Clasificación de obras audiovisuales - IIN
Clasificación de obras audiovisuales - IIN Clasificación de obras audiovisuales - IIN
Capítulo 6159clase social o raza/etnia – está bastante arraigada en eldiscurso de los más diversos grupos de protección de losderechos humanos. A pesar de simple a primera vista,tal aforismo requiere una mirada más cuidadosa por loque concierne a su amplitud y a sus conexiones.Primero, es necesario resaltar que constituyen derechoshumanos tanto la recepción de información comola participación en el proceso de su producción. En segundolugar, debe quedar claro que en la discusión alrededorde esos derechos no se ve implicado cualquiertipo de información (o contenidos más amplios), y sí informaciónde calidad. Es preciso señalar, sin embargo,que la definición de calidad, según lo que hemos buscadodiscutir hasta este momento depende, y mucho, delas determinaciones constitucionales particulares decada nación.Finalmente, cabe destacar que se ha de garantizar laprotección contra eventuales y potenciales abusos cometidospor los medios de comunicación – punto en elque se encuadra la cuestión de la Clasificación por Edades.Ya hemos señalado que la Convención sobre los Derechosde la Niñez (artículo 17º) resalta la preocupaciónque deben tener los Estados nacionales con relación a laprogramación dirigida a los niños y adolescentes. NuestraConstitución, a su vez, entre otros dispositivos, determinalo que le corresponde a la ley federal:Establecer los medios legales que garanticen a la persona y ala familia la posibilidad de defenderse de programas o programacionesde radio y televisión que contraríen lo dispuestoen el artículo 221º, así como de la propaganda de productos,prácticas y servicios que puedan ser nocivos a la salud y almedioambiente (artículo 220º, párrafo 3º, inciso II).O sea, la ley máxima de Brasil contempla el derechode los ciudadanos y ciudadanas a protegerse de las produccionesque les puedan ser perjudiciales, lo que leatribuye legitimidad a las políticas públicas de regulaciónde los contenidos audiovisuales, como es el caso dela Clasificación por Edades.Caracterizando a losagentes y el escenario¿Pero cuál es el escenario en el que se inserta la Clasificaciónpor Edades? Antes de nada, es necesario considerar quecualquier agente que interactúe en el espacio social es potencialmenteun propulsor o violador de los derechos humanos.Esta afirmación es válida no solo para los individuos, sinotambién para grupos, corporaciones y para el propio Estado.Aquí, cabe destacar que es un deber indelegable de losEstados nacionales el garantizar, en última instancia, los derechosasegurados en su Constitución, en los tratados internacionalesratificados y en las demás leyes aprobadas por susParlamentos. Sin embargo, dada la variedad de posibilidadesde promoción o de violación de los derechos, los Estados hande concentrar sus esfuerzos en la actuación de determinadosactores que tienen más capacidad de incidir – tanto positivacomo negativamente – sobre los derechos humanos.Es en ese contexto donde surge, en las más avanzadasdemocracias del planeta, una intensa preocupación porlos medios de comunicación de masas. Tal inquietud sebasa en el hecho, también ya discutido en las páginas an-
160Clasificación de obras audiovisuales por edades: construyendo la ciudadanía en la pequeña pantallateriores, de que se los considera uno de los más contundentesy poderosos instrumentos de socialización de laspoblaciones contemporáneas, que producen y retransmitenmensajes de los más diversos tipos y tenores.Los buenos y los malosPor medio de noticias periodísticas, obras publicitarias yproducciones destinadas al entretenimiento – las cuales,hay llamar la atención sobre ello, cuentan con una enormeaudiencia en Brasil –, los medios de comunicaciónpueden asumir dos papeles distintos y contradictorios:prestar un servicio a la difusión, protección y consolidaciónde los derechos humanos, o bien afrontarlos. En elsegundo de los casos, no escasean los episodios en los quese verifica la violación de los derechos individuales a laprivacidad, a la protección de la imagen y a la recepciónde información de calidad, además del desprecio a los derechoscolectivos de respeto a las minorías y a las infinitasdiferencias intrínsecas de la condición humana.Los niños y adolescentes son particularmente vulnerablesen ese escenario, puesto que no poseen unarepresentatividad política formal (no votan) y no constituyen,por lo general, organizaciones que defiendansus intereses y ansias reales ante a la sociedad. En estesentido, y como ya se ha discutido ampliamente en elCapítulo 4, necesitan una protección especial por partede los Estados nacionales. Las grandes vulnerabilidadesafectan también a otras minorías políticas, como,por ejemplo: mujeres, negros, indígenas, homosexuales,personas con deficiencias, etc. Sin embargo, por elhecho de votar y de contar con un mínimo de organizaciónpolítica, tales minorías pueden canalizar directamentesus propios intereses y conseguir, con ello, unmayor éxito.Modificando el guiónComo hemos observado, muchas de las democracias consolidadas,en consonancia con sus Constituciones y con loscompromisos internacionales que han firmado, han puestoen práctica mecanismos de regulación de los medios decomunicación con el fin de garantizar, si no la promoción,por lo menos el respeto a los derechos de todos y todas.Al incluir la Clasificación por Edades de los contenidosretransmitidos por las empresas de medios de comunicaciónentre estos mecanismos, por lo general losEstados se valen de algunas prerrogativas que merecenser rememoradas:Hacen uso legítimo de su condición de propietariosdel espectro electromagnético, el cual, por medio deconcesiones públicas, está temporalmente cedido adeterminadas empresas de comunicación.Buscan señalar a los padres, profesores y demás responsablesde niños y adolescentes qué contenidosson apropiados o inadecuados para ciertas edades.Eso garantiza la libertad de elección consciente de lasfamilias y, al mismo tiempo, el derecho incontestablede los niños y niñas a tener una socialización querespete su condición de individuos en formación.Por lo tanto, un sistema de Clasificación por Edadesdebe trabajar en absoluta comunión con el proyecto de
- Page 109 and 110: 108Clasificación de obras audiovis
- Page 111 and 112: 110Clasificación de obras audiovis
- Page 113 and 114: 112Clasificación de obras audiovis
- Page 115 and 116: 114Clasificación de obras audiovis
- Page 117 and 118: 116Clasificación de obras audiovis
- Page 119 and 120: 118Clasificación de obras audiovis
- Page 121 and 122: 120Clasificación de obras audiovis
- Page 123 and 124: 122Clasificación de obras audiovis
- Page 125 and 126: 124Clasificación de obras audiovis
- Page 127 and 128: 126Clasificación de obras audiovis
- Page 129 and 130: 128Clasificación de obras audiovis
- Page 131 and 132: 130Clasificación de obras audiovis
- Page 133 and 134: 132Clasificación de obras audiovis
- Page 135 and 136: 134Clasificación de obras audiovis
- Page 137 and 138: 136Clasificación de obras audiovis
- Page 139 and 140: 138Clasificación de obras audiovis
- Page 141 and 142: 140Clasificación de obras audiovis
- Page 143 and 144: 142Clasificación de obras audiovis
- Page 145 and 146: 144Clasificación de obras audiovis
- Page 147 and 148: 146Clasificación de obras audiovis
- Page 149 and 150: 148Clasificación de obras audiovis
- Page 151 and 152: 150Clasificación de obras audiovis
- Page 153 and 154: 152Clasificación de obras audiovis
- Page 155 and 156: 154Clasificación de obras audiovis
- Page 157 and 158: 156Clasificación de obras audiovis
- Page 159: 158Clasificación de obras audiovis
- Page 163 and 164: 162Clasificación de obras audiovis
- Page 165 and 166: 164Clasificación de obras audiovis
- Page 167 and 168: 166Clasificación de obras audiovis
- Page 169 and 170: 168Clasificación de obras audiovis
- Page 171 and 172: 170Clasificación de obras audiovis
- Page 173 and 174: 172Clasificación de obras audiovis
- Page 175 and 176: 174Clasificación de obras audiovis
- Page 177 and 178: 176Clasificación de obras audiovis
- Page 179 and 180: 178Clasificación de obras audiovis
- Page 181 and 182: 180Clasificación de obras audiovis
- Page 183 and 184: 182Clasificación de obras audiovis
- Page 185 and 186: 184Clasificación de obras audiovis
- Page 187 and 188: 186Clasificación de obras audiovis
- Page 189 and 190: 188Clasificación de obras audiovis
- Page 191 and 192: 190Clasificación de obras audiovis
- Page 193 and 194: 192Clasificación de obras audiovis
- Page 195 and 196: 194Clasificación de obras audiovis
- Page 197 and 198: 196Clasificación de obras audiovis
- Page 199 and 200: 198Clasificación de obras audiovis
- Page 201 and 202: 200Clasificación de obras audiovis
- Page 203 and 204: 202Clasificación de obras audiovis
- Page 205 and 206: 204Clasificación de obras audiovis
- Page 207 and 208: 206Clasificación de obras audiovis
- Page 209 and 210: 208Clasificación de obras audiovis
Capítulo 6159clase social o raza/etnia – está bastante arraigada en eldiscurso <strong>de</strong> los más diversos grupos <strong>de</strong> protección <strong>de</strong> los<strong>de</strong>rechos humanos. A pesar <strong>de</strong> simple a primera vista,tal aforismo requiere una mirada más cuidadosa por loque concierne a su amplitud y a sus conexiones.Primero, es necesario resaltar que constituyen <strong>de</strong>rechoshumanos tanto la recepción <strong>de</strong> información comola participación en el proceso <strong>de</strong> su producción. En segundolugar, <strong>de</strong>be quedar claro que en la discusión alre<strong>de</strong>dor<strong>de</strong> esos <strong>de</strong>rechos no se ve implicado cualquiertipo <strong>de</strong> información (o contenidos más amplios), y sí información<strong>de</strong> calidad. Es preciso señalar, sin embargo,que la <strong>de</strong>finición <strong>de</strong> calidad, según lo que hemos buscadodiscutir hasta este momento <strong>de</strong>pen<strong>de</strong>, y mucho, <strong>de</strong>las <strong>de</strong>terminaciones constitucionales particulares <strong>de</strong>cada nación.Finalmente, cabe <strong>de</strong>stacar que se ha <strong>de</strong> garantizar laprotección contra eventuales y potenciales abusos cometidospor los medios <strong>de</strong> comunicación – punto en elque se encuadra la cuestión <strong>de</strong> la <strong>Clasificación</strong> por Eda<strong>de</strong>s.Ya hemos señalado que la Convención sobre los Derechos<strong>de</strong> la Niñez (artículo 17º) resalta la preocupaciónque <strong>de</strong>ben tener los Estados nacionales con relación a laprogramación dirigida a los niños y adolescentes. NuestraConstitución, a su vez, entre otros dispositivos, <strong>de</strong>terminalo que le correspon<strong>de</strong> a la ley fe<strong>de</strong>ral:Establecer los medios legales que garanticen a la persona y ala familia la posibilidad <strong>de</strong> <strong>de</strong>fen<strong>de</strong>rse <strong>de</strong> programas o programaciones<strong>de</strong> radio y televisión que contraríen lo dispuestoen el artículo 221º, así como <strong>de</strong> la propaganda <strong>de</strong> productos,prácticas y servicios que puedan ser nocivos a la salud y almedioambiente (artículo 220º, párrafo 3º, inciso II).O sea, la ley máxima <strong>de</strong> Brasil contempla el <strong>de</strong>recho<strong>de</strong> los ciudadanos y ciudadanas a protegerse <strong>de</strong> las produccionesque les puedan ser perjudiciales, lo que leatribuye legitimidad a las políticas públicas <strong>de</strong> regulación<strong>de</strong> los contenidos <strong>audiovisuales</strong>, como es el caso <strong>de</strong>la <strong>Clasificación</strong> por Eda<strong>de</strong>s.Caracterizando a losagentes y el escenario¿Pero cuál es el escenario en el que se inserta la <strong>Clasificación</strong>por Eda<strong>de</strong>s? Antes <strong>de</strong> nada, es necesario consi<strong>de</strong>rar quecualquier agente que interactúe en el espacio social es potencialmenteun propulsor o violador <strong>de</strong> los <strong>de</strong>rechos humanos.Esta afirmación es válida no solo para los individuos, sinotambién para grupos, corporaciones y para el propio Estado.Aquí, cabe <strong>de</strong>stacar que es un <strong>de</strong>ber in<strong>de</strong>legable <strong>de</strong> losEstados nacionales el garantizar, en última instancia, los <strong>de</strong>rechosasegurados en su Constitución, en los tratados internacionalesratificados y en las <strong>de</strong>más leyes aprobadas por susParlamentos. Sin embargo, dada la variedad <strong>de</strong> posibilida<strong>de</strong>s<strong>de</strong> promoción o <strong>de</strong> violación <strong>de</strong> los <strong>de</strong>rechos, los Estados han<strong>de</strong> concentrar sus esfuerzos en la actuación <strong>de</strong> <strong>de</strong>terminadosactores que tienen más capacidad <strong>de</strong> incidir – tanto positivacomo negativamente – sobre los <strong>de</strong>rechos humanos.Es en ese contexto don<strong>de</strong> surge, en las más avanzadas<strong>de</strong>mocracias <strong>de</strong>l planeta, una intensa preocupación porlos medios <strong>de</strong> comunicación <strong>de</strong> masas. Tal inquietud sebasa en el hecho, también ya discutido en las páginas an-