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— 289 -da, mas la administracion holandesa de las coloniasno accedid â su pretension, y à pesar delas repetidas gestiones del Sultan, no reanudd conél sus relaciones hasta despues del aflo de 1714.Segun el contenido del que entdnces celebraronambas partes, la Compania asegurd el monopoliede las especerias. El Sultan observd religiosamenteel tratado, y con su rectitud, unida âlabuena acogida que daba â los europeos, consiguidganarse su consideracion y aprecio.Fué el reinado de este principe uno de los mâsflorecientes de Banjermasin; mas la independenceen que bajo el dominio de los Ultimos sultaneshabian sabido colocarse los gobernadores dela costa oriental, did lugar à revueltas, que éstospromovieren despues de su muerte, aprovechândosede la juventud â inexperiencia del jdvensultan Tamsid, de la dificultad de las comunicaciones,y de las influencias de los comercian-*es boegineses, que las fomentaron. Para hacerlesentrar en su deber se vid precisado el nuevo sopranoà solicitar el auxilio de la CompaniaOtorgdsele esta en virtud de otro convenio queal efecto con él celebrd en 1756; y dominada lainsurreccion, comprendiendo Tamsid que no po-^ conservar bajo el dominio de su autoridad âlas provmcias sublevadas sin tener que soportar