12.07.2015 Views

Los monolitos del mercado y el glifo tianquiztli - CISADU

Los monolitos del mercado y el glifo tianquiztli - CISADU

Los monolitos del mercado y el glifo tianquiztli - CISADU

SHOW MORE
SHOW LESS
  • No tags were found...

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

pieza<strong>Los</strong> <strong>monolitos</strong> <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>mercado</strong>y <strong>el</strong> <strong>glifo</strong> <strong>tianquiztli</strong>Leonardo López Luján, Bertina OlmedoCuatro esculturasenigmáticasEn la Sala Mexica <strong>d<strong>el</strong></strong> Museo Nacional deAntropología se encuentra una b<strong>el</strong>la esculturacilíndrica de basalto que es conocidacomo <strong>el</strong> “Disco de Chalco” (fig. 1). Mide102.5 cm de diámetro y apenas 20 cm deespesor. En su cara principal fueron talladosen bajorr<strong>el</strong>ieve, de adentro hacia fuera,un círculo, un anillo pequeño, seis trapecioscalados y separados entre sí por seisbarras, un anillo grande, 28 círculos lisos y,por último, ocho conjuntos de cuatro barrasque se distribuyen radialmente en <strong>el</strong>borde de la pieza. En <strong>el</strong> jardín de la sala seexhiben los fragmentos de otras tres esculturasmuy semejantes en forma y dimensionesal Disco de Chalco (fig. 2). Sabemosque estos últimos proceden <strong>d<strong>el</strong></strong> CentroHistórico de la ciudad de México. El máspequeño de <strong>el</strong>los, descubierto en 1915 enla antigua calle de Santa Teresa (hoy callede Guatemala), es particularmente interesanteporque conserva restos de pigmentorojo y evidencias de que su r<strong>el</strong>ieve circularno estaba tallado sobre una pieza cilíndricade muy poco espesor, sino en la cara superiorde un bloque cuadrangular (fig. 2a).El <strong>glifo</strong> <strong>tianquiztli</strong>En la literatura especializada, <strong>el</strong> Disco deChalco y los tres fragmentos recién descritoshan sido identificados de maneraerrónea como raros monumentos solaresen los que los característicos rayos y púassagradas <strong>d<strong>el</strong></strong> astro se sustituyen por supuestostonallo o símbolos <strong>d<strong>el</strong></strong> calor. Lejosde <strong>el</strong>lo, las cuatro esculturas tienen esculpidala inconfundible convención glíficaque simboliza al <strong>tianquiztli</strong> o <strong>mercado</strong>. Estehecho puede corroborarse en numerososdocumentos históricos y pictografías. Unestado deméxicoCentro Histórico,Ciudad de Méxicod.f.mor<strong>el</strong>osChalcobuen ejemplo es <strong>el</strong> Códice Mendoza. En sufolio 59r aparece <strong>el</strong> <strong>glifo</strong> <strong>tianquiztli</strong> junto atres personajes masculinos (fig. 3). La escenaalude –como lo aclara la glosa <strong>d<strong>el</strong></strong> códice–a un padre que envía al <strong>mercado</strong> asus dos hijos de seis años de edad para recoger<strong>d<strong>el</strong></strong> su<strong>el</strong>o las tunas rojas y los granosde maíz abandonados por los vendedores.Una escena más compleja fue plasmadaen <strong>el</strong> folio 67r <strong>d<strong>el</strong></strong> mismo códice, donde seobservan seis tequihuaque o capitanes espiandodurante la noche <strong>el</strong> <strong>mercado</strong>, <strong>el</strong>templo y las casas de un pueblo enemigoque su señor deseaba conquistar (fig. 4).Otro caso es <strong>el</strong> <strong>d<strong>el</strong></strong> Lienzo de Cuauhquechollan,donde fueron figurados cuatro <strong>mercado</strong>s<strong>d<strong>el</strong></strong> suroeste de Puebla por mediode círculos que encierran a personas realizandointercambios (fig. 5).El <strong>glifo</strong> <strong>tianquiztli</strong> también fue utilizado–solo o en composición con otros <strong>el</strong>ementosgráficos– para representar topónimoso nombres de localidades. Mencionemosprimeramente la R<strong>el</strong>ación geográfica de Tetliztaca,en cuyo mapa se dibujó <strong>el</strong> <strong>glifo</strong> de Tianquizmanalco(“Donde se coloca <strong>el</strong> <strong>mercado</strong>”),pueblo <strong>d<strong>el</strong></strong> actual estado de Hidalgoque dependía de Cempoala (fig. 6a). En <strong>el</strong>Códice Cozcatzin se alude a Tianquiznáhuac(“Cerca <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>mercado</strong>”) con <strong>el</strong> mismo <strong>glifo</strong>,aunque adicionado de dos vírgulas que remitena la palabra nahuati (“hablar”) (fig.6b). En <strong>el</strong> Códice Mendoza <strong>el</strong> <strong>glifo</strong> <strong>tianquiztli</strong>tiene puntos de arena en su interior paraparticularizar a Xaltianquizco (“Lugar <strong>d<strong>el</strong></strong><strong>mercado</strong> de arena”), población cercana aNochixtlán, Oaxaca, que conquistó MotecuhzomaII (fig. 6c). Un ejemplo parecidoes <strong>el</strong> topónimo de Tianquiztenco (“Enla orilla <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>mercado</strong>”) empleado en la Matrículade Huexotzinco, <strong>el</strong> cual posee variashu<strong>el</strong>las de pie que quizás indiquen congregacióno llegada de comerciantes (fig. 6d).En <strong>el</strong> mismo documento se dibuja <strong>el</strong> <strong>glifo</strong>para <strong>el</strong> pueblo de Pochtlan (“Lugar <strong>d<strong>el</strong></strong> pochote”,o árbol bajo <strong>el</strong> cual se reunían lospochtecah o mercaderes) en forma semejantea una flor o disco con dos círculos concéntricosy cuatro trapecios calados separadosentre sí por cuatro barras (figs. 6e-f).Recordemos por último <strong>el</strong> Códice de Amecameca,donde se localiza otra localidad llamadaPochtlan, dependiente ésta de la poblaciónde Amecameca en <strong>el</strong> reino deTecuanipa; ahí vemos también un <strong>glifo</strong> discoidalaunque con tres círculos concéntricosy ocho trapecios calados separados entresí por ocho barras (fig. 6g).Es significativo que <strong>el</strong> <strong>glifo</strong> <strong>tianquiztli</strong>también fuera usado antiguamente en calidadde tezcacuitlapilli u ornamento especularque portaban los militares y las divinidadesguerreras en la base de la espalda.Así lo vemos en la Sala Mexica: en <strong>el</strong> famosomonolito de Texcoco que, según los especialistas,representaría a Tonatiuh o aCoyolxauhqui (mna, inv. 10-1142), y en laescultura central <strong>d<strong>el</strong></strong> conjunto de cincoguerreros neo-toltecas descubierto durant<strong>el</strong>a construcción <strong>d<strong>el</strong></strong> Pasaje Catedral enla ciudad de México (mna, inv. 10-48555).Esto va en consonancia con <strong>el</strong> sentido simbólicode “centralidad” propio de este <strong>glifo</strong>.Recordemos que los pochtecah, al igualNombre: “Disco de Chalco”. Sala Mexica, mna(inv. 10-81576).Cultura: ChalcaProcedencia: Chalco, estado de MéxicoPeriodo: Posclásico TardíoMaterial: Piedra volcánicaMedidas: 102.5 cm Ø x 20 cmLocalización: Sala Mexica, mnaFoto: Leonardo López Luján1. Disco de Chalco.18 / Arqueología MexicanaPIEZA / 19


a b cdigitalización: raíces2. Fragmentos de esculturas semejantes al “Disco de Chalco”: a) Sala Mexica, mna (inv. 10-613271), 68 x 47.5 x 33.5 cm, procede de la calle de Guatemala.b) Sala Mexica, mna (inv. 10-613272), 89 (diámetro) x 59.5 x 21.5 cm. c) Sala Mexica, mna (inv. s.n.), 82.5 x 46 x 16 cm.Fotos: Leonardo López Lujánque los embajadores y los guerreros, viajabancontinuamente <strong>d<strong>el</strong></strong> centro a la periferiay viceversa. Dejaban sus casas y su comunidad–un lugar civilizado, ordenado,seguro, armónico, central– para aventurarseen <strong>el</strong> monte, es decir, en la naturalezasalvaje, desordenada, p<strong>el</strong>igrosa, caótica yperiférica. Arriesgaban sus vidas para traerde vu<strong>el</strong>ta al <strong>mercado</strong> –ubicado en <strong>el</strong> axismundi marcado por <strong>el</strong> pochote o la ceiba–los bienes exóticos y las noticias de regioneslejanas.<strong>Los</strong> <strong>monolitos</strong> <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>mercado</strong>A partir de esta identificación, cabría preguntarsecuál era la función <strong>d<strong>el</strong></strong> Disco deChalco y de los tres fragmentos escultóricosaquí analizados. La clave se encuentra en laHistoria… de fray Diego Durán, en la que sededica un capítulo íntegro al tema <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>mercado</strong>y de los esclavos que ahí se vendían(“Ritos”, cap. XX). Dicha sección se enriquececon una peculiar imagen <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>glifo</strong> <strong>tianquiztli</strong>:un gran círculo rojo que contiene ensu interior una escena comercial compuestapor cuatro vendedoras sentadas frente a3. Glifo <strong>tianquiztli</strong>. Códice Mendoza, f. 59r.digitalización: raíces4. Glifo <strong>tianquiztli</strong>. Códice Mendoza, f. 67r.Foto: Florine Ass<strong>el</strong>bergssu mercancía –incluidos dos esclavos de collera–y tres compradores de pie (fig. 7).El texto de Durán define a los <strong>mercado</strong>sde las grandes ciudades como espacios“cerrados de unos paredones y siemprefronteros de los templos de los dioses o aun lado…” Dependiendo de su importancia,los <strong>mercado</strong>s abrían sus puertas ya diariamente,ya en solo uno de los cinco díasde la “semana”, dándose cita “gran concursode gente”, entre <strong>el</strong>la “muchos y muchasque no hacen otra cosa sino pasearsey andar mirando, la boca abierta, de un cabopara otro con <strong>el</strong> mayor contento <strong>d<strong>el</strong></strong> mundo…”El dominico aclara que, aunque sevendían todos los productos imaginablesorganizados por género, había especialidadesen cada ciudad. Por ejemplo, los <strong>mercado</strong>sde Azcapotzalco e Izúcar se distinguíanpor <strong>el</strong> negocio de esclavos; <strong>el</strong> deCholula por las joyas de piedra y las plumaspreciosas; <strong>el</strong> de Texcoco por la ropa yla loza, y <strong>el</strong> de Acolman por los perros.De acuerdo con Durán, estos complejosarquitectónicos tenían un área consagradaal culto de la imagen <strong>d<strong>el</strong></strong> “dios de los<strong>mercado</strong>s y ferias”, sitio en <strong>el</strong> que se le ofrecían“mazorcas de maíz, ají, tomatl, fruta yotras legumbres y semillas y pan; en fin, detodo lo que se vendía en <strong>el</strong> tianguis”. Según<strong>el</strong> texto se trataba de un momoztli o “mentidero”(en español antiguo, lugar dondeconversaba la gente ociosa), es decir, deuna plataforma baja de uso ceremonial queera similar a las que había en los caminosy las encrucijadas de las calles. En formaparticularmente esclarecedora para nuestrospropósitos, Durán añade que: “En estosmentideros de los tianguis había fijadasunas piedras redondas labradas tan grandescomo una ro<strong>d<strong>el</strong></strong>a, y en <strong>el</strong>las esculpidasuna figura redonda como una figura de unsol con unas pinturas a manera de rosas, ala redonda, con unos círculos redondos…”Es claro que este pasaje describe <strong>el</strong> <strong>glifo</strong><strong>tianquiztli</strong> dibujado en ese mismo capítulo(fig. 7) y que, por tanto, alude al tipo de<strong>monolitos</strong> que estamos analizando. Duránpuntualiza ahí que dichas “piedras redondas”eran “tan grandes como una ro<strong>d<strong>el</strong></strong>a”.A este respecto, traigamos a la memoria quedos ro<strong>d<strong>el</strong></strong>as de plumas que han llegado anuestros días, la <strong>d<strong>el</strong></strong> Museo Nacional de Historiade Chapultepec (mnh, inv. 10-92265)5. Glifo <strong>tianquiztli</strong>. Lienzo de Cuauhquechollan.fotos: florine ass<strong>el</strong>bergs, barbara munly y marc thouvenota6. Topónimos con <strong>el</strong> <strong>glifo</strong> <strong>tianquiztli</strong>: a) Tianquizmanalco. Mapa de la R<strong>el</strong>ación geográfica de Tetliztaca. b)Tianquiznáhuac. Códice Cozcatzin, f. 6r. c) Xaltianquizco.Códice Mendoza, f. 16v. d) Tianquiztenco. Matrícula de Huexotzinco, f. 541r. e) Pochtlan. Matrícula de Huexotzinco, f. 525r. f) Pochtlan. Matrículade Huexotzinco, f. 695r. g) Pochtlan. Códice de Amecameca, f. 26r.y la <strong>d<strong>el</strong></strong> Museum für Völkerkunde de Viena(mvk 43-380), miden respectivamente67.5 cm y 70 cm de diámetro, dimensionesque se aproximan de manera sorprendentea las de los <strong>monolitos</strong> de la Sala Mexica.En busca de los <strong>mercado</strong>sb7. Glifo <strong>tianquiztli</strong>. Durán, Historia de las Indias de Nueva España e islas de Tierra Firme(“Ritos…”, cap. XX). digitalización: raícescedfEn un artículo reciente sobre Xochicalco,Kenneth Hirth ha demostrado que es posibleidentificar arqueológicamente instalacionesmercantiles en los sitios mesoamericanos.Esto puede lograrse si sedetectan a) restos arquitectónicos de granescala en torno a plazas, que colinden conestructuras cívico-ceremoniales, que esténsituados en lugares centrales y que se conectena caminos y calzadas; b) edificiosmenores asociados con la organización comercial(áreas para jueces, puestos, galerías,corredores, bodegas); c) pisos con unpH diferente y altas concentraciones defosfatos resultado de abundante materiaorgánica, y d) evidencias de actividadesmoderadas de producción artesanal, entre<strong>el</strong>las desechos de talla de obsidiana. A estalista de indicadores deberíamos agregar, sinuestras conclusiones son correctas, unmomoztli calificado por <strong>el</strong> <strong>glifo</strong> <strong>tianquiztli</strong>.Quizás en un futuro no muy lejano lleguea localizarse uno de estos <strong>monolitos</strong> en suposición original…• Leonardo López Luján. Doctor en arqueología porla Université de Paris X-Nanterre y director <strong>d<strong>el</strong></strong> ProyectoTemplo Mayor.• Bertina Olmedo Vera. Arqueóloga por la Escu<strong>el</strong>aNacional de Antropología e Historia y curadora de laSala Mexica <strong>d<strong>el</strong></strong> mna.Para leer más…gAss<strong>el</strong>bergs, Florine, Conquered Conquistadors. The Lienzo deQuauhquechollan: A Nahua Vision of the Conquest of Guatemala,Boulder, University Press of Colorado, 2004.Becerra, Marcos E., “El pochotl o ceiba”, en Revista Mexicanade Estudios Antropológicos, vol. VI, 1944, pp. 91-101.Codex Mendoza, edición facsimilar y estudio de Frances F.Berdan y Patricia Rieff Anawalt, 4 vols., Universityof California Press, Berk<strong>el</strong>ey, 1992.Durán, fray Diego, Historia de las Indias de Nueva España eislas de tierra firme, 2 vols., Editorial Porrúa, México, 1984.Gillespie, Susan D., y Rosemary A. Joyce, “Deity R<strong>el</strong>ationshipsin Mesoamerican Cosmologies. The Caseof the Maya God L”, en Ancient Mesoamerica, vol. 9,1998, pp. 279-296.Hirth, Kenneth, “Craft Production in a Central MexicanMarketplace”, en Ancient Mesoamerica, vol. 20, núm.1, 2009, pp. 89-102.Jalpa Flores, Tomás, Códice de Amecameca (BnF n°26):diccionario de <strong>el</strong>ementos constitutivos, inah, México, 2009.Russo, Alessandra, El realismo circular. Tierras, espacios ypaisajes de la cartografía novohispana, siglos xvi y xvii,unam, México, 2005.20 / Arqueología Mexicana Máscara Ceremonial / 21

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!