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— 67 —los recursos de la Compania en hombres y dinero.Las negociaciones entabladas con prudenciapor Hartinlig contribuyeron al buen éxito dela pacificacion.Un feliz incidente coadyuvd â que se logrâraun favorable desenlace. Los dos jefes principalesde los rebeldes dejaron de obrar concertados.Causaron su disidencia las negociaciones seguidaspor ambos separadamente para ganarse elfavor de la Compania, y alcanzar con su ayudael poder supremo. Hartinlig supo aprovecharsede esta desunion : hubo proposiciones de acomodo,y cruzâronse emisarios; pero las exageradaspretensiones de Mangkoe-Boemi, que pretendiael poder sobre la mitad de Java, no podian convenirâ la Compania. Mas-Sait, por su parte pediaser jefe supremo de toda la isla, y para apoyarsu reclamacion, envid tropas sobre Mataram,que fueron rechazadas. Furioso Mangkoe-Boemide que su yerno intentase dictarle leyes, se decidid,despues de largos preliminares, en unaentrevista con Hartinlig, â aceptar los ofrecimientosde la Compania.Aprovechândose esta, en 1755, de la abdicacionhecha en su favor por el ultimo Soesochoenan,dividid una parte del interior, llamada distritosaltos. Confirmd en su dignidad â Pakoe-Boesvo-