13.07.2015 Views

alfares y hornos romanos en andaluca - Ex officina hispana

alfares y hornos romanos en andaluca - Ex officina hispana

alfares y hornos romanos en andaluca - Ex officina hispana

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Miguel Beltrán LlorisFigura 2.- Alfares de sigillata hispánica, lucernas, paredes finas y barniznegro.2.3.- La década de los ses<strong>en</strong>ta: Incorporación de la Béticaal mundo de la sigillata y atribución bética de la familiaDr. 7-11.Figura 1.- La tabla tipológica de ánforas de Dressel (CIL XV, 2).2.2.- Aproximaciones a los c<strong>en</strong>tros de produccióncerámica.Corresponde a P. Paris y G. Bonsor, la sugestión <strong>en</strong> 1926sobre la fabricación de vasos de paredes finas <strong>en</strong> la Bética, apartir de la publicación de las necrópolis de Baelo Claudia(Paris, Bonsor et alii 1926), opinión que fue recogida mástarde por Comfort con atinados com<strong>en</strong>tarios (1939). En 1946Jiménez Reyna llamó la at<strong>en</strong>ción sobre un horno de plantarectangular <strong>en</strong> Bobadilla (Málaga) dedicado a la cerámicacomún, <strong>en</strong> noticia prácticam<strong>en</strong>te desapercibida, como ocurriócon la publicada <strong>en</strong> 1958 por Jiménez Cisneros sobre los<strong>hornos</strong> de ánforas (Dr. 7-11) localizados (y excavados) <strong>en</strong>Villanueva (Puerto Real, Cádiz) (Jiménez Cisneros, 1958,469 ss). Un año más tarde Pemán recoge numerosasrefer<strong>en</strong>cias, con valor desigual, sobre los <strong>hornos</strong> cerámicosgaditanos, sobre todo de ánforas, <strong>en</strong> noticias que solomodernam<strong>en</strong>te han sido valoradas (Pemán, 1959, 169 ss).Indep<strong>en</strong>di<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te los trabajos teóricos de los años 30(Frank 1936, 87 ss.) y 40 (Call<strong>en</strong>der 1948; Eti<strong>en</strong>ne 1949, 151ss.) sobre aspectos tipológicos o comerciales de las ánforasbéticas, que no tuvieron reflejo <strong>en</strong> la Bética, son los estudiosde los investigadores franceses de la década de los 50(Thév<strong>en</strong>ot 1950), los que tuvieron eco <strong>en</strong> nuestros lares,provocando algunos trabajos (García y Bellido 1951, 230 ss.;1952, 399; id., 1952a, 399; González, 1958, 199) que<strong>en</strong>fatizan el interés de los c<strong>en</strong>tros productores, <strong>en</strong> este casode ánforas <strong>en</strong> el valle del G<strong>en</strong>il (Astigi).2.3.1.- Sigillata.En el año 1966, Sotomayor (1966; 1966a) pres<strong>en</strong>ta a lacomunidad ci<strong>en</strong>tífica las primeras producciones de sigillata<strong>en</strong> la Bética, (Granada) incorporándose así la provincia a lasproducciones hispánicas ya puestas <strong>en</strong> valor internacionaldesde la Monografía de Mezquíriz (1961), que afectabafundam<strong>en</strong>talm<strong>en</strong>te a la Tarracon<strong>en</strong>se y que puso de relieveun inm<strong>en</strong>so vacío <strong>en</strong> nuestro territorio. En el año 1968pres<strong>en</strong>tó nuevam<strong>en</strong>te Sotomayor, <strong>en</strong> el Congreso Nacional deArqueología de Mérida, siete <strong>hornos</strong> de sigillata del mismolugar (Sotomayor 1970, 713 ss.) que produjeron sigillata,cerámica <strong>en</strong>gobada (granat<strong>en</strong>sis), común y materiales deconstrucción (fig.2).2.3.2.- Cerámica <strong>en</strong>gobe rojo.Solo cabe reseñar <strong>en</strong> este mom<strong>en</strong>to la copia de estosrecipi<strong>en</strong>tes detectada por Vegas <strong>en</strong> Munigua, sin localizaciónde los c<strong>en</strong>tros productores (Vegas 1969, 224 ss.).2.3.3.- Lucernas.Luzón (1967, 141 ss.) atribuyó al área de Riotinto (Huelva)formas derivadas de la Dr. 4, las d<strong>en</strong>ominadas “lucernasmineras”, fechadas <strong>en</strong>tre los siglos II y III d. C. y decirculación es<strong>en</strong>cialm<strong>en</strong>te regional. En el mismo año lasexcavaciones de Carteia proporcionan una valva de molde <strong>en</strong>nivel tardío (Woods, Collantes 1967, fig. 15).2.3.4.- Ánforas.Ignorándose el trabajo m<strong>en</strong>cionado de Jiménez Cisneros es lapropuesta de F. Zevi (1966, 208 ss.) <strong>en</strong> el año 1966, <strong>en</strong> susapostillas de la tabla de Dressel, la que pasa por ser la quesitúa por primera vez a una conocida familia de ánforas, lasDr. 7-11, <strong>en</strong> los territorios béticos, a partir de la paleografíade los tituli picti conocidos sobre estos <strong>en</strong>vases, y gracias asu comparación con los pert<strong>en</strong>eci<strong>en</strong>tes a la familia olearia Dr.20.10


Alfares y <strong>hornos</strong> <strong>romanos</strong> <strong>en</strong> Andalucía. Historiografía de la investigación y claves de lecturaCercano es el trabajo conjunto de Ponsich y Tarradell (1965)sobre las industrias de salazón del mediterráneo occid<strong>en</strong>tal,que s<strong>en</strong>tó las bases de futuros estudios económicos, einsisti<strong>en</strong>do <strong>en</strong> el valor de los pequeños recipi<strong>en</strong>tes asociadosa las factorías (ampulla) destinados al garum de alta calidad.En 1967, <strong>en</strong> el Congreso Nacional de Arqueología deMahón, pres<strong>en</strong>tó M. Sotomayor el resultado de la primeraexcavación de los <strong>hornos</strong> del Rinconcillo de Algeciras(Sotomayor 1969, 389 ss.), que durante muchos años hanconstituido la única refer<strong>en</strong>cia de fábrica firme para laproced<strong>en</strong>cia de determinadas ánforas béticas. Sotomayorresaltó los tipos fabricados y la estructura del horno quecomparó a los descubrimi<strong>en</strong>tos de Puerto Real realizados porJiménez Cisneros.Dejando a un lado las precisiones tipológicas de Tchernia(1967, 216 ss.) sobre la forma Dr. 20, <strong>en</strong> el año 1965asistimos al primer corpus g<strong>en</strong>eral de estampillas deCall<strong>en</strong>der, que ha supuesto un importante punto de partidasobre todo <strong>en</strong> el estudio epigráfico de las ánforas olearias, apesar de su ord<strong>en</strong>ación alfabética y no nominal (Call<strong>en</strong>der1965). En 1967 debemos reseñar el trabajo de De la Peñasobre <strong>alfares</strong> y marcas del Guadalquivir (De la Peña, 1967,129 ss ) y a final de la década los sugestivos com<strong>en</strong>tarios deDomergue (1969) sobre la producción de ánforas y ladrillos<strong>en</strong> Baelo.2.4.- La década de los set<strong>en</strong>ta. Trabajos de síntesis ynuevos descubrimi<strong>en</strong>tos el : vino bético y la sigillata deAndujar. Comi<strong>en</strong>zan las cerámicas comunes.2.4.1.- SigillataSigue si<strong>en</strong>do Sotomayor el que <strong>en</strong> el año 1972 ofrece laprimera noticia sobre el segundo c<strong>en</strong>tro de producción desigillata bética <strong>en</strong> Andújar (1972, 1973), llamado aconvertirse <strong>en</strong> uno de los focos más significativos de lap<strong>en</strong>ínsula ibérica gracias a un proceso de excavacionesininterrumpidas, desde dicho mom<strong>en</strong>to hasta 1981(Sotomayor 1977, 1977-78; Sotomayor, Roca, Sotomayor1979) (fig. 3). En dicho mom<strong>en</strong>to ve la luz además la tesisdoctoral de Serrano (1976; 1979) sobre los <strong>hornos</strong> deGranada.2.4.2.- “Las cerámicas de barniz rojo julioclaudias”Corresponde la d<strong>en</strong>ominación a Remesal (Remesal et alii1977, 1179) a propósito de la difusión de estas cerámicas <strong>en</strong>Baelo, con una difusión int<strong>en</strong>sa <strong>en</strong> yacimi<strong>en</strong>tos béticos hastaMálaga y Corduba. Están copiando los repertorios primitivosde la TSI.2.4.3.- Paredes finas.En este mom<strong>en</strong>to solo están las alusiones de Vegas (1973,85) recogi<strong>en</strong>do la noticia de Bonsor. Más tarde se dan aconocer las producciones de Andújar, un unicum hasta lafecha, (Sotomayor, Pérez, Roca, 1976, 111 ss; Sotomayor,Roca, Sotomayor 1979). Este taller de mediados del s. I d.C., produjo las formas Mayet XXV y XXVIII con decoraciónar<strong>en</strong>osa. Estando todavía inédito, no fue recogido <strong>en</strong>toncesFigura 3.- Terra sigillata hispánica. Andújar. Formas con decoraciónburilada (seg. Sotomayor, Roca, Fernández).por Mayet <strong>en</strong> su conocida monografía (1975) <strong>en</strong> la queplanteó, con base <strong>en</strong> la d<strong>en</strong>sidad de hallazgos, la producción<strong>en</strong> la Bética de vasos de sus formas XXXIV a XLI, <strong>en</strong>treellos las conocidas series d<strong>en</strong>ominadas de “cáscara dehuevo”, producciones que atribuyó a la obra de una solag<strong>en</strong>eración (fig.4).2.4.4.- Cerámica de <strong>en</strong>gobe rojo pompeyano.Surg<strong>en</strong> las imitaciones <strong>en</strong>seguida <strong>en</strong> el ámbito hispánico y <strong>en</strong>la Bética se han id<strong>en</strong>tificado por Vegas <strong>en</strong> estratostardorrepublicanos de Sevilla y <strong>en</strong> Lacipo (Casares, Málaga)(Vegas 1973, 48 ss.).2.4.5.- Cerámica común.Los descubrimi<strong>en</strong>tos de Andújar no se conc<strong>en</strong>traron solo <strong>en</strong>el estudio de la sigillata, pues pronto fue abordado el estudiomonográfico de las producciones comunes del c<strong>en</strong>tro, queconstituy<strong>en</strong> la parte sobresali<strong>en</strong>te de las cerámicas de estetaller (Serrano 1976, 215 ss.), que se unieron a las de laCartuja de Granada (Gamer 1972, 152 ss.), estudiadamonográficam<strong>en</strong>te por Serrano (1978). En ambos <strong>hornos</strong> fuepredominante la cerámica común, tejas y ladrillos, ocupandolas sigillatas el segundo lugar. En el primero además seconstató la fabricación de lucernas (Sotomayor 1979, 465ss.).11


Miguel Beltrán LlorisEn la reunión de Roma de 1974 se planteó, desde los <strong>alfares</strong>conocidos, la exist<strong>en</strong>cia del vino bético <strong>en</strong> torno a las formasDr. 1 y Dr. 2-4 (Beltrán Lloris 1977; id. 2001, 446.). Endicha línea es mérito de A. Tchernia, <strong>en</strong> 1971 (Tchernia1971, 41), la atribución al sur de Hispania de una nuevaforma, la Ha. 70, t<strong>en</strong>ida hasta el mom<strong>en</strong>to como salazonera.Después el pecio de Port V<strong>en</strong>dres II (Colls, Eti<strong>en</strong>ne et alii1977, 33 ss.), demuestra la proced<strong>en</strong>cia de la Ha. 70 y de sucont<strong>en</strong>ido, el vino bético, con análogas conclusiones para laDr. 28 (Colls, Eti<strong>en</strong>ne et alii 1977, 47).Figura 4.- Cerámica de paredes finas de la Bética (seg. Mayet). Taller deAndújar (seg. Roca et alii).2.4.6.- Ánforas.“Las ánforas romanas <strong>en</strong> España” de M. Beltrán (1970),significan el primer int<strong>en</strong>to de sistematización, <strong>en</strong>tre otrascuestiones, de las producciones hispánicas de ánforas,especialm<strong>en</strong>te las béticas, que fueron agrupadas <strong>en</strong> seisformas, parti<strong>en</strong>do de Dressel y añadi<strong>en</strong>do al el<strong>en</strong>co bético lasnuevas formas II a y b, <strong>en</strong>tre otras novedades, poni<strong>en</strong>doénfasis <strong>en</strong> los contextos de las ánforas y <strong>en</strong> los aspectosrelacionados con los talleres productores. Se llevó a caboigualm<strong>en</strong>te la recogida de cierto número de <strong>alfares</strong> de lacosta malagueña y granadina y de la bahía de Cádiz y seplanteó como argum<strong>en</strong>to la continuidad del comercio béticoaceitero <strong>en</strong> el Bajo Imperio.En la pres<strong>en</strong>te década las dos convocatorias de la EscuelaFrancesa de Roma, <strong>en</strong> 1971 y 1974, situaron <strong>en</strong> el foro de ladiscusión ci<strong>en</strong>tífica las producciones béticas de aceite <strong>en</strong> elTestaccio de Roma (Rodríguez Almeida 1972, 107 ss.) y elconjunto de las formas de salazones béticas y sus <strong>hornos</strong>, asícomo la problemática de la producción del vino <strong>en</strong> el mismoámbito (Beltrán Lloris 1977, 97 ss.).En 1978, publicó Rodríguez Oliva un trabajo, prácticam<strong>en</strong>tedesapercibido, <strong>en</strong> el que se docum<strong>en</strong>taban los restos de unaalfarería de producción mixta (material de construcción ycerámica común y ánforas de la familia Dr. 7-11) <strong>en</strong>Barbésula (San Roque) (Rodríguez Oliva 1978, fig. 2). En elmismo año se publican las consecu<strong>en</strong>cias del horno deRancho Perea (San Isidro de Guadalete) (Chic, Giles y Sáez1978, 43 ss.) y finalm<strong>en</strong>te breves notas sobre los <strong>hornos</strong> delos Cipreses (Puerto de Santa María) y el Olivar de losVal<strong>en</strong>cianos (Puerto Real) (López de la Ord<strong>en</strong>, Pérez López1979-80, pp. 51-54; López de la Ord<strong>en</strong> 1979-80a, pp. 59-62).En el valle del Betis, hasta las trasc<strong>en</strong>d<strong>en</strong>tales prospeccionesde Ponsich (Ponsich 1974, id. 1979), no <strong>en</strong>contraremostrabajos referidos a las producciones olearias. Más tarde sonlos trabajos de J. Remesal (1977-1978, pp. 87 ss.), losprimeros que de forma ci<strong>en</strong>tífica abordan el estudio de losc<strong>en</strong>tros productores d<strong>en</strong>tro del mecanismo económico de laBética, sigui<strong>en</strong>do <strong>en</strong> las estampillas el sistema nominal deord<strong>en</strong>ación de Dressel. En dicho mom<strong>en</strong>to sigue si<strong>en</strong>dodeficitario el conocimi<strong>en</strong>to de los c<strong>en</strong>tros de producción apesar de algunos <strong>hornos</strong>, como el de la Catria, que Remesalda a conocer parcialm<strong>en</strong>te <strong>en</strong> el año 1978 (Remesal 1977-78,92 ss.). Al mismo tiempo resurge con fuerza el progreso de lainvestigación del Testaccio de Roma, básico para la puesta aldía de las ánforas béticas olearias, con los trabajos deRodríguez Almeida sobre los aspectos topográficos y ladistribución cronológica de los hallazgos (RodríguezAlmeida 1972, 113 ss.; 1977, 203 ss.) con firmesconclusiones sobre los mercatores de aceite y clarificando laord<strong>en</strong>ación nominal de los sellos (Rodríguez Almeida 1979,873 ss.).En 1978 el Primer Congreso Internacional sobre “Produccióny el comercio del aceite <strong>en</strong> la Antigüedad” (AA.VV. 1980),supuso una puesta al día de los problemas sobre las ánforasDr. 20, aunque los aspectos productivos siguieron ligados alestudio de las figlinae a través de la información epigráfica(Remesal 1980, 131 ss.; Rodríguez Almeida, 1980, 57 ss.).2.4.7.- Final.Termina así esta fructífera década que ha puesto de relieve <strong>en</strong>lo internacional, aspectos de relevancia, como el valor de laarqueología submarina (Parker 1992), la necesidad de lainvestigación directa de los c<strong>en</strong>tros de producción cerámica yel carácter imprescindible de los análisis petrológicos de laspastas (Peacock 1974, 232 ss.;1977, 261 ss.).2.5.- Década de los och<strong>en</strong>ta: el afianzami<strong>en</strong>to de lasánforas olearias de la mano del Testaccio. Se define yamplía el área de la sigillata y se valoran las produccionesde lucernas.2.5.1.- Ánforas.Abre la década el 2º congreso internacional sobre“Producción y comercio del aceite <strong>en</strong> la Antigüedad” (AA.VV. 1982), con las refer<strong>en</strong>cias sobre uno de los primerosc<strong>en</strong>tros excavados, pero de forma incompleta, <strong>en</strong> el valle delBaetis, el del Tejarillo, que proporcionó dos <strong>hornos</strong>,docum<strong>en</strong>tando la producción de ánforas y sellos asociados,12


Alfares y <strong>hornos</strong> <strong>romanos</strong> <strong>en</strong> Andalucía. Historiografía de la investigación y claves de lecturadesde el s. II (Dr. 20) al III d. C. (Dr. 23 y Tejarillo I – III)(Remesal 1983, 119 ss.), refer<strong>en</strong>cias que se un<strong>en</strong> a lasescasas interv<strong>en</strong>ciones arqueológicas <strong>en</strong> otros <strong>alfares</strong> fr<strong>en</strong>te ala proliferación de trabajos sobre la epigrafía de la formaDres. 20 y el Testaccio.En el año 1984, la monografía de S. Keay sobre las Lateroman amphorae. (Keay 1984), significa el punto dearranque y refer<strong>en</strong>cia obligada para el conocimi<strong>en</strong>to de lasproducciones tardorromanas <strong>en</strong>tre el siglo III y el VII d. C.,incorporando de forma sustantiva una nutrida serie de<strong>en</strong>vases bajo la d<strong>en</strong>ominación de “southern Spanish origin”,que aglutinó inicialm<strong>en</strong>te producciones de la lusitania y de labética.En este mom<strong>en</strong>to, al tiempo que se prolongan determinadasprospecciones <strong>en</strong> el valle del Guadalquivir, de la mano dePonsich (1982, 173 ss.) (fig. 5), los trabajos de G. Chic (1985y 1988) marcan el primer esfuerzo por llevar a cabo,parti<strong>en</strong>do de Bonsor y Ponsich, el corpus de las estampillasepigráficas olearias del Baetis. Toma ahora int<strong>en</strong>sidad elestudio de los c<strong>en</strong>tros productores de ánforas at<strong>en</strong>di<strong>en</strong>do a lacomposición de las pastas, y al estudio de las láminasdelgadas según las áreas de fabricación (Martin-Kilcher etalii 1985, 173 ss; Peacock y Williams 1986, 14, 17-19).Entre otros trabajos (Mayet, 1986, 285 ss.), se produc<strong>en</strong>corpora internacionales de sellos sobre la Dr. 20 a cargo deRemesal (1986) y de tituli picti severianos por RodríguezAlmeida (1989). En 1989 se inician las excavaciones <strong>en</strong> elMonte Testaccio de Roma, bajo la dirección de Blázquez,Remesal y Rodríguez Almeida (1994; Blázquez 2001, 32 ss.;Rodríguez Almeida 2001, 1279 ss.), confirmando lasexcavaciones que dicho lugar fue ante todo un basureroestatal del aceite de la Annona, vital <strong>en</strong> su influ<strong>en</strong>ciaeconómica <strong>en</strong> la Bética.En lo relativo a los c<strong>en</strong>tros de producción de ánforas desalazones, cabe reseñar los trabajos de Beltrán y Mora (1982,149 ss.) sobre el alfar de Torrox <strong>en</strong> la costa malagueña, losresultados de Cerro del Mar y Manganeto (Arteaga 1984, 34ss.; 1985, 177 ss.) y los de Haza Honda y Pu<strong>en</strong>te Carranque,que fabricaron tipos análogos a los de Puerto Real (Loza,Beltrán Fortes 1988, 991 ss.). En el ámbito gaditano resaltala prospección del alfar de el Olivar (Chipiona) ( Ramos1981, 5 ss.).Completa el panorama, <strong>en</strong> 1989, la interv<strong>en</strong>ción <strong>en</strong>excavación de urg<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> Huerta del Rincón(Torremolinos)(Baldomero, Serrano, 1991, 354 ss.), <strong>en</strong> laC/Gregorio Marañón de Cádiz (Blanco, 1993, 78 ss.) y eltrabajo de síntesis económica de Ponsich de 1988 sobre elaceite de oliva y las salazones <strong>en</strong> el que insistió <strong>en</strong> lalocalización de nuevos <strong>alfares</strong>, como <strong>en</strong> el Chorruelo(Algeciras) (Ponsich, 1988, 49 ss.).Finalm<strong>en</strong>te, <strong>en</strong> 1985 vieron la luz los materiales de lasexcavaciones de Colchester, <strong>en</strong> las que se id<strong>en</strong>tificó porSealey (1985, 96) una variante de pasta de las ánforas Dr. 2-4atribuida al Guadalquivir, <strong>en</strong> propuesta que no recibió elesperado eco por los investigadores.2.5.2.- Sigillata.Esta década ve la prolongación de las excavaciones delc<strong>en</strong>tro de Andújar y sobre todo los primeros resultados de losestudios llevados a cabo que sitúan el complejo <strong>en</strong>tre losgrandes c<strong>en</strong>tros productores de Hispania, juntam<strong>en</strong>te con lasproducciones riojanas. Los trabajos llevados a cabo permit<strong>en</strong>establecer las grandes líneas de la evolución de esta familiade la sigillata, cuyo inicio se coloca <strong>en</strong> la primera mitad dels. I d. C., detectándose influ<strong>en</strong>cias significativas del mundoitálico <strong>en</strong>tre sus fu<strong>en</strong>tes de inspiración.La importancia de los descubrimi<strong>en</strong>tos llevados a cabo <strong>en</strong> ladécada anterior y la necesidad de objetivar y asimilar toda lainformación producida, provoca la Mesa redonda del MuseoArqueológico nacional (AA.VV. 1983) y ve la aparición deuna monografía sobre la sigillata hispánica debida a Mayet(1984) que sitúa definitivam<strong>en</strong>te a Andújar <strong>en</strong>tre los grandescomplejos regionales (con Tritium) y a Granada comomodelo de taller de difusión local, planteando además lasestructuras de producción y recogi<strong>en</strong>do un catálogo de sellos.Atribuye igualm<strong>en</strong>te Mayet al taller de Andújar, a partir deanálisis de Picon las d<strong>en</strong>ominadas producciones de barnizrojo julioclaudio (1984, 16) que Serrano desde losdescubrimi<strong>en</strong>tos de Los Castillones (Granada) d<strong>en</strong>ominó“imitación de cerámica aretina” (1988), pero que también seprodujeron <strong>en</strong> Peñaflor (Martínez Rodríguez 1989) <strong>en</strong> cuyoámbito se conoc<strong>en</strong> piezas defectuosas y restos de alfareríasligadas al ánfora Dr. 20.En el mismo año lleva a cabo su síntesis Juan Tovar quereúne <strong>en</strong> dos trabajos la práctica totalidad de los talleresconocidos hasta la fecha <strong>en</strong> Hispania y lógicam<strong>en</strong>te <strong>en</strong> laBética (1984, 1985). Ti<strong>en</strong>e lugar también otra granaportación de Mezquíriz que pone al día su tesis de 1961incorporando y valorando las novedades béticas y el listadode oficinas con sellos (1985).Pero esta década es también la de la ampliación de losc<strong>en</strong>tros alfareros, con el descubrimi<strong>en</strong>to de un segundoc<strong>en</strong>tro, el Albaicín, <strong>en</strong> Granada (Sotomayor, Sola, Choclan1984) y se localizan otros <strong>en</strong> territorio de Málaga <strong>en</strong> SingiliaBarba, <strong>en</strong> el Castillón (Antequera) (Serrano Ramos, At<strong>en</strong>cia1983; Serrano 1986), y <strong>en</strong> Alameda (Málaga)(SerranoRamos, At<strong>en</strong>cia, Rodríguez Oliva 1984).2.5.3.- Común.El alfar de Torrox, además de las ánforas produjo cerámicasde mesa variadas y dolia (Rodríguez Oliva, At<strong>en</strong>cia 1983,226 ss.), además de morteros, y <strong>en</strong> 1988 se publica un hornode planta circular y pasillo c<strong>en</strong>tral <strong>en</strong> Vélez Málaga (Recio etalii 1988, 21 ss.) que produjo cerámicas comunes nodefinidas y materiales de construcción. También de dichomom<strong>en</strong>to son los dos <strong>hornos</strong> de Peñarrubia (Málaga)nuevam<strong>en</strong>te con cerámicas comunes (jarros, cont<strong>en</strong>edores) y13


Miguel Beltrán LlorisFigura 5.- Alfares olearios <strong>en</strong> el valle del Guadalquivir (seg. Ponsich).14


Alfares y <strong>hornos</strong> <strong>romanos</strong> <strong>en</strong> Andalucía. Historiografía de la investigación y claves de lecturamateriales de construcción (Serrano, At<strong>en</strong>cia, Luque 1983).En 1987 fueron dados a conocer los talleres de March<strong>en</strong>a(Sevilla)(horno de planta Id) dedicados a las jarras y acazuelas que copiaban tipos africanos (Romero 1987, 864ss.) y Rumina (Mojácar) con restos indeterminados (Cara,Ortiz 1987, 90). En los <strong>alfares</strong> del Guadalquivir se fabricaronmacetas para cultivos específicos, como puso de relieve Chic(1984).específicas (fig. 6), <strong>en</strong> el Cerro de los Mártires, formas devolutas Dr. 11 y 12 (Corzo, 1981-82, 279 ss.) y LópezRodríguez id<strong>en</strong>tifica una producción local “del Minotauro”,(sin <strong>alfares</strong> también) <strong>en</strong> Italica (tipo Dr. 11/14) (1981, 19 ss.;1984, 383 ss.). En Córdoba detectó Amaré (1988-89, 108) laproducción de formas empar<strong>en</strong>tadas con las lucernas devolutas.2.6.- La década de los 90: el inicio del estudio de lasfiglinas béticas.Es este un mom<strong>en</strong>to de brillantez por cuanto se refiere a lafijación de problemas, áreas de producción y despertar deuna conci<strong>en</strong>cia a favor de trabajos sistemáticos sobre losc<strong>en</strong>tros de producción, analizando el territorio de formaporm<strong>en</strong>orizada, así como las producciones de los <strong>hornos</strong>, sudistribución regional y <strong>en</strong> términos globales la explotación delos contextos estratigráficos, algunas de cuyas conclusionesse recog<strong>en</strong> de forma sucinta <strong>en</strong> el manual g<strong>en</strong>eral de BeltránLloris (1990) at<strong>en</strong>di<strong>en</strong>do a las d<strong>en</strong>ominadas <strong>en</strong>tonces“imitaciones de barniz rojo julio claudio”, los talleres desigillata de Granada y Andújar, las paredes finas y lasescasas refer<strong>en</strong>cias a <strong>alfares</strong> de cerámica común, además delel<strong>en</strong>co de c<strong>en</strong>tros de ánforas y las refer<strong>en</strong>cias a los c<strong>en</strong>tros defabricación de lucernas.2.6.1.- Ánforas.Al comi<strong>en</strong>zo de la década, como consecu<strong>en</strong>cia de estudiosanteriores (Diogo 1985; Diogo, Faria, Ferreira 1987, 77 ss.),el progreso <strong>en</strong> la definición y fijación de c<strong>en</strong>tros lusitanosmodificará el panorama productor (Alarcao, Mayet 1990;Fabiao, Guerra 1993, 995 ss.; Fabiao 1996, 329 ss., id. 1997,59 ss.), y permitirá una mejor caracterización de losproductos béticos, aunque habrá que esperar para su mejor ydefinitiva atribución (Dr. 14, Almagro 51c, Beltrán 72, etc.).En lo que se refiere a los c<strong>en</strong>tros olearios del Guadalquivir,las últimas prospecciones han proporcionan como novedadtalleres bajoimperiales, con ánforas Dr. 23 (Remesal 1991,355 ss.). En conjunto, <strong>en</strong> el valle del Betis se conoce casi unc<strong>en</strong>t<strong>en</strong>ar de <strong>alfares</strong> (fig. 7), cifra que contrasta con la escasezde yacimi<strong>en</strong>tos excavados o estudiados exhaustivam<strong>en</strong>te apesar del aum<strong>en</strong>to de las prospecciones, como <strong>en</strong> Arva(Remesal Revilla et alii, 1997, 151 ss.; Remesal 2001, 386).De este mom<strong>en</strong>to es la actualización de Chic del corpus deestampillas olearias sigui<strong>en</strong>do el ord<strong>en</strong> de los nombres decontrol que aparec<strong>en</strong> <strong>en</strong> los tituli (Chic 2001).Figura 6.- Lucerna de C. Iun Draco (seg. Corzo).2.5.4.- Lucernas.El c<strong>en</strong>tro de los Villares de Andújar produjo tambiénlucernas de forma Dr. 3 con motivos característicos (selloM.C.S., hoja bifoliácea) (Sotomayor et alii 1981, 309 ss.) yformas Dr. 11 (López Rodríguez 1984, 381). En los mismosaños Corzo (1982, 389 ss.) sugiere la exist<strong>en</strong>cia de un taller<strong>en</strong> la bahía de Cádiz (C. Iun. Drac.) con decoracionesSe llevan a cabo además revisiones sistemáticas de los<strong>alfares</strong> de la costa granadina que evid<strong>en</strong>cian la falta de unestudio int<strong>en</strong>sivo, reducidos a la simple constatación de laexist<strong>en</strong>cia de los talleres y a su filiación tipológica (Bernal,Navas, 1998, 92 ss). Al tiempo la Universidad de Málagapropicia la monografía sobre las figlinae malacitanae quepone al día los conocimi<strong>en</strong>tos sobre las produccionesanfóricas de dicho territorio (AA. VV. 1997), ilustrandodistintos modelos de c<strong>en</strong>tros, especializados, de carácterurbano (Rambla, Mayorga 1997, 61), o villae.La bahía de Cádiz (fig. 8) cu<strong>en</strong>ta con dos obras de <strong>en</strong>ormealcance, preludiadas por int<strong>en</strong>sas prospecciones (Villalobos15


Miguel Beltrán LlorisFigura 7.- Alfares olearios <strong>en</strong> el Guadalquivir (seg. Berni).16


Alfares y <strong>hornos</strong> <strong>romanos</strong> <strong>en</strong> Andalucía. Historiografía de la investigación y claves de lecturaFigura 9.- Alfares vinarios <strong>en</strong> la Bética.Figura 8.- Alfares de salazones de pescado <strong>en</strong> la bahía de Cádiz (seg.Lagóst<strong>en</strong>a y García Vargas).1987, 97 ss.; Lazarich, Alonso et alii 1991, 89 ss.; Lazarich,Alonso et alii 1991a, 98 ss.). El trabajo <strong>en</strong> 1996, de L.Lagóst<strong>en</strong>a ofrece sugestivas consecu<strong>en</strong>cias sobre el procesode ocupación económica, desde el mundo púnico, poni<strong>en</strong>do<strong>en</strong> relación la actividad alfarera con las formas sociales ycompletando de forma notable los mapas de dispersión de lasindustrias y sus producciones. Dos años más tarde E. GarcíaVargas c<strong>en</strong>tra un magnífico trabajo <strong>en</strong> el mismo espacio,poni<strong>en</strong>do al día la tipología de los anteced<strong>en</strong>tes púnicos, lasimitaciones de ánforas itálicas durante la república y sobretodo analizando el desarrollo de las producciones de <strong>alfares</strong>ligados a las villas o a los fundí especializados <strong>en</strong> cerámicas,sintetizando con s<strong>en</strong>tido crítico los <strong>alfares</strong> conocidos yconcluy<strong>en</strong>do con un análisis histórico (García Vargas1998b).2.6.2.- La confirmación del vino bético (fig. 9).El progreso <strong>en</strong> la investigación regional permite llevar a caboatribuciones de orig<strong>en</strong>, y los descubrimi<strong>en</strong>tos del Rinconcilloincorporan la Dr. 1 A a la familia vinaria (Fernández Cacho1995, 71 ss.). Los trabajos de Lagóst<strong>en</strong>a <strong>en</strong> la bahía de Cádizcorroboran la fabricación de la forma Dr. 1 <strong>en</strong> Puerto Real(Lagóst<strong>en</strong>a 1993, 100, fig. 26), Puerto de Santa María(Lagóst<strong>en</strong>a 1996, 100, figs. 3, 11) y Cádiz (García Vargas1996, 54) y la Ha. 70 se incorpora <strong>en</strong> el horno de la Catria(Molina 1997, 145), <strong>en</strong> V<strong>en</strong>ta del Carm<strong>en</strong> (Bernal, Lor<strong>en</strong>zo1998, 339) y <strong>en</strong> el Puerto de Santa María ( Lagóst<strong>en</strong>a 1996,32) y la Dr. 2-4, se localiza <strong>en</strong> la Loma de Ceres de Molvizar(Granada)(G<strong>en</strong>er et alii 1993) y <strong>en</strong> el Guadalquivir <strong>en</strong>Posadas (Carreras 2001, 424, n. 11). Finalm<strong>en</strong>te la Dr. 28 seha detectado por primera vez <strong>en</strong> V<strong>en</strong>ta del Carm<strong>en</strong> (Bernal1998).Los trabajos de D. Bernal a finales de la década de losnov<strong>en</strong>ta solucionan el vacío vinario <strong>en</strong> la baja romanidad,poni<strong>en</strong>do de relieve con apoyos petrológicos, el valor de lasformas Gauloise 4, Matagallares I, Dr. 30 y Beltrán 68(Bernal 1996, 251 ss.; 1998g, 543 ss.) (figs. 10 y 11).2.6.3.- Primeras excavaciones integrales de figlinas (deánforas).Las excavaciones de figlinas a mediados de los nov<strong>en</strong>ta (fig.12), romp<strong>en</strong> el desequilibrio exist<strong>en</strong>te <strong>en</strong>tre un cada vez másapurado conocimi<strong>en</strong>to tipológico (Berni 1998) y la escasadocum<strong>en</strong>tación de los c<strong>en</strong>tros productores. Se da a conocer,<strong>en</strong> 1994, la nueva excavación <strong>en</strong> el Olivar de los Val<strong>en</strong>cianos(Campano 1994, 135 ss.) y las excavaciones de El Gallinero(García Vargas, Sibón 1994, 53 ss.). En los años 1995 y1996, se intervi<strong>en</strong>e <strong>en</strong> excavaciones de urg<strong>en</strong>cia (conpublicación integral) <strong>en</strong> el yacimi<strong>en</strong>to de los Matagallares <strong>en</strong>la costa ori<strong>en</strong>tal de Granada (Bernal, Navas 1998a, 109 ss.),descubriéndose un complejo alfarero, del siglo III d. C., contestares y <strong>hornos</strong>, que fabricó ánforas de salazones y salsasde pescado, vinarias y de aceite, además de cerámicascomunes <strong>en</strong> importante proporción (30%) (cazuelas, ollas,morteros) (Bernal, Navas et alii 1998, 307 ss.; Bernal, Navas,et alii, 1998 a, 363 ss.) y material de construcción <strong>en</strong> formade tégulas, ímbrices, ladrillos de opus spicatum, simples, decolumna y de bóveda (Torrecilla 1998, 395 ss). Se confirmael carácter bético de la Dr. 14, producida mayoritariam<strong>en</strong>te,como la Almagro 51 c y la Dr. 30, si<strong>en</strong>do minoritaria la Dr.20. (Vigil, Cuevas et alii 1998, 473 ss).Las excavaciones del alfar de V<strong>en</strong>ta del Carm<strong>en</strong>, además deincorporar nuevas formas de ánforas (V<strong>en</strong>ta del Carm<strong>en</strong> I)(Bernal 1998b, 143 ss.), constituy<strong>en</strong> otro modelo deexcavaciones reci<strong>en</strong>tes, juntam<strong>en</strong>te con las ejecutadas <strong>en</strong> elRingo Rango (Los Barrios) <strong>en</strong> el año 1998, dep<strong>en</strong>di<strong>en</strong>te de lavilla de Pu<strong>en</strong>te Grande (Almagro 51 c, Keay XVIC eimitaciones africanas Keay VI) (Bernal, 2001a, 1311 ss). Lasprimeras han proporcionado estructuras asociadas a los<strong>hornos</strong> y como producción propia, ánforas y sobre todo, deforma complem<strong>en</strong>taria, material de construcción (tégulas,ímbrices y ladrillos variados) (Redondo, Borge 1998),además de la pres<strong>en</strong>cia de un taller de vidrio.17


Miguel Beltrán LlorisFigura 12.- El proceso de excavación de figlinas <strong>en</strong> la Bética hasta los años90.Figura 10.- Sistematización de las ánforas tardías de la Bética (seg.Bernal).En la costa de Málaga, <strong>en</strong> la Finca del Secretario, seexcavaron diversos <strong>hornos</strong> de ánforas, asociados a una villacon termas y factoría de salazones (Villaseca, Hiraldo 1993,387 ss.) y se pres<strong>en</strong>tan a comi<strong>en</strong>zos de la década las formasproducidas <strong>en</strong> el c<strong>en</strong>tro de Huerta del Rincón (Serrano,Baldomero, Castaño, 149 ss.).En el año 1993 se excavan dos <strong>hornos</strong> <strong>en</strong> Azanaque (Romo1993, 776-777), docum<strong>en</strong>tándose además otras zonas delcomplejo fechado <strong>en</strong>tre el alto imperio y el siglo V d. C. ycomprobándose el trabajo de los <strong>hornos</strong> por parejas. De 1997son las excavaciones de <strong>alfares</strong> de ánforas Dr. 20 <strong>en</strong> lasDelicias, permiti<strong>en</strong>do un primer acercami<strong>en</strong>to a las zonas deservicios de estos complejos (almac<strong>en</strong>es y vertederos) ydocum<strong>en</strong>tándose la fábrica de la forma Ha. 70 (Sáez et alii1997; García Vargas 1998; id. 2001, 92). En las mismasfechas se investiga <strong>en</strong> la Casilla de Malpica, un almacén ydeterminados cubicula estacionales de los trabajadores(García Vargas 1998 a, 105 ss.; id. 2001, 92 ss.).A las formas de estos c<strong>en</strong>tros se un<strong>en</strong> las dadas a conocer <strong>en</strong>Puerto Real (1 y 2), <strong>en</strong> cuyo alfar se hicieron excavacionesde urg<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> 1994 (García Vargas, Lavado 1995, 215 ss.;id., 1996, 197 ss.; Bernal, Lor<strong>en</strong>zo 1998a) y se docum<strong>en</strong>tanal paso de las producciones locales (Dr. 12, 14, 20), lasimitaciones de <strong>en</strong>vases galos (Gaul. 4, Dr. 30) o africanos(Keay IV y V), mi<strong>en</strong>tras que las excavaciones de <strong>alfares</strong> deSevilla (Hospital de las Cinco Llagas) (García Vargas 2001,93) permit<strong>en</strong> establecer una dicotomía de las producciones(Dr. 20 y Ha. 70, Beltrán II a, Dr. 28), <strong>en</strong> contraste con los<strong>alfares</strong> del interior del Guadalquivir.Figura 11.- Sistematización de las ánforas tardías de la Bética (Bernal).Finalm<strong>en</strong>te las estratigráficas del alfar del Rinconcillo acomi<strong>en</strong>zos de los nov<strong>en</strong>ta, permitieron la docum<strong>en</strong>tacióncronológica y contextual de esta importante alfarería,docum<strong>en</strong>tándose cuatro fases de ocupación-producción yconfirmándose la pluralidad de <strong>en</strong>vases de salazones,vinarios y oleícolas y con carácter complem<strong>en</strong>tario los18


Alfares y <strong>hornos</strong> <strong>romanos</strong> <strong>en</strong> Andalucía. Historiografía de la investigación y claves de lectura(Matagallares I y II, Majuelo I y II, Baelo I, Carteia I),mi<strong>en</strong>tras que se manifiestan mayores dudas para el mom<strong>en</strong>tofinal de estos c<strong>en</strong>tros, <strong>en</strong> aus<strong>en</strong>cia de <strong>alfares</strong> fechados.En la misma reunión la pon<strong>en</strong>cia de J. Remesal (2001) poneal día los importantes proyectos <strong>en</strong> torno a las ánforasolearias béticas, apoyados sobre todo <strong>en</strong> el desarrollo del“Corpus de la epigrafía anfórica” y la ing<strong>en</strong>te docum<strong>en</strong>taciónepigráfica del Testaccio, quedando clara constancia de lafalta, todavía, de una excavación in ext<strong>en</strong>so <strong>en</strong> un complejoproductor del Guadalquivir, a pesar de algunas accionescomo <strong>en</strong> Palma del Río (Díaz Trujillo, 1992), Casilla deMalpica (García Vargas, 1998a), el Castillejo (Arva)(Remesal, Revilla, Carreras, 1997) circunstancias que sigu<strong>en</strong>haci<strong>en</strong>do recaer el peso de la investigación <strong>en</strong> los tituli picti,los grafitos ante cocturam y los sellos.Figura 13.- La ampliación de los c<strong>en</strong>tros de fabricación de aceite <strong>en</strong> laBética.materiales de construcción (tégulas y ladrillos), cerámicas decocina y mesa para autoconsumo, pesas de telar y terracotas(Fernández Cacho 1995, 181 ss. id. 1995 a, 70 ss.; Bernal1998b).Los nuevos descubrimi<strong>en</strong>tos permit<strong>en</strong> una <strong>en</strong>orme variación<strong>en</strong> los criterios de proced<strong>en</strong>cia admitidos hasta el pres<strong>en</strong>te.Así se docum<strong>en</strong>tan la Dr. 14, <strong>en</strong> la bahía de Cádiz y <strong>en</strong> lacosta granadina y la Dr. 20 fuera de sus zonas epónimas(Arteaga 1985, 183 ss.; Villaseca 1991, 365 ss.; Baldomero,A. et alii 1997, 153, ns. 7 y 9; García Vargas 2001,100) (fig.13).2.6.4.- Un hito <strong>en</strong> la investigación de las ánforas: <strong>Ex</strong>Baeticae amphorae (1998) y la colección Instrum<strong>en</strong>ta.La pres<strong>en</strong>te reunión (AA. VV. 2001), <strong>en</strong>tre obras bondadesci<strong>en</strong>tíficas, pres<strong>en</strong>ta un apurado estado del conocimi<strong>en</strong>to delas ánforas béticas, con artículos de refer<strong>en</strong>cia debidos <strong>en</strong>primer lugar a E. García Vargas y D. Bernal. El segundositúa el conocimi<strong>en</strong>to de las ánforas bajoimperiales <strong>en</strong> elnivel ci<strong>en</strong>tífico que v<strong>en</strong>ían demandando, parti<strong>en</strong>do <strong>en</strong> lashipótesis de trabajo y conclusiones, de la solidez y bu<strong>en</strong>método de las excavaciones practicadas <strong>en</strong> los <strong>alfares</strong>refer<strong>en</strong>ciados.Otra nutrida serie de comunicaciones puso de relieve, <strong>en</strong>treotros aspectos, la producción de las ánforas Dres. 7-11 yHaltern 70 <strong>en</strong> el interior de la Bética <strong>en</strong> el Guadalquivir(Carreras 2001, 422 ss.) (fig.14).El final de siglo asiste a la aparición de significativosesfuerzos como el Corpus International des timbresamphoriques (Unión Académica International) <strong>en</strong> el queparticipa activam<strong>en</strong>te el CEIPAC con monografías <strong>en</strong> la serieInstrum<strong>en</strong>ta, dirigida por el profesor Remesal, sobref<strong>en</strong>óm<strong>en</strong>os comerciales y de difusión de las ánforas Dr. 20,<strong>en</strong> Cataluña y <strong>en</strong> Britannia (Berni, 1998; Carreras, Funari1998), con conclusiones tipológicas que exced<strong>en</strong> del<strong>en</strong>unciado de los trabajos (fig. 15) (Berni 1998, 26 ss.). En elcapítulo de los corpora epigráficos, cabe reseñar laaportación sobre los materiales de Puerto Real (Pérez López,Alonso, Nuñez 1999, 695 ss.).Ambos trabajos constituy<strong>en</strong> la mejor síntesis obrada hasta elpres<strong>en</strong>te, si<strong>en</strong>do los resultados especialm<strong>en</strong>te significativospara equilibrar la balanza de conocimi<strong>en</strong>tos <strong>en</strong>tre lasproducciones olearias del valle del Guadalquivir, deconocimi<strong>en</strong>to privilegiado a partir del Testaccio y lasproducciones béticas de salazones de pescado y vinarias.Las puestas <strong>en</strong> valor desarrolladas por D. Bernal (2001), hanevid<strong>en</strong>ciado la producción de ánforas béticas <strong>en</strong> el BajoImperio <strong>en</strong>tre el s. III y el comi<strong>en</strong>zo del V d. C.especialm<strong>en</strong>te <strong>en</strong>tre Cádiz y Almería. La producción <strong>en</strong> el s.III, se caracteriza por la perduración de formas de tradiciónaltoimperial (Beltrán II B y Dr. 14 y Puerto Real I y II, Dr.20 y Dr. 23), la producción de ánforas de fondo plano (Dr.30), la imitación de formas africanas (Keay IV, V, VI) ogalas (Gaul. 4) y la pres<strong>en</strong>cia de formas inéditasFigura 14.- El Lacus Ligustinus c<strong>en</strong>tro de producción salsaria y vinaria(seg. Carreras).19


Miguel Beltrán LlorisFigura 15.- La evolución tipológica de las ánforas Dr. 20 y 23 (seg. Berni).20


Alfares y <strong>hornos</strong> <strong>romanos</strong> <strong>en</strong> Andalucía. Historiografía de la investigación y claves de lectura(fig. 17) y se confirma la pres<strong>en</strong>cia de restos de <strong>hornos</strong>.También se constatan las imitaciones de producciones lisasgálicas y africanas y hornadas de ánforas Dr. 20, además decerámica común de tradición ibérica.2.6.6-. Común.El trabajo de Lagóst<strong>en</strong>a (1996) <strong>en</strong> la bahía de Cádiz pone derelieve la frecu<strong>en</strong>te asociación de cerámica común <strong>en</strong> los<strong>hornos</strong> de ánforas de salazones, como <strong>en</strong> La China (morteros,jarras, vasos) y Los Tercios <strong>en</strong> Puerto de Santa María; Cerrode Ceuta, Villanueva (amplia producción de pondera,imbrices, material de construcción, macetas…), Pu<strong>en</strong>teMelchor (terracotas fem<strong>en</strong>inas y cerámica variada), ElGallinero (terracotas fem<strong>en</strong>inas, cerámica común), Olivar delos Val<strong>en</strong>cianos (común de mesa, dolia, construcción),Torrealta B (de mesa, construcción), La Zarza, CanteraLavalle (dolia) <strong>en</strong> Puerto Real; Cerro de los Mártires (comúnde cocina y mesa) <strong>en</strong> San Fernando.Figura 16.- Terra sigillata hispánica. Taller de Antikaria. Cerámica condecoración burilada (seg. At<strong>en</strong>cia, Serrano).2.6.5.- Sigillata.Nuevam<strong>en</strong>te la provincia de Málaga amplía la nómina dec<strong>en</strong>tros productores con el hallazgo de productos de desechoy un horno <strong>en</strong> la Fábrica, Teba (Serrano, Gómez, Castaños1992), y <strong>en</strong> Antikaria (At<strong>en</strong>cia, Serrano 1997) pert<strong>en</strong>eci<strong>en</strong>tesa la segunda mitad del siglo I de C. Se produc<strong>en</strong> dosreuniones ci<strong>en</strong>tíficas significativas <strong>en</strong> Andújar. Un curso deArqueología <strong>en</strong> 1996 (AA. VV. 1998) y una Mesa Redonda<strong>en</strong> el año 1997 (AA.VV. 1999), que pres<strong>en</strong>tan un estado de lacuestión de las producciones de sigillata hispánica, conespeciales refer<strong>en</strong>cias al gran complejo de Andújar, del quetodavía ignoramos el tipo de instalaciones que poseyó,confirmándose el inicio del taller <strong>en</strong> la época de Tiberio-Claudio (quizás alfareros de orig<strong>en</strong> itálico) y su final amediados del s. II (Sotomayor 1998; Fernández García 1998;Roca 1998; Sotomayor, Roca, Fernández 1999). También sepon<strong>en</strong> al día los conocimi<strong>en</strong>tos sobre los talleres de lasprovincias de Málaga y Granada (Serrano Ramos, 1998, 165ss.; Serrano Ramos, 1999, 137 ss.). Se ha supuesto que losc<strong>en</strong>tros de Granada con sus dos fases (Albaicín y Cartuja) ySingilia Barba se pon<strong>en</strong> <strong>en</strong> marcha por impulso de Andújar,éstos, con Alameda, Antikaria (fig.16) y la Fábricaestuvieron activos <strong>en</strong> la 2ª mitad del s. I, cesando a mediadosdel II por la compet<strong>en</strong>cia de la cerámica africana (Serrano1999, 150). En la misma reunión se pon<strong>en</strong> de relieve lasimitaciones de sigillata o hispánicas precoces <strong>en</strong> el taller dePeñaflor, a orillas del Guadalquivir (Amores, Keay 1999)Se confirma la producción de cerámica común <strong>en</strong> el alfar delAlbaicín (Granada) (Serrano 1999, 143), semejante a la deCartuja y se da una refer<strong>en</strong>cia a producciones defectuosas(comunes y de construcción) <strong>en</strong> la Casería de la Mancha,Antequera (Medianero, Romero 1990), una notableproducción de cerámica de cocina <strong>en</strong> Singilia Barba (Serrano1998, 176). Ti<strong>en</strong>e lugar también un trabajo de síntesis deSerrano (1994, 227 ss.) <strong>en</strong> el ámbito de la reunión sobre lacerámica común altoimperial celebrado <strong>en</strong> Ampurias, <strong>en</strong> elque pres<strong>en</strong>ta un resum<strong>en</strong> de los <strong>alfares</strong> conocidos,c<strong>en</strong>trándose <strong>en</strong> las producciones de la Cartuja, AndújarTorrox y la Depresión de Antequera, defini<strong>en</strong>do losmateriales desde la tipología y la función, resaltandoformalm<strong>en</strong>te ciertos rasgos característicos de los talleresbéticos (incisiones <strong>en</strong> el interior de los morteros) y susfu<strong>en</strong>tes de inspiración y poni<strong>en</strong>do de relieve la difusiónregional de algunos talleres (Andújar) o local(Granada)(fig.18). Se relaciona además el cese <strong>en</strong> lafabricación de la sigillata <strong>en</strong> el s. II d. C. con el hundimi<strong>en</strong>tode estos talleres, debido a la compet<strong>en</strong>cia norteafricana,aunque las cerámicas bajoimperiales dejan ver la exist<strong>en</strong>ciade c<strong>en</strong>tros de producción local p<strong>en</strong>di<strong>en</strong>tes de id<strong>en</strong>tificación(fig.19).Entre las producciones especiales sobresal<strong>en</strong> las imitacionesde cerámicas africanas de cocina, pres<strong>en</strong>tes de formaimportante <strong>en</strong> March<strong>en</strong>a (Sevilla), los Matagallares (Bernalet alli 1998, 335 ss.) y <strong>en</strong> los talleres antequeranos (Serrano1997, 219 ss.).Las excavaciones del Tejarillo demuestran la especializaciónde determinados <strong>alfares</strong> <strong>en</strong> materiales de construcción sobretodo y ánforas (Remesal, Revilla, Carrera, Berni 1997).2.6.7.- Lucernas.La d<strong>en</strong>sa actividad cerámica de D. Bernal se c<strong>en</strong>tra sobre laslucernas del taller de Andújar (1993a, 207 ss.) y vuelve sobreel c<strong>en</strong>tro conocido del Cerro de los Mártires a través de unmolde, y de su comparación con pastas anfóricas de la mismaproced<strong>en</strong>cia (1995, 147 ss.). Bernal (1993, 210) pone derelieve igualm<strong>en</strong>te el c<strong>en</strong>tro de Córdoba (activo desde el s. I21


Miguel Beltrán LlorisFigura 17.- Cerámica de imitación de la sigillata de Peñaflor (seg.Martínez).a.C. al I d. C.), que produjo (<strong>en</strong>tre otras) formas Dr. 3, tipoAndújar, Dr. 28 y copias de las firmlanp<strong>en</strong> padanas(Strobilius) s. I d. C., asociadas a cerámicas comunes y vasosde paredes finas (Mayet XXXVII) (Marfil, V<strong>en</strong>tura, 1991;Bernal 1990-91, 151). La d<strong>en</strong>sidad de la forma Dr. 30B (dedisco) <strong>en</strong> la Bética, ha llevado a plantear su fabricación <strong>en</strong>dicho territorio (Morillo, 1999, 109).2.6.8.- Barniz negro.En el alfar de Torrealta, San Fernando (Lagóst<strong>en</strong>a 1996, 113)se produjeron minoritariam<strong>en</strong>te imitaciones de campani<strong>en</strong>seA, juntam<strong>en</strong>te con modelos de ánforas púnicas (s. II a.C.) y<strong>en</strong> el Rinconcillo cerámica de barniz negro sin especificar(Fernández Cacho 1997, 173 ss).2.7.- Los comi<strong>en</strong>zos del tercer mil<strong>en</strong>io.2.7.1.- El c<strong>en</strong>tro de Andujar.Parec<strong>en</strong> consolidadas las tres fases de actividad de estec<strong>en</strong>tro: 1ª (Tiberio-Claudio) con sigillata de prototiposclásicos <strong>en</strong> el repertorio itálico, influ<strong>en</strong>cias de las paredesfinas, producción int<strong>en</strong>sa de cerámica ibérica (todavíap<strong>en</strong>di<strong>en</strong>te de estudio), cerámica común, paredes finas ylucernas; 2ª (flavios) con formas clásicas de sigillata,abundante cerámica común y disminución de ibérica yparedes finas; 3ª (hasta mediados del s. II) la peor conocida,limitada formalm<strong>en</strong>te. Está claro el papel motor del alfarrespecto de los c<strong>en</strong>tros granadinos y malagueños(Sotomayor, Roca, Fernández 1999).2.7.2.- Barniz negro.Únicam<strong>en</strong>te reseñar <strong>en</strong> la Tabla redonda de Mataró laaportación de Adroher/López (2000, 152) sobredeterminadas cerámicas (sin <strong>alfares</strong>) de Almuñecar, deimitación de la A, <strong>en</strong> el s. II a. C. y la de V<strong>en</strong>tura (2000, 185)sobre un taller de barniz negro de pasta gris que debelocalizarse <strong>en</strong> el Bajo Guadalquivir y zona costera del Golfode Cádiz, según los hallazgos (Itálica, Dos Hermanas, Jerezde la Frontera, Huelva y Cádiz).2.7.3.- Ánforas.En las ánforas salsarias (fig. 20), destacan dos monografías,la tesis doctoral de L. Lagóst<strong>en</strong>a y el trabajo de R. Eti<strong>en</strong>ne yF. Mayet (2002). El primero aborda de forma sistemática lasindustrias conserveras <strong>en</strong> Hispania, dedicando un destacadopuesto a la información de la Bética y trazando unaimportante visión diacrónica de los procesos productivos,poni<strong>en</strong>do de relieve el curso seguido por las instalacionespiscícolas y la relación mutante <strong>en</strong>tre factorías y <strong>alfares</strong>,resaltando la conc<strong>en</strong>tración de la industria <strong>en</strong> época flavia, uncierto desc<strong>en</strong>so <strong>en</strong> el siglo II d. C. y la reestructuración <strong>en</strong> los22


Alfares y <strong>hornos</strong> <strong>romanos</strong> <strong>en</strong> Andalucía. Historiografía de la investigación y claves de lecturasiglos III y IV d. C. hasta los siglos V y VI, con laelaboración de un corpus exhaustivo de estampillashispánicas relacionadas tipológicam<strong>en</strong>te.En el segundo trabajo, se abordan la salazones hispánicasdesde el estudio de las materias primas, los c<strong>en</strong>tros deproducción de salazones, la tipología anfórica, los talleres deorig<strong>en</strong> y los problemas de difusión y comercialización,pres<strong>en</strong>tando un primer corpus de mercatores cont<strong>en</strong>idos <strong>en</strong>los tituli <strong>en</strong> posición βEti<strong>en</strong>ne, Mayet 2002, 215 ssasí comoun repertorio de los 56 talleres de ánforas localizados hasta lafecha, precisiones que contrastan con la falta de datos fiablesdesde el punto de vista cronológico, que ti<strong>en</strong><strong>en</strong> que tomarcomo refer<strong>en</strong>cia todavía la pres<strong>en</strong>cia de cont<strong>en</strong>edoreshispánicos <strong>en</strong> yacimi<strong>en</strong>tos externos bi<strong>en</strong> fechados (MartinKilcher 2003, 69 ss.)(fig. 21).También abordan Eti<strong>en</strong>ne y Mayet una síntesis sobre el vinohispánico (2000, 73-92) que <strong>en</strong> lo relativo a la Bética eliminalas formas Dr. 1 C y Dr. 2-4, insisti<strong>en</strong>do especialm<strong>en</strong>te <strong>en</strong> lasformas Dr. 28 y Ha. 70 como g<strong>en</strong>uinas de esta provincia(Carreras 2003). La incorporación de los resultadosproducidos reci<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te (Lagóst<strong>en</strong>a 1993; id. 1996; GarcíaVargas 1996; G<strong>en</strong>er et alii 1993; Villaseca, Hiraldo 1991;Villaseca 1997; Bernal 1997b; 1998) permitiría unareconsideración más amplia de los cont<strong>en</strong>edores vinariosbéticos.En el terr<strong>en</strong>o de las figlinas olearias, la situación ratifica lacar<strong>en</strong>cia de excavaciones integrales de estos complejosmi<strong>en</strong>tras que los aspectos comerciales y difusores concretoshan visto la luz <strong>en</strong> la serie Instrum<strong>en</strong>ta, así el proyecto delTestaccio (Blázquez, Remesal 2001, 2003), que cu<strong>en</strong>ta ahoraademás con la espléndida monográfia de Aguilera (2002).2.7.4.- Cerámica común.Nuévam<strong>en</strong>te nos ofrece una síntesis actualizada del territoriomalacitano Serrano Ramos (2000), que detalla los c<strong>en</strong>tros defabricación at<strong>en</strong>di<strong>en</strong>do a los talleres del litoral (Torrox,Málaga, Vélez Málaga), y a los de la Depresión deAntequera, cuya difusión estudia <strong>en</strong> la Villa de losCastillones (Teba) y la de Manguarra y San Josécomprobando el carácter localista de la difusión de lasigillata y cerámicas comunes.Pone de relieve la autora la simultaneidad de producciones(ánforas y cerámica común) <strong>en</strong> la mayoría de los <strong>alfares</strong>. Loscosteros dedicados primordialm<strong>en</strong>te a las salazones y deforma minoritaria a la cerámica común: Torrox, Málaga <strong>en</strong>trelos ríos Guadalmina y Guadalorce (Alcazaba, Carreterías,Pu<strong>en</strong>te Carranque, Haza Honda), Huerta del Rincón,Secretario (Fu<strong>en</strong>girola). Los talleres del interior, queat<strong>en</strong>dieron núcleos urbanos concretos, simultanearon lasigillata con la cerámica común y de construcción, con ciclosde producción distintos (Singilia Barba, Antikaria, Teba yAlameda) y <strong>en</strong> una tercera verti<strong>en</strong>te solo se fabricaroncerámicas comunes y de construcción: Casería de laMancha(Antequera), Cortijo de las Monjas (Campillos),Bobadilla, Las Viñas (Cuevas del Beccero) y Peñarrubia(fig. 22).Figura 18.- Terra sigillata hispánica. Moldes del alfar del Carm<strong>en</strong> de laMuralla (Granada) (seg. Serrano Ramos).2.7.5.- Los materiales de construcción.Sigu<strong>en</strong> si<strong>en</strong>do <strong>en</strong> este mom<strong>en</strong>to una grave laguna (con lasúnicas excepciones de Matagallares y V<strong>en</strong>ta del Carm<strong>en</strong>), apesar de formar parte muy importante de las producciones delos <strong>alfares</strong> béticos, especialm<strong>en</strong>te <strong>en</strong> los del valle delGuadalquivir y normalm<strong>en</strong>te asociados a la producción deánforas (La Corregidora, Remolino, Las Delicias, Motores deMalpica, Isla de la Liñana, El Portillo, Azanaque-Castillejo,etc., Chic 2001, 53, 67, 80 ss.). Las revisiones de sellospued<strong>en</strong> llevarnos a importantes conclusiones, como lasderivadas del alfar del Rinconcillo <strong>en</strong> donde constatamos losmismos sellos <strong>en</strong> ánforas y ladrillos <strong>en</strong> experi<strong>en</strong>cia que seprolonga <strong>en</strong> los hallazgos de Baelo, que permit<strong>en</strong> id<strong>en</strong>tificaral dominus S.C.G. que produjo ladrillos y ánforas de vino ysalazones, figurando aislado o a través de uno de sus<strong>officina</strong>tores, M. Lucretius, como expresa la fórmulaconjunta localizada <strong>en</strong> Baelo: S.C.G. + Op(us) . M. Lucre(Beltrán Lloris 1970, ns. 355, 356).3.- Claves de lectura. G<strong>en</strong>eralidades.El estado de las investigaciones <strong>en</strong> la Bética permite afirmarque el horno o complejo alfarero no existe aislado como una<strong>en</strong>telequia, es un lugar <strong>en</strong> el que se conc<strong>en</strong>tran otras muchasactividades y que se inserta <strong>en</strong> un territorio concreto, si<strong>en</strong>doéstas las premisas que permit<strong>en</strong> su clasificaciónsocioeconómica. En función de su situación y apari<strong>en</strong>ciapued<strong>en</strong> establecerse diversas clasificaciones dep<strong>en</strong>di<strong>en</strong>tes de23


Miguel Beltrán LlorisFigura 19.- Alfares de cerámica común y de materiales de construcción.la mayor o m<strong>en</strong>or complejidad de los c<strong>en</strong>tros productivos yde las figlinas (asociadas o indep<strong>en</strong>di<strong>en</strong>tes) de f<strong>en</strong>óm<strong>en</strong>os,políticos, económicos (tipos de explotación e implantación) ycronológicos.Se han determinado hasta la fecha los sigui<strong>en</strong>tes factores at<strong>en</strong>er <strong>en</strong> cu<strong>en</strong>ta:1. En lo relativo a las ánforas, los productos de consumo(aceite, salazones, vino…), cuyas áreas parec<strong>en</strong> delimitar: unterritorio costero ligado a las explotaciones pesqueras y deconservas de pescado, un territorio fluvial <strong>en</strong> torno al Baetisligado a la producción olearia, y zonas específicas asociadasa la producción vinaria situadas g<strong>en</strong>eralm<strong>en</strong>te <strong>en</strong> laretrotierra. A pesar de esta especialización, vino y aceite seasocian minoritariam<strong>en</strong>te a los c<strong>en</strong>tros de producción alfarerasalazoneros.2. La situación geográfica de los medios de producción,caracterizados por su proximidad a las vías de comunicacióno proximidad costera, at<strong>en</strong>di<strong>en</strong>do además a la situaciónnatural de los sustratos arcillosos.4. Relación de los c<strong>en</strong>tros de producción con los c<strong>en</strong>tros deproducción de bi<strong>en</strong>es (<strong>en</strong> el caso de las ánforas) y núcleosurbanos o agropecuarios de los que dep<strong>en</strong>d<strong>en</strong>.5. La propia estructura tipológica de los c<strong>en</strong>tros deproducción (modelos de <strong>hornos</strong>, tipos de figlinae, estructurasasociadas).6. La evolución <strong>en</strong> el tiempo de los distintos modelosproductivos, desde las implantaciones del siglo I a. de C.hasta la baja romanidad, guiados por la ord<strong>en</strong>ación delterritorio y según las formas de dispersión o reagrupaciónque manifiest<strong>en</strong>.7. Las diversas formas de propiedad y gestión de las figlinae,según modelos <strong>en</strong>unciados, como el de Remesal refer<strong>en</strong>te alaceite (1980, 135) con variables, según se sitú<strong>en</strong> <strong>en</strong>propiedades privadas (explotadas por su dueño para <strong>en</strong>vasaraceite propio; produci<strong>en</strong>do <strong>en</strong>vases para si y para otros;desvinculada del fundo produci<strong>en</strong>do para otros y explotadas:directam<strong>en</strong>te, por intermediario o arr<strong>en</strong>dada a un conductor)o públicas (arr<strong>en</strong>dadas a un conductor o regidas por unprocurator dep<strong>en</strong>di<strong>en</strong>te de la administración).3. El tipo de producciones de los c<strong>en</strong>tros alfareros.24


Alfares y <strong>hornos</strong> <strong>romanos</strong> <strong>en</strong> Andalucía. Historiografía de la investigación y claves de lecturaFigura 20.- Alfares de ánforas de salazones de pescado.Estos factores permit<strong>en</strong>, <strong>en</strong> consecu<strong>en</strong>cia, una primeraaproximación con modelos, no exhaustivos, <strong>en</strong>tre los quesobresal<strong>en</strong>:a. “C<strong>en</strong>tros costeros”. Situados para llevar a cabo una salidarápida de los productos. Predominan las ánforas de salazones<strong>en</strong>tre sus producciones, pero se complem<strong>en</strong>tan y amortizanlas instalaciones fabricando otros productos (cerámicascomunes y materiales de construcción) de forma estacional ypara at<strong>en</strong>der necesidades locales, propias o muy inmediatas.Se ligan con puertos comerciales y con vías decomunicación, especialm<strong>en</strong>te marítimas. Pued<strong>en</strong> serautónomos (Matagallares) o t<strong>en</strong>er alguna dep<strong>en</strong>d<strong>en</strong>ciarespecto de un núcleo habitado (Loma de Ceres). Son lospuertos de distribución y su conexión con algunas ciudades,los que condicionan <strong>en</strong> ocasiones las instalaciones, (bahía deAlgeciras).b. En la misma línea estratégica se sitúan los <strong>hornos</strong> de losríos Guadalquivir y G<strong>en</strong>il, cuya navegabilidad, accesibilidady proximidad de los recursos naturales es semejante a la delos situados <strong>en</strong> la costa. Estas figlinas pued<strong>en</strong> o no coincidircon el fundus correspondi<strong>en</strong>te.c. Hay <strong>hornos</strong> dep<strong>en</strong>di<strong>en</strong>tes de villas, destinadasfundam<strong>en</strong>talm<strong>en</strong>te a la producción vinaria y salazonera(Loma de Ceres, Molvízar, Granada).d. “C<strong>en</strong>tros urbanos”, intramuros, o situados <strong>en</strong> la inmediataproximidad de determinados núcleos habitados, que pued<strong>en</strong>abastecer a mercados regionales y especialm<strong>en</strong>te a ciudadescomo sucede con las figlinas de la depresión de Antequera(sigillata, cerámica comun y materiales de construcción:Singilia Barba, Peñarrubia, Teba) o con los de Granada. Nosuel<strong>en</strong> ser de ánforas habitualm<strong>en</strong>te, pero se conoc<strong>en</strong> algunosmodelos, como <strong>en</strong> Cádiz <strong>en</strong> época temprana (s. I a. C.).4.- Propuestas.4.1.- Modelos de <strong>alfares</strong> autónomos.Parec<strong>en</strong> destinados a satisfacer tanto la demanda local comola regional, si<strong>en</strong>do es<strong>en</strong>cial su posición geoestratégica, comolos Matagallares (Bernal et alii 1998, 97), <strong>en</strong> ladesembocadura del río Guadalfeo, presto para at<strong>en</strong>der alinterior (cerámica común), así como para abastecer adeterminados c<strong>en</strong>tros de producción de alim<strong>en</strong>tos <strong>en</strong> un radiode acción determinado. Se explican así, <strong>en</strong> las ánforas, losgrandes c<strong>en</strong>tros productores de salazones sin <strong>alfares</strong>asociados (como Sexi), al igual que el f<strong>en</strong>óm<strong>en</strong>o inverso.25


Miguel Beltrán LlorisFigura 22.- Morteros béticos (Seg. Serrano Ramos).y cerámicas comunes de autoabastecimi<strong>en</strong>to, pesas de telar,terracotas figuradas (Bernal 1993, 147 ss.), y cerámica debarniz negro, con pres<strong>en</strong>cia además de un horno de tapaderasde ánforas (Fernández Cacho 1995, 70, 195; 1997, 173 ss).Figura 21.- Agrupaciones cronológicas según yacimi<strong>en</strong>tos fechados.Recopilación de Martín-Kilcher.Estos c<strong>en</strong>tros ti<strong>en</strong><strong>en</strong> <strong>en</strong>tre sus producciones habituales losmateriales de construcción (a veces <strong>en</strong> proporciónimportante) y las cerámicas comunes y además se constatanotras producciones como los vidrios y la cal (V<strong>en</strong>ta delCarm<strong>en</strong>) (Fu<strong>en</strong>tes 1998, 255 ss.) o las lucernas (Cerro de losMártires), de modo que estamos ante c<strong>en</strong>tros de produccióndiversificada que <strong>en</strong> la bahía de Algeciras, p. e., abastec<strong>en</strong> aCarteia, Iulia Traducta y Portus Albus.En la bahía de Cádiz se observa el paso de la producción <strong>en</strong>pequeños <strong>alfares</strong> de villae a una cierta industria cerámica,desligada de las actividades agropecuarias, a mediados del s.I d. C., como sugeriría el Olivar de los Val<strong>en</strong>cianos(Campano 1994, 135 ss.; García Vargas 1998, 228) o elCerro de los Mártires y Gallineras (San Fernando) (s. I d. C.)(Beltrán Lloris 1977, 104 ss.; García Vargas 1998, 164 ss ).Destaca el establecimi<strong>en</strong>to de Pu<strong>en</strong>te Melchor, cerca del mary <strong>en</strong> la Vía Augusta, caracterizado por una evid<strong>en</strong>teespecialización <strong>en</strong> la producción cerámica: ánforas desalazón y vinarias, cerámicas comunes, e incluso exvotos deterracota (Pérez López et alii 1996, fig. 5), que coincide conuna etapa de crisis <strong>en</strong> la que sobreviv<strong>en</strong> los talleres mejorsituados (García Vargas 1998, 230 ss.).En la Bahía de Algeciras, el Rinconcillo (Bernal 1998b, 21ss.), produjo mayoritariam<strong>en</strong>te ánforas de salazones depescado, vino y aceite, además de materiales de construcciónV<strong>en</strong>ta del Carm<strong>en</strong> (Augusto-flavios), <strong>en</strong> la esfera deinflu<strong>en</strong>cia de Iulia Traducta, produjo <strong>en</strong>vases de salazones yvinarios (Bernal 1998 a, 143 ss), además de materiales deconstrucción variados (Redondo, Borge 1998, 231 ss.) y unhorno de ungü<strong>en</strong>tarios de vidrio (Fu<strong>en</strong>tes 1998, 255 ss;Bernal, 1998c, 399 ss.) elem<strong>en</strong>tos que dan idea de ladiversificación de las instalaciones, <strong>en</strong> el mom<strong>en</strong>to de mayorauge de la Bahía de Algeciras (Bernal, Lor<strong>en</strong>zo 2001, 1306ss.).En la costa de Málaga el complejo de Huerta del Rincón,Torremolinos (Baldomero, Corrales et alii 1997, 147 ss.),pres<strong>en</strong>ta <strong>hornos</strong> y estancías auxiliares propias del alfar <strong>en</strong>forma de piletas y ámbitos para el tratami<strong>en</strong>to de arcillas,produci<strong>en</strong>do desde la etapa altoimperial, ánforas salsarias yde aceite hasta el bajo imperio. Subsidiariam<strong>en</strong>te fabricócerámica común variada (cu<strong>en</strong>cos decorados, fu<strong>en</strong>tes,morteros, tapaderas, jarras, lebrillos, etc.).4.2.- Modelos dep<strong>en</strong>di<strong>en</strong>tes de Villae.Son modelos productivos de pequeño tamaño dep<strong>en</strong>di<strong>en</strong>tes,<strong>en</strong> el caso de las ánforas, de villas agropecuarias, deproducción diversificada (vino, salazones, aceite), comoevid<strong>en</strong>cian algunos ejemplos, <strong>en</strong> la cu<strong>en</strong>ca del río Guadalfeo(Loma de Ceres). Este f<strong>en</strong>óm<strong>en</strong>o es temprano <strong>en</strong> villae dePuerto de Santa María (Los Tercios, Las Manoteras) y PuertoReal (Santo Domingo) de Cádiz y se sitúa <strong>en</strong> la segundamitad del s. I a. C., de la mano de as<strong>en</strong>tami<strong>en</strong>tos itálicos queproduc<strong>en</strong> para consumo propio o bi<strong>en</strong> para la v<strong>en</strong>ta (GarcíaVargas 1998, 220), <strong>en</strong> t<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia que se asi<strong>en</strong>ta <strong>en</strong> el s. I d. C.26


Alfares y <strong>hornos</strong> <strong>romanos</strong> <strong>en</strong> Andalucía. Historiografía de la investigación y claves de lecturaEste modelo de alfar <strong>en</strong> el que coincid<strong>en</strong> propietarios depredios como gestores de los <strong>alfares</strong>, se manifiesta desde elaltoimperio (Augusto) tanto <strong>en</strong> el valle del Guadalquivircomo <strong>en</strong> otros ámbitos. La g<strong>en</strong>eralización de las marcassobre las ánforas evid<strong>en</strong>cia un cambio <strong>en</strong> la gestión de estos<strong>alfares</strong>.El grado de indep<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia de los <strong>alfares</strong>, respecto de lasvillae y el trabajo para terceros, dep<strong>en</strong>de de la demanda y delas alternativas de la difusión y el estudio epigráfico de lasestampillas. Así, el alfar del Olivar de los Val<strong>en</strong>cianos (bahíade Cádiz), dep<strong>en</strong>dió de una villa inmediata y fabricó ánforaspara terceros, según demuestra el repertorio epigráfico(Campano 1994, 135 ss.; García Vargas 2001, 115), al igualque el alfar de Torrox (Málaga) ( Rodríguez Oliva 1997, 271ss.). También de explotación agropecuaria y marítima, es lavilla de Pu<strong>en</strong>te Grande (Los Barrios, Cádiz) (s. I - IV d. C.),con producción de ánforas de salazones (Bernal 2001a, 1311ss).4.2.1.- C<strong>en</strong>tros “aceiteros” del valle del Baetis.Estos c<strong>en</strong>tros dibujan un complejo <strong>en</strong> el que las difer<strong>en</strong>tesfases de fabricación, trasvase y exportación de aceite hanoriginado el nacimi<strong>en</strong>to de grandes empresas junto a lasorillas del Baetis, <strong>en</strong> donde se ha producido una importanteconc<strong>en</strong>tración de medios. Se comprueba como los <strong>alfares</strong> sesitúan <strong>en</strong> zonas ricas <strong>en</strong> arcilla y dep<strong>en</strong>di<strong>en</strong>do de una villa deforma habitual (Chic 2001, 444 ss.). Algunas de las alfareríasllegaron a t<strong>en</strong>er proporciones <strong>en</strong>ormes (20 hectáreas de laCatria).Entre los escasos c<strong>en</strong>tros conocidos el del Tejarillo produjo,desde el siglo II d. C. al Bajo Imperio, ánforas Dr. 23 yTejarillo I-III, <strong>en</strong> baterías de hasta cinco <strong>hornos</strong> (Remesal1983, 119 ss). El c<strong>en</strong>tro de las Delicias de Écija (GarcíaVargas 1998; Sáez et alii, 1997; García Vargas 2001, 92 ss.),asociado a una villa, ha proporcionado un horno, vertederos,almacén y taller del s. I d. C. que fabricó ánforas Dr. 20 y devino (minoritarias) y material de construcción.En la misma línea el c<strong>en</strong>tro de Azanaque (Lora del Río),pert<strong>en</strong>ece a un gran complejo y puerto de embarque, queabrigó la elaboración del aceite, la producción de ánforas,cerámicas de construcción y vajillas comunes (Romo, Vargas2001, 410 ss.).4.3.- Modelos de dep<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia urbana.Son los <strong>alfares</strong> peor conocidos, incluso <strong>en</strong> el resto deHispania. Debieron ser sistematizados <strong>en</strong> barrios específicosy hay atisbos de figlinas de ánforas <strong>en</strong> Cádiz (Calle Javier deBurgos), Puerto de Santa María (C/ Gregorio Marañón),Málaga (Rambla, Mayorga 1997, 61 ss.) y posiblem<strong>en</strong>te <strong>en</strong>Baelo Claudia (Eti<strong>en</strong>ne, Mayet 2002, 65). Determinadostalleres de sigillata están <strong>en</strong> función de una ciudad y de su<strong>en</strong>torno inmediato: Iliberri (Sotomayor, Sola, Coclan 1984,18), Singilia Barba, Antikaria, Alameda y Teba.4.4.- Otros modelos.En aus<strong>en</strong>cia de datos, sobre las paredes finas, por ejemplo,solo cabe recoger las hipótesis g<strong>en</strong>erales emitidas sobre estetipo de talleres, que alud<strong>en</strong> primordialm<strong>en</strong>te a c<strong>en</strong>tros de tipofamiliar o medio, por supuesto muy alejados de los c<strong>en</strong>trosproductores de otras especies y de situación desconocida.4.5.- Hornos de lucernas.Parece corroborarse la aus<strong>en</strong>cia de oficinas dedicadas <strong>en</strong>exclusividad a la producción de lucernas (Bernal 1990-91,155), que según los datos del Rinconcillo, Cerro de losMártires o Andújar, formarían parte de complejos mayoresdedicados subsidiariam<strong>en</strong>te a dichos productos. Su difusiónse limita a las zonas vecinas salvo excepciones que seexpand<strong>en</strong> a mayor distancia como las producciones deAndújar que <strong>en</strong> lo relativo al Valle del Guadalquivir sedifund<strong>en</strong> sigui<strong>en</strong>do las pautas de la TSH y <strong>en</strong> el resto deHispania como mercancía de compañía de otrasproducciones, tal vez del aceite bético (Morillo 1992; id.1999, 102).5.- Bases epigráficas.Su interpretación está <strong>en</strong> función de la especie cerámica(Beltrán Lloris 1994), si<strong>en</strong>do los modelos más espectaculareslos deducidos de las ánforas por la variedad de formulacionese información que ofrec<strong>en</strong> los títuli picti y los sellos.5.1.- Ánforas.La epigrafía anforaria manti<strong>en</strong>e diversos niveles. En lorelativo a la forma Dr. 20, ha sido seriada por RodríguezAlmeida (fig. 23) (1993, 95 ss., id. 2001, 1287 ss. fig. 8.). Setrata de la fase de producción del <strong>en</strong>vase (grafitos in v<strong>en</strong>tre,in collo), el sellado nominal del ánfora como control desalida al horno, el control fiscal del ánfora y cont<strong>en</strong>ido (titulipicti α, γ, y δ, y la adquisición final por el mercator (y laannona) (tituli picti β). De todos ellos el más complejo porsu redacción y elem<strong>en</strong>tos, es el δ, control oficial de lamercancía con muy variadas refer<strong>en</strong>cias geográficas yonomásticas (Rodríguez Almeida 1972, 125 ss.; id. 1980, 67ss. ; id. 2001, 1289. Berni 1998, 21 ss.; Remesal 1979, 386ss). En las ánforas de salazones no son coincid<strong>en</strong>tes los tituliδ y γ, que alud<strong>en</strong>, respectivam<strong>en</strong>te, a los responsables,productores o propietarios de las oficinas de salazones(Lagóst<strong>en</strong>a 2001, 286 ss., 293 ss., 304 ss.) y a losdestinatarios o redistribuidores de las mercancías(Manacorda, 1977, 128 ss.; Eti<strong>en</strong>ne, Mayet, 1998, 214.). Enposición α determinados apelativos ti<strong>en</strong><strong>en</strong> valor onomásticoo geográfico (Lagóst<strong>en</strong>a 2001, 288; Martínez Maganto 2001,1215 ss), como algunas refer<strong>en</strong>cias del titulus δ <strong>en</strong> las Dr. 20(Rodríguez Almeida 1972, 122 ss. Aguilera 2001, 1235.).Los grabados ante cocturam expresan diversas circunstanciasque afectan a la propia estructura del producto y del lugar defabricación (Rodríguez Almeida 1984, 254; id., 1989-90. 1ss; id. 1993, 95-106; id. 2001, 1286 ss.; Beltrán Lloris 1994,181 ss.). Entre los grafitos, los situados <strong>en</strong> posición invertida<strong>en</strong> el bajo vi<strong>en</strong>tre, (Rodríguez Almeida, 2001, 1287 ss.), serefier<strong>en</strong> al primer estadio de fabricación, a la rota figulina;con fecha consular y nombres <strong>en</strong> nominativo, a los quecorrespond<strong>en</strong> los verbos fecit y scripsit; finalm<strong>en</strong>te el grafitoinciso in collo responde por su carácter numeral a unasección determinada de la figlina.27


Miguel Beltrán LlorisFigura 23.- Esquema interpretativo de la epigrafía sobre las ánforas Dr. 20 (seg. Rodríguez Almeida).28


Alfares y <strong>hornos</strong> <strong>romanos</strong> <strong>en</strong> Andalucía. Historiografía de la investigación y claves de lecturaEn lo relativo a los sellos, son varias las interpretacionesat<strong>en</strong>di<strong>en</strong>do a la id<strong>en</strong>tificación con los propietarios agrícolasproductores de los cont<strong>en</strong>idos, o bi<strong>en</strong> con los propietarios delas figlinae productoras de los <strong>en</strong>vases (Colls, Eti<strong>en</strong>ne et alii1977, p. 27, nota 30) e incluso simples comerciantes de<strong>en</strong>vases (Chic 2001).Para Remesal los sellos sobre las ánforas Dr. 20 id<strong>en</strong>tificanal propietario del aceite <strong>en</strong> su calidad de productorexportadoro de comprador-exportador (Remesal 1980). ParaRodríguez Almeida se trata además del control de la cocción<strong>en</strong> el horno así como <strong>en</strong> el portus o zona de almac<strong>en</strong>ami<strong>en</strong>to(Rodríguez Almeida 2001, 1288).Las posibilidades que expresan los sellos son distintas,at<strong>en</strong>di<strong>en</strong>do a su morfología y variedad epigráfica, quemodulan diversas fórmulas internas, según distintos nivelessociales, desde domini o institores (Di Porto 1985;Manacorda 1985; Sáez 2001) (14 formulaciones distintas,desde un nom<strong>en</strong>, duo nomina, duo nomina + figlina, trianomina, dominus + <strong>officina</strong>tor, asociaciones, figlinas, etc.),<strong>officina</strong>tores (pued<strong>en</strong> ser esclavos) y posibles refer<strong>en</strong>cias alibertos.Las fórmulas usadas transpar<strong>en</strong>tan diversas modalidades detrabajo que se reflejaron <strong>en</strong> la organización de los c<strong>en</strong>trosproductores y <strong>en</strong> función de los tipos anfóricos. Los sellos <strong>en</strong>los <strong>en</strong>vases indican un proceso variado de estructuraeconómica, no siempre fácil de explicar, con una etapaanepígrafa prácticam<strong>en</strong>te g<strong>en</strong>eralizada más allá del s. IV dela Era (Beltrán Lloris 1994, 176 ss., Berni 1996, 311 ss).5.2.- Otras cerámicas.En la sigillata la información es mucho más reducida. EnAndújar (con 46 oficinas) se constata la pres<strong>en</strong>cia de nomina(13%), duo nomina (38%) y tria nomina (47%), comosíntoma según Roca (1976, 102) de relación con productorestardoitálicos, con aus<strong>en</strong>cia de cognomina griegos y exclusiónpor lo tanto de condiciones serviles (Mayet 1984, 44). Sonpor lo tanto personajes a id<strong>en</strong>tificar, domini o institores. Deellos destaca, <strong>en</strong> la primera g<strong>en</strong>eración, M. Satrus Montanus,un gran productor que dispone de vasos decorados y queparece alquilar su horno a productores m<strong>en</strong>ores (Quartio yTiti Oppi) (Sotomayor 1977, 22; Roca 1998). Las oficinascompraban los punzones y solo unas cuantas fabricaronformas decoradas (CVDAS, M.S.M., Q.S.P.). Solo se conoceuna asociación de tres productores (EX.OF.M.S.M., C.P.F., yM.T.F) (Sotomayor 1977, 17; Mayet 1984, 217), vestigiosque permit<strong>en</strong> atisbar sobre las formas de gestión yproducción del taller de Andújar. En la primera g<strong>en</strong>eración,de jerarquización de talleres, intervi<strong>en</strong><strong>en</strong> <strong>officina</strong>tores librescon un nivel organizativo alto y capacidad de producción,servida <strong>en</strong> su difusión de largo alcance por el Guadalquivir.Las oficinas de la segunda fase, flavia (la de máximaexpansión) solo fabrican cerámicas lisas, sin indicios dejerarquización y con simplificación del repertorio formal(Roca 1998, 117), como se aprecia también <strong>en</strong> otras familiascerámicas (ánforas). La dep<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia de Granada (<strong>en</strong> sus dosfases) parece clara según el uso de punzones (de M.S.M. yQVARTIO) y moldes de Andujar (Serrano 1999, 142).M<strong>en</strong>os expresivas son las informaciones de las reducidasproducciones de lucernas, que nos llevan igualm<strong>en</strong>te a lostria nomina de la bahía de Cádiz. El resto de las cerámicasno ofrece información salvo las consideraciones g<strong>en</strong>eralesdeducidas de otros ámbitos extrabéticos, que aunqueayudarían ahora, nos alejarían de nuestro propósito.Así las cosas convi<strong>en</strong>e detallar varias interrogantes:1.¿ Cual es el proceso de estampillado de las cerámicas,agrupadas por c<strong>en</strong>tros alfareros para observar su dinámica alo largo del tiempo?,2. ¿Cuáles son los mom<strong>en</strong>tos de máximo estampillado?,3.¿ Cuando disminuy<strong>en</strong> o desaparec<strong>en</strong> los sellos?,4.¿Cómo se relaciona dicho f<strong>en</strong>óm<strong>en</strong>o con la mayor o m<strong>en</strong>orcomplejidad tipológica de los recipi<strong>en</strong>tes?,5.¿Qué variedad de estampillas pert<strong>en</strong>eci<strong>en</strong>tes a distintosindividuos se aprecia por cada horno estudiado ? ¿ Cómo seexplica este f<strong>en</strong>óm<strong>en</strong>o cronológicam<strong>en</strong>te?6.- Líneas de desarrollo cronológico.Desde las ánforas, hay una base de tradición púnica quesubyace a determinados territorios, como muestra el c<strong>en</strong>trode Pery Junquera (San Fernando) (s. II a. C.), sobre el queincide el mundo romano, culminando el proceso de tránsito<strong>en</strong> la época tardorrepublicana. La bahía de Cádiz, osciladesde los c<strong>en</strong>tros iniciales (final del s. I a. C.) asociados a lasvillae hasta los c<strong>en</strong>tros industriales <strong>en</strong> pl<strong>en</strong>o funcionami<strong>en</strong>toa mediados del siglo I d. C., el floruit económico de laBética.En la Bahía de Algeciras, los c<strong>en</strong>tros mejor docum<strong>en</strong>tados, elRinconcillo y las V<strong>en</strong>tas del Carm<strong>en</strong> cesan a mediados ofinales del s. I , si<strong>en</strong>do una incógnita los <strong>alfares</strong> del siglo II d.C. (Bernal 1998b, 37), que se ha explicado como laindividualización de un modelo de taller flavio-antonino(Lagóst<strong>en</strong>a 2001, 281 ss.), si<strong>en</strong>do la tipología anfórica unindicio de la mayor o m<strong>en</strong>or complejidad y atomización delos c<strong>en</strong>tros productores. Según García Vargas (2001, 119ss.), a la (relativa) variedad inicial sucede <strong>en</strong> la segundamitad del siglo I d. C. una mayor estandarización <strong>en</strong> los tiposde ánforas, que se ha interpretado como un proceso creci<strong>en</strong>tede mayor “industrialización” (interv<strong>en</strong>ción de la Annona,increm<strong>en</strong>to de sellos desde el s. II).Según conclusiones de Bernal, <strong>en</strong> la costa granadina,observamos una evid<strong>en</strong>te prosperidad <strong>en</strong>tre los siglos I y IIId. C., con un mom<strong>en</strong>to de especial int<strong>en</strong>sidad <strong>en</strong> el siglo IIIcon figlinae normalm<strong>en</strong>te activas hasta el siglo IV d. C.Durante el siglo III d. C. <strong>en</strong> la costa bética salazonera, se haseñalado un cierto continuismo bajo mínimos históricos, condiversas fluctuaciones (Lagóst<strong>en</strong>a 2001, 317), <strong>en</strong> ritmosproductivos que se recuperan <strong>en</strong> el s. IV, <strong>en</strong> muchos casosimpulsados por núcleos urbanos de <strong>en</strong>orme pot<strong>en</strong>cia, comoMalaca. Esta continuidad se constata <strong>en</strong> el siglo V d. C.según los contextos arqueológicos de determinadas factorías(Onuba, Gades, Baelo, etc.) y con un cierto continuismo sinniveles de int<strong>en</strong>sidad <strong>en</strong> la VI c<strong>en</strong>turia (Lagóst<strong>en</strong>a 2001, 331ss.).29


Alfares y <strong>hornos</strong> <strong>romanos</strong> <strong>en</strong> Andalucía. Historiografía de la investigación y claves de lectura7.3.- Otros ámbitos constructivos y produccionessecundarias.Además de las estancias de significado confuso se hanid<strong>en</strong>tificado espacios singulares <strong>en</strong> estos complejos:alojami<strong>en</strong>tos de trabajadores (Casilla de Malpica) (Remesal2001, 385; Chic 2001, 115), estancias con pasillocomunicado con el horno (Puerto Real, Gallinero)(Campano, 1994, 136), estancias vestibulares respecto de los<strong>hornos</strong> (V<strong>en</strong>ta del Carm<strong>en</strong>, Hospital de las Cinco Llagas)(Bernal, Lor<strong>en</strong>zo, 105 ss.; García Vargas 2001, fig. 38),almac<strong>en</strong>es (Huerta del Rincón, Matagallares) (Baldomero,Corrales et alii 1997, 149, fig. 2A), lotes de ánforasreservadas (Villanueva) (García Vargas 1999), silos dearcillas (Azanaque) (Romo, Vargas 2001, 408 y 410), piletasde decantación y elaboración de arcillas (Huerta del Rincón,Azanaque) (Baldomero, Corrales et alii 1997, 149, 150, figs.2E, 3 I), superficies de secado (Azanaque, Olivar de losVal<strong>en</strong>cianos) (Romo, Vargas 2001, 409; Chic 2001, 140),estructuras relacionadas con el suministro hidráulico (Huertadel Rincón, V<strong>en</strong>ta del Carm<strong>en</strong>) (Bernal, Sánchez 1998, 121ss.; Baldomero, Corrales et alii 1997, 149, fig. 2E; Romo,Vargas 2001, 409; García Vargas, Lavado 1995, 217;Jiménez Cisneros 1971, 143 ss.; Lazarich et alii 2001, 207),espacios para el torneado de piezas (Baldomero, Corrales etalii 1997, 150), algunos con rueda de alfarero como <strong>en</strong> elCastillejo (Chic 2001, 226), vertederos (Bernal, Sánchez1998, 145), almazaras (Azanaque) (Romo, Vargas Jiménez2001, 409 ss.; Chic 2001, 213), depósitos para el aceitepr<strong>en</strong>sado (Chic 2001, 53) y otras producciones cerámicas,además del utillaje alfarero.8. Algunas necesidades.Para concluir, se pued<strong>en</strong> señalar algunas necesidades:a. El estudio int<strong>en</strong>sivo de las estructuras id<strong>en</strong>tificadas comocomplejos alfareros, ahondando no solo <strong>en</strong> los <strong>hornos</strong> comotales, sino <strong>en</strong> todos los establecimi<strong>en</strong>tos o formasarquitectónicas secundarias.b. <strong>Ex</strong>cavaciones <strong>en</strong> los <strong>alfares</strong> cuyo contexto estratigráfico,permita seriaciones cronológicas fiables, indep<strong>en</strong>di<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>tede la propia cronología cerámica. El vacío es acuciante <strong>en</strong> lorefer<strong>en</strong>te a los c<strong>en</strong>tros olearios del Betis y a los <strong>alfares</strong> de lossiglos tardíos (ss. IV y V ante todo).c. La caracterización petrológica exhaustiva por c<strong>en</strong>tros deproducción corroborada por análisis químicos.d. El estudio macroeconómico de todos los hallazgos,determinando las producciones principales y las secundariasde las figlinas y detallando cronologicam<strong>en</strong>te los ciclosproductivos de las distintas especies (ánforas, sigillata,cerámicas de cocina y mixta, materiales de construcción…)que deb<strong>en</strong> obedecer a estímulos diversos.e. Cartas de distribución por <strong>alfares</strong> y producciones paradiscernir y clasificar los c<strong>en</strong>tros desde el punto de vista local(cerámicas comunes sigillata malagueña), regional o de grandifusión (sigillata de Andújar) o transmarino (aceite,salazones).Figura 25.- Horno de cerámica común de March<strong>en</strong>a (Sevilla) (seg. RomeroMoragas).f. El estudio conjunto y exhaustivo de la epigrafía asociada acada de las producciones de los c<strong>en</strong>tros productores, paradiseñar la trayectoria económica y las fórmulas deproducción <strong>en</strong>sayadas a lo largo de su historia.g. Una mejor definición y estudio de las producciones decerámicas comúnes y de construcción de los <strong>hornos</strong> delGuadalquivir, constatadas superficialm<strong>en</strong>te <strong>en</strong> numerosospuntos.h. El estudio comparado <strong>en</strong>tre las producciones agrícolas ypiscícolas y las alfareras, para determinar el grado deconcordancia y dep<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia <strong>en</strong>tre ambos, como el abandonosalazonero a finales del s. I de la Era, al que parececorresponder determinados c<strong>en</strong>tros productores de ánforas.i. La comparación <strong>en</strong>tre los contextos lusitanos y béticos para<strong>en</strong>t<strong>en</strong>der la compet<strong>en</strong>cia <strong>en</strong>tre ambos territorios salazonerosy el auge o declive de algunos <strong>en</strong> función de la asc<strong>en</strong>siónlusitana que parece dibujarse <strong>en</strong> determinados mom<strong>en</strong>tos.j. El estudio sistemático de los procesos de producciónanfórica <strong>en</strong> época julioclaudia, la conc<strong>en</strong>tración industrial ytipológica de la etapa flavia, así como la indefinición queparece afectar a los <strong>en</strong>vases a finales del siglo II d. C.k. El proceso productivo de los talleres de sigillata ycerámica común de Andújar, Granada y Málaga y su cese <strong>en</strong>el s. II como consecu<strong>en</strong>cia de la concurr<strong>en</strong>cia deproducciones africanas.l. Estudio det<strong>en</strong>ido de los procesos de estandarización deformas (sigillatas, ánforas, desaparición de paredes finas…)31


Miguel Beltrán Lloris<strong>en</strong> la etapa flavia, coincid<strong>en</strong>tes con un f<strong>en</strong>óm<strong>en</strong>o deconc<strong>en</strong>tración y cambios <strong>en</strong> la gestión y difusión de losproductos.m. Entre las car<strong>en</strong>cias, falta la localización de numerososproductos t<strong>en</strong>idos como béticos, sin <strong>alfares</strong> hasta la fecha:Paredes finas, atribuidas al Golfo de Cádiz y a Córdoba,(formas Mayet XXXIV y XXXVI-XL especialm<strong>en</strong>te);lucernas de Cádiz, Córdoba e Italica.9.- Bibliografía.AA.VV. (1983): “Terra Sigillata Hispánica”, Bol. M.A.N., 1-2,Madrid.AA.VV. (1997): Figlinae Malacitanae. La producción cerámicaromana <strong>en</strong> los territorios malacitanos, Málaga.AA.VV. (1998): Terra Sigillata Hispánica. Estado actual de laInvestigación, Jaén.AA.VV. (1999): Terra Sigillata Hispánica. C<strong>en</strong>tros de fabricacióny producciones altoimperiales, Málaga.AA.VV. (2001): Congreso Internacional. <strong>Ex</strong> baeticae Amphorae.Conservas, aceite y vino de la Bética <strong>en</strong> el Imperio Romano, Sevilla– Écija, 17 al 20 de diciembre de 1998, (IV vols.).ADROHER AUROUX, A.M., LÓPEZ MARCOS, A. (2000):“Contexto de barniz negro <strong>en</strong> la Alta Andalucía <strong>en</strong>tre los siglos II yI a.C.”, La ceràmica de vernís negre dels segles II i I a. C. : C<strong>en</strong>tresproductors mediterranis i comercialització a la P<strong>en</strong>insula ibèrica,(Ampurias 4 i 5 de junio de 1998), Mataró, pp. 149-176.AGUILERA MARTÍN, A. (2001): Los tituli picti ddel conv<strong>en</strong>toastigitano <strong>en</strong> el primer tercio del s. III d.C.”, <strong>Ex</strong> BaeticaeAmphorae, IV, Écija, pp. 1231-1240.ALARCAO, J., MAYET, F. (1990): As Ânforas romanas.Tipologia: Produçao. Comercio, París.ALONSO VILLALOBOS, C., (1987): “Prospección para lalocalización de yacimi<strong>en</strong>tos de producción anfórica de época romana.Cádiz”, A.A.A. 1986, tomo II, pp. 97-105.AMARÉ TAFALLA, M.T. (1988-89): “Notas sobre un posibletaller de lucernas romanas <strong>en</strong> Córdoba”, Ifigea, 5-6, pp. 103-115.AMORES CARRIAZO, F., KEAY, S. (1999): “Producciones tipoPeñaflor”, Terra sigillata hispánica. C<strong>en</strong>tros de fabricación yproducciones altoimperiales, Málaga, pp. 235-252.ARTEAGA, O. (1982) "Die römisch<strong>en</strong> öf<strong>en</strong> von Manganeto beiTorre del Mar (Málaga)", MM, 23, pp. 234-246.ARTEAGA, O. (1984): "Zur stratigraphisch<strong>en</strong> <strong>en</strong>twicklung derpunisch<strong>en</strong> und römisch<strong>en</strong> amphor<strong>en</strong> auf dem Cerro del Mar(Málaga)", MM, 25, pp. 34-71.ARTEAGA, O. (1985): "Los <strong>hornos</strong> <strong>romanos</strong> del Manganeto,Almayate Bajo (Málaga). Informe preliminar", NAH ,23, pp. 177-197.BAENA DEL ALCÁZAR, L. (1997): “Arquitectura y tipología delos <strong>hornos</strong> <strong>romanos</strong> malacitanos”, AA.VV., 1997, pp. 95-106.BALDOMERO NAVARRO, A., SERRANO RAMOS, E.(1991): “Notas sobre la producción de ánforas <strong>en</strong> la Huerta delRincón (Torremolinos, Málaga)”, Baetica, 13, pp. 149-154.BALDOMERO, A., CORRALES, P. ET ALII (1997): “El alfarromano de la Huerta del Rincón: síntesis tipológica y mom<strong>en</strong>tos deproducción”, AA.VV., 1997, pp. 147-176.BELTRÁN FORTES, J., MORA SERRANO, B. (1982):“Tipología de los productos cerámicos del alfar romano de Torrox-Costa (Málaga)”, I Congreso andaluz de Estudios Clásicos”, Jaén,pp. 149-155.BELTRÁN LLORIS, M. (1970): Las ánforas romanas <strong>en</strong> España,Monografías Arqueológicas, n. 8, Zaragoza.BELTRÁN LLORIS, M. (1977): "Problemas <strong>en</strong> torno al conceptohistórico-geográfico que recubre la noción de tipo. Aportaciones ala tipología de las ánforas béticas", Méthodes classiques etméthodes formelles dans l ´étude des amphores, Collection del´Ecole Française de Rome, 32, Roma, pp. 97-131.BELTRÁN LLORIS, M. (1990): Guía de la cerámica romana,Libros Pórtico, Zaragoza.BELTRÁN LLORIS, M. (1994): “Artistas y artesanos <strong>en</strong> laantigüedad clásica. Los ceramistas y alfareros <strong>en</strong> Roma”, Artistas yartesanos <strong>en</strong> la antigüedad clásica, Cuadernos Emerit<strong>en</strong>ses, 8,Mérida, pp. 159-213.BERNAL CASASOLA, D. (1990-91): “Figuli hispani: testimoniosmateriales de manufactura p<strong>en</strong>insular de lucernas <strong>en</strong> épocaromana”, OPVS, IX-X, pp. 147-159.BERNAL CASASOLA, D. (1993): “Las terracotas del Rinconcillo(Algeciras-Cádiz): una posible producción local de figurillas <strong>en</strong>época romana”, Almoarima, 9, pp. 147-161.BERNAL CASASOLA, D. (1993 a): “Una pieza excepcional delMuseo Nazionale de Roma y el problema de las lucernas tipoAndújar”, Espacio, Tiempo y Forma, Serie II, t. 6, pp. 207-220.BERNAL CASASOLA, D. (1996): “Las ánforas del tipo Beltrán68 <strong>en</strong> Hispania: problemática y estado de la cuestión”, XXIII CNA(Elche 1995), pp. 251-269.BERNAL CASASOLA, D. (1996a): “El vino de la Bética costeraori<strong>en</strong>tal <strong>en</strong>tre el s. III d. C. y la Tardía Antigüedad: nuevasaportaciones arqueológicas”, II Simposio de la Arqueología delVino, El vino <strong>en</strong> la Antigüedad Romana (Jeréz de la Frontera 1996),Pub. del Dep. de Preh. y Arq. de la Universidad Autónoma, SerieVaria, 4, pp. 253-262.BERNAL CASASOLA, D. (1998a):“Las ánforas de producciónlocal: tipología y caracterización”, <strong>Ex</strong>cavaciones arqueológicas <strong>en</strong>el alfar romano de la V<strong>en</strong>ta del Carm<strong>en</strong>, Los Barrios (Cádiz). Unaaproximación a la producción de ánforas <strong>en</strong> la bahía de Algeciras<strong>en</strong> época altoimperial, Madrid, pp. 143-198.BERNAL CASASOLA, D. (1998b): “La producción anfórica <strong>en</strong> labahía de Algeciras <strong>en</strong> época romana”, <strong>Ex</strong>cavaciones arqueológicas<strong>en</strong> el alfar romano de la V<strong>en</strong>ta del Carm<strong>en</strong>, Los Barrios (Cádiz).Una aproximación a la producción de ánforas <strong>en</strong> la bahía deAlgeciras <strong>en</strong> época altoimperial, Madrid, pp. 19-42.BERNAL CASASOLA, D. (1998g): “Las ánforas de vino béticas<strong>en</strong> la Baja Romanidad. Novedades proced<strong>en</strong>tes de reci<strong>en</strong>tesexcavaciones <strong>en</strong> c<strong>en</strong>tros de producción andaluces”, El vi al’Antiguitat. Economia, producció y comerç al Mediterranioccid<strong>en</strong>tal, 2 Col.loqui internacional d’Arqueologia Romana, pp.543-552.BERNAL CASASOLA, D. (1999b): “El vino <strong>en</strong> la Bética costeraori<strong>en</strong>tal <strong>en</strong>tre el s. III d. C y la Tardía Antigüedad: nuevasaportaciones arqueológicas”, El vino <strong>en</strong> la antigüedad romana,Serie Varia 4, Madrid, pp. 253-262.BERNAL CASASOLA, D. (2001): “La producción de ánforas <strong>en</strong>la Bética <strong>en</strong> el siglo III y durante el Bajo Imperio romano”, <strong>Ex</strong>Baeticae Amphorae, I, Écija, pp. 239-372.BERNAL CASASOLA, D. (2001a): “<strong>Ex</strong>cavaciones <strong>en</strong> <strong>alfares</strong><strong>romanos</strong> de la bahía de Algeciras (La V<strong>en</strong>ta del Carm<strong>en</strong> y el RingoRango <strong>en</strong> los Barrios) y la costa de Granada (Los Matagallares,Salobreña). Nuevos elem<strong>en</strong>tos para el estudio de la producciónanfórica bética <strong>en</strong>tre Augusto y el s. IV d. C.”, <strong>Ex</strong> BaeticaeAmphorae, IV, pp. 1305-1325.BERNAL CASASOLA, D., LORENZO MARTÍNEZ, L. (1998):“Los <strong>hornos</strong> y la estructuras asociadas”, <strong>Ex</strong>cavaciones arquelógicas<strong>en</strong> el alfar romano de la V<strong>en</strong>ta del Carm<strong>en</strong>, Los Barrios (Cádiz).Una aproximación a la producción de ánforas <strong>en</strong> la Bahía deAlgeciras <strong>en</strong> época altoimperial, Madrid, pp. 181-120.BERNAL CASASOLA, D., LORENZO MARTÍNEZ, L.(1998a): “Informe de la interv<strong>en</strong>ción arqueológica de urg<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> lavilla romana del Pu<strong>en</strong>te Grande (Los Altos del Ringo Rango, LosBarrios, Cádiz)”, Anuario de Arqueología Andaluza, Sevilla.BERNAL CASASOLA, D., LORENZO MARTÍNEZ, L. (2001):“<strong>Ex</strong>cavaciones <strong>en</strong> <strong>alfares</strong> <strong>romanos</strong> de la bahía de Algeciras (LaV<strong>en</strong>ta del Carm<strong>en</strong> y el Ringo Rango <strong>en</strong> los Barrios) y la costa de32


Alfares y <strong>hornos</strong> <strong>romanos</strong> <strong>en</strong> Andalucía. Historiografía de la investigación y claves de lecturaGranada (Los Matagallares, Salobreña). Nuevos elem<strong>en</strong>tos para elestudio de la producción anfórica bética <strong>en</strong>tre Augusto y el s. IV d.C.”, <strong>Ex</strong> Baetica Amphorae, Écija, IV, pp. 1305-13026.BERNAL CASASOLA, D., PÉREZ RIVERA, J. M. (2001): “Lasánforas de Septem Fratres <strong>en</strong> los siglos II y III de C. Un modelo desuministros de <strong>en</strong>vases gaditanos a las factorías de saalazones de lacosta tingitana”, <strong>Ex</strong> Baetica Amphorae, III, pp. 861-886.BERNAL, D., NAVAS, J. (1998): “La producción alfarera <strong>en</strong> lacosta granadina <strong>en</strong> época romana”, BERNAL, D., (coord), LosMatagallares (Salobreña, Granada). Un c<strong>en</strong>tro romano deproducción alfarera, Salobreña, pp. 63-100.BERNAL, D., NAVAS., J., ET ALII, (1998): “Las imitaciones deafricana de cocina”, BERNAL, D., (coord), Los Matagallares(Salobreña, Granada). Un c<strong>en</strong>tro romano de producción alfarera,Salobreña, pp. 363-394.BERNAL, D. ET ALII (1998): “Las cerámicas comunes deproducción local”, Los Matagallares (Salobreña, Granada). Unc<strong>en</strong>tro romano de producción alfarera, Salobreña, pp. 307-362.BERNAL, D., NAVAS, J., LORENZO, L., GÓMEZ, E. (1998a):“Las imitaciones de africana de cocina”, Los Matagallares(Salobreña, Granada). Un c<strong>en</strong>tro romano de producción alfarera,Salobreña, pp. 363-394.BERNAL, D., SÁNCHEZ, V. (1998): “El aprovisionami<strong>en</strong>tohidráulico del taller: canalizaciones y pozos manantiales”,<strong>Ex</strong>cavaciones arqueológicas <strong>en</strong> el alfar romano de la V<strong>en</strong>ta delCarm<strong>en</strong>, Los Barrios (Cádiz). Una aproximación a la producciónde ánforas <strong>en</strong> la bahía de Algeciras <strong>en</strong> época altoimperial, Madrid,121-142.BERNI MILLET, P. (1996): “Amphora Epigraphy: proposals forthe study of stamps cont<strong>en</strong>ts”, Archeologia e Calcolatori, 7, pp.751-770.BERNI MILLET, P. (1998): Las ánforas de aceite de la Bética ysu pres<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> la Cataluña romana, Col.leció Instrum<strong>en</strong>ta, 4,Barcelona.BLANCO JIMÉNEZ, F.J. (1993): “<strong>Ex</strong>cavaciones <strong>en</strong> un solar de lacalle Gregorio Marañón. Cádiz”, AAA III 1989, Sevilla, pp. 79-81.BLÁZQUEZ MARTÍNEZ, J.M., REMESAL RODRÍGUEZ, J.(2001): Estudios sobre el Monte Testaccio (Roma), II, Col.leccióInstrum<strong>en</strong>ta, 10, Publicacions Universitat de Barcelona, Barcelona.BLÁZQUEZ MARTÍNEZ, J.M., REMESAL RODRÍGUEZ, J.(2003) Estudios sobre el Monte Testaccio (Roma) III, Col.leccióInstrum<strong>en</strong>ta, 14, Publicacions Universitat de Barcelona, Barcelona.BLÁZQUEZ MARTÍNEZ, J.M. (2001): “Las excavacionesespañolas <strong>en</strong> el Monte Testaccio”, <strong>Ex</strong> Baeticae Amphorae, I, Écija,pp. 29-56.BLÁZQUEZ, J.M., REMESAL, J., RODRÍGUEZ ALMEIDA,E. (1994): <strong>Ex</strong>cavaciones arqueológicas <strong>en</strong> el Monte Testaccio(Roma). Memoria campaña 1989, Madrid.BONSOR, G. (1888): “Marcas de <strong>alfares</strong> <strong>romanos</strong>”, Memorias dela Sociedad Arqueológica de Carmona, pp.56-62.BONSOR, G. (1901): “Los pueblos antiguos del Guadalquivir y lasalfarerías romanas”, RABM, 1901, p.837-857.BONSOR, G. (1931): The archaeological expedition along theGuadalquivir 1889-1901, New York.CALLENDER, M.H. (1948): “Las ánforas del sur de españa y sussellos”, CHPH, pp. 139-142.CALLENDER, M.H. (1965): Roman Amphore, Oxford Univ.Press.CAMPANO LORENZO, A. (1994): “De la producción de ánforas<strong>en</strong> la Bahía de Cádiz. Materiales del alfar de “El Olivar de losVal<strong>en</strong>cianos”, Puerto Real”, A.EespA, 67, pp. 135-146.CARA BARRIONUEVO, L., ORTIZ, D. (1987): “Elas<strong>en</strong>tami<strong>en</strong>to costero de los Terreros (Mojácar) y algunas cuestionessobre la costa almeri<strong>en</strong>se <strong>en</strong> época romana”, El vi a l’antiquitat,Badalona, pp. 84-91.CARRERAS MONFORT, C. (2000): Economía de la Britaniaromana: La importación de alim<strong>en</strong>tos, Col.lecció Instrum<strong>en</strong>ta 8.CARRERAS MONFORT, C. (2001): “Producción de Haltern 70 yDressel 7-11 <strong>en</strong> las inmediaciones del Lacus Ligustinus (LasMarismas, Bajo Guadalquivir)”, <strong>Ex</strong> Baeticae Amphorae, I, Écija,pp. 419-426.CARRERAS MONFORT, C. (2003): “Haltern 70: a review”,Journal of Roman Pottery Studies, 10, pp. 85-91.CARRERAS MONFORT, C., FUNARI, P.P.A. (1998): Britanniay el Mediterraneo: estudios sobre el abastecimi<strong>en</strong>to de aceite béticoy africano <strong>en</strong> Britannia, Col.lecció Instrum<strong>en</strong>ta 5.CASAS, J., NOLLA, J.M. (1986-1989): “Un conjunt tancat ambceràmica africana a la vil.la romana dels Tolegassos (Viladamat, AltEmpordà)”, Empúries, 48-50, I, pp. 202-213.CASTILLO, C. (1984): “Los s<strong>en</strong>adores de la Bética: onomástica ypar<strong>en</strong>tesco”, Gerion, 2, pp. 245 ss.COLLS, D., ETIENNE, R. ET ALII (1977): L´epave Port V<strong>en</strong>dresII et le commerce de la Betique a l´epoque de Claude,Archeonautica, 1, Paris.COMFORT, H. (1939): “Some Barbotine bowls and theirconnetions”, ABull, XXI, pp. 274-274.CORZO SÁNCHEZ, R. (1981-82): "El ceramista Caius IuniusDracus", BMC, III, Cádiz, pp.279-282.CORZO SÁNCHEZ, R. (1982): "Un taller de ceramista <strong>en</strong> labahía de Cádiz. Gaius Iunius Dracus", Hom<strong>en</strong>aje a Sá<strong>en</strong>z deBuruaga, Badajóz, pp. 389-396.CHIC GARCÍA, G. (1984): “Lebrillos y macetas <strong>en</strong> los antiguos<strong>alfares</strong> <strong>romanos</strong> del Guadalquivir y del G<strong>en</strong>il”, Habis, 15, pp. 275-280.CHIC GARCÍA, G. (1985): Epigrafía anfórica de la Betica, I,Departam<strong>en</strong>to de Historia Antigua, Sevilla.CHIC GARCÍA, G. (1988): Epigrafía anfórica de la Bética. II. Losrótulos pintados sobre ánforas olearias. Consideraciones sobre laannona, Monografías del Departam<strong>en</strong>to de Historia Antigua de laUniversidad de Sevilla, n. 4, Sevilla.CHIC GARCÍA, G. (1994): “Los c<strong>en</strong>tros productores de lasánforas con la marca L.F.C.”, Hispania Antiqua, 18, pp. 171-233.CHIC GARCÍA, G. (2001): Datos para un estudiosocioeconómico de la Bética. Marcas de alfar sobre las ánforasolearias, I y II, Ecija.CHIC GARCíA, G., GILES PACHECO, F. Y SÁEZESPLIGARES, A. (1978): “Horno cerámico romano del ranchoPerea (San Isidro de Guadalete)”, BMC, I, pp. 43-52.CHIC GARCÍA, G., PADILLA MONJE, A. (1989): <strong>Ex</strong>pediciónarqueológica a lo largo del Guadalquivir, Ecija.CUOMO DI CAPRIO, N., (1971-72): "Proposta di classificazionedelle fornaci per ceramica e laterici nell´area italiana, dallapreistoria a tutta l´epoca romana", Sibrium, 11, pp. 371-464.DE FRUTOS, G. ET ALII (2000): “El complejo industrial desalazones gaditano de Camposoto, San Fernando, Cádiz: estudiopreliminar”, Habis, 31, pp. 37-61.DE LA PEÑA, J.F. (1967): “Alfares y marcas del valle medio delGuadalquivir”, AEA, 40, pp. 129-137.DÍAZ TRUJILLO, D., (1992): “<strong>Ex</strong>cavación arqueológica deurg<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> el cerro de Belén (Palma del Río, Córdoba)”, AAA. IIIActividades de Urg<strong>en</strong>cia. 1990, Sevilla, pp. 121-129.DIOGO, A.M. (1985): “O material dos fornos <strong>romanos</strong> do Abul noMuseu do Mar, chascáis” , Serie Arqueologica Museu do Mar,Cascais, I, 4.DIOGO, A.M., FARIA, J.C., FERREIRA, M.A. (1987 ): “Fornosde Ánforas de Alcácer do Sal”, Conimbriga, 26, pp. 77-112.DI PORTO, A. (1985): Impresa collettiva e schiavo "manager" inRoma antica II secolo a.C.-II secolo d.C., Milano.DOMERGUE, C. (1969): “<strong>Ex</strong>cavaciones <strong>en</strong> Bolonia”, CNA, X,Zaragoza, pp. 442-456.DRESSEL, H. (1878 ): “Ricerche sul Monte Testaccio”, Analidell’Istituto di Correspond<strong>en</strong>za Archeologica, L, Roma,, pp. 118-192.33


Miguel Beltrán LlorisDRESSEL, H. (1879): "Di un grande deposito di anfore rinv<strong>en</strong>utonel nuovo quartiere del Castro Pretorio", BCAR, 7, Roma, pp. 36-112 y 143-196.ETIENNE, R. (1949): “Les amphores du testaccio au IIIèmesiècle”, MEFRA, 41, pp. 151-181.ETIENNE, R., MAYET, F. (1994): “A propós de l’amphoreDressel 1 C de Belo (Cadix)”, MCV, XXX, 1, pp. 131-138.ETIENNE, R., MAYET, F. (1998): “Le garum a Pompei.Production et commerce”, REA, 100, pp. 199-215.ETIENNE, R., MAYET, F. (2000): Le vin hispanique, Trois cléspour l’économie de l´’Hispanie romaine, I, Paris.ETIENNE, R., MAYET, F. (2002): Salaisons et sauces de poissonhispaniques, Trois clés pour l’économie de l´’Hispanie romaine, II,Paris.FABIÃO, C. (1996): “O comercio dos productos da Lusitaniatransportados em ánforas no Baixo Imperio”, Ocupaçao romana dosestuarios do Tejo e do Sado, Actas das Primeiras Jornadas sobreRomanizaçao dos Estuatios do tejo e do Sado, Lisboa, pp. 329-342.FABIÃO, C. (1997 ): “Duas notas sobre Ánforas lusitanas”Almadan,II, serie 6, pp. 59-68.FABIÃO, C., GUERRA, A. (1993): “Sobre os cont<strong>en</strong>udos dasÁnforas lusitanas”, II Congreso P<strong>en</strong>insular de Historia Antigua,Acyas, Coimbra, pp. 995-1016.FERNANDEZ CACHO, S. (1991): “<strong>Ex</strong>cavaciones arqueológicas<strong>en</strong> el Rinconcillo (Algeciras, Cádiz)”, AAA, 91, pp. 70.76.FERNANDEZ CACHO, S. (1995): “<strong>Ex</strong>cavaciones arqueológicas<strong>en</strong> El Rinconcillo (Algeciras, Cádiz)”, AAA 92, III, Actividades deurg<strong>en</strong>cia, pp. 70-77.FERNANDEZ CACHO, S. (1997 ): “Las industrias derivadas dela pesca <strong>en</strong> la provincia romana de la Betica: la alfarería de ElRinconcillo (Algeciras, Cádiz)”, Spal,, 4, pp. 173-214.FERNANDEZ GARCÍA, I. (1998): “Características de la Sigillatafabricada <strong>en</strong> Andújar”, <strong>en</strong> AA.VV., 1998, pp. 49-104.FRANK, T. (1936 ): “On the <strong>Ex</strong>port on the Spanisch Harbours”,AJPh, pp. 87-90.FUENTES, A. (1998): “El vidrio: estudio de los restos defabricación de un taller de ungü<strong>en</strong>tarios”, <strong>Ex</strong>cavacionesarqueológicas <strong>en</strong> el alfar romano de la V<strong>en</strong>ta del Carm<strong>en</strong>, LosBarrios (Cádiz). Una aproximación a la producción de ánforas <strong>en</strong>la bahía de Algeciras <strong>en</strong> época altoimperial, Madrid, pp. 255-276.GAMER, G. "Uber neuere Funde von Töpferof<strong>en</strong> römisch<strong>en</strong> Zeitauf der Iberisch<strong>en</strong> Halbinsel", MM, XII, pp. 152-169.GARCÍA VARGAS, E. (1996): “La producción anfórica <strong>en</strong> labahía de Cádiz durante la república como índice de romanización”,Habis, 27, Sevilla, pp. 49-62.GARCÍA VARGAS, E. (1998 a): “C<strong>en</strong>tros productores de ánforasdel valle del G<strong>en</strong>il. Nuevas aportaciones arqueológicas”, Boletín dela Real Academia Luis Vélez de Guevara de Ecija, 2, pp. 105-133.GARCÍA VARGAS, E. (1998): La producción de ánforas <strong>en</strong> labahía de Cádiz <strong>en</strong> época romana (siglos II a. C. - IV d. C.), Ecija.GARCÍA VARGAS, E. (2000): “Ánforas romanas producidas <strong>en</strong>Hispalis: primera evid<strong>en</strong>cia arqueológicas”, Habis, 31.GARCÍA VARGAS, E. (2001): “La producción de ánforasromanas <strong>en</strong> el sur de Hispania. República y Alto Imperio”, <strong>Ex</strong>Baeticae amphorae, Ecija, pp. 57-174.GARCÍA VARGAS, E., LAVADO FLORIDO, M. L. (1995):“Ánforas alto, medio y bajoimperiales producidas <strong>en</strong> el alfar dePu<strong>en</strong>te Melchor (=Villanueva, Paso a Nivel: Puerto Real, Cádiz)”,SPAL, 4, pp. 215-228.GARCÍA VARGAS, E., LAVADO FLORIDO, M. L. (1996):“Definición de dos nuevos tipos de ánforas gaditanas: Las PuertoReal 1 y 2”, Spal, 5, pp. 197-208.GARCÍA VARGAS, E., SIBÓN, OLANO, F. (1994):“<strong>Ex</strong>cavaciones de urg<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> el horno romano de El Gallinero(Puerto Real, Cádiz), AAA III 91, Sevilla.GARCÍA Y BELLIDO, A. (1952 ): “Las exportaciones del aceiteandaluz al este de Francia <strong>en</strong> el s. II de la Era”, AEA, 25, p. 399.GARCÍA Y BELLIDO, A. (1952a ): “Novedades sobre ánforasromanas”, AEA, 24, Madrid, pp. 230-231.GENER VASALLOTE ET ALII (1993): “Loma de Ceres. Unc<strong>en</strong>tro de producción anfórico”, II Congreso P<strong>en</strong>insular de HistoriaAntigua (Coimbra), Actas, Coimbra, pp. 971-994.GIMÉNEZ REYNA, S. (1946): Memoria arqueológica de laprovincia de Málaga hasta 1946, Informes y Memorias, 12,Madrid.GONZÁLEZ SERRANO, P. (1958): “Ánforas romanas de orig<strong>en</strong>español halladas <strong>en</strong> Autun”, AEA, 31, Madrid, pp. 198-199.GONZÁLEZ TORAYA, B. ET ALII (2001 ): “Los inicios de laproducción anfórica <strong>en</strong> la bahía gaditana <strong>en</strong> época republicana: lainterv<strong>en</strong>ción de urg<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> la av<strong>en</strong>ida Pery Junquera (SanFernando, Cádiz)”, <strong>Ex</strong> Baeticae Amphorae, I, Écija, pp. 175-186.JIMÉNEZ CISNEROS, M.J. (1958): "Beobachtung<strong>en</strong> in ein<strong>en</strong>Römisch<strong>en</strong> topferbeziert bei Puerto Real", Germania, 36, 469-475.JIMÉNEZ CISNEROS, M.J. (1971): Historia de Cádiz <strong>en</strong> laAntigüedad, Cádiz.JUAN TOVAR, L.C. (1984): "Los <strong>alfares</strong> de cerámica sigillata <strong>en</strong>la p<strong>en</strong>ínsula ibérica", Revista de Arqueología 44, pp. 32-45.JUAN TOVAR, L.C. (1985): "Los <strong>alfares</strong> de cerámica sigillata <strong>en</strong>la P<strong>en</strong>ínsula (y II)", Revista de Arqueología, 45, Madrid, pp. 32-45.KEAY, S. (1984): Late Roman Amphorae in the WesternMediterranean. A typology and economic study: the Catalanevid<strong>en</strong>ce, BAR, Inter. Ser., 196.LAGÓSTENA BARRIOS, L. (1993): “El alfar romano de Ceuta(Puerto Real, Cádiz)”, Habis, 24, Sevilla, pp. 95-104.LAGÓSTENA BARRIOS, L. (1993-1994): “Alfarería romana <strong>en</strong>la bahía de Cádiz. La producción anfórica”, Bol. del Museo deCádiz, VI, pp. 107-116.LAGÓSTENA BARRIOS, L. (1996): Alfarería romana <strong>en</strong> labahía de Cádiz, Universidad de Cádiz, Cádiz.LAGÓSTENA BARRIOS, L. (2001): La producción de salsas yconservas de pescado <strong>en</strong> la Hispania romana (II a. C. - VI d. C.),Col.lecció Instrum<strong>en</strong>ta, 11, Publicacions Universitat de Barcelona,Barcelona.LAGÓSTENA, L., TORRES, J. (2001): “Algunos aspectos de laeconomía gaditana <strong>en</strong> torno alcambio de Era”, <strong>Ex</strong> BaeticaeAmphorae, I, Écija, pp. 187-200.LAZARICH, C., ALONSO ET ALII (1991): “Prospecciónarqueológica superficial de la campiña sur gaditana: término dePuerto Real”, AAA 1989, II, Sevilla, pp. 89-97.LAZARICH, C., ALONSO ET ALII (1991a): “Informe preliminarde la primera campaña del proyecto de prospección arqueológicasistemática de la campiña sur gaditana: término de Puerto Real”,AAA 1989, II, Sevilla, pp. 98-100.LAZARICH, M. ET ALII (2001): “La organización del espacioindustrial alfarero <strong>en</strong> la bahía de Cádiz: el modelo de Puerto Real”,<strong>Ex</strong> Baeticae Amphorae, I, Écija, pp. 201-214.LIOU, B. (1978): “Un nouveau docum<strong>en</strong>t sur le vin de Bétique”,Archaeonautica, 2, pp. 183-184.LÓPEZ DE LA ORDEN, M.D. (1979-80): "Hornos cerámicos<strong>romanos</strong> <strong>en</strong> el Olivar de los Val<strong>en</strong>cianos (Puerto Real)", BMC, II,pp. 59-62.LÓPEZ DE LA ORDEN, M.D., PÉREZ LÓPEZ, I. (1979-1980):"Depósito de ánforas <strong>en</strong> las cercanías de Rota", BMC, II, 51 -54.LÓPEZ RODRIGUEZ, J. (1981): "La colección de lucernas de laCasa de la condesa de Lebrija (Sevilla)", BSEAA, XLVII,Valladolid, pp. 95-140.LÓPEZ RODRIGUEZ, J. (1984): "Cuatro lucernashispanorromanas", Hom<strong>en</strong>aje a Conchita Fernández Chicarro,Madrid, pp. 381-390.LOZA AZUAGA, M.L., BELTRAN FORTES, J. (1988):“Estudio arqueológico del yacimi<strong>en</strong>to romano de Haza Honda(Málaga)”, Actas del I Congr. Internacional del estrecho deGibraltar, t. I, Madrid, pp. 991-1001.34


Alfares y <strong>hornos</strong> <strong>romanos</strong> <strong>en</strong> Andalucía. Historiografía de la investigación y claves de lecturaLUZÓN, J.M. (1967): "Lucernas mineras de Riotinto", AEA, 40,138 ss.MAIER ALLENDE, J. (2001): “La exploración del valle delGuadalquivir de Jorge Bonsor: primeras aportaciones al estudio dela economía rural de la Bética”, <strong>Ex</strong> Baeticae Amphorae, I, Écija, pp.393-404.MANACORDA, D., (1977): "Anfore spagnole a Pompei",L'instrum<strong>en</strong>tum domesticum di Ercolano e Pompei nella prima etàimperiale, Quaderni di Cultura materiale, 1, Roma, pp. 121-133.MANACORDA, D. (1985): “Schiavo manager e anfore romane: aproposito dei rapporti tra archeologia e storia del diritto", Opus, 4,pp. 141-151.MARFIL RUIZ, P., VENTURA VILLANUEVA, A. (1991):Arqueología Urbana (Catálogo de la exposición organizada por elColegio oficial de Arquitectos y el Conv<strong>en</strong>io de ColaboraciónCultural), Córdoba.MARTÍNEZ MAGANTO, J. (2001): “Inscripciones sobre ánforasde salazón: interpretación sobre la estructura y significacióncomercial de los tituli picti”. <strong>Ex</strong> Baeticae Amphorae, IV, Écija, pp.1207-1219.MARTIN-KILCHER, S. (2003): “Fish-sauce amphorae from theIberian p<strong>en</strong>insula: The forms and observations on trade with th<strong>en</strong>orth--west provinces”, Journal of Roman Pottery Studies, 10, pp.68-84.MARTIN-KILCHER, S. ET ALII (1985): “Keramikanalys<strong>en</strong> anrömisch<strong>en</strong> Ölamphor<strong>en</strong> aus Augst, Kaiseraugst, Av<strong>en</strong>ches undLausanne-Vidy. Naturwisswnschftliche und archäologischeAspekte”, JSGU, 68, 1985, pp.173-204.MARTINEZ RODRIGUEZ, F. (1989): “Las cerámicas béticas deimitación tipo peñaflor: bases para el estudio de un nuevo grupocerámico de época altoimperial”, BAEAA, 26, pp. 60-65.MAYET, F. (1975): Les céramiques à parois fines dans laP<strong>en</strong>insule Iberique, PCPP, Paris.MAYET, F. (1984): Les ceramiques sigillées hispaniques, PCPP,12, Paris.MAYET, F., (1986): “Les figlinae dans les marques d´amphoresDressel 20 de Bétique”, Revue des Etudes Anci<strong>en</strong>nes, LXXXVIII,pp. 285-305.MAYET, F. (1990): “Typologie et crhonologie des amphoresLusitani<strong>en</strong>nes”, As Ánforas lusitanas. Tipologia ProduçaoComércio, Paris, pp. 29-35.MEDIANERO SOTO, F.J., ROMERO PÉREZ, M. (1990):“Interv<strong>en</strong>ción arqueológica de urg<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> la Casería de la Mancha,Antequera (Málaga)”, AAA 90, vol. III, Sevilla, 1992, pp. 389-395.MEZQUÍRIZ IRUJO, M.A. (1961): Terra Sigillata Hispánica,Val<strong>en</strong>cia.MEZQUÍRIZ IRUJO, M.A. (1985): "Terra sigillata hispánica",EAA, Atlante delle forme ceramiche, II, pp. 99-183.MILLÁN LEÓN, J., LAVADO FLORIDO, M.L. (2001): “Elcomplejo industrial de Pu<strong>en</strong>te Melchor (Puerto Real, Cádiz)”, <strong>Ex</strong>Baeticae Amphorae, I, Écija, pp. 215-226.MOLINA VIDAL, J., (1997): La dinámica comercial romana<strong>en</strong>tre Italia e Hispania Citerior, Alicante.MORILLO CERDÁN, A. (1992): Cerámica romana de Herreradel Pisuerga (Pal<strong>en</strong>cia - España): lucernas, Santiago de Chile.MORILLO CERDÁN, A. (1999): Lucernas romanas <strong>en</strong> la regiónsept<strong>en</strong>trional de la p<strong>en</strong>insula ibérica. Contribución al conocimi<strong>en</strong>tode la implantación romana <strong>en</strong> Hispania, MonographiesInstrum<strong>en</strong>tum, 8, Montagnac.PARIS, P., BONSOR, G. ET ALII (1926): Fouilles de belo(Bolonia, province de Cadix). II. La Nécropole, Paris-Bordeaux.PARKER, A. (1992): Anci<strong>en</strong>t Shipwrecks of the Mediterranean &the Roman provinces, BAR Intern. Ser. 580, Oxford.PAUNIER, D., BERNAL, J., CASTELLA, D. (1989): Le vicusgallo-romain de Lousonna-Vidy, Cahiers d’Archéologie Romande,42, Lousonna, 7, Lausanne.PEACOCK, D.P.S. (1974): "Amphore and the Baetican FishIndustry", AntJ., 54, pp. 232-243.PEACOCK, D.P.S. (1977): “Roman amphorae:typology, fabricand origins”, Methodes classiques et Méthodes formelles dansl’etudes des amphores, EFR, pp. 261-278.PEACOCK, D.P.S., WILLIAMS, D.F. (1986): Amphorae and theRoman economy, an introductory guide, Longman Archaeology,Series.PELICHET, E. (1946): “A propós des amphores romainestrouvées a Nyon”, Zeitschrift für Schweizerische Archäologie undKuntsgeschichte, 8, pp. 189-202.PEMÁN, C. (1959): "Alfares y embarcaderos <strong>romanos</strong> <strong>en</strong> laprovincia de Cádiz", AEA, pp. 169-173.PÉREZ LÓPEZ, I. ET ALII (1996): “Yacimi<strong>en</strong>tos litorales deltermino municipal de Puerto Real (II): Pu<strong>en</strong>te Melchor”, IIEncontro de Arqueologia do Sudoeste da p<strong>en</strong>insula Ibérica, Faro 7-9 de noviembre, Faro (pr<strong>en</strong>sa).PÉREZ LÓPEZ, I. ET ALII (1999): “Contribución al catálogo desellos y grafitos anfóricos de la Bética. Las producciones de PuertoReal”, XXIV CNA, Cartag<strong>en</strong>a, 1998, pp. 695-706.PONSICH, M. (1974 ): Implantation rurale antique sur le Bas-Guadalquivir, Seville-Alcalá del Río-Lora del Río-Carmona, Pub.de la Casa de Velázquez, serie Archéologie, fasc. II, Paris.PONSICH, M. (1979): Implantation rurale antique sur le Bas-Guadalquivir, La Campana-Palma del Río, Pub. de La Casa deVelázquez, fasc. III, Paris.PONSICH, M. (1982): "Marcas de ánforas de aceite de las riberasdel Betis", AEA, 55, pp. 173-204.PONSICH, M. (1988): Aceite de oliva y salazones de pescado.Factores geo-económicos de Bética y Tingitana, Madrid.PONSICH, M., TARRADELL, M. (1965): Garum et industriesantiques de salaison dans la Mediterranée Occid<strong>en</strong>tale, Paris.RAMBLA TORRALVO, J.A., MAYORGA MAYORGA, J.(1997): “Hornos de época altoimperial <strong>en</strong> calle Carretería, Málaga”,Figlinae malacitanae. La producción de cerámica romana <strong>en</strong> losterritorios malacitanos, Málaga, pp. 61-78.RAMOS MILLÁN, A. (1981): "El alfar romano de el Olivar(Chipiona, Cádiz). Aportación al estudio de las ánforas béticas desalazones", Gades, n. 7, Cádiz, pp. 5-25.RECIO, A. ET ALII (1989): “Un horno romano de fabricación decerámica <strong>en</strong> Vélez-Málaga”, Jábega, 63, Málaga, pp. 21-24.REDONDO, E., BORGE, J.R. (1998): “Los materiales deconstrucción de producción local (tégulas y ladrillos)”,<strong>Ex</strong>cavaciones arqueológicas <strong>en</strong> el alfar romano de la V<strong>en</strong>ta delCarm<strong>en</strong>, Los Barrios (Cádiz). Una aproximación a la producciónde ánforas <strong>en</strong> la bahía de Algeciras <strong>en</strong> época altoimperial, Madrid,pp. 231-254.REMESAL RODRIGUEZ, J. (1977-1978): “Economía oleícolabética: nuevas formas de análisis”, AEA, 50-51, pp. 87-142.REMESAL RODRIGUEZ, J. (1979): “Rec<strong>en</strong>sión aArchaeonautica I (1977)”, Archeologia Classica XXI, pp. 379-389.REMESAL RODRIGUEZ, J. (1980): “Reflejos económicos ysociales <strong>en</strong> la producción de ánforas olearias béticas”, Producción ycomercio del aceite <strong>en</strong> la antigüedad. Primer CongresoInternacional, Madrid, pp. 131-154.REMESAL RODRIGUEZ, J. (1983a): “Ölproduktion undÖlhandel in der baetica: ain Beispiel für die Verbindungarchäologischer und historischer Forschung”, Müntersche Beiträgezur antik<strong>en</strong> Handelsderschichte, II, 2, pp. 91-111.REMESAL RODRIGUEZ, J. (1983): "Transformaciones <strong>en</strong> laexportación del aceite bético a mediado del s. III d. C.", Prod. ycom. del aceite <strong>en</strong> la Ant., Madrid, pp. 115-132.REMESAL RODRIGUEZ, J. (1986): La Annona Militaris y lasexportaciones de aceite bético a Germania, Madrid.REMESAL RODRIGUEZ, J. (1989): “Tres nuevos c<strong>en</strong>trosproductores de ánforas Dressel 20 y 23. Los sellos de Lucivs FabivsCilo”, Ariadna, 6, pp. 121-153.35


Miguel Beltrán LlorisREMESAL RODRIGUEZ, J. (1989a): “Cuestiones <strong>en</strong> torno a laepigrafía anfórica de la Bética”, Amphores romaines et histoireéconomique. Dix ans de recherche, CEFR, 114, pp. 489-503.REMESAL RODRIGUEZ, J. (1991): “El aceite bético durante elBajo Imperio”, Hom<strong>en</strong>aje al prof. Dr. D. José Mª BlázquezMartínez, Antigüedad y Cristianismo, VIIII, pp. 355-361.REMESAL RODRIGUEZ, J. (2001): “Oleum baeticum.Consideraciones y propuestas para su estudio”, <strong>Ex</strong> BaeticaeAmphorae, I, Écija, pp. 373-392.REMESAL RODRÍGUEZ, J., REVILLA CALVO, V. ET ALII(1997): “Arva: prospecciones <strong>en</strong> un c<strong>en</strong>tro productor de ánforasDressel 20 (Alcoléa del Río, Sevilla)”, Pyr<strong>en</strong>ae, 28, pp. 151-178.REMESAL, J., ROUILLARD, P., SILLLIERES, P. (1977):"Algunos datos sobre las dos últimas campañas de excavaciones <strong>en</strong>Belo (Bolonia, Cádiz)", XIV CNA, pp. 1161-1186.REMOLÁ VALLVERDÚ, J.A. (2000):ROCA ROUMENS, M. (1998): “Reflexiones acerca de lasestructuras de producción de sigillata <strong>en</strong> el c<strong>en</strong>tro de Andújar”,AA.VV, 1998, pp. 105-122.RODRÍGUEZ ALMEIDA, E. (1972): “Novedades de epigrafíaanforaria del Monte Testaccio”, Recherches sur les amphoresromaines, Roma, pp. 107- 242.RODRÍGUEZ ALMEIDA, E. (1974 ): “Novedades de epigrafíaanforaria del Monte Testaccio”, MEFRA, sup. 10 (Recherches surles amphores romaines), pp. 107-242.RODRÍGUEZ ALMEIDA, E. (1977 ): “Bolli anforari di MonteTestaccio”, Bull. Arch. Comun., LXXXIV (1974-1975), Roma, pp.199-248.RODRÍGUEZ ALMEIDA, E. (1979): “Monte Testaccio: Imercatores dell’olio della Betica”, MEFRA, 91, 1979-2, 873-975.RODRÍGUEZ ALMEIDA, E. (1980): “El Monte Testaccio, hoy:nuevos testimonios epifráficos”, Producción y comercio del aceite<strong>en</strong> la antigüedad. Primer Congreso Internacional, Madrid, pp. 57-102.RODRÍGUEZ ALMEIDA, E. (1984): Il Monte Testaccio.Ambi<strong>en</strong>te, storia, materiali, Roma.RODRÍGUEZ ALMEIDA, E. (1989): “Los tituli picti de lasánforas olearias de la Bética. I. Tituli picti de los Severos y la RatioFisci, Madrid.RODRÍGUEZ ALMEIDA, E. (1989-90): “Su alcuni curiosigraffiti anforari dal Monte testaccio”, Bull. della Com. Arch. Com.di Roma, 93, pp. 1 ss.RODRÍGUEZ ALMEIDA, E. (1993 ): “Graffiti e produzioneanforaria della Betica”, The inscribed Economy: Production anddistribution in the Roman WEmpire in the light of instrum<strong>en</strong>tumdomesticum, Michigan, pp. 95-106.RODRÍGUEZ ALMEIDA, E. (2001 ): “El Monte Testaccio, ayer,hoy y mañana”, <strong>Ex</strong> Baeticae Amphorae, IV, Écija, pp. 1279-1302.RODRIGUEZ OLIVA, P. (1978): “Municipium Barbesulanum”,Baetica, 1, pp. 207-233.RODRIGUEZ OLIVA, P. (1997): “Los <strong>hornos</strong> <strong>romanos</strong> deTorrox”, AA.VV., 1997, pp. 271-303.RODRIGUEZ OLIVA, P. ATENCIA PÁEZ, R., (1983):"<strong>Ex</strong>cavaciones arqueológicas <strong>en</strong> Torrox-costa (Málaga). Primeracampaña: las termas", NAH, 16, pp. 226-276.ROLDAN, L.. BERNAL, D. (1998): “Ánforas y materialesconstructivos de Carteia: un ejemplo de la dispersión de lascerámicas de los <strong>alfares</strong> de la v<strong>en</strong>ta del Carm<strong>en</strong>”, <strong>Ex</strong>cavacionesarqueológicas <strong>en</strong> el alfar romano de la V<strong>en</strong>ta del Carm<strong>en</strong>, LosBarrios (Cádiz). Una aproximación a la producción de ánforas <strong>en</strong>la bahía de Algeciras <strong>en</strong> época altoimperial, Madrid, pp. 329-356.ROMERO MORAGAS, C. (1985): “Un horno de cerámica comúnromana <strong>en</strong> March<strong>en</strong>a (Sevilla)”, XVII CNA, Zaragoza, pp. 863-872.ROMO SALAS, A. (1993): “El conjunto alfarero romano deazanaque (Lora del Río, Sevilla)”, Anuario Arqueológico deAndalucía, III, pp. 776-777.ROMO SALAS, A., VARGAS JIMÉNEZ, J.M. (2001):“Azanaque (Lora del Río, Sevilla). Evid<strong>en</strong>cias arqueológicas de unc<strong>en</strong>tro de producción anfórica”, <strong>Ex</strong> Baeticae Amphorae, I, Écija, pp.405-418.SÁEZ, P. (2001): “Los <strong>en</strong>vases anfóricos como instrum<strong>en</strong>tumfundi”, <strong>Ex</strong> Baeticae Amphorae, Ecija, pp. 1171-1181.SÁEZ, P., CHIC, G. (1983): “La epigrafía de las ánforas béticascomo posible fu<strong>en</strong>te para el estudio del colonato <strong>en</strong> la Bética”, IICIAA, Madrid, pp. 193-210.SÁEZ, P. ET ALII (1997): “<strong>Ex</strong>cavaciones Arqueológicas deurg<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> el alfar romano de las Delicias (Ecija, Sevilla), AnuarioArqueológico de Andalucía, III.SEALEY, P.R. (1985): Amphorae from the 1970 <strong>Ex</strong>cavations atColchester Sheep<strong>en</strong>, BAR, British Series, 142.SERRANO RAMOS, E. (1976): "La cerámica romana de los<strong>hornos</strong> de la Cartuja (Granada)", CPUG 1, pp. 215-233.SERRANO RAMOS, E. (1978): "Cerámica común del alfar de laCartuja (Granada)", Baetica, 1, pp. 243-257.SERRANO RAMOS, E. (1979): "Sigillata hispánica de los <strong>hornos</strong>de la Cartuja (Granada)", BSAA, XLV, pp. 31-80.SERRANO RAMOS, E. (1986): “Un nuevo estilo decorativo <strong>en</strong> laT.S.H. de El Castillón, Antequera (Málaga)”, Baetica, 6, pp. 247-253.SERRANO RAMOS, E. (1988): “Imitaciones de cerámica aretinaproced<strong>en</strong>tes de yacimi<strong>en</strong>tos arqueológicos malagueños”, Mainake,X, pp. 83-89.SERRANO RAMOS, E. (1991): “Notas sobre la producción deánforas <strong>en</strong> la Huerta del Rincón (Torremolinos, Málaga)”, Baetica,13, pp. 149-154.SERRANO RAMOS, E. (1994): “Producciones de cerámicascomunes locales de la Bética”, Ceràmica comuna romana d’èpocaalto-imperial a la p<strong>en</strong>insula ibèrica. Estat de la Qüestió,Monografies emporitanes VIII, pp. 227-250.SERRANO RAMOS, E. (1997): “La producción cerámica de lostalleres <strong>romanos</strong> de la depresión de Antequera”, AA.VV, 1997, pp.217-232.SERRANO RAMOS, E. (1998): “C<strong>en</strong>tros productores de terrasigillata hispánica <strong>en</strong> los territorios malacitanos”, AA.VV., 1998,pp. 165-188.SERRANO RAMOS, E. (1999): “C<strong>en</strong>tros productores de T.S.H.<strong>en</strong> las provincias de Granada y Málaga”, AA.VV., 1999, pp. 137-168.SERRANO RAMOS, E. (2000): Cerámica común romana: siglosII a. C al VII d. C. Materiales importados y de producción local <strong>en</strong>el territorio malacitano, Studia Malacitana, Málaga.SERRANO RAMOS, E., ATENCIA PÁEZ, R. (1983): “Unc<strong>en</strong>tro productor de Sigillata Hispánica <strong>en</strong> Singilia Barba(Antequera, Málaga)”, Baetica, 6, pp. 175-192.SERRANO RAMOS, E., ATENCIA PÁEZ, R. (1997): “El tallerantikari<strong>en</strong>se de terra sigillata hispánica”, AA.VV., 1997, pp. 177-215.SERRANO RAMOS, E., ATENCIA PÁEZ, R., DE LUQUEMORAÑO, E. (1985): “Una necrópolis altoimperial romana <strong>en</strong>Peñarrubia (Málaga)”, Jábega, 41, Málaga, pp. 11-16.SERRANO RAMOS, E., ATENCIA PÁEZ, R., RODRIGUEZ,P. (1984): “Un nuevo taller de Sigillata <strong>en</strong> la Baetica. Alameda(Málaga)”, Baetica, 7, pp. 171-184.SERRANO RAMOS, E., BALDOMERO NAVARRO, A.,CASTAÑO ALES, J.C., (1991): “Notas sobre la producción deánforas <strong>en</strong> la Huerta del Rincón (Torremolinos, Málaga)”, Baetica,13, pp. 149-154.SERRANO RAMOS, E., GÓMEZ, A., CASTAÑOS, J.C.(1992): “Un nuevo taller de sigillata <strong>en</strong> la Baetica, Teba (Málaga)”,Baetica, 14, pp. 181-202.SOTOMAYOR, M. (1966) : “<strong>Ex</strong>cavaciones <strong>en</strong> la Huerta de laFacultad de Teología de Granada”, Not. Arq. Hisp., VIII-IX, pp.193-202.36


Alfares y <strong>hornos</strong> <strong>romanos</strong> <strong>en</strong> Andalucía. Historiografía de la investigación y claves de lecturaSOTOMAYOR, M. (1966 a): “Alfar romano <strong>en</strong> Granada”, CNA,IX, Valladolid 1965, pp. 367-372.SOTOMAYOR, M., (1969): "Hornos <strong>romanos</strong> de ánforas <strong>en</strong>Algeciras", X CNA, pp. 389-399.SOTOMAYOR, M. (1970): “Siete <strong>hornos</strong> de cerámica romana <strong>en</strong>Granada, con producción de sigillata”, XI, CNA (Mérida 1968),Zaragoza, pp. 713-728.SOTOMAYOR, M. (1972): “Andújar, c<strong>en</strong>tro de producción yexportación de sigillata a la Mauritania”, NAH, Arqueología, I,Madrid, 263-289.SOTOMAYOR, M. (1973): “C<strong>en</strong>tro de producción de sigillata deAndújar”, XII CNA, Jaén, 1971, pp. 689-698.SOTOMAYOR, M. (1977): Marcas y estilos <strong>en</strong> la sigillatadecorada de Andújar, Jaén.SOTOMAYOR, M. (1977-1978): “Alfares de sigillata riojanos y<strong>alfares</strong> de Andújar”, Pyr<strong>en</strong>e, 13-14, pp. 319-330.SOTOMAYOR, M. (1998): “Los Villares de Andújar. Historia dela investigación”, <strong>en</strong> AA.VV., 1998, pp. 31-48.SOTOMAYOR, M., PÉREZ CASAS, A., ROCA ROUMENS,M. (1976): “Los <strong>alfares</strong> <strong>romanos</strong> de Andújar (Jaén). Dos nuevascampañas”, NAH, 4, pp. 113-147.SOTOMAYOR, M., ROCA, M., FERNÁNDEZ GARCÍA, M.I.(1999): C<strong>en</strong>tro de producción de los Villares de Andújar (Jaén)”,AA.VV., 1999, , pp. 19-60.SOTOMAYOR, M., ROCA, M., SOTOMAYOR, N. (1979):"Los <strong>alfares</strong> <strong>romanos</strong> de Andújar. Campañas de 1974, 1975 y1977", NAH, Arq.6, Madrid, pp. 443-497.SOTOMAYOR, M., ROCA, M., SOTOMAYOR N., ATIENZA,R. (1981): "II. Los <strong>alfares</strong> <strong>romanos</strong> de los Villares de Andújar(Jaén, campaña de 1978-1979)", NAH, 11, Madrid, pp. 307-368.SOTOMAYOR, M., SOLA, A., CHOCLAN, C. (1984): Los másantiguos vestigios de la Granada ibero-romana y árabe, Granada.TCHERNIA, A. (1967): “Les amphores romaines et l’histoire‘economique”, Journal des Savants, 216-234.TCHERNIA, A. (1971): "Les amphores vinaires de Tarraconnaiseet leur exportation au debut de l'Empire", AEA, 44, pp. 38-84.TCHERNIA, A. (1998): “Les développm<strong>en</strong>tsfiglina/figlinae/figlinis”, <strong>en</strong> BLANC-BIJON, V., CARRE M. B.,HESNARD, A., TCHERNIA, A. 1998, p. 315.THÉVENOT, E. (1950): “L’importation des produits espagnolschez les Edou<strong>en</strong>s et les Lingons”, RAE, pp. 67-75.TORRECILLA, A. (1998): “Los materiales constructivos”,BERNAL, D., (coord), Los Matagallares (Salobreña, Granada). Unc<strong>en</strong>tro romano de producción alfarera, Salobreña, pp. 395-430.VEGAS, M. (1969): "Munigua. Römische Keramik des 1.Jahrhunderts n. Chr.", MM, 10, pp. 199-250.VEGAS, M. (1973): Cerámica común romana del Mediterraneooccid<strong>en</strong>tal, PE, 22, Barcelona.VENTURA RODRIGUEZ, J. J. (2000): “La cerámica de barniznegro de los siglos II-I a. C. <strong>en</strong> Andalucía Occid<strong>en</strong>tal”, La ceràmicade vernís negre dels segles II i I a. C. : C<strong>en</strong>tres productorsmediterranis i comercialització a la P<strong>en</strong>insula ibèrica, (Ampurias 4i 5 de junio de 1998), Mataró, pp. 177-215.VIGIL, R., CUEVAS, J., GARCÍA, R., BERNAL, D., (1998):“Analítica mineralógica y físico química de las cerámicas de losMatagallares y los Barreros”, BERNAL, D., (coord), LosMatagallares (Salobreña, Granada). Un c<strong>en</strong>tro romano deproducción alfarera, Salobreña, pp. 471-496.VILLASECA DÍAZ, F., (1991): “El conjunto arqueológicoromano <strong>en</strong>torno del Castillo de la Duquesa (Manilva, Málaga)”,AAA 1989, Sevilla, 365-370.VILLASECA DÍAZ, F., (1997): “La producción anfórica de los<strong>hornos</strong> de la finca “El Secretario” (Fu<strong>en</strong>girola)”, AA.VV, 1997, pp.261-269.VILLASECA DIAZ, F., HIRALDO, E., (1993): “<strong>Ex</strong>cavacionesde urg<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> el yacimi<strong>en</strong>to romano de la Finca del secretario,Fu<strong>en</strong>girola, Málaga”, AAA, III, Actividades de Urg<strong>en</strong>cia, Sevilla,pp. 385-388.WOODS, D., COLLANTES, F., (1967): Carteia, EAE, 58.ZEVI, F., (1966): "Appunti delle anfore romane. La tavolatipologica del Dressel", Archaeologia Classica, pp. 208-247.37


Miguel Beltrán Lloris38

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!