13.07.2015 Views

0de1.ABLPtomoI

0de1.ABLPtomoI

0de1.ABLPtomoI

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

5. CONCLUSIONES 969Por otro lado, la participación española estuvo condicionada por lascaracterísticas de su financiación mediante presupuestos aprobados por las Cortes. Lamayoría de las veces fue necesario justificar los gastos ya consumados para poder votarlos presupuestos, ralentizando y complicando el sistema de pagos. Además, loscaudales, que no fueron abundantes, llegaron con retraso a la base del entramadoorganizativo, paralizando la participación de provincias y localidades menores oalejadas de las células centrales de decisión. Sucedió, entre otros, con los territoriosultramarinos en la edición de 1867, pues se votó un crédito extraordinario en enerocuando el recinto expositivo abría sus puertas en abril. Era demasiado tarde, teniendo encuenta, sencillamente, las distancias geográficas. En muchos casos, el dinero públicofinanció los dispendios ocasionados por un conjunto excesivo de comisionados, en vezde acometer el pago de la participación real del país, construyendo muebles expositivosmejores, comprando productos de interés, etc.La presencia española en París se vio afectada de manera constante por lasdilaciones. Ya se han referido las demoras presupuestarias, que afectaron al resto deextremos de la participación. Se desencadenó una intrincada cascada de retrasos en elnombramiento de comisionados; en la petición de los espacios expositivos para España;en la construcción, adecuación y apertura de las instalaciones en París; en laconfiguración de la colección nacional y su posterior envío o en la redacción ypublicación de los catálogos.Existió, asimismo, una marcada diferencia entre las peticiones españolas desuperficie para instalarse o de jurados internacionales que defendieran la colecciónnacional y el resultado final de las negociaciones. Además, ambas cuestiones solíanestar vinculadas, de modo que un espacio exiguo suponía un número pequeño dejurados. En esto se mezclaron, de un lado, las ambiciones un tanto exageradas de lascomisiones españolas, y, de otro, las reticencias francesas sobre las posibilidadesespañolas.También esta investigación pone de manifiesto que hubo discrepancias en la ideafundacional sobre la colección de materiales y la imagen nacional que brindar en Paríscon el resultado final. El desajuste nació entre el planteamiento teórico y su aplicaciónpráctica, pero también a raíz de la comparación con los demás países participantes y, enespecial, con Francia. Se pretendía el éxito, que parecía prácticamente ganado en origen.Sin embargo, el desarrollo de la presentación española mostró tonos, además deautocomplacientes, tristes, de amarga inferioridad. No hubo aquiescencia sobre los

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!