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— 370 —de las montafïas estân separados por quebradas,que van à dar al mar, y por ningun lado se venllanuras que puedan servir de depdsito y lecho âlos arroyos. No se divisa rio alguno, y la pocaaguaque se advierte, proviene de los torrentesenteramente secos, 6 de pozos abiertos en la arenano léj os de la ribera.En general, las grandes armazones que en estearchipiélago sostienen las principales masas dela roca, son pedazos enormes de granito, no hallândoseen ninguna parte indicios de fuegos subterrâneos.Segunparece, no han experimentado,desde hace muchos siglos otro cambio que el procedentedel trabajo de esa infinidad de insectossubmarinos que han acumulado los corales envarios puntos, y mâs particularmente en aquellosque se hallan defendidos de los grandes vientos.Es una cosa en extremo admirable ver losbrillantes colores de esas madréporas iluminadaspor el sol, al traves de una agua extremadamenteeristalina, que se elevan progresivamentepormesetas,sobrepuestas yseparadasunas de otras, hastaque llegan â tocar â la superficie de las aguas,donde la naturaleza ha puesto un téjmino â suincremento, toda vez que desde el momento quesobresalen del nivel del mar, el aire los descompone,y el movimiento de las aguas los hace pe-