colombia: el proyecto nacional y la franja amarilla - IDU
colombia: el proyecto nacional y la franja amarilla - IDU
colombia: el proyecto nacional y la franja amarilla - IDU
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
de vida decentes para <strong>la</strong> pob<strong>la</strong>ción. Siempre <strong>el</strong> discurso almibarado cifró nuestra f<strong>el</strong>icidaden <strong>la</strong> capacidad de competir libremente, lo que significaba entregar nuestra economía sinprotección y sin escrúpulos a los rigores y <strong>la</strong>s rapacidades d<strong>el</strong> mercado mundial. A eseinvento genial se lo ha l<strong>la</strong>mado "apertura económica" desde los tiempos d<strong>el</strong> generalFrancisco de Pau<strong>la</strong> Santander, miembro y favorecedor de <strong>la</strong>s grandes familias decomerciantes importadores de <strong>la</strong> sabana.Las guerras civiles d<strong>el</strong> siglo XIX derrotaron <strong>el</strong> pensamiento liberal, <strong>el</strong> radicalismo y <strong>la</strong>tradición ilustrada de los sectores democráticos, e impusieron finalmente un régimenaristocrático clerical centralizado cuya constitución, promulgada en 1886, gobernó al paísdurante más de cien años. Este régimen convirtió a Colombia en uno de los países másconservadores d<strong>el</strong> continente. A pesar de los esfuerzos liberales de Manu<strong>el</strong> Murillo Toro,de Tomás Cipriano de Mosquera, de José Hi<strong>la</strong>rio López, quien había decretado <strong>la</strong> libertadde los esc<strong>la</strong>vos en 1854, antes que los Estados Unidos; a pesar de grandes luchasdemocráticas, <strong>la</strong> sociedad <strong>colombia</strong>na se cerró bajo <strong>el</strong> poder de los terratenientes y d<strong>el</strong>clero; <strong>la</strong> Iglesia y <strong>el</strong> Estado se confundieron en una amalgama indiferenciada y nefasta, <strong>el</strong>índice católico prohibió <strong>la</strong> lectura libre durante buena parte d<strong>el</strong> siglo, <strong>la</strong> educación estuvomanejada por <strong>la</strong> Iglesia, y conquistas <strong>el</strong>ementales de <strong>la</strong> sociedad liberal como <strong>el</strong>matrimonio civil y <strong>el</strong> divorcio, conquistas que poseen todos los países vecinos desde hacemás de 60 años, son logros que <strong>la</strong> sociedad <strong>colombia</strong>na vino a obtener a fines d<strong>el</strong> sigloXX, mostrándose como uno de los esquemas sociales más cerrados y oscuros deOccidente. Esto dio origen a tremendos cuadros de violencia familiar y de intoleranciasocial, a un enorme irrespeto por <strong>la</strong>s creencias ajenas, y a <strong>la</strong> tendencia persistente aconsiderar toda disidencia y toda reb<strong>el</strong>día como un fenómeno r<strong>el</strong>igioso. La guerra civil demediados de siglo, conocida como <strong>la</strong> Violencia, se configuró como una inmensa guerrar<strong>el</strong>igiosa, hecha de fanatismo y de ceguera brutal, y llegó a extremos aberrantes, con <strong>la</strong>reconocida presencia de <strong>la</strong> Iglesia como uno de sus principales instigadores.Hacia 1930, al cabo de 50 años, <strong>la</strong> hegemonía conservadora se vio debilitada por <strong>la</strong>inconformidad popu<strong>la</strong>r, arreciaron <strong>la</strong>s luchas sindicales, hubo conatos de reb<strong>el</strong>ión, yfinalmente <strong>la</strong> escandalosa masacre de <strong>la</strong>s bananeras precipitó <strong>el</strong> descrédito d<strong>el</strong> régimenconservador. Un sector d<strong>el</strong> liberalismo acaudil<strong>la</strong>do por Alfonso López Pumarejo intentóuna reforma democrática que favoreciera <strong>la</strong> industrialización, que modificara <strong>el</strong> régimen depropiedad sobre <strong>la</strong> tierra, que modificara <strong>la</strong>s r<strong>el</strong>aciones entre <strong>el</strong> Estado y <strong>la</strong> Iglesia, y queabriera <strong>el</strong> camino para <strong>la</strong> adecuación de <strong>la</strong> sociedad <strong>colombia</strong>na a algunas de <strong>la</strong>stendencias mundiales d<strong>el</strong> siglo. No era, por supuesto, <strong>la</strong> reforma estructural que <strong>el</strong> paísnecesitaba, ni <strong>la</strong> vasta toma de conciencia de <strong>la</strong> necesidad de un orden distinto, ni <strong>el</strong> granesfuerzo por dignificar a una sociedad malformada por <strong>la</strong> exclusión y <strong>la</strong> estratificaciónsocial; era una reforma moderada, pero naturalmente desató una inmediatacontrarreforma, que trajo violencia antiliberal a los campos y empezó a sembrar <strong>el</strong> germende algunos males futuros. El intolerante país feudal se resistía al cambio y su reaccióndespertó nuevas insatisfacciones.Como respuesta a <strong>la</strong> violencia antiliberal, <strong>el</strong> sector popu<strong>la</strong>r d<strong>el</strong> liberalismo emprendióuna defensa de los campesinos perseguidos, que rápidamente fue configurándose comouna enorme reb<strong>el</strong>ión popu<strong>la</strong>r bajo <strong>la</strong> orientación d<strong>el</strong> caudillo Jorge Eliécer Gaitán. Gaitáncomprendió muy pronto que Colombia necesitaba con urgencia grandes reformas sociales,y <strong>el</strong> <strong>proyecto</strong> <strong>nacional</strong> siempre postergado se convirtió en su bandera. Pertenecía alpartido liberal, pero entendió que <strong>el</strong> principal enemigo de <strong>la</strong> sociedad <strong>colombia</strong>na era esebipartidismo aristocrático cuyos jefes formaban en realidad un solo partido de dos caras,hecho para saquear <strong>el</strong> país y beneficiarse de él a espaldas de <strong>la</strong>s mayorías; y en susdiscursos avanzó hacia una reformu<strong>la</strong>ción de <strong>la</strong> crisis política como <strong>el</strong> conflicto entre <strong>la</strong>smayorías humildes y auténticas, y <strong>el</strong> mezquino país de los privilegios. Hab<strong>la</strong>ndo d<strong>el</strong> "paíspolítico" y d<strong>el</strong> "país <strong>nacional</strong>", destacando <strong>el</strong> modo como los dirigentes gobernaban parauna minoría, conquistó un caudal <strong>el</strong>ectoral inesperado, y súbitamente <strong>la</strong> vieja c<strong>la</strong>sedirigente se vio ante un fenómeno de entusiasmo popu<strong>la</strong>r desconocido en Colombia.La campaña de calumnias y difamaciones desatada por <strong>la</strong> gran prensa no logró debilitaral movimiento gaitanista, y <strong>la</strong> vieja casta comprendió que, como <strong>el</strong> arco d<strong>el</strong> legendario reynórdico, "Noruega se iba a romper entre sus manos". La c<strong>la</strong>se dirigente, encabezada porlos jefes políticos y por los grandes diarios sostenedores d<strong>el</strong> poder, confiaba ya sólo en <strong>la</strong>ignorancia y <strong>la</strong> indisciplina de <strong>la</strong>s huestes gaitanistas, <strong>el</strong> "país de cafres" al que siemprehabían despreciado. Fue entonces cuando Gaitán convocó a <strong>la</strong> Marcha d<strong>el</strong> Silencio, para