaban <strong>en</strong> el Ori<strong>en</strong>teeslavo ocupado por los nazis y liberado por los «rojos»).Solam<strong>en</strong>te quiero <strong>de</strong>cir con esto que para mí, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el punto <strong>de</strong> vista <strong>de</strong> sucontribución al intelecto colectivo <strong>de</strong> la nación, la huella <strong>de</strong> la cultura soviéticay <strong>de</strong> la este-europea —no por gusto m<strong>en</strong>cioné a Aladar— es evi<strong>de</strong>nte.JULIO CID: Voy a empezar haci<strong>en</strong>do una anécdota. En la época <strong>de</strong> losmercaditos, salía una señora <strong>de</strong> uno <strong>de</strong> ellos, y otra le preguntó: «¿qué sacaron?»,y la que salía le respondió: «carne rusa uruguaya». Eso nos da una i<strong>de</strong>a <strong>de</strong> lapres<strong>en</strong>cia <strong>de</strong> los rusos <strong>en</strong> nuestra vida. Me referiré especialm<strong>en</strong>te a la pres<strong>en</strong>ciarusa y <strong>de</strong> <strong>Europa</strong> <strong>de</strong>l <strong>Este</strong> <strong>en</strong> la <strong>en</strong>señanza <strong>de</strong>l arte <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong>. Creo que es una <strong>de</strong>las esferas don<strong>de</strong> más pres<strong>en</strong>te está todavía ese intercambio <strong>de</strong> culturas que seprodujo, y fue así exactam<strong>en</strong>te por la posición que tomaron tanto unos comootros. Esto tuvo tres vías fundam<strong>en</strong>tales para realizarse: una, la más numerosa,la más nutrida, fue la <strong>de</strong> la asist<strong>en</strong>cia técnica que v<strong>en</strong>ía <strong>de</strong> allá hacia acá; otra fuela <strong>de</strong> los miles <strong>de</strong> cubanos que fuimos a estudiar <strong>en</strong> aquellos países; y porúltimo, la que todos conocemos, la <strong>de</strong> las <strong>rusas</strong> que se casaron con cubanos yvinieron a vivir a <strong>Cuba</strong>. Todavía hay algunas que trabajan <strong>en</strong> la <strong>en</strong>señanza, porejemplo, <strong>de</strong> la música; son personas que llevan aquí muchos años.Ese intercambio resulta muy interesante, más allá <strong>de</strong> i<strong>de</strong>ologías y políticasque siempre pue<strong>de</strong>n estudiar los analistas. El campo don<strong>de</strong> más se manifestófue <strong>en</strong> la música, y sobre todo <strong>en</strong> su <strong>en</strong>señanza. Los soviéticos, los checos, lospolacos, los búlgaros, que llegaron a <strong>Cuba</strong>, no eran figuras <strong>de</strong>l arte <strong>en</strong> suspaíses, eran pedagogos, personas que prov<strong>en</strong>ían <strong>de</strong> una aca<strong>de</strong>mia con unatradición mil<strong>en</strong>aria, y vinieron a trabajar con personalida<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l arte <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong>.Entonces había un respeto mutuo, o sea, ellos respetaban a las figuras <strong>de</strong>l artecubano, y estas a su vez a la aca<strong>de</strong>mia que ellos repres<strong>en</strong>taban y que ayudarona instrum<strong>en</strong>tar. Yo pi<strong>en</strong>so que <strong>en</strong> todos los programas y planes <strong>de</strong> estudio <strong>de</strong>música <strong>de</strong> este país esa huella es muy clara. Hay nombres que son imprescindibles,53


por ejemplo, el <strong>de</strong> una rusa que aún trabaja <strong>en</strong> la escuela Manuel Saumell, AlaTarán, que es famosa y ti<strong>en</strong>e un excel<strong>en</strong>te conjunto <strong>de</strong> violines. Innumerablesmúsicos, como Teresita Junco, Guido López Gavilán, Ninoska Fernán<strong>de</strong>z Brito,Frank Fernán<strong>de</strong>z, que son actualm<strong>en</strong>te gran<strong>de</strong>s figuras <strong>de</strong> la música cubana, seformaron al fragor <strong>de</strong> ese intercambio.En teatro hubo también un intercambio bastante sustancial y muy interesante;aquí estuvo un maestro <strong>de</strong> actuación soviético, Afonin, apellido que todavía sepronuncia con respeto por las personas que trabajaban <strong>en</strong> el sector <strong>de</strong> la<strong>en</strong>señanza <strong>de</strong>l teatro. Trabajó mucho, por ejemplo, con el gran actor y pedagogocubano Raúl Egur<strong>en</strong>, y le aportó todo un sistema <strong>de</strong> trabajo que Egur<strong>en</strong> luegollevó a otros. Muchos actores cubanos, <strong>en</strong>tre ellos Albertico Pujols, Luisa Maríay Néstor Jiménez, se formaron bajo la égida <strong>de</strong> Afonin.Del mismo modo sucedió con el circo, <strong>en</strong> el que estábamos <strong>de</strong>sprovistos,y fueron los soviéticos los que formaron la Escuela <strong>de</strong> Circo, que actualm<strong>en</strong>telleva el nombre <strong>de</strong> Yuri Mandish, el pedagogo soviético que la montó, y ahí elintercambio también fue muy fuerte.Hay esferas don<strong>de</strong> la influ<strong>en</strong>cia fue m<strong>en</strong>or, digamos <strong>en</strong> las artes plásticas,porque había un problema <strong>de</strong> conceptos. Ambas escuelas son muy difer<strong>en</strong>tes;la cubana es una escuela <strong>de</strong> la mo<strong>de</strong>rnidad; la rusa, por razones que no vamosa <strong>en</strong>trar ahora a analizar, pero que todos conocemos, era más cerrada, másapegada a las tradiciones, con m<strong>en</strong>or cultura; sin embargo, también nos visitaronexcel<strong>en</strong>tes maestros <strong>de</strong> dibujo que <strong>de</strong>jaron una <strong>en</strong>señanza muy fuerte <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong>,y magníficos maestros <strong>de</strong> diseño teatral.En ballet, a pesar <strong>de</strong> lo que mucha g<strong>en</strong>te pi<strong>en</strong>sa, hubo alguna influ<strong>en</strong>cia, pordos razones: una, porque las danzas <strong>de</strong> carácter fueron impartidas por maestrosy maestras rusos, y otra, porque hay dos nombres relacionados con la escuelarusa que han sido muy importantes para el ballet cubano: M<strong>en</strong>ia Martínez, lafamosa bailarina y Azari Plizetski, que vino como part<strong>en</strong>aire <strong>de</strong> Alicia Alonso.La influ<strong>en</strong>cia <strong>de</strong> ellos se circunscribe al ballet, a la compañía quizás; pero <strong>en</strong> elpasado Festival <strong>de</strong> Ballet, Azari <strong>de</strong>cía que él se sorpr<strong>en</strong>día <strong>de</strong> cómo lo conocíanaquí, y yo p<strong>en</strong>saba, bu<strong>en</strong>o, ¿cuántos Azaris <strong>de</strong>jó él <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong>?»RAFAEL HERNÁNDEZ: Yoss, ¿qué otras evi<strong>de</strong>ncias tú podrías marcar <strong>en</strong> la cultura?YOSS: Para mí es muy paradójico <strong>en</strong>contrarme <strong>de</strong> este lado, dado que <strong>en</strong> unaserie <strong>de</strong> <strong>de</strong>bates yo he sido el que <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el público pone «la mala», y para noper<strong>de</strong>r la costumbre —con todo respeto a los compañeros <strong>de</strong> mesa—, voy aromper un poco con esta especie <strong>de</strong> panegírico <strong>de</strong> la cultura rusa. Yo creo queun pueblo que olvida sus errores está con<strong>de</strong>nado a cometerlos <strong>de</strong> nuevo. Voy ahablar un poco <strong>de</strong> la ley<strong>en</strong>da negra que <strong>de</strong>jó <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong> la pres<strong>en</strong>cia rusa; también<strong>de</strong> las cosas bu<strong>en</strong>as, por supuesto, pero esas las voy a <strong>de</strong>jar para el final.Tomando la palabra don<strong>de</strong> la <strong>de</strong>jó Dmitri, partiré <strong>de</strong> la Segunda guerramundial, y <strong>de</strong>l concepto <strong>de</strong> escon<strong>de</strong>r la verdad <strong>de</strong>bajo <strong>de</strong> la alfombra, y <strong>de</strong>cómo aquí nunca nos <strong>en</strong>teramos, hasta muchos años <strong>de</strong>spués, <strong>de</strong> que el pacto<strong>de</strong> no agresión <strong>de</strong> Ribb<strong>en</strong>trop-Molotov se había cumplido. Todos nos54


preguntábamos por qué tanta <strong>de</strong>sconfianza <strong>de</strong> Roosevelt y <strong>de</strong> Churchill, qu<strong>en</strong>ecesitaron <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tros <strong>en</strong> Teherán y <strong>en</strong> Yalta, para ponerse <strong>de</strong> acuerdo conStalin, aunque <strong>de</strong>spués él se haya comportado bi<strong>en</strong>, y a la larga se ganara laconfianza <strong>de</strong> los otros. Creo que este concepto <strong>de</strong> «escon<strong>de</strong>r la verdad» todavíati<strong>en</strong>e influ<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> la sociedad cubana; la política <strong>de</strong> verticalidad es una <strong>de</strong> laspeores huellas que ha <strong>de</strong>jado la pres<strong>en</strong>cia rusa aquí.Todo el mundo recordará —o al m<strong>en</strong>os los <strong>de</strong> mi g<strong>en</strong>eración— el manual<strong>de</strong> marxismo <strong>de</strong> Konstantinov, que lograba la maravilla <strong>de</strong> explicarlo todo <strong>en</strong>un solo tomo. Muchos recordarán algunas otras cosas, malas her<strong>en</strong>cias <strong>de</strong> losrusos, como ese método ing<strong>en</strong>ieril que se pue<strong>de</strong> llamar «<strong>de</strong> la fuerza bruta»: sialgo no funciona con tres motores pongámosle cuatro. Pero este concepto,con el cual los rusos llegaron al espacio, y mantuvieron durante mucho tiempoun impon<strong>en</strong>te complejo militar-industrial, a la larga perdió la batalla con elocci<strong>de</strong>ntal <strong>de</strong> la Guerra <strong>de</strong> las Galaxias, y precipitó la caída <strong>de</strong> la Unión Soviéticay <strong>de</strong> las fichas <strong>de</strong>l dominó socialista.Vamos a referirnos un poco también a cosas bu<strong>en</strong>as, a la influ<strong>en</strong>cia que laliteratura y el arte rusos tuvieron sobre todos nosotros. Creo que los creadorescubanos —al m<strong>en</strong>os los <strong>de</strong> mi g<strong>en</strong>eración y la anterior— tuvimos el privilegio<strong>de</strong> <strong>en</strong>contrarnos flotando <strong>en</strong> un punto <strong>de</strong> conflu<strong>en</strong>cia <strong>de</strong> dos corri<strong>en</strong>tes: porun lado, lo mejor <strong>de</strong> la tradición mundial anglosajona, que nos llegaba a través<strong>de</strong> Ernest Hemingway, <strong>de</strong> los cu<strong>en</strong>tos norteamericanos, <strong>de</strong> la literatura inglesa;y, por otro, lo mejor <strong>de</strong> la tradición rusa, húngara, búlgara, alemana; porque laRDA cargó —me parece que con cierto <strong>de</strong>recho— con la tradición alemana<strong>en</strong>tera sobre sus espaldas.Creo que la universalidad que ti<strong>en</strong>e <strong>de</strong>s<strong>de</strong> los 70 y los 80 el arte cubano, lacapacidad <strong>de</strong> proyectarse <strong>en</strong> el mundo y llegar a todas partes, se <strong>de</strong>be a estaconflu<strong>en</strong>cia. ¿Cuántos <strong>de</strong> los pintores, músicos, escritores, que hicieron que elnombre <strong>de</strong> <strong>Cuba</strong> sonara <strong>en</strong> el mundo, no bebieron tanto <strong>de</strong> la tradiciónocci<strong>de</strong>ntal como <strong>de</strong> la cubana?Por otro lado, una influ<strong>en</strong>cia extraordinaria la t<strong>en</strong>emos aquí; Dmitri la citó,pero creo que no hizo bastante hincapié <strong>en</strong> ella; a<strong>de</strong>más <strong>de</strong> las <strong>de</strong>c<strong>en</strong>as <strong>de</strong> miles<strong>de</strong> cubanos que fueron a la Unión Soviética, están los no tantos miles, perotambién una cifra notable, que regresaron tray<strong>en</strong>do un pedazo <strong>de</strong> la culturarusa <strong>en</strong> forma <strong>de</strong> esposas, <strong>en</strong> forma <strong>de</strong> hijos —a los cuales <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong> se les dice«agua tibia»— que se convirtieron <strong>en</strong> pu<strong>en</strong>tes <strong>culturales</strong>: <strong>de</strong>masiado rusos paraser completam<strong>en</strong>te cubanos, <strong>de</strong>masiado cubanos para ser completam<strong>en</strong>te rusos,y que durante muchos años fueron, digamos sin temor la palabra, custodios <strong>de</strong>esa her<strong>en</strong>cia: eran los rusitos que se fajaban si uno les <strong>de</strong>cía que la mejor bailarina<strong>de</strong> todos los tiempos no había sido Maya Plisétskaya; los que te <strong>de</strong>cían que elcosmódromo <strong>de</strong> Baikonur era más gran<strong>de</strong> que el <strong>de</strong> Cabo K<strong>en</strong>nedy (y esverdad que lo era). Esta pres<strong>en</strong>cia creo que nunca será lo sufici<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>tereconocida ni m<strong>en</strong>cionada <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong>.Creo que yo terminaba el artículo sobre las huellas <strong>culturales</strong> <strong>rusas</strong> <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong>,que publicó <strong>Temas</strong> hace unos años, afirmando que la principal se podía resumir55


<strong>en</strong> una palabra: nostalgia; y es tan cierto que al cabo <strong>de</strong> veinte años todavíaestamos reunidos aquí evocando aquella pres<strong>en</strong>cia. Cuántos cubanos hablanruso, y cuántos que jamás pasaron <strong>de</strong> jarachó, spasiva, tovarich, aún se acuerdan <strong>de</strong>los muñequitos soviéticos. Pi<strong>en</strong>so que lo que <strong>de</strong>jó la pres<strong>en</strong>cia rusa <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong> fuealgo fundam<strong>en</strong>tal: el contacto con toda una realidad, con un mundoabsolutam<strong>en</strong>te difer<strong>en</strong>te. Tras tantos años bajo la sombra <strong>de</strong>l «american wayof life», la pres<strong>en</strong>cia rusa les vino a <strong>de</strong>jar a los cubanos un m<strong>en</strong>saje muyimportante, quizás inconsci<strong>en</strong>te, quizás casi instintivo, <strong>de</strong> que hay otras maneras<strong>de</strong> hacer las cosas, que hay alternativas.RAFAEL HERNÁNDEZ: ¿Cómo se <strong>en</strong>ti<strong>en</strong><strong>de</strong>n, o se han <strong>en</strong>t<strong>en</strong>dido, a partir <strong>de</strong> suscaracteres nacionales propios, los cubanos con los rusos, los ucranianos, losazherbaianos, los tashk<strong>en</strong>os, los húngaros, etcétera? ¿En qué medida esoscaracteres nacionales difer<strong>en</strong>tes <strong>en</strong>contraron afinida<strong>de</strong>s o diverg<strong>en</strong>cias quesirvieron <strong>de</strong> pu<strong>en</strong>te para la corri<strong>en</strong>te cultural, incluida esta nostalgia <strong>de</strong> quehabla Yoss, a nivel no <strong>de</strong> los gran<strong>de</strong>s teatros u orquestas, sino <strong>de</strong>l contactodirecto que significa el intercambio cultural, como relación <strong>en</strong>tre las personas,como apr<strong>en</strong><strong>de</strong>r <strong>de</strong> los valores <strong>de</strong>l otro, o t<strong>en</strong>er prejuicios o construir estereotipossobre el otro? ¿Qué estereotipos, valores, s<strong>en</strong>timi<strong>en</strong>tos, prejuicios, han existido,<strong>de</strong>s<strong>de</strong> el carácter nacional cubano, y el <strong>de</strong> estos otros pueblos, y cómo seestiman o no <strong>en</strong>tre sí, <strong>en</strong> términos <strong>de</strong> lo culturalm<strong>en</strong>te valioso <strong>de</strong>l otro y lo qu<strong>en</strong>o es tan valioso?ZOIA BARASH: La pregunta es difícil; necesitaríamos un panel <strong>de</strong> sociólogosque nos dieran algunos <strong>de</strong>talles; pero int<strong>en</strong>taré <strong>de</strong>cir algo. Yo recuerdo que lapercepción <strong>de</strong> películas soviéticas cambiaba mucho, las bu<strong>en</strong>as películas t<strong>en</strong>íanla misma aceptación que <strong>en</strong> la Unión Soviética. Me acuerdo <strong>de</strong>l famoso serialDiecisiete instantes <strong>de</strong> una primavera, que tuvo un éxito tan gran<strong>de</strong> que la g<strong>en</strong>te mellamaba a la casa preguntándome: «¿Y dón<strong>de</strong> vive ahora Stirlitz?», el personajeprincipal, y yo contestaba: «En Moscú». Y, cosa insólita, <strong>en</strong> un taxi colectivoconocí a una señora que era espiritista, y ella llamaba al espíritu <strong>de</strong> Stirlitz yhablaba con él, cosas increíbles pero ciertas; hasta ahora lam<strong>en</strong>to no t<strong>en</strong>er suteléfono para llamarla y seguir preguntándole. Una vez le pregunté: «¿En quéidioma uste<strong>de</strong>s hablan?». Hubo una pausa y me contestó: «Nos <strong>en</strong>t<strong>en</strong><strong>de</strong>mosperfectam<strong>en</strong>te bi<strong>en</strong>». Es la percepción nacional <strong>de</strong> cosas <strong>culturales</strong> <strong>rusas</strong>.Ahora, ni siquiera Yoss <strong>en</strong> su magnífico <strong>en</strong>sayo habló <strong>de</strong> un f<strong>en</strong>óm<strong>en</strong>o tansignificativo como los matrimonios interraciales; es un tema muy ampliotambién, pero muy importante. Me parece que, <strong>en</strong> g<strong>en</strong>eral, <strong>en</strong> la sociedadcubana había cierto racismo, no a nivel estatal, sino social. No se trata <strong>de</strong> cuántosrostros negros aparec<strong>en</strong> <strong>en</strong> la televisión, ni <strong>de</strong> cuántos puestos <strong>de</strong> autorida<strong>de</strong>stán ocupados por negros, sino <strong>de</strong> cosas muy personales. Los matrimoniosmixtos que aparecieron a finales <strong>de</strong> los 60, y <strong>en</strong> los 70, poco a poco diluyeronalgo ese rechazo racial que t<strong>en</strong>ían los cubanos <strong>en</strong>tre ellos. Poco a poco sepier<strong>de</strong>n esos prejuicios.56


RAFAEL HERNÁNDEZ: ¿Tú pi<strong>en</strong>sas que esos matrimonios <strong>en</strong>tre rusos y cubanosestimularon <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong> el aum<strong>en</strong>to <strong>de</strong> los matrimonios interraciales?ZOIA BARASH: Por supuesto, y cierta <strong>de</strong>saparición <strong>de</strong> prejuicios, pero a nivelmuy personal. Esos matrimonios tuvieron mucha importancia; a<strong>de</strong>más, quedaronlos hijos, no ti<strong>en</strong>e importancia si los matrimonios se disolvieron <strong>de</strong>spués, elambi<strong>en</strong>te <strong>de</strong> la sociedad estaba cambiando, durante treinta, cuar<strong>en</strong>ta añosel cambio era muy visible, y me parece que esos matrimonios <strong>de</strong>sempeñaronun papel <strong>en</strong> eso.JULIO CID: La anécdota que ha hecho Zoia sobre la espiritista y Stirlitz es unabu<strong>en</strong>a explicación <strong>de</strong> que tal vez por contraste nos acercamos. El alma rusa, y nolo estoy dici<strong>en</strong>do <strong>en</strong> forma peyorativa, es es<strong>en</strong>cialm<strong>en</strong>te trágica; o sea, <strong>de</strong> ciertomodo disfruta el sufrimi<strong>en</strong>to. Para un cubano es todo lo contrario: es la fiesta, larisa. Yo pi<strong>en</strong>so que nos unió, <strong>en</strong> el plano personal, un s<strong>en</strong>tido <strong>de</strong> admiraciónmutua. Los rusos son realm<strong>en</strong>te muy hospitalarios; yo siempre me s<strong>en</strong>tí muybi<strong>en</strong> recibido <strong>en</strong> aquel país; nunca percibí ningún rechazo, incluso <strong>en</strong> mom<strong>en</strong>tosdifíciles <strong>de</strong> las relaciones <strong>en</strong>tre ambos países —<strong>en</strong> los cuales oficialm<strong>en</strong>te se nostrató con cierta frialdad—, a nivel personal vimos lo contrario, como <strong>de</strong>cir:«estamos aquí, no se si<strong>en</strong>tan apartados». Yo creo que son muy solidarios, y quelos cubanos s<strong>en</strong>tíamos eso, sobre todo esa hospitalidad, ese cariño y esa cosa<strong>de</strong>spr<strong>en</strong>dida que ti<strong>en</strong>e el alma rusa. Pi<strong>en</strong>so que ellos nos admiraban por la fiestay la bachata, a<strong>de</strong>más <strong>de</strong> otras cosas: Fi<strong>de</strong>l, la Revolución, también eso incidió <strong>en</strong>que ellos sintieran admiración por nosotros.YOSS: Quiero puntualizar una serie <strong>de</strong> <strong>de</strong>talles. Primero, que esto <strong>de</strong>l carácternacional es una <strong>en</strong>telequia que no ti<strong>en</strong>e s<strong>en</strong>tido; hay cubanos que no sab<strong>en</strong>bailar salsa; los hay rubios <strong>de</strong> ojos azules que no ti<strong>en</strong><strong>en</strong> ningún ruso <strong>en</strong> susancestros; y conozco por lo m<strong>en</strong>os tres o cuatro <strong>rusas</strong>, o <strong>de</strong>sc<strong>en</strong>di<strong>en</strong>tes <strong>de</strong>rusos, que bailan salsa y reguetón <strong>de</strong> una manera nada «eslava». Creo que loscaracteres nacionales son estereotipos que pue<strong>de</strong>n o no correspon<strong>de</strong>r, <strong>de</strong> maneramayoritaria, al carácter <strong>de</strong> un pueblo; pero que, <strong>en</strong> <strong>de</strong>finitiva, son siempreestereotipos.Segundo, creo que es necesario difer<strong>en</strong>ciar una cierta afinidad <strong>en</strong>tre naciones,que se pudiera llamar afinidad política, con cercanías <strong>culturales</strong> o i<strong>de</strong>ntitarias.Tanto los soviéticos como los cubanos estábamos construy<strong>en</strong>do el socialismo,y p<strong>en</strong>sábamos que el comunismo estaba al doblar <strong>de</strong> la esquina. Nosotros losveíamos a ellos como los hermanos mayores: lo habían iniciado todo, t<strong>en</strong>íanlas soluciones, habían llegado más lejos, llegaron al cosmos. Ellos nos veíancomo g<strong>en</strong>tes que habíamos llegado un poquitico más tar<strong>de</strong> a la carrera, peroque t<strong>en</strong>íamos mucho <strong>en</strong>tusiasmo y quizás una manera un poco <strong>de</strong>sor<strong>de</strong>nada<strong>de</strong> hacer las cosas, pero <strong>en</strong> cualquier caso habíamos logrado mant<strong>en</strong>ernosfirmes, mal que bi<strong>en</strong>, cerca <strong>de</strong> un <strong>en</strong>emigo trem<strong>en</strong>do. Había afinidad <strong>en</strong> esto,era como la que pue<strong>de</strong>n s<strong>en</strong>tir los jugadores <strong>de</strong> fútbol <strong>de</strong> distintos países cuandose <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tran, aunque no t<strong>en</strong>gan un idioma común. Los soviéticos y los cubanos57


t<strong>en</strong>íamos el idioma común <strong>de</strong> los sueños, <strong>de</strong> creer, ¿por qué no <strong>de</strong>cirlo?, <strong>en</strong>el comunismo, <strong>en</strong> una sociedad mejor, y <strong>de</strong> estar trabajando, cada uno a sumodo, para lograrla.In<strong>de</strong>p<strong>en</strong>di<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te <strong>de</strong> cualquier acercami<strong>en</strong>to estatal u oficial que sepreconizara, que se basara <strong>en</strong> cuestiones i<strong>de</strong>ológicas, también existió unacercami<strong>en</strong>to personal mediado —creo que Zoia puso, como se dice, el <strong>de</strong>do<strong>en</strong> la llaga— por el exotismo. Pi<strong>en</strong>s<strong>en</strong> <strong>en</strong> lo que era para un cubano, <strong>en</strong> 1959,una rubia <strong>de</strong> ojos azules; era un personaje <strong>de</strong> película yanqui; <strong>de</strong> pronto lleganlas primeras <strong>rusas</strong> rubias <strong>de</strong> ojos azules que no solo no nos <strong>de</strong>spreciaban, sinoque les mostraron a los blancos cubanos que el negro también podía ser bonitoy atractivo. Por cierto, hay que analizar por qué tantos cubanos que fueron alláregresaron con <strong>rusas</strong> y por qué tan pocas cubanas lo hicieron. Con in<strong>de</strong>p<strong>en</strong><strong>de</strong>ncia<strong>de</strong> que pudiéramos p<strong>en</strong>sar que los dirig<strong>en</strong>tes rusos no estaban dispuestos apermitir que sus cuadros se quedaran <strong>en</strong> un país sub<strong>de</strong>sarrollado —lo que yo<strong>de</strong>nomino «machismo-l<strong>en</strong>inismo»—, creo que para los cubanos las <strong>rusas</strong>resultaron mucho más atractivas <strong>de</strong> lo que resultaron, para las cubanas, loshombres rusos.Hubo y hay muchos estereotipos, es cierto: que si t<strong>en</strong>ían mal olor, que sicomían cosas horr<strong>en</strong>das, que si t<strong>en</strong>ían mal gusto. <strong>Este</strong>reotipos todos queaparec<strong>en</strong> <strong>en</strong> una especie <strong>de</strong> novela-testimonio <strong>de</strong> un gran olvidado <strong>de</strong> laliteratura cubana, Luis Manuel García, que escribió un libro que se llamaAv<strong>en</strong>turas eslavas <strong>de</strong> Don Antolín <strong>de</strong>l Corojo y crónica <strong>de</strong>l Nuevo Mundo según Iván elTerrible, don<strong>de</strong> cu<strong>en</strong>ta las experi<strong>en</strong>cias <strong>de</strong> un cubano que va a Rusia y <strong>de</strong> unruso que vi<strong>en</strong>e a <strong>Cuba</strong>.Pero, in<strong>de</strong>p<strong>en</strong>di<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te <strong>de</strong> todas estas cuestiones, había unextraordinario interés hacia las difer<strong>en</strong>cias. Haci<strong>en</strong>do un retruécano, se pue<strong>de</strong><strong>de</strong>cir que estábamos separados por lo que nos unía, y unidos por lo que nosseparaba. Los cubanos tocan el tres y los rusos la balalaika; ellos ti<strong>en</strong><strong>en</strong> esosbailes acrobáticos que mirábamos con mucho respeto y <strong>de</strong>cíamos: «¿<strong>en</strong> quéparte <strong>de</strong> las piernas ti<strong>en</strong><strong>en</strong> el muelle?»; los cubanos y su capacidad <strong>de</strong> bailarcon un cierto ritmo, mi<strong>en</strong>tras los rusos se <strong>en</strong>redaban con la música cubana.Algunos quizás recuer<strong>de</strong>n el conjunto <strong>de</strong> bailes folklóricos rusos <strong>de</strong>l ejércitocubano, don<strong>de</strong> los bailarines también daban unos brincos extraordinarios,aunque <strong>en</strong> vez <strong>de</strong> rubios <strong>de</strong> ojos azules fueran unos mulatos <strong>de</strong> ojos oscuros.Creo que este interés mutuo <strong>de</strong> una nacionalidad por la otra, más allá <strong>de</strong> lapolítica y <strong>de</strong> la i<strong>de</strong>ología, no es más que el reflejo <strong>de</strong> que cuando no exist<strong>en</strong>r<strong>en</strong>cillas, los pueblos siempre terminan <strong>de</strong>scubri<strong>en</strong>do que, <strong>en</strong> tanto quehumanos, sus afinida<strong>de</strong>s son mucho mayores que todas las difer<strong>en</strong>cias<strong>culturales</strong> que puedan t<strong>en</strong>er. Y que inclusive estas, más que una barrera, unfoso insalvable, pue<strong>de</strong>n ser una especie <strong>de</strong> pu<strong>en</strong>te que lleve a las personas <strong>de</strong>países difer<strong>en</strong>tes a conocer otras culturas y, <strong>en</strong> ese s<strong>en</strong>tido, s<strong>en</strong>tirse más ricos.Porque éramos más ricos cuando t<strong>en</strong>íamos la difer<strong>en</strong>cia <strong>de</strong> los rusos; somosmás pobres ahora que, <strong>de</strong> alguna manera, los hemos olvidado.58


DMITRI PRIETO SAMSÓNOV: Comparto totalm<strong>en</strong>te con Yoss esta <strong>de</strong>sconfianza<strong>en</strong> las supuestas culturas nacionales, y más cuando se pone <strong>en</strong> un gran saco lacultura nacional <strong>de</strong> los húngaros, <strong>de</strong> los rusos, <strong>de</strong> los georgianos, <strong>de</strong> losucranianos, que los <strong>de</strong> allá sabemos perfectam<strong>en</strong>te que somos pueblos bastantedifer<strong>en</strong>tes.RAFAEL HERNÁNDEZ: ¿Tú pi<strong>en</strong>sas que un arg<strong>en</strong>tino, un surinamés, y un brasileño<strong>de</strong> la Amazonia se parec<strong>en</strong> más <strong>en</strong>tre sí que un húngaro y un checo? Porqu<strong>en</strong>osotros somos todos latinos, y cuando <strong>en</strong> <strong>Europa</strong> y <strong>en</strong> los Estados Unidos sehabla <strong>de</strong> todos esos pueblos, así se les llama, y seguro que son muy distintos<strong>en</strong>tre sí. ¿Tú dirías que las difer<strong>en</strong>cias <strong>en</strong>tre los pueblos eslavos, más los húngaros,etc., son mayores que la que hay <strong>en</strong>tre las etnias latinoamericanas?DMITRI PRIETO SAMSÓNOV: Eso no es así tampoco. Un indíg<strong>en</strong>a <strong>de</strong> la Amazoniaseguro que lucharía <strong>en</strong> contra <strong>de</strong> que lo metan <strong>en</strong> el mismo saco que a unarg<strong>en</strong>tino <strong>de</strong> Bu<strong>en</strong>os Aires. Eso es, <strong>en</strong>tre otras cosas, lo que explica, <strong>de</strong>s<strong>de</strong>un punto <strong>de</strong> vista <strong>de</strong>l imaginario, la <strong>de</strong>sintegración <strong>de</strong> la Unión Soviética y <strong>de</strong>lbloque <strong>de</strong> Varsovia. Vuelvo a <strong>de</strong>cir que estoy completam<strong>en</strong>te <strong>de</strong> acuerdo conYoss sobre que esto <strong>de</strong> la cultura nacional o <strong>de</strong> la cultura étnica es un granestereotipo. Los surinameses, incluso, hablan sranan-tongo, que no es una l<strong>en</strong>gua,que yo sepa, <strong>de</strong> orig<strong>en</strong> romance. ¿Por qué llamarlos latinos? Quizás los haitianos, quehablan kreyol, ti<strong>en</strong><strong>en</strong> un poco más <strong>de</strong> latinos, pero estas son construccionesque se realizan para simplificar el trabajo; aunque cuando llega el mom<strong>en</strong>to <strong>de</strong>la verdad, muchas veces lo complican.Voy a citar a Willy Brandt, un lí<strong>de</strong>r social<strong>de</strong>mócrata alemán, que pocossab<strong>en</strong> que fue héroe <strong>de</strong> la resist<strong>en</strong>cia clan<strong>de</strong>stina <strong>en</strong> Alemania durante la guerra—honor a qui<strong>en</strong> honor merece—; que vivió mucho tiempo <strong>en</strong> Noruega <strong>en</strong>ese período, y un poco antes también. En una <strong>en</strong>trevista con Oriana Fallaci lecu<strong>en</strong>ta un chiste <strong>de</strong> dos noruegos que viv<strong>en</strong> uno al lado <strong>de</strong> otro, a la orilla <strong>de</strong> unfiordo, y uno va a visitar al otro <strong>de</strong> noche; el otro, sin <strong>de</strong>cir una palabra, sacauna botella <strong>de</strong> aguardi<strong>en</strong>te, pone dos vasos <strong>en</strong> la mesa, los ll<strong>en</strong>a y los dostoman; <strong>de</strong>spués echa la otra vuelta, y la otra; a la cuarta vez, al echar el aguardi<strong>en</strong>te,el visitante levanta el vaso y dice: «Skoll!» (¡salud!), y el anfitrión le dice: «V<strong>en</strong>acá, chico, ¿tú viniste aquí a tomar o a hablar boberías?». Esa difer<strong>en</strong>cia (porejemplo, respecto a los noruegos y otros germánicos) <strong>en</strong> materia <strong>de</strong> locuacidady afecto a propósito <strong>de</strong> la «cultura alcohólica» explica numerosos rasgos <strong>de</strong> esaempatía <strong>en</strong>tre la cultura <strong>de</strong> allá y la <strong>de</strong> acá, porque muchos problemas cotidianos seresolvían a nivel <strong>de</strong> consumo <strong>de</strong> bebidas alcohólicas, y también <strong>de</strong> otrosalim<strong>en</strong>tos, la smetana, el pan negro, etc., que muchos cubanos tuvieron y tuvimosla posibilidad <strong>de</strong> conocer allá. Pero el problema es que esta cultura alcohólica,que tanta importancia ti<strong>en</strong>e <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong> <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la época <strong>de</strong> la plantación esclavista,<strong>en</strong> Rusia resulta que ti<strong>en</strong>e muchas raíces también.Aquí está el sacerdote <strong>de</strong> nuestra Iglesia ortodoxa que no me <strong>de</strong>jará m<strong>en</strong>tir.Suce<strong>de</strong> que si no hubiese sido por la necesidad explícita, cultural, que t<strong>en</strong>ían los59


usos <strong>de</strong> tomar bebidas alcohólicas —como dijo el príncipe Vladimiro—,probablem<strong>en</strong>te Rusia habría sido un país <strong>de</strong> la Liga islámica; pero la mayoría<strong>de</strong> los rusos somos cristianos ortodoxos, no musulmanes. <strong>Este</strong> es otro dato:con un uzbeco o un tártaro la cosa «alcohólica» no hubiese funcionado igual,porque son musulmanes: no <strong>de</strong>b<strong>en</strong> tomar; otro <strong>de</strong>tallito a favor <strong>de</strong> que no setrata <strong>de</strong> la misma cultura.El tema <strong>de</strong> las mujeres es complejo; he conversado con algunas que fueronallá y que mantuvieron relaciones con rusos; y lo que dice Yoss <strong>en</strong> cuanto a esoque él llama «machismo-l<strong>en</strong>inismo» es verdad. Los pot<strong>en</strong>ciales miembros <strong>de</strong>lejército más gran<strong>de</strong> <strong>de</strong>l mundo, como era <strong>en</strong> aquel tiempo el Ejército soviético,no podían emigrar, o t<strong>en</strong>ían dificulta<strong>de</strong>s para hacerlo. Siempre se nos dijo eso;pero <strong>en</strong> el lado cubano pasaba algo parecido. Conozco casos <strong>de</strong> muchachascubanas que t<strong>en</strong>ían relaciones con rusos, que fueron cuestionadas a través <strong>de</strong> lalínea política, por la Unión <strong>de</strong> Jóv<strong>en</strong>es Comunistas, etc. Ese es un tema queamerita un acercami<strong>en</strong>to más profundo, que <strong>de</strong>be trasc<strong>en</strong><strong>de</strong>r a aquel famosointerés «pushkiniano» por el mulato rico, sabrosón, que llega. Esta visión <strong>de</strong>lf<strong>en</strong>óm<strong>en</strong>o ti<strong>en</strong>e, a<strong>de</strong>más, un claro tinte sexista: pues si el macho cubano es tanatractivo, ¿por qué la mulata cubana que llega a Rusia no es capaz <strong>de</strong> <strong>de</strong>rretirlesel corazón a los rusos más fríos?Voy a insistir <strong>en</strong> que la diáspora no es lo mismo que la comunidad, o sea, laspersonas que t<strong>en</strong>emos vínculos con Rusia estamos ahora construy<strong>en</strong>do unacomunidad, que es algo que se construye a nivel <strong>de</strong> imaginario, no existe pornaturaleza; pero la diáspora sí existe, y es una muestra <strong>de</strong> ese «carácter nacional»compartido.Y por último quiero <strong>de</strong>cir lo sigui<strong>en</strong>te. Cuando empezó la perestroika—yo estudiaba Bioquímica <strong>en</strong>tonces— si ponían una película soviética, mis colegasme preguntaban: «¿es AP o PP?». Querían <strong>de</strong>cir antes o <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> la perestroika;y las películas posteriores a ella, no sé cómo, pero <strong>de</strong> algún modo lograban unatrem<strong>en</strong>dísima i<strong>de</strong>ntificación <strong>en</strong> los cubanos. Esa, para mí, es una verda<strong>de</strong>raafinidad <strong>de</strong> nuestros «caracteres nacionales»; todo lo pasamos por el imaginariopolítico. Esta es la her<strong>en</strong>cia que <strong>de</strong> alguna manera nos une; es un puntocompartido <strong>de</strong>s<strong>de</strong> don<strong>de</strong> podremos, <strong>en</strong> un futuro, lograr un diálogo y unaautonomía también compartida, a partir <strong>de</strong> estos pu<strong>en</strong>tes <strong>culturales</strong>.RAFAEL HERNÁNDEZ: En la <strong>en</strong>cuesta que realizamos <strong>en</strong>tre los asist<strong>en</strong>tes antes<strong>de</strong>l inicio <strong>de</strong>l panel, se llegó a los sigui<strong>en</strong>tes resultados: 90% pi<strong>en</strong>sa que sí hayhuellas <strong>culturales</strong> <strong>rusas</strong> y <strong>de</strong> <strong>Europa</strong> <strong>de</strong>l <strong>Este</strong> <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong>; más <strong>de</strong> 30% consi<strong>de</strong>raque lo más estimable <strong>de</strong> esas culturas fueron las artes escénicas, las ci<strong>en</strong>ciasnaturales, la cosmonáutica, la literatura, la música clásica, y los productosalim<strong>en</strong>ticios. Y la inm<strong>en</strong>sa mayoría opinó que lo m<strong>en</strong>os estimable era la músicapopular, los cosméticos y las grabaciones musicales. A la pregunta «evi<strong>de</strong>ncias<strong>de</strong> las huellas <strong>culturales</strong> <strong>rusas</strong> y <strong>de</strong> <strong>Europa</strong> <strong>de</strong>l <strong>Este</strong> <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong>», respondieron lascosas más disímiles: sistema político, estructuras partidarias, fuerzas armadas,60


comunidad que cada día <strong>de</strong>scubro mucho más gran<strong>de</strong> <strong>de</strong> lo que imaginaba?Sé que hay dificulta<strong>de</strong>s socioeconómicas <strong>en</strong> el país, pero estoy conv<strong>en</strong>cida <strong>de</strong>que hace falta un «barrio ruso» don<strong>de</strong> iríamos a curarnos la nostalgia, don<strong>de</strong>hablar ruso, comer los platos típicos <strong>de</strong> allá, etc.RUSLÁN REYES FRYJENKOV: Soy <strong>de</strong>sc<strong>en</strong>di<strong>en</strong>te <strong>de</strong> rusa y cubano, no me consi<strong>de</strong>ro«mitad y mitad», sino completo por ambas partes. Quiero hacerles una preguntaa los panelistas, e incluso a los pres<strong>en</strong>tes: tomando <strong>en</strong> cu<strong>en</strong>ta este tema quehemos abordado <strong>en</strong> el día <strong>de</strong> hoy, y que exist<strong>en</strong> la Unión Árabe y <strong>de</strong>terminadasasociaciones españolas y chinas, ¿consi<strong>de</strong>ran uste<strong>de</strong>s que <strong>de</strong>be existiroficialm<strong>en</strong>te, hoy <strong>en</strong> día, una asociación soviética, o rusa, <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong>? En cuantoa las opiniones que versan sobre lo que hemos absorbido <strong>de</strong> la cultura rusaaquí <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong>, consi<strong>de</strong>ro, ante todo, que la cultura rusa no es <strong>de</strong> tragedia, elalma rusa no es trágica, como se dijo; yo diría que es sincera, y que el s<strong>en</strong>timi<strong>en</strong>toruso es s<strong>en</strong>cillo; ti<strong>en</strong>e esas dos cualida<strong>de</strong>s. Y por otra parte, ¿quién no añora lacalidad y la durabilidad <strong>de</strong> los productos rusos?JULIO TRAVIESO: Más allá <strong>de</strong> lo anecdótico, <strong>de</strong> la Aurika, el vodka, la carne rusa«uruguaya», las mujeres <strong>rusas</strong> —que son bonitas, por supuesto—, y <strong>de</strong> todo lo<strong>de</strong>más, lo fundam<strong>en</strong>tal es ver qué hay <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong>, actualm<strong>en</strong>te, que se relacionamuy <strong>de</strong> cerca con la Unión Soviética. Me parece que la estructura económica<strong>de</strong>l Estado cubano es muy similar a la que había <strong>en</strong> la Unión Soviética, eso esimportantísimo, y a veces lo olvidamos. La estructura partidista tambiénes muy similar. No quiero <strong>de</strong>cir que <strong>en</strong> una y <strong>en</strong> otra no haya habido cambios,pero sí las si<strong>en</strong>to semejantes.También soy <strong>de</strong> los que estudió <strong>en</strong> la Unión Soviética, y fue muy b<strong>en</strong>eficioso,y soy <strong>de</strong> los que añora; pero lo importante para mí, más que recordar el pasado,las huellas <strong>de</strong> la Unión Soviética —me refiero específicam<strong>en</strong>te a la Unión Soviética,no a todo el campo socialista—, es qué huellas va a <strong>de</strong>jar la actual Rusia <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong>.Y me pregunto si una parte <strong>de</strong> esos miles que fuimos a la Unión Soviética, algunavez podremos volver a Moscú, a Volgogrado, a las distintas regiones don<strong>de</strong>estudiamos.ENRIQUE LÓPEZ OLIVA: Aquí faltó, <strong>en</strong> mi opinión, tratar el tema <strong>de</strong> las religiones.Yo, como antiguo profesor <strong>de</strong> religión, creo que es importante t<strong>en</strong>er <strong>en</strong> cu<strong>en</strong>taese aspecto. Des<strong>de</strong> muy temprano, <strong>en</strong> las <strong>de</strong>legaciones cubanas que fueron a laUnión Soviética, había lí<strong>de</strong>res religiosos, como el padre Sardiñas, como RaúlFernán<strong>de</strong>z Ceballos, y eso estableció, indiscutiblem<strong>en</strong>te, una relación interesante<strong>en</strong>tre las iglesias cubanas más abiertas al proceso <strong>de</strong> cambios políticos que seefectuaba <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong>; a través <strong>de</strong>l conocimi<strong>en</strong>to <strong>de</strong> la experi<strong>en</strong>cia socialista,exist<strong>en</strong>te <strong>en</strong> la URSS.También t<strong>en</strong>emos la influ<strong>en</strong>cia <strong>de</strong>l ateísmo <strong>de</strong> los manuales, con todo loque implicó <strong>en</strong> el tratami<strong>en</strong>to <strong>de</strong> lo religioso, que creó, obviam<strong>en</strong>te, una t<strong>en</strong>sióninterna. La pres<strong>en</strong>cia ortodoxa no solam<strong>en</strong>te está <strong>en</strong> un templo reci<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>teconstruido, sino <strong>en</strong> la exist<strong>en</strong>cia <strong>de</strong> muchos miles <strong>de</strong> cubanos practicantes <strong>de</strong> la62


ortodoxia. Conozco cubanos, antiguos militantes <strong>de</strong>l Partido, que se han hechofieles <strong>de</strong> la iglesia ortodoxa rusa. Confieso que eso me <strong>de</strong>sconcertó, eseext<strong>en</strong><strong>de</strong>rse la práctica cristiana-ortodoxa, porque incluso sé <strong>de</strong> evangélicos quese convirtieron <strong>en</strong> ortodoxos.Respecto al resto <strong>de</strong> los países, me parece que <strong>de</strong>be t<strong>en</strong>erse <strong>en</strong> cu<strong>en</strong>ta tambiénla influ<strong>en</strong>cia <strong>de</strong> Polonia, don<strong>de</strong> la pres<strong>en</strong>cia <strong>de</strong> la iglesia católica es muy fuerte,y su efecto <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong>, que fue bastante importante.FABIO GROBART: Me parece que es necesario ver la cultura no solam<strong>en</strong>te <strong>en</strong> loque se ha recibido, sino también <strong>en</strong> lo que hemos apr<strong>en</strong>dido y <strong>en</strong> que hemossido capaces <strong>de</strong> hacernos más nación, más internacionalistas, gracias también aesta pres<strong>en</strong>cia, que no data solo <strong>de</strong> la época <strong>de</strong> la Revolución, sino que es muyanterior. Cuando hablamos, por ejemplo, <strong>de</strong> conocimi<strong>en</strong>to, <strong>de</strong> ci<strong>en</strong>cia, etc., no<strong>de</strong>bemos <strong>de</strong> olvidar a Alexan<strong>de</strong>r von Humboldt, un alemán, que se hizo <strong>de</strong>esa fama estando aquí —se le consi<strong>de</strong>ra el segundo <strong>de</strong>scubridor <strong>de</strong> <strong>Cuba</strong>—, y<strong>de</strong>scubri<strong>en</strong>do <strong>de</strong>spués el Orinoco; regresa a Alemania y se convierte <strong>en</strong> el granci<strong>en</strong>tífico. También t<strong>en</strong>emos huellas <strong>de</strong> la cultura ci<strong>en</strong>tífica rusa <strong>de</strong> la época<strong>de</strong> la primera república, vamos a llamarla así, cuando L<strong>en</strong>in todavía estabacreando la ci<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> la URSS, dici<strong>en</strong>do que ese país t<strong>en</strong>ía que ser un país <strong>de</strong>hombres <strong>de</strong> ci<strong>en</strong>cia, y empezó a darles a los ci<strong>en</strong>tíficos un auge y un tratami<strong>en</strong>toespecial; se fundó la Aca<strong>de</strong>mia <strong>de</strong> Ci<strong>en</strong>cias, ya soviética, y esa, la primeragolondrina, vino aquí, al Instituto <strong>de</strong> Santiago <strong>de</strong> las Vegas, y recogió muestraspara un banco <strong>de</strong> germoplasma que hoy es importantísimo para conocer lag<strong>en</strong>ética <strong>de</strong> las plantas <strong>de</strong>l planeta.Finalm<strong>en</strong>te, <strong>de</strong>spués <strong>de</strong>l triunfo <strong>de</strong> la Revolución, con este proyecto social<strong>de</strong> construcción <strong>de</strong>l comunismo <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong>, nos t<strong>en</strong>dieron la mano no solam<strong>en</strong>telos soviéticos —aunque ellos <strong>en</strong> primer lugar—, sino todos los países <strong>de</strong> <strong>Europa</strong><strong>de</strong>l <strong>Este</strong>, y fueron <strong>de</strong>c<strong>en</strong>as <strong>de</strong> miles <strong>de</strong> dirig<strong>en</strong>tes a formarse allá, <strong>en</strong>viados porel Ministerio <strong>de</strong> Industrias. Che Guevara <strong>en</strong>vió a los futuros administradores aconocer cómo administrar fábricas; porque las fábricas habían sido <strong>de</strong>lcapitalismo y había que preparar cuadros obreros para esas industrias. Tambiénfueron estudiantes, <strong>en</strong>tre ellos muchas mujeres, que quizás no trajeron rusos,pero sí conocimi<strong>en</strong>tos frescos, sangre fresca, y una visión difer<strong>en</strong>te <strong>de</strong>l mundoque sí se podía construir. Y por supuesto, <strong>de</strong>spués empezaron a llegar aquíespecialistas <strong>de</strong> todas las ramas. No hay una sola especialidad, si nos ponemosa p<strong>en</strong>sar, que faltara; hasta la cosmonáutica estuvo pres<strong>en</strong>te. Actualm<strong>en</strong>te, <strong>Cuba</strong>pue<strong>de</strong> jactarse <strong>de</strong> haber apr<strong>en</strong>dido, con mayor o m<strong>en</strong>or efici<strong>en</strong>cia; <strong>de</strong> haberintroducido, mejor o peor, los resultados <strong>en</strong> la práctica social; pero si hoypue<strong>de</strong> trabajar <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la molécula hasta la transfer<strong>en</strong>cia <strong>de</strong> tecnologías <strong>en</strong> empresasmixtas <strong>en</strong> cuar<strong>en</strong>ta países <strong>de</strong>l mundo —que hasta los yanquis están dispuestosa romper parte <strong>de</strong>l bloqueo a fin <strong>de</strong> recibir nuestro conocimi<strong>en</strong>to— eso se<strong>de</strong>be, <strong>en</strong> gran parte, a esa huella que <strong>de</strong>jaron los países socialistas <strong>de</strong> <strong>Europa</strong>, yque no es solo una huella, sino que es una realidad que se pue<strong>de</strong> abrir <strong>de</strong> nuevo.Creo yo que el objetivo <strong>de</strong> este <strong>de</strong>bate es precisam<strong>en</strong>te mirar hacia el futuro.63


Todo lo que se ha creado no lo vamos a <strong>de</strong>jar per<strong>de</strong>rse <strong>en</strong> nuestra g<strong>en</strong>eración,hay una juv<strong>en</strong>tud que ti<strong>en</strong>e que incorporarse a esa visión.DENIA GARCÍA RONDA: Creo que muchas veces aquí se ha responsabilizado ala ex Unión Soviética <strong>de</strong> algunos elem<strong>en</strong>tos que hasta cierto punto no juegancon la cultura cubana, y hay que <strong>de</strong>limitar lo que pue<strong>de</strong> ser una influ<strong>en</strong>cia y loque es una copia. En numerosas ocasiones se han copiado acríticam<strong>en</strong>temétodos, procedimi<strong>en</strong>tos, y hasta se ha int<strong>en</strong>tado imponer tradiciones que noti<strong>en</strong><strong>en</strong> nada que ver con <strong>Cuba</strong>, como el hecho <strong>de</strong> gritar «¡hurra!» <strong>en</strong> el ejército,o <strong>en</strong>tregar el ramo <strong>de</strong> la novia a los mártires. Hay copias más graves como—por poner un solo ejemplo <strong>en</strong>tre muchos— la <strong>de</strong> las metodologías <strong>de</strong> la<strong>en</strong>señanza, basadas <strong>en</strong> tradiciones escolares o pedagógicas <strong>de</strong> la Unión Soviética,y que aquí se calcaron sin t<strong>en</strong>er <strong>en</strong> cu<strong>en</strong>ta nuestras propias tradiciones e historia.Yo estoy satisfecha, pues hoy se ha hablado justam<strong>en</strong>te <strong>de</strong> las influ<strong>en</strong>cias y no<strong>de</strong> esas copias, que muchas veces nos hicieron daño, y que también han <strong>de</strong>jadohuellas, esta vez negativas.POLINA MARTÍNEZ SHVIETSOVA: En estos mom<strong>en</strong>tos soy coordinadora <strong>de</strong> lasegunda g<strong>en</strong>eración y <strong>de</strong> un proyecto socio-cultural <strong>de</strong> los polovinas (hijos <strong>de</strong>matrimonios mixtos). Estoy trabajando <strong>en</strong> el diseño <strong>de</strong> un espacio para nuestracomunidad, los jóv<strong>en</strong>es no creadores y la tercera g<strong>en</strong>eración que ya va creci<strong>en</strong>do.Específicam<strong>en</strong>te, las propuestas van <strong>de</strong>s<strong>de</strong> una exposición colectiva <strong>de</strong> artistasplásticos, hijos <strong>de</strong> matrimonios <strong>en</strong>tre cubanos y ex soviéticas, una multimedia<strong>de</strong> los creadores, hasta el sueño <strong>de</strong> hacer nuestro propio docum<strong>en</strong>tal. Ya está<strong>en</strong>tregada a la editorial Letras <strong>Cuba</strong>nas la antología <strong>de</strong> poesía, narrativa yplástica Cherez paru shagov - En un par <strong>de</strong> pasos, que <strong>de</strong>be estar lista para la próximaFeria <strong>de</strong>l Libro que estará <strong>de</strong>dicada a Rusia.Creo más bi<strong>en</strong> <strong>en</strong> la realidad que vivimos para <strong>de</strong>sarrollarnos <strong>en</strong> el futuro.Estamos anclados e inspirados <strong>en</strong> el pasado y, aunque es válido apr<strong>en</strong><strong>de</strong>r <strong>de</strong> él,hace falta asumirnos <strong>en</strong> un pres<strong>en</strong>te <strong>de</strong> cambios tácticos y estratégicos don<strong>de</strong> lajuv<strong>en</strong>tud, con su <strong>en</strong>ergía y <strong>en</strong>foques alternativos, transform<strong>en</strong> el panorama <strong>de</strong>nuestra invisible comunidad. Es parte <strong>de</strong> mi trabajo hacer nuevas investigaciones,así como profundizar <strong>en</strong> las exist<strong>en</strong>tes, para continuar el estudio <strong>de</strong> las familiasmixtas. Mi proyecto es la unificación <strong>de</strong> toda la juv<strong>en</strong>tud <strong>en</strong> aras <strong>de</strong> un futuromejor para nuestra comunidad, que se cree un estatuto, que t<strong>en</strong>gamos un techoespiritual, creativo y floreci<strong>en</strong>te, y que los vínculos <strong>en</strong>tre <strong>Cuba</strong> y Rusia sean másprósperos.ANTOLÍN BÁRCENAS: Soy rusista por profesión, y rusófilo por vocación y poreducación. Pi<strong>en</strong>so que un elem<strong>en</strong>to omnipres<strong>en</strong>te <strong>de</strong> la huella rusa <strong>en</strong> la realidadcubana está <strong>en</strong> nuestra cultura ci<strong>en</strong>tífica. A lo largo <strong>de</strong> la década <strong>de</strong> los 70, y la<strong>de</strong> los 80, muchísimos se marcharon a aquel país, y <strong>de</strong>f<strong>en</strong>dieron allí sus tesis <strong>de</strong>grado, y <strong>en</strong> la actualidad <strong>en</strong> los consejos ci<strong>en</strong>tíficos <strong>de</strong> cualquier área <strong>de</strong>lconocimi<strong>en</strong>to, tanto <strong>de</strong> las ci<strong>en</strong>cias técnicas como <strong>de</strong> las sociales, siempre sevan a <strong>en</strong>contrar personas que <strong>de</strong>sarrollaron sus trabajos <strong>de</strong> investigación <strong>en</strong> la64


antigua Unión Soviética; es <strong>de</strong>cir, que a mi juicio la pres<strong>en</strong>cia <strong>de</strong> la culturaci<strong>en</strong>tífica rusa se manti<strong>en</strong>e <strong>en</strong> prácticam<strong>en</strong>te todas las áreas <strong>de</strong>l saber <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong>.Se hablaba <strong>de</strong> qué nos unía, qué nos aproximó <strong>en</strong> aquel mom<strong>en</strong>to inicial, siéramos tan difer<strong>en</strong>tes. Yo pi<strong>en</strong>so que el elem<strong>en</strong>to «comunidad <strong>de</strong> proyectosocial y comunidad i<strong>de</strong>ológica» es algo que no se pue<strong>de</strong> obviar al hablar <strong>de</strong>lacercami<strong>en</strong>to <strong>en</strong>tre cubanos y rusos <strong>en</strong> 1959, 60, 61, cuando, con una traducciónmalísima, indigesta, andábamos por la Sierra Maestra recogi<strong>en</strong>do café con Loshombres <strong>de</strong> Panfilov o La carretera <strong>de</strong> Volokolamsk <strong>en</strong> nuestras mochilas, y cuandoterminábamos las tareas <strong>de</strong>l día ese era el tema <strong>de</strong> conversación, por no hablarya <strong>de</strong> elem<strong>en</strong>tos tan impactantes como los gimnastas o el Ballet Bolshoi, cosasque incuestionablem<strong>en</strong>te nos marcaron.Por otra parte, yo me inclinaría, al hablar <strong>de</strong> esta aproximación, a no hacerlo<strong>en</strong> términos <strong>de</strong> nostalgia. Reci<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te le oí <strong>de</strong>cir a Abel Prieto, y me conv<strong>en</strong>ció,que la nostalgia siempre es estéril y paralizante. Hablemos mejor <strong>en</strong> términos<strong>de</strong> añoranza, <strong>en</strong> el término ruso <strong>de</strong> pamyat, la memoria, que es la que se manti<strong>en</strong>ey la que todos somos capaces <strong>de</strong> trasmitirle al otro. Pi<strong>en</strong>so que estamos <strong>en</strong> unmom<strong>en</strong>to <strong>en</strong> el que evi<strong>de</strong>ntem<strong>en</strong>te, como <strong>de</strong>cía algui<strong>en</strong> aquí, nos estamosacercando <strong>de</strong> nuevo a Rusia, y esto ocurre cuando toda la sociedad cubanaanhela abrirse al mundo.LUPE FUENTES: Las personas <strong>de</strong> mi g<strong>en</strong>eración estuvimos también, <strong>en</strong> la etapapioneril —y <strong>de</strong> esto no se ha hablado acá—, muy inspirados <strong>en</strong> los pionerossoviéticos, es <strong>de</strong>cir, la creación <strong>de</strong> la Unión <strong>de</strong> Pioneros <strong>de</strong> <strong>Cuba</strong>, <strong>en</strong> el año 61,fue muy semejante a la que existía <strong>en</strong> la Unión Soviética, y esto fue una épocamuy linda, porque estaba el Palacio <strong>de</strong> Pioneros, los círculos <strong>de</strong> pioneros. Yotuve la oportunidad, <strong>en</strong> el año 1964, <strong>de</strong> viajar al Campam<strong>en</strong>to Internacional <strong>de</strong>Artek; era una niña y allí apr<strong>en</strong>dí esto que se ha m<strong>en</strong>cionado sobre la solidarida<strong>de</strong>ntre los soviéticos y los cubanos, y con el resto <strong>de</strong>l mundo, porque al ser uncampam<strong>en</strong>to internacional había niños <strong>de</strong> muchos países. También quiero <strong>de</strong>cirque para muchos cubanos es un orgullo po<strong>de</strong>r t<strong>en</strong>er un juego <strong>de</strong> muñecasmatrioskas <strong>en</strong> la casa.Se está hablando <strong>de</strong>l Barrio Chino, y <strong>de</strong> que esto no se ha llevado a lo ruso.Yo, aparte <strong>de</strong> mi trabajo <strong>en</strong> la División <strong>de</strong> programas informativos <strong>de</strong> laTelevisión <strong>Cuba</strong>na, soy responsable <strong>de</strong> relaciones públicas <strong>de</strong> la peña Amigos<strong>de</strong> Fangio, una agrupación <strong>de</strong> personas que aman el automovilismo y elmotociclismo. Allí, hace alre<strong>de</strong>dor <strong>de</strong> tres meses, se creó el Club <strong>de</strong> AutosRusos <strong>de</strong> <strong>Cuba</strong>; creo que esto no es muy conocido. El automóvil ruso es el quedurante muchos años ha estado y sigue rondando <strong>en</strong> nuestras calles, glorioso,aguantando, sin piezas <strong>de</strong> repuesto, pero contando con la inv<strong>en</strong>tiva <strong>de</strong> loscubanos.JOEL ECHEVARRÍA: Lo que me ha motivado para hablar es <strong>de</strong>cirle a Ruslán loque pi<strong>en</strong>so sobre la pregunta que hizo, porque nadie más se ha referido a ella.Es la segunda vez que oigo sobre si creemos que es el mom<strong>en</strong>to <strong>de</strong> crear unaasociación eslava. Mi opinión es que ellos ti<strong>en</strong><strong>en</strong> el <strong>de</strong>recho <strong>de</strong> reunirse, <strong>de</strong>65


asociarse <strong>en</strong> torno a algo que los une. Para mí es preocupante que <strong>en</strong> estepaís haya que saltar tantos obstáculos para que se asoci<strong>en</strong> aquellos que ti<strong>en</strong><strong>en</strong>algo <strong>en</strong> común.ROLANDO RIVERO: Nosotros t<strong>en</strong>íamos mucha afinidad con los EstadosUnidos; <strong>en</strong>tonces vi<strong>en</strong>e la pelea. La misión <strong>de</strong> los soviéticos y <strong>de</strong>más paísessocialistas que v<strong>en</strong>ían aquí a <strong>Cuba</strong> <strong>de</strong>bió ser ayudarnos a borrar la malahuella que nos <strong>de</strong>jaba aquel país. Creo que la cumplieron muy discretam<strong>en</strong>te,ellos pudieron hacer mucho más, porque t<strong>en</strong>ían la capacidad. Su cultura esmuy rica, pero aquí se les acogía con mucha reserva, y no se les daba la<strong>en</strong>trada que <strong>de</strong>bieron t<strong>en</strong>er.SANTIAGO PÉREZ: Creo que la proyección estratégica <strong>de</strong> la política exteriornuestra va a t<strong>en</strong>er siempre un vínculo estrecho con Rusia. Y la huella que seha estado m<strong>en</strong>cionando aquí es una base excel<strong>en</strong>te para continuar construy<strong>en</strong>doesa relación y proyectándola. Por ejemplo, <strong>en</strong> el tema <strong>de</strong> las relacioneseconómicas t<strong>en</strong>emos un pot<strong>en</strong>cial trem<strong>en</strong>do con los rusos, <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong>. Hablamos<strong>de</strong> Rusia, pero incluyo a Belarús, a Ucrania y a otros países <strong>de</strong> la ex UniónSoviética. Aquí hay una técnica rusa trem<strong>en</strong>da, una inm<strong>en</strong>sa cantidad <strong>de</strong>tractores, <strong>de</strong> locomotoras, <strong>de</strong> camiones, etc. Creo que es fundam<strong>en</strong>tal sumo<strong>de</strong>rnización y hacer nuevas inversiones <strong>en</strong> estos rubros, como también <strong>en</strong>el petróleo. Actualm<strong>en</strong>te, las industrias petroleras <strong>rusas</strong> son <strong>de</strong> las másimportantes <strong>de</strong>l mundo. El turismo ruso no está creci<strong>en</strong>do más por la crisisactual, pero sal<strong>en</strong> siete millones <strong>de</strong> turistas rusos. Creo que hay un trem<strong>en</strong>dopot<strong>en</strong>cial <strong>de</strong> continuidad <strong>de</strong> esos vínculos <strong>en</strong>tre <strong>Cuba</strong> y Rusia. Existe laposibilidad nuestra <strong>de</strong> ser activos con ese mercado <strong>de</strong> ci<strong>en</strong>to cuar<strong>en</strong>ta millones<strong>de</strong> consumidores; ese es un país inm<strong>en</strong>so; si me refiero a Ucrania son cuar<strong>en</strong>tay siete millones, Belarús, diez millones. Rusia ti<strong>en</strong>e necesidad <strong>de</strong> serviciosmédicos cubanos, los productos <strong>culturales</strong> cubanos están muy pres<strong>en</strong>tes <strong>en</strong>el imaginario cultural ruso, <strong>en</strong> el mercado ruso.ENDONIS LUIS: Son muchas las causas <strong>de</strong> esa afinidad <strong>en</strong>tre los dos pueblos;y una muy importante es el respeto y la admiración mutuas, sobre todo porlas epopeyas que protagonizaron: la <strong>de</strong>rrota <strong>de</strong>l fascismo por el pueblo ruso,con todos los <strong>de</strong>más pueblos que lo ro<strong>de</strong>aban, y la resist<strong>en</strong>cia cubana alimperialismo. Ahora bi<strong>en</strong>, ese respeto que ti<strong>en</strong><strong>en</strong> ellos hacia nosotros, paíspequeño, pobre, <strong>de</strong>sarrapado, con cuadros solam<strong>en</strong>te <strong>en</strong> algunas ramas comola medicina y otras muy contadas, también se <strong>de</strong>bía a la forma <strong>en</strong> queestudiábamos y nos preparábamos los que estuvimos allá. Porque, como seha dicho, la URSS brindó a <strong>Cuba</strong> su capacidad para formar los cuadros quese requerían <strong>en</strong> aquellos mom<strong>en</strong>tos, <strong>en</strong> muchas ramas <strong>de</strong> la producción.Nosotros somos esa huella que no siempre se ve.RAFAEL HERNÁNDEZ: Le paso la palabra al panel. Mi última pregunta ya fue,<strong>de</strong> hecho, formulada durante el <strong>de</strong>bate. Se refiere al futuro <strong>de</strong> estas relaciones.66


DMITRI PRIETO SAMSÓNOV: Trataré <strong>de</strong> referirme a algunos <strong>de</strong> los aspectos que sehan tocado. Yo sí creo posible y necesaria la asociación <strong>de</strong> rusos y <strong>de</strong>sc<strong>en</strong>di<strong>en</strong>tes,<strong>en</strong> <strong>Cuba</strong>. La diáspora rusa supera <strong>en</strong> número a la judía, por ejemplo, y laConstitución cubana da, a<strong>de</strong>más, el <strong>de</strong>recho a asociarse. En ese s<strong>en</strong>tido, quiero,<strong>de</strong> algún modo, agra<strong>de</strong>cer a la Embajada <strong>de</strong> Rusia —están pres<strong>en</strong>tes algunos <strong>de</strong>sus repres<strong>en</strong>tantes—, porque <strong>de</strong>s<strong>de</strong> que empezamos con estos proyectos <strong>en</strong> losaños 90 —las gestiones anteriores no tuvieron éxito—, hemos recibido el mayorapoyo. Ahora, por la parte rusa al m<strong>en</strong>os, ya está el dilema completam<strong>en</strong>te saldado.Sobre pamyat (memoria) a mi modo <strong>de</strong> ver es un bu<strong>en</strong> concepto, pero másque pamyat preferiría pravda: el concepto <strong>de</strong> la verdad, y más que verdad, lajusticia, la sinceridad <strong>en</strong> la expresión <strong>de</strong> la viv<strong>en</strong>cia, y esta pravda nos hace muchafalta <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong>, y no solo <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong>. Sobre el pacto Molotov-Ribb<strong>en</strong>trop y larepartición territorial <strong>de</strong> Polonia, le respondo a Yoss que yo tampoco lo sabía;nosotros, <strong>en</strong> la Unión Soviética, no sabíamos que esos protocolos secretos habíant<strong>en</strong>ido lugar, y fue muy importante <strong>en</strong>terarnos <strong>de</strong> eso, y este <strong>de</strong>s<strong>en</strong>mascarami<strong>en</strong>to<strong>de</strong>l olvido orwelliano es también un aporte importante <strong>de</strong> la cultura rusa a <strong>Cuba</strong>.Hace falta compartir verda<strong>de</strong>s que quizás a veces no se dic<strong>en</strong>. No se trata <strong>de</strong><strong>de</strong>cir como una vez se hizo acá <strong>en</strong> La Habana <strong>en</strong> un espacio <strong>de</strong> <strong>de</strong>bate sobre elperíodo gris: «m<strong>en</strong>os mal que se fueron y se llevaron su cultura, así no t<strong>en</strong>dremosque comer más su asqueroso borsch»; esa es una actitud cultural x<strong>en</strong>ófoba y elrespeto a la alteridad forma parte <strong>de</strong> la cultura.Para contrapesar, voy a dar un dato: mi papá estuvo hace poco <strong>en</strong> Moscú, ytrajo unas tarjetas con el mapa <strong>de</strong>l metro, y <strong>en</strong> la otra cara t<strong>en</strong>ían una foto <strong>de</strong>l Checon la frase <strong>en</strong> español «Hasta la victoria siempre». Fueron editadas por el grupo<strong>de</strong> los comunistas <strong>de</strong> la capital, y estaban repartiéndolas gratuitam<strong>en</strong>te; o sea,<strong>Cuba</strong> está pres<strong>en</strong>te <strong>de</strong> algún modo allá.En cuanto a la religión, <strong>de</strong>bo <strong>de</strong>cir que la iglesia ortodoxa llegó también paraquedarse, a<strong>de</strong>más <strong>de</strong> que exist<strong>en</strong> huellas teológicas <strong>de</strong> Rusia, y no solam<strong>en</strong>tesacerdotes. Yo no sabía lo <strong>de</strong> los sacerdotes cubano-rusos, pero está el p<strong>en</strong>sami<strong>en</strong>to<strong>de</strong> Berdiaev, hay mucho uso <strong>de</strong>l p<strong>en</strong>sami<strong>en</strong>to religioso ruso <strong>de</strong> allá a acá. Parahacer justicia, y m<strong>en</strong>cionar a otros países este-europeos y a la Iglesia católicaromana, recuer<strong>de</strong>n la visita <strong>de</strong>l Papa Juan Pablo II, que era polaco. Yo, comocristiano ortodoxo, me bauticé <strong>en</strong> Nuevo Vedado con el Padre Markel, que fueel fundador <strong>de</strong> nuestra comunidad religiosa.Como conclusión, pi<strong>en</strong>so que hay mucho futuro, pero este <strong>de</strong>be ser crítico.Las asociaciones <strong>de</strong> las que estamos hablando, <strong>de</strong>b<strong>en</strong> ser autogestionadas; y,por otra parte, que este tipo <strong>de</strong> <strong>de</strong>bate —o mejor, diálogo— <strong>de</strong>bería continuar.ZOIA BARASH: A medida que se acercan nuestros países me parece que elfuturo cultural <strong>de</strong> ambos va a ser muy provisorio. En su <strong>en</strong>sayo, Yoss hablaba<strong>de</strong> que a los niños cubanos les gustaba mucho el circo soviético, a la g<strong>en</strong>te legusta el cine ruso; a los teatristas les <strong>en</strong>canta el teatro ruso. Me parece que <strong>en</strong> elfuturo nuestros lazos <strong>culturales</strong> pue<strong>de</strong>n ser muy amplios, y pue<strong>de</strong> ser que algúndía el circo ruso vuelva a La Habana.67


YOSS: Yo creo que una <strong>de</strong> las razones por las que no se crea una asociación espor vergü<strong>en</strong>za; porque los «agua tibia», estos «rezagos» —término que escuchéuna vez oficialm<strong>en</strong>te— <strong>de</strong> la pres<strong>en</strong>cia rusa <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong>, que no huellas; estaspersonas binacionales, bi<strong>culturales</strong>, son a veces un recordatorio incómodo paranuestros dirig<strong>en</strong>tes <strong>de</strong> que el acercami<strong>en</strong>to fue <strong>de</strong>masiado quizás; son elrecordatorio <strong>de</strong> una serie <strong>de</strong> errores que se cometieron por imitación, porcopia; y <strong>de</strong> que a un país no se le impone la simpatía por una cultura. <strong>Este</strong> tipo<strong>de</strong> actitud es la que g<strong>en</strong>era que haya personas que <strong>de</strong> pronto se quedan huérfanas<strong>de</strong> una <strong>de</strong> sus culturas madres, porque la propia cultura rusa <strong>en</strong> <strong>Cuba</strong>, durantecasi veinte años, se ha quedado huérfana. ¿Cuál es el futuro <strong>de</strong> esto? Creo quelos huérfanos pue<strong>de</strong>n ser re-adoptados. Los Estados Unidos y el mundo <strong>en</strong>terocometieron durante muchos años el error <strong>de</strong> ignorar a Rusia, <strong>de</strong> p<strong>en</strong>sar que eraun <strong>en</strong>emigo v<strong>en</strong>cido, <strong>de</strong>struido; y un <strong>en</strong>emigo v<strong>en</strong>cido <strong>de</strong>ja <strong>de</strong> ser un <strong>en</strong>emigo,es algui<strong>en</strong> a qui<strong>en</strong> se <strong>de</strong>be ayudar. Es lo que se hizo <strong>en</strong> la <strong>Europa</strong> <strong>de</strong> posguerracon el Plan Marshall: ayudar a reconstruir a los alemanes, a los italianos, quehabían sido <strong>en</strong>emigos. En eso se soslayó a Rusia —que era v<strong>en</strong>cedora— que,sin embargo, fue capaz <strong>de</strong> emerger <strong>de</strong> sus propias c<strong>en</strong>izas. Y actualm<strong>en</strong>te Rusiaes lo que siempre ha sido, pudo resurgir <strong>de</strong>l <strong>de</strong>sastre económico <strong>en</strong> que lahabían sumido, mafias <strong>de</strong> por medio, <strong>de</strong> guerras <strong>en</strong> Chech<strong>en</strong>ia, <strong>en</strong> NagorniKarabaj. Aunque la política internacional la ignorara, es <strong>de</strong> nuevo una pot<strong>en</strong>ciaeconómica —nunca <strong>de</strong>jó <strong>de</strong> serlo <strong>en</strong> el ámbito militar— a la que hay que t<strong>en</strong>er<strong>en</strong> cu<strong>en</strong>ta.Se habla mucho <strong>de</strong>l turismo, <strong>de</strong> los cli<strong>en</strong>tes rusos, <strong>de</strong> la posibilidad <strong>de</strong> unmercado ruso para la cultura y otros productos cubanos. Creo que eso noscorrespon<strong>de</strong> a nosotros, no nos toca ser pasivos y lam<strong>en</strong>tarnos: «Ah, <strong>en</strong> untiempo los rusos estuvieron, ah, la carne rusa, ah, los muñequitos rusos». Noscorrespon<strong>de</strong> construir ese futuro <strong>en</strong> el que por igual t<strong>en</strong>gan cabida losv<strong>en</strong>ezolanos, los chinos, los norteamericanos, y los rusos también.JULIO CID: Creo que <strong>en</strong> Rusia se ha transitado por una etapa <strong>de</strong> mucha confusión,dispersión, que <strong>en</strong> estos mom<strong>en</strong>tos parece mucho más compleja. Para nada esuna nación idílica, como tampoco lo era antes; pero ahora es un país que sufreuna serie <strong>de</strong> problemas terribles, trem<strong>en</strong>dos.Ahora bi<strong>en</strong>, pi<strong>en</strong>so que, <strong>de</strong> todos modos, existe una relación histórica <strong>en</strong>treambos países, que se manti<strong>en</strong>e. Qui<strong>en</strong>es hayan visto la visita <strong>de</strong> Raúl a Moscú yel <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tro que tuvo con sus antiguos asesores, y haya prestado at<strong>en</strong>ción acosas que allí se dijeron, pue<strong>de</strong> estar <strong>de</strong> acuerdo con lo que aseveró la periodistaque hizo el reportaje: «son personas que actualm<strong>en</strong>te profesan i<strong>de</strong>ologíasdiversas, pero que conservan un nexo muy especial con <strong>Cuba</strong>». En estosmom<strong>en</strong>tos, no hay una comunidad <strong>de</strong> intereses políticos e i<strong>de</strong>ológicos <strong>en</strong>tre<strong>Cuba</strong> y Rusia, como la había anteriorm<strong>en</strong>te, pero sí la hay <strong>de</strong> empatía y <strong>de</strong>relaciones <strong>culturales</strong>.Soy <strong>de</strong> los que pi<strong>en</strong>san que <strong>de</strong>be haber una organización que aglutine a losque <strong>de</strong> algún modo somos <strong>de</strong>udores, por un vía o por la otra, <strong>de</strong> esa comunidad68


<strong>de</strong> intereses que hubo. Hoy he escuchado aquí cosas que había perdido unpoco <strong>de</strong> vista, y me han hecho recordar otras. Todo el mundo recuerda elrestaurante Moscú, pero <strong>en</strong> el Parque L<strong>en</strong>in había una casa <strong>de</strong> la cultura rusapreciosa, don<strong>de</strong> se comía y se tomaba, que también <strong>de</strong>sapareció. Es necesariobuscar que todas esas cosas vuelvan, porque al <strong>de</strong>saparecer el campo socialista,nosotros perdimos una perspectiva cultural valiosa. En cuanto a cine, porejemplo, lo que se ponía <strong>en</strong> las salas y la televisión, fue <strong>en</strong> picada.Habrá que recuperar todo eso y habrá que buscar la verdad <strong>de</strong> muchascosas. Hubo, efectivam<strong>en</strong>te, muchas m<strong>en</strong>tiras que ahora estamos <strong>de</strong>scubri<strong>en</strong>do,pero también se están construy<strong>en</strong>do m<strong>en</strong>tiras sobre la base <strong>de</strong> que hubom<strong>en</strong>tiras; algo que es importante consi<strong>de</strong>rar.RAFAEL HERNÁNDEZ: Muchas gracias al panel, y a las personas que hablaron<strong>de</strong>s<strong>de</strong> el público, por <strong>de</strong>cir cosas difer<strong>en</strong>tes, por escuchar y <strong>de</strong>f<strong>en</strong><strong>de</strong>r posicionesdifer<strong>en</strong>tes. Ese es el objetivo <strong>de</strong> esta sesión, facilitar una reflexión analítica. Yoles agra<strong>de</strong>zco por contribuir a que este sea un espacio no meram<strong>en</strong>te paraverter opiniones, sino para reflexionar sobre problemas y para hacer preguntas,porque muchas veces esas preguntas nos ayudan a todos a p<strong>en</strong>sar más.69

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!