12.07.2015 Views

Informe Nacional de Desarrollo Humano 2003: Callejon con salida 7

Informe Nacional de Desarrollo Humano 2003: Callejon con salida 7

Informe Nacional de Desarrollo Humano 2003: Callejon con salida 7

SHOW MORE
SHOW LESS
  • No tags were found...

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Tercera parte:Una estrategiaintegralCapítulo 7Cuidar a la gente:seguridad ciudadanay justicia


Agra<strong>de</strong>cimientosColaboración: Ana Daza, Andrés Dávila Ladrón <strong>de</strong> Guevara,Mariana Escobar, Alexandra Guáqueta, Janeth Giha,Carmen Elena Lenis, Graciela <strong>de</strong> Lozano, María VictoriaLlorente, Germán Nova, Gloria Ospina (coronel), JuanJosé Páez, Otty Patiño, Julie Ester Plata, María EugeniaPinto, Alfredo Rangel, Adalgisa Reyes, Jairo HernandoRicaurte Rozo (coronel), Mauricio Rubio, Andrés Soto,Gilberto Toro y Andrés Vergara.Recuadros: Antanas Mockus, Enrique Peñalosa y MarthaLucía Ramírez.Página anterior: Foto 7.1 Policías carabineros, Bogotá, 2001 • Archivo El Tiempo.


Dijimos que el primer escalón <strong>de</strong>l <strong>de</strong>sarrollohumano es la seguridad humana. Por eso, el primer <strong>de</strong>ber<strong>de</strong>l Estado es proteger la vida e integridad física <strong>de</strong> sus asociados—y en esto <strong>con</strong>siste el pacto mínimo <strong>de</strong> ciudadanía.En el evento <strong>de</strong> una agresión injusta <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el exterior,esa obligación recae sobre las Fuerzas Militares, que, <strong>de</strong>ntro<strong>de</strong> las normas <strong>de</strong>l dih, han <strong>de</strong> repeler el ataque. En elcaso <strong>de</strong> un <strong>con</strong>flicto interior, sin embargo, es preciso distinguirentre personal uniformado en situación <strong>de</strong> combate ypersonal no uniformado o fuera <strong>de</strong> combate. El primero pue<strong>de</strong>y <strong>de</strong>be ser objeto <strong>de</strong> acción militar estricta, esto es, <strong>de</strong>acciones encaminadas a lograr su <strong>de</strong>rrota o su captura. Elsegundo, no combatiente, requiere <strong>de</strong> una previa i<strong>de</strong>ntificacióny <strong>con</strong>firmación <strong>de</strong> su carácter <strong>de</strong> <strong>de</strong>lincuente. Y así,mientras la primera tarea es propia <strong>de</strong> las Fuerzas Armadas,la segunda inicialmente recae sobre el sistema <strong>de</strong> justiciapenal. Por tanto, en un <strong>con</strong>flicto interno, los <strong>con</strong>ceptos “seguridad”y “justicia penal” están indisolublemente unidos.Este capítulo lo re<strong>con</strong>oce así y en <strong>con</strong>secuencia trata <strong>de</strong> ambosasuntos o “sectores” como un todo integrado.En términos normativos, el <strong>Informe</strong> sostiene que, mientrasse ciñan al <strong>de</strong>recho, los actos <strong>de</strong> combate <strong>de</strong> la fuerzapública son justos: como argumenta el Capítulo 3, tanto laguerrilla como el paramilitarismo carecen <strong>de</strong> jus ad bellumy son injustos; la respuesta armada <strong>de</strong>l Estado está entoncesbien justificada. Ante no combatientes, sin embargo, lacarga <strong>de</strong> la prueba recae sobre el Estado: él <strong>de</strong>be <strong>de</strong>mostrarque el sospechoso en efecto incurrió en un <strong>de</strong>lito o ca<strong>de</strong>na<strong>de</strong> <strong>de</strong>litos que —a los efectos presentes— incluiría <strong>de</strong>litospolíticos (rebelión, sedición, asonada); para ser justas, estasotras actuaciones <strong>de</strong>l Estado necesitan <strong>de</strong>l <strong>de</strong>bido procesoy <strong>de</strong> la plena prueba judicial.La seguridad-justicia es un “bien público” es <strong>de</strong>cir: tantola seguridad como la justicia son servicios que el Estado<strong>de</strong>be proveer para todos los asociados. Si sólo diese seguridada un sector <strong>de</strong> la población, el sector excluido saldría<strong>de</strong>l pacto mínimo <strong>de</strong> ciudadanía, vale <strong>de</strong>cir, no formaría parte<strong>de</strong> tal “Estado”; éste sería, recor<strong>de</strong>mos a Nozick, otra “asociaciónprivada <strong>de</strong> protección”, un ente que “sólo protege aquienes pagan por ello, porque carece <strong>de</strong>l po<strong>de</strong>r monopólicopara anunciar que castigará a quien haga uso <strong>de</strong> la fuerzasin autorización expresa, lo cual es <strong>con</strong>dición necesaria parala existencia <strong>de</strong>l Estado” (Nozick, 1974: 32). Y en cuantoa la justicia, el punto es aún más obvio: si sólo existe justiciapara unos, para los otros sólo habrá injusticia.Es más: una justicia a medias no es justicia y una seguridada medias no es segura. La seguridad-justicia es un bienpúblico en cuya prestación el Estado está obligado a hacerel máximo esfuerzo <strong>de</strong> calidad y cobertura. No es posible,por supuesto, que estos servicios funcionen sin falla alguna;pero en medio <strong>de</strong> sus restricciones (por ejemplo, fiscales)y sus dificulta<strong>de</strong>s (por ejemplo, la <strong>de</strong>gradación <strong>de</strong>l <strong>con</strong>flicto)el Estado colombiano <strong>de</strong>be sin duda avanzar hacia lacobertura universal y la prestación integral <strong>de</strong> este servicio.Tal enfoque integral <strong>de</strong> la seguridad-justicia como un bienindivisible tiene a su vez tres gran<strong>de</strong>s implicaciones:• Que las varias entida<strong>de</strong>s que <strong>con</strong>forman el sistema <strong>de</strong>seguridad y justicia penal (en a<strong>de</strong>lante, ssjp o simplementeel Sistema) cubran todas las funciones requeridas y <strong>de</strong> modobalanceado.• Que haya coordinación o <strong>con</strong>certación entre las entida<strong>de</strong>s<strong>de</strong>l Sistema y, en especial, que las reformas institucionales<strong>de</strong> cada una se acoplen al interés <strong>de</strong>l <strong>con</strong>junto.• Que los diversos beneficios y costos asociados <strong>con</strong> el ssjpse distribuyan <strong>de</strong> manera equitativa entre los ciudadanos.Este capítulo se propone mirar nuestro ssjp <strong>de</strong>s<strong>de</strong> esastres perspectivas. Tras aclarar algunos referentes básicos enla sección A, las secciones siguientes se ocupan <strong>de</strong> evaluar 153


Programa <strong>de</strong> las Naciones Unidas para el <strong>Desarrollo</strong><strong>Informe</strong> <strong>Nacional</strong> <strong>de</strong> <strong>Desarrollo</strong> <strong>Humano</strong> Colombia - <strong>2003</strong>-154el <strong>de</strong>sempeño <strong>de</strong>l Sistema y <strong>de</strong> sus varios componentes enrelación <strong>con</strong> aquellos tres criterios, para <strong>con</strong>cluir <strong>con</strong> unasíntesis <strong>de</strong> las recomendaciones. El primero <strong>de</strong> los criterios—balance funcional— es el que tiene implicaciones más diversaspara el Sistema; por eso se distinguirán tres tipos <strong>de</strong><strong>de</strong>sbalance y a cada uno se <strong>de</strong>dicará una sección separada;anticipemos, para guía <strong>de</strong>l lector, que los tres tipos <strong>de</strong> <strong>de</strong>sbalancese manifiestan respectivamente en:• Confusión misional. En algunos casos, la presión <strong>de</strong>l<strong>con</strong>flicto armado hace que la entidad asuma funciones queno le correspon<strong>de</strong>n, lo cual acaba por <strong>de</strong>svirtuar su naturaleza.• Función <strong>de</strong>satendida. En otros casos, la entidad o entida<strong>de</strong>sno logran cumplir <strong>con</strong> una o más <strong>de</strong> las funciones paralas cuales fueron creadas.• Función sobreatendida. En otros casos, la entidad o entida<strong>de</strong>s<strong>de</strong>dican un exceso <strong>de</strong> esfuerzos o recursos para cumplir<strong>con</strong> <strong>de</strong>terminadas funciones.Aunque a veces los tipos no se dan puros, el Cuadro 7.1presenta un listado inicial <strong>de</strong> las situaciones que más se acercana cada categoría y que serán miradas en las secciones B,C y D.Cuadro 7.1 Manifestaciones <strong>de</strong> la falta<strong>de</strong> balance funcional en el ssjpTipo <strong>de</strong> <strong>de</strong>sbalance En seguridad En justiciaConfusión misional Policía Fiscalía(Seccion B)Fuerzas MilitaresFunción <strong>de</strong>satendida Coordinación <strong>de</strong> inteligencia Justicia especializada(Sección C) Vigilancia rural Ministerio PúblicoRelación <strong>con</strong> la comunidad Investigación criminalFunción sobreatendida Cooperación internacional(Sección D) Protección <strong>de</strong> infraestructura Conflictos sencillosPolicía judicial a militares CriminalizaciónFuente: INDH, <strong>2003</strong>Sin entrar por ahora en los <strong>de</strong>talles, digamos que el mensajecentral <strong>de</strong>l capítulo cabalmente <strong>con</strong>siste en la visión <strong>de</strong>sistema; esta i<strong>de</strong>a-guía <strong>de</strong>l <strong>de</strong>sarrollo humano nos servirátanto para evaluar la cobertura y calidad actuales <strong>de</strong>l ssjpcomo para sustentar las propuestas <strong>de</strong> acción. Y este punto<strong>de</strong> vista, sin preten<strong>de</strong>rlo, resulta ser más bien novedoso: laestrecha inter<strong>de</strong>pen<strong>de</strong>ncia entre las funciones y las entida<strong>de</strong>s<strong>de</strong>l Sistema no ha sido re<strong>con</strong>ocida en el diseño ni en laejecución <strong>de</strong> las políticas <strong>de</strong> seguridad y justicia para aten<strong>de</strong>ral <strong>con</strong>flicto armado; las responsabilida<strong>de</strong>s tien<strong>de</strong>n asegmentarse <strong>de</strong> manera difusa, lo cual afecta seriamente laeficacia, cobertura y calidad <strong>de</strong>l servicio, <strong>de</strong>sperdicia recursosescasos y dificulta la necesaria dirección coherente <strong>de</strong>lSistema (clave ésta <strong>de</strong> la <strong>salida</strong> al <strong>con</strong>flicto, como dijeran loscapítulos 1 y 6).A. Algunas referencias básicas1. El Sistema <strong>de</strong> Seguridad y Justicia PenalEl Gráfico 7.1 es un organigrama <strong>de</strong>l que aquí hemos llamadossjp, que incluye el más <strong>con</strong>vencional “sistema <strong>de</strong> justiciacriminal” y la <strong>de</strong>nominada “fuerza pública” por la Constitucióncolombiana (artículo 216). Así entendido, el ssjpinvolucra a las varias ramas <strong>de</strong>l po<strong>de</strong>r público:• La Rama Ejecutiva, en cabeza <strong>de</strong>l Ministerio <strong>de</strong>l Interiory Justicia, es responsable <strong>de</strong> formular la política criminaly penitenciaria, así como <strong>de</strong> administrar el sistema carcelario.El Ministerio <strong>de</strong> Defensa traza la política <strong>de</strong> seguridad;las ff mm, la policía nacional y el das ejecutan sus directricesen las áreas <strong>de</strong> incumbencia respectivas.• La Rama Legislativa, que adopta las leyes y pue<strong>de</strong> ejercer<strong>con</strong>trol político sobre el Gobierno.• La Rama Judicial, que en asuntos penales está integradapor la Fiscalía General <strong>de</strong> la Nación (fgn), el Instituto<strong>Nacional</strong> <strong>de</strong> Medicina Legal y Ciencias Forenses (inmlcf)y los jueces penales <strong>de</strong> distinta jurisdicción o competencia;su papel es investigar y juzgar los <strong>de</strong>litos.• El Ministerio Público encargado <strong>de</strong> vigilar la gestiónpublica a través <strong>de</strong> la Procuraduría General <strong>de</strong> la Nación(pgn) y la Defensoría <strong>de</strong>l Pueblo (dp).2. Información: disponibilidad y accesoAl elaborar este capítulo se en<strong>con</strong>tró una especial dificultadmetodológica, que por sí misma amerita una reflexión y unarecomendación sustantivas: la notable escasez <strong>de</strong> informacióny estudios rigurosos sobre un asunto <strong>de</strong> altísimo interéspúblico.


El <strong>con</strong>flicto, callejón <strong>con</strong> <strong>salida</strong>Gráfico 7. 1 Mapa institucional <strong>de</strong>l sistemaFuente: INDH, <strong>2003</strong>.En efecto: las estadísticas y análisis sobre justicia y seguridadtien<strong>de</strong>n a ser fragmentarios, a estar dispersos entre entida<strong>de</strong>s,oficinas e instancias, a ser <strong>de</strong> uso reservado o “<strong>con</strong>fi<strong>de</strong>ncial”sin merecerlo, y a no inspirarse en una visiónsistémica. Una cultura formalista, que privilegia las normassobre los resultados, dificulta la evaluación, la planeación yla propia comprensión <strong>de</strong>l Sistema. Brillan por ausencia lasreferencias al nexo entre seguridad y justicia penal, tantocomo faltan las mediciones tocantes a insumos, costos, calidady eficiencia <strong>de</strong>l servicio, vale <strong>de</strong>cir, las necesarias parauna gestión bien fundada o para una rendición <strong>de</strong> cuentasa<strong>de</strong>cuada.Tal estado <strong>de</strong> cosas no es acci<strong>de</strong>ntal sino un reflejo <strong>de</strong>l maldiseño institucional. Como apuntó el Capítulo 1, nuestrosistema político reparte en “compartimentos estancos” lasdistintas esferas <strong>de</strong> la gestión pública, y en este caso <strong>de</strong>legóa la fuerza pública el manejo <strong>de</strong>l “or<strong>de</strong>n público” y a losjuristas el manejo <strong>de</strong> la Rama Judicial. Estos dos compartimentoshablan idiomas distintos entre sí, e igualmente her-méticos para el administrador, el planificador, el analista <strong>de</strong>procesos y —en especial— para el ciudadano medio u “opiniónpública”. Con esto, los problemas y dilemas propios<strong>de</strong> la seguridad y la justicia quedan por fuera <strong>de</strong>l escrutinioy el <strong>de</strong>bate públicos, es <strong>de</strong>cir, quedan por fuera <strong>de</strong> la política.La falta <strong>de</strong> información comprensiva y comprensible esa la vez una <strong>con</strong>secuencia y un refuerzo <strong>de</strong>l mecanismo que<strong>de</strong>spolitizó, en el mal sentido <strong>de</strong> la palabra, el manejo <strong>de</strong>l<strong>con</strong>flicto.Mejorar la cobertura, oportunidad, calidad y valor analítico<strong>de</strong> la información sobre el ssjp y sus resultados es laprimera —y nada trivial— recomendación <strong>de</strong>l <strong>Informe</strong> enesta materia. Dijo Clemenceau que la guerra es <strong>de</strong>masiadoseria para <strong>de</strong>jarla en manos <strong>de</strong> los generales; añadamos aquíque la justicia es <strong>de</strong>masiado seria para <strong>de</strong>jarla en manos <strong>de</strong>los abogados. Los generales (y los abogados) serán los primerosen agra<strong>de</strong>cer que la sociedad colombiana se hagacargo, por fin, <strong>de</strong> sus inquietu<strong>de</strong>s y sus necesida<strong>de</strong>s.155


Programa <strong>de</strong> las Naciones Unidas para el <strong>Desarrollo</strong><strong>Informe</strong> <strong>Nacional</strong> <strong>de</strong> <strong>Desarrollo</strong> <strong>Humano</strong> Colombia - <strong>2003</strong>1563. Lecciones <strong>de</strong> la experiencia internacionalAnálisis comparados <strong>de</strong> campañas <strong>con</strong>trainsurgentes a<strong>de</strong>lantadosen países tan distintos como Malasia, Kenya, Italia, Filipinase Irlanda <strong>de</strong>l Norte, han hecho evi<strong>de</strong>nte la vali<strong>de</strong>z <strong>de</strong>lenfoque integral o sistémico. Cada uno <strong>de</strong> los componentes<strong>de</strong>l que aquí hemos llamado ssjp —y su articulación cuidadosa—resultaron ser fundamentales para el triunfo <strong>de</strong> aquellasestrategias. En todos los casos <strong>de</strong> éxito fue la política laque <strong>con</strong>dujo el proceso e integró el Sistema; en todos los casos,lo militar actuó <strong>con</strong> sujeción a lo político y en todos loscasos, el triunfo <strong>de</strong>pendió <strong>de</strong> que el Estado ganara la <strong>con</strong>fianza<strong>de</strong> la población. En términos más específicos, cabe <strong>de</strong>cirque la experiencia mundial enseña dos gran<strong>de</strong>s lecciones:a. Una respuesta integralEl mo<strong>de</strong>lo <strong>con</strong>trainsurgente que <strong>de</strong>mostró mejores resultadosdurante la segunda mitad <strong>de</strong>l siglo xx fue el <strong>de</strong> los británicos,<strong>de</strong>sarrollado a partir <strong>de</strong> Malasia y otras experiencias.El rasgo distintivo <strong>de</strong> este mo<strong>de</strong>lo es anteponer lo político alo militar, en <strong>con</strong>traste <strong>con</strong> el enfoque adoptado por EstadosUnidos en Vietnam y Afganistán, don<strong>de</strong> prevaleció elsegundo componente.La respuesta <strong>de</strong>l Estado ante el <strong>con</strong>flicto <strong>de</strong>be partir pues<strong>de</strong> una estrategia que valore y atienda cada componente <strong>de</strong>lssjp y establezca entre ellos buenos mecanismos <strong>de</strong> coordinación.La estrategia <strong>de</strong>be fijar tanto los objetivos globalescomo las responsabilida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> cada institución. SegúnThompson (1970), una estrategia así e<strong>con</strong>omiza esfuerzos yestablece un a<strong>de</strong>cuado equilibrio entre medidas civiles yoperaciones militares.También es importante <strong>de</strong>finir un li<strong>de</strong>razgo que <strong>con</strong>voquey oriente los esfuerzos <strong>de</strong> las instituciones <strong>de</strong>l Sistema,capaz <strong>de</strong> compren<strong>de</strong>r y <strong>de</strong> incidir sobre las variables políticas,e<strong>con</strong>ómicas, militares y sicológicas que marcan rumboal <strong>con</strong>flicto. Las élites <strong>de</strong>ben ponerse a la tarea <strong>de</strong> en<strong>con</strong>traruna <strong>de</strong>finición clara y rigurosa <strong>de</strong> qué significa la “victoria”,para a partir <strong>de</strong> ella <strong>de</strong>ducir un or<strong>de</strong>n <strong>de</strong> priorida<strong>de</strong>s,unos recursos y un “plan <strong>de</strong> juego” que enmarque las acciones<strong>de</strong> cada entidad o instancia <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l Sistema.Con el fin <strong>de</strong> evitar un impacto limitado o <strong>de</strong>sequilibrado<strong>de</strong> la asistencia internacional, el gobierno <strong>de</strong>be establecerlas áreas don<strong>de</strong> requiere <strong>de</strong> cooperación en función <strong>de</strong>sus necesida<strong>de</strong>s y, por supuesto, <strong>de</strong> los intereses <strong>de</strong> la <strong>con</strong>traparteexterna.El área <strong>de</strong> coordinación quizá más difícil pero tambiénmás importante es la <strong>de</strong> levantar, analizar, diseminar y utilizarinformación <strong>de</strong> inteligencia. En particular, el subsistema<strong>de</strong> inteligencia <strong>de</strong>be ser capaz <strong>de</strong> prevenir el avance político<strong>de</strong> la insurgencia o el paramilitarismo, pues una guerra irregular<strong>de</strong>pen<strong>de</strong> en último término <strong>de</strong> la fuerza política.b. Apoyo <strong>de</strong> la poblaciónA<strong>de</strong>más <strong>de</strong> neutralizar la acción militar <strong>de</strong> los rebel<strong>de</strong>s, unobjetivo esencial en la campaña es ganar el apoyo <strong>de</strong> la población,a partir <strong>de</strong> la presencia institucional y simbólica <strong>de</strong>lEstado. La batalla por los corazones y las mentes empiezapor persuadir a la comunidad <strong>de</strong> que su interés está <strong>de</strong>l lado<strong>de</strong>l Estado. Y éste a su vez <strong>de</strong>be privar a los insurgentes <strong>de</strong>todas aquellas formas <strong>de</strong> apoyo que necesitan <strong>de</strong> la población,es <strong>de</strong>cir, suministros, movilidad, información y voluntad<strong>de</strong> triunfo (Dixon, 1997: 180).Un movimiento insurgente o paramilitar sólo pue<strong>de</strong> ser<strong>de</strong>rrotado a partir <strong>de</strong> buenas prácticas <strong>de</strong> gobierno que atraiganel apoyo popular. En tal sentido afirma Thompson (1970)que es preciso mostrar diferencias entre las zonas <strong>con</strong>troladaspor el Estado y aquellas bajo dominio enemigo, graciasa una administración eficiente y transparente.En la doctrina británica el papel <strong>de</strong>l ejército en el esfuerzo<strong>con</strong>trainsurgente es limitado porque a la policía, por seruna fuerza localizada, le es más fácil establecer relaciones<strong>con</strong> la comunidad, es más efectiva en recolectar inteligencia,se muestra más sensible a la opinión local, ayuda a crearuna imagen <strong>de</strong> normalidad, pue<strong>de</strong> ser más e<strong>con</strong>ómica queel ejército y está mejor entrenada para el futuro papel <strong>de</strong>mantener la paz (Dixon, 1997: 182).Quienes estudian la experiencia internacional coinci<strong>de</strong>nen la importancia <strong>de</strong> <strong>con</strong>tar <strong>con</strong> una legislación a<strong>de</strong>cuadapara hacer frente a la insurrección o el paramilitarismo, locual supone limitar algunos <strong>de</strong>rechos ciudadanos. Sin embargo,también llaman la atención sobre la necesidad <strong>de</strong>balancear tales medidas <strong>con</strong> la ya dicha prioridad <strong>de</strong> <strong>con</strong>struir<strong>con</strong>fianza y ganar apoyo <strong>de</strong> la población; si las normas<strong>de</strong> excepción <strong>de</strong>sbordan el Estado <strong>de</strong> <strong>de</strong>recho, el resultadopue<strong>de</strong> ser ahondar la <strong>de</strong>s<strong>con</strong>fianza en el gobierno y sus agentes(Hoffman y Morrison, 1992).


El <strong>con</strong>flicto, callejón <strong>con</strong> <strong>salida</strong>© Carlos Julio Martínez / El Tiempo DigitalFoto 7.2 Las caravanas Vive Colombia han sido parte importante <strong>de</strong> la estrategia <strong>de</strong>l gobierno Uribe para recuperar la industria <strong>de</strong>l turismo interno.157


Programa <strong>de</strong> las Naciones Unidas para el <strong>Desarrollo</strong><strong>Informe</strong> <strong>Nacional</strong> <strong>de</strong> <strong>Desarrollo</strong> <strong>Humano</strong> Colombia - <strong>2003</strong>RECUADRO 7.1Ten<strong>de</strong>ncias actuales <strong>de</strong> policía*La actividad <strong>de</strong> la policía en el mundo presenta gran<strong>de</strong>s variacionesporque su labor respon<strong>de</strong> a las necesida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> cada<strong>con</strong>texto y, por tanto, se ha adaptado a distintas <strong>con</strong>cepciones<strong>de</strong> seguridad, ley y or<strong>de</strong>n.En los países anglosajones y en Europa Occi<strong>de</strong>ntal la policíatiene un claro tenor civil, que es evi<strong>de</strong>nte en sus funciones,estructura, doctrina y organización. Por el <strong>con</strong>trario, las policíaslatinoamericanas tradicionalmente han tenido un caráctermilitar don<strong>de</strong> predomina la función <strong>de</strong> mantener el or<strong>de</strong>n y hacercumplir la ley mediante el uso <strong>de</strong> la fuerza. Sin embargo, el auge<strong>de</strong> los principios <strong>de</strong>mocráticos y la influencia <strong>de</strong> i<strong>de</strong>as como los<strong>de</strong>rechos humanos, la transparencia y la justicia, han forzadocambios en la forma como se <strong>de</strong>sarrolla la actividad policial.Los cuerpos <strong>de</strong> policía europeos y anglosajones pue<strong>de</strong>n<strong>con</strong>si<strong>de</strong>rarse policías mo<strong>de</strong>rnas porque reúnen tres características(Frühling, 2001): i) son entida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> carácter público,es <strong>de</strong>cir <strong>de</strong>dicadas a la protección igualitaria <strong>de</strong> la ciudadanía;ii) su personal es civil y profesionalizado vale <strong>de</strong>cir, sujeto aprocesos rigurosos <strong>de</strong> selección, formación y promoción, yiii) pue<strong>de</strong>n hacer uso <strong>de</strong> la fuerza pero <strong>de</strong> modo claramente* Hugo Frühling (2001).limitado; por ejemplo en Inglaterra los policías no pue<strong>de</strong>nportar armas <strong>de</strong> fuego.Los cuerpos <strong>de</strong> policía latinoamericanos a menudo no reúnenaquellas <strong>con</strong>diciones. Primero, porque aunque se los<strong>de</strong>fine como entes públicos, <strong>de</strong> hecho dan mejor protección alos estratos altos que al grueso <strong>de</strong> los ciudadanos. Segundo,porque no están bien profesionalizados, dado que usan criteriosparticulares y subjetivos para la escogencia y manejo <strong>de</strong>lpersonal. Tercero, porque no son cuerpos realmente civilessino semimilitares, lo que da pie al uso excesivo <strong>de</strong> la fuerza yen ocasiones a la inobservancia <strong>de</strong> los <strong>de</strong>rechos ciudadanos.Por estas <strong>de</strong>bilida<strong>de</strong>s, sumadas a las frecuentes <strong>de</strong>nuncias<strong>de</strong> corrupción, en casi todos los países <strong>de</strong> América Latina sehan puesto en marcha procesos <strong>de</strong> mo<strong>de</strong>rnización <strong>de</strong> la policía.Los resultados parecen haber sido más exitosos en lospaíses centroamericanos don<strong>de</strong> la reforma fue enmarcada enel <strong>con</strong>texto <strong>de</strong> pos<strong>con</strong>flicto y fortalecimiento <strong>de</strong> la <strong>de</strong>mocracia.Sin embargo, las reformas han sido más difíciles en Colombia,Brasil o Argentina, por la rigi<strong>de</strong>z <strong>de</strong> las estructuraspolíticas y la situación <strong>de</strong> or<strong>de</strong>n público.Los procesos <strong>de</strong> mo<strong>de</strong>rnización y reforma <strong>de</strong> la policía engeneral se proponen cinco gran<strong>de</strong>s objetivos. El primero es158B. La <strong>con</strong>fusión <strong>de</strong> misiones1. Policía <strong>Nacional</strong>Una <strong>de</strong> las primeras víctimas <strong>de</strong>l <strong>con</strong>flicto armado fue la policía,que en efecto <strong>de</strong>scuidó enormemente su función preventivapara <strong>de</strong>dicarse a las tareas reactivas. Según el artículo 218<strong>de</strong> la Constitución, la policía <strong>de</strong>be mantener las <strong>con</strong>dicionesnecesarias para el ejercicio <strong>de</strong> los <strong>de</strong>rechos y liberta<strong>de</strong>spúblicas y asegurar que los habitantes vivan en paz. Su misiónfundamental es “<strong>con</strong>tribuir a satisfacer las necesida<strong>de</strong>s<strong>de</strong> seguridad y tranquilidad públicas, mediante un efectivoservicio, fundamentado en la prevención, investigación y<strong>con</strong>trol <strong>de</strong> <strong>de</strong>litos y <strong>con</strong>travenciones” (Policía <strong>Nacional</strong>, 2002).Por en<strong>de</strong>, sus responsabilida<strong>de</strong>s básicas son:• Preventiva: vigilancia urbana y rural.• Reactiva: <strong>con</strong>trol <strong>de</strong> la criminalidad en calidad <strong>de</strong> policíajudicial; llevar a cabo la fase preliminar <strong>de</strong> la investigación<strong>de</strong> los <strong>de</strong>litos y actuar como auxiliar <strong>de</strong> la justicia yapoyo a la Fiscalía. Posee grupos especializados <strong>con</strong>tra <strong>de</strong>litosprioritarios tales como narcotráfico y secuestro. El avanceen el área <strong>de</strong> inteligencia fue <strong>de</strong>cisivo para <strong>de</strong>smantelarlos carteles <strong>de</strong>l narcotráfico durante los 90, y a partir <strong>de</strong> entoncesla institución asumió una actitud más proactiva (Recuadro7.1).Un segundo impacto <strong>de</strong>l <strong>con</strong>flicto interno sobre la policíafue militarizarla en cuanto a su estructura <strong>de</strong> mando y laformación <strong>de</strong> sus cuadros. En tiempos <strong>de</strong> La Violencia, laentidad estaba adscrita al Ministerio <strong>de</strong> Gobierno y los cuerposlocales <strong>de</strong>pendían <strong>de</strong> gobernadores y alcal<strong>de</strong>s. Para ais-


El <strong>con</strong>flicto, callejón <strong>con</strong> <strong>salida</strong>** “¿What is community policing?”, en Office of Community Oriented PolicingServices: Cops. (abril 2 <strong>de</strong> <strong>2003</strong>).mejorar su respeto por la ley y la vigencia <strong>de</strong> los <strong>de</strong>rechoshumanos. El segundo es hacer que responda mejor al <strong>con</strong>trol<strong>de</strong> la ciudadanía y <strong>de</strong>l po<strong>de</strong>r judicial. El tercero es asegurar lacalidad y formación a<strong>de</strong>cuada <strong>de</strong>l personal. El cuarto es <strong>con</strong>vertirlaen un cuerpo más representativo y más <strong>con</strong>fiable, cuyopersonal refleje la heterogeneidad social y cultural <strong>de</strong>l país. Elquinto es cambiar la actitud reactiva, don<strong>de</strong> la policía atien<strong>de</strong>emergencias y solicitu<strong>de</strong>s, por una actitud proactiva don<strong>de</strong>planea estrategias, previene el crimen, autoevalúa sus resultadosy se ajusta para ser más eficiente.Entre las ten<strong>de</strong>ncias hoy más generalizadas se <strong>de</strong>staca lapolicía comunitaria, entendida como “una filosofía que incluyetanto la aplicación <strong>de</strong> la ley como la prevención <strong>de</strong>l <strong>de</strong>lito,la solución <strong>de</strong> problemas, el compromiso y las asociaciones<strong>con</strong> la comunidad; por tanto este mo<strong>de</strong>lo requiere que lapolicía y los ciudadanos trabajen juntos” ** .En Estados Unidos, el mo<strong>de</strong>lo fue adoptado mediante TheViolent Crime Control and Law Enforcement Act <strong>de</strong> 1994. Estaley <strong>de</strong>stinó fondos fe<strong>de</strong>rales para transformar las policías localesen policía comunitaria y creó la Oficina <strong>de</strong> ServiciosPoliciales (cops, por su sigla en inglés) <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l Departamento<strong>de</strong> Justicia para administrar y supervisar estas ayudas.En Canadá y otros países, el mo<strong>de</strong>lo <strong>de</strong> policía comunitariase ha apoyado sobre una teoría o símil. Igual que la ventanarota <strong>de</strong> un edificio <strong>de</strong>nota <strong>de</strong>scuido <strong>de</strong> los resi<strong>de</strong>ntes queva abriendo paso al <strong>de</strong>terioro gradual <strong>de</strong>l vecindario, cuandouna comunidad ignora comportamientos vandálicos comopandillas, graffiti y manifestaciones públicas <strong>de</strong> violencia, transmiteel mensaje <strong>de</strong> que nadie se preocupa por la comunidad,incluyendo a la policía. Como <strong>con</strong>secuencia, el crimen aumenta.Así, hacen a la comunidad responsable por su seguridad yla llevan a comprometerse y participar <strong>con</strong> la policía.En la misma línea, la lucha <strong>con</strong>tra el crimen en el ReinoUnido ha sido enmarcada <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> The Crime and Disor<strong>de</strong>rAct <strong>de</strong> 1998. Esta norma precisa los compromisos <strong>de</strong> las autorida<strong>de</strong>slocales, la policía y otras autorida<strong>de</strong>s públicas, en el<strong>de</strong>sarrollo <strong>con</strong>junto <strong>de</strong> estrategias y planes <strong>con</strong>tra el crimenlocal. Adicionalmente fortalece el papel <strong>de</strong> la policía comoarticuladora <strong>de</strong> las estrategias y alianzas, dada su relación directa<strong>con</strong> la comunidad, la cual participa activamente en eldiagnóstico <strong>de</strong> los problemas y el diseño <strong>de</strong> soluciones.larla <strong>de</strong> nefastas influencias partidistas; durante el gobiernoRojas (1953-1957) la dirección <strong>de</strong> la policía pasó al ComandoGeneral <strong>de</strong> las Fuerzas Armadas, al lado <strong>de</strong>l Ejército, laArmada y la Fuerza Aérea.A principios <strong>de</strong> los 60, la institución volvió al mando <strong>de</strong>sus propios oficiales superiores, recobró el nombre <strong>de</strong> Policía<strong>Nacional</strong> y quedó adscrita al Ministerio <strong>de</strong> Guerra, a tiempoque los cuerpos municipales y <strong>de</strong>partamentales pasarona <strong>de</strong>pen<strong>de</strong>r directamente <strong>de</strong> la Dirección <strong>Nacional</strong> (Llorente,1999).2. Fuerzas MilitaresEn las <strong>de</strong>mocracias liberales avanzadas, las Fuerzas Militarestienen como función principal y casi única la <strong>de</strong>fensa <strong>de</strong>la soberanía nacional <strong>con</strong>tra enemigos extranjeros. En el casocolombiano, sin embargo, dice la Constitución que “LasFuerzas Militares tendrán como finalidad primordial la <strong>de</strong>fensa<strong>de</strong> la soberanía, la in<strong>de</strong>pen<strong>de</strong>ncia, la integridad <strong>de</strong>lterritorio nacional y <strong>de</strong>l or<strong>de</strong>n <strong>con</strong>stitucional”. En <strong>de</strong>sarrollo<strong>de</strong> esta última expresión, las ff mm <strong>de</strong>dican casi la totalidad<strong>de</strong> sus esfuerzos a combatir al “enemigo interno”. Esteestado <strong>de</strong> cosas tiene raíces e implicaciones muy complejas:• La temprana inscripción <strong>de</strong>l <strong>con</strong>flicto colombiano <strong>de</strong>ntro<strong>de</strong>l marco <strong>de</strong> la Guerra Fría y la adopción <strong>con</strong>siguiente<strong>de</strong> la llamada “doctrina <strong>de</strong> seguridad nacional” implicabatomar el alzamiento campesino <strong>de</strong>l sur <strong>de</strong>l país como unataque extranjero a la soberanía nacional. Si bien la guerrillaera efectivamente comunista y si bien <strong>con</strong>taba <strong>con</strong> algúnapoyo logístico <strong>de</strong> los países socialistas, este enfoque tenía159


Programa <strong>de</strong> las Naciones Unidas para el <strong>Desarrollo</strong><strong>Informe</strong> <strong>Nacional</strong> <strong>de</strong> <strong>Desarrollo</strong> <strong>Humano</strong> Colombia - <strong>2003</strong>160los <strong>de</strong>fectos <strong>de</strong> <strong>con</strong>fundir i<strong>de</strong>ología <strong>con</strong> patria, reducir unproblema complejo a una sola <strong>de</strong> sus dimensiones (no necesariamentela principal), no precisar si se trataba <strong>de</strong> la “seguridadnacional” <strong>de</strong> Colombia o la <strong>de</strong> Estados Unidos, noincluir una <strong>de</strong>claración <strong>de</strong> guerra <strong>de</strong> Colombia a la urss o,en su hipótesis, a Cuba o China (como tendría que ser anteun ataque extranjero) y a la postre, hacer que las ff mm tomaranpartido en un <strong>con</strong>flicto i<strong>de</strong>ológico.• Como anotó el Capítulo 1, las élites colombianas <strong>de</strong>legarona la fuerza pública el manejo <strong>de</strong>l “or<strong>de</strong>n público” yeste arreglo tuvo inci<strong>de</strong>ncias <strong>de</strong>cisivas sobre la evolución<strong>de</strong>l <strong>con</strong>flicto. Aunque esas inci<strong>de</strong>ncias se mantienen aún hoy,vale advertir que durante la última década se han producidocambios significativos. A la <strong>de</strong>signación <strong>de</strong> un civil comoMinistro <strong>de</strong> Defensa a partir <strong>de</strong>l gobierno Gaviria, y al <strong>con</strong>tinuadoaumento <strong>de</strong> <strong>con</strong>troles sobre el presupuesto y las<strong>con</strong>trataciones <strong>de</strong> las ff mm y la policía, se aña<strong>de</strong> ahora laactitud <strong>de</strong>l presi<strong>de</strong>nte Uribe como “primer soldado <strong>de</strong> lanación”, su activa solidaridad <strong>con</strong> la fuerza pública y su asumirpersonalmente la <strong>con</strong>ducción <strong>de</strong> la guerra.• En la lucha <strong>con</strong>tra un “enemigo interno”, las ff mmacaban por asumir tareas <strong>de</strong> carácter policial o cuasi-policialajenas al resorte puramente militar y para las cuales nosiempre son a<strong>de</strong>cuadas: vigilancia <strong>de</strong> elecciones, patrullajevial en época <strong>de</strong> vacaciones, prevención o <strong>con</strong>trol <strong>de</strong> marchascampesinas, paros cívicos y similares. Este tipo <strong>de</strong> activida<strong>de</strong>simplica una relación cercana y fluida <strong>con</strong> la población,lo cual no está en la naturaleza <strong>de</strong> las ff mm (Dávila,1999: 310).3. ¿Policía o Fuerzas Militares?Dadas las distorsiones mencionadas, la respuesta <strong>de</strong>l Estadoa través <strong>de</strong> la fuerza pública se <strong>de</strong>bate entre varias tensiones:• Entre la estrategia <strong>de</strong> ocupación y <strong>con</strong>trol territorial—<strong>de</strong>fen<strong>de</strong>r territorios— y la estrategia <strong>de</strong> perseguir y combatiral enemigo —actuar a la ofensiva—. La primera estrategiaes <strong>de</strong> tipo más “policial” en tanto la segunda es más“militar”. La policía es una fuerza estacionaria o permanenteen muchas zonas, particularmente en los cascos urbanos;las Fuerzas Armadas son esencialmente móviles.Al preten<strong>de</strong>r el logro <strong>de</strong> ambos objetivos, el Estado tien<strong>de</strong>a borrar la frontera entre aquellas dos fuerzas, pues <strong>de</strong> unaparte asigna funciones ofensivas a cuerpos <strong>de</strong> policía comolos carabineros, y <strong>de</strong> otra parte otorga a las ff mm el <strong>con</strong>trolterritorial, <strong>con</strong> los soldados campesinos por ejemplo. Dehecho, para exten<strong>de</strong>r su presencia a otros 150 municipios,el gobierno se propone incorporar 10 mil efectivos a la Policía<strong>de</strong> Carabineros, y para mejorar el <strong>con</strong>trol territorial <strong>de</strong> lasff mm se propone incorporar 18 mil soldados campesinos einfantes <strong>de</strong> marina.• Entre la seguridad militar y la seguridad ciudadana. Elesquema ofensivo planteado por el gobierno correspon<strong>de</strong> auna guerra en la periferia, mientras la —dudosa, como dijoel Capítulo 2— “urbanización <strong>de</strong>l <strong>con</strong>flicto” supondría acercarseal enfoque <strong>de</strong> seguridad ciudadana. Sobre esta tensiónvolveremos más a<strong>de</strong>lante.• Entre dos modos <strong>de</strong> interactuar <strong>con</strong> la comunidad. Lafunción policiva supone un uso limitado <strong>de</strong> la fuerza, <strong>de</strong>cisionesdiscrecionales in situ e interacción cara a cara <strong>con</strong>los vecinos, todo lo cual requiere <strong>de</strong> personal especializadoy bien calificado. El entrenamiento militar se orienta, por el<strong>con</strong>trario, al manejo <strong>de</strong> armas y tácticas <strong>de</strong> combate, mientrasla relación ff mm-comunidad se basa en “programas <strong>de</strong>acción cívico-militar” —brigadas <strong>de</strong> salud, <strong>con</strong>strucción <strong>de</strong>vías, etc.— que buscan granjear simpatía entre los habitantes.4. ¿Más policía o más Fuerzas Militares?Pasando a las políticas actuales, cabe <strong>de</strong>cir que a<strong>de</strong>más <strong>de</strong>asumir un papel más activo, visible y solidario <strong>con</strong> la fuerzapública, el gobierno nacional ha sostenido e incluso ha aumentadoel esfuerzo fiscal para el sector <strong>de</strong>fensa, <strong>con</strong> énfasisespecial en la ampliación <strong>de</strong>l pie <strong>de</strong> fuerza y en la colaboraciónciudadana <strong>con</strong> los agentes <strong>de</strong>l or<strong>de</strong>n. Sin embargo, a juzgarpor los niveles <strong>de</strong> gasto, su estrategia acentúa la prioridad<strong>de</strong> lo militar sobre lo policial (Cuadro 7.2); y la premura enelevar el pie <strong>de</strong> fuerza se está traduciendo en períodos <strong>de</strong> formaciónmás cortos, lo cual es por supuesto preocupante enun <strong>con</strong>flicto tan enrevesado como el que vivimos.• En el caso <strong>de</strong> la policía, se trata <strong>de</strong> incorporar 56.372efectivos adicionales antes <strong>de</strong> 2006, <strong>de</strong> los cuales 25.826serán <strong>de</strong>l nivel ejecutivo (comisarios, subcomisarios, inten<strong>de</strong>ntes,subinten<strong>de</strong>ntes, patrulleros y carabineros) y 30.096serán auxiliares. El principal esfuerzo se hará en carabineros,<strong>con</strong> 13.560 efectivos que vendrán a reemplazar los bachilleres.Para cumplir <strong>con</strong> estas metas, se optó por reducirla duración <strong>de</strong> los cursos para oficiales, suboficiales y pa-


El <strong>con</strong>flicto, callejón <strong>con</strong> <strong>salida</strong>Cuadro 7.2 Presupuesto <strong>de</strong> entida<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l sistema <strong>de</strong> seguridad y justicia penal(miles <strong>de</strong> millones <strong>de</strong> pesos corrientes)ENTIDAD 1999 2000 2001 2002 Aumento 1999/2002Fuerzas Militares 2.547,9 2.864,2 3.577,6 3.392,9 57%Policía <strong>Nacional</strong> 1.879,3 2.060,9 2.347,3 2.443,3 30%Fiscalía General <strong>de</strong> la Nación 566,8 602,4 626,2 657,6 16%Rama Judicial* 734,9 681,6 698.7* 764.9* 4%Procuraduría General <strong>de</strong> la Nación 130,5 146,2 158,9 172,6 32%Defensoría <strong>de</strong>l Pueblo 35,2 35,4 37,5 45,7 31%* Con excepción <strong>de</strong> la Fiscalía General <strong>de</strong> la Nación.Fuentes: Ministerio <strong>de</strong> Hacienda y Crédito Público, leyes <strong>de</strong> presupuesto general <strong>de</strong> la nación 2001 y 2001, y cálculos <strong>de</strong>l INDH <strong>2003</strong>.trulleros. En materia <strong>de</strong> obras, se planea <strong>con</strong>struir o re<strong>con</strong>struirestaciones en 82 <strong>de</strong> los 167 municipios que hoy no cuentan<strong>con</strong> servicio permanente <strong>de</strong> policía.• La creciente atención <strong>de</strong>l Estado a sus ff mm se reflejaprimeramente en el esfuerzo fiscal, pues, como dijo el Capítulo3, el gasto militar pasó <strong>de</strong> 1,6% <strong>de</strong>l pib en 1985 a 2,9%en 2002, y <strong>de</strong> absorber 13,8% <strong>de</strong>l presupuesto nacional enpromedio durante los 90 (Giha, Riveros, Soto, 1999: 171), a15,8 % en 2002. En términos operacionales, se está buscandoaumentar la movilidad <strong>de</strong> las tropas y hacer presencia enpuntos estratégicos <strong>de</strong>l territorio nacional, mediante tresacciones principales:—Batallones <strong>de</strong> alta montaña y brigadas móviles. Se han<strong>con</strong>formado en Chisga, Sierra Nevada, Cauca, Farallones <strong>de</strong>Cali y Sumapaz, que <strong>con</strong>stituyen corredores estratégicospara los grupos armados. En 2006 el país <strong>con</strong>tará <strong>con</strong> onceBrigadas Móviles, que <strong>con</strong>stituirán unida<strong>de</strong>s élite, <strong>con</strong> 14 milhombres cada una.—Ampliación <strong>de</strong>l pie <strong>de</strong> fuerza. El programa se a<strong>de</strong>lantaen el marco <strong>de</strong>l Plan 10.000 y el Plan Fortaleza. El primerose diseñó para el periodo 1999-2001 y suponía la incorporaciónanual <strong>de</strong> 10 mil soldados profesionales para reemplazara igual número <strong>de</strong> <strong>con</strong>scriptos. El Plan Fortaleza <strong>con</strong>templala incorporación anual, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> 2001 hasta 2004, <strong>de</strong>10 mil nuevos <strong>con</strong>scriptos regulares para robustecer la capacidad<strong>de</strong>fensiva. Con esto se habría pasado <strong>de</strong> un total <strong>de</strong>132 mil soldados en 2001 a 160 mil en el 2006, y se habríaprofesionalizado más la tropa.—Soldados campesinos. La intención <strong>de</strong> este programaes tener soldados <strong>con</strong> raíces en la región y <strong>con</strong>ocimientopersonal <strong>de</strong> sus habitantes, para mejorar la inteligencia yacercar la comunidad a las ff mm. Aunque aún es tempranopara hablar <strong>de</strong> resultados y aunque algunos <strong>de</strong> los aspectosmás <strong>de</strong>batibles <strong>de</strong>l diseño inicial —por ejemplo, que el soldadodurmiera en su casa— no se llevaron a la práctica, quedanpreguntas como el riesgo que pueda correr la familia<strong>de</strong>l soldado, o como la infiltración <strong>de</strong> personas <strong>con</strong> <strong>con</strong>exioneso intenciones criminales.5. Fiscalía General <strong>de</strong> la NaciónLa Fiscalía a un mismo tiempo tiene funciones <strong>de</strong> investigacióny <strong>de</strong> juzgamiento. Este sistema “mixto” (aún vigenteaunque hoy en transición hacia un mo<strong>de</strong>lo acusatorio puro)<strong>con</strong>tribuyó en distinto grado a causar varios problemas críticosal Sistema:• Congestión <strong>de</strong> investigaciones. De acuerdo <strong>con</strong> la CorporaciónExcelencia en la Justicia (2001), el número <strong>de</strong> casosque entran en etapa <strong>de</strong> investigación previa es bastantealto, mientras el que pasa a la etapa <strong>de</strong> instrucción y juzga-161


Programa <strong>de</strong> las Naciones Unidas para el <strong>Desarrollo</strong><strong>Informe</strong> <strong>Nacional</strong> <strong>de</strong> <strong>Desarrollo</strong> <strong>Humano</strong> Colombia - <strong>2003</strong>162El campo <strong>con</strong>stituye el principal escenario <strong>de</strong> la <strong>con</strong>frontacióny sin embargo ni la policía ni las Fuerzas Armadas cuentan<strong>con</strong> los recursos suficientes para lograr —a partir <strong>de</strong> su mandatofuncional— suficiente <strong>con</strong>trol sobre las áreas rurales.La buena o mala inteligencia es <strong>de</strong>cisiva para el triunfo o elfracaso <strong>de</strong> cualquier operativo militar. Tal inteligencia comienzapor <strong>con</strong>ocer muy bien el modo <strong>de</strong> pensar y actuar<strong>de</strong>l enemigo, por <strong>de</strong>jar a un lado los clichés y los juicios <strong>de</strong>valor para apreciar en su fría realidad las fortalezas y <strong>de</strong>bilida<strong>de</strong>s<strong>de</strong>l <strong>con</strong>trario. Y como la información <strong>con</strong>fiable y oportunaes tan difícil <strong>de</strong> obtener, los expertos insisten al unísonoen que los cuerpos <strong>de</strong>l Estado <strong>de</strong>ben aunar esfuerzos pararecolectar, intercambiar, <strong>con</strong>trastar, filtrar y analizar datosobtenidos por medios tecnológicos o humanos —los cualesson aún más importantes en <strong>con</strong>flictos <strong>de</strong> “baja intensidad”—(Dixon, 1997; Hoffman, 1992; Thompson, 1970).En Colombia, las Fuerzas Armadas, la policía nacional yel das cuentan <strong>con</strong> sistemas <strong>de</strong> inteligencia propios y acor<strong>de</strong>s<strong>con</strong> sus respectivas agendas; <strong>con</strong> todo, los observadoresperciben más rivalidad que espíritu <strong>de</strong> colaboración entrelos operativos <strong>de</strong> esas agencias, lo cual resulta en <strong>de</strong>sperdicio,mal uso, <strong>con</strong>tradicciones y por supuesto errores quepodrían haber sido evitados. Con el ánimo <strong>de</strong> corregir estasituación, el gobierno ha propuesto crear una junta <strong>de</strong> intemientoes muy bajo. Cerca <strong>de</strong> un millón cien mil procesospermanecen anualmente <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l Sistema, creciendo atasas <strong>de</strong>l 5% anual. En el mismo sentido, Uprimny (2001)sostiene que nueve <strong>de</strong> cada diez casos que llegan a la Fiscalíano superan la etapa <strong>de</strong> investigación.• Falta <strong>de</strong> garantías procesales para los sindicados. Lareforma a la institución aprobada por el acto legislativo 03<strong>de</strong> 2002 se orienta, como dijimos, hacia un sistema acusatoriopuro, don<strong>de</strong> las etapas <strong>de</strong> la investigación y el juicio estánbien separadas. En el régimen actual, sin embargo, elfiscal pue<strong>de</strong> <strong>de</strong>cretar medidas <strong>de</strong> aseguramiento y tomarotras <strong>de</strong>cisiones sustantivas. La reforma dispone que lasmedidas <strong>de</strong> aseguramiento sean autorizadas por el juez, quesea él quien abra el juicio a petición <strong>de</strong>l fiscal y que éste<strong>de</strong>ba requerir la preclusión cuando no encuentre pruebassuficientes <strong>con</strong>tra el reo. Así se quiere preservar el carácterpúblico, <strong>con</strong>tradictorio y oral <strong>de</strong>l proceso, lo cual <strong>con</strong>stituye“un elemento esencial <strong>de</strong> la naturaleza <strong>de</strong>mocrática ygarantista <strong>de</strong>l sistema acusatorio” (Uprimny, 2001: 105).• Deficiente sistema probatorio. Hoy por hoy, el sistemaprobatorio <strong>de</strong>pen<strong>de</strong> básicamente <strong>de</strong> las <strong>de</strong>claraciones <strong>de</strong> testigos,mientras la prueba técnica juega un papel bastante marginal.Este hecho —muy <strong>de</strong> cerca asociado <strong>con</strong> la impunidad—no se corrige a fondo <strong>con</strong> la reforma, cuya lógica apunta mása las garantías procesales que a elevar la eficacia y eficiencia<strong>de</strong>l sistema. Mientras no tengamos un número suficiente ybien clasificado <strong>de</strong> especialistas en investigación técnica criminal,así como los equipos e instrumentos requeridos, estegrave problema seguirá <strong>con</strong> nosotros.En cambio, la oportunidad <strong>de</strong> la reforma pue<strong>de</strong> servirpara hacer claridad sobre la policía judicial, como elementoesencial que es <strong>de</strong> la investigación criminal. Según Queralt(1999), se trata <strong>de</strong> una función específica, <strong>de</strong> índole científica,cuyo objetivo es investigar los hechos punibles, perseguiry asegurar a los <strong>de</strong>lincuentes.En Colombia la policía judicial <strong>de</strong>pen<strong>de</strong> <strong>de</strong>l Fiscal General.Pero si bien existe cierta justificación para esta situación,la naturaleza técnica <strong>de</strong> la mo<strong>de</strong>rna policía judicial re-quiere <strong>de</strong> un manejo más in<strong>de</strong>pendiente; sin añadir que uncuerpo <strong>de</strong> investigación integrado al ente acusador rompe elequilibrio probatorio que ha <strong>de</strong> existir entre las partes <strong>de</strong>lproceso. La experiencia internacional —España, EstadosUnidos, El Salvador y muchos otros— indica que las funciones<strong>de</strong> policía judicial pue<strong>de</strong>n ser asignadas a la propia policía(Palmieri, 1999), atendiendo a razones como que: i) lospolicías patrulleros son la primera autoridad que intervieneen el caso y este momento es <strong>de</strong>cisivopara el proceso; ii) el policíatiene vínculos <strong>con</strong> la comunidad yesto le da ventaja para obtener yevaluar información, y iii) <strong>con</strong> estareubicación se corrigen las dificulta<strong>de</strong>s<strong>de</strong> coordinación que hoy existen entre el Cuerpo Técnico<strong>de</strong> Investigación (cti), la policía nacional y el das. Estopor supuesto implica un reforzamiento previo <strong>de</strong>l caráctercivil <strong>de</strong> la policía y un diseño cuidadoso <strong>de</strong> los <strong>con</strong>trolesjurídicos internos en el proceso <strong>de</strong> producción <strong>de</strong> pruebas.C. Las funciones subatendidas1. Débil coordinación en la inteligencia


El <strong>con</strong>flicto, callejón <strong>con</strong> <strong>salida</strong>ligencia <strong>con</strong>junta <strong>con</strong> varios objetivos: i) que el Presi<strong>de</strong>nte<strong>de</strong> la República y el Ministro <strong>de</strong> Defensa cuenten <strong>con</strong> análisis<strong>con</strong>solidados <strong>de</strong> inteligencia estratégica para la toma <strong>de</strong><strong>de</strong>cisiones; ii) que las políticas <strong>de</strong> seguridad <strong>de</strong>l gobiernose traduzcan en requerimientos específicos <strong>de</strong> inteligencia,y iii) que no se <strong>de</strong>sperdicien esfuerzos en la investigación(Ministerio <strong>de</strong> Defensa <strong>Nacional</strong>, <strong>2003</strong>: 35).2. Vigilancia ruralEl campo <strong>con</strong>stituye el principal escenario <strong>de</strong> la <strong>con</strong>frontacióny sin embargo ni la Policía ni las ff mm cuentan <strong>con</strong> losrecursos suficientes para lograr —a partir <strong>de</strong> su mandatofuncional— suficiente <strong>con</strong>trol sobre las áreas rurales. Paraesto haría falta una “Guardia <strong>Nacional</strong>” o fuerza auxiliaradaptada a <strong>con</strong>diciones <strong>de</strong> población dispersa, zonas muyextensas e influencia <strong>de</strong> grupos guerrilleros o paramilitares(Leal et al., 1999). En Colombia no existe una guardia nacional,y aunque la Policía <strong>de</strong> Carabineros está entrenadapara la vigilancia rural, <strong>de</strong> hecho se <strong>con</strong>centra en las cabecerasmunicipales. El ejército a su vez se especializa en operacionesmóviles, lo cual tampoco garantiza el <strong>con</strong>trol permanente<strong>de</strong> las áreas rurales.3. Relación <strong>con</strong> la comunidadEl apoyo <strong>de</strong> la población es esencial para el éxito <strong>de</strong>l esfuerzobélico en cualquier <strong>con</strong>flicto interno. La legitimidad <strong>de</strong>lEstado no pue<strong>de</strong> reducirse a que la guerrilla sea impopular,sino que pi<strong>de</strong> un sentido real <strong>de</strong> i<strong>de</strong>ntificación <strong>con</strong> las autorida<strong>de</strong>s.En último término, esto <strong>de</strong>pen<strong>de</strong> <strong>de</strong> que el Estadotenga presencia en todo el territorio y <strong>de</strong> que cumpla <strong>de</strong> veras<strong>con</strong> sus funciones. De ahí la importancia <strong>de</strong> fortalecer lacapacidad <strong>de</strong> gestión <strong>de</strong> las instituciones que <strong>con</strong>forman elssjp; en últimas, en su <strong>con</strong>junto, ellas son responsables <strong>de</strong>proteger la integridad y los <strong>de</strong>rechos <strong>de</strong> la gente.En el caso colombiano, el respaldo <strong>de</strong> la población a lainstitucionalidad tien<strong>de</strong> a <strong>con</strong>fundirse <strong>con</strong> el apoyo a la fuerzapública, <strong>de</strong>bido justamente al predominio <strong>de</strong>l componentecoercitivo en el manejo <strong>de</strong>l <strong>con</strong>flicto. Y si bien es cierto quela opinión <strong>de</strong> los gran<strong>de</strong>s centros urbanos ha manifestadoun respaldo creciente a la fuerza pública para enfrentar elproblema, en los municipios pequeños y más afectados porlas acciones armadas la percepción podría ser diferente.No existen mediciones <strong>con</strong>fiables ni comprensivas al respecto.Pero las entrevistas para este <strong>Informe</strong> sugieren queaunque la situación varía bastante entre regiones, no faltanlas muestras <strong>de</strong> <strong>de</strong>s<strong>con</strong>fianza campesina en la fuerza pública.Ellas a veces se <strong>de</strong>ben a la falta <strong>de</strong> acciones efectivas <strong>con</strong>trala guerrilla o <strong>con</strong>tra los paramilitares que rondan por lazona; a veces a inci<strong>de</strong>ntes <strong>de</strong> corrupción, maltrato, vulneración<strong>de</strong> <strong>de</strong>rechos, muerte <strong>de</strong> civiles inocentes, complicidad<strong>con</strong> el narcotráfico o <strong>con</strong> el paramilitarismo; el silencio o<strong>de</strong>bilidad <strong>de</strong> las instancias responsables <strong>de</strong> prevenir o castigarhechos <strong>de</strong> esta índole aumentan el escepticismo y la<strong>de</strong>s<strong>con</strong>fianza <strong>de</strong> la comunidad hacia el Estado.4. Justicia especializadaAnte la amenaza dramática que representa el crimen organizadopara la administración <strong>de</strong> justicia colombiana, lasautorida<strong>de</strong>s fueron adoptando una serie <strong>de</strong> herramientasprocesales <strong>de</strong> carácter particularmente expedito. La ley 2<strong>de</strong> 1984 estableció “mecanismos para investigar y sancionarcomportamientos graves por las implicaciones para elor<strong>de</strong>n social”; como su vigencia estaba programada a seisaños, el <strong>de</strong>creto 2626 <strong>de</strong> 1990 prorrogó la ley “por el tiempoque dure el Estado <strong>de</strong> sitio”. Tres años antes se habíaestablecido la jurisdicción especial, <strong>con</strong>formada por el Tribunal<strong>de</strong> Or<strong>de</strong>n Público y noventa jueces especializados(<strong>de</strong>creto 1631 <strong>de</strong> 1987). Un año <strong>de</strong>spués, el <strong>de</strong>creto 180 ampliólos tipos penales <strong>de</strong> competencia <strong>de</strong> esta jurisdicciónhacia <strong>de</strong>litos <strong>con</strong>tra la seguridad y tranquilidad públicas,incluido el terrorismo; <strong>de</strong>litos <strong>con</strong>tra las liberta<strong>de</strong>s individuales,<strong>con</strong>tra el patrimonio e<strong>con</strong>ómico y <strong>con</strong>tra funcionariospúblicos. El <strong>de</strong>creto 474 <strong>de</strong> 1988 <strong>de</strong>terminó la estructura<strong>de</strong> la jurisdicción. Después <strong>de</strong> 1991, la anterior legislación,<strong>de</strong> carácter excepcional y temporal, se volvió permanente ysirvió <strong>de</strong> base para la llamada “justicia regional”.La característica más importante <strong>de</strong> este sistema, también<strong>con</strong>ocido como “justicia sin rostro”, era la admisión<strong>de</strong> procedimientos como ocultar la i<strong>de</strong>ntidad <strong>de</strong> jueces ytestigos. La figura, sin embargo, fue <strong>de</strong>clarada inexequiblepor la Corte Constitucional que, en sentencia c-179 <strong>de</strong> 1994,<strong>con</strong>cluyó que “si bien faculta<strong>de</strong>s extraordinarias <strong>de</strong>l ejecutivopue<strong>de</strong>n limitar o restringir ciertos <strong>de</strong>rechos y garantías,en ningún momento podrán suspen<strong>de</strong>r <strong>de</strong>rechos fundamentalescomo el <strong>de</strong>bido proceso, que hacen parte <strong>de</strong>l or-163


Programa <strong>de</strong> las Naciones Unidas para el <strong>Desarrollo</strong><strong>Informe</strong> <strong>Nacional</strong> <strong>de</strong> <strong>Desarrollo</strong> <strong>Humano</strong> Colombia - <strong>2003</strong>© Archivo El Tiempo164Foto 7.3 El Ministerio Público adolece <strong>de</strong> una cultura organizacional eficiente, entre otros problemas.


El <strong>con</strong>flicto, callejón <strong>con</strong> <strong>salida</strong><strong>de</strong>namiento supremo (artículo 29 <strong>de</strong> la Constitución)”. Adicionalmente,la Corte argumentó que el artículo 116 <strong>de</strong> laCarta, que señala quiénes pue<strong>de</strong>n “administrar justicia” noincluye los juzgados en cuestión.De acuerdo <strong>con</strong> Nemogá (1996), la justicia regional originóambigüeda<strong>de</strong>s y vagueda<strong>de</strong>s en la tipificación <strong>de</strong> los<strong>de</strong>litos —violando el principio <strong>de</strong> legalidad, a cuyo tenorno hay <strong>de</strong>lito ni pena sin norma previa que los establezca—.Este abuso se <strong>de</strong>bió al amplio margen <strong>de</strong> interpretación quetenían los jueces y que usaban para or<strong>de</strong>nar la <strong>de</strong>tenciónpreventiva <strong>de</strong>l sindicado sin imputarle un <strong>de</strong>lito preciso;también se presentaban diferencias entre el <strong>de</strong>lito <strong>de</strong> llamamientoa juicio y el <strong>de</strong> sentencia, por lo cual eran comuneslas <strong>de</strong>claraciones <strong>de</strong> nulidad subsiguientes. No menos, ciertos<strong>de</strong>litos que no representaran peligro real para la seguridadcolectiva acabaron siendo asignados a estos jueces.Con el fin <strong>de</strong> corregir las principales fallas <strong>de</strong> la justiciaregional, mediante ley 504 <strong>de</strong> 1999 se adoptó la justicia especializada.Los <strong>de</strong>litos sujetos a su <strong>con</strong>ocimiento estánahora más precisamente <strong>de</strong>finidos: secuestro, tortura, homicidioagravado, terrorismo, fabricación y tráfico <strong>de</strong> armas<strong>de</strong> uso privativo <strong>de</strong> las ff mm, lavado <strong>de</strong> activos, enriquecimientoilícito <strong>de</strong> particulares, <strong>con</strong>cierto para cometer estaclase <strong>de</strong> <strong>de</strong>litos y los <strong>con</strong> ellos <strong>con</strong>exos. Para no apartarse<strong>de</strong>l mencionado artículo 116 <strong>de</strong> la Constitución, en vez <strong>de</strong>hablar <strong>de</strong> una nueva jurisdicción, se crearon los jueces penales<strong>de</strong> circuito especializados y sus fiscales <strong>de</strong>legados.La ley prevé la reserva <strong>de</strong> i<strong>de</strong>ntidad para fiscales y jueces,durante la fase <strong>de</strong> instrucción y siempre que así lo <strong>de</strong>cida laFiscalía previo <strong>con</strong>cepto favorable <strong>de</strong>l Ministerio Público,en procesos por secuestro, terrorismo, narcotráfico, lavado<strong>de</strong> activos o enriquecimiento ilícito. En la etapa <strong>de</strong> juzgamiento,don<strong>de</strong> prevalece el principio <strong>de</strong> publicidad, no cabereservar la i<strong>de</strong>ntidad <strong>de</strong> estos funcionarios.La legislación también estipula la reserva <strong>de</strong> i<strong>de</strong>ntidad<strong>de</strong> los testigos, aunque en el acta <strong>de</strong> <strong>de</strong>claración, en lugar <strong>de</strong>la firma, <strong>de</strong>be estamparse la huella dactilar <strong>de</strong> los involucrados,previa verificación y certificación por parte <strong>de</strong>l MinisterioPúblico. Para respetar el principio <strong>de</strong> <strong>con</strong>frontación<strong>de</strong> testimonios, el mecanismo no implica que la i<strong>de</strong>ntidad<strong>de</strong>l <strong>de</strong>clarante sea <strong>de</strong>s<strong>con</strong>ocida, ni que el testimonio sea in<strong>con</strong>trovertible.A<strong>de</strong>más, los testimonios no pue<strong>de</strong>n servircomo base única para resoluciones <strong>de</strong> acusación ni parasentencias <strong>con</strong><strong>de</strong>natorias. Finalmente, prohíbe la ley que losmiembros <strong>de</strong> organismos <strong>con</strong> funciones <strong>de</strong> policía judicial<strong>de</strong>claren <strong>con</strong> reserva <strong>de</strong> i<strong>de</strong>ntidad.Así pues, en la justicia penal especializada el país tienehoy un instrumento que permitiría afinar sus priorida<strong>de</strong>s y<strong>con</strong>centrar todo el esfuerzo en reprimir los <strong>de</strong>litos <strong>de</strong>rivados<strong>de</strong> la <strong>de</strong>gradación <strong>de</strong>l <strong>con</strong>flicto armado.5. Debilidad <strong>de</strong>l Ministerio PúblicoEl Ministerio Público vela por la observancia <strong>de</strong>l Estado <strong>de</strong><strong>de</strong>recho. La Procuraduría General <strong>de</strong> la Nación, las personeríasy la Defensoría <strong>de</strong>l Pueblo tienen el mandato <strong>de</strong> protegery promover los <strong>de</strong>rechos humanos y el <strong>de</strong> ejercer <strong>con</strong>troldisciplinario sobre los agentes <strong>de</strong>l Estado, incluidos los integrantes<strong>de</strong>l ssjp. En el proceso <strong>de</strong> legitimación creciente <strong>de</strong>lEstado —parte esencial <strong>de</strong> la lucha <strong>con</strong>tra los grupos armados—la Procuraduría y la Defensoría habrían <strong>de</strong> jugar unpapel fundamental. Sin embargo —y aunque las exigenciasfinancieras <strong>de</strong> sus funciones respectivas no sean realmentecomparables— las cifras <strong>de</strong>l Cuadro 7.2 dirían que el MinisterioPúblico es la cenicienta <strong>de</strong>l ssjp (pues el presupuestoque se le asigna no llega a 3% <strong>de</strong>l total <strong>de</strong>l sector).Un estudio a<strong>de</strong>lantado por la Procuraduría y el BancoInteramericano <strong>de</strong> <strong>Desarrollo</strong> <strong>de</strong>staca las siguientes comoprincipales cortapisas al buen <strong>de</strong>sempeño <strong>de</strong> la entidad: i)falta <strong>de</strong> claridad sobre las funciones y alcances <strong>de</strong>l MinisterioPúblico; ii) falta <strong>de</strong> instrumentos y herramientas paracumplir sus funciones; iii) <strong>con</strong>centración <strong>de</strong> funciones yprocesos en el nivel central; iv) escaso peso <strong>de</strong> la planeacióny el <strong>con</strong>trol; v) atraso tecnológico; vi) falta <strong>de</strong> cultura organizacionalreflejada en el manejo <strong>de</strong>l talento humano, y vii)imagen <strong>de</strong>sdibujada ante la población 1 .Entre los factores que reclaman un fortalecimiento <strong>de</strong>lMinisterio Público, <strong>de</strong>be <strong>de</strong>stacarse la urgencia <strong>de</strong> combatirla corrupción. Aunque el mal permea a muchos estamentosprivados y oficiales, su efecto en las esferas <strong>de</strong> seguridady justicia sin duda es particularmente nocivo. Por el carácterreservado <strong>de</strong> algunos procedimientos y el volumen <strong>de</strong>1. Documento Conpes 3211, enero <strong>de</strong> <strong>2003</strong>.165


Programa <strong>de</strong> las Naciones Unidas para el <strong>Desarrollo</strong><strong>Informe</strong> <strong>Nacional</strong> <strong>de</strong> <strong>Desarrollo</strong> <strong>Humano</strong> Colombia - <strong>2003</strong>RECUADRO 7.2Corrupción y compras militares en otras partes <strong>de</strong>l mundo*Según estimativos <strong>de</strong>l Departamento <strong>de</strong> Comercio <strong>de</strong> EstadosUnidos, los <strong>con</strong>tratos <strong>de</strong>l sector <strong>de</strong>fensa dan origen al 50%<strong>de</strong>l valor total <strong>de</strong> los sobornos que se transan en el mundo a .Transparencia Internacional cataloga la industria militar comola segunda más propensa a la corrupción, pese a que representamenos <strong>de</strong>l 1% <strong>de</strong>l total <strong>de</strong>l comercio mundial b . En su<strong>Informe</strong> <strong>de</strong> 2001, esta organización <strong>de</strong>staca seis factores comocausantes principales <strong>de</strong> la situación:• La <strong>con</strong>fi<strong>de</strong>ncialidad propia <strong>de</strong> las transacciones <strong>de</strong>l sector<strong>de</strong>fensa.• Los gobiernos importadores suelen argumentar razones<strong>de</strong> seguridad nacional para justificar compras <strong>de</strong> cualquier tipoo a cualquier precio; <strong>de</strong> la misma manera, los gobiernos exportadoressostienen que su seguridad nacional implica promoversu industria militar.• Los <strong>con</strong>tratos <strong>de</strong> armamento son poco numerosos peromuy costosos, lo cual hace que el pago <strong>de</strong> comisiones se <strong>con</strong>stituyaen un medio <strong>de</strong> competencia <strong>de</strong>finitivo.• La complejidad y heterogeneidad <strong>de</strong> los <strong>con</strong>tratos hacenque las comisiones sean difíciles <strong>de</strong> <strong>de</strong>tectar, más aún cuandoel precio mismo <strong>de</strong> las armas varía <strong>de</strong> acuerdo <strong>con</strong> la relaciónpolítica entre comprador y ven<strong>de</strong>dor.• La utilización <strong>de</strong> intermediarios o representantes por parte<strong>de</strong> las empresas productoras <strong>de</strong> armas para ocultar sobornosy evitar incriminaciones directas <strong>con</strong>tra la industria en loque <strong>de</strong>nominan el “efecto avestruz”.• La existencia <strong>de</strong> compensaciones o acuerdos <strong>de</strong> participaciónindustrial, don<strong>de</strong> el ven<strong>de</strong>dor o su gobierno se com-prometen a invertir en un <strong>de</strong>terminado sector <strong>de</strong> la e<strong>con</strong>omía<strong>de</strong>l comprador, como parte <strong>de</strong>l <strong>con</strong>trato <strong>de</strong> compraventa <strong>de</strong>armas. Estos acuerdos complican el negocio y pue<strong>de</strong>n servircomo cortina <strong>de</strong> humo para cubrir los sobornos.Por ejemplo, en noviembre <strong>de</strong> 2002 el Reino Unido se vioinvolucrado en un escándalo al apoyar la transacción entreBritish Aerospace (BAe Systems) y el gobierno <strong>de</strong> Tailandia c .En la operación, la compañía británica vendió armas, avionesHawk, fragatas y equipos antimotines por valor <strong>de</strong> 1 billón <strong>de</strong>libras esterlinas. El gobierno británico se comprometió a ayudaral gobierno tailandés para su industria agrícola y a importarmás productos alimenticios <strong>de</strong> ese país. La <strong>con</strong>troversiasurgió porque <strong>con</strong> este acuerdo el Reino Unido violó la norma<strong>de</strong> la Unión Europea que prohibía importar pollo tailandéspor <strong>con</strong>tener elementos cancerígenos.Estados Unidos es el mayor proveedor oficial <strong>de</strong> armas y<strong>con</strong>trola 55% <strong>de</strong> su comercio internacional. Aunque en esepaís existe una ley <strong>con</strong>tra la corrupción —la US Foreign CorruptPractices Act (fcpa) <strong>de</strong> 1977— el Pentágono ofrece subsidiosmasivos a los productores norteamericanos bajo la forma<strong>de</strong> recursos para investigación y <strong>de</strong>sarrollo, créditos para exportacióny promoción <strong>de</strong> las ventas en el extranjero. Estossubsidios han dado pie a un círculo vicioso <strong>de</strong> corrupción enel mercado mundial: los ven<strong>de</strong>dores <strong>de</strong> otros países justificanel pago <strong>de</strong> sobornos como único medio <strong>de</strong> po<strong>de</strong>r competir ysus legislaciones domésticas toleran estas prácticas, lo cual escausa <strong>de</strong> que las empresas americanas exijan más y más rigoren las normas internacionales d .* Transparency International e INDH <strong>2003</strong>.a. Catherine Courtney, Corruption in the Official Arms Tra<strong>de</strong>. Policy ResearchPaper 001, Transparency International, abril <strong>de</strong> 2002.b. Armaments, Disarmament and International Security. StockholmInternational Peace Research Institute (SIPRI) Yearbook, Oxford OUP, 2001,p. 334. Citado en: Catherine Courtney, Ibid., p. 8.c. Anthony Barnett, “UK forges £1bn secret arms <strong>de</strong>al with Thailand”,The Observer, noviembre 10 <strong>de</strong> 2002. www.guardian.co.uk, abril 8 <strong>de</strong> <strong>2003</strong>.d. Frank Vogl, “Bribery and Corruption Still Rampant in Global ArmsTra<strong>de</strong>”, en Earth Times, marzo <strong>de</strong> 2001. www.globalpolicy.org/security/in<strong>de</strong>x.htm.166


El <strong>con</strong>flicto, callejón <strong>con</strong> <strong>salida</strong>recursos que manejan las entida<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l Sistema —en especiallas <strong>de</strong> la fuerza pública (Cuadro 7.2)— la corrupción noes fácil <strong>de</strong> <strong>de</strong>sterrar (Recuadro 7.2). Por eso, uno <strong>de</strong> los principios<strong>de</strong> la política <strong>de</strong> <strong>de</strong>fensa y seguridad <strong>de</strong>mocrática esla transparencia en el gasto (Presi<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong> la República,Ministerio <strong>de</strong> Defensa <strong>Nacional</strong>, <strong>2003</strong>:19).6. Investigación criminalLa ley prevé la reserva <strong>de</strong> i<strong>de</strong>ntidad para fiscales y jueces,durante la fase <strong>de</strong> instrucción y siempre que así lo <strong>de</strong>cidala Fiscalía previo <strong>con</strong>cepto favorable <strong>de</strong>l Ministerio Público,en procesos por secuestro, terrorismo, narcotráfico,lavado <strong>de</strong> activos o enriquecimiento ilícito.Existen distintos modos <strong>de</strong> <strong>de</strong>finir y medir la impunidad.Cuando los ciudadanos ni siquiera se toman el trabajo <strong>de</strong><strong>de</strong>nunciar los <strong>de</strong>litos, estamos probablemente ante unamuestra <strong>de</strong> <strong>de</strong>s<strong>con</strong>fianza en la justicia penal; <strong>con</strong> este criterio,y a partir <strong>de</strong> la Encuesta <strong>Nacional</strong> <strong>de</strong> Hogares <strong>de</strong> 1995,la impunidad estaría por encima <strong>de</strong> 80%; según Garay lacifra se ubicaría en un 65% (2002: xvi) y Rubio, por su parte,<strong>con</strong>cluye que <strong>de</strong> cada 100 <strong>de</strong>litos cometidos en Colombia,sólo 31 son <strong>de</strong>nunciados, 10 son investigados, 3 llegan ajuicio y sólo hay <strong>con</strong><strong>de</strong>na en uno o dos casos (1996: 18). Peoraún, la impunidad en materia grave está aumentando en vez<strong>de</strong> disminuir: si en 1975 había capturas en tres <strong>de</strong> cada cincocasos <strong>de</strong> homicidio, en 1994 la proporción había bajadoa uno <strong>de</strong> cada cinco; y si en 1975 11% <strong>de</strong> los procesos porhomicidio <strong>con</strong>cluían en <strong>con</strong><strong>de</strong>na, en 1994 el porcentaje habíacaído a cuatro (Rubio, 1996).Entre impunidad y <strong>con</strong>flicto armado hay un círculo vicioso.En un sentido, la improbabilidad <strong>de</strong>l castigo es unincentivo para seguir violando la ley; en el otro sentido, laaltísima criminalidad resultante <strong>de</strong>l <strong>con</strong>flicto <strong>de</strong>sborda lacapacidad <strong>de</strong>l Sistema.El fenómeno <strong>de</strong> la impunidad tiene muchas aristas y causasmuy diversas; pero entre aquellas atribuibles al ssjp, laprincipal sin duda alguna radica en la incapacidad que elSistema ha <strong>de</strong>mostrado para allegar las pruebas que permitan<strong>con</strong><strong>de</strong>nar al culpable. De aquí nuestra anterior insistenciaen robustecer el sistema probatorio.D. Las funciones sobredimensionadas1. En la cooperación internacionalColombia ha <strong>con</strong>tado <strong>con</strong> la solidaridad y el apoyo generoso<strong>de</strong> distintos países y organismos internacionales en los intentosdiversos <strong>de</strong> poner fin a su <strong>con</strong>flicto armado. Parte esencial<strong>de</strong> este apoyo ha sido la asistencia militar y <strong>de</strong> justicia, ensu gran mayoría proveniente <strong>de</strong> Estados Unidos. En el marco<strong>de</strong> una alianza estratégica y dura<strong>de</strong>ra, tal ayuda ha sido <strong>de</strong>cisivapara <strong>con</strong>tener la insurgencia y avanzar hacia objetivoscomunes tan valiosos como mantener la <strong>de</strong>mocracia, combatirla <strong>de</strong>lincuencia transnacional, velar por los <strong>de</strong>rechos humanoso preservar la tranquilidad y la seguridad hemisféricas.Con todo, e igual que en cualquier alianza, cada sociotiene su or<strong>de</strong>n <strong>de</strong> priorida<strong>de</strong>s y esto acarrea tensiones <strong>de</strong>distinta índole. En el evento <strong>de</strong> unaalianza asimétrica y <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el punto<strong>de</strong> vista <strong>de</strong>l socio minoritario, el riesgobásico <strong>con</strong>siste en que las priorida<strong>de</strong>s<strong>de</strong>l socio mayoritario resultensobredimensionadas y en que unacuota excesiva <strong>de</strong> sus propios y limitadosrecursos acabe por <strong>de</strong>dicarse a las metas estipuladaspor el otro.La vinculación inicial <strong>de</strong> Estados Unidos al <strong>con</strong>flictocolombiano se dio en el marco <strong>de</strong> la Guerra Fría y giró entorno a la ya dicha “doctrina <strong>de</strong> seguridad nacional”. Conel fin <strong>de</strong> la bipolaridad y la <strong>con</strong>solidación <strong>de</strong> Estados Unidoscomo hegemonía mundial, se produjeron tanto un cambio<strong>de</strong> sus priorida<strong>de</strong>s en Colombia como un creciente nivel<strong>de</strong> atención e injerencia en el <strong>con</strong>flicto. Las nuevas oacentuadas priorida<strong>de</strong>s son sobre todo el narcotráfico, loshidrocarburos y el terrorismo, hacia las cuales se ha reorientadola ayuda y hacia las cuales —también— se han venidosesgando los esfuerzos <strong>de</strong>l Estado colombiano.a. NarcotráficoSegún dirá el Capítulo 13, entre droga y <strong>con</strong>flicto armadoexiste una relación muy estrecha pero muy compleja. Porahora recor<strong>de</strong>mos cómo la droga ha sido un po<strong>de</strong>roso motor<strong>de</strong> expansión y <strong>de</strong>gradación <strong>de</strong> la lucha armada, y cómola solución <strong>de</strong>l <strong>con</strong>flicto pasa por la política antidrogas. Pero167


Programa <strong>de</strong> las Naciones Unidas para el <strong>Desarrollo</strong><strong>Informe</strong> <strong>Nacional</strong> <strong>de</strong> <strong>Desarrollo</strong> <strong>Humano</strong> Colombia - <strong>2003</strong><strong>con</strong> igual claridad hay que advertir cómo, en la jerarquía <strong>de</strong>urgencias <strong>de</strong>l Estado colombiano, la primera no es velar porque los jóvenes norteamericanos se abstengan <strong>de</strong> ingerirsustancias sicotrópicas, sino por que sus propios jóvenesno sean asesinados en vano.Como parte <strong>de</strong> su “guerra <strong>con</strong>tra las drogas”, EstadosUnidos ha participado <strong>de</strong>cisivamente en la lucha <strong>con</strong>tra loscarteles colombianos a partir <strong>de</strong> los 70. Esta presencia hasido <strong>de</strong>cisiva para librarnos <strong>de</strong> gran<strong>de</strong>s criminales, mo<strong>de</strong>rnizarlos aparatos <strong>de</strong> investigación y justicia penal, y reducirla inci<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong> la corrupción en el Estado. Pero tambiénse dio la paradoja <strong>de</strong> que a lo largo <strong>de</strong> las dos últimasdécadas, mientras Colombia se anotaba éxitos en la guerra<strong>de</strong> la droga, las guerrillas y las auto<strong>de</strong>fensas crecieron a unavelocidad sin prece<strong>de</strong>ntes. El esfuerzo financiero e institucional<strong>de</strong>l país, <strong>con</strong> la ayuda <strong>de</strong> Estados Unidos, sin duda fuemás intenso en términos <strong>de</strong> droga que <strong>de</strong> actores armados.En fecha más reciente se ha estimado que <strong>de</strong> los 72 milsoldados capacitados para operaciones <strong>de</strong> combate, 20 milestán asignados a operaciones antinarcóticos (InternationalCrisis Group, 2002:8). Y aunque no existen cifras sobreel número y <strong>de</strong>dicación <strong>de</strong> policías, personal <strong>de</strong>l cti, fiscalesy jueces <strong>de</strong>dicados a perseguir la droga, la situación quizáno sea muy distinta.La ayuda <strong>de</strong> Estados Unidos se inició en 1986 y estuvoorientada a la asistencia jurídica y al fortalecimiento <strong>de</strong> lapolicía nacional. En el sector justicia los recursos <strong>de</strong> cooperaciónhasta 1996 se <strong>de</strong>dicaron a apoyar la creación y el fortalecimiento<strong>de</strong> la fiscalía en sus tareas <strong>de</strong> investigación. Asímismo se dio asistencia a los jueces <strong>de</strong> or<strong>de</strong>n público o juecessin rostro. Entre 1991 y 1999 en el sector justicia se invirtieron39 millones <strong>de</strong> dólares.El otro gran componente <strong>de</strong> la cooperación norteamericanase orientó a la policía nacional, institución que li<strong>de</strong>ró lalucha <strong>con</strong>tra el narcotráfico durante los 90. Entre 1991 y 2001el monto <strong>de</strong> la asistencia a la entidad ascendió, en promedio,a 56 mil millones <strong>de</strong> pesos anuales (en pesos <strong>de</strong> 2001). Loanterior representó 4% promedio <strong>de</strong>l presupuesto ejecutadopor la policía durante el mismo período (Garay, 2002: 298).La atención prioritaria al narcotráfico se mantuvo bajo elPlan Colombia, aunque la asistencia <strong>de</strong> Estados Unidos sereorientó hacia el fortalecimiento <strong>de</strong> la capacidad combativa<strong>de</strong> la fuerza pública; cerca <strong>de</strong>l 80% <strong>de</strong> los aportes se invirtieronen el componente militar y <strong>de</strong> policía (Cuadro 7.3). Sobresalela creación <strong>de</strong>l Batallón Antinarcóticos <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>lejército, cuando hasta entonces la ayuda se había <strong>con</strong>centradoen la policía nacional.Cuadro 7.3 Destinación <strong>de</strong>l aporte <strong>de</strong> estados unidosal plan colombia (millones <strong>de</strong> dólares <strong>de</strong> 2001)Lucha antinarcóticos 634.5Batallón Antinarcóticos 416.9Interdicción 101.8Policía 115.6Fortalecimiento institucional y <strong>de</strong>sarrollo social 224.0<strong>Desarrollo</strong> alternativo 64.5Desplazados 37.5Derechos humanos 51.0Reforma a la justicia 13.0Fortalecimiento <strong>de</strong>l Estado <strong>de</strong> <strong>de</strong>recho 55.0Paz 3.0Total ayuda a Colombia* 858.5El nuevo paquete <strong>de</strong> ayuda <strong>con</strong>tra las drogas, <strong>de</strong>nominadoIniciativa Regional Andina (ira), incluye recursos paraColombia <strong>de</strong>l or<strong>de</strong>n <strong>de</strong> 860 millones <strong>de</strong> dólares. Tres cuartos<strong>de</strong> éstos —cuya ejecución se <strong>con</strong>cretará durante <strong>2003</strong>— seorientan a fortalecer la fuerza pública. Para 2004, el presi<strong>de</strong>nteBush solicitó al Congreso 574,6 millones <strong>de</strong> dólares <strong>de</strong>asistencia a Colombia; el componente antinarcóticos seguirásiendo parte <strong>de</strong> la ira, por un valor <strong>de</strong> 463 millones para Colombia;los 110 millones <strong>de</strong> dólares restantes irán al ejércitopara operaciones antiterroristas y la protección <strong>de</strong> infraestructuracrítica 2 .b. Petróleo* No incluye recursos <strong>de</strong> los programas corrientes <strong>de</strong> cooperación.Fuente:Departamento <strong>Nacional</strong> <strong>de</strong> Planeación, 2001.Para <strong>con</strong>trolar la voladura <strong>de</strong> oleoductos y el robo <strong>de</strong> hidrocarburos,en 2002 el Congreso <strong>de</strong> Estados Unidos <strong>de</strong>stinó100 millones <strong>de</strong> dólares al batallón <strong>de</strong>l ejército que protege1682. Véanse más <strong>de</strong>talles en http://www.ciponline.org


El <strong>con</strong>flicto, callejón <strong>con</strong> <strong>salida</strong>el oleoducto Caño Limón-Coveñas en el <strong>de</strong>partamento <strong>de</strong>Arauca. Aunque los recursos son significativos, el Estadocolombiano <strong>de</strong>be cumplir <strong>con</strong> un plan <strong>de</strong> inversión acordado<strong>con</strong> el donante, lo cual implica sustraer esfuerzos <strong>de</strong> otrosprogramas. También al escoger dos territorios estratégicospara la industria petrolera —las <strong>de</strong> Arauca y sur <strong>de</strong> Bolívar—como primeras “zonas <strong>de</strong> rehabilitación y <strong>con</strong>solidación”,el gobierno actual está ratificando la prioridad <strong>de</strong> esteobjetivo.c. TerrorismoLas Farc, el eln y las auc figuraban ya entre las organizacionesque el Departamento <strong>de</strong> Estado <strong>con</strong>si<strong>de</strong>raba “terroristas”,cuando los sucesos <strong>de</strong>l 11 <strong>de</strong> septiembre hicieron <strong>de</strong>ésta la gran prioridad <strong>de</strong> la política norteamericana. Y aunqueColombia por supuesto tiene un interés genuino en estaárea, su ángulo no coinci<strong>de</strong> <strong>de</strong>l todo <strong>con</strong> el <strong>de</strong> Washington.En efecto, la expresión “terrorismo” se ha aplicado a unaamplia gama <strong>de</strong> violencias políticas, que van <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la jihadinternacional <strong>de</strong> extremistas islámicos hasta campañas <strong>de</strong>resistencia a<strong>de</strong>lantadas por grupos armados ilegales, tanto<strong>de</strong>ntro como fuera <strong>de</strong> las fronteras estatales (Cope, 2002).Para Estados Unidos, la amenaza terrorista proviene básicamente<strong>de</strong> la primera categoría, en tanto las Farc, el eln ylas auc se aproximarían más a la segunda. Sin perjuicio <strong>de</strong>esta distinción, los gobiernos Pastrana y Uribe lograron persuadira Washington <strong>de</strong> que su asistencia militar pueda emplearseen acciones directas <strong>con</strong>tra la guerrilla y las auto<strong>de</strong>fensas,dada su <strong>con</strong>dición oficial <strong>de</strong> “terroristas”.2. Cuidado <strong>de</strong> la infraestructuraLas guerrillas dirigen parte <strong>de</strong> su esfuerzo bélico <strong>con</strong>tra lainfraestructura <strong>de</strong> puentes, torres <strong>de</strong> energía, acueductos yoleoductos. También atentan <strong>con</strong>tra la seguridad vial <strong>con</strong>las llamadas “pescas milagrosas” y los peajes que, al igualque las auto<strong>de</strong>fensas, erigen en distintas carreteras. La respuesta<strong>de</strong>l Estado ha sido <strong>de</strong>stinar buena parte <strong>de</strong>l limitadorecurso humano a proteger la infraestructura y a patrullarlas vías troncales —<strong>con</strong> cierto grado <strong>de</strong> éxito sin duda, perodistrayendo personal que podría ser usado en tareas <strong>de</strong> combate.3. Funciones <strong>de</strong> policía judicial a las Fuerzas MilitaresComo señalan Hoffman y Morrison (1992), en el marco <strong>de</strong>lesfuerzo <strong>con</strong>trainsurgente es preciso <strong>con</strong>tar <strong>con</strong> normas quepermitan la actuación <strong>con</strong>tun<strong>de</strong>nte <strong>de</strong> la fuerza pública. Enun Estado <strong>de</strong> <strong>de</strong>recho, por supuesto, tales disposiciones<strong>de</strong>ben estar en <strong>con</strong>cordancia <strong>con</strong> la Carta política y los tratadosinternacionales vigentes (Recuadro 7.3).De acuerdo <strong>con</strong> el ejemplo <strong>de</strong> varios pre<strong>de</strong>cesores, losgobiernos <strong>de</strong> Andrés Pastrana y Álvaro Uribe han insistidoen la necesidad <strong>de</strong> proporcionar faculta<strong>de</strong>s <strong>de</strong> policía judiciala las ff mm. Por iniciativa gubernamental, el Congresoaprobó la ley 684 <strong>de</strong> 2001 referente al sistema <strong>de</strong> seguridady <strong>de</strong>fensa nacional; sin embargo la Corte la <strong>de</strong>claró inexequibleen sentencia C-251 <strong>de</strong> 2002. Bajo el estado <strong>de</strong> <strong>con</strong>mocióninterior al principio <strong>de</strong> su gobierno, el presi<strong>de</strong>nteUribe emitió el <strong>de</strong>creto 2002 <strong>de</strong> 2002 que le otorgaba faculta<strong>de</strong>s<strong>de</strong> policía judicial a las Fuerzas Militares. Sin embargola Corte Constitucional lo <strong>de</strong>claró inexequible en lo atinentea las <strong>de</strong>tenciones preventivas, la <strong>con</strong>fiscación <strong>de</strong> medios<strong>de</strong> comunicación, el registro <strong>de</strong> bienes y la captura administrativabajo la fórmula <strong>de</strong> retención transitoria por parte <strong>de</strong>la autoridad militar.Al momento <strong>de</strong> escribirse este <strong>Informe</strong>, el Congreso datrámite a un proyecto <strong>de</strong> reforma <strong>con</strong>stitucional que modificalos artículos 15, 24, 28 y 250 <strong>de</strong> la Constitución. La reforma<strong>con</strong>ce<strong>de</strong> a las ff mm las faculta<strong>de</strong>s <strong>de</strong> policía judicial <strong>de</strong> maneraexplícita para que, bajo la coordinación <strong>de</strong> la Fiscalía, cumplanfunciones operativas <strong>de</strong> apoyo, <strong>de</strong> protección y auxiliaresen lugares don<strong>de</strong> no sea posible el acceso <strong>de</strong> funcionarios<strong>de</strong> policía judicial. La reforma también permite interceptar oregistrar la correspon<strong>de</strong>ncia y otras formas <strong>de</strong> comunicaciónprivada, llevar a cabo <strong>de</strong>tenciones y registros domiciliariossin previa or<strong>de</strong>n judicial, y or<strong>de</strong>nar que los habitantes <strong>de</strong> ciertasregiones registren su lugar <strong>de</strong> resi<strong>de</strong>ncia.Pese a la insistencia <strong>de</strong> los gobernantes, hay quienes piensanque la eficacia <strong>de</strong> la acción militar no mejoraría mucho<strong>con</strong> instrumentos <strong>de</strong> carácter legal:• Evocan al efecto la experiencia <strong>de</strong>l “Estado <strong>de</strong> sitio” queen in<strong>con</strong>tables veces acudió a drásticas medidas legales sinque en nada inclinara la balanza militar a favor <strong>de</strong>l Estadoentre los años 50 y el final <strong>de</strong> los 80.• También hacen notar que al Ejecutivo no le faltan faculta<strong>de</strong>slegales ya <strong>de</strong> por sí severas y que la Corte ha <strong>de</strong>clara-169


Programa <strong>de</strong> las Naciones Unidas para el <strong>Desarrollo</strong><strong>Informe</strong> <strong>Nacional</strong> <strong>de</strong> <strong>Desarrollo</strong> <strong>Humano</strong> Colombia - <strong>2003</strong>RECUADRO 7.3Legislación antiterrorista*Después <strong>de</strong> los atentados <strong>de</strong>l 11 <strong>de</strong> septiembre, varios paíseshan expedido leyes antiterroristas que en general compartenunos mismos lineamientos. Entre los principales temas <strong>con</strong>templadosestán: extradición, régimen <strong>de</strong> asilo, financiación<strong>de</strong> los grupos terroristas, lavado <strong>de</strong> dinero y activos, y <strong>con</strong>trol<strong>de</strong> las comunicaciones por parte <strong>de</strong> agencias <strong>de</strong> inteligencia.Este tipo <strong>de</strong> legislaciones ha <strong>de</strong>spertado gran <strong>con</strong>troversiaporque tien<strong>de</strong>n a vulnerar <strong>de</strong>rechos civiles tan importantescomo la privacidad, la libre circulación o la presunción <strong>de</strong> inocencia,<strong>con</strong> el argumento <strong>de</strong> que el interés colectivo o nacional<strong>de</strong>ba prevalecer sobre <strong>de</strong>rechos individuales.Entre los regímenes especiales más <strong>de</strong>stacados se encuentrael <strong>de</strong> Estados Unidos, don<strong>de</strong> la llamada Patriot Act facultóa las agencias <strong>de</strong> inteligencia, <strong>de</strong> investigación y <strong>de</strong> policía parainterceptar comunicaciones, acce<strong>de</strong>r a información <strong>con</strong>fi<strong>de</strong>nciale incluso arrestar a ciudadanos extranjeros sin una or<strong>de</strong>njudicial.Siguiendo el tono <strong>de</strong> la ley americana, el Reino Unido damás po<strong>de</strong>res a los cuerpos <strong>de</strong> seguridad para obtener información<strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> procesos o indagaciones en curso, o parainiciar operaciones <strong>de</strong> vigilancia sin motivo aparente. Uno <strong>de</strong>los puntos más <strong>con</strong>trovertidos es la facultad para arrestar acualquier extranjero sospechoso <strong>de</strong> activida<strong>de</strong>s terroristas sinla or<strong>de</strong>n judicial pertinente. Para armonizar esta disposición<strong>con</strong> la Convención europea <strong>de</strong> <strong>de</strong>rechos humanos, fue necesario<strong>de</strong>clarar el estado <strong>de</strong> emergencia y <strong>de</strong>jar esta faculta<strong>de</strong>xtraordinaria bajo la supervisión <strong>de</strong> la siac.Los estatutos antiterroristas <strong>de</strong> Estados Unidos, Alemania yel Reino Unido han recibido fuertes críticas por cuanto no <strong>de</strong>terminanun organismo que <strong>con</strong>trole a las entida<strong>de</strong>s facultadas paraa<strong>de</strong>lantar las acciones previstas. Tampoco proveen ningún mecanismopara proteger la información personal y la privacidad.Por su parte, la ley francesa sobre “seguridad cotidiana”(estatuto antiterrorista), también refuerza el <strong>con</strong>trol <strong>de</strong> lascomunicaciones y <strong>de</strong> la información, restringe los <strong>de</strong>rechos<strong>de</strong> reunión, hace más fuertes los <strong>con</strong>troles migratorios y otorgafaculta<strong>de</strong>s <strong>de</strong> policía judicial a los guardianes <strong>de</strong> paz (policíasauxiliares <strong>de</strong> la policía nacional). Es notable el po<strong>de</strong>r otorgadoal fiscal en la lucha <strong>con</strong>tra el terrorismo, especialmenteen su facultad para expedir ór<strong>de</strong>nes <strong>de</strong> registro y arresto extraordinario.Una situación similar se encuentra en la legislacióncanadiense, don<strong>de</strong> el fiscal general es quien <strong>con</strong>oce y autorizatodos los procesos relacionados <strong>con</strong> terrorismo. Estaley, a pesar <strong>de</strong> permitir arrestos sin or<strong>de</strong>n judicial, establececlaros límites por los cuales el arresto <strong>de</strong>be <strong>de</strong>scansar sobreuna firme sospecha y la situación <strong>de</strong>l <strong>de</strong>tenido <strong>de</strong>be ser esclarecidaen un plazo <strong>de</strong> veinticuatro horas.España, a través <strong>de</strong> la Constitución y leyes orgánicas, haestructurado un sistema normativo <strong>con</strong>tra el terrorismo quepermite restringir los <strong>de</strong>rechos civiles <strong>de</strong>l ciudadano. La ley<strong>con</strong>templa la <strong>de</strong>tención preventiva <strong>de</strong> un sospechoso, que pue<strong>de</strong>quedar incomunicado por 72 horas prorrogables por 48horas más, hasta que el juez califique su situación. Así mismopermite que, a<strong>de</strong>más <strong>de</strong>l juez, el Ministerio <strong>de</strong>l Interior y eldirector <strong>de</strong> Seguridad <strong>de</strong>l Estado puedan or<strong>de</strong>nar la <strong>de</strong>tencióny revisión <strong>de</strong> la correspon<strong>de</strong>ncia y comunicaciones <strong>de</strong>los sospechosos <strong>de</strong> terrorismo.En el ámbito latinoamericano se <strong>de</strong>staca la ley argentina.Allí, la Procuraduría General juega un papel muy importante,pues es el ente encargado <strong>de</strong> ejecutar el grueso <strong>de</strong> sus disposiciones,que se refieren sobre todo al tratamiento <strong>de</strong> informantes,arrepentidos y agentes encubiertos; como personajes clavesen la lucha antiterrorista.Las leyes antiterroristas hacen poca o ninguna referencia alos mecanismos <strong>de</strong> <strong>con</strong>trol y <strong>de</strong> <strong>de</strong>fensa <strong>de</strong> los <strong>de</strong>rechos <strong>de</strong> losciudadanos. No obstante, en algunos <strong>de</strong> estos países existe lafigura <strong>de</strong>l <strong>de</strong>fensor <strong>de</strong>l pueblo, cuyo rol y competencia en todocaso no es claro frente a las disposiciones extraordinarias <strong>de</strong>estas leyes.En Francia existe el Médiateur <strong>de</strong> la République, órganoexterno al Estado, encargado <strong>de</strong> solucionar los <strong>con</strong>flictos entrelos organismos públicos y los ciudadanos, sean nacionales170


El <strong>con</strong>flicto, callejón <strong>con</strong> <strong>salida</strong>o extranjeros. En la misma línea, en Gran Bretaña el Ombudsmanparlamentario realiza investigaciones in<strong>de</strong>pendientessobre las quejas presentadas <strong>con</strong>tra el Estado. En España, lasfunciones <strong>de</strong> <strong>de</strong>fensa <strong>de</strong> los <strong>de</strong>rechos fundamentales recaensobre el <strong>de</strong>fensor <strong>de</strong>l pueblo, quien supervisa la actividad <strong>de</strong>la administración pública y sus agentes. Es una autoridad totalmenteautónoma, que goza <strong>de</strong> inviolabilidad e inmunidad.La misma institución existe en Estados Unidos, don<strong>de</strong> elOmbudsman opera en los niveles local, estatal y fe<strong>de</strong>ral. Finalmente,en la Unión Europea existe esta figura, para aten<strong>de</strong>rlos reclamos <strong>con</strong>tra las instituciones y órganos <strong>de</strong> la Unión.do exequibles: restringir los <strong>de</strong>rechos <strong>de</strong> circulación y resi<strong>de</strong>ncia;exigir que <strong>de</strong>terminadas personas comuniquen<strong>con</strong> antelación su voluntad <strong>de</strong> cambiar <strong>de</strong> resi<strong>de</strong>ncia; utilizartemporalmente bienes <strong>de</strong> propiedad privada e imponerla prestación <strong>de</strong> servicios técnicos y profesionales; establecerrestricciones a la radio y la televisión; someter a permisoprevio o restringir las reuniones y manifestaciones; disponer,<strong>con</strong> or<strong>de</strong>n judicial verbal o escrita, la interceptación<strong>de</strong> comunicaciones; or<strong>de</strong>nar, incluso sin autorización judicial,la aprehensión preventiva <strong>de</strong> personas <strong>de</strong> quien se tengaindicio <strong>de</strong> que cometieron o cometerán un <strong>de</strong>lito; suspen<strong>de</strong>ralcal<strong>de</strong>s o gobernadores cuando <strong>con</strong>tribuyan a perturbarel or<strong>de</strong>n público; efectuar inspecciones o registros domiciliariospara buscar pruebas o prevenir <strong>de</strong>litos; or<strong>de</strong>naral comandante militar que restablezca el or<strong>de</strong>n en cualquierlugar <strong>de</strong>l territorio y aún por encima <strong>de</strong> las autorida<strong>de</strong>s civilesrespectivas, y crear “teatros <strong>de</strong> operaciones”.• Y señalan, en fin, que <strong>de</strong>dicar una fuerza militar a lastareas <strong>de</strong> policía judicial ten<strong>de</strong>ría a chocar <strong>con</strong> su cultura,quebrantaría la unidad <strong>de</strong> mando y podría relegar la labor<strong>de</strong> policía judicial a un plano muy secundario 3 .Sea cualquiera la verdad respecto <strong>de</strong> la eficacia, hay buenasrazones jurídicas para abstenerse <strong>de</strong> trasladar funciones<strong>de</strong> policía judicial a las ff mm. La Corte <strong>con</strong>ceptúa que“la asignación <strong>de</strong> funciones <strong>de</strong> policía judicial a los militaresestá prohibida por nuestro or<strong>de</strong>namiento jurídico” 4 ypropone dos argumentos al efecto:• El traslado en cuestión comprometería la necesaria imparcialidad<strong>de</strong> la investigación. La policía judicial averigua,indaga y esclarece los hechos que <strong>con</strong>stituyen el sustratomaterial <strong>de</strong> la sentencia proferida por el juez. Según la sentencia5 , el traslado equivaldría a “<strong>con</strong>fiar a un aparato institucionalcuya razón se orienta al uso táctico <strong>de</strong> la fuerza queen<strong>de</strong>rece esa misma razón a la libre interpretación <strong>de</strong> loshechos y <strong>de</strong> las normas <strong>con</strong> un sentido <strong>de</strong> justicia”. Las ffmm, por “su régimen propio y el <strong>con</strong>texto histórico en el queactúan, no se <strong>con</strong>cilian <strong>con</strong> la in<strong>de</strong>pen<strong>de</strong>ncia e imparcialidadinherentes a la policía judicial, atributos característicos<strong>de</strong> la función jurisdiccional a la cual sirve”.* INDH <strong>2003</strong>.3. Corte Constitucional, sentencia C-134 <strong>de</strong> 1993.4. Corte Constitucional, sentencia C-179 <strong>de</strong> 1994.5. Corte Constitucional, sentencia C-251 <strong>de</strong> 2002.171


Programa <strong>de</strong> las Naciones Unidas para el <strong>Desarrollo</strong><strong>Informe</strong> <strong>Nacional</strong> <strong>de</strong> <strong>Desarrollo</strong> <strong>Humano</strong> Colombia - <strong>2003</strong>172• Aun si cursa el mencionado proyecto <strong>de</strong> reforma <strong>con</strong>stitucional,quedaría en pie la violación <strong>de</strong> tratados ratificadospor Colombia, como la Convención Interamericana <strong>de</strong>Derechos <strong>Humano</strong>s o el Pacto Internacional <strong>de</strong> DerechosCiviles y Políticos.4. Énfasis en <strong>con</strong>flictos sencillosEn Colombia se tien<strong>de</strong> a “judicializar” los casos más sencillos,<strong>de</strong> naturaleza privada, que podrían ser atendidos porinstancias alternativas <strong>de</strong> resolución <strong>de</strong> <strong>con</strong>flictos; y en cambiose <strong>de</strong>satien<strong>de</strong>n o quedan impunes los asuntos más complejosy <strong>de</strong> mayor impacto social. En materia penal, Rubio(1997: 45) califica el fenómeno como “banalización <strong>de</strong> la justicia”y lo <strong>de</strong>scribe como un “ocuparse <strong>de</strong> los <strong>de</strong>litos inocuosy fáciles <strong>de</strong> resolver en <strong>de</strong>trimento <strong>de</strong> los más graves, los difíciles<strong>de</strong> investigar y aclarar”.La distorsión es todavía más clara en el área <strong>de</strong> la justiciacivil. Un estudio reciente <strong>con</strong>cluye que los procesos ejecutivos,singulares, hipotecarios o prendarios <strong>con</strong>stituyen 74%<strong>de</strong>l total sometido a esta jurisdicción; que en 90% <strong>de</strong> loscasos el <strong>de</strong>mandante es una entidad financiera y 95% <strong>de</strong>ellos se falla a su favor. La justicia está virtualmente al servicio<strong>de</strong>l sector financiero, y esta atención le cuesta al país 158mil millones <strong>de</strong> pesos (<strong>de</strong>l 2001), cerca <strong>de</strong> 12% <strong>de</strong>l gasto totalen el ramo <strong>de</strong> justicia (Garay, 2002: xvii)5. CriminalizaciónEl país enfrenta serios problemas <strong>de</strong> <strong>con</strong>gestión en los diferenteseslabones <strong>de</strong>l subsistema <strong>de</strong> justicia penal, producto<strong>de</strong>: i) una legislación que tipifica como <strong>de</strong>litos un rango excesivamenteamplio <strong>de</strong> <strong>con</strong>ductas y que acu<strong>de</strong> <strong>de</strong>masiado a laspenas privativas <strong>de</strong> libertad, como también <strong>de</strong> ii) los altos índices<strong>de</strong> criminalidad severa o <strong>de</strong> los técnicamente llamadosmala in se. Precisamente porque no damos abasto <strong>con</strong> estetipo <strong>de</strong> <strong>de</strong>litos y ni siquiera <strong>con</strong> los “crímenes atroces” que<strong>de</strong>fine el <strong>de</strong>recho internacional, es necesario abordar <strong>de</strong> veraslos temas <strong>de</strong> <strong>de</strong>scriminalización y alternatividad penal.E. Desarticulación y autismo institucionalRecor<strong>de</strong>mos que una segunda <strong>con</strong>dición para que el bienpúblico seguridad-justicia se suministre <strong>de</strong> manera cabal esla coordinación o <strong>con</strong>certación entre las entida<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l ssjpy, en especial, que las reformas en cada institución se piensenen función <strong>de</strong>l <strong>con</strong>junto. Pues bien, e infortunadamente,esta segunda <strong>con</strong>dición también falta en Colombia.1. Falta coordinaciónSea cualquiera la verdad respecto <strong>de</strong> la eficacia, hay buenasrazones jurídicas para abstenerse <strong>de</strong> trasladar funciones<strong>de</strong> policía judicial a las FF MM.Son varias las razones que explican la notoria falta <strong>de</strong> <strong>con</strong>certaciónentre las entida<strong>de</strong>s que integran o mejor, que habrían<strong>de</strong> integrar los subsistemas <strong>de</strong> seguridad y <strong>de</strong> justicia, parano mencionar la coordinación entre ambos subsectores.Figuran entre dichas razones la autonomía <strong>de</strong> las ramas <strong>de</strong>lpo<strong>de</strong>r público, el sistema <strong>de</strong> “compartimentos estancos”, la<strong>de</strong>scentralización en curso <strong>de</strong>s<strong>de</strong> los años 80, la diferentecultura <strong>de</strong> cada organización, la puja presupuestal, las rivalida<strong>de</strong>sy <strong>de</strong>más patologías burocráticas.Sea cual sea su raíz, el problemase manifiesta tanto en el planohorizontal como en el vertical, entreentida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> un mismo or<strong>de</strong>n territorialo entre entida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> distinto nivel territorial.a. Descoordinación horizontalLa <strong>de</strong>mocracia implica separación entre las ramas <strong>de</strong>l po<strong>de</strong>rpúblico, pero la separación no implica falta <strong>de</strong> <strong>con</strong>certación.Como reza el artículo 113 <strong>de</strong> la Carta, “Los diferentesórganos <strong>de</strong>l Estado tienen funciones separadas pero colaboranarmónicamente para la realización <strong>de</strong> sus fines”. Y elartículo 2 hace mención explícita <strong>de</strong> la seguridad y la justicia:“son fines esenciales <strong>de</strong>l Estado... proteger a todas laspersonas resi<strong>de</strong>ntes en Colombia, en su vida, honra, bienes,creencias y <strong>de</strong>más <strong>de</strong>rechos y liberta<strong>de</strong>s; <strong>de</strong>fen<strong>de</strong>r la in<strong>de</strong>pen<strong>de</strong>ncianacional, mantener la integridad territorial y asegurarla <strong>con</strong>vivencia pacífica y la vigencia <strong>de</strong> un or<strong>de</strong>n justo;garantizar la efectividad <strong>de</strong> los principios, <strong>de</strong>rechos y<strong>de</strong>beres <strong>con</strong>sagrados en la Constitución”.Tenemos en Colombia el Consejo Superior <strong>de</strong> JusticiaCriminal y Penitenciaria, pensado como una instancia <strong>de</strong><strong>con</strong>certación entre las entida<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l subsector. El Consejo


El <strong>con</strong>flicto, callejón <strong>con</strong> <strong>salida</strong>está integrado por el Ministro <strong>de</strong> Interior y Justicia, el Presi<strong>de</strong>nte<strong>de</strong> la Sala Penal <strong>de</strong> la Corte Suprema <strong>de</strong> Justicia, elPresi<strong>de</strong>nte <strong>de</strong>l Consejo Superior <strong>de</strong> la Judicatura, el FiscalGeneral <strong>de</strong> la Nación, el Procurador General <strong>de</strong> la Nación,el Defensor <strong>de</strong>l Pueblo, el Director <strong>de</strong> la Policía <strong>Nacional</strong>, elDirector <strong>de</strong>l das y el Director <strong>de</strong>l Instituto <strong>Nacional</strong> Penitenciarioy Carcelario. Como invitado permanente asiste el Director<strong>de</strong> Justicia y Seguridad <strong>de</strong>l dnp y como invitado ocasionalpue<strong>de</strong> <strong>con</strong>currir cualquier funcionario o ciudadano.El único problema <strong>de</strong>l Consejo es que casi nunca se reúney cuando lo hace no <strong>de</strong>ci<strong>de</strong> casi nada.En la política <strong>de</strong> <strong>de</strong>fensa y seguridad <strong>de</strong>mocrática el gobiernore<strong>con</strong>oce que el fortalecimiento <strong>de</strong>l sistema judicialestá en la base <strong>de</strong> la política <strong>de</strong> seguridad <strong>de</strong>mocrática y esfundamental para la recuperación <strong>de</strong>l imperio <strong>de</strong> la ley. Sinembargo, no <strong>con</strong>templa mecanismos precisos para la <strong>con</strong>certaciónentre la rama judicial y el ejecutivo. En cambio, estableceel Consejo <strong>de</strong> Seguridad y Defensa <strong>Nacional</strong> como lainstancia don<strong>de</strong> el Presi<strong>de</strong>nte coordinará <strong>con</strong> los ministrosy la fuerza pública la ejecución <strong>de</strong> la política (Ministerio <strong>de</strong>Defensa <strong>Nacional</strong>, <strong>2003</strong>: 34). Así, los representantes <strong>de</strong> loscomponentes institucionales <strong>de</strong> la administración <strong>de</strong> justicia,<strong>de</strong>l Congreso y <strong>de</strong> los órganos <strong>de</strong> <strong>con</strong>trol no son efectivamenteincluidos en el Consejo para efectos <strong>de</strong> la coordinación<strong>de</strong> la respuesta <strong>de</strong>l Estado en su <strong>con</strong>junto.b. Descoordinación verticalComo apuntó el Capítulo 2 y <strong>con</strong>firmará el Capítulo 14, lolocal se ha <strong>con</strong>vertido en escenario <strong>de</strong>cisivo <strong>de</strong>l <strong>con</strong>flictoarmado; y sin embargo entre los niveles <strong>de</strong> gobierno central,<strong>de</strong>partamental y municipal se dan cortocircuitos queafectan la prestación <strong>de</strong>l servicio justicia-seguridad.“La Policía <strong>Nacional</strong> cumplirá... las ór<strong>de</strong>nes que impartael alcal<strong>de</strong> por <strong>con</strong>ducto <strong>de</strong>l respectivo comandante”, diceel artículo 315 <strong>de</strong> la Constitución; y “el gobernador es elagente <strong>de</strong>l Presi<strong>de</strong>nte <strong>de</strong> la República para el mantenimiento<strong>de</strong>l or<strong>de</strong>n público” (artículo 303). Pero el presi<strong>de</strong>nte siguesiendo responsable <strong>de</strong> “<strong>con</strong>servar en todo el territorioel or<strong>de</strong>n público y restablecerlo don<strong>de</strong> fuere perturbado”(artículo 189, numeral 4).En la vida real los comandantes <strong>de</strong> policía, más que seguirlas directrices <strong>de</strong>l alcal<strong>de</strong>, obe<strong>de</strong>cen a la dirección nacional<strong>de</strong> la institución pues se trata, como dijimos, <strong>de</strong> uncuerpo militarizado en su estructura y en su <strong>con</strong>cepción <strong>de</strong>las líneas <strong>de</strong> mando. Esta instancia central suele tomar <strong>de</strong>cisionessin <strong>con</strong>sultar <strong>con</strong> las autorida<strong>de</strong>s locales y en algunoscasos, en <strong>con</strong>travía <strong>de</strong> sus políticas. En <strong>con</strong>secuencia yen palabras <strong>de</strong>l actual Alcal<strong>de</strong> <strong>de</strong> Bogotá, “pareciera que lasposibilida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> los alcal<strong>de</strong>s y gobernadores en esta materiase redujeran a solicitar y no a or<strong>de</strong>nar como aparentementelo establece la Constitución” (Mockus, 1997: 17).El punto <strong>de</strong> roce entre autorida<strong>de</strong>s nacionales y locales<strong>de</strong> algún modo está en que las primeras tien<strong>de</strong>n a ver el problemaen términos <strong>de</strong> seguridad militar y las segundas <strong>de</strong>seguridad ciudadana. Aunque no se trata <strong>de</strong> <strong>con</strong>ceptos acabadosy enteramente excluyentes, el Recuadro 7.4 ayuda aapreciar las diferencias entre los dos enfoques.El primer enfoque se <strong>con</strong>centra en el <strong>con</strong>flicto armado ysubraya el uso <strong>de</strong> la fuerza pública para hacer frente a losgrupos ilegales, <strong>con</strong> menor énfasis sobre los instrumentos<strong>de</strong> carácter político, e<strong>con</strong>ómico y social. El segundo enfoquemira a la criminalidad en su <strong>con</strong>junto y subraya dosclases <strong>de</strong> medidas: las preventivas (<strong>con</strong>trol al porte <strong>de</strong> armas,limitación al expendio <strong>de</strong> bebidas alcohólicas...) y las<strong>de</strong> cultura ciudadana (aprendizajes para la <strong>con</strong>vivencia, la<strong>con</strong>ciliación y el respeto <strong>de</strong> las normas).Si bien se ocupan <strong>de</strong> asuntos diferentes, hay zonas <strong>de</strong>intersección entre aquellos dos enfoques. Una primera intersecciónresulta <strong>de</strong> la compleja y <strong>de</strong>batida relación queexiste entre <strong>de</strong>lincuencia ordinaria y <strong>con</strong>flicto armado; hastadon<strong>de</strong> ambas patologías se crucen, las dos terapias tien<strong>de</strong>na excluirse. Una segunda viene <strong>de</strong> la llamada “urbanización<strong>de</strong> la guerra”; si ésta se diera (y si no se redujera alterrorismo urbano) la competencia entre terapias sería másintensa. La tercera tensión vendría <strong>de</strong> que en el marco <strong>de</strong> la“seguridad ciudadana” se ha hecho hincapié sobre la resistenciacivil organizada, pero voluntaria, pacífica y <strong>de</strong>sarmada,mientras en el enfoque <strong>de</strong> “seguridad <strong>de</strong>mocrática” seacentúan el apoyo a las autorida<strong>de</strong>s militares, la vinculaciónmás directa al combate (soldados campesinos) y la informaciónmotivada por recompensas.La propia complejidad <strong>de</strong>l <strong>con</strong>flicto armado; su distintaexpresión en las varias regiones, ciuda<strong>de</strong>s y pueblos; el tintei<strong>de</strong>ológico que se insinúa bajo cada enfoque, han dadopie al aumento <strong>de</strong> los roces entre autorida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> distintoor<strong>de</strong>n territorial. Y bajo estas circunstancias se ha vueltomás obvia la precariedad <strong>de</strong> las instancias <strong>de</strong> <strong>con</strong>certación173


Programa <strong>de</strong> las Naciones Unidas para el <strong>Desarrollo</strong><strong>Informe</strong> <strong>Nacional</strong> <strong>de</strong> <strong>Desarrollo</strong> <strong>Humano</strong> Colombia - <strong>2003</strong>RECUADRO 7.4Visiones alternativas <strong>de</strong> la seguridad.Hablan tres lí<strong>de</strong>resA. Política <strong>de</strong> <strong>de</strong>fensa y seguridad <strong>de</strong>mocráticaMartha Lucía Ramírez aLa seguridad <strong>de</strong>mocrática es una política integral <strong>de</strong> Estado alargo plazo para la protección <strong>de</strong> la población. Por esta razón,se ha fijado como objetivo principal el fortalecimiento <strong>de</strong>l Estado<strong>de</strong> <strong>de</strong>recho en todo el territorio, que es la garantía <strong>de</strong> los<strong>de</strong>rechos y liberta<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l ciudadano.La vigencia <strong>de</strong>l Estado <strong>de</strong> <strong>de</strong>recho a su vez <strong>de</strong>pen<strong>de</strong> <strong>de</strong>lfortalecimiento <strong>de</strong> la autoridad <strong>de</strong>mocrática. De que las institucionesy los gobernantes puedan ejercer libremente su autoridadsin temor a amenazas, <strong>de</strong> que impere la ley en todo elterritorio, y <strong>de</strong> que los ciudadanos participen activamente enlos asuntos <strong>de</strong> interés común.Este propósito no entien<strong>de</strong> la seguridad en primera instanciacomo la seguridad <strong>de</strong>l Estado, como ocurría en las viejas<strong>con</strong>cepciones <strong>de</strong> “seguridad nacional”, ni tampoco como laseguridad <strong>de</strong>l ciudadano sin el <strong>con</strong>curso <strong>de</strong>l Estado, que es elúnico llamado a proteger a la población, sino como la protección<strong>de</strong>l ciudadano y <strong>de</strong> la <strong>de</strong>mocracia por parte <strong>de</strong>l Estado,<strong>con</strong> la cooperación solidaria y el compromiso <strong>de</strong> toda la sociedad.La seguridad <strong>de</strong>mocrática se funda así en tres pilares:• La protección <strong>de</strong> los <strong>de</strong>rechos <strong>de</strong> todos los ciudadanos,in<strong>de</strong>pendientemente <strong>de</strong> su sexo, raza, origen, lengua, religióno i<strong>de</strong>ología política.• La protección <strong>de</strong> los valores, la pluralidad y las instituciones<strong>de</strong>mocráticas.• La solidaridad y la cooperación <strong>de</strong> toda la ciudadanía en<strong>de</strong>fensa <strong>de</strong> los valores <strong>de</strong>mocráticos.Protección a todos por igualDe esta manera, la seguridad <strong>de</strong>mocrática apela a los valoresfundamentales <strong>de</strong> la <strong>de</strong>mocracia. Si todas las personas son igualesante la ley, todas merecen la misma protección por partea. Ministra <strong>de</strong> Defensa <strong>de</strong> Colombia.<strong>de</strong>l Estado, trátese <strong>de</strong> quien se trate. Cuando el Estado protegesin distinción a un campesino, a un empresario, a un sindicalistao a un <strong>de</strong>fensor <strong>de</strong> <strong>de</strong>rechos humanos, no está haciendootra cosa que cumplir <strong>con</strong> su función más elemental, comolo señala la Constitución: “Las autorida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> la repúblicaestán instituidas para proteger a todas las personas resi<strong>de</strong>ntesen Colombia”. La igualdad ante la ley como principio organizador<strong>de</strong> la <strong>de</strong>mocracia no sólo impone obligaciones al Estado,sino también crea oportunida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> reafirmación <strong>de</strong>mocráticapara el ciudadano.La obligación <strong>de</strong> proteger a la población trascien<strong>de</strong> la coyunturaactual o incluso cualquier eventual negociación <strong>con</strong>las organizaciones armadas ilegales. Mientras no se fortalezcala autoridad <strong>de</strong> las instituciones <strong>de</strong>mocráticas en todo el territorio,habrá organizaciones, grupos o personas que —aduciendoo no motivos políticos— <strong>con</strong>tinuarán sirviéndose <strong>de</strong> losvacíos <strong>de</strong> autoridad para ejercer su dominio arbitrario sobrela población, extorsionar a cambio <strong>de</strong> protección y lucrarse <strong>de</strong>lnarcotráfico.La autoridad y los <strong>de</strong>rechosExiste una relación directa entre los vacíos <strong>de</strong> autoridad <strong>de</strong>mocráticay la protección <strong>de</strong> los <strong>de</strong>rechos humanos. A diferencia<strong>de</strong> lo ocurrido en otras partes <strong>de</strong>l <strong>con</strong>tinente, don<strong>de</strong> lapoblación sufrió los abusos <strong>de</strong> un excesivo po<strong>de</strong>r coercitivo<strong>de</strong>l Estado, los <strong>de</strong>rechos <strong>de</strong> los colombianos se ven amenazadosfundamentalmente por la incapacidad <strong>de</strong> la <strong>de</strong>mocraciacolombiana <strong>de</strong> afirmar la autoridad <strong>de</strong> sus instituciones sobrela totalidad <strong>de</strong>l territorio. En la última década, a pesar <strong>de</strong> laprofundización y extensión en el alcance <strong>de</strong> la <strong>de</strong>mocracia quelogró la Constitución política <strong>de</strong> 1991, se erosionó <strong>de</strong> maneraacelerada la autoridad <strong>de</strong> las instituciones, por causa <strong>de</strong>l impacto<strong>de</strong> las organizaciones armadas ilegales. De la mano <strong>de</strong>lnarcotráfico, estas organizaciones <strong>de</strong>struyen el or<strong>de</strong>n legal,abriendo espacios <strong>de</strong> impunidad no sólo a sus activida<strong>de</strong>s<strong>de</strong>lictivas, sino a todo tipo <strong>de</strong> criminalidad.174


El <strong>con</strong>flicto, callejón <strong>con</strong> <strong>salida</strong>El fortalecimiento <strong>de</strong> la autoridad <strong>de</strong>mocrática es, por estarazón, la <strong>con</strong>dición necesaria para garantizar el respeto a los<strong>de</strong>rechos humanos. Más que máximas <strong>de</strong> comportamiento,éstos son fundamento <strong>de</strong>l or<strong>de</strong>namiento <strong>con</strong>stitucional. Suvigencia requiere ante todo <strong>de</strong> la plena soberanía <strong>de</strong>mocráticay <strong>de</strong> la capacidad <strong>de</strong>l Estado <strong>de</strong> hacer prevalecer el or<strong>de</strong>n jurídicoen todo el territorio.El pleno respeto a los <strong>de</strong>rechos humanos y su efectiva materialización,a la vez <strong>con</strong>dición fundamental y objetivo <strong>de</strong> la<strong>de</strong>mocracia, <strong>de</strong>pen<strong>de</strong> también <strong>de</strong> la eficiencia <strong>de</strong>l procesopolítico, <strong>de</strong> la efectividad <strong>de</strong> las leyes y las instituciones y laparticipación activa <strong>de</strong> los ciudadanos en la <strong>de</strong>mocracia.Fortalecimiento <strong>de</strong>l Estado y participación ciudadanaPor ello, la participación ciudadana y su apoyo a las instituciones<strong>de</strong>mocráticas es un elemento esencial <strong>de</strong>l fortalecimiento<strong>de</strong>l Estado <strong>de</strong> <strong>de</strong>recho. La cooperación <strong>de</strong> los ciudadanosreposa, más que en un <strong>de</strong>ber <strong>de</strong> obligatorio cumplimiento, enel principio <strong>de</strong> solidaridad sobre el que se funda el Estadosocial <strong>de</strong> <strong>de</strong>recho. Si la seguridad individual <strong>de</strong>pen<strong>de</strong> <strong>de</strong>l fortalecimiento<strong>de</strong>l Estado <strong>de</strong> <strong>de</strong>recho y el fortalecimiento <strong>de</strong> éste<strong>de</strong>pen<strong>de</strong> <strong>de</strong> la participación ciudadana, es evi<strong>de</strong>nte que la seguridadno es sólo responsabilidad <strong>de</strong>l Estado, sino <strong>de</strong> toda laciudadanía. Es producto <strong>de</strong>l esfuerzo colectivo <strong>de</strong> toda la sociedad.El fortalecimiento <strong>de</strong>l Estado <strong>de</strong> <strong>de</strong>recho requiere no sólo<strong>de</strong> unas instituciones efectivas, una activa participación ciudadanay un or<strong>de</strong>n jurídico fuerte que respal<strong>de</strong> el ejercicio <strong>de</strong>los <strong>de</strong>rechos y liberta<strong>de</strong>s. Supone, igualmente, que todas lasacciones <strong>de</strong>l Estado estarán sujetas a ese or<strong>de</strong>n. La seguridad<strong>de</strong> los colombianos se restablecerá <strong>de</strong> acuerdo <strong>con</strong> la ley y<strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l mayor respeto a los <strong>de</strong>rechos humanos y al marco<strong>de</strong>mocrático, que a su vez se fortalecerá en la medida en quehaya mayor seguridad.Para cumplir <strong>con</strong> el objetivo <strong>de</strong> fortalecer el Estado <strong>de</strong> <strong>de</strong>recho,es entonces necesario <strong>con</strong>solidar el <strong>con</strong>trol estatal sobrela totalidad <strong>de</strong>l territorio. Sin este <strong>con</strong>trol por parte <strong>de</strong>lEstado no es posible garantizar el buen funcionamiento <strong>de</strong> lajusticia, entorpecida en muchas regiones <strong>de</strong>l país por la intimidación<strong>de</strong> la que son víctimas fiscales, jueces y <strong>de</strong>más autorida<strong>de</strong>s;y sin la plena vigencia <strong>de</strong> la ley, la población, expuestaa las amenazas y al dominio arbitrario <strong>de</strong> las organizacionesarmadas ilegales, pier<strong>de</strong> el ejercicio <strong>de</strong> sus <strong>de</strong>rechos y su libertad.Para <strong>con</strong>solidar el <strong>con</strong>trol territorial <strong>de</strong> manera efectiva, esnecesaria una estrecha coordinación entre todas las entida<strong>de</strong>s<strong>de</strong>l Estado. La verda<strong>de</strong>ra seguridad <strong>de</strong>pen<strong>de</strong> no sólo <strong>de</strong> la capacidad<strong>de</strong> la fuerza pública <strong>de</strong> ejercer el po<strong>de</strong>r coercitivo <strong>de</strong>lEstado. Ésta actuará <strong>con</strong>tra las organizaciones terroristas <strong>con</strong>absoluta <strong>de</strong>terminación, llámense como se llamen, observandolos principios <strong>de</strong> eficiencia, transparencia, austeridad yjuridicidad que guían todas las actuaciones <strong>de</strong>l Estado. Perola responsabilidad por la seguridad <strong>de</strong> los ciudadanos no sólo<strong>de</strong>pen<strong>de</strong> <strong>de</strong> la fuerza pública, sino también <strong>de</strong> la capacidad <strong>de</strong>todas las entida<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l gobierno y <strong>de</strong> las otras ramas <strong>de</strong>l po<strong>de</strong>r,en particular <strong>de</strong> la administración <strong>de</strong> justicia, <strong>de</strong> <strong>con</strong>tribuir<strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> sus competencias a la <strong>con</strong>solidación <strong>de</strong>l <strong>con</strong>trolterritorial.Por otra parte, la diversidad <strong>de</strong> factores que afectan la seguridad,la <strong>de</strong>scomposición <strong>de</strong> las mismas organizacionesarmadas ilegales y su frecuente fusión <strong>con</strong> la <strong>de</strong>lincuencia organizada,así como la variedad <strong>de</strong> fuentes <strong>de</strong> riqueza que alimentanestas organizaciones, impi<strong>de</strong>n que se trasla<strong>de</strong>n soluciones<strong>de</strong> un lugar a otro <strong>de</strong>l territorio nacional, sin a<strong>de</strong>cuarlasa las particularida<strong>de</strong>s locales. Por ello, las autorida<strong>de</strong>s localescompartirán <strong>con</strong> el gobierno nacional la responsabilidad <strong>de</strong>diseñar y poner en marcha planes <strong>de</strong> acción que se ajusten<strong>con</strong> sus necesida<strong>de</strong>s específicas.Soberanía <strong>de</strong>mocrática <strong>con</strong>tra el terrorismoEn el escenario internacional, como en el local, la seguridad<strong>de</strong>mocrática busca aplicar el principio <strong>de</strong> corres-175


Programa <strong>de</strong> las Naciones Unidas para el <strong>Desarrollo</strong><strong>Informe</strong> <strong>Nacional</strong> <strong>de</strong> <strong>Desarrollo</strong> <strong>Humano</strong> Colombia - <strong>2003</strong>ponsabilidad para enfrentar las principales amenazas <strong>de</strong> hoy:el terrorismo y el negocio mundial <strong>de</strong> las drogas. Para <strong>de</strong>rrotarel terrorismo no hay soberanía <strong>de</strong> naciones, sino soberanía<strong>de</strong>mocrática. Las organizaciones armadas ilegales colombianashan hecho <strong>de</strong> los civiles su principal blanco, mediante eluso <strong>de</strong> armas no <strong>con</strong>vencionales y <strong>de</strong> atentados premeditados.Pero la lucha <strong>con</strong>tra el terrorismo rebasa el territorio <strong>de</strong>Colombia, como <strong>de</strong> todos los Estados, y requiere <strong>de</strong> un esfuerzomultilateral. En <strong>con</strong>cordancia <strong>con</strong> la resolución 1373 <strong>de</strong>lConsejo <strong>de</strong> Seguridad <strong>de</strong> Naciones Unidas, se <strong>de</strong>ben cerrartodos los espacios que permitan la financiación, el movimientoy la actuación <strong>de</strong> los grupos terroristas, a través <strong>de</strong> una cooperacióninternacional sin <strong>de</strong>moras y sin obstáculos.Al igual que el terrorismo, el problema <strong>de</strong> las drogas ilícitases transnacional: su solución no se pue<strong>de</strong> limitar al territorio<strong>de</strong> un solo país. Por ello <strong>de</strong>s<strong>de</strong> hace más <strong>de</strong> una década Colombiaexige en foros internacionales un compromiso más eficazpor parte <strong>de</strong> la comunidad internacional para resolver elproblema mundial <strong>de</strong> este negocio en todas y cada una <strong>de</strong> susmanifestaciones.El terrorismo y el negocio <strong>de</strong> las drogas ilícitas son parte<strong>de</strong> una serie <strong>de</strong> graves amenazas para la seguridad <strong>de</strong> los ciudadanos,<strong>de</strong> la <strong>de</strong>mocracia y <strong>de</strong> los intereses vitales <strong>de</strong> la nación,ligadas entre sí y <strong>con</strong> frecuencia <strong>de</strong> carácter transnacional.Las siguientes no son los únicos peligros que enfrenta la <strong>de</strong>mocraciacolombiana (la corrupción, por ejemplo, es una intimidacióngrave y será combatida <strong>con</strong> toda firmeza), pero <strong>con</strong>stituyenun riesgo inmediato:• El terrorismo• El negocio <strong>de</strong> las drogas ilícitas• Las finanzas ilícitas• El tráfico <strong>de</strong> armas, municiones y explosivos• El secuestro y la extorsión• El homicidioPara <strong>con</strong>trarrestar estas amenazas y cumplir <strong>con</strong> el objetivo<strong>de</strong> reforzar el Estado <strong>de</strong> <strong>de</strong>recho en todo el territorio, la seguridad<strong>de</strong>mocrática establece unos objetivos estratégicos paraalcanzar:• Consolidación <strong>de</strong>l <strong>con</strong>trol estatal <strong>de</strong>l territorio• Protección <strong>de</strong> la población• Eliminación <strong>de</strong>l negocio <strong>de</strong> drogas ilícitas en Colombia• Mantenimiento <strong>de</strong> una capacidad disuasiva• Eficiencia, transparencia y rendición <strong>de</strong> cuentasPara cada uno <strong>de</strong> estos objetivos correspon<strong>de</strong>n unos específicos(recuperación <strong>de</strong> la presencia <strong>de</strong> la fuerza pública entodos los municipios, incremento <strong>de</strong> la judicialización <strong>de</strong> <strong>de</strong>litos<strong>de</strong> alto impacto social, reducción <strong>de</strong>l número <strong>de</strong> secuestrosy <strong>de</strong> homicidios, prevención <strong>de</strong>l <strong>de</strong>splazamiento forzoso,interdicción <strong>de</strong>l tráfico <strong>de</strong> drogas e insumos, y protección <strong>de</strong>las fronteras terrestres, entre otros), que sirven a su vez <strong>de</strong> basepara elaborar unos indicadores <strong>de</strong> impacto y <strong>de</strong> gestión queevaluarán el cumplimiento <strong>de</strong> los objetivos estratégicos, hacerlos ajustes necesarios a las políticas y crear mecanismos <strong>de</strong>rendición <strong>de</strong> cuentas y <strong>de</strong>limitación <strong>de</strong> responsabilida<strong>de</strong>s.Líneas <strong>de</strong> acción <strong>de</strong> la seguridad <strong>de</strong>mocráticaLa seguridad <strong>de</strong>mocrática <strong>de</strong>sarrollará seis líneas <strong>de</strong> acciónpara cumplir <strong>con</strong> los objetivos estratégicos:i) Coordinar la acción <strong>de</strong>l Estado. Un Consejo <strong>de</strong> Seguridady Defensa <strong>Nacional</strong> coordinará las políticas nacionales;<strong>con</strong>sejos locales <strong>de</strong> seguridad, <strong>con</strong> la asesoría <strong>de</strong>l sector académicoy privado, lo harán en sus áreas <strong>de</strong> jurisdicción. En elcampo operativo, estructuras <strong>de</strong> apoyo interinstitucionales,compuestas por la fuerza pública, los organismos <strong>de</strong> investigacióny <strong>con</strong>trol <strong>de</strong>l Estado y las autorida<strong>de</strong>s judiciales, garantizaránla coordinación sobre el terreno entre las entida<strong>de</strong>s<strong>de</strong>l Estado y la protección <strong>de</strong> la justicia, para asegurar lajudicialización <strong>de</strong> los <strong>de</strong>lincuentes. El Ministerio <strong>de</strong> Defensaasegurará la coordinación entre la fuerza pública y las <strong>de</strong>másentida<strong>de</strong>s. La junta <strong>de</strong> inteligencia <strong>con</strong>junta, por su parte, coordinarála inteligencia estratégica.• Fortalecer las instituciones. El fortalecimiento institucionales la <strong>con</strong>dición necesaria para la <strong>con</strong>solidación <strong>de</strong>l<strong>con</strong>trol territorial y la protección <strong>de</strong> la población. No sólo lasFuerzas Militares y la policía nacional, sino en particular elsistema judicial, la capacidad <strong>de</strong>l Estado <strong>de</strong> recolectar inteligenciae información y las finanzas públicas que sostendrán lapolítica <strong>de</strong> seguridad, serán fortalecidas.176


El <strong>con</strong>flicto, callejón <strong>con</strong> <strong>salida</strong>• Consolidar el <strong>con</strong>trol <strong>de</strong>l territorio nacional. Un ciclo gradual<strong>de</strong> recuperación y <strong>con</strong>solidación restablecerá paulatinamenteun clima <strong>de</strong> seguridad sobre todo el territorio. El ciclocompren<strong>de</strong> tres fases: la recuperación, el mantenimiento y la<strong>con</strong>solidación <strong>de</strong>l <strong>con</strong>trol estatal <strong>de</strong>l territorio. La fuerza públicainiciará el proceso, don<strong>de</strong> sea necesario, asegurando supresencia permanente y <strong>de</strong>finitiva en las cabeceras municipales.Unida<strong>de</strong>s compuestas por soldados regulares, soldados campesinos(soldados que prestan su servicio militar en sus lugares<strong>de</strong> resi<strong>de</strong>ncia) y carabineros <strong>de</strong> la policía nacional aseguraránposteriormente el mantenimiento <strong>de</strong>l <strong>con</strong>trol territorial, <strong>de</strong> maneraque los proyectos <strong>de</strong> <strong>con</strong>solidación integral <strong>de</strong> la tercerafase, en los que participarán todas las entida<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l Estado, seanejecutados cuando exista el suficiente <strong>con</strong>trol. Así se evitará queéstos sean objeto <strong>de</strong> amenazas y extorsión por parte <strong>de</strong> las organizacionesarmadas ilegales, como ha ocurrido en el pasado. Laseguridad <strong>de</strong>mocrática sienta igualmente unas líneas <strong>de</strong> acciónpara el mantenimiento <strong>de</strong> la seguridad en las ciuda<strong>de</strong>s.La eliminación <strong>de</strong>l negocio <strong>de</strong> las drogas ilícitas <strong>de</strong>pen<strong>de</strong>,asimismo, <strong>de</strong> la <strong>con</strong>solidación <strong>de</strong>l <strong>con</strong>trol territorial. Para <strong>de</strong>sarticularlas organizaciones terroristas y <strong>de</strong> narcotráfico tambiénes necesario <strong>de</strong>sarticular sus finanzas. La ley <strong>de</strong> extinción<strong>de</strong> dominio y los <strong>con</strong>troles impuestos a las regalías, entreotras medidas, reducirán los recursos <strong>de</strong> que disponen estasorganizaciones para <strong>de</strong>linquir.• Proteger los <strong>de</strong>rechos <strong>de</strong> los colombianos y la infraestructura<strong>de</strong> la nación. El fortalecimiento <strong>de</strong>l Estado <strong>de</strong> <strong>de</strong>rechoen todo el territorio nacional es el mecanismo fundamentalpara proteger las vidas y <strong>de</strong>rechos <strong>de</strong> los ciudadanos. Puestoque muchos colombianos requieren <strong>de</strong> atención especial, porser víctimas inmediatas <strong>de</strong> las organizaciones armadas ilegales,la seguridad <strong>de</strong>mocrática compren<strong>de</strong> una serie <strong>de</strong> políticasespeciales, diseñadas en <strong>con</strong>junto por diferentes entida<strong>de</strong>s<strong>de</strong>l gobierno, para proteger: i) a las personas en situación<strong>de</strong> riesgo; ii) a las víctimas <strong>de</strong>l <strong>de</strong>splazamiento forzoso; iii)<strong>con</strong>tra el terrorismo; iv) <strong>con</strong>tra el secuestro y la extorsión; v) alos niños combatientes y <strong>de</strong>smovilizados; vi) <strong>con</strong>tra el reclutamiento<strong>de</strong> niños y jóvenes; así como políticas para vii) lainfraestructura e<strong>con</strong>ómica, y viii) a la red vial.• Cooperar para la seguridad <strong>de</strong> todos. La seguridad <strong>de</strong>mocráticapromueve la cooperación voluntaria y patriótica <strong>de</strong> losciudadanos, en aplicación <strong>de</strong>l principio <strong>de</strong> solidaridad, para quecada ciudadano <strong>con</strong>tribuya a la prevención <strong>de</strong>l terrorismo y la<strong>de</strong>lincuencia. Para ello se han <strong>con</strong>stituido re<strong>de</strong>s <strong>de</strong> cooperantesque voluntaria y <strong>de</strong>sinteresadamente cooperan <strong>con</strong> las autorida<strong>de</strong>s,participando en programas <strong>de</strong> cultura para la seguridad ybrindando información para prevenir el <strong>de</strong>lito. De manera complementaria,se ofrecerán recompensas a aquellas personas que,como informantes <strong>de</strong> los organismos <strong>de</strong> seguridad <strong>de</strong>l Estado,<strong>de</strong>n a <strong>con</strong>ocer información que <strong>con</strong>duzca a la captura <strong>de</strong> terroristas.Dado el carácter transnacional <strong>de</strong> las principales amenazas,la seguridad <strong>de</strong>mocrática busca también la cooperación internacional,<strong>de</strong> acuerdo <strong>con</strong> el principio <strong>de</strong> corresponsabilidad.• Comunicar las políticas y acciones <strong>de</strong>l gobierno. Puestoque el terrorismo es un método <strong>de</strong> violencia política que explotala comunicación para sembrar el terror y el <strong>de</strong>s<strong>con</strong>cierto, ladivulgación permanente <strong>de</strong> información sobre los propósitosy resultados <strong>de</strong> la seguridad <strong>de</strong>mocrática es una prioridad. Deigual modo, se promoverá la reflexión por parte <strong>de</strong> los medios<strong>de</strong> comunicación acerca <strong>de</strong> cuál <strong>de</strong>be ser su papel en una <strong>de</strong>mocraciaamenazada por el terrorismo. Por otra parte, la seguridad<strong>de</strong>mocrática compren<strong>de</strong> también un esfuerzo <strong>de</strong> diplomacia públicaen el exterior, para explicar el carácter particular <strong>de</strong> la problemáticacolombiana <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l <strong>con</strong>texto latinoamericano yfortalecer el apoyo <strong>de</strong> la comunidad internacional, imprescindiblepara lograr la protección <strong>de</strong> todos los ciudadanos.Seguridad e iniquidadLa seguridad no será la única preocupación <strong>de</strong>l gobierno nacional,pero sí la primera. No hay mayor iniquidad en Colombiaque en el acceso a la seguridad: son los más pobres quienesestán menos protegidos, son <strong>de</strong>splazados <strong>de</strong> sus tierras ysufren en carne propia el terror <strong>de</strong> las organizaciones armadasilegales. De la seguridad <strong>de</strong>pen<strong>de</strong> no sólo la protección <strong>de</strong> sus<strong>de</strong>rechos y liberta<strong>de</strong>s. El <strong>de</strong>sarrollo e<strong>con</strong>ómico y las posibilida<strong>de</strong>s<strong>de</strong> empleo están igualmente sujetos a que reine un clima<strong>de</strong> seguridad que permita la inversión, el comercioy el gasto <strong>de</strong> los recursos municipales en beneficio <strong>de</strong>177


Programa <strong>de</strong> las Naciones Unidas para el <strong>Desarrollo</strong><strong>Informe</strong> <strong>Nacional</strong> <strong>de</strong> <strong>Desarrollo</strong> <strong>Humano</strong> Colombia - <strong>2003</strong>la comunidad, que son todos objeto <strong>de</strong> la <strong>de</strong>predación permanente<strong>de</strong> las organizaciones armadas ilegales.A<strong>de</strong>más <strong>de</strong> fomentar las oportunida<strong>de</strong>s e<strong>con</strong>ómicas, la seguridadfortalece la integración <strong>de</strong> la sociedad y las posibilida<strong>de</strong>s<strong>de</strong> que los ciudadanos, en especial los menos favorecidos,asuman la responsabilidad <strong>de</strong> los asuntos <strong>de</strong> la comunidad,en la medida en que puedan participar sin temor en la toma <strong>de</strong><strong>de</strong>cisiones políticas, en la fiscalización <strong>de</strong> sus gobernantes yen la promoción <strong>de</strong> proyectos productivos propios. La seguridadfavorece así el empo<strong>de</strong>ramiento <strong>de</strong> los ciudadanos, quees la <strong>con</strong>creción <strong>de</strong> la autonomía y la responsabilidad implícitaen sus <strong>de</strong>rechos y en su igualdad ante la ley; y el empo<strong>de</strong>ramiento<strong>de</strong> los ciudadanos a su vez <strong>con</strong>tribuye a la seguridad,en la medida en que fomenta el sentimiento <strong>de</strong> pertenencia y<strong>de</strong> participación en el <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong> un proyecto común.El gobierno tiene tanta generosidad para albergar a los que<strong>de</strong>sistan la violencia, como firmeza para <strong>de</strong>rrotar el terrorismo.Quienes quieran hacer la paz <strong>con</strong> el Estado colombianotienen la oportunidad <strong>de</strong> hacerla rápidamente, acogiéndose ala política <strong>de</strong> <strong>de</strong>smovilización. Hay toda la disposición porparte <strong>de</strong>l Estado <strong>de</strong> acoger a todos aquellos que renuncien a laviolencia, <strong>de</strong> darles todas las garantías <strong>de</strong> seguridad y las oportunida<strong>de</strong>s<strong>de</strong> educación para que se reintegren a la sociedad.El gobierno nacional mantiene a la vez abierta la puerta auna negociación <strong>con</strong> aquellos grupos que se <strong>de</strong>cidan a participaren la vida <strong>de</strong>mocrática, <strong>con</strong> la <strong>con</strong>dición <strong>de</strong> que cumplanun estricto cese <strong>de</strong> hostilida<strong>de</strong>s. La <strong>con</strong>signa <strong>de</strong>l gobiernoes: urgencia para el cese <strong>de</strong> hostilida<strong>de</strong>s, paciencia para lanegociación y el <strong>de</strong>sarme. Quienes se reintegren a la sociedady la vida <strong>de</strong>mocrática tendrán todas las garantías para ejercerla política que merece el disi<strong>de</strong>nte <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> la <strong>de</strong>mocracia.B. Resistencia civil, fortalecimiento<strong>de</strong>l Estado y <strong>con</strong>strucción <strong>de</strong> ciudadaníaAntanas Mockus bb. Alcal<strong>de</strong> <strong>de</strong> Bogotá.La seguridad y la justicia son bienes públicos cuya <strong>con</strong>solidación<strong>de</strong>pen<strong>de</strong> tanto <strong>de</strong> la acción estatal como <strong>de</strong>l comportamientociudadano. Una política <strong>de</strong> seguridad basada tan sóloen instrumentos coercitivos podría carecer <strong>de</strong> efectividad enel <strong>con</strong>trol <strong>de</strong> las activida<strong>de</strong>s <strong>de</strong>lictivas y <strong>de</strong> fenómenos tan inciertoscomo el terrorismo. Con lo anterior no se está subestimandola necesidad <strong>de</strong> fortalecer al Estado y <strong>de</strong> <strong>de</strong>sarrollar elsistema judicial colombiano, sino que se hace hincapié en laimportancia <strong>de</strong> acompañar estos procesos <strong>con</strong> una transformación<strong>de</strong>l comportamiento ciudadano. Sin la cooperaciónciudadana —<strong>de</strong>s<strong>de</strong> la <strong>de</strong>nuncia oportuna hasta el apoyo a laautoridad estatal— resulta imposible que el Estado garanticela seguridad.Para que la seguridad sea un bien público es fundamentalafianzar la <strong>de</strong>legación <strong>de</strong>l monopolio <strong>de</strong>l uso <strong>de</strong> la fuerza en unEstado legítimo. Esto implica una acción colectiva <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>la propia sociedad civil orientada por la cooperación voluntaria<strong>con</strong> las autorida<strong>de</strong>s estatales, la adhesión a la ley y a losmecanismos <strong>de</strong>mocráticos, y la renuncia a la utilización <strong>de</strong> violencia.En la situación que atraviesa Colombia —en la cual vivimoslas <strong>con</strong>secuencias <strong>de</strong>l <strong>con</strong>flicto armado y <strong>de</strong> altos índices<strong>de</strong> criminalidad e impunidad— es necesario evitar soluciones<strong>de</strong> corto plazo y respuestas ilegales a la violencia que,a<strong>de</strong>más <strong>de</strong> coartar los <strong>de</strong>rechos y liberta<strong>de</strong>s <strong>de</strong>mocráticos,generan inestabilidad y mayores costos para la sociedad. Frenteal <strong>con</strong>flicto armado es preciso superar las tentaciones <strong>de</strong>l autoritarismoy <strong>de</strong> la justicia privada para avanzar en la <strong>con</strong>strucción<strong>de</strong> un Estado social <strong>de</strong> <strong>de</strong>recho.La resistencia civil promovida en Bogotá —a<strong>de</strong>más <strong>de</strong> <strong>con</strong>stituirun camino pacífico y legítimo a través <strong>de</strong>l cual los civilespue<strong>de</strong>n expresar sus sentimientos <strong>de</strong> indignación y <strong>de</strong> solidaridad—es una iniciativa encaminada a respon<strong>de</strong>r a la <strong>de</strong>struccióny a la violencia mediante la <strong>con</strong>strucción. Pue<strong>de</strong> <strong>con</strong>vertirseen el núcleo <strong>de</strong> una estrategia integral <strong>de</strong> seguridad quebusca acabar —preferiblemente por la vía <strong>de</strong> la pedagogía y<strong>de</strong>l <strong>con</strong>trol social— <strong>con</strong> todas las formas <strong>de</strong> violencia, chantajey corrupción. La resistencia civil es un proceso <strong>de</strong> <strong>con</strong>strucción<strong>de</strong> ciudadanía que fomenta la resolución pacífica <strong>de</strong><strong>con</strong>flictos, la formación <strong>de</strong> una cultura <strong>de</strong> la legalidad y la adopción<strong>de</strong> procedimientos <strong>de</strong>mocráticos.La crisis que vive hoy Colombia pue<strong>de</strong> ser en parte entendidacomo resultado <strong>de</strong> la propagación <strong>de</strong> una cultura <strong>de</strong>l atajo178


El <strong>con</strong>flicto, callejón <strong>con</strong> <strong>salida</strong>en nuestra sociedad. En el caso <strong>de</strong> los grupos armados ilegalesesto ha sido formulado como “la combinación <strong>de</strong> todas lasformas <strong>de</strong> lucha”, estrategia que en<strong>con</strong>tró su sustento en i<strong>de</strong>ologíasleninistas y que ha sido apropiada por todos los actores<strong>de</strong>l <strong>con</strong>flicto. La utilización <strong>de</strong> la violencia es un atajo frente ala persuasión, frente al logro e<strong>con</strong>ómico por medio <strong>de</strong>l trabajoy frente al cambio social o político <strong>con</strong> mecanismos <strong>de</strong>mocráticos.Asimismo, la corrupción, el narcotráfico y en generallos comportamientos en don<strong>de</strong> se viola la ley como un mediopara alcanzar cierto resultado, son todos atajos que pue<strong>de</strong>nfavorecer la utilización <strong>de</strong> violencia y que perjudican a la sociedady al Estado. En estos términos, el principal objetivo <strong>de</strong>la resistencia civil es fomentar una cultura <strong>de</strong> la legalidad endon<strong>de</strong> el respeto a los medios legítimos prevalezca sobre elresultado inmediato y en don<strong>de</strong> las tensiones entre la ley y lamoral o entre la ley y la cultura sean resueltas a través procedimientos<strong>de</strong>mocráticos.Los puntos cardinales <strong>de</strong> nuestra propuesta <strong>de</strong> resistenciacivil son cuatro. En primer lugar, se promueve la i<strong>de</strong>a <strong>de</strong> queel fin no justifica los medios. En Colombia existe una granmotivación al logro pero no se ha inculcado suficiente respetopor las restricciones y las reglas que <strong>de</strong>ben ser observadas paraalcanzar dichos fines. La resistencia civil, en tanto <strong>con</strong>strucción<strong>de</strong> ciudadanía, <strong>de</strong>fien<strong>de</strong> la <strong>con</strong>secución <strong>de</strong> resultadossiempre y cuando se empleen los medios a<strong>de</strong>cuados, esto es,se cumplan los <strong>de</strong>beres ciudadanos y se respeten los <strong>de</strong>rechos<strong>de</strong> los <strong>de</strong>más.Un segundo principio fundamental es el fortalecimiento<strong>de</strong> la administración <strong>de</strong> justicia y la <strong>con</strong>secuente renuncia aejercer justicia por mano propia. Uno <strong>de</strong> los pilares <strong>de</strong>l Estadomo<strong>de</strong>rno es la <strong>con</strong>solidación <strong>de</strong> un monopolio <strong>de</strong>l uso <strong>de</strong>la fuerza fundado en un marco institucional y regulado mediantela separación <strong>de</strong> los po<strong>de</strong>res públicos y las <strong>de</strong>más provisioneshechas en la ley y en la Constitución. Cuando se ejercejusticia por mano propia las garantías <strong>de</strong>saparecen y sólo quientiene suficiente fuerza o po<strong>de</strong>r e<strong>con</strong>ómico pue<strong>de</strong> acce<strong>de</strong>r ella.Así, uno <strong>de</strong> los elementos cruciales para hacer frente a la utilizaciónindiscriminada <strong>de</strong> violencia es el <strong>de</strong> fortalecer la administraciónlegítima <strong>de</strong> la justicia, lo cual implica la adhesión yel apoyo <strong>de</strong> la sociedad civil al Estado. Por lo <strong>de</strong>más, la historia<strong>de</strong> Colombia <strong>con</strong>firma el hecho <strong>de</strong> que las respuestas violentasirregulares a los grupos armados sólo propician un ciclo<strong>de</strong> violencia <strong>de</strong> difícil superación.Un tercer elemento esencial es el re<strong>con</strong>ocimiento <strong>de</strong> quelos <strong>de</strong>rechos individuales se alcanzan mediante el cumplimiento<strong>de</strong> los propios <strong>de</strong>beres. Con esto se plantea la interrelaciónbásica entre <strong>de</strong>rechos y <strong>de</strong>beres: a<strong>de</strong>más <strong>de</strong> las garantías que<strong>de</strong>be proporcionar el Estado, el cumplimiento <strong>de</strong> los <strong>de</strong>beresciudadanos fortalece la vali<strong>de</strong>z <strong>de</strong> los <strong>de</strong>rechos individuales.Una sociedad no pue<strong>de</strong> preten<strong>de</strong>r alcanzar la plenitud <strong>de</strong> sus<strong>de</strong>rechos sin formar una ciudadanía que cumpla <strong>con</strong> sus <strong>de</strong>beres.El <strong>de</strong>recho a la vida y el <strong>de</strong>recho a la seguridad, porejemplo, están estrechamente relacionados <strong>con</strong> el cumplimiento<strong>de</strong>l <strong>de</strong>ber en cuanto al colaborar <strong>con</strong> el funcionamiento <strong>de</strong>la administración <strong>de</strong> justicia.Finalmente, la resistencia civil <strong>de</strong>be estar orientada por unapacífica voluntad ciudadana. La ciudadanía no <strong>de</strong>be permanecerpasiva en la <strong>con</strong>strucción <strong>de</strong> la sociedad ni mantenerseindiferente ante la violencia, pero es fundamental que ésta actúey responda <strong>de</strong> manera pacífica. En una <strong>de</strong>mocracia existenmecanismos para resolver los <strong>con</strong>flictos pacíficamente, sinejercer presiones in<strong>de</strong>bidas y menos aún atentar <strong>con</strong>tra la vida<strong>de</strong> los <strong>de</strong>más. En suma, <strong>con</strong> la pacífica voluntad ciudadana sepromueve el rechazo a la utilización <strong>de</strong> la violencia a través <strong>de</strong>la <strong>de</strong>nuncia, la protesta y el <strong>con</strong>trol social, y se busca la adhesióna la ley y a los procedimientos <strong>de</strong>mocráticos para avanzaren la <strong>con</strong>strucción <strong>de</strong> una sociedad más justa y pacífica.Los logros <strong>de</strong> Bogotá en los últimos años son ejemplo <strong>de</strong>una adopción <strong>de</strong> políticas públicas fundada en la promoción<strong>de</strong>l cumplimiento voluntario <strong>de</strong> <strong>de</strong>beres y en una acción estataleficiente, transparente y responsable. El índice que relacionalongevidad, educación e ingreso e<strong>con</strong>ómico ha aumentado<strong>de</strong> 0,81 a 0,85. Las tasas <strong>de</strong> mortalidad infantil y maternatambién han <strong>de</strong>scendido sensiblemente en la última década.El fortalecimiento institucional y la formación <strong>de</strong> cultura ciudadanahan permitido una reducción <strong>con</strong>tun<strong>de</strong>nte <strong>de</strong> muertesviolentas en Bogotá. Se ha sostenido una ten<strong>de</strong>ncia a ladisminución <strong>de</strong>s<strong>de</strong> 1993, cuando se presentaron 80 homicidiospor cada 100 mil habitantes, a 2002 cuando se registróuna tasa <strong>de</strong> 28. Las muertes en acci<strong>de</strong>ntes <strong>de</strong> trán-179


Programa <strong>de</strong> las Naciones Unidas para el <strong>Desarrollo</strong><strong>Informe</strong> <strong>Nacional</strong> <strong>de</strong> <strong>Desarrollo</strong> <strong>Humano</strong> Colombia - <strong>2003</strong>sito también se redujeron en 49% durante los últimos ochoaños. En cuanto a la prevención <strong>de</strong> lesiones por pólvora, se diouna disminución <strong>de</strong> 262 lesionados en 1995 a 61 en las temporadas2002-<strong>2003</strong>. El <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong> estas iniciativas ha ayudado alegitimar el papel <strong>de</strong> Estado como garantía <strong>de</strong>l <strong>de</strong>recho a la viday ha mostrado la importancia <strong>de</strong> la <strong>con</strong>strucción <strong>de</strong> ciudadanía—por la vía <strong>de</strong> la cultura ciudadana y <strong>de</strong> los mecanismos <strong>de</strong><strong>de</strong>scentralización y participación— para la el éxito <strong>de</strong> las políticaspúblicas.C. Cero tolerancia <strong>con</strong> la impunidadEnrique Peñalosa cc. Alcal<strong>de</strong> <strong>de</strong> Bogotá periodo 1997-1999.La calidad <strong>de</strong> vida, la seguridad, la justicia y el progreso <strong>de</strong> loscolombianos <strong>de</strong>pen<strong>de</strong>n fundamentalmente <strong>de</strong> la capacidad <strong>de</strong>su Estado para proveérselos. Es indispensable tener un Estadolegítimo y un compromiso firme <strong>con</strong> la <strong>con</strong>strucción <strong>de</strong>una sociedad más igualitaria. Ese Estado <strong>de</strong>be cumplir <strong>de</strong> maneraeficiente <strong>con</strong> sus tareas y permitir que los colombianosinviertan, ganen y generen empleo.El mayor obstáculo para nuestro progreso es nuestra tolerancia<strong>con</strong> la impunidad. Y nuestro mayor <strong>de</strong>safío <strong>con</strong>siste enfortalecer nuestros compromisos individuales y colectivos <strong>con</strong>una sociedad más igualitaria. Para vencer ese obstáculo y superar<strong>con</strong> éxito ese <strong>de</strong>safío, necesitamos <strong>de</strong> mayor legitimidadtanto <strong>de</strong>l Estado como <strong>de</strong> las instituciones privadas. Sólo unEstado más legítimo, fuertemente apoyado por sus ciudadanos,es capaz <strong>de</strong> vencer la tolerancia <strong>con</strong> la impunidad y <strong>con</strong>struiruna sociedad mejor. Sólo una sociedad que se siente realmenteunida por lazos <strong>de</strong> <strong>con</strong>fianza y solidaridad, y no sólopor razones <strong>de</strong> subsistencia y <strong>con</strong>veniencia, es capaz <strong>de</strong> <strong>con</strong>solidarse<strong>de</strong>mocrática y e<strong>con</strong>ómicamente.Disminuir la <strong>de</strong>s<strong>con</strong>fianza ciudadana y la falta <strong>de</strong> legitimidadinstitucional requiere re<strong>con</strong>ocer nuestros logros y teneruna actitud más proactiva frente a nuestros <strong>de</strong>safíos. No escierto que vivamos en el país más corrupto <strong>de</strong>l mundo. Tenemosmenos corrupción que países más pobres y más ricos queel nuestro. Somos los campeones mundiales en captura y castigo<strong>de</strong> peces gordos en materia <strong>de</strong> corrupción. No es ciertoque seamos los más pobres. Tenemos logros sociales sostenidosen educación, salud, calidad <strong>de</strong> vida y bienestar social,superiores a la mayoría <strong>de</strong> países <strong>con</strong> nuestro mismo nivel <strong>de</strong><strong>de</strong>sarrollo e<strong>con</strong>ómico. Lo que sí tenemos es peores índices <strong>de</strong>inseguridad, <strong>de</strong>lincuencia e impunidad.E<strong>con</strong>omía <strong>de</strong> mercado: beneficios y riesgosTenemos que enten<strong>de</strong>r mejor los beneficios y riesgos <strong>de</strong> lae<strong>con</strong>omía <strong>de</strong> mercado. Nuestro problema no es que haya ricossino que hay muy pocos; tampoco que quienes inviertenen un negocio ganen, sino que no ganen suficiente y no puedanreinvertir para generar más empleo; no es cierto que tengamosuna clase rica mayoritaria que vive a expensas <strong>de</strong> losmás pobres. Los impuestos en Colombia los pagan los másricos, que son una minoría, y el Estado los invierte casi en sutotalidad en los más necesitados, que son la mayoría. Tenemosun sistema <strong>de</strong> subsidios cruzados don<strong>de</strong> los más pudientespagan aportes por encima <strong>de</strong>l costo <strong>de</strong> los servicios públicospara que los menos pudientes paguen menos <strong>de</strong>l costo ysean subsidiados. Es por esa eficaz redistribución <strong>de</strong> recursosy bienestar que hace el Estado que tenemos mejores logros eindicadores sociales.También es importante enten<strong>de</strong>r que las mejorías significativasen la distribución <strong>de</strong>l ingreso llegarán jalonadas porinversiones que incrementen la <strong>de</strong>manda <strong>de</strong> empleados, a<strong>de</strong>máscada vez más calificados, y no a través <strong>de</strong> medidas administrativas<strong>de</strong>l gobierno. En los países <strong>de</strong>sarrollados hay másempleo y mayor bienestar material porque hay más inversiónacumulada y los trabajadores son más productivos, y no porquese haya expedido alguna ley.La <strong>de</strong>mocracia: cumplir <strong>con</strong> las normasSomos flexibles y tolerantes, muy pragmáticos. Eso es buenoporque somos capaces <strong>de</strong> re<strong>con</strong>ocer nuestras equivocaciones,corregir y enfrentar nuestros <strong>de</strong>safíos. Pero es malo porquesomos tolerantes también <strong>con</strong> el tramposo, <strong>con</strong> el evasor, <strong>con</strong>el matón, <strong>con</strong> el que viola las normas. Tenemos que vencer esa<strong>con</strong>cepción equivocada <strong>de</strong> que la firmeza en el cumplimiento<strong>de</strong> las normas es algo autoritaria y anti<strong>de</strong>mocrática. Todo lo180


El <strong>con</strong>flicto, callejón <strong>con</strong> <strong>salida</strong><strong>con</strong>trario: una sociedad realmente <strong>de</strong>mocrática es la que escapaz <strong>de</strong> asegurar el cumplimiento <strong>de</strong> las normas. De ahí se<strong>de</strong>riva el resto: que haya inversión social, inversión privada,empleo, justicia y seguridad. Tenemos que <strong>con</strong>vencernos <strong>de</strong>que las normas son el principal instrumento <strong>de</strong>l Estado paraproteger a los más débiles. Los po<strong>de</strong>rosos suelen ser capaces<strong>de</strong> protegerse a sí mismos. Eso también es muy malo, inclusopeor. O hay un Estado fuerte o cada cual impone justicia porsu propia mano. Ese es el comienzo <strong>de</strong> la <strong>de</strong>strucción <strong>de</strong> unasociedad <strong>de</strong>mocrática.Tenemos un sistema y unas instituciones <strong>de</strong>mocráticas perono <strong>con</strong>tamos <strong>con</strong> instrumentos suficientes y eficaces para gobernar.El problema principal <strong>de</strong> nuestro régimen es que quienocupa la Presi<strong>de</strong>ncia está lejos <strong>de</strong> ser el gerente que pudieraser, porque aunque tenga el respaldo ampliamente mayoritario<strong>de</strong> la población, el Congreso pue<strong>de</strong> ignorar esta realidad ybloquear sus iniciativas. No entiendo por qué le seguimos temiendoa un sistema que verda<strong>de</strong>ramente garantice que quienllegue a la Presi<strong>de</strong>ncia cuente <strong>con</strong> las mayorías organizadas enel Congreso que le permitan gobernar <strong>con</strong> eficiencia. También<strong>de</strong>s<strong>con</strong>fiamos <strong>de</strong> la reelección, cuando varios estudios <strong>de</strong>muestranque ésta lleva a un manejo fiscal más responsable d , aque se a<strong>de</strong>lanten programas <strong>de</strong> trascen<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong> largo plazo, aque pueda haber <strong>con</strong>tinuidad. La verdad es que el gobiernotiene más palos en las ruedas que instrumentos y respaldo paracumplirle a los colombianos.Las batallas para restablecer el interés general y vencer alas minorías organizadas sólo se pue<strong>de</strong>n ganar <strong>con</strong> un rotundorespaldo y compromiso mutuo entre los ciudadanos y suEstado. No po<strong>de</strong>mos mantener vigentes normas aún a sabiendas<strong>de</strong> que llevan a la impunidad. Muchas <strong>de</strong> ellas son extraordinariamentepermisivas. Sin embargo, en muchas ocasionesla población respalda el que las instituciones y las normas paracombatir la <strong>de</strong>lincuencia sean débiles y poco efectivas. Es algod. Veáse: Alberto Alesina y Guido Tabellini, “Theory of Fiscal Deficits andGovernment Debt”, en Review of E<strong>con</strong>omic Studies, vol. 57, 1990. De losmismos autores, véase “Voting on the Budget Deficit”, en American E<strong>con</strong>omicReview, vol 80, 1991.que finalmente nos parece <strong>de</strong>mocrático. De algún modo sentimosque no tenemos la autoridad moral para sancionar; quenuestro sistema no es lo suficientemente ético, o justo, paratenerla. Esa actitud es producto, en mi opinión, <strong>de</strong> la falta <strong>de</strong>legitimidad.Sobre la legitimidad <strong>de</strong> la organización socialUna sociedad no es legítima cuando alcanza cierto nivel <strong>de</strong><strong>de</strong>sarrollo material, o cierto umbral <strong>de</strong> <strong>de</strong>sarrollo social. Loes, cuando sus habitantes sienten que su organización sociales legítima. Si el sistema no es legítimo, no sentimos que <strong>de</strong>bamosobe<strong>de</strong>cer las normas que lo rigen; y no sentimos que elEstado <strong>de</strong>ba tener mucho po<strong>de</strong>r, así esto implique que no seaposible entonces impedir eficazmente la acción <strong>de</strong> los <strong>de</strong>lincuentes.Tampoco creemos, por supuesto, que <strong>de</strong>ba sancionarmuy estrictamente a quienes violan las normas. Si logramos<strong>con</strong>struir legitimidad, <strong>con</strong>fianza en la organización socialy en el Estado, tendremos ciudadanos más cumplidores <strong>de</strong> lasnormas, que <strong>de</strong>fiendan las instituciones y exijan efectividad ymano drástica en la sanción a los <strong>de</strong>lincuentes <strong>de</strong> toda índole.Mientras esto no se logre, persistirá una cultura en que las lealta<strong>de</strong>sson para <strong>con</strong> la familia mas no para <strong>con</strong> la sociedad comoun todo, y en lugar <strong>de</strong> apoyar el fortalecimiento <strong>de</strong>l Estadopara que cumpla <strong>con</strong> su tarea, <strong>de</strong>s<strong>con</strong>fiamos <strong>de</strong> él.No hay legitimidad porque hay <strong>de</strong>masiada <strong>de</strong>sigualdad yno percibimos que para el Estado o la dirigencia <strong>de</strong>l país laigualdad sea prioritaria, o siquiera una meta. No sentimos quetodos pertenecemos a la misma familia. Nos sentimos excluidos.Nuestros soldados mueren sin foto en la prensa. La <strong>de</strong>sigualdadcarcome los cimientos <strong>de</strong> un Estado legítimo. Poreso, aunque la tarea educativa <strong>con</strong> relación al sistema e<strong>con</strong>ómicoy a los logros <strong>de</strong>l Estado en la <strong>con</strong>strucción <strong>de</strong> justiciasocial es fundamental, no es por supuesto suficiente. Tambiénes necesario avanzar <strong>de</strong>cididamente en la <strong>con</strong>strucción <strong>de</strong>mayor igualdad.Tenemos que enten<strong>de</strong>r que en la <strong>con</strong>strucción <strong>de</strong> una sociedadmás igualitaria el tema <strong>de</strong> la distribución <strong>de</strong>l ingreso esmenos importante que el <strong>de</strong> la distribución <strong>de</strong> la calidad <strong>de</strong>vida. Se trata <strong>de</strong> lograr que todos los niños tengan lasmismas oportunida<strong>de</strong>s para el <strong>de</strong>sarrollo en pleno <strong>de</strong>181


Programa <strong>de</strong> las Naciones Unidas para el <strong>Desarrollo</strong><strong>Informe</strong> <strong>Nacional</strong> <strong>de</strong> <strong>Desarrollo</strong> <strong>Humano</strong> Colombia - <strong>2003</strong>su potencial humano y su felicidad. La <strong>con</strong>strucción <strong>de</strong> esasociedad exige imaginación y darle importancia a temas tradicionalmenteignorados o <strong>de</strong>s<strong>de</strong>ñados. Mayor igualdad sigueimplicando <strong>con</strong>flictos <strong>de</strong> interés, pero ya no son aquellos <strong>de</strong>lpasado, entre la sociedad y el gran capitalista, sino más bienentre las clases medias altas y el resto <strong>de</strong> la población. La nuevaigualdad incluye temas como garantizar a todos los niñosuna nutrición a<strong>de</strong>cuada, jardines infantiles, escuelas y bibliotecas<strong>de</strong> calidad, sin importar los esfuerzos que haya que hacer;o una reforma urbana radical para evitar que los ciudadanos<strong>de</strong> menores ingresos tengan que recurrir a la urbanización pirata,y para garantizar que los niños tengan acceso a gran<strong>de</strong>sparques y centros <strong>de</strong>portivos; transporte público <strong>de</strong> calidad,así implique restricciones al uso <strong>de</strong>l automóvil particular.La nueva igualdad exige darle importancia a temas comolos an<strong>de</strong>nes amplios sin bahías <strong>de</strong> estacionamiento; a la luchapor evitar la privatización <strong>de</strong> las playas y otros frentes <strong>de</strong> agua;a darle a la bicicleta una importancia similar a la <strong>de</strong>l automóvilparticular, <strong>con</strong> re<strong>de</strong>s <strong>de</strong> ciclorutas a lo largo y ancho <strong>de</strong> lospueblos y ciuda<strong>de</strong>s, y paralelas a las carreteras, <strong>de</strong> modo quelas inversiones estatales también favorezcan a los campesinosy trabajadores rurales, entre otros. Debemos ser imaginativos<strong>con</strong> proyectos como sen<strong>de</strong>ros a campo travieso en la sabana <strong>de</strong>Bogotá o el valle <strong>de</strong> Rionegro, para que no sólo los propietarios<strong>de</strong> fincas sino todos los millones <strong>de</strong> ciudadanos <strong>de</strong> menoresrecursos puedan disfrutar <strong>de</strong>l campo en un fin <strong>de</strong> semana.Nuestras <strong>con</strong>cepciones tradicionales algo clasistas nos llevana pensar que estos son temas sin importancia; y la izquierda<strong>con</strong> <strong>con</strong>cepciones <strong>de</strong>l siglo pasado <strong>con</strong>tinúa creyendo que esmás importante, por ejemplo, mantener la propiedad estatal<strong>de</strong> alguna empresa. Pero estoy <strong>con</strong>vencido <strong>de</strong> que para los ciudadanos,y especialmente para los niños, estos temas son muchomás significativos.Con la elección <strong>de</strong>l presi<strong>de</strong>nte Uribe hemos <strong>de</strong>cidido enfrentarmás <strong>de</strong>cididamente a la guerrilla. Pero la guerrilla essólo una <strong>de</strong> las numerosas formas <strong>de</strong> <strong>de</strong>lincuencia en nuestropaís. Y todas están enca<strong>de</strong>nadas, reforzándose mutuamente.No seremos efectivos hasta que <strong>de</strong>cidamos enfrentar drásticamenteel problema <strong>de</strong>l <strong>de</strong>sor<strong>de</strong>n y el incumplimiento <strong>de</strong> lasnormas en todas sus manifestaciones e . Para evitar este proceso<strong>de</strong> <strong>de</strong>terioro progresivo, hay que hacer un esfuerzo masivoy hacer efectivo el cumplimiento <strong>de</strong> todas las normas, aun lasaparentemente insignificantes. Se requiere sin embargo <strong>de</strong> ungran <strong>con</strong>senso nacional, que en mi opinión todavía no existe.Cómo lograr ese <strong>con</strong>senso <strong>de</strong> cero tolerancia <strong>con</strong> la impunidady total compromiso <strong>con</strong> la igualdad, <strong>de</strong>be ser el centro <strong>de</strong>l<strong>de</strong>bate político colombiano. No hay duda que <strong>de</strong> ese <strong>con</strong>sensoy nuestra capacidad <strong>de</strong> ejecutarlo en la práctica <strong>de</strong>pen<strong>de</strong>nuestro progreso.e. Hace unos años el alcal<strong>de</strong> Giuliani hizo famosa la teoría <strong>de</strong> los académicosGeorge Kellig y James Q. Wilson <strong>de</strong>nominada <strong>de</strong> la “ventana rota”,que en su aplicación práctica se <strong>de</strong>nominó el programa <strong>de</strong> “tolerancia cero”.En resumen, si se rompe una ventana y ésta no se arregla rápidamente, seromperá otra en el lugar, y luego otras más; la gente comenzará a arrojarbasura y finalmente el lugar se volverá un foco <strong>de</strong> <strong>de</strong>lincuencia <strong>de</strong> todo tipo.182


El <strong>con</strong>flicto, callejón <strong>con</strong> <strong>salida</strong>entre municipio, <strong>de</strong>partamento y nación para administrarel servicio seguridad-justicia.2. Reformas institucionales autistasLas entida<strong>de</strong>s que forman el ssjp suelen adoptar procesos<strong>de</strong> reforma y “mo<strong>de</strong>rnización” más o menos bien fundamentadosy más o menos exitosos en el cumplimiento <strong>de</strong>sus respectivas funciones. Pero nunca o casi nunca estosprocesos se inscriben en una visión <strong>de</strong> <strong>con</strong>junto o perspectivasistémica. A<strong>de</strong>más <strong>de</strong> crear nuevos <strong>de</strong>sequilibrios y <strong>de</strong><strong>de</strong>sperdiciar recursos, este método tiene la <strong>de</strong>sventaja <strong>de</strong>no elevar la eficacia neta <strong>de</strong>l Sistema, pues los buenos efectos<strong>de</strong> una reforma puntual o aislada tien<strong>de</strong>n a ser absorbidoso hasta “<strong>de</strong>s<strong>con</strong>tados” por las <strong>de</strong>más agencias o niveles<strong>de</strong>l sistema (Palmieri, 1999: 5).F. IniquidadEs evi<strong>de</strong>nte que los servicios <strong>de</strong> seguridad y justicia no lleganpor igual a todos los colombianos, como habría <strong>de</strong> ocurriren una <strong>de</strong>mocracia. El acceso y la eficacia <strong>de</strong>l serviciocambian <strong>con</strong> la ubicación geográfica y <strong>con</strong> la <strong>con</strong>dición social<strong>de</strong> los usuarios, <strong>de</strong> suerte que el ssjp en general tien<strong>de</strong> aprivilegiar lo urbano sobre lo rural y al rico sobre el pobre.Pero la <strong>de</strong>sigualdad no alu<strong>de</strong> sólo al acceso y calidad <strong>de</strong>lservicio. También hay asimetría en cuanto a los costos, pueslas clases altas y medias —hasta don<strong>de</strong> el sistema tributariosea <strong>de</strong> veras progresivo— aportarían el grueso <strong>de</strong> los recursosfinancieros, mientras los sectores populares aportaríansobre todo el costo <strong>de</strong> la leva militar y el <strong>de</strong> vidas perdidasen el frente <strong>de</strong> batalla. Veamos cada lado <strong>de</strong> la ecuación.1. Protección selectivaEl acceso a la administración <strong>de</strong> justicia no es igual paratodos los colombianos. Según un estudio <strong>de</strong>l Consejo Superior<strong>de</strong> la Judicatura (1998: 106), son tres las barreras principalespara acce<strong>de</strong>r a este servicio: i) la cantidad y complejidad<strong>de</strong> los trámites, junto <strong>con</strong> los limitados horarios <strong>de</strong>atención (obstáculo citado por 60% <strong>de</strong> los encuestados); ii)los costos <strong>de</strong>l proceso por <strong>con</strong>cepto <strong>de</strong> peritos, asistencialegal y costas (20% <strong>de</strong> los casos), y iii) las distancias, <strong>de</strong>splazamientose ignorancia sobre la ubicación <strong>de</strong> los <strong>de</strong>spachosjudiciales (<strong>con</strong> otro 20%). Pues bien, los tres obstáculos afectanmás a las personas <strong>de</strong> origen humil<strong>de</strong> que a las <strong>de</strong> estratosaltos.Tampoco hay igualdad en la protección que brinda lafuerza pública a la ciudadanía, y esto es más preocupantetodavía. Un excesivo número <strong>de</strong> soldados, policías y agentes<strong>de</strong>l das está asignado a la custodia <strong>de</strong> dignatarios, <strong>de</strong>spachosoficiales, infraestructura <strong>de</strong> uso semiprivado y gran<strong>de</strong>snúcleos urbanos, a tiempo que en el campo son raraslas patrullas, que en muchos pueblos la policía vive encerradaen un búnker, o que en 167 municipios no existía serviciopermanente <strong>de</strong> policía (aunque esto último está en vía<strong>de</strong> pronta solución).Según la teoría e<strong>con</strong>ómica, hay tres fuentes capaces <strong>de</strong>proveer los servicios requeridos por una sociedad: el Estado,el mercado y la comunidad, que actúan respectivamentesobre las bases <strong>de</strong> la coerción, la <strong>de</strong> los precios y la <strong>de</strong> lacooperación. Ante la falla <strong>de</strong>l Estado en materia <strong>de</strong> seguridady <strong>de</strong> justicia, amplios sectores <strong>de</strong> la población optaronpor las otras dos vías.• Los estratos altos (e incluso medios) se inclinan haciael mercado y buscan mecanismos privados <strong>de</strong> justicia (elauge <strong>de</strong>l arbitramento es una buena muestra) o mecanismosprivados <strong>de</strong> seguridad (el auge <strong>de</strong> la vigilancia privada<strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> la ley, el auge <strong>de</strong> las auto<strong>de</strong>fensas fuera <strong>de</strong> la ley, elporte <strong>de</strong> armas o el pago preventivo <strong>de</strong> “vacunas” al filo <strong>de</strong>la ley).• Algunos sectores populares (en especial, indígenas) acu<strong>de</strong>nen cambio a la comunidad: a mecanismos alternativos<strong>de</strong> resolución <strong>de</strong> <strong>con</strong>flictos para lograr justicia, o a la resistenciapacífica para lograr seguridad.Puesto que el tema <strong>de</strong>l arbitramento escapa a nuestroestudio y puesto que las prácticas comunitarias <strong>de</strong> seguridady justicia son materia <strong>de</strong>l Capítulo 14, acá sólo nos <strong>con</strong>ciernela privatización <strong>de</strong> la seguridad. Según apunta RosaDel Olmo (1999), “mientras la fuerza pública funciona comoservidora <strong>de</strong> la población, la seguridad privada funciona claramentesegún el interés <strong>de</strong>l individuo y <strong>de</strong> organismos particulares”.Dentro <strong>de</strong> un esquema que podría <strong>de</strong>cirse tripartito,don<strong>de</strong> la clase baja paga en sacrificios personales, laclase media paga en impuestos y la clase alta paga en salarios,son los estratos altos y medio-altos quienes mejor pue<strong>de</strong>nsufragar el costo <strong>de</strong> cuasi-soldados y cuasi-policías privados.183


Programa <strong>de</strong> las Naciones Unidas para el <strong>Desarrollo</strong><strong>Informe</strong> <strong>Nacional</strong> <strong>de</strong> <strong>Desarrollo</strong> <strong>Humano</strong> Colombia - <strong>2003</strong>184• Paramilitarismo. Como explicamos en la Primera Parte,el paramilitarismo nace <strong>de</strong> la codicia o <strong>de</strong> la impotencia,y para ciertos sectores sociales —narcotraficantes, comerciantes<strong>de</strong> esmeraldas, gana<strong>de</strong>ros en regiones muy golpeadas,agentes <strong>de</strong>l Estado sin escrúpulos— <strong>con</strong>stituye una opción<strong>de</strong> seguridad entre expedita y <strong>de</strong>sesperada que <strong>de</strong>sembocaen crímenes atroces.Por lo que hace al Estado, es evi<strong>de</strong>nte que su única actitudlegítima ante el paramilitarismo es combatirlo por losmedios a su alcance. Urge, en particular, que se rompa todovínculo entre sus funcionarios o integrantes <strong>de</strong> la fuerzapública y grupos <strong>de</strong> auto<strong>de</strong>fensa o paramilitares. Segúnobserva el <strong>Informe</strong> <strong>de</strong>l Alto Comisionado <strong>de</strong> Naciones Unidaspara los Derechos <strong>Humano</strong>s en Colombia, “el <strong>con</strong>trolparamilitar es más fuerte en los cascos urbanos, don<strong>de</strong> esmayor la presencia <strong>de</strong> la fuerza pública y <strong>de</strong> las autorida<strong>de</strong>s,lo que no <strong>de</strong>ja <strong>de</strong> ser un elemento significativo en las <strong>de</strong>nuncias<strong>de</strong> <strong>con</strong>nivencia <strong>de</strong> servidores públicos <strong>con</strong> el paramilitarismo”(Comisión <strong>de</strong> Derechos <strong>Humano</strong>s, <strong>2003</strong>: 24).Las situaciones <strong>de</strong> aparente impunidad, el traslado <strong>de</strong> casosdudosos a la justicia militar son, entre otros, “factoresque <strong>de</strong>bilitan el proceso <strong>de</strong> mantenimiento y <strong>con</strong>strucción<strong>de</strong> la institucionalidad <strong>de</strong>mocrática y respetuosa <strong>de</strong>l Estado<strong>de</strong> <strong>de</strong>recho, y fortalecen la percepción <strong>de</strong> tolerancia, yhasta aceptación, que el fenómeno paramilitar tiene entresectores <strong>de</strong> la población” (<strong>2003</strong>: 24).• Vigilancia privada. Sin ignorar que atien<strong>de</strong> una sentidanecesidad social, que crea empleo y que por regla generalactúa <strong>con</strong> profesionalismo y abnegación, en el presente<strong>con</strong>texto hay que aludir a dos rasgos problemáticos en lallamada “industria <strong>de</strong> seguridad privada”: su sobredimensionamientoy su precario <strong>con</strong>trol.—Hay más vigilantes particulares que agentes <strong>de</strong> policía:en 2001, las empresas <strong>de</strong>l sector empleaban a 126 mil personas,<strong>de</strong> las cuales 107 mil ejercían como celadores o vigilantes,mientras el pie <strong>de</strong> fuerza total <strong>de</strong> la policía nacional llegabaa 90.886 personas. Los ingresos <strong>de</strong> la industria en esemismo año ascendieron a 2,1 billones <strong>de</strong> pesos, equivalenteal 1,1% <strong>de</strong>l pib (Cuadro 7.4), cerca <strong>de</strong> la mitad <strong>de</strong>l presupuestomilitar <strong>de</strong> Colombia. Según otro estimativo estaríamoshablando <strong>de</strong> un negocio que mueve alre<strong>de</strong>dor <strong>de</strong> 3.5billones cada año, mientras el presupuesto <strong>con</strong>junto <strong>de</strong> lapolicía y el das ronda los 2,5 billones (Ramírez, et al., 2002:89-90).Cuadro 7.4 Crecimiento <strong>de</strong> la industria<strong>de</strong> vigilancia privadaAño Personal vigilancia %PIB1991 48.777 0.561992 53.655 0.641993 59.020 0.691994 64.922 0.741995 71.414 0.801996 78.556 0.821997 86.411 0.851998 95.052 0.911999 104.558 1.042000 115.013 1.092001 126.515 1.14Fuente: Revista E<strong>con</strong>omía Colombiana y Coyuntura Política,agosto <strong>de</strong> 2002, p. 89.—La industria <strong>de</strong> vigilancia no está bien vigilada. El estatuto<strong>de</strong> vigilancia y seguridad privada (Decreto 365 <strong>de</strong>1994) encomienda la respectiva supervisión a la Superinten<strong>de</strong>ncia<strong>de</strong> Vigilancia y Seguridad, adscrita al Ministerio <strong>de</strong>Defensa. Aunque a ella correspon<strong>de</strong> expedir licencias y mantener<strong>con</strong>trol sobre las firmas privadas, a la fecha no cuentasiquiera <strong>con</strong> un listado <strong>de</strong> sus presuntos vigilados, <strong>de</strong>l tipo<strong>de</strong> activida<strong>de</strong>s que a<strong>de</strong>lantan, <strong>de</strong> sus plantas <strong>de</strong> personal,sus armamentos o sus equipos. Así, pese a los requisitosformales <strong>de</strong> la ley, las licencias se expi<strong>de</strong>n <strong>con</strong> una facilidad<strong>de</strong>s<strong>con</strong>certante: entre 1999 y 2001, el número <strong>de</strong> empresas<strong>de</strong>dicadas a esta actividad creció 29%.• Porte y tráfico <strong>de</strong> armas. La proliferación <strong>de</strong> armas mortalesen manos <strong>de</strong> particulares facilita la violencia <strong>de</strong>fensivau ofensiva. Este es sobre todo el caso <strong>de</strong> las armas ligeras,que pue<strong>de</strong>n ser empleadas por personas poco diestras o aunpor niños y niñas (Kaldor, 2001). Y sin embargo los requisitospara expedir salvo<strong>con</strong>ductos y portar armas <strong>de</strong> fuegoson <strong>de</strong>masiado flexibles. La ley 3525 <strong>de</strong> 1993, que trata <strong>de</strong> latenencia y porte <strong>de</strong> armas, munición, explosivos y sus accesorios,no exige educación alguna en el manejo <strong>de</strong> las mismas.El <strong>con</strong>trol sobre terreno es limitado, esporádico y alejado<strong>de</strong> toda proporción <strong>con</strong> la magnitud <strong>de</strong>l fenómeno enColombia.La mayoría <strong>de</strong> las armas que ingresan a Colombia se produceny exportan <strong>de</strong> manera legal, pero encuentran su ca-


El <strong>con</strong>flicto, callejón <strong>con</strong> <strong>salida</strong>© Julio César Herrera / El TiempoFoto 7.4 Au<strong>de</strong>ncia pública en el caso Jesús María Ovalle. Me<strong>de</strong>llín, 15 <strong>de</strong> junio <strong>de</strong> 2000.185


Programa <strong>de</strong> las Naciones Unidas para el <strong>Desarrollo</strong><strong>Informe</strong> <strong>Nacional</strong> <strong>de</strong> <strong>Desarrollo</strong> <strong>Humano</strong> Colombia - <strong>2003</strong>186mino hacia grupos al margen <strong>de</strong> la ley gracias a funcionarios<strong>de</strong> distintos países que trafican y tramitan certificadosfalsos (ipa, 2002). Aunque se admite la corresponsabilida<strong>de</strong>ntre países productores y <strong>de</strong>stinatarios, y aunque Colombiaes parte <strong>de</strong> la Convención interamericana <strong>con</strong>tra el tráficoilícito <strong>de</strong> armas, en la práctica son casi nulos el <strong>con</strong>trol<strong>de</strong> <strong>de</strong>stino, el seguimiento y el intercambio <strong>de</strong> informaciónsobre embarques. De hecho, la atención internacional se<strong>con</strong>centra en el tema <strong>de</strong> las armas <strong>de</strong> <strong>de</strong>strucción masiva,cuando el tráfico <strong>de</strong> armas pequeñas y ligeras tiene un impactomayor en términos <strong>de</strong> vidas sacrificadas.2. Costos: servicio militarAun cuando el <strong>con</strong>flicto armado afecta cada vez más a losestratos medios y altos, la carga <strong>de</strong>l servicio militar siguerecayendo más que todo sobre los estratos bajos y sobre loscampesinos. En ausencia <strong>de</strong> cifras <strong>con</strong>solidadas que <strong>con</strong>firmen—o <strong>de</strong>smientan— esta hipótesis, existe el hecho <strong>de</strong> quelos bachilleres, cuya extracción social está sesgada hacia arriba,reciben un tratamiento más benigno, y existe la impresióngeneralizada <strong>de</strong> que los jóvenes <strong>de</strong> clase alta no suelenenlistarse. El punto es relevante por tres gran<strong>de</strong>s razones:• Una es <strong>de</strong> equidad. Si bien algunos <strong>de</strong> los costos humanos<strong>de</strong>l <strong>con</strong>flicto afectan <strong>de</strong> manera especial a los estratosaltos (el caso <strong>de</strong>l secuestro), se trata <strong>de</strong> hechos ajenos y <strong>con</strong>trariosal querer <strong>de</strong>l Estado. En ejercicio <strong>de</strong> su soberanía yrespecto <strong>de</strong>l <strong>con</strong>flicto, hay apenas dos costos que el Estadoimpone a sus ciudadanos: los impuestos <strong>con</strong> <strong>de</strong>stinaciónespecífica y el servicio militar obligatorio, don<strong>de</strong> la progresividadque tendría el primero no compensa la regresividadque traería el segundo.• Otra es <strong>de</strong> eficacia. Al privar a las ff mm <strong>de</strong>l talento educadoque aportarían los jóvenes bachilleres y —por qué no,profesionales— <strong>de</strong> clase alta, se pier<strong>de</strong> la ocasión <strong>de</strong> mejorarsu calidad operativa, su inteligencia estratégica y su manejoen áreas como el lavado <strong>de</strong> activos o las acciones cívico-militares.• La otra es <strong>de</strong> naturaleza. De Gaulle dijo para siempreque “el ejército es la nación en armas”; unas ff mm <strong>de</strong> don<strong>de</strong>estén ausentes las élites son la nación a medias, son inclusoun ejército <strong>de</strong> pobres para <strong>de</strong>fensa <strong>de</strong> los ricos.Que las ff mm sean, se sientan a sí mismas y sean vistascomo la nación en armas es la primera <strong>con</strong>dición para tenerla población <strong>de</strong> su lado; y ésta, como mostró la experienciainternacional arriba reseñada, es a su vez la <strong>con</strong>dición necesariapara su éxito en un <strong>con</strong>flicto interno. Dicha base <strong>de</strong>apoyo ciudadano es otro nombre para la legitimidad <strong>de</strong>l Estadoen su <strong>con</strong>junto. Por eso los capítulos siguientes se ocuparán<strong>de</strong> otros tantos instrumentos para que la gente el país<strong>con</strong>fíe más en su Estado: ampliación <strong>de</strong>l campo humanitario,atención a las víctimas, <strong>de</strong>svinculación <strong>de</strong> combatientes, opcionesdistintas <strong>de</strong> la guerra para los reclutables, menos ingresospara los grupos armados, mejor administración local,atención a los <strong>con</strong>flictos sociales, re<strong>de</strong>scubrimiento <strong>de</strong>la política y diálogos <strong>de</strong> paz en serio.G. Las recomendaciones, en sintesisDe los análisis <strong>de</strong> este capítulo se <strong>de</strong>riva un <strong>con</strong>junto <strong>de</strong>propuestas <strong>de</strong> política que, otra vez, para referencia <strong>de</strong>l lector,podrían resumirse como sigue:1. Adoptar una estrategia integral o sistémica don<strong>de</strong> seasignen responsabilida<strong>de</strong>s, se señalen metas verificables yen <strong>con</strong>secuencia <strong>de</strong> ello se repartan los recursos humanos yfinancieros entre las varias entida<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l Sistema.2. Mejorar la cantidad, calidad y disponibilidad <strong>de</strong> informaciónpertinente a los efectos <strong>de</strong> análisis, seguimiento,evaluación, coordinación horizontal y vertical, planeacióny rendición <strong>de</strong> cuentas.3.Construir y educar una opinión pública <strong>de</strong>liberante entorno a las opciones <strong>de</strong> seguridad y justicia que tiene el país.Los medios <strong>de</strong> comunicación, los partidos políticos y lasuniversida<strong>de</strong>s tienen aquí papeles <strong>de</strong>cisivos que cumplir;Colombia está en mora <strong>de</strong> tener uno o varios think tanks <strong>de</strong>excelencia mundial en este campo.4. Que el <strong>con</strong>flicto armado se <strong>con</strong>vierta en el centro <strong>de</strong>atención <strong>de</strong> todas y cada una <strong>de</strong> las entida<strong>de</strong>s que <strong>con</strong>formanel sistema <strong>de</strong> seguridad y justicia penal. Colombia tieneotros problemas <strong>de</strong> seguridad y <strong>de</strong> justicia, pero sin dudaéste es el más apremiante.5. Así como el li<strong>de</strong>razgo presi<strong>de</strong>ncial logró generar un<strong>con</strong>senso <strong>de</strong> apoyo a las Fuerzas Armadas, <strong>de</strong>be surgir un<strong>con</strong>senso para robustecer el Sistema en su <strong>con</strong>junto.6. Los programas <strong>de</strong> aumento <strong>de</strong>l pie <strong>de</strong> fuerza <strong>de</strong>benhacer un énfasis proporcionalmente mayor en la policía queen las ff mm, <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> la policía en los carabineros, y enningún caso <strong>de</strong>ben implicar una <strong>de</strong>smejora en los niveles


El <strong>con</strong>flicto, callejón <strong>con</strong> <strong>salida</strong><strong>de</strong> entrenamiento y calificación para aten<strong>de</strong>r un <strong>con</strong>flictotan complejo.7. Destinar más recursos humanos y técnicos al área <strong>de</strong>seguridad ciudadana <strong>de</strong> la policía, para aten<strong>de</strong>r el aumentoen las acciones urbanas <strong>de</strong> los irregulares.8. En relación <strong>con</strong> los “soldados campesinos”, es precisoaumentar las precauciones para que no se infiltren miembros<strong>de</strong> los grupos armados ilegales y para cuidar la seguridad<strong>de</strong> sus familiares o allegados en la región. Por sus mejoresraíces locales, y siempre que el entrenamiento sea a<strong>de</strong>cuado,la policía podría beneficiarse más <strong>de</strong> este programa(“policías campesinos”).9. Mejorar sustancialmente la capacidad <strong>de</strong> investigación<strong>de</strong>l Sistema mediante: i) la calificación <strong>de</strong> recursos humanosy dotación <strong>de</strong> medios científicos para que la prueba técnicaayu<strong>de</strong> a superar las limitaciones <strong>de</strong> la prueba testimonial,y ii) el traslado <strong>de</strong>l Cuerpo Técnico <strong>de</strong> Investigación<strong>de</strong> la Fiscalía General <strong>de</strong> la Nación a la policía nacional.10. Avanzar hacia un sistema integrado <strong>de</strong> inteligenciaque articule su recolección, evaluación y uso efectivo en elcampo operacional. La junta <strong>de</strong> inteligencia <strong>con</strong>junta propuestapor el gobierno apunta en esta dirección, que preferentementehabría <strong>de</strong> estar bajo <strong>con</strong>trol civil.11. Apelar al espíritu cívico más que a prebendas o recompensasmateriales para lograr el <strong>con</strong>curso <strong>de</strong> los pobladores.12. Asegurar pleno respeto y promoción <strong>de</strong> los <strong>de</strong>rechoshumanos, en particular extirpando todo vínculo entre funcionarios<strong>de</strong>l Estado o miembros <strong>de</strong> la fuerza pública y elparamilitarismo; el Estado colombiano <strong>de</strong>be adoptar lasdirectrices que resume el Recuadro 8. 1 6 .13. Mantener la justicia especializada y enfocarla más precisamentehacia los <strong>de</strong>litos atroces u horrores morales quepa<strong>de</strong>cen nuestros ciudadanos.14. Aumentar los recursos humanos, técnicos y legalespara que la Procuraduría General <strong>de</strong> la Nación y la Defensoría<strong>de</strong>l Pueblo hagan presencia en todo el territorio y <strong>de</strong>ncabal cumplimiento a la función <strong>de</strong>l Ministerio Publico <strong>de</strong>ntro<strong>de</strong>l ssjp.15. La comisión multilateral que se menciona en el Capítulo13 <strong>de</strong>berá reexaminar el énfasis relativo <strong>de</strong> la asistencia military judicial <strong>de</strong> Estados Unidos así como el <strong>de</strong> los recursosque <strong>de</strong>stina Colombia al <strong>con</strong>trol <strong>de</strong>l narcotráfico, la protección<strong>de</strong>l petróleo y el antiterrorismo. Colombia, en todo caso,<strong>de</strong>be repensar la asignación <strong>de</strong> sus recursos y la naturaleza <strong>de</strong>sus programas en la clara perspectiva <strong>de</strong> resolver el <strong>con</strong>flictointerno y <strong>de</strong>tener el daño a su propio <strong>de</strong>sarrollo humano.16. Encomendar la protección <strong>de</strong> infraestructura y vías,así como las activida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> vigilancia rutinaria, a personalmenos especializado en activida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> combate.17. Adoptar los medios jurídicos necesarios para que elSistema pueda hacer frente a los violentos. La escalada <strong>de</strong><strong>de</strong>litos atroces que nos agobia no será <strong>de</strong>tenida y castigadasi el Estado no pue<strong>de</strong> actuar <strong>con</strong> firmeza. Sobre la base <strong>de</strong> unestudio sereno <strong>de</strong> los hechos, quizás a cargo <strong>de</strong> una comisión<strong>de</strong> altos quilates, habría claridad sobre las trabas legales in<strong>de</strong>bidasque en efecto amarran a las ff mm. En <strong>con</strong>trapeso alrecorte <strong>de</strong> liberta<strong>de</strong>s o <strong>de</strong>rechos que en esa hipótesis fuesennecesarios, habrían <strong>de</strong> adoptarse las precauciones y <strong>con</strong>trolesespeciales que eviten o castiguen los abusos.18. No trasladar funciones <strong>de</strong> policía judicial a las ff mm,pero sí entrenar, ubicar y movilizar fiscales, oficiales <strong>de</strong> policíay agentes <strong>de</strong>l das para que cumplan esas funciones doquieralas <strong>de</strong>man<strong>de</strong> el <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong>l <strong>con</strong>flicto.19. Eximir al sistema judicial <strong>de</strong> los procesos ejecutivos,singulares, hipotecarios y prendarios, a través <strong>de</strong> sistemas<strong>de</strong> <strong>con</strong>ciliación u otros mecanismos alternativos costeadospor los usuarios.20. Tomar en serio el tema <strong>de</strong> <strong>de</strong>scriminalización, para quela justicia pueda <strong>con</strong>centrarse en los horrores morales. A partir<strong>de</strong> los varios estudios que ya existen y aceptando que elegirpriorida<strong>de</strong>s implica sacrificar valores secundarios, es precisoliberar el Sistema <strong>de</strong> su actual sobrecarga <strong>de</strong> negocios.21. Por la misma razón y <strong>con</strong> igual criterio habrán <strong>de</strong> reducirselos <strong>de</strong>litos que acarrean penas privativas <strong>de</strong> la libertad yla duración <strong>de</strong> las mismas. Por su elevado costo fiscal, porquela prisión ayuda poco a resocializar al <strong>de</strong>lincuente y porquelas penitenciarías son un punto <strong>de</strong> enlace entre guerrilleroso paramilitares, narcotráfico y <strong>de</strong>lincuencia ordinaria, hayque <strong>de</strong>s<strong>con</strong>gestionar y reclasificar <strong>de</strong> veras el subsistema carcelario.La criminología <strong>de</strong> hoy favorece tratamientos alternativospara <strong>de</strong>litos <strong>de</strong> menor gravedad, como la semirreclusión,el trabajo comunitario o las penas pecuniarias.6. La ONU y los <strong>de</strong>rechos humanos: 27 recomendaciones para Colombia por Michael Frühling. Véase recuadro 8.1 <strong>de</strong> este <strong>Informe</strong>.187


Programa <strong>de</strong> las Naciones Unidas para el <strong>Desarrollo</strong><strong>Informe</strong> <strong>Nacional</strong> <strong>de</strong> <strong>Desarrollo</strong> <strong>Humano</strong> Colombia - <strong>2003</strong>22. Poner a funcionar el Consejo Superior <strong>de</strong> JusticiaCriminal y Penitenciaria, ampliado a “Consejo superior <strong>de</strong>seguridad y justicia penal”. El Consejo sería encabezado porel Presi<strong>de</strong>nte <strong>de</strong> la República y se ampliaría para incluir alMinistro <strong>de</strong> Defensa y a los presi<strong>de</strong>ntes <strong>de</strong> las respectivascomisiones <strong>de</strong>l Congreso.23. Establecer un espacio formal y permanente para lacoordinación vertical o entre los niveles nacional, <strong>de</strong>partamentaly municipal en materia <strong>de</strong> seguridad-justicia.24. Someter los proyectos <strong>de</strong> mo<strong>de</strong>rnización o reformainstitucional <strong>de</strong> todas las agencias <strong>de</strong>l ssjp a previa <strong>con</strong>si<strong>de</strong>ración<strong>de</strong>l arriba mencionado Consejo superior.25. Asegurar que las iniciativas <strong>de</strong> carácter dura<strong>de</strong>ro cuenten<strong>con</strong> recursos igualmente estables, sin incurrir más en lapráctica <strong>de</strong> lanzar programas <strong>de</strong> largo plazo <strong>con</strong> cargo a impuestosocasionales o fondos <strong>de</strong> la cooperación internacional.26. Establecer un impuesto <strong>de</strong> solidaridad sobre el servicio<strong>de</strong> vigilancia privada, <strong>con</strong> <strong>de</strong>stino a que la policía puedatener presencia permanente en todo el territorio y <strong>con</strong> laintensidad <strong>de</strong> patrullaje requerida.27. Dotar a la Superinten<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong> Vigilancia y Seguridad<strong>de</strong> los medios y recursos para que pueda vigilar la industria.28. Controlar el tráfico ilegal <strong>de</strong> armas pequeñas y ligerasmediante <strong>con</strong>venios internacionales vinculantes. Los<strong>con</strong>venios <strong>de</strong>ben incluir sistemas <strong>de</strong> registro y marcaje <strong>de</strong>armas y sus partes en los países productores, comenzandopor el grupo <strong>de</strong> los ocho (g 8); publicación <strong>de</strong> informes periódicosy públicos <strong>de</strong>l país productor 7 , y un método <strong>de</strong> seguimientoque permita rastrear las armas hasta el <strong>de</strong>stinatariofinal.29. Hacer <strong>con</strong>sistente la legislación y los procesos administrativosnacionales <strong>con</strong> la Convención Interamericana<strong>con</strong>tra el tráfico ilícito <strong>de</strong> armas y <strong>con</strong> las recomendacionesemanadas <strong>de</strong>l programa <strong>de</strong> acción <strong>de</strong> la <strong>con</strong>ferencia <strong>de</strong> lasNaciones Unidas sobre el tráfico ilícito <strong>de</strong> armas pequeñasy ligeras en todos sus aspectos.30. Hacer más exigentes los requisitos para el porte <strong>de</strong>armas, en especial pequeñas y livianas, mediante la reforma<strong>de</strong> la ley 2535 <strong>de</strong> 1993 que regula la tenencia y porte <strong>de</strong> armas,municiones, explosivos y sus accesorios.31. Adoptar un método <strong>de</strong> reclutamiento que garanticela univer<strong>salida</strong>d efectiva <strong>de</strong>l servicio militar obligatorio y, enespecial, que reduzca los márgenes <strong>de</strong> discrecionalidad ypor en<strong>de</strong>, <strong>de</strong> corrupción.Bibliografía y referenciasAmnistía Internacional (2002), The Terror Tra<strong>de</strong> Times, n° 3, junio: http://web.amnesty.org.Comisión <strong>de</strong> Derechos <strong>Humano</strong>s (<strong>2003</strong>), <strong>Informe</strong> <strong>de</strong>l Alto Comisionado para los Derechos <strong>Humano</strong>s sobre la situación <strong>de</strong> los <strong>de</strong>rechoshumanos en Colombia, Organización <strong>de</strong> las Naciones Unidas, febrero.Consejo <strong>Nacional</strong> <strong>de</strong> Política Social (<strong>2003</strong>), Documento Conpes 3211, enero.Cope, John (2002), “Colombia’s War: Toward a New Strategy”, en Strategic Forum, n° 194, Institute for National Security Studies,National Defense University, Washington D.C.Corporación Excelencia en la Justicia (2001), “Un sistema acusatorio para Colombia. Balance y perspectivas <strong>de</strong> la Fiscalía General<strong>de</strong> la Nación”, en Justicia y <strong>Desarrollo</strong>: Debates, año 4, n° 16, junio.Dávila, Andrés (1999), “Ejército regular, <strong>con</strong>flictos irregulares: la institución militar en los últimos quince años”, en Malcolm Deasy María Victoria Llorente (comps.), Re<strong>con</strong>ocer la guerra para <strong>con</strong>struir la paz, Bogotá, Ediciones Unian<strong>de</strong>s/ Cerec/ Editorial Norma.Departamento <strong>Nacional</strong> <strong>de</strong> Planeación (2001), Documento <strong>de</strong>l Plan Colombia: www.dnp.gov.coDel Olmo, Rosa (2000), “Ciuda<strong>de</strong>s duras y violencia urbana”, en Revista Nueva Sociedad, n° 167, Caracas, mayo-junio.Dixon, Paul (1997), “Counter-Insurgency in Northern Ireland and the Crisis of the British State”, en Paul Rich y Richard Stubbs(eds.), The Counter-Insurgent State. Guerrilla Warfare and State Building in the Twentieth Century, Macmillan.1887. Este compromiso no quedó explícitamente enunciado en la Conferencia <strong>de</strong> las Naciones Unidas sobre el tráfico ilícito <strong>de</strong> armas pequeñas y ligeras en todossus aspectos (Amnistía Internacional, 2002).


El <strong>con</strong>flicto, callejón <strong>con</strong> <strong>salida</strong>Fiscalía General <strong>de</strong> la Nación (2002), Segunda Fase <strong>de</strong>l Crédito bid.Frühling, Hugo (2001), La reforma policial y el proceso <strong>de</strong> <strong>de</strong>mocratización en América Latina, Santiago <strong>de</strong> Chile, Área <strong>de</strong> SeguridadCiudadana, Centro <strong>de</strong> Estudios <strong>de</strong> <strong>Desarrollo</strong>.Garay, Luis Jorge (2002), Colombia entre la exclusión y el <strong>de</strong>sarrollo. Propuestas para la transición al Estado <strong>de</strong> Derecho, Bogotá,Contraloría General <strong>de</strong> la República.Giha, Yaneth, Héctor Riveros y Andrés Soto (1999), “El gasto militar en Colombia: aspectos microe<strong>con</strong>ómicos y macroe<strong>con</strong>ómicos”,en Revista <strong>de</strong> la Cepal, n° 69, Santiago <strong>de</strong> Chile, diciembre.Hoffman, Bruce y Jennifer Morrison Taw (1992), A Strategic Framework for Countering Terrorism and Insurgency, Santa Monica,Rand.International Crisis Group (2002), “La esquiva búsqueda <strong>de</strong> la paz en Colombia”, en Reporte <strong>de</strong> América Latina, n° 1, Bogotá/Bruselas, 26 <strong>de</strong> marzo.ipa (2002), E<strong>con</strong>omic Agendas in Armed Conflict: Defining and Developing the Role of the un, Report of a symposium co-organizedby International Peace Aca<strong>de</strong>my and the Fafo Institute for Applied Social Science, Nueva York.Kaldor, Mary (2001), New and Old Wars–Organized Violence in a Global Era, Stanford University Press.Leal Buitrago, Francisco, Patricia Bulla, María Victoria Llorente y Alfredo Rangel (1999), “Seguridad nacional y seguridad ciudadana.Una aproximación hacia la paz”, en Álvaro Camacho y Francisco Leal (comps.), Armar la paz es <strong>de</strong>sarmar la guerra, Bogotá,iepri/ Fescol/ Cerec.Llorente, María Victoria (1999), “Perfil <strong>de</strong> la policía colombiana”, en Malcolm Deas y María Victoria Llorente (comps.), Re<strong>con</strong>ocerla guerra para <strong>con</strong>struir la paz, Bogotá, Ediciones Unian<strong>de</strong>s/ Cerec/ Editorial Norma.Llorente, María Victoria, Rodolfo Escobedo, Camilo Echandía y Mauricio Rubio (2001), “Violencia homicida en Bogotá: más queintolerancia”, Documento Ce<strong>de</strong> 2001-04, Bogotá, Ce<strong>de</strong> (Universidad <strong>de</strong> los An<strong>de</strong>s), junio.Ministerio <strong>de</strong> Defensa <strong>Nacional</strong> (<strong>2003</strong>), Política <strong>de</strong> <strong>de</strong>fensa y seguridad <strong>de</strong>mocrática, Bogotá.Mockus, Antanas (1997), “Administraciones locales–or<strong>de</strong>n público”, en Descentralización y or<strong>de</strong>n público, Bogotá, Milenio/ Fescol.Nemogá, Gabriel (1996), Justicia sin rostro. Estudio sobre la justicia regional, Bogotá, Universidad <strong>Nacional</strong> <strong>de</strong> Colombia.Nozik, Robert (1974), Anarquía, Estado y utopía, México, Fondo <strong>de</strong> Cultura E<strong>con</strong>ómica, 2 a edición 1988.Organización <strong>de</strong> las Naciones Unidas (2001), <strong>Informe</strong> <strong>de</strong> la <strong>con</strong>ferencia <strong>de</strong> las Naciones Unidas sobre el tráfico ilícito <strong>de</strong> armaspequeñas y ligeras en todos sus aspectos, Nueva York, julio.Palmieri, Gustavo (1998), “Temas y <strong>de</strong>bates en la reforma <strong>de</strong> la seguridad pública. Guía para la sociedad civil”, en InvestigaciónCriminal, Washington Office on Latin America, enero.Policía <strong>Nacional</strong> (2002), Plan Estratégico Institucional, Bogotá.Queralt, Joan Josep (1999), Introducción a la Policía Judicial, Barcelona, J. M. Bosch Editor, 3a edición.Ramírez, Alfonso y Gloria Rueda (2002), “La privatización <strong>de</strong> la seguridad ciudadana”, en E<strong>con</strong>omía Colombiana y CoyunturaPolítica, agosto.República <strong>de</strong> Colombia, Consejo Superior <strong>de</strong> la Judicatura (1998), La justicia en cifras, Bogotá.Rubio, Mauricio (1996), “Crimen sin sumario. Análisis e<strong>con</strong>ómico <strong>de</strong> la justicia penal colombiana”, Documento Ce<strong>de</strong> 96-04, Bogotá,Ce<strong>de</strong> (Universidad <strong>de</strong> los An<strong>de</strong>s).——— (1997), La nueva violencia colombiana. Dinámica, impacto sobre la justicia penal, relación <strong>con</strong> los agentes armados, Bogotá,Ce<strong>de</strong>/ Paz Pública/ Universidad <strong>de</strong> los An<strong>de</strong>s.Thompson, R. (1970), No Exit from Vietnam, Nueva York, McKay.United Nations Deparment for Disarmament Affaire (2001), “Combating the Illicit Tra<strong>de</strong> in Small Arms”, en DDA 2001, update,junio-julio.Uprimny, Rodrigo (2001), “Las transformaciones <strong>de</strong> la administración <strong>de</strong> justicia en Colombia”, en El caleidoscopio <strong>de</strong> las justiciasen Colombia. Análisis socio-jurídico, tomo I, Bogotá, Colciencias/ Ediciones Unian<strong>de</strong>s/ Universidad <strong>de</strong> Coimbra/ Universidad <strong>Nacional</strong><strong>de</strong> Colombia/ Siglo <strong>de</strong>l Hombre Editores.189

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!