12.07.2015 Views

Descargar original - Ediciona

Descargar original - Ediciona

Descargar original - Ediciona

SHOW MORE
SHOW LESS
  • No tags were found...

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Miguel Ángel Sáez Gutiérrez «Marino» Don Quijote se quitó la bufanda del cinturón, ahora me explico por qué nosdieron una sola cama, con la bufanda atada al cinto tenía unas pintas muysospechosas, de haber estado en España, cualquiera pudiera haber pensadoque se trataba de un bandolero de Sierra Morena.No sintió dolor tras quitarse la bufanda, para celebrarlo nos fuimos a un pubirlandés que había cerca del hotel y nos tomamos unas cuantas Guinness,me temí que ya iban siendo muchas porque empecé a oír hablar a un grupode gente con acento andaluz.Me presenté al grupo, lo que había oído no era fruto de mi imaginaciónporque eran de Granada y venían a promocionar productos españoles enEstados Unidos, motivo por el cual alzamos nuestras jarras y brindamos.Si ya iba un poco cargado con las cervezas que llevaba, la alegría que nosprodujo encontrarnos a los primeros españoles que veíamos después de unmes nos hizo brindar y pasar un rato bastante agradable.No sin dificultades de movimiento, logramos llegar al hotel agarrados paracompensar y de esto modo conseguir cierto equilibrio para no caer de brucescontra el suelo, el portero era el mismo que nos había dado la habitación yno le extrañó lo más mínimo que viniéramos agarrados porque creyó desdeque nos vio que éramos una pareja gay.Caímos en la cama a plomo, me despertó alguien abriendo la puerta de lahabitación, esto me alarmó un poco pero estaba tan a gusto tumbado que elúnico movimiento que hice fue abrir ligeramente los párpados para mirar.Era una mujer rubia muy atractiva con vestido de noche y bastante pintada,encendió la luz y al ver dos sacos de patatas tirados encima de la cama(nosotros) pegó un grito que llegó a despertar al mismísimo Don Quijote,salió rápidamente de la habitación y tuvo el detalle de cerrar la puerta.Me volví a quedar dormido profundamente hasta que ya de día me despertóDon Quijote para ir recogiendo para ir al aeropuerto, me preguntó que sihabía visto a una chica entrar en la habitación, le dije que sí, pero pensabaque había sido un sueño.Nos imaginamos que la mujer debió equivocarse de habitación y dio lacasualidad de que su llave también abría nuestra puerta, comprobamos queno nos faltara lo más importante en aquel momento, el pasaporte yterminamos de recoger.Tomamos un taxi hacia el aeropuerto, fui el camino pensando en mi familia,los echaba de menos, aunque solo había estado un mes fuera de casa,cuando estás tan lejos tienes la sensación de que ha pasado mucho tiempo.En la cafetería del aeropuerto nos tomamos un café y el camarero que noshabía estado escuchando nos preguntó que de dónde éramos, él era tambiénespañol, de Palencia, se emocionó cuando le dije el pueblo palentino de miabuela, llevaba ya cuarenta años en Nueva York.- 142 -

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!